Lee Hebreos 8:6. ¿Cuál es el mensaje? ¿Qué entendemos por estas “mejores promesas”?
Quizá la mayor diferencia entre la religión del Antiguo Testamento y la del Nuevo Testamento sea el hecho de que la era del Nuevo Testamento se instauró con la venida del Mesías, Jesús de Nazaret. Dios lo envió para que fuese el Salvador. Los hombres no podían ignorarlo y pretender ser salvos. Solo mediante la expiación que él proveyó sus pecados podrían ser perdonados. Solo por la imputación de su vida perfecta podrían estar delante de Dios sin condenación. En otras palabras, la salvación era mediante la justicia de Jesús, y nada más.