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@wodim
Created November 6, 2016 13:37
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Mira, tú no le digas nada a Maven, ¿quieres? Me he pasado semanas intentando que me quedara bien y, si se da cuenta de lo estúpido que soy, se librará de mí.
Me temo que tenemos un problema. Uno gordo. He descubierto quién es en realidad el líder de los Barbas Grises.
¿Para mí? ¿De quién?
Escucha, chica. Hay un último asunto que debemos arreglar antes de ir tras Mercer... el liderazgo del gremio.
Estamos buscando un libro de fórmulas alquímicas titulado "El viaje onírico".
Solo aquellos cuya Voz es fuerte pueden dar con el camino. Ven. Te enseñaré un grito que te abrirá el camino hasta Paarthurnax.
¡Capitán Tormenta Solitaria! ¡Te he andado buscando por todas partes!
Estas fiestas me parecen terriblemente aburridas.
No creo que hubiera aceptado tu absolución, Rorlund. Adoraba a Talos.
Haz tu elección, Sangre de Dragón... O con nosotros, o contra nosotros.
Me gusta hablar con mis presas antes de matarlas. Provocarlas, asustarlas... incluso retarlas.
¿Dónde te has metido todo el día?
No... No estoy seguro. Estará en algún lugar del Colegio. Seguro que alguno de tus colegas sabe dónde se encuentra.
No hables conmigo. Podrías ser uno de ellos.
¿Escondiéndome? ¡Las sombras son mis dominios!
¿Qué te hace pensar que sé algo? ¡Todo el mundo sabe que está muerto!
Dime, por favor, que tienes buenas noticias.
Van medio desnudos. No está bien. Alguien debería decir algo...
¡Firmes, legionarios! Hemos estado en peores situaciones. ¡No bajéis la guardia!
Me llamo Runa. Sí, runa... como eso que estás pensando.
No confundas mi admiración con complacencia. Nuestro rival va a pagarlo muy caro.
Parece encantador. Eres muy dulce.
Te lo ruego, no vayas al museo de Silo.
Entonces, ¿es aquí donde Delphine se ha escondido todos estos años? Mmm.
Cuando esté al mando, aspiro a llegar más allá de Skyrim. Pienso llevar el aguamiel Espino Negro a toda Tamriel.
¡Espléndido! Con el dinero que aportes, podré comprar el doble de suministros que de costumbre.
Adelante. Yo haré guardia.
Es una exigencia inicial desmesurada, Tulio.
¡Ja, ja, ja, ja! ¡Sí, ya lo creo! ¡Salve a la Legión Imperial! ¡Salve a los Capas de la Tormenta! ¡Salve a Soledad y los Ocho Divinos!
Bueno, ¿ha habido suerte encontrando al baboso de mi marido?
Queda mucho por hacer y necesito la ayuda de todo hombre o mujer que quiera reconstruir Skyrim.
¿Qué me has hecho?
Mmm. La verdad es que no tengo ni idea de qué tramaban. ¿Has encontrado el observatorio?
¿Ah, sí? Supongo que no quiere perder la oportunidad de despotricar por los crímenes del Imperio.
Mmm.
Esta gente de la Cuenca es tan... entrometida.
Con Mercer Frey fuera del mapa y con nuestra influencia presente en todas las ciudades de Skyrim, el gremio acumula riquezas más rápido de lo que podemos gastarlas.
Entonces no tenemos nada de qué hablar.
Por fin. Ahora ya puedo volver al trabajo.
¡Pues brindemos por Ulfric, futuro rey de Skyrim y procurador de ruina para la clase obrera!
¡Ja! ¡Maravilloso!
Si cambias de idea, aquí estaré.
No tengo nada que decirte, visitante.
Me pregunto si habrá más imperiales escondiéndose aquí abajo por alguna parte.
Cuando tengamos el Léxico, hemos de llevarlo hasta su pedestal. A partir de ahí sé lo que hay que hacer. Pronto el saber del Léxico será mío.
¡Ah! Te has hecho con el cuerno de Jurgen Llamador del Viento.
Sé que suena típico decir "para visitar sitios nuevos y ver mundo". En mi caso es cierto... aunque nunca pensé que vería más de lo que hubiera querido.
El agente de la sombra es un maestro en permanecer oculto. Es capaz de manipular la oscuridad y utilizarla para sacar ventaja de ella.
Oh, bueno... Parece que ya tienes ayuda. Sin duda no deseas llamar la atención...
Sí, sí, el perro se queda con su amo, el amo con su hacha cósmica, y todos contentos. Ven aquí, chucho.
El templo de los Divinos siempre está abierto para sus fieles.
Las madrigueras no son lugar para ti, créeme.
Allí devora las almas de los héroes muertos para alimentar su poder. Debes encontrar su portal a Sovngarde antes de que regrese más poderoso que nunca.
Hay bastantes falmer en esta cámara. Podemos pasar a hurtadillas o enfrentarnos a ellos... A mí me da igual, con tal de alcanzar a Mercer.
¡Zah!
Gracias. Tus hermanos de escudo se han retirado a la Forja Inferior. Creo que te están esperando.
Ah, creo que se te ha caído esto. Es una especie de nota, y parece importante.
Esta mujer va a acompañarte a Markarth. ¿Estás lista?
Muy poco, te doy mi palabra. La Madre Noche representa un capítulo en la historia de la Hermandad Oscura que se cerró hace ya mucho tiempo.
Parece que eran muy partidarios de los sacrificios rituales. De hecho, hasta tal punto que el sumo sacerdote pasaba muchas horas afilando la daga.
Los nombres ya no importan. Puedes dirigirte a mí como la Convocadora.
He esperado una eternidad por este día.
¡Fuera de mi vista!
Soy un hijo de Páramo del Martillo, nacido en las arenas del imponente Alik'r. En ese gran desierto, la sangre es de un tono encarnado que apenas puedo describir.
En ese caso, está decidido. Cuando todo esto haya terminado y los contactos de Delvin me aseguren que hemos recuperado nuestra posición en Skyrim, nos ocuparemos de los detalles.
En mi opinión, tanto la cerveza como las camas son asquerosas.
Que los caminos favorezcan a los idiotas...
No es la primera vez que Falkreath vive una guerra. No tienes más que visitar el cementerio para verlo.
Exacto, tendrías que poder atraparlo allí.
100 monedas de oro asegurarán mi libertad. ¿Puedes permitírtelas, verdad?
¿Qué son esas tonterías que he estado oyendo? ¿Cómo te atreves a llamarle "aprovechado" a Bolli?
Urag puede ser de gran ayuda. Tú limítate a no llevarle la contraria.
Se fue a vivir con ella el día posterior al incendio. Incluso a mí me pareció sospechoso.
Basta de rodeos, Tulio. Si has venido a hablar, hablemos.
¿Ah, sí? No me había dado cuenta.
Tu objetivo es el fuerte Páramo Gris.
Mi hija me está volviendo loco, así que perdóname si me encuentras un poco alterado.
¡Qué falta de educación! No se puede molestar por alojar a un viejo amigo una década o dos.
La gente de Skyrim no aprecia lo que hacemos aquí. Tampoco es que me importe.
¿Estás a punto para hacer esto?
¡Venga, muéstrale a este anciano de qué eres capaz!
Pero no son rival para los legionarios. Sois los mejores y más brillantes guerreros de Tamriel. Soldados profesionales, demoledores y sin miedo.
No juzgues con demasiada severidad a Falkreath, visitante... La guerra ha sido dura con nosotros.
Por favor, disculpa mi ánimo. Aún intento asimilar la muerte de mi hija.
Trabajaba sirviendo en El skeever travieso cuando conocí a mi marido, que los dioses lo tengan en su gloria. ¡De no haber sido por él, seguiría trabajando allí!
Camina siempre a la sombra de Sithis.
Lo sé, he llegado tarde. Lo siento.
En esta sala se representa la degeneración del Imperio.
Eres insistente, ¿eh? Oh, muy bien. ¿Quién soy yo para interponerme entre tú y tu curiosidad?
Lo único que lamento es que tuvieras que acometer esta tarea por tu cuenta.
¡Te equivocas! ¡Sibbi me ama, lo que pasa es que estás celosa!
¡Yo no pienso quedarme a luchar contra un dragón!
Se ha producido una pelea en la Ratonera, pero los informes son... poco claros. Unos dicen que fueron agentes de los Thalmor, otros dicen que fue el gremio de ladrones. Puede que ambos.
Creo que oí a alguien mencionar que estaba bajo el templo de Dibella, en el gran peñasco que hay en el centro de la ciudad.
Te ruego que me perdones, mi señora... Sé que tienen algo que ver con Dibella, ¿pero para qué sirven?
¿Hace falta que lo preguntes? Tratan a tu gente tan mal como a la mía.
El Imperio retirará sus tropas de Hibernalia, y permitirá que el jarl Korir regrese del exilio.
Has conseguido una poción excelente.
Tengo todo el derecho del mundo a estar en esta negociación. Debo asegurarme de que ninguno de los acuerdos adoptados infringe los términos del Concordato Blanco y Dorado.
Sí que tienes el poder. Estoy impresionada.
¡Exacto! Y ahora tengo que permanecer tras estas rejas ocho meses. ¿Te lo puedes creer?
¡Ayuda! ¡Están atacando a alguien!
Así que Maven quiere averiguar quién es el socio privado de Sabjorn, ¿eh?
Alimentó a toda su familia con las monedas que ganó usando esa arma. No pienso dejar que se llene de polvo en la sala de trofeos de algún ladrón.
Ya sabes, ¿de dónde sacas tus artículos? Nunca deja de sorprenderme lo barato que vendes todo.
Pero, ¿por qué? Te lo ruego, dime por qué me han comentado que Anton Virane sigue caminando por Markarth, tan sano como el día en que nació.
Bien, bien. Es un trabajo decente, hijo. No hay de qué avergonzarse.
Acabo de darle un funeral de fuego digno a Berit, mi antiguo compañero de guerra. El viejo cabezón odiaba la idea de acabar bajo tierra.
¿Alguien me desprecia? ¿He hecho algunos enemigos? Por supuesto que sí.
¡Vete! ¡Déjame vivir! ¡Dile a la pretendiente Astrid que has cumplido! ¡Que has apuñalado, estrangulado, ahogado al pobre Cicerón! ¡Una mentirijilla de nada!
Tal vez no estés a la altura...
Puedes irte ya...
Juntaré a todos los hombres que pueda, y me reuniré contigo frente al bastión Guardia del Norte. Entraremos y saldremos tan rápido como sea posible.
Estamos especialmente interesados en la resistencia de los sellos mágicos que se colocaron en estas tumbas. Nunca habíamos visto algo semejante.
No cuesta mucho encajar y hacer amigos cuando tienes dinero para hacerlo posible.
Un orco sigue hasta la muerte.
Puedes dármelo, otra cosa es que lo siga.
¿Mm? Lo siento, pensaba en mis experimentos.
Talen, amigo mío, ¿vamos de pesca esta semana?
El sonido de nuestra ferocidad es como una tormenta que se desata sobre la cabeza de nuestros enemigos. Nuestra amistad, es como una capa que ofrece auténtica hermandad a todo el que la lleva.
Parece que la chica cree que el viejo Mercer nos la está jugando... al guiarnos aquí y dejar que los las creaciones enanas nos debiliten.
Si quieres sacar el máximo partido a tu inversión, ven aquí a vender tu mercancía.
¿Un truco de la oscuridad tal vez?
¡Monstruo! ¡Te mataré por esto!
¿Me tomas el pelo? Luché contra todos esos bandidos. No te tengo miedo.
Más de lo que crees. Me ha costado un año perfeccionar el veneno de esa flecha y solo tenía suficiente para hacer un disparo.
La Hermandad Oscura se ha vuelto a alzar, Oyente. Puedo sentirlo.
Morthal, capital de la comarca de la Marca de Hjaal. No está a la misma altura de Soledad o Carrera Blanca, pero no está mal si te gustan las ciénagas.
¿Tienes aplomo, o es solo bravuconería? Prefiero el aplomo. Los soldados bravucones acaban muertos.
¡Gracias!
¿Buscas la hoja? ¡Como muchos antes que tú!
Mi jarl, debemos abordar cómo se ha desplomado el comercio de Markarth con el resto de plazas.
¿La has encontrado? Llevo meses buscándola. ¿Te encargaste de esos bandidos sin ayuda?
Te manejas bien. Creo que podrías ser un buen hermano de escudo.
Ahora desviemos la conversación hacia temas menos desagradables.
Se hacen llamar los "Horker Sangrientos".
Ve, y no te demores. Lleva mi Luz al monte Kilkreath.
Ahora, vamos con tu deseo... Que acabe la guerra, ¿no?
Manos fuera. ¡Esa armadura es mía ahora!
¿Explica eso cómo es que un novato abre una cerradura imposible o un ciego se encara contigo cuando le hurgas en el bolsillo?
Sí, supongo. Pero créeme, solo nosotros los sirvientes tenemos una llave así, y tiene pinta de ser un cierre muy caro. De verdad, yo no me preocuparía.
¡Yiargh!
¿Crees que se quedarán de brazos cruzados mientras un dragón mata a mis hombres y quema mi ciudad?
¡Soy un hombre casado! Eh, ¿dónde crees que deberíamos vivir? Supongo que siempre podrías quedarte en mi casa.
No lo creo.
¿Están los dioses molestos conmigo?
Mi padre es Alvor, el herrero. Yo soy su ayudante. Bueno, su aprendiza.
Tenemos que avisar al jarl Balgruuf en Carrera Blanca para que envíe tantas tropas como pueda. Si haces eso por mí, estaré en deuda contigo.
¡Vivid durante miles de años!
¿Quién anda ahí? ¿Eres tú, papá?
¿No son muy lentos? Puedo atacar y retroceder antes de que consigas blandirlos.
Ah, has regresado. Espero que haya habido progresos en tu búsqueda de ese grito que necesitamos para derrotar a Alduin.
Hay que ir poco a poco. Si lo haces con mucha fuerza, se deformará la madera.
Vamos, ábrete.
Aquí tienes tu paga.
Bueno, pues "observa" desde más lejos. Incomodas a la gente.
Sí, lo reconozco.
Los gigantes no suelen causar esta clase de problemas, pero estos están agitados por algún motivo.
¿Puedes abrir?
Lo cierto es que sí.
¿Quieres hablar? Adelante.
No, y tampoco es asunto tuyo.
Unos pocos mortales nacen con capacidades similares. Hace siglos que se debate si esas capacidades son un don o una maldición.
He hablado con mi corte y al parecer eres muy competente... No hay nada que impida que se te otorgue el título.
Sí, ya lo creo. Confía en mí, mamá: cuando matas a un hombre desde un caballo, se te quitan las ganas de volver a luchar en el suelo. No hay vuelta atrás.
Te cubro las espaldas.
Da la orden, señora.
Lárgate. Estoy ocupado.
No podrías habernos traído noticias mejores. A pesar de los recientes acontecimientos, este es un día feliz.
A decir verdad, Sabjorn no es un propietario. Es un esclavista, eso sí.
¿Todo el mundo listo? Lanzamos la carga a mi señal.
No me creo que esté sucediendo esto, chico.
¿Quizás sea porque no hay mejor forma de enfrentarse a las frías noches de Skyrim que con la tripa llena de cerveza?
Venga. Me sentiré mucho más a gusto cuando estemos a cubierto en Cauce Boscoso.
Esta vez la he hecho buena.
Un grupo de ellos se ha refugiado en la Marca Oriental.
No hay de qué preocuparse. Pondremos fin a este levantamiento... y todo volverá a la normalidad enseguida.
Ahora que Nurelion nos ha abandonado, supongo que Quinto habrá ocupado su lugar en el asunto del Vial blanco.
¡Canto Fúnebre! ¿Has sacado la basura como te pedí?
Aunque... quizá haya otra opción. Puede que, hum... puede que necesite que me sigas ayudando.
Que todos tus futuros posibles te traigan buenas noticias.
Por último, queda Sibbi, el peor del clan con diferencia. Está en los calabozos de Riften por un asesinato.
¿Crees que puedes robarme?
Me alegra que estés de acuerdo. Empezaba a preguntarme de qué lado estabas realmente.
Tranquila, Karliah. No hace falta que digas nada.
Ha sido un placer, gracias.
Solo me queda uno, y bastante caro, pero es muy elegante.
Búscame si alguna vez necesitas un dinero extra.
¡Espera! Ven un momento. Necesito tu ayuda.
¿Qué? ¡Rata asesina! ¡Ya veremos quién mata a quién!
Un viejo fuerte, lleva años abandonado. Son como chacales; ocupan el primer lugar que encuentran.
¿Qué hay del hecho de que nuestra granja fuera atacada por bandidos y matasen a toda mi familia, sin que nadie hubiera levantado un arma contra ellos?
Si te lo digo, tienes que prometerme que no me matarás.
Tengo un comprador con unos gustos muy raros en cuestiones literarias, por así decirlo, y anda buscando ciertos libros.
Te vigilaré mientras duermes para garantizar tu seguridad. Si llego a la conclusión de que algo falla, utilizaré mis artes para traerte de vuelta.
No. Ni por asomo.
Ahora no.
Cuando me hablaste de tus intenciones de unirte al gremio de ladrones, sinceramente pensé que no volveríamos a tener nada que decirnos jamás.
La ciudad de Markarth es muy hermosa. De eso no hay ninguna duda.
Ojalá pudiera, mi señora. Lamentablemente no he vendido suficientes joyas para comprar las tuyas. Lo lamento.
¿Hay... hay algo que pueda hacer por ti?
Portadores de hachas, incivilizados y vestidos con pellejos. Es sorprendente que no sigan viviendo en cuevas, como esos antepasados de los que tanto presumen.
Mmmm, cuidado con eso, Nenya. Nuestros mercaderes podrían estar vendiendo armas a una fuerza invasora.
Los que lucharon contra los Thalmor en la Gran Guerra aún ven un enemigo. Pero esa guerra ha acabado, y ha amanecido un nuevo día.
Esta era una ciudad gloriosa. Pero entonces todo empezó a cambiar. Llegó el Imperio... y mi hermano se perdió...
Exigimos una compensación por la masacre de Paraje de Ivar.
Me pregunto si alguno de mis antepasados habrá caminado por estas salas.
Estábamos todos bastante preocupados porque ni Mercer ni tú aparecíais. Brynjolf llegó a salir en tu busca.
¡Ah, eres tú! Siento oír lo de tu encarcelamiento. Estoy seguro de que los guardias no pretendían meterte entre rejas.
Oh, tengo absoluta fe en tu éxito, créeme. Manos a la obra.
Cuando me case, ¿también tendré que hablar tan alto con mi mujer?
Toma, por nuestra amistad. ¡Un regalo! Y si no te gusta, te aguantas.
En la actualidad es... bueno, es un esqueleto. Un viejo cadáver. Pero lo más importante es que el guardián de ese cadáver va a traerlo a este mismo santuario.
Te hacemos llegar esta advertencia porque la Orden Psijic cree en ti.
No. Estamos completamente expuestos. Tenemos escasez de arcos y flechas. Todos los edificios son de paja y madera.
La mina está siempre al borde del derrumbe. Menos mal que estoy yo aquí para impedirlo.
Puede que Cicerón me haya oído hablar con los demás sobre la Madre Noche. Y quizá no fuese del todo... respetuosa.
¡Soldados! Estos días están por todas partes. Y ninguno de ellos sabe cómo ser aseado.
¡Rápido!
¡Muere, dragón!
¿Visión? ¿De qué visión me hablas? Oh, no te molestes.
No, los dragones no son más que el último presagio del fin de los días.
¿Que tú qué? Oh. Eso. Bien. Espero que hubiera mucha sangre de por medio.
Y por toda la ciudad circulan historias sobre tu comportamiento sospechoso. Ahora, entrégate con calma.
¿Alguien nuevo? ¿Quizá alguien que quiere crear alguna confusión?
Esa es la parte de la que los partidarios de Ulfric siempre se olvidan oportunamente. Si el Imperio no permanece unido, los Thalmor nos destruirán a todos.
¡El archimago ha muerto! ¡Muerto!
Parece prometedor.
Ese museo es un error.
Ah, me alegro de verte, hermano. ¿Preparándote para matar al emperador? Es una época emocionante. Una época emocionante, sin duda.
Ventalia. Blanca como los huesos y fría como el Vacío.
Si esa arma causa problemas a mis clientes, yo te causaré problemas a ti. ¿Entendido?
Ahora veremos si tus buenas palabras se respaldan con hechos.
Esta situación es culpa tuya. Más vale que recuperes Riften o mueras en el intento.
Sea quien sea, está claro que hemos empezado con mal pie. Pero no hay por qué preocuparse. No es la primera vez que me capturan y me arrastran.
Tenemos mucho más, así que avisa cuando quieras.
Esto es una locura. Nunca debimos entrar aquí.
Yo me encargo de los trabajos de pesca, contabilidad y saqueo... Los trabajos delicados.
Gracias. Significaría mucho para mí.
¡Los nórdicos de verdad nunca se echan atrás!
Thorald hizo algo peor... Se atrevió a actuar contra el Imperio, y los Batallador se enteraron.
No importa. Se acerca una ocasión especial y me gustaría tenerlo.
Pero quizás Nelacar sepa algo. Es un veterano del Colegio, pero tiene una habitación aquí.
Bueno, de ninguna. Al menos ya no. Esta gente me llama por lo que hacía antes.
Creo que el Colegio de Bardos busca reclutas. Si te interesa, deberías hablar con el director, Viarmo.
Hemos vendido todos esos collarcitos tan monos que me trajiste hoy. ¿Los has hecho tú?
No te preocupes. Todo va bien.
Arkay nos ayuda a encontrar la paz en la muerte.
Luego empezó el hambre. La curiosidad. ¿Qué hay de malo en dar un solo mordisco?
Sí que es impresionante.
Espero que esta sea la última vez que me entero de que le faltas al respeto a mi familia.
Pero como bien dices, las negociaciones pueden suponer a todos sus leales la oportunidad de volver al redil del Imperio.
Cuídate.
Resulta especialmente potente contra los no muertos, y debería de calcinarlos totalmente al instante.
Estábamos excavando esta antigua tumba cuando abrimos una cámara llena de cadáveres. El equipo echó un vistazo, se dio media vuelta y huyó.
Calixto, alguien se dejó aquí un anillo muy interesante hace unas semanas. ¿Te gustaría verlo?
Observa el futuro. ¡Observa a los Thalmor!
Bersi sigue negándose a cooperar. ¿Qué quieres hacer?
No puedo imaginar lo emocionante que debe de ser viajar de aquí para allá. ¡Qué suerte tienes!
Me bastaría con chasquear los dedos, y hasta la última alma de Skyrim moriría. Guerra civil resuelta.
Apártate. Interrumpir una ejecución es un crimen muy grave.
A cierta distancia de la costa, hacia el este, encontrarás el pecio del Martillo del Mar. Saben los dioses qué tesoros pueden quedar a bordo.
La investigación que he realizado indica que Skorm Caminante de la Nieve se dejó parte de su diario aquí después del asedio.
Hemos llegado a un punto en el que Vex y Delvin tienen que rechazar clientes; es casi imposible mantener el ritmo.
¿Qué? ¿Un dragón? ¿En Helgen?
Que los Ocho te guíen hacia el Vial...
Que tus viajes sean propicios.
Los jóvenes están encantados de romperse la espalda por los nórdicos. Olvidan lo que era nadar en libertad.
Si encuentras esa espada, tráemela, por favor.
Llámame si puedo servirte de ayuda.
Aquí están arrodillados, con su antigua misión cumplida, pues el último Sangre de Dragón lucha contra Alduin al final de los tiempos.
Ya sé en qué dirección la habéis encaminado. Pero ella ha tomado otra decisión. Paarthurnax sigue a salvo de vuestra maldad.
Toma, compruébalo con tus propios ojos. Este es el último mensaje que he recibido. Te digo que no va a regresar.
Es débil, no cabe duda. Pero no es tonto y acudirá, aunque sea para dar a sus tropas la ocasión de prepararse.
Dicen que Ulfric Capa de la Tormenta asesinó al rey supremo... ¡solo con su voz! ¡Lo hizo pedazos con solo gritarle!
Si alguna vez encuentro a mi marido con otra en la cama, lo pongo de patitas en la calle allí mismo.
Hola, esposo. ¿Has dormido bien?
¿Qué puedo hacer por ti, señora?
Me secuestraron esos bandidos hace semanas. Me encerraron en las torres, cerca de Guardia Brumosa.
Perfecto. Con suerte esto nos servirá para enterarnos de sus intenciones. ¡Creo que los tenemos bajo control!
Quizá, pero no hoy.
¿Qué diría Hroggar si se enterase de que estoy bebiendo contigo?
Eh... No ha estado mal.
¿No puedes darme una moneda?
Si todos hubiéramos muerto allí, si hubiéramos liberado aquello, quién sabe lo que podría haber ocurrido...
Ya me han hablado de ti y de tus palabras melosas...
¡Ahora no, que estoy intentando ver esto!
Y siempre se arrepienten.
¡Sal y enfréntate a mí, cobarde!
Sí que lo era. Y tú lo descubriste porque rompió una de las reglas fundamentales de este negocio... se volvió avaricioso.
¡Ya puedo! ¡Lo hice ayer mismo!
Vete. Diles a tus comandantes que has ganado. Mi familia, mis hombres y yo nos habremos ido antes de que lleguen.
Los Thalmor llevan la arrogancia de los altos elfos hasta el extremo. Se creen los soberanos por derecho de todo Tamriel.
Tienes aspecto sospechoso. Espero que no seas uno de esos malditos ladrones.
A veces me pregunto si los dioses nos han abandonado... como nosotros los hemos abandonado a ellos.
El pergamino que recuperaste menciona a un tal "Gajul-Lei". Según mis fuentes, se trata de un viejo alias usado por uno de nuestros contactos.
¿Sí? ¿Dónde?
Supongo que no sería correcto preguntar cómo lo has obtenido, así que no lo haré.
Volveremos en cuanto reunamos más tropas.
Debes ir a la ciudad de Markarth y hablar con la ayudante del boticario. Seguramente la encontrarás en Cura de la Arpía, en horario de apertura al público.
Mi título no es más que una formalidad. Siempre he estado al mando por aquí.
Pero yo estoy maldito, o eso parece, ya que vivo solo.
El tambor ha estado en media docena de batallas famosas. No tiene precio.
No le des importancia. Madena es una buena mujer, pero tengo mis propios motivos para abrir este museo y no voy a cambiar de opinión.
Pareces tener bastante aguante para la bebida. ¿Qué te parece si libramos un duelo amistoso y el que gane se lleva un bastón?
Mi hermano ha muerto. Las cosas no serán lo mismo sin él.
Esas brujas odian todo lo que crece de la tierra. Han hecho que sea un arma fuerte contra el mundo natural.
Cuidado. Como se te caiga una sola gota de plata, te la voy a arrancar del pellejo.
Correcto. Lo que te pido no es poca cosa, por supuesto. Pero representas a la Hermandad Oscura. Esto es... lo que hacéis. ¿No?
Cuando me casé con Torygg, me prometió que me llevaría a suntuosas fiestas como esta. Ojalá estuviera aquí.
Por fin he encontrado la pista del último ídolo, o eso creo.
Sugeriría que nos apartáramos de las placas con el símbolo de los Sangre de Dragón.
Últimamente, ha sido más fácil.
Os retiráis de Falkreath y permitís que Siddgeir retome su legítimo puesto como jarl.
Ya estoy demasiado liada atendiendo a los muertos como para ponerme a hacer más.
Eres alguien que se encarga de que las cosas se hagan, y eso me gusta.
¡Para qué, con la de cosas que hay que ver!
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre de Paraje de Rorik.
Una Luz que podría iluminar todo Skyrim y a aquellos que lo habitan.
Hablaré con Jala, cielo. Seguro que acepta que se lo compense con una patata.
Somos leales a Lord Boethiah. ¿Has venido a probar tu temple?
Esto no puede estar pasando.
Wujeeta, tienes que dejar de consumir skooma. Es algo nefasto para tu salud y no quisiera que te pasase nada.
¿Qué ha sido eso?
Deberías hablar con Ainethach. Él dirige las minas. Al menos solía hacerlo.
¡Vuelve aquí!
Ahora que el Imperio ha sido expulsado de la Cuenca, podemos evitar que sigan explotando sus minas de plata. Esa plata pertenece a Skyrim.
Esto se parece al sitio del que me habló Agna. Dijo que el oso mostraría el camino...
Supongo que tienes razón. No soy un luchador.
En las montañas que hay al nordeste. La marcaré en tu mapa.
Gracias por tu amabilidad.
¿Te pongo un vino especiado? Es una receta familiar.
Uno de los ingredientes que necesito para cultivar raíces de nirn son las uvas de jazbay... El contenido ácido de su jugo es perfecto para la tierra.
Hasta ahora, la hemos llamado Reina Alfisgr, o Allie, para abreviar. Llegado el momento, cuando sea tuya, podrás llamarla como te plazca.
Permanece a la vista y no te alejes de mí. Nada de tretas ni trucos raros, salvo que quieras sentir mi acero en tu estómago.
¿Estás bien? He oído todo el jaleo. ¿Con quién hablaba Cicerón? ¿Dónde está el cómplice? ¡Muéstrate, traidor!
Hemos expulsado a los imperiales de Carrera Blanca. Eso es bueno. Muy bueno. Ahora controlamos el centro. Es una posición muy ventajosa, y espero conservarla.
Los Capas de la Tormenta han llegado, y en gran número. Acude al frente. Ha llegado la hora; tenemos que conservar la ciudad. ¡Muévete!
¿Necesitas algo, infeliz?
Creo que puedo enseñarte un par de cosas.
Esto es muy emocionante, ¿verdad?
Se procederá a la ejecución según lo previsto.
La cosa pinta mal, Igmund. Nuestras fuerzas apenan pueden controlar a los Renegados. Los mercaderes informan de más pérdidas de cargamentos.
¡Muy buen trabajo! Vuelve al campamento e informa de nuestro éxito. Me quedaré aquí para poner esto en orden.
Si quieres cazar conmigo, tus piernas deben ser rápidas, y tus ojos aún más.
El destino de Lucero del Alba depende de esa minúscula botella. Cuanto más esperemos, más daño podría estar haciéndole Vaermina a esa pobre gente.
¿Tú qué crees? Es un cerdo. Para él solo soy un cuerpo caliente con el que acostarse.
Según la costumbre nórdica, una vez se la lanzado un desafío en la corte, Torygg no tenía más remedio que aceptar.
Mmm. Sí, sí, creo que sí. Adelante, pues.
Eso espero yo también. Es una situación desconcertante.
¡Tú! ¡Sirvienta! ¿Cómo te llamas, querida?
Cicerón admite que creía que ya habrías muerto. Je. ¿Y si olvidamos todo esto? ¿Eh? Agua pasada no mueve molino. ¿Qué me dices?
No te alejes. Este lugar me da escalofríos.
Bueno, vale. Ya sabía yo que no me ibas a ayudar. Nadie lo hace nunca.
Gracias, encanto. Seguro que te gusta salir del salón de vez en cuando.
Pensé que lo había dejado bien claro... Nadie muere en estos trabajos. Recuérdalo la próxima vez que quieras que te paguen.
Quiero saber más sobre ese dragón.
Me voy a jugar a los soldados con un árbol.
¡Eh! ¿Quieres jugar al pilla pilla?
Recoge tus cosas y márchate.
Una vez que te hayan recompensado por mi asesinato, quiero que mates a la misma persona que lo ordenó. ¿Me harías ese favor?
Se las daba de ladrón en un nuevo gremio que se estaba formando por aquí. Me dio información valiosa antes de... Bueno, ya sabes.
Te equivocas. Es asunto mío. Puede que tú seas la única posibilidad de detener a esos dragones.
Por eso la posada se llama Trago del finado, la granja se llama Luz Cadavérica, y así sucesivamente. Supongo que es una especie de broma recurrente.
La invitación, por favor.
¡Ahrk fin Kel lost prodah, do ved viing ko fin krah, tol fod zeymah win kein meyz fundein!
A sus órdenes, mi señor. Sin embargo, hay otra forma de resolver este problema.
Me lo prometiste, Hjalti. Me prometiste que, cuando saqueáramos Hroldan, me convertiría en tu hermano por juramento.
¡Tesoro, eso es lo que hay! Mueve ese culo lleno de escamas y vamos allá.
Pero estaba escondido. No por los enanos, claro. Ya se habían ido.
Eso me dijiste la semana pasada, y también la anterior. Vete o llamaré a un guardia.
Tras años y años de trabajo, estoy encontrando una forma de investigar lo que sucedió mediante la experimentación.
Entonces ya sabes lo que se siente cuando tu vida está en manos de otro. ¿Qué derecho tienen ellos de decidir? ¿Acaso los juicios no son prerrogativa de los dioses?
¿Cómo te encuentras?
Has de tener cuidado en esta ciudad. En estos tiempos nunca se sabe en quién puedes confiar.
¡Eh, eh, eh! ¡Cuidado con esa magia!
No es que requiera de la aprobación de nadie, claro. Pero hay algunos, cuyos nombres no mencionaré, que no estarían de acuerdo.
Ya seas de los peregrinos o no, si fuera tú, me quedaría en nuestro tradicional pueblo.
Te daré otra oportunidad, pero ten cuidado.
¿Qué te trae por aquí, lúgubre caminante, a Sovngarde, el destino final de las almas, el último presente de Shor a los muertos honorables?
Gracias por la bendición. Haré buen uso de esto.
Lo único que queda por conseguir es la empuñadura. ¿A que es emocionante?
Ah, fuego. Un elemento caprichoso. Suele ser letal, pero emocionante siempre.
Espero que sea importante.
Más vale que me ponga en marcha.
Los guardias de la Cuenca del Dragón dicen que has ayudado al jarl. En nombre de Carrera Blanca, te doy las gracias.
Yo a ti no te debo dinero, ¿no?
Buena caza.
Vaya, estoy bastante seguro de que nunca me han interrumpido de esta forma... ¡Qué osadía!
Y por cierto, en el nombre de Mara, ¿quién eres tú? ¿Mmm? Vienes aquí y me dices qué debo hacer. ¿Y para qué? ¡Para ayudar a un... a un... un loco!
Eso es aceptable. Puedes decirle a Evette San que su cargamento llegará pronto a Soledad.
Llegado este punto, ya les da igual lo que le ocurra al fugitivo, y a mí también. Mejor que lo mates y así pasamos a otra cosa.
Vale, pero esto no quedará así, Madena. Ya hablaremos.
Dirígete al norte, hacia Ventalia. Allí hay un colegio donde enseñan magia. La mayoría de los nórdicos lo desprecian.
Díselo, Ulfric.
"Que los dioses me juzguen y los mortales me lleven si fracaso en mi misión".
Por favor, estoy desesperado. ¡Se trata de la vida de mi hermano! ¡No dejaré que se lo lleven!
Tengo que hacerte algunas preguntas. Intento encontrar a alguien.
Dirígete a Morthal.
Puso fin a la guerra y dejó al Imperio vivo para contarlo.
La novia probablemente se dirija a la multitud desde el balcón que da al patio.
¡Solo soy una niña! ¡La Hermandad Oscura mató a mi madre y a mi padre, y luego me hicieron prisionera! ¡Por favor, ayúdame!
Ya sé que no has venido solo a hacer una visita. ¿Qué traes?
Parece que nuestro adversario intenta hacernos polvo indirectamente enfureciendo a Maven Espino Negro. Muy astuto.
¡Ja, ja, ja, ja!
¡Nadie puede salvarte ya!
Sí, he trabajado en varios amarraderos. Pero la mayoría de los capitanes son muy supersticiosos y no dejan que cualquiera toque sus navíos.
Necesito que te pongas en pie. Estamos en apuros.
Interesante... Conocen nuestros planes mejor de lo que esperaba...
Si la Madre Noche te ha ordenado de verdad que hables con un contacto, sería una locura ignorar su orden.
¿Has escuchado alguna vez la expresión "la escama del argoniano que te mordió"?
Le he dado muchas vueltas y es la única forma. Está demasiado alienada, demasiado corrompida por las arpías. Al menos, al morir, volverá a ser libre.
Solo tu muerte o una disculpa restablecerán el honor de mi familia. Es tu última oportunidad.
Estoy segura que has tomado nota de quién ha colaborado más contigo durante el tiempo que has pasado aquí, archimago.
¡Quiero tu cabeza!
Muy bien. De todos modos iba a sugerir al jarl que contratase a alguien para solucionar esto.
¿Quién? ¿Te refieres a la mujer que fue atacada en el mercado el otro día?
Interesante. El mismo dragón...
Habla. La khajiita escuchará hasta que todo el azúcar del mundo se vuelva amargo.
Solo será un momento...
¡Oh, dioses, mis oídos!
Mmf. ¿Quién dirige a los Sangre Argéntea? ¿Tú o tu hermano? Tienes que decirle a Thongvor que resuelva el asunto él solito o que renuncie.
Bueno, supongo que a todo el mundo le entran dudas antes de su boda. Y, a fin de cuentas, te dije que ya me pagarías.
Crecí en una fortaleza. En algún momento de su vida, todas las chicas orcas trabajan en la forja.
A la gente le pareció apropiado nombrarme jarl, y no pretendo decepcionar a nadie.
Discúlpame, por favor. La Compañía del Imperio Oriental tiene varias cuentas y me corresponde a mí cuadrarlas.
¡Tu muerte será rápida!
¿Puedes contarme algo más sobre lo que viste?
Tanto si demuestras que es inocente como culpable, te recompensaré.
Bueno, cuando me marché de Morrowind durante la erupción, vine aquí... Mi familia había comprado esta granja y era todo lo que nos quedaba.
Todavía no me lo creo. ¿Tú, archimago? Nunca lo habría imaginado.
Muchas gracias.
Harás exactamente lo que Galmar te diga que hagas, y provocarás toda la destrucción que puedas al Imperio y a cualquier jarl que lo apoye.
Tengo una carta y un montón de oro. ¿Algo de que era tu herencia? Ah, y... te acompaño en el sentimiento.
¡Venga! Sabes perfectamente que quieres lo que hay en ese cofre. ¡Camina hacia él!
En la lengua de los dragones, no hay diferencia a la hora de debatir y de combatir. El gritar es algo tan natural para ellos como respirar o hablar.
¿Vienes a mí con los puños en alto? ¿Es que buscas que te den una paliza?
Me salvarás la vida. Otra vez. Tal vez te haya parecido desagradecido... pero he estado muy asustado mientras esperaba que me degollasen en cualquier momento.
Limítate a cerrar la boca y a no moverte de aquí. En cuanto llegue mi relevo, daremos un bonito paseo todos juntos.
Una vez maté a seis hombres yo solo mientras rescataba a mis camaradas de una emboscada tendida por una patrulla imperial.
Mi padre era legionario, como su padre antes que él. Supongo que ni siquiera me planteé dedicarme a otra cosa.
Esos carniceros imperiales vienen hacia aquí. ¡Volved a vuestras casas y encerraos allí!
Puede que no lleve mucho tiempo aquí, pero al menos sé seguir las reglas.
Aunque el elfo del bosque tiene un puesto en la ciudad, siempre se retira a las llanuras, lejos de Carrera Blanca, para cazar. Mátalo allí y no habrá testigos...
¡Ja, ja, ja! Me caes bien.
Quizá puedas ayudarme. Mira, podría ser una manera de compensarme por meterme en este lío.
No está mal. Algunos de los invitados de la inminente boda han hecho pedidos.
¡Viviré para beber otro día!
Cabalga con energía.
Sí, y encima ha instalado más trampas... Un minuto de silencio por nuestro camarada caído...
Avísame si necesitas algo.
¡Estoy de tu lado!
Sí.
¿Has oído la noticia? ¡Esos malditos magos han volado Hibernalia por los aires! Supongo que era cuestión de tiempo...
Ese es el espíritu. Al prestar el juramento te conviertes en uno de los nuestros. Una heroína del pueblo. Una auténtica hija de Skyrim. Una Capa de la Tormenta. Repite conmigo.
Una sabia elección. Después de todo, ¿qué iba a saber un aventurero normal y corriente sobre las complejidades de las finanzas?
Toma. Una de mis mejores armaduras. Trátala bien.
Pues no lo sé.
Ya, lo que voy a ver es que un día vendrán a buscarte... y después nadie volverá a verte ni a oírte nunca más.
Así es, soy Ulfric Capa de la Tormenta...
El bosque otoñal me hace echar de menos mi infancia, cuando jugaba entre los altísimos árboles de Bosque Valen y vivía con mis hermanos.
Se trata de un clan de gigantes. La guerra les está expulsando de sus tierras, y han comenzado a atacar asentamientos.
Los Cuchillas los mataron a todos hace siglos. Ya nadie quiere oír ese canto épico.
Vuelve a hablar conmigo si le pruebas tu valía a Brynjolf.
Hay una palanca ahí, justo en el centro. ¡Date prisa, antes de que aparezcan más!
Prefecto.
Es cierto que Carrera Blanca está peligrosamente expuesta mientras los Capas de la Tormenta controlen Markarth...
Te queremos, Grelod. Gracias por tus atenciones.
Algún día, mis armas serán tan fuertes como las de mi madre, y Malacath estará satisfecho conmigo.
Bueno, se supone que tienes que recibir algo por las molestias, ¿no es así? ¿Qué te parece algo de oro? Parece que a la gente le gusta, por lo que se ve.
Vaya.
La Ciudad Imperial está tan lejos de aquí que hasta podrían ponerla en una de las lunas. Y aun así el Imperio cree que puede decirnos qué hacer y cómo vivir.
Eso espero. Aunque entiende que no voy a dar algo por cierto solo porque lo digan los Barbas Grises.
¿Cómo podría hacerlo?
Uno de los sirvientes ha tenido una idea maravillosa. Hacer que Cuenca del Dragón sea ignífuga. En caso de ataque por, mmm... aire.
¿Quizá podríamos compartir un carruaje después de la fiesta?
Eso espero. No aguanto más esta ciudad.
Me da igual lo que me prometas. Si te digo el nombre del comprador y se corre la voz, ¡me arruinarías!
¡Utensilios de cocina, cuchillos y otros útiles domésticos a precios razonables!
¿Optarías por atraer la energía armónica al reactivo o le permitirías generar su propio campo?
Muy bien.
Te diré lo que quieras. ¡Lo que quieras! Por favor, basta, deja... de hacerme daño...
Bien, dímelo cuando estés a punto y empezaremos.
Cuéntanos sobre tu último trabajo, Arnbjorn. ¿Algo de matar a un khajiita? ¿Un mercader, me equivoco?
Estaré aquí abajo, intentando coordinar todo con Delvin y Vex para asegurarnos de que el dinero siga fluyendo... ¡y que nadie robe nada!
Mira, llámame loco si quieres, pero me fío de Karliah. No creo que nos guiase al suicidio.
¿Qué oíste?
Ah, así que no era solo un sueño. Lo he visto hacerlo.
Bueno... te dejaré seguir con tus asuntos.
¿No tendríamos que pensar en investigar el asunto?
En primer lugar, debemos organizar un ataque al fuerte. El objetivo es arrebatárselo a los rebeldes.
¿No deberíamos asaltar a los guardias cuando bajen la próxima vez?
Creí que Laelette se había marchado para participar en la guerra. Desde entonces no había oído hablar de ella.
Gracias. El honor dicta que te ofrezca algo a cambio. Espero que te resulte agradable.
La llave está en esa horrible urna enana que hay en su tienda. Rompe esa cosa en pedazos, y cambiará de actitud.
Me llamo Valdr. Cazo por las afueras de Falkreath.
El capitán Volf, del Sload Delicado, ha decidido poner a prueba mi paciencia y declinar el honor de cumplir un acuerdo que habíamos alcanzado.
Enhorabuena. Has alterado el destino de un artefacto daédrico y has sobrevivido.
Bueno, voy a curiosear un poco por ahí. A ver qué nos dejaron los antiguos Cuchillas.
Sergio sabe lo que quiero. Espero que pueda hacerlo todo rápido.
Te doy la bienvenida a la mente engañosamente verde del emperador Pelagio III. ¡Eso es! Estás dentro de la cabeza de un monarca muerto, homicida y maníaco.
No tiene la cicatriz.
Oye, tú. ¡Levántate! Vamos, los dioses no van a darnos otra oportunidad.
La posada está cerrada. Aunque el bar sigue abierto.
Parece que podríamos llegar a un acuerdo.
¿Qu... qué? Ah, uno de vosotros.
El general Tulio necesita dinero para la guerra. Necesitamos los fondos para aprovisionar a más tropas y armarlas.
Más que la mayoría. Me adiestraron los Barbas Grises de Alto Hrothgar cuando era un crío.
En las madrigueras de la Ratonera. Un bonito lugar, si no te importan el hedor, las ratas y todo tipo de gentuza como vecinos.
Si queremos tener alguna esperanza de derrotar a Mercer, debemos contar con el apoyo de Nocturnal.
Vale. Lo haremos a tu modo. Por ahora.
No me malinterpretes. Me gusta leer y la tranquilidad. Pero si te metes con mi barco, mi tripulación o mi capitana, te mataré.
¿Qué? Ejem, ¡nada!
En primer lugar, un grupo de imperiales se oculta en una aldea cercana. Tenemos que hacerlos salir y pasarlos por la espada.
Apuesto a que puedo romper esa roca más rápido que nadie. Incluso que tú.
Parece que nuestros enemigos nunca se cansan de enviar espías, saboteadores y asesinos a por nosotros.
Aunque el hechicero de la corte de Ulfric también acepta aprendices de vez en cuando.
Así es como me consolé durante años, tras sellar este lugar y jurar que no volvería a permitir que nadie lo abriese.
¿En qué estás pensando?
¿No sientes... vergüenza?
Gritamos.
Hay un último aspecto que deseamos que explores, pues un amor intenso puede sobrevivir a tormentas e incluso a la muerte.
Buuuuu.
Sí, tienes razón. Quizá no sea buena idea.
Para llevar a Ulfric hasta su merecida gloria, sería capaz de forjar un millar de escudos.
Tenéis algo en vuestro Colegio, ¿no? Algo inmensamente poderoso, que sobrepasa cualquier cosa que pueda anticipar. ¿De qué se trata?
¿Otra vez? Ya tuviste una "caza prolongada" el mes pasado. En el Pinar, ¿no?
¿Te apetece arrastrarte por un subterráneo en ruinas para ver si encuentras la Corona dentada de Galmar?
Significa vivir de tal modo que tus hermanos de escudo puedan afirmar con orgullo que han luchado a tu lado.
Aquí, te lo enseñaré en el mapa para que puedas mantenerte al margen. Si me vas a ayudar, dímelo, o si no aparta de mi camino para que pueda buscar a un sacerdote.
La recuerdo. Su porte. El modo en que caminaba. Una guerrera muy capaz, sin duda.
Mallo me está enseñando todo lo que sabe sobre la elaboración de aguamiel. Espero que algún día pueda ocupar su puesto.
Hablaremos cuando averigüe lo que está pasando.
Wilhelm ha quedado muy satisfecho con la entrega. Bien hecho.
Como siempre. Intentando no morir de frío y tener algo que llevarme a la boca.
Era muy importante recuperar el control de la Cuenca. Fue un error permitir que Ulfric controlara el suministro de plata. Uno que me alegro de haber solucionado.
Bueno, ¿ha aparecido ya mi arco?
Un grupo de ellos se ha refugiado en la Cuenca.
Quizá cuando destruyamos la rebelión, los Thalmor suspendan sus malditas investigaciones. Lo único que hacen es empeorar las cosas.
Nunca hablas mucho sobre ti, ¿verdad, Horik? En serio, llevas 30 años a mi lado, y creo que apenas te conozco.
Yo se lo llevaría a Calixto. Tiene buen ojo para objetos como ese.
Dioses... Esto es suyo, ¿verdad?
Abandona este lugar... Abandona este lugar...
Mi corazón está con el clan Escudo Quebrado. Aniquilan a su familia, roban su martillo de guerra... No hay justicia en este mundo.
¡Demostradme lo que valéis!
Eh... He oído que escapaste de la mina de Cidhna con esos Renegados. ¿Tienes idea de cuántos murieron?
Algún día yo me encargaré del aserradero... cuando sea lo bastante mayor.
Y mira tú por dónde, mi administrador tiene la casa perfecta para ti.
Me alegra oír que Gulum-Ei recibió su merecido. Se la tengo jurada a ese lagarto desde que me intentó colar un cargamento de vino Destierro Sombrío avinagrado.
¡Y llega en carruaje, nada menos! ¡Te saludo, señor!
Hay bolsillos llenos de dinero y cofres rebosantes de riquezas al alcance de la mano.
Si esto significa el final de Mercer Frey, podéis contar conmigo.
Oye, Svana... dicen que te gustan los elfos oscuros. Tal vez yo pueda enseñarte cómo las gastan.
"¡Ventalia es un destino fácil!", decían. Supongo que no contaban con la pequeña revuelta de Ulfric.
Espero que no queden más.
Muy bien. No puedo detenerte. Pero tampoco puedo soportar verlo.
Baja y únete a Galmar en el frente.
En la calle se dice que el gremio de ladrones se está volviendo a asentar en Markarth, así que me imaginé...
Por la sangre de un trol, ¿qué te ha pasado, Pavo?
Lo siento, lady Dinya, pero últimamente he estado muy ocupado.
Estos trabajos no se van a terminar solos, ¿sabes?
Supongo que es un riesgo lógico de este tipo de trabajo, pero nunca pensé que la suerte lo traicionaría.
¡Eso es! ¡Están retrocediendo!
Si el guardia acepta tu rendición, pasarás una temporada en el calabozo o tendrás que pagar tu propia recompensa. Todos hemos pasado por eso. Hacemos lo que haga falta para sobrevivir.
Hay más por aquí, en alguna parte.
¡Por todos los dioses! Doy por hecho que tienes pruebas.
La corona tiene que estar por aquí, en alguna parte. Dispersaos y mantened los ojos abiertos.
Dime, Vignar. ¿Ha valido la pena?
¿No me digas?
Si es algo importante, tal vez Tolfdir sepa algo. Parece que sabe mucho.
Por mucho que deteste decirlo, tienes casi tanto poder como tengo yo ahora mismo. Pero eso es porque la mitad de mi poder habita en ese chucho de Barabas.
Vuelve siempre que necesites algún remedio.
A veces te he visto caminar como si te doliera, Horik.
No. Se trata de algún extraño tipo de artilugio que Mercer encargó para fugas rápidas.
Será mejor que sigamos avanzando. Siento como si ese dragón pudiera estar ahora mismo ahí arriba vigilándonos.
Sé que el rey supremo les invitó a venir aquí, pero no pidió permiso antes, ni a mí ni a nadie. Y tal vez debería haberlo hecho.
¡Avulstein, deja eso! ¡Ha venido a ayudarnos a encontrar a Thorald!
En algunas partes del mundo, blandir así un arma es una invitación a combatir.
Basta... basta... Me rindo, Molag Bal. ¡Me rindo!
Ah, ahí estás. Estaba esperando que llegaras.
Eso no se ve todos los días.
¿Por qué motivo alza el arma? ¿Quiere violencia?
¿Puedo servirte en algo más?
¡Muere, bestia inmunda!
Invocada con palabras. Atada con sangre.
Bien, despeja tu mente y respira profundamente. Es importante conseguir una buena concentración para lanzar el hechizo.
Hasta yo admito que no ha sido la idea más brillante del Imperio. Pero el emperador tampoco tenía otra opción, ¿no crees?
Cada día me siento más impaciente. Y mi acero también.
Adelante. Lo que quieras saber. No te contengas.
Aunque el Vial estaba dañado, sigo pensando que tus esfuerzos se merecen una recompensa.
Así que eres la nueva adquisición de la que habla todo el mundo, ¿eh? Ya era hora de que nos conociéramos.
Me golpeaba, me echaba aguamiel por la cabeza... todo lo que se le ocurría. Una vez incluso me metió una colmena en la cama.
Asegúrate de que paga por lo que le hizo a Galo... Qué diablos, por lo que nos hizo a todos.
Así que ha hablado. Lo sabía.
¡Así es! ¡El peor posadero de todo Skyrim!
Llegué a un gremio de Bosque Valen... Se hacían llamar los Mediaslunas Argénteas. Pasé bastantes años trabajando para ellos.
Te lo ruego, Oyente. Libera mi alma, y que Sithis me juzgue.
Así que necesito que alguien encuentre las pruebas por mí.
¿Buscas trabajo? Uno de mis marineros pensó que liderar una banda de ladrones le proporcionaría más dinero que transportar mi cargamento.
Santa Madre, santa Madre, envíame a tus hijos pues los pecados de los indignos deberán purgarse en un bautizo de sangre y miedo.
¡Ay, tenía que haberme imaginado que volvería a intentarlo!
La ciudad tiene ojos. Ten cuidado cuando estés ahí fuera.
Es mejor que nada, supongo. Pero Tulio va a tener que ofrecer mucho más si quiere que entregue Riften así como así.
Y yo que creía que hoy iba a ser un día aburrido...
Bueno... Ya lo has visto. Ser más fuerte, más veloz.
Hay una grieta aquí, en Skyrim, y no pueden arreglarlo ni la magia ni el transcurso del tiempo.
Etienne debe de saber algo en relación a los dragones... ¿Quién más podría saber algo? Thom el Grasiento... No, a él lo calarían enseguida...
¿Hemos acabado?
No corremos peligro. Matar a un emperador puede ser útil, pero... ¿convertirse en su amigo? Estaréis de acuerdo en que eso sí es beneficioso.
Si la Hermandad Oscura descubriera mi pasado en el Morag Tong, me lo haría pagar muy caro.
Me gusta tu túnica. ¿Practicas la brujería? ¿Del Colegio?
No acepto excusas en mi corte. Cuando pido algo, espero resultados y los espero de inmediato.
Eso es la destilería Amielada. Al parecer hay una gran rivalidad entre ellos y los Espino Negro de Riften.
Acepta esto como símbolo de mi gratitud.
Como consecuencia del saqueo de los elfos en la infame "noche de lágrimas", no sabemos qué fue de Saarthal.
Da la orden, señor, y Carrera Blanca será tuya.
Yo en esto no me meto.
¿Cómo puedo ayudarte hoy?
Si logras azuzar a tu presa para que te ataque ella primero, incluso puedes contar con la ayuda de la guardia local.
Lars, cariño, ¿por qué no sales a jugar fuera? Hace muy buen día.
¡Cómo se atreve ese granuja! ¡Y en mis propias narices!
Así que no hay nada más que decir.
Cuando amanezca ese día, estaré encantado de retirarme del mundo.
Recuerda que tu mente es la mejor arma de que dispones.
¿Y qué es lo que necesitas? ¿Hmm?
Espero que sirvan el venado asado con salsa verde que tomamos en la última fiesta.
¡Patético!
Ahora mismo, hay un grupo de asesinos suelto por la zona, y Ulfric no mueve un dedo para llevarlos ante la justicia porque no amenazan tierras nórdicas.
¡Eh, eso no es tuyo!
Como yo no cuento con el corazón de un dios muerto, he estado intentando sustituirlo con una gema de alma muy concreta. La... aah... la que me ayudaste a conseguir.
¿Tienes algún asunto en los establos?
Necesito otro trago.
¡Quizá podríamos contarnos nuestras aventuras ante una jarra de cerveza, en la posada!
¡Te lo juro! ¡De esa cueva proviene una magia sobrenatural! ¡Se perciben ruidos extraños y luces! ¡Hay que investigar!
Mi padre dice que debemos seguir adelante con nuestras vidas. Como si fuera tan fácil.
¡La Cuenca pertenece a los Renegados!
Cuando llegaste, despotricabas, pero la mayor parte no se entendía. Dijiste algo sobre Paraje de Rorik. Quizás deberías echar un vistazo allí.
Lo siento... Yo... no puedo...
Sí, bueno, no espero muchas más historias como esas en el futuro. Me estoy haciendo viejo. Ser así de asombroso exige demasiados esfuerzos.
Hice demasiadas apuestas en la taberna y estoy demasiado mayor para conseguir el dinero yo solo.
Llevas temblando desde que llegamos a este lugar.
En fin, nuestros almacenes son buenos y los precios, justos. ¿Qué otra cosa importa?
Deberíamos estar luchando contra esas brujas elfas, no postrándonos ante ellas. El emperador no es más que una marioneta de los Thalmor.
No creo que consiga acostumbrarme nunca a este maldito frío ni creo que llegue a entender a los nórdicos... pero he aprendido a respetarlos.
¿En serio? Sí, quizá esa sería la solución. Cuando hablé con ella parecía que se estaba haciendo de rogar.
No lo digas tan alto. Aquí no. Y la respuesta sigue siendo no.
Ha funcionado... Lo has conseguido...
Sí, mi señora. Ese asunto tan desagradable que ocurrió en Helgen se debió al parecer a un dragón. Mató a varios soldados antes de marcharse.
Veo que, durante mi sueño, los mortales se han vuelto arrogantes.
¿Cuál es el precio de la libertad, que se cobra la vida de mi hermano?
Son de la peor calaña. Hasta la Hermandad Oscura sigue una serie estricta de reglas y tradiciones. Estos ladrones son solo chusma.
Estás causando bastantes problemas por aquí. Me gusta. Si alguna vez quieres hablar de lo que sea, dímelo.
Esta noche hará frío. Tal vez te interese al menos cubrir tus partes blandas.
Muchas gracias, señor. Adelante.
¿Puedo ayudarte en algo?
Vamos, deprisa.
Ahora no, Braith. Eh... pregúntaselo a tu padre.
Arkay preserva el ciclo. Nos observa en la vida y en la muerte.
Te dejaré quedarte. Esta vez.
Parece que ya has encontrado a alguien.
Hablan de sucesos extraños en el claro Sombra del Otoño, justo al norte del lago. ¿Que qué opino yo? Spriggan.
Narri, ¿crees que la guerra acabará algún día?
¡Deja de intentar cambiarme, mamá! ¡Ya no soy un bebé! ¡Soy casi una mujer! No... ¡no puedo ser quien quiero!
Está bien... supongo que tenía que contárselo a alguien.
Vamos a atacar Riften. Únete a los soldados que se agrupan para el ataque. ¡Muévete!
Qué... gran idea, mi jarl. No obstante, sugiero que esperemos a que acabe la guerra.
Si alguien ha visto algo, que dé un paso adelante. Si no es así, ¡apartaos del cadáver!
Esta es nuestra patria, Tulio. La sangre derramada en esta guerra es culpa tuya.
Lo sé, lo sé. Ya me doy prisa.
Así es. Vi la luz de Arkay tras la Gran Guerra. Muchos habían muerto a mis manos y bajo mi magia.
De que los dioses te han maldecido. ¿Qué has hecho que sea tan horrible para merecer eso?
Es poco probable.
Su capilla está al noroeste de Largashbur. No sé si te escuchará, pero tampoco nos hará ningún mal.
No, no, no. Lo que tengo que hacer es invertirlo. Atraer la energía armónica hacia el reactivo, para luego aplicarlo con el encantamiento adecuado.
Vamos a tardar siglos en echar un vistazo a todo esto.
Queremos demostrar la superioridad de los mer sobre los hombres de una vez por todas.
Tienes razón, elfo. O los rebeldes, si tienen bastante dinero como para hacer una oferta competitiva.
Por supuesto. Aquí tienes. Que te vaya bien.
No hay que moverse, o esto no funcionará.
¡Olaf!
He intentado crearte protección por aquí. Creo que nadie se ha unido a nuestra pequeña campaña. Por ahora.
Ah, otro juguetito para mi colección.
¡Estás desterrado! ¡Alduin, te expulsamos con un grito de todos nuestros confines!
Voy a encontrarte.
¡Desátame o nunca conseguirás la garra!
El hechizo de Miedo ha salvado la vida de más de un mago de ilusión. Si pudieras lanzarlo sobre el sello del suelo, demostrarías tu habilidad.
Vamos recuperando nuestra inversión poquito a poquito. Y cada nuevo poquito ayuda...
Y luego estaban Borvir y Rundi. Gemelos, pero nunca se ponían de acuerdo en nada.
¿Eres de los Ruiseñores? Oh, no tenía ni idea. Discúlpame.
Si te estuviese amenazando, créeme que lo sabrías.
Por eso tenemos que ir aprovechando lo que encontramos por la tundra.
Administrador, tengo una idea que podría ayudar a levantar la moral del pueblo en estos tiempos difíciles.
¿Por qué no lo has dicho? Ocupa mi puesto. Asegúrate de que nadie entra en el solar.
Oh, a mí me gusta vivir en el salón. Mi madre dice que es un honor vivir allí y servir a Morthal.
¿Qué sucede, cariño? Hoy... parece que tienes la cabeza en otro sitio.
Ah, el plano inmortal. Se dice que es la fuente de toda la magia. La verdad es que es un objetivo noble.
No esperaba menos de ti. Y, una vez más, no me has decepcionado.
Esto parece una especie de rompecabezas de palancas. Tendremos que dar con el orden correcto en el que hay que moverlas.
Te da pereza andar, ¿eh? Bueno, has encontrado el lugar adecuado.
No hay mucho que contar. Hoy en día apenas queda nada, gracias a esos condenados magos del Colegio.
La misericordia de Stendarr no se extiende a nadie que adore a los daedra.
Balgruuf y yo compartimos el vínculo de la batalla. Nos conocimos de jóvenes y forjamos nuestra amistad en el fuego de la guerra.
Mercenarios inútiles.
Al verte, recuerdo mis primeros días en el arte del encantamiento.
¡Ja, ja, ja!
El único nombre que tengo es Niranye. Tiene una casa aquí mismo en Ventalia. Ahí es por donde deberías empezar a buscar.
La posada El bosque trenzado está por allí. Conozco a la posadera, Iddra. Una mujer muy simpática.
Como si supieran exactamente dónde estaríamos. Eso fue... hace dos días.
¡Puaj, apestas! Apártate de mi camino.
¡Alduin, feyn do jun, kruziik vokun staadnau, voth aan bahlok wah diivon fin lein!
¡Llamo a mí ese poder! ¡Aceptad el alma que ofrecemos!
Y ahora, corramos un tupido velo sobre esto, ¿vale?
Zok frini grind ko grah drun viiki, Dovahkiin.
Creo que es mejor dejar enterrado el pasado.
Quiero decir, mira este lugar. Nunca había visto tantas riquezas aquí abajo. Nos has hecho ricos a todos.
Que no vuelva a ocurrir, o te haré encerrar, ¿está claro?
Vamos, padre. Aquí no queda nada que decir.
¿Ya has conocido a Camila Valerio?
Nuestra será la venganza.
Esta caja cerrada dwemer. Mírala y maravíllate.
¿Namira te ha hablado? Sabía que este festín iba a ser algo especial.
Esta es la armadura real, muchacha. Quizá dentro de unos años.
Saludos, pariente. ¿Qué te trae por Carrera Blanca?
Ah, pero Cicerón no puede hablarte. Te has portado muy, muy mal. Creo que tienes que aclarar todo este embrollo con Nazir.
Las cálidas arenas de Elsweyr están muy lejos de aquí.
El verso fue la contribución de Svaknir a la edda poética, la historia viva de Skyrim. Cada bardo contribuye a la edda en su momento.
Estoy deseando ver qué nos depara el futuro.
¡Hundiré mis colmillos en tu cuello, Dovahkiin!
Venga. ¡Levántate! Vamos, los dioses no van a darnos otra oportunidad.
¡Un mago ahí arriba! ¡En la torre!
Nunca. El Colegio no debe implicarse en la política local. Solo nos importa lo que pase dentro de estos muros, no lo que ocurra fuera.
Haelga es una devota seguidora de Dibella, y adora la estatua de la Divina que guarda en el albergue. Úsala para influirla y cederá.
Ese tipo de blasfemias son propias de magos, no de seguidores del camino de la Voz.
Ah... qué tierno. ¡Ven aquí, jugoso bocado!
¿Quién es ahora el idiota?
Compraré todo lo que hayas desenterrado.
Oye, tú, me gustas. Estoy harta de los calzonazos que suelen venir aquí.
Así es. Vamos, hay mucho que hacer.
No puedo hablar. Mulush me azotará si dejo de trabajar.
¡Por los Nueve, pagaría un buen dinero por una pinta de cerveza con la que calentar mis huesos!
Estaremos encantados de poder volver a casa por fin.
Bueno, no te pongas así. Aquí la tienes.
No quiero oír hablar más de este asunto, Harrald. ¿Entendido? ¡Se acabó!
Compra algo o márchate. Esas son tus opciones.
Excelente. Un asentamiento menos en manos imperiales, y una nueva señal de que nuestra causa es la correcta.
Pero sí, los libros. Los tiene la Convocadora. Le interesaba especialmente uno de ellos.
Ah, pero yo solo soy una sirvienta, cielo. Tendrías que hablar con los Compañeros.
¿Has oído hablar de Límite Sombrío? "Abandonada donde las ciudades dwemer dormían, la torre ansiosa guardando ocultas enseñanzas yacía."
Siempre has aprendido rápido.
Muy bien, me encargaré de todo. La próxima vez que visites tu casa encontrarás en ella el nuevo mobiliario.
Estoy segura de que ella querría que fueras feliz, papá. Que entretuvieras a los invitados, que bebieras y contaras chistes atrevidos como antes.
Si esos nórdicos o esos imperiales tuvieran sangre roja en sus venas, esta guerra ya habría terminado.
Te doy la bienvenida a Piezas y Recambios. Estoy segura de que aquí encontrarás cuanto busques.
¿Ya te cansas?
Es una lástima, ¿verdad?
He estado pensando, ¿te gustaría venir conmigo a cazar?
Mi madre era una mujer fuerte... Fue la que me instruyó en las técnicas de esgrima. ¿Te lo imaginas?
"cuando el Sangre de Dragón gobernante pierde su trono y la Torre Blanca cae,"
¿Qué ocurre? Creía que los tuyos estaban acostumbrados al servicio a cambio de alojamiento.
El puesto de Guardián es sagrado en el seno de la Hermandad Oscura. Plantéate lo siguiente: ¿confías en la sabiduría de nuestra señora?
Si ves algo que te guste, dímelo.
Un clan pequeño, puede que veinte hombres. Asaltábamos aldeas, robábamos caravanas... Pero siempre acababa matando a alguien.
Pero, una vez derrotado Alduin, será el turno del Imperio. Recuerda... "Evgir Unslaad".
Visto que ahora el gremio de ladrones se ha asentado en Riften, tal vez podamos echarte una mano si te metes en líos con la justicia. Por un precio razonable, claro.
Solían tener su propio reino, hasta que llegaron los nórdicos. Ahora no son nadie.
Pero son buena compañía si quieres estudiar las artes nigrománticas en paz.
¿Quién se atreve a perturbar mi descanso?
Supongo que le puedo ahorrar unos cuantos golpes. Trato hecho.
El llanto de Hroar no me deja dormir por las noches. Tienes una oportunidad para convencerle de que deje de llorar, o lo haré yo con la correa.
¿Qué pasa, orco?
He luchado en más batallas que años tengo. Paga mi precio y pondré a trabajar esa experiencia para ti.
Me preocupa que, últimamente, venga menos gente a Ventalia.
Me presentó a Gallo, y eso fue todo. Desde entonces estoy aquí.
Te recomiendo no enfadar a Tassio. Es quien está al mando por aquí.
De hecho, si pudieras ir a su taller y recoger mi arma te estaría muy agradecido.
Te compensaré bien por tu tiempo. Nadie notará la falta de unos cuantos lingotes en el próximo envío.
¡Entra, entra! Estaba a punto de tomarme un descanso.
¿Este es el castigo por mi pasado? ¿Es la voluntad de Mara atormentarme así?
No entraremos ahí hasta que los hombres del jarl vengan a exterminarlos. Yo en tu lugar no bajaría.
Aaaaaaaaaah...
Sí, él servirá.
¿Cuentan los perros?
Les aplastaron, claro... Pero los supervivientes, los Renegados, aún acechan en la espesura y hacen que la Cuenca sea peligrosa para la gente honrada.
Entrégamela. Le pediré a Azura que restablezca la Estrella a su pureza original.
¿Te tomarías un trago conmigo, dulce Sigrid?
Repliega esas garras, khajiita...
Habla con el agente corrupto en el puesto avanzado de los Penitus Oculatus, en el Puente del Dragón. Acepta su oro y mata al objetivo. ¡Salve, Sithis!
Mi marido. Era el herrero del Castillo Severo.
¡Pinta ridícula! Como si pudiera lograr que tuvieras una pinta más ridícula que la que tienes ahora.
Me temo que no deberías estar aquí.
Sí, se puede hacer. Precisamente hay un desagüe en las afueras de Lucero del Alba que te llevará a un túnel. Y ya está, podrás entrar y salir por allí rápidamente como una liebre.
Es el edecán de Falkreath. ¿Sabes lo que eso significa? Es el guardaespaldas del mismísimo jarl. Así que ten cuidado.
¡Si Shor quiere, no tendré que preocuparme de eso en años!
Yo preferiría dos botellas de aguamiel a dos rameras, amigo.
Tenemos cierta... desavenencia sobre mis donativos. Ella cree que los habitantes de esta ciudad se han vuelto perezosos y viven de limosnas.
Si necesitas un boticario, en Blanco Vial tienen un catálogo bastante respetable.
Puede que Thongvor sea el cabeza de familia, pero yo soy las manos.
Si estás pensando en enviar una solicitud, habla con Viarmo, en Soledad.
Me he decidido, aunque mis consejeros siguen discutiéndolo. Te voy a enviar a Ventalia.
Es cierto.
Dijo que era escritor. No sé qué clase de trabajo es ese, pero tiene que darle bastante dinero. Ha pagado los próximos meses por adelantado.
Evítalo, si sabes lo que te conviene.
Los diversos puntos focales de energías mágicas que rodean el Colegio se han contaminado y deben limpiarse.
¡Uf!
Siempre y cuando puedas respaldar tus palabras con acero.
No tengo tiempo para perseguir sombras, tengo cosas mejores que hacer.
No tenemos mucho dinero desde que se quemó el aserradero. Mi mujer no me permite que lo olvide.
Cuando se marcharon, él se fue detrás. Robó suministros y libros del Colegio, supongo que como forma de ganarse su favor.
De momento no se me da bien otra cosa que hacer clavos.
Me da igual cuántos colegios construyan o cuánto se trague el mar. Yo les sobreviviré a todos.
Pero yo no soy el Oyente. Oh, no. ¡Tú eres su Oyente! ¡Has oído las palabras! Y pronto todo será como debe ser.
Es tu elección.
No digas lo que no crees.
Maven ha estado dándonos la lata con su petición. ¿Alguna idea?
Hace mucho tiempo que dejé estas cosas.
Controlarlo es conocer. Los fundamentos. La caja cerrada dwemer me lo oculta.
Vale, vale. Eres más agradable cuando bebes.
Cuando llegué, Galo salió de entre las sombras. Antes de que pudiera decir nada, una flecha le atravesó la garganta.
¡Mírate! ¡Ni los cerdos van tan sucios!
Hasta que nos volvamos a encontrar, si eso decide el destino.
No pasan muchas cosas emocionantes por aquí. Si te quedas demasiado, acabarás muriéndote de aburrimiento.
No dejes que tu facilidad en el dominio de la Voz te tiente y te lleve a la arrogancia del poderoso, perdición de muchos de los Sangre de Dragón que te precedieron.
Y eso se nota, he visto horkers con menos barriga.
No es verdad, te lo aseguro.
Un nuevo día, y un nuevo ataque sobre otro asentamiento. No hay lugar en la Cuenca que esté a salvo de los Renegados.
¿Seguro que quieres que recurra a la violencia?
Honramos a los luchadores más valientes, pero he visto muchos tipos de valor en mis viajes.
¡Yyyaaaarrgghh!
Claro que sí. Después de todo, ¿qué sentido tiene estar triste todo el tiempo?
Hemos enojado a Malacath, y por tanto debemos sufrir su castigo.
¡Maldición, tiene que haber alguna manera de salir de aquí!
¿Alzarías tu escudo para defenderla?
Bien, eso es lo que quiero oír. Ahora haz tu trabajo.
Pasé casi diez años en Alto Hrothgar, aprendiendo el camino de la Voz. Entonces estalló la Gran Guerra... y no soportaba la idea de no participar en ella.
Así es. En aquella época se me conocía como Ghorbash gro-Dushnikh, en honor de mi tierra natal.
¿Ulfric? ¿El jarl de Ventalia? Tú eres el líder de la rebelión.
¿Te imaginas lo fantástico que debe ser plasmar en un lienzo lo que ves para capturar esa imagen eternamente?
¿Qué? Lo quieres para esa fresca de Esmerelda, la del plumaje oscuro, ¿verdad? ¡No pienso dejar que te posea!
Eh, tú. ¿Ya has hecho hoy tus ejercicios de voz?
¡Qué bien! Esperaba no tener que recurrir a Onmund.
Ahora que mi marido ha descubierto una nueva religión, cada vez le importa menos en qué gasto nuestro dinero y a qué me dedico cada día. Eso me gusta.
Vuelve cuando te salgan las agallas.
¡El dragón del amanecer de los tiempos, que devora las almas de los muertos!
La gente aquí se deja la piel trabajando y no se permiten ni un momento de diversión. Es una lástima, aunque no durará para siempre.
Toma, coge esto también. Puede que te resulte útil para el viaje.
¡Eh! Para.
¡Están por allí, junto a la casa!
Ah, hace apenas unos días desde que bajaron la última vez.
Ese hombre era, con diferencia, el doble más insufrible que jamás haya servido al emperador. Me alegro de que haya muerto. Ah, pero me alegro aún más de que tú lo mataras.
Da un poco igual, la verdad. La puerta de las escaleras está bien cerrada. Sin la llave, no hay forma de entrar. No te preocupes por eso.
¡No me puedo creer que hayamos matado a un dragón!
Hasta luego, señor.
Demasiada lentitud y estupidez como para que me quites esto.
Ese hechizo parece peligroso...
¡Detente! Quédate donde pueda verte.
Algún día tendrás tu propia fortaleza.
Nos quedaremos un rato por aquí a ver si encontramos algo útil.
Al ver esto supe que tenía que conseguirlo para ti. Espero que te guste.
Ah, una visita. La posada Viejo Hroldan tiene cientos de años de historia.
Te diré lo que haremos. ¿Qué te parece una apuesta amistosa, solo entre nosotros? Te apuesto toda mi bolsa de septim a que puedo derrotarte en una pelea a puñetazos.
Cuando te dije que el set tenía que estar completo, olvidé un pequeño detalle... Sinceramente, no pensé que llegarías hasta aquí.
Por favor, te lo ruego, no le digas a Sibbi dónde estoy. ¡Me matará!
Por supuesto, ya hemos cortado todos los lazos con el mago en cuestión, pero aún hay que apaciguar al jarl.
Que Mara te bendiga por acceder a ayudarnos.
En fin, señor, es una granja. No puede estar tan limpia como su casa de la ciudad.
No sé quién te habrá dicho eso, pero haré lo que pueda. Lo que sí tenemos son muchos libros.
Si vas en serio, dirígete a Soledad. Nuestro cuartel general está en el Castillo Severo. Allí encontrarás al general Tulio, que dirige nuestras fuerzas de Skyrim.
¿Mis qué, cómo? Nunca he tenido un diario, eso te lo aseguro.
Es una pena que el orfanato no permita que nos adopten. Sería el mejor hijo del mundo.
Pagaremos lo que haga falta. Pero necesitamos más espadas para los soldados imperiales.
Pronto nos desposaremos ante el gentil amparo de Mara. Será perfecto.
Acepta un consejo. Esa armadura no te ofrecerá mucha protección en un combate real.
Tú eres de los míos, ¿eh? No te convencen esas aparatosas armas a dos manos.
¿Christer? ¿Está aquí?
Entonces deberías saber que entre Louis y yo hay... algo.
Oíd que aquí llega el Sangre de Dragón.
El lugar más destacado del Colegio es el Salón de los Elementos. Es nuestro auditorio principal para lecciones, sesiones prácticas y asambleas generales.
Muy bien. De haber sabido que ese trato me traería tantos problemas, nunca habría aceptado el oro.
Romlyn, quería hablar contigo. He hecho inventario en la fábrica de aguamiel y nos faltan cuatro cajas... otra vez.
En un día despejado se puede ver la capilla de Azura a kilómetros de distancia. Con eso hicisteis un buen trabajo, eso tengo que admitirlo.
Esta es la llave de uno de los zulos que tengo en el sótano de la fábrica de aguamiel. Puedes coger lo que quieras.
¡Nunca me verán pavoneándome por ahí de ese modo!
Vamos, ¡no podemos detenernos ahora! ¡Debemos continuar!
No, así que lo mejor que podrías hacer es seguirlo en cuanto se vaya de Puente del Dragón. Aunque también hay otra posibilidad...
Ulfric ha muerto y su ejército ha sido destruido. No necesito nada más de ti, pero los dioses, no obstante, puede que tengas planes para ti en alguna otra parte.
Tienes que buscar y matar a Safia, la capitana del barco pirata Ola Roja.
El n'wah de mi padre pensó que podía manejarme... "para continuar con la tradición Hlaalu". ¡Bah! He dejado atrás todas esas tonterías.
Solo nos deja salir al patio una vez por la mañana. Y se queda ahí plantada vigilándonos.
¡Magia! No estoy seguro de aprobar algo así.
No puedes ir abandonando trabajos según te apetece. Vas a hacer que quedemos como un puñado de aficionados. Piensa la próxima vez.
No puedo creer que Grelod esté muerta. No me caía bien esa mujer, pero ser asesinada así, a sangre fría...
El polvo, la humedad... Es asqueroso. ¿Quién quiere pasarse la vida viviendo como un skeever?
Irileth, envía un destacamento a Cauce Boscoso de inmediato.
La mansión de Espira Orgullosa, esa sí que es una casa estupenda. Y está en venta. Si te interesa, ve a hablar con el administrador, en el bastión.
Ejem. Mi mi mi mi. Discúlpame. Estoy, eh, calentando. Nunca se sabe cuándo me pueden pedir que cante una balada.
No hace falta que me lo digas.
Escúchame y tal vez aprendas algo.
M'aiq está cansado. Ve a molestar a otro.
En este negocio no es habitual dar nombres. La identidad depende de la cantidad de dinero que llevamos.
Y como siempre, el chico no tiene carácter en absoluto. Habrá que convencerlo.
Como dije en mi nota, he oído que quizá tu sangre sea de dragón.
Mantente alerta.
Eres libre de tomar cuanto necesites de vez en cuando. Lo repondré cada pocos días.
Entonces la suerte está echada, ¡y una vez más mi espada saboreará la sangre de un Ruiseñor!
Esta biblioteca solía estar llena de volúmenes arcanos. Mírala ahora. Ha ardido prácticamente entera.
Es la señora de la noche y de las tinieblas, y patrona de todos los ladrones de Tamriel.
Creo que ya las voy entendiendo, pero el oricalco me confunde.
Ahora estoy un poco ocupada. ¿Qué querías?
Si quieren mi ciudad, van a tener que arrebatármela personalmente.
Dime, ¿de qué se trata?
Yo... ordenaré sus cosas.
Seré franca contigo. O consigues esa espada, o conservas a tu esposa. Si sales por esa puerta, no estaré aquí cuando regreses.
¿Ah, sí? Qué decepción.
Hoy solo han llegado unas pocas cosas. Cedran dijo que te las llevaría más tarde.
Y ahora, si me disculpas, tengo que buscar nuevos trabajadores para la mina.
Tomo nota de tus inquietudes, legada, pero son infundadas. Te aseguro que esta guerra se habrá acabado en seis meses.
Cariño, ¿has cogido mi pico?
Tengo entendido que este consejo ha sido idea tuya, Sangre de Dragón. Me temo que no espero gran cosa de él.
Vámonos de aquí. Ahora.
Si en algún momento necesitas una espada a tu lado, avísame. No me importaría ver cómo te las arreglas contra unos cuantos troles.
Reconquistaré el castillo de mi familia.
Toma, quiero que te quedes con esto. Era de mi padre, pero estoy segura de que sabrás darle mejor uso que yo.
Un motivo más para rezar por el fin de esta contienda, amor mío.
Me muero por descansar un rato. Te lo juro, podría tumbarme aquí mismo y dormir eternamente.
¡Despierta!
Gracias por salvarme de Alva. Esa bruja me tenía totalmente hechizado. Jamás me perdonaré por lo que le ha ocurrido a Helgi y a mi esposa.
Por favor, mi señor. Tienes que escucharme.
Ya veremos.
¡Has cavado tu propia tumba!
Te doy la bienvenida al Trago del finado.
¡Ja! ¿Y eso debería sorprender a alguien? Este santuario es un desastre. No me sorprendería que alguien estuviese hablando con ese idiota a escondidas y haciendo tratos.
Aléjate de Camila.
¿Tienes problemas de oído? Yo dirijo este horno de fundición, y vamos retrasados con nuestra cuota de plata. ¿Qué quieres?
Bueno, hagas lo que hagas, sigue así y tendrás una cliente de por vida.
Si te haces con el Hacha del arrepentimiento, que está en el túmulo de la Roca de la Escarcha, trato hecho.
¡Eh! ¡Aquí! ¡Sácame de aquí!
Sea de la forma que sea, tráeme esos documentos.
Nunca había visto nada igual.
Cuando te entierren y yo esté al lado de tu ataúd. Ahora, ¡fuera de mi camino!
Espera. Está bien, cielo. Hazle pasar.
Fue hace unos cuantos años. Algunos de los magos se confiaron demasiado y fueron exiliados. De todas formas, no tenían ningún talento.
Tengo un contacto dentro de la embajada. No es que le hagan ilusión estas misiones de alto riesgo, pero podrá ayudarte.
La llamaré "La guía para traducir falmer de Calcelmo". Revolucionará nuestra forma de comprender a esos seres antiguos.
Ese es el espíritu. Vilkas te dará las primeras lecciones.
Ah, creo que te refieres a mi pequeña aventura en barco...
Sin Sam no hay protección. Es hora de morir.
Soy la administradora de esta corte. Sirvo al jarl Siddgeir, y antes serví al jarl Dengeir, que le precedió.
Esos condenados magos... Fue por su culpa que Hibernalia desapareció.
Kolskeggr, arrasada por Renegados, ¿qué será lo próximo?
Ayudo a mi madre Arob con la caza. Traemos mucha comida y pieles a la fortaleza.
Esta misiva debería convencerlo. Cuidado, soldado, porque estos documentos contienen información muy delicada, dirigida exclusivamente a los ojos del jarl.
Yo he empezado a ver a los Compañeros como una especie de familia.
Cuando vuelvas a Riften, dile a Delvin que este nuevo arreglo está funcionando muy bien.
Recuérdame por qué nos molestamos en permitir siquiera que forme parte del gremio.
No solemos tener muchos visitantes por aquí, salvo los que van a Alto Hrothgar, claro.
Lo que tú digas.
¡Socorro!
¡Abalorios brillantes para las señoras! ¡Todos ellos fabricados por el mismísimo Eorlund Melena Gris!
¿Cómo puedo ayudar a un camarada nórdico?
No se puede discutir con estos magos. Te atacan nada más verte.
Y yo me pregunto... ¿qué hará el Sangre de Dragón una vez los Barbas Grises lo hayan invocado? ¿Acaso se pueden enseñar los Thu'um como cualquier otra habilidad?
Date la vuelta y abandona la ciudad. Ese sería el movimiento inteligente.
No sé lo que está haciendo, pero no se saldrá con la suya.
Ah. Lo siento. Bueno, en cualquier caso, me alegro de tenerte aquí.
Los estudiosos dicen que los dwemer eran una cultura avanzada. ¡Ja! Los nórdicos sobrevivieron a toda su raza, así que de nada les sirvió tanto avance.
¿Qué es esto? ¿Una especie de código? "Necesito tanto mineral de hierro como me puedas conseguir..."
¡Estás haciendo trampas!
Te la estás jugando.
¿Seguro que es imprescindible que hablemos?
Pero existe otra opción. Algunos miembros del gremio de ladrones de Riften pueden hacer que se... retiren sus recompensas. Por un precio. Da qué pensar.
Lob ocupará algún día mi lugar, y traerá honor a la tribu de la misma forma que yo.
Sí, probablemente sea lo mejor. En serio, yo que tú no me arriesgaría a irritar a Elenwen.
Una mente despierta es más afilada que una espada. Estoy convencido de ello.
Nos sobrepasan en número, pero tengo un plan.
¿Qué quieres?
Ruinas nórdicas. Antiguas. Herméticas.
Gracias a Talos que has venido... creí que me iba a morir aquí abajo.
Estuvo aquí hace un tiempo. Quería saber dónde conseguir algo valioso. Cualquier cosa, la verdad.
Ahora sugiero que te des la vuelta y vuelvas por donde has venido.
¡Oh, me has salvado! Muchísimas gracias. Quién sabe lo que me habrían hecho si no llegas a aparecer.
Por aquí hay muy buena madera, pero no puedo pasarme el día recogiéndola sola. Toda la gente fuerte está luchando.
Vienen por aquí una vez a la semana para limpiar los cadáveres, llevarse los minerales que hayamos extraído y darle una paliza a los alborotadores.
Si quieres mi opinión, una buena pandilla de hombres y mujeres que arman demasiado jaleo.
¡Hern y yo adoramos las visitas! Estos guardias son unos aburridos.
Todos saben que ese crío, Aretino, está haciendo un ritual con la intención de invocar a la Hermandad Oscura. ¿Quién le va a detener? ¿Yo? No pienso meterme en ese lío.
Maldita sea... Los sacerdotes debieron de activar esta barrera cuando el miasma fue liberado.
Conocí a uno de los jefes de las caravanas, Ma'dran. Dijo que me ayudaría a empezar si le llevaba un colmillo de mamut. Pero es más fácil decirlo que hacerlo.
... robar de los bolsillos, eso sí que es un arte... Nada de violencia, solo coger el dinero y largarse... Psst, la verdad es que no parece muy divertido...
Me pregunto si nos cruzaremos con algunos bandidos que acaben de asar un conejo. Quizás también tengan un barrilete de cerveza.
¡Saludos, ruiseñor! La suerte me ha sonreído y me ha hecho rico. Aquí tienes tu parte, como habíamos acordado.
Pero sé que se dicen cosas a mis espaldas. Cuando entro en una habitación, cesan las conversaciones.
¿Además de porque solo hay un puñado de individuos en Tamriel que reconocen ese idioma?
Entonces has conseguido salir con vida. Ancano tenía razón... Eres audaz.
J'zargo está ansioso por saber qué tal funcionan los pergaminos.
Ah, y esa entrometida, Viola Giordano. Mete las narices en los asuntos de todo el mundo, que por otra parte es lo que le ha permitido ganar tanta importancia.
No. Nos insultas al traerla a la negociación.
Es un auténtico vago, ¿verdad? Enviarte aquí abajo, cuando estoy a un tiro de piedra del bastión.
Uno de los guardias me dijo que había visto aparecer a un mago de la nada. Dijo que era uno de esos monjes psijic. Me da a mí que le ha estado dando al skooma.
Por supuesto. Toma lo que necesites.
Apártate de mí.
Sí, pero era una nórdica. Y noble, además. Un objetivo perfecto para los Renegados.
Pongamos el último trato que hice, unas sales de vacío elaboradas del Colegio de Hibernalia. Se puede sacar mucho dinero si sabes a quién vendérselas.
¿Tú también sientes ese extraño sabor en la boca antes de la batalla? ¿Qué diablos es?
Ya has tomado suficiente. Además, todavía no me has pagado la última.
Estoy seguro de que me será útil.
A veces me sorprende que aún sea el jefe.
Son técnicas sencillas de herrería orca, jefe mío. Nada que no se haya transmitido de generación en generación.
La muerte del Gastrónomo dejará un vacío en el alma colectiva de Skyrim. Eso me complacería.
Te doy la bienvenida, joven.
Vete ahora, o sufre las consecuencias.
Y los mató. En su honor.
Thorald no puede quedar a manos de esos... monstruos.
Eso es lo que quiero oír. Recibiré el informe completo de la legada Rikke. Y entonces...
¡Socorro! ¡Ayuda!
Encontramos una antigua cripta nórdica mientras excavábamos. Ahora la mina está infestada de draugr.
Eh, la gente paga por cosas más raras. Mira nuestro estiércol de vaca, lo vendemos por carretas.
¿Buscas trabajo? Las minas están cerca de aquí. Tráeme minerales y te los pagaré.
¿Eres Sangre de Dragón?
¿Y bien? ¿Puedes hacerlo?
¡No tengo elección! ¡Lo siento!
¿Habéis acabado ya?
Quizá lo haga. ¿Qué opinas de eso?
Pero por voluntad propia abandonó esta existencia para que pudiésemos comprender mejor los caprichos de la vida y de la muerte.
Les has enseñado a esos monstruos que ya no se tolerará su presencia en el Pálido. Buen trabajo.
Por fin.
Te veo débil. ¿No deberías estar guardando cama en casa?
¡Fiik!
Ya era hora. Brynjolf me ha estado dando la paliza con que necesitamos dinero.
Entonces será mejor que tengas algo que yo quiera comprar a toda costa.
La Legión recuperará el control de esta ciudad. Recuerda mis palabras.
¡Siente el mordisco de mi hacha!
¿Crees que no sé lo que te propones? ¿Crees que no puedo destruirte?
Lamentablemente, sí. Los aldeanos la llaman "Grelod la Buena". Su existencia se ha convertido en una especie de chiste recurrente.
Cuídate. Y si alguna vez vuelves por Nueva Sheoth, búscame. Podríamos compartir una tarta de fresas. ¡Ta-channn!
Y lo que es aún más importante, tenemos que rescatar a uno de los nuestros de un fuerte controlado por los rebeldes.
Saludos, caminante. Soy un juglar y despilfarrador ambulante, a tu servicio.
Envié una bendición a Mundus, una plaga debilitante que infectó a unas cuantas aldeas bretonas.
Tu amistad me honra. Espero que este regalo te honre a ti también.
¿Qué me has llamado?
Oye, khajiita. ¡Levántate! Vamos, los dioses no van a darnos otra oportunidad.
Sí, estaré listo en un momento, solo necesito una cosa más...
Tengo once años, y podría contigo.
Me pregunto por qué estará Irileth tan emocionada.
Y así, morirás sufriendo la muerte de los herejes.
Hay unas cuantas verdades sencillas detrás del hecho de que un guerrero le dé a otro su hacha.
¿Y tú? ¿Has... has hablado con alguien? No... Claro que no. ¡Yo soy quien habla, quien acecha, quien ve y quien actúa!
Necesito que me consigas unas cuantas escamas de dragón. Y no unas escamas cualesquiera.
No hay esperanza. Él me lo ha dicho. Tiene razón, ¿sabes?
El sitio perfecto es La yegua abanderada. Habla con la vieja Hulda, ella te mantendrá nadando en aguamiel.
La mano derecha de Ulfric, Galmar Puño de Piedra, ha dado con lo que parece ser el lugar donde yació por última vez la Corona dentada.
Supongo que ahora alguien se quedará con su habitación.
Otro día en este cementerio.
Vaya, ¿de verdad? Bueno, creo que tu nueva compañía precisa de una guía.
Madanach, el rey harapiento.
Tendrán que bastar. Además, si llega la hora de las tortas, seguro que los Pie Nevado vendrán a ayudarnos.
Acabas de llegar, ¿no?
Empecemos otra vez.
El pergamino ofrecerá la visión profunda necesaria para abrir la caja.
Creo que harás más que encajar por aquí.
Vete. Fuera. Antes de que cambie de opinión.
Son una orden muy antigua. Ya hacía cierto tiempo que existía antes de que se fundara el gremio imperial de magos.
Somos el único grupo que queda en Skyrim que se dedica al estudio de lo arcano.
Muchas de las ruinas megalíticas que aún se encuentran en esta región fueron construidas como templos en su honor.
Que así sea.
Por supuesto. Pero no puedo dártela. Es una cuestión de intimidad.
¡Por los Renegados!
Y toma esto. Un regalo del almacén personal del jarl.
No está mal. Me recuerda cuando empecé en la fragua.
Vale. Aquí está todo lo que necesitas saber.
El alma de Malyn no tiene esperanza porque su cuerpo está muerto. Pero yo te mantendré con vida en este lado.
Si fuera tú, iría directo al administrador a revelarle esa información.
Ay, eres un encanto. Gracias.
Lo suficiente como para marcar diferencias en la guerra.
¡Rápido, desátame!
Entonces pierdo el tiempo.
Bien, ¿qué decís, hermanos?
Habla.
Vaya, pero si es quien va por ahí haciendo daño a los demás.
Buen intento, pero no me asustas.
Sí, tienes razón. Probablemente solo te haga perder el tiempo.
A ver, ¿el espliego era una hierba o un veneno? Mmm...
¿Qué has dicho? ¡Lárgate de mi vista!
Sí. Mi colección de artefactos de un grupo que derribó un Imperio.
Tus bolsillos se ven un tanto ligeros, chica.
Me siento como si pudiera derrotar a cualquiera.
Mediante su ensueño, sabemos el parecer de la diosa.
Por más que sea así, no tenemos alternativa. ¡Nadie debe verte! ¡Ahora ve, antes de que se reúnan! Y luego ven a informarme de todo lo que descubras.
Los malditos soldados siempre me pisotean las cosechas.
Cortamos árboles, trabajamos la madera. ¿Qué más quieres saber?
¡Venga, aquí no vale la timidez! ¡Mi día es tu día! ¡Por favor, come, bebe, sé feliz! ¡Aquí, todos somos amigos!
Si buscas conversación, El jarro no es el lugar.
Oh, hechicero, cuanta amabilidad y sabiduría. Sin duda te ganarás el favor de nuestra señora.
Quemar ese banderín fue un buen detalle. Le mandará un mensaje muy claro a las Sombras de Estivalia para que sepan que con nosotros no se bromea.
Se oyen rumores, pero me cuesta creerlos.
Gracias, señora. Se lo agradezco.
No vuelvas por aquí.
Por supuesto, hay otra historia que cuenta que Lenne perdió el escudo de la familia en otra cueva, así que depende de qué historia se crea uno.
¡Escuchad, hijos de la nieve, el relato de una época lejana, del audaz elegido!
¿Eres capaz de dar tu propio dinero para ayudar a mi hijo? Me conmueve tu compasión.
Ojalá lo supiera. Está escrito en un idioma muy raro que nunca había visto.
¡Joor!
Tienes razón, al menos desde mi punto de vista.
Padre, estoy preocupado por Gadba y Mul.
Como si fueras de mi propia sangre. Toma, un regalo.
Nuestras fuerzas de seguridad son limitadas, y todos los mercenarios están ocupados en esta ridícula guerra.
Si puedes aprender a administrar muerte en silencio, tal vez comparta algo de mi poder contigo.
Debemos marcharnos. ¡Ya!
Tengo otras dos personas que quieren negociar el juramento; servirte tanto en la vida como en la muerte.
Llevo tanto tiempo siendo marinero que podría navegar por estos ríos con los ojos cerrados.
Chist... No debes hablar de esas cosas si no estás en la capilla. Solo tú y tus invitados a cenar pueden saberlo.
Si alguna vez pasas por el mercado, comercio con artículos especiales de Morrowind en uno de los puestos.
Necesito que me hagas un favor, Canto Fúnebre
¿Qué? ¿Has olvidado tu juramento al emperador?
He tenido que pedir favores y hacer todos los sobornos y chantajes que he podido, pero por fin te he procurado un modo de salir de la fortaleza.
Si necesitas una habitación, habla con Delphine.
Debo ir a Markarth ahora mismo. Libérame.
Solo intento hacer mi trabajo y no pensar en lo que pasó. Procuro ser feliz en la medida de lo posible.
No se me ocurre una persona mejor para el trabajo, Ruiseñor.
Enthir me la está jugando otra vez. ¡Se niega a entregarme otro objeto más que es absolutamente esencial para mi trabajo!
Hay muchos que ni se acercan por miedo a que esté maldita.
Dibella es la divinidad de la belleza. Es la diosa patrona que cuida de los artistas, de los bardos y de aquellos que buscan los placeres sencillos de la vida.
¿Pero cómo, en el nombre de Akatosh...? ¿Cómo la has conseguido?
Perdona, que me voy por las ramas. Marchando una taza de carne de horker troceada.
Me temo que no. Ranmir no habló mucho de ella después de que se marchara.
He intentado colgar algunos como estos en la ciudad, para avisar a la gente y que vayan con cuidado.
¡Oh! Sí, por supuesto. Ejem.
No tienes tiempo de vanagloriarte por tus logros.
¿Has oído hablar de Talos? ¡Él fundó el Imperio!
¿Adónde...? ¡Bájame de aquí!
No esperarán un ataque desde el interior.
Sé que tienes sobradas razones para aliarte con Karliah, así que espero que les deis lo suyo.
Vienes aquí, matas a mis ayudantes y perturbas mi trabajo... Me has irritado, así que no creo que te dé nada.
Vamos allá.
Cada caravana está obligada a pagar impuestos, pero, a cambio, se reparte una pequeña parte de los beneficios entre ellas, y el líder asigna las rutas.
¡Beberé tu sangre y me daré un festín con tu carne!
Ahora manda el Imperio, ¿eh? Solo es cuestión de tiempo que empiecen a molestarnos esos Thalmoricars... eh... esos justimor... Ya sabes, los elfos.
No tengo muchas oportunidades de salir de la taberna, pero las disfruto cuando llegan.
Supongo que estás disimulando. Soy yo quien te dejó la nota en Ustengrav.
¿Cómo que "y qué"? Tu Imperio está destruyendo todo lo que Skyrim representa. Honor, orgullo y a Talos.
Que tu camino te conduzca a tierras cálidas.
Mi esposa era una buena mujer. A veces era un poco testaruda, pero la quería igual. Dioses, la echo de menos.
¿No? Bueno, entonces será que aún no se ha topado contigo. Pero lo hará. Y tú no creas ni una palabra de lo que te diga.
¡Agh! ¡Basta! ¡Esto se acaba ahora!
Sí, sí. Soy tu hermano y se supone que debo saludarte con respeto. Así que "hola". Ya está, ¿te quedas a gusto?
Vengaremos a Kodlak. Y, antes de que acabe, sabrán lo que es el terror.
¿No has oído hablar de la familia Sangre Argéntea? Son los más importantes de la Cuenca.
Solo quería un poco de emoción. Algo peligroso.
Vamos. Es hora de mancharse las manos de sangre.
Al sur de aquí y al oeste del camino, encontrarás la cueva de Cronvangr. No te acerques a ese lugar maldito que los vampiros consideran su hogar.
Pon las manos sobre mi altar una última vez, y presenciarás el poder de Mehrunes Dagon.
No tenemos alternativa. Es la voluntad de Vaermina.
Nadie en la corte del jarl puede librarse de una acusación de conspiración contra la ciudad. Te vienes con nosotros.
Con las tropas que tiene aquí, Elisif se verá obligada a apoyar su ascenso al trono como rey supremo. Así, él se asegura el trono y su honor queda intacto.
Los discípulos de Kynareth sentían algo sagrado en él, y venían desde muy lejos para oír cómo los vientos de la diosa mecían sus ramas.
¡Grelka! Baja la voz o nos meterás a los dos en un lío.
El Gastrónomo. Es todo un honor.
Mi maestro puede tener poca paciencia, pero he aprendido mucho con él.
Un elixir excelente. Tu técnica demuestra que dominas el arte alquímico.
¿Qué tal, camarada? ¿Cómo puedo ayudarte?
Para un dovah no hay nada más allá de la filosofía. No es casual que luchemos con nuestros Thu'um, nuestras voces.
Hasta que haya héroes valerosos que se ofrezcan a destruir a estos monstruos, es lo mejor que podemos hacer.
¡Ningún nórdico podría haberlo dicho mejor! Estaré a tu lado, Sangre de Dragón.
El Amanecer Mítico mató a Uriel Septim VII y a sus herederos, desencadenando los acontecimientos que condujeron a la crisis de Oblivion, cuando los daedra invadieron Tamriel.
Con gusto te ayudaré como me sea posible.
Toma, acepta este presente como muestra del agradecimiento del Imperio y del mío propio.
Vamos justo detrás de ti.
J'zargo ya ve qué tramas. Muy bien.
Salvo, claro está, que desees ganarte unas monedas extra.
Mi habilidad en combate no tiene parangón. Por suerte para ti, puedes comprarla.
Están masacrando a nuestros hombres ahí fuera. Malditos imperiales.
Pero aunque pudieras llegar al Brillo de los Antiguos, no podrías perforarlo. No con ningún metal normal.
Si pudiera, te cubriría de riquezas por lo que has hecho.
Esto será terrible para el negocio...
El historial de Nenya es intachable. Es la auténtica administradora de Falkreath.
¡No lo sé!
¿Pagarme? ¿Te crees que se trata de dinero?
¿Hillevi, esa nueva remesa de tomates está lista para vender?
Los Renegados... ¡se creen que dan tanto miedo! Cicerón os enseñará lo que es dar miedo. Malditos Renegados...
Tal vez...
¡Por supuesto que la Madre Noche volverá a hablarte! Puede que hable ahora, o luego o... ¡No lo sé! ¡Pero hablará!
Realmente no tengo nada contra ella. Tampoco tiene la culpa de que su marido Torygg fuera comprado por el Imperio.
Me encanta cuando inventas historias. Se ponen mejor cada vez que añades algo nuevo.
Mejor que tengas una muy buena razón para estar aquí...
Busco siempre la forma de reponer mis existencias, así que si por casualidad encuentras cinco de ellos, estaré encantada de quedármelos.
Para ver a través del Ojo de Magnus sin quedarse ciego, se necesita este bastón.
Mara solo ayuda a aquellos que se pueden permitir sus diezmos. Esto es absurdo.
En realidad, admiro cómo manejaste la situación.
Ah, peligroso...
¡Ayarg garag gar!
¡Todos los vivos deben temer a los muertos!
Déjame en paz. ¿Acaso un anciano no puede tener algo de tranquilidad?
Bien, pues...
No se te ocurra correr riesgos. Usa la raíz de jarrin para envenenar la comida del emperador. Vas con ropa de chef..., así que es lógico.
Espero que tu estancia en Markarth te trate mejor.
No debería haber sido así.
Tu Thu'um es poderoso, Dovahkiin. ¡Pero no lo suficiente!
Yamarz rechaza cualquier ayuda, pero siento que tú puedes ser justo lo que necesita.
Comenzó de forma inocente; seguía afirmando que los envíos eran pequeños a causa de la interferencia del Imperio.
¿Sabías que algunas frutas crecen mejor con el frío?
No le prestes atención. Es un charlatán, como todos los generales imperiales.
Pareces necesitar un arma nueva. ¿Algo grande, quizás? ¿Tal vez un hacha? ¿O un mandoble?
Vamos a eliminar a su centinela, luego nos colaremos en el campamento y les tenderemos una emboscada.
Mir... ¡Tah!
Nuestra familia es la única que se preocupa de verdad por Hibernalia.
¿Necesitas algo? Lo que sea por el gremio.
En cuanto su cadáver yazca frío sobre el suelo, y todo rastro de sus seguidores haya desaparecido, recupera mi Cota de ébano. Un don digno solo de mi verdadero adalid.
¿Así que trabajas con ellos? ¿Acaso crees que puedes conmigo? Ponme la mano encima y te aseguro que perderás dedos.
Larak es fuerte, pero tiene mucho que demostrar como jefe.
Un grupo se ha ocultado en Carrera Blanca.
¡Sí, por supuesto! Pero, ¿cómo pretendes obligar a un dragón a que hable?
¡Abatid a ese maldito hechicero!
La capilla de Namira está más adentro. Sigue.
¿Crees que esto es personal?
Bueno, míranos. Parecemos dos manchas grises en la nieve.
Más vale que vuelvas a Carrera Blanca cuanto antes. El jarl Balgruuf querrá saber lo que ha ocurrido aquí.
Espera un momento... ¿detecto un atisbo de genuina avaricia de tan noble ladrón?
Ya supongo... dudo que poseas el conocimiento suficiente como para dañar el Vial a propósito.
Ahora está en tus manos. Juntos conseguiremos maravillas...
¿Estás de broma? Desde que cambió la suerte del gremio, estamos pasando por una mala racha económica.
No lo sé, nunca me lo dijo.
Está muerta. Laelette está muerta.
Nunca me pierdo una buena comida.
Gracias de nuevo. Me cuesta creer que casi me asesinaran.
Estoy componiendo una nueva canción. Es una balada para Camila Valerio.
No. Son altos magos que acaban de llegar de Alinor. Supongo que a Su Ilustrísima por fin le empiezan a preocupar los ataques de los dragones.
A grandes rasgos, ayudó a Alduin a esclavizar a nuestros antepasados. Puede que al final traicionara a Alduin, pero eso aún lo hace peor, no mejor.
Si quieres coger a esos ladrones, deberías dirigirte a las Cataratas Lúgubres, al noreste de la villa.
Iré contigo, pero quiero una explicación cuando todo esto acabe.
¡Insolente! Está pervirtiendo mi Luz.
Ese sacerdote de Mara que vino antes que tú dice que los Divinos nos curarán.
Si de verdad perteneces a los Sangre de Dragón, querrán hablar contigo. En las viejas historias, siempre convocan a los Sangre de Dragón para instruirlos.
Si no hubiese sido por Paarthurnax, nadie habría podido derrocar a Alduin. Fue él quien enseñó a los primeros hombres a usar el Thu'um.
Tú... ¡Aquí, rápido! ¡Antes de que aparezcan!
Gracias. Ya casi había perdido la esperanza.
Sí, señora. Sé que tengo mucho trabajo por delante.
Tú sigue con ello, o Mulush te dará una paliza.
Bien, ya has llegado. Mira, en Paraje de Ivar hay una bárbara hermosa. Ha de morir. No me preguntes por qué. Tan solo, hazlo. Con este dinero bastará.
Algunos dicen que el pantano se la llevó. Parte de mí desearía que fuera así de fácil.
...
¡Basta de juegos y enfréntate a tu muerte!
Te lo he dicho, se casa Vittoria Vici, una mercader muy bien relacionada con la Compañía del Imperio Oriental. La prima del emperador, ¿recuerdas?
Si tienes algo que te cuesta vender, yo puedo librarte de ello.
¡Atácame y no descansaré hasta cazarte!
De hecho, sí, archimago. Así es.
Arnbjorn está a salvo, y te doy las gracias por ello. ¿Pero qué ha sido del loco? ¿Ha muerto Cicerón?
El Imperio podría intentar recuperar Skyrim, y necesito que todos estén preparados para eso. Aunque la mayor amenaza son, desde luego, los elfos.
¡Escucha mi Thu'um! Siéntela en los huesos. ¡Iguálala si es que eres Dovahkiin!
Como se suele decir, iremos hasta Oblivion y volveremos.
¡Uf, cómo me aburro! Solo he combatido una vez en las últimas semanas. Me estoy volviendo loco.
¡Alto como el rugido de la Melena!
Hemos hecho una oferta justa. Si tienes un interés serio en esta tregua, debes reconsiderarlo.
Ah, placas de acero. Esa armadura sí que es sólida, buena elección.
Arngeir. Rok los Dovahkiin, Strundu'ul. Rok fen tinvaak Paarthurnax.
Sigo creyendo que mi muchacho debería casarse en una boda nórdica tradicional. En el exterior, sintiendo el frío aire de las montañas.
Estás casada, ¿no? Con ese joven herrero, ¿verdad?
Magistral. Una obra de arte, sin duda.
Espero que encuentres la ciudad a tu gusto, thane.
No estoy construyendo un barco, señor, solo quiero cultivar cosas.
Ve ahora al Castillo Severo de Soledad. Muestra el salvoconducto del Gastrónomo al oficial al mando, el comandante Maro. Seguro que te acuerdas de él.
¡Tus artimañas no me confundirán!
Vas a venir conmigo y a asegurarte de que no tengo problemas para llegar hasta ese gigante.
Solo estoy haciendo unos recados para el anciano... Esto... míos, quiero decir. Estoy haciendo unos recados míos.
¿Has venido aquí para atacarme? Esta vez estoy en guardia contra ti.
Parece que una manzana madura te sentaría bien. ¿O un tomate, una col o un puerro?
¿Adónde iba a ir? Lucero del Alba es mi hogar y este es mi trabajo.
Dado que te tomaste la molestia de pedir consejo al augur, pensaba que mostrarías más entusiasmo.
No quiero echar raíces. Me gustan las cosas como están.
Es hora de preparar más registros sobre el comercio de plata.
Claro que tengo un pasado oscuro, pero es agua pasada.
Sigo aquí.
¡Pero papá iba a llevarme a cazar mañana!
¡No puedes escapar de mí!
¡Bien! Vamos a buscar pelea.
Ya no son horas para andar vagando por ahí, ¿no crees?
¡Por todos los dioses! ¡Fijaos en eso!
Los prisioneros están en baja forma, como siempre.
Peor que eso. La pérdida de cargamentos a manos de los Renegados nos está afectando mucho.
Entonces está decidido. Tú y yo.
Cuidado, cuidado, que viene el Sangre de Dragón.
No me malinterpretes. No te estoy criticando. Fue un buen asesinato, y esa vieja se lo tenía merecido. Y para rematar la faena, has salvado a un puñado de golfillos.
Yo rindo culto a Peryite, sí, porque hay ocasiones en las que solo las enfermedades pueden purificar al mundo.
Sí... Lo tengo todo.
Pero con el tiempo hice las amistades adecuadas y demostré mi utilidad lo suficiente como para que no me vuelvan a causar problemas.
Rexo. Los objetos.
¿Qué clase de acuerdo? Necesito saber los términos.
Una vez que se abra esa infernal caja de seguridad, habrá dejado de serme útil.
Hay hierro de sobra para excavar.
¿Qué?
Es demasiado estúpido para recordar dónde estaba, y mis numerosos intentos por encontrarla han sido en vano.
Lo siento, pero una chica tiene que ser precavida.
Necesito a alguien con quien practicar unos hechizos. Nada peligroso, en serio. ¿Quieres prestarme tu ayuda?
¡Adiós!
¿Me has oído?
¡Quién sabe qué maravillas podría otorgaros este elixir!
Que era oscuro y horrible y que ya nadie quería vivir allí.
Oigámoslo.
Lárgate, visitante.
No me caes bien... Creo que lo tuyo es herejía.
Y ahora, si quieres coger a esos ladrones, deberías dirigirte a las Cataratas Lúgubres, al noreste de la villa.
Eso sí que es un puñetazo.
¡Entonces eso será lo último que digas, idiota!
Dicho eso... Si atacas a Virane en presencia de algún testigo, a esos guardias de Markarth no les va a hacer ninguna gracia...
Desde luego. ¿Qué tal te desenvuelves en combate, muchacha?
¡Es hora de poner fin a este juego!
¡A ver si aprendes modales!
Hace tiempo fui dueña de una tienda en Vivec, pero tuve que dejarla en cuanto la Montaña Roja entró en erupción.
Lo único que me importa es mantener a salvo a mi mujer. No dejaré que nadie le haga daño.
Doy esta conversación por finalizada.
¿Qué tal todo hoy en la mina?
Brynjolf, ¿eh? A ver si lo adivino... Te encontró en la calle y te metió en medio de todo el follón sin decirte ni lo que está pasando, ¿verdad?
Un vampiro infectó hace mucho a un buen amigo mío. Mi amigo prefirió suicidarse para no convertirse en una de esas... cosas.
Los dwemer fueron los últimos que la tocaron. Se creía que la habían destruido los nerevarinos, pero mi señor me dijo que no fue así.
Bien. Con el tiempo todo será revelado. Cumple con tu misión y Azura te recompensará.
Solo me duele cuando me río. Je, je, je. Aaay...
Tú, otra vez. Supongo que te hace falta otra lección, ¿eh?
Es un momento triste.
Tenemos plena confianza en ti y en la mano de Ulfric.
Tengo asuntos que debo atender, pero habla.
¿Por qué? ¿Te parece divertido?
¡Muere, maldita sea!
¡Has venido! ¡Has venido a escuchar la palabra de Talos!
¿No? ¿Y te da igual pudrirte en una celda durante un mes?
Este metal servirá bien a la forja, hermano mío.
El tipo de cosas que ni siquiera el Colegio toleraría. Cosas que pueden suponer el exilio a perpetuidad de un hechicero.
Ah, has regresado. Me ha gustado luchar a tu lado. Estoy seguro de que la gente tardará en olvidar esa boda, ¿verdad?
No he dicho eso. Es solo que no hay muchos como tú que quieran unirse, eso es todo.
Los elfos oscuros están inquietos. Hay un asesino suelto. Y Viola Giordano no me deja en paz.
¿A qué viene todo esto? El hombre con el que me casé nunca hablaría de abandonar su hogar.
Es increíble el follón que Kleppr me dejó montado. Con él muerto, tengo el doble de trabajo.
Tengo frío, tengo hambre y estoy agotada.
Yo debo quedarme aquí para ver si puedo atrapar a Ancano y acabar con todo esto. Necesito a alguien de confianza para hacer esto.
Hemos de maniobrar más rápido. Desequilibrarlos.
Sí, el Verdeoro. En este momento da pena verlo. Es más un problema para los peregrinos que para mí, pero ya no quedan muchos de ellos por aquí.
He oído que te vas a pasar toda la vida aquí. Qué triste. Yo conseguiría un pincho si fuera tú, o al menos algo de skooma para ahogar tus penas.
Pero ten cuidado. Se dice que allí habitan dragones.
Espero que la vida te trate bien.
La puerta está abierta. Puedes entrar cuando quieras.
Bueno, pero no nos anticipemos. Es demasiado pronto para entusiasmarse. Aun así, esto es esperanzador.
Oh, esto no va a acabar bien...
El crimen ha alcanzado cotas históricas en esta ciudad por culpa del gremio de ladrones. ¿Es que no tenemos suficientes problemas ya con la guerra?
Debí haber sabido que eras un roñica.
Evito ir a la Marca Oriental siempre que puedo. Hay algo en el aire... Creo que es porque está demasiado cerca de la frontera.
¿Has venido a comprar ébano? Nuestra mina de la Melancolía está algo escasa de vetas negras.
Es un placer hacer negocios contigo.
Cuando Galo echó un vistazo a esa estatua, supo que era especial, y se la llevó directamente a Enthir, en el Colegio de Hibernalia.
No, no lo he visto. No me digas que lo has perdido.
Como desees, señor.
¡Ya estamos con el aguamiel!
Vio cómo nos la comíamos y lo mucho que nos gustaba y... estaba... tan orgullosa...
No eres como yo esperaba, Sangre de Dragón. Nos tratas con respeto, aunque es bien sabido que simpatizas con el Imperio.
Tráemelo en cuanto lo encuentres, sin dudarlo. Lo pondré a buen recaudo.
¿Entonces has visto el Verdeoro? Un árbol grande, todo quemado, en mitad del distrito del Viento.
Bien, tengo una serie de asuntos que hay que solucionar.
¿Qué es lo que quieres... gato?
Sé que no creías perder gran cosa cuando la cediste al enemigo. Pero las tropas que tengo protegiendo la frontera estarían mejor aprovechadas en el frente.
¿Estás herido? ¿Qué ha ocurrido?
Apiádate de mí, señora, dame unos pocos septim.
Vale, vale, no nos precipitemos.
Te lo agradezco. Tengo mucho trabajo por delante.
Ah, pero supongo que esperas que te recompense. Eh... toma, con estas pociones debería bastar.
Seguro que aquí abajo hay una forma de salir.
El encargado de la seguridad es un hombre llamado Volto Agallon. Su labor es viajar por todo Skyrim y asegurarse de que todas las ciudades están preparadas para la visita de Mede.
Entonces no tenemos elección. El miasma debe ser liberado.
El secreto está en mi fragua. Consume sales de fuego, un extraño mineral tan caliente como la lava de la Montaña Roja.
Si deseas seguir disfrutando de la hospitalidad de esta ciudad, no hagas caso de semejantes rumores.
Son muy populares entre la nobleza de allí, sí. Esta en concreto es una copia de una que llevaba una princesa de la Corona.
Desde que hui de Morrowind nunca he carecido de las visiones de futuro de Azura. No sé qué hacer.
No. Puedes usar la puerta norte, o puedes dirigirte a la siguiente ciudad.
Hasta los muertos necesitan compañía. Eso es lo que proporciona Arkay.
Al final del día, descubrirás que lo único que nos importa aquí abajo es el dinero que nos haces ganar.
Que tu próxima batalla sea victoriosa, camarada.
¡Con los brazos abiertos, vítores y canciones! ¡Con alegría en el corazón y lágrimas en los ojos!
Oye, estoy empezando a respetarte. Aparte de Aerin, siento que eres la única persona en la que podría confiar.
¿Hjerim? Bueno, no sé lo que piensas que vas a encontrar ahí, pero puedes ir a echar un vistazo si quieres.
¡Ja! ¡Lo he pasado peor en los entrenamientos!
Ven con nosotros. Debemos salir de aquí.
Créeme, no fue nada que pretendiera hacer. Yo... perdí el control.
Lo siento, Mercer... No quieren seguir tomando parte en nuestra operación.
Guíame.
Alguien de los invitados, que se encuentra mal. Deja que se quede, pobre...
Y para probarte mi... sinceridad, he pedido un contrato. Ahora tú diriges esta familia. Te entrego la Hoja de la aflicción para que puedas cumplir con tu cometido.
¿Qué sucede? ¿Y quién te acompaña?
(Exhala profundamente)
¿A Maul? Sí. Ese idiota ahora trabaja para Maven Espino Negro. Me dejó aquí abajo, vigilando este montón de basura.
Tenemos que avisar al jarl Balgruuf en Carrera Blanca para que envíe tantos soldados como pueda. Si haces eso por mí, estaré en deuda contigo.
¡Por los huesos de Shor! Un hombre guapo en Falkreath.
No me dejas elección.
¡Auch, eso tiene que doler!
Habrá que volver al trabajo, supongo. Nunca va a faltar el estiércol que mover a paladas.
No sé si la guerra se debe a la voluntad de Arkay o a la del hombre, pero desde luego yo no he tenido nada que ver.
Vinimos aquí para abrir un aserradero. ¿Cómo íbamos a saber que a los nórdicos les importaban tanto unos árboles viejos?
Igual, entonces.
Estas cuevas... albergan malos augurios, puedo sentirlo.
Alduin mahlaan
Te enfrentas a fuerzas muy poderosas. Ten cuidado de que no te superen.
Dile a Delvin que puede contar conmigo para ponerse en contacto con las personas adecuadas cuando lo necesite.
Toma esto. Has hecho un buen servicio al comercio de Cauce Boscoso.
Junto esto con el mapa de lugares de enterramiento de dragones de Delphine, y creo que he identificado a uno de los dragones que Alduin ha alzado.
Los guardias son inútiles. Se limitan a estar ahí plantados esperando a que venga un regimiento a ayudarles.
Es algo que no ha sucedido en... siglos. ¡Desde que el mismísimo Tiber Septim fue invocado cuando aún era Talos de Atmora!
Entonces, ¿todavía necesitabas mi ayuda?
Sí, mi señora. Lo siento, mi señora. Estarán terminadas.
¿No piensas en nada más que en bañar en sangre tu hoja?
¡Toma esto!
Siendo un humilde siervo de Mara, no tengo dinero ni oro que darte, pero tal vez pueda ofrecerte algo mejor... compañía.
Si necesitas tiempo para prepararte, lo entiendo. Avísame cuando estés a punto.
Tu paga, como de costumbre.
Bolli es un buen hombre; nos paga bien y vela por nosotros.
Ahora este es mi reino. ¡He sacrificado demasiado para permitirte que me lo quites!
Pretendo pasar el resto de mis días en el mar. Es el lugar al que pertenezco.
Te aseguro que estaré vigilándote. Os estaré vigilando a todos... muy de cerca.
¿Qué puedo hacer por ti, Alva?
Un adorno de oro macizo con forma de garra de dragón.
Skyrim es famosa por estar llena de esos... draugr, antiguos guerreros nórdicos que no pueden hallar la paz.
¡Ajá! Creía que nunca lo descubrirías.
Excelente. Ahora tienes que venir conmigo. Te has convertido en parte de esto y tienes que estar presente en el ritual.
¡Margret!
Lo siento, pero ahora mismo no ofrecemos a ningún niño en adopción. Deberías irte.
¿Esta guerra mía? ¡No es mi guerra, Seren!
Fabuloso. Venga, esto es lo que tienes que saber.
¿Qué estás haciendo aquí? Se supone que tienes que encontrarte con Malborn en Soledad.
Te conozco, Ulfric. Si entregas Markarth, tendrás una nueva exigencia.
Ahg... ¿Y si te cuento lo que sé sobre un gran cargamento de plata y armas?
Has llegado lejos, mortal. Sin duda, quieres entrar en el sagrario de Potema.
La nueva parte mejorará tu habilidad más que la original. Créeme.
Si no fuera por Aerin, el joven que me salvó la vida, creo que ya me habría rendido hace mucho.
Presta atención y a lo mejor aprendes algo.
Cuando estaba escondido vi que a uno de los guardias se le cayó esta llave. Seguro que te resultará útil. ¡Date prisa, por favor!
Esto es lo que pasa en esta ciudad cuando dices lo que piensas.
Demuéstranoslo, Sangre de Dragón. Déjanos oír tu Voz.
Desde luego. Vamos.
¡Si veo a Frey, le voy a arrancar los ojos con mis propias manos!
¡Oooh, estupendo! ¡Estoy deseándolo!
Bien. Siempre puedo contar contigo, ¿verdad?
Si no fuera por la guerra, podríamos haber tenido suficientes guardias para proteger el asentamiento. El regreso de los dragones en este momento, es una desgracia.
Esperaba que dijeses eso.
Sea lo que sea lo que vas a decir, no te molestes. No quiero oírlo.
Les preocupa que Tulio esté tan obsesionado con la guerra que olvide qué es lo mejor para el pueblo.
¡No sé qué hace allí arriba, pero no pienso quedarme para averiguarlo!
Solo una. Sé que, cuando me encontró mi padre argoniano, estaba envuelto en una manta con el símbolo de la Casa Telvanni.
A ver si podemos encontrar una forma de salir de aquí.
Tienes visita.
Pero me olvido de mí mismo. Krosis. So los mid fahdon. La melancolía es una trampa en la que los dovah caemos con facilidad.
Mi talento es útil aquí. Ayudo a mantener el orden, aunque no se note demasiado.
Estoy aquí para estudiar conjuración. Es lo único que importa.
Phinis es uno de los mejores conjuradores de toda Skyrim y seguro que puede ayudarte con los hechizos de esa escuela.
Si tienes alguna joya que vender, será un placer pagarte una justa cantidad de oro por ella.
¿"Hasta aquí"? ¡Pero si vivimos en una cloaca! Me dijiste que a estas alturas ya tendría una casa como la de los Espino Negro.
Si me trajeses ese Kel, ese Pergamino antiguo aquí... al Tiid-Ahraan, a la grieta temporal...
¿Eres mi galante héroe? ¿Has venido para mostrarme una vida de aventuras y romance?
Maramal me ha ayudado cuando las cosas no iban bien. Solo quería devolverle el favor. ¡Tampoco se lo va a quedar!
Supongo que tienen tan pocas ganas de que se acabe el mundo como nosotros. O, al menos, preferirían acabar con él a su manera.
¡Puedes pisarnos cuanto quieras, volveremos a levantarnos!
No tengo tiempo para tonterías.
Como portador de los fragmentos, tú deberías ser quien porte a Wuuthrad en la batalla.
Es una viajera, de la Ciudad Imperial. Venía a diario en busca de joyas para su familia en su tierra.
Las verduras son el alimento de los Divinos.
Me dijo que era de Laberintia y que yo sabría cómo utilizarlo cuando llegase el momento.
¿Es que no nos puede dejar en paz?
No hemos terminado.
¡Hola! Me preguntaba si me toparía contigo aquí afuera.
Vah... ¡Koor!
Muévete. Voy a ver si puedo retrasar a alguna patrulla ahí fuera.
Voy a quedarme un rato a descansar entre estos huesos. Esta criatura nos ha honrado con su vida, y la honraré con mi respeto.
Espera un momento. Supongo que, eh, por el bien de la investigación... podría darte alguna moneda más. Dos veces y media su valor, es todo cuanto tengo.
Se llama Stig Tabla Salada, uno de los capitanes de los Horker Sangrientos.
Está bien. Has encontrado una amiga que te comprende. Puedes olvidar tu culpa.
¿Qué es lo que quieres de nosotros?
Si no te importa cavar, la mina de azogue es mía. Es una vida mejor que trabajar en la mina Rompedor de Hierro, con todos esos bebedores de leche.
Para ser una buena profesora necesitas dos cosas. Primero, paciencia. Y segundo, una buena vara para darles en los nudillos.
Los draugr están abajo. Saben fatal.
La forja es fuerte, y también nuestro jefe, Larak. Estoy satisfecha.
Sé que estos duros tiempos nos ponen a prueba a todos. Muchos vienen al templo de Kynareth a orar, y los ayudo de la mejor forma que puedo.
¡Que no se salga con la suya!
No quiero morir. ¡No puedo morir aquí!
¡Carga contra mí!
Ya tienes lo que habías venido a buscar. Ahora vete.
¿Hola? ¿Quién va?
Tú. Cada vez que te miro, me hierve la sangre.
Puede que no sea algo "oficial", pero hay un... eh... un proyecto en el que he estado trabajando.
Bien. Y recuerda, protege a los dioses y ellos te protegerán a ti.
Lo hago por diversión. Eres una muchacha encantadora, deberías probarlo alguna vez.
¡Yyyyyyyaaaaaahhhhhhh!
Ven a verme a Ventalia cuando todo esto haya terminado, y encontraré un lugar para ti.
Estoy cansado, llevo semanas sin dormir bien.
Es lo menos que puedo hacer para agradecerte que nos ayudases a cerrar el caso.
Discúlpame, mi señora. ¿Te gustaría oírme tocar el laúd?
¡Lo sé! ¡Lo sé! ¡Acabo de recibir la noticia hace unos momentos! ¡Ja, ja! ¡Esto es glorioso!
A cambio, se te pedirá que defiendas el Sepulcro del Crepúsculo y todo cuanto contiene en caso de necesidad.
Usó el Thu'um. Expulsó a gritos a esos Renegados de los muros y luego lideró a un grupo de guerreros hasta tomar la ciudad.
Si fueran tan fáciles de matar, ¿no crees que lo habríamos hecho hace años? Si nuestros hombres no salen en unos minutos, es que están muertos. Créeme.
Sin embargo, puedo ofrecerte ayuda para combatir a sus esbirros. Esto debería ayudarte a sobrevivir a las catacumbas.
(Se ríe)
¿Más trabajo? Pero si aún no has finalizado los dos últimos contratos que te asigné. Acaba esos antes, ¿de acuerdo?
Ve y cumple el encargo de Muiri. Habrá muchos más, te lo prometo.
Permíteme que te dé esto. Es el tenedor que utilicé la primera vez que probé uno de tus platos. Ah, y estos son los ingredientes que he estado reuniendo para ti.
Vístete.
No. Ni Ranmir puede beber tanto.
Viene a celebrar los ritos insultantes de Boethiah en mi altar, pero ha desaparecido.
¡El Wabbajack! ¿Eh? ¿Eh? No lo has visto venir, ¿verdad?
Esto es simplemente fascinante.
Y ahora, para demostrarme tu lealtad, te encomendaré una misión. Coge mi hacha y llévasela al jarl de Carrera Blanca.
Por los Divinos todopoderosos. Has venido. Realmente has venido. Este espantoso Sacramento Negro... ha funcionado.
Nunca he oído hablar de nadie así. Pero si uno quiere esconderse en Riften, el mejor sitio es la Ratonera.
Solo has realizado el juramento, suscrito el contrato verbal con Nocturnal.
Tienes mi agradecimiento.
Tendrías que decírselo al jarl de Carrera Blanca. Necesita saberlo.
Me alegro de que fueras tú y no yo.
Llevas la armadura de un bandolero. Más te vale no causar ningún problema durante mi guardia.
Oh, lo hará, recuerda lo que te digo. Y no se lo permitas.
Ya hemos visto tu pequeña arma. Estamos impresionados. Ahora, por favor, guárdala.
He viajado muy lejos para poder ofrecer esta magnífica mercancía. Ven a ver el género.
No te preocupes, Rhiada. Si viene algún Renegado a llamar a nuestra puerta, Nana te lo dirá...
¿Por qué haces eso?
Por eso debemos permanecer neutrales. Nuestro deber es contar la historia de los Imperios, no hacerlos ni deshacerlos.
La verdad es que aquí la deuda es lo de menos. Lo más importante es que dejes claro que no se nos puede ignorar.
Paparruchas. ¿Acaso un niño que aprende a leer no es un "erudito" en literatura? ¿Acaso el aprendiz de un herrero no es un "erudito" en el campo de la herrería?
Ten cuidado allí arriba.
Veo que se te ha permitido conocer algunos secretos antes de tiempo. Tanto da. Sí, es cierto.
Pues déjame ver... ropa sucia de tanto viajar, suelas gastadas, expresión vacía y carente de inteligencia... Sí, yo diría que sí.
¡Fenrig! ¡Estás vivo!
Gracias.
Yo tenía que organizar una degustación de la nueva reserva de la destilería Amielada para el capitán de la guardia.
No voy a pedírtelo otra vez.
Aquí estás.
¡Vamos! ¡Tenemos que ir dentro antes de que vuelva ese dragón!
Creo que me forjaré una nueva espada, por si las cosas se torcieran por aquí en Soledad. Es que soy el aprendiz de herrero.
No, pero su edecán nos ha enviado una carta.
Pues claro que puedes invitarme a un trago... No tenías que decir ni una palabra, pero te he oído alto y claro.
Él la adoraba y se lo consentía todo. La dejaba trabajar en la fragua y todo. La echo tanto de menos...
Claro, sabe fenomenal. Solo hay un problema. Me dijiste que podía volver la oscuridad clara como el día cuando lo bebes. ¡Y adivina qué! No funciona.
Podrías haber preguntado antes de cogerlo.
Si esa arma rompe mis mercancías, vamos a tener un serio problema.
Te vuelvo a dar la bienvenida a este templo.
Synda... Ayer volviste a dejarte la daga. Te tengo dicho que el camino no es seguro.
¡Que te vayas!
¿Qué le has dicho? ¿Por qué me has hecho esto?
¡Espléndido! Había estado buscando un nuevo inversor. Parece que mi búsqueda ha acabado.
Será mejor que te acostumbres. En Ventalia nieva casi todo el tiempo.
Me gusta divertirme un poco. ¿Y qué?
¿Sabes? Me da la impresión de que no caigo bien a casi nadie en el Colegio...
Te prometo que todas tus preguntas tendrán respuesta. Solo tienes que confiar en mí.
Él ha salido a su padre, y ella a ti.
¿Te vas a quedar como un pasmarote o quieres comprar una armadura?
Los caminos de Skyrim son muy peligrosos. Ten cuidado, si viajas por ellos.
Gracias por haberme informado de la felonía. No te preocupes, yo me encargo.
Piénsalo. Somos los primeros que entran aquí en miles de años.
Supongo que querían sus objetos de valor. Siempre se dejaba ver con demasiadas joyas. Cuando le dije que iba a acabar mal, nunca supuse que...
Estás hablando con un asesino, no lo olvides.
Da igual, eso no importa. Tienes que irte. Ya.
Vale, lo entiendo.
Se llaman los Dedos del herrero. Llévalos ante nuestro jefe y él decidirá si eres digno de formar parte de la hermandad de los orcos.
Prodigan el amor de su padre. Esta vez no nos podemos arriesgar.
¡Ah! ¡Quema!
Parece que no se te da tan bien lo de desvalijar a la gente como creías...
Sí, madre.
Lo conseguiste. Lo has matado. Ahora desátame antes de que aparezca otra cosa.
Algo siempre va mal. El aserradero necesita más madera o la cuchilla de la sierra se queda sin filo.
No te molestará este asunto, ¿verdad?
Ya has superado mis enseñanzas, y eso es todo un logro. No creía que fuera posible.
Acércate a la luz para que comience la prueba.
Yo regento el puesto de carne y verduras del mercado. Ven a verme si quieres probar la comida más fresca de tu vida.
Tengo trabajo que hacer.
Bueno, ¿qué quieres?
¡Venga, en marcha! Trataré de despejarte un camino.
Oh, ahórrate tu modestia. Hablo sobre tu nuevo papel de adalid. Al parecer, has tomado a mi pueblo bajo tu protección.
¿Te ves con ánimo de cazar un poco? Mi marido está aguándome la fiesta, así que no puedo hacerlo en persona.
Luego está Ingun Espino Negro. Un joven brillante y un aprendiz digno, cuando no está desperdiciando mis ingredientes extraños.
Si te digo la verdad, no. Siempre he soñado con ver nuevas tierras y no viene nada mal que estemos haciendo un buen dinero.
Mmm, sí... Brelas, ¿no? Espero que no estés pensando en dejarme de lado, ¿verdad? Ja, ja.
Quién iba a pensar que me casaría...
Algo tan específico y antiguo como el Bastón de Magnus... No sé si podríamos encontrar algún día algo así...
Perdí el ojo defendiendo el Imperio... ¿Tienes algo de comida para un veterano?
Además se rindió de una forma muy dócil. Al cuerno con su reputación de morir antes que someterse.
¿Qué pretendes? Vamos a recoger los tesoros de este sitio y marcharnos.
Coge este maldito chisme. No quiero volver a verlo nunca más.
Tu destino será elección tuya. Como siempre lo ha sido.
Al ser los maestros del Thu'um, podrían matarte pronunciando una sola palabra.
Espero que te vaya bien la caza, hermana. Esos cobardes se dan a la fuga.
Yo vigilaré a Mercer, tú consigue la información que necesitamos.
Tienes razón. Malacath nos enseña a salir al encuentro de nuestro destino. Quizá este sea el mío.
Tarde o temprano, la Estrella volverá a formar parte de mi dimensión en Oblivion, pero dudo que tengas por delante el centenar de años que llevará.
Quizá sea una muestra de su amor por ti. No quieren que tengas compañeras indignas.
El modo de lograr un trabajo especial es hacer antes otros más modestos en las ciudades hasta que ese alguien sepa de nosotros... Entonces contactará conmigo, y allá vamos.
Heredé el barco cuando mi madre falleció. Ella se pasó toda la vida en el agua, y ahora yo también lo haré.
Vendo lo que pesco por buena parte de Skyrim... Para mí vale su peso en oro.
Dejadme hablar con nuestro huésped.
¿No deberías estar ocupándote de algún asunto?
Bah... "Soledad"... El solitario Cicerón te podría contar unas cuantas cosas sobre la soledad...
¿Entregarme? ¿Por qué? ¿Qué crimen he cometido? Estoy especulando tranquilamente sobre lo que, sin duda, sería un trágico suceso...
Es todo un placer conocerte.
Creo que Illdi es mejor de lo que imagina la decana Pantea. Lo que pasa es que le da vergüenza cantar en clase.
¡No puedes atraparme!
Entonces, a menos que desees recibir la visita de uno de los suyos, te sugiero que sigas tu propio consejo y que mantengas la boca cerrada.
Gracias de nuevo por los dientes de espectro de hielo.
¡Vuelve a mí, dragón!
Herramientas, utensilios y armas, todo ello al mejor precio.
¡Esta es la mejor noticia que he recibido nunca!
He estado en Paraje de Ivar unas cuantas veces, pero nunca he subido a Alto Hrothgar. No me importaría visitar el monasterio de la cumbre.
Últimamente he estado demasiado ocupada acabando con esas ridículas acusaciones de corrupción que pesan sobre el bastión.
Vaya, te has perdido toda la diversión.
Les dieron su escudo a esas bestias brujas cuervo con las que confraternizan. Quiero que lo devuelvas al lugar donde debe estar.
Así que, si tienes valor para ello, tengo muchos trabajos extra que contribuirán a que el gremio se recupere.
No dejas de enviar cada vez más guardias de la ciudad de la primera línea de combate. A este ritmo, no podremos defender nuestras propias fronteras.
A ver si esos Capas de la Tormenta tienen el valor de intentar abrirse paso por este cañón.
Se dice que los Renegados realizan pactos oscuros con las brujas cuervo, y que por eso pueden utilizar su magia.
Puede que ya tenga mis años, pero aún puedo enseñarles un par de trucos.
¡Aquí estás!
Una familia muy poderosa de Ventalia.
Sin lugar a dudas, los Capas de la Tormenta sufren igual que nosotros. Hasta Ulfric verá la necesidad de una tregua en estas condiciones.
¡Recuerda... dale al del centro!
Fue él el que contrató al resto y pagó mis mercancías. Así, yo dirijo la caravana, pero le pago a Ri'saad un porcentaje de mis beneficios.
Y por fin he hallado la respuesta. La magia de las brujas nos esclavizó, y solo su magia puede liberarnos.
Depende de lo que quieras decir por "ocupado". También soy el carcelero jefe de la mazmorra. Suele ser un trabajo tranquilo.
Vaya, vaya. Tú no dejas nada al azar, ¿eh? Tres posibilidades, tres víctimas. Alguna de ellas habrá sido, ¿no? Para qué arriesgarse...
Los Espino Negro se han metido a Riften en el bolsillo y el gremio de ladrones les vigila las espaldas, así que no te metas en sus asuntos.
Te dejaré vivir. Esta vez.
Me temo que no puedes ofrecerme nada que valga la pena.
¿Has visto a un sabueso en el camino? Una criatura saludable y fuerte que ha estado vagando cerca de la ciudad.
Espero que alguien sepa adónde vamos.
Hay fuertes así por todo Skyrim. Los imperiales abandonaron la mayoría hace mucho tiempo.
Dijo que incluso había ido a Riften en busca de ese sinvergüenza. Puede que tuviera la esperanza de que lo mataran y pusieran fin a su miseria.
Peor para mí, ¿no?
Disculpas aceptadas. Entiendo que toda esta historia pueda parecer ficción bajo unas circunstancias tan abstractas.
Mi madre es sacerdotisa de Talos. Cuida de la capilla e imparte su doctrina. Aunque no estoy seguro de que transmita el mensaje adecuado.
Te sigo, Oyente.
Generalmente, la entrega el sacerdote oficiante, el que santifica el ritual. En mi caso, el sacerdote oficiante era mi padre.
Hasta que hayas acabado con Vex, no tenemos nada que discutir.
No preparas la carne con ninguna de esas extrañas especias élficas, ¿verdad?
Bueno, eso explica por qué te han dejado pasar los guardias. Vamos, el jarl querrá hablar contigo en persona.
Mi marido, Gunnar, murió hace cinco años en un ataque de los Renegados. Echo de menos a ese cabezota...
Ya te lo he dicho, pertenece a mi familia.
¡Que te diviertas!
La Marca de Hjaal nos permitiría amenazar directamente las líneas de suministro imperiales de Soledad...
Tengo algunas cosas que pertenecieron a mi hija, Friga. Ella... ya no las necesitará.
Permanecería con él para que el mundo nunca pudiera darnos alcance.
Sí, aléjate como un perrito bueno. Mantente lejos de los negocios de los Espino Negro y quizás te demos un hueso.
Puedes vender toda esa chatarra en Piezas y Recambios.
Has destilado un veneno realmente artero. Pobre de la bestia que lo pruebe...
¿Es prudente, señor?
Lo has hecho bien, adalid.
Al menos, Narfi tiene el collar de Reyda... le recuerda a su hermana. Gracias por darle esto a Narfi.
Pues fue el pescador que me encontró y al que considero mi padre.
Maldita sea. Otro cadáver del que toca deshacerse.
Te diré lo que vamos a hacer. Ve por delante y ocúpate de tus asuntos por ahora. Cuando hayas terminado, ven a buscarme y nos ocuparemos de los míos.
Tengo que encontrar pruebas de sus actividades corruptas y utilizarlas para lograr un poco de "cooperación" por su parte.
Odahviing acudirá a tu desafío. Boziik. Krilot. No será capaz de resistirse a tu llamada desde la mismísima Colina de los Dovah... Vendrá.
La compañía comercial Arnleif e Hijos compra y vende cualquier cosa para la gente viajera como tú.
Dame tu espada, Hjalti, para que podamos convertirnos en hermanos como prometiste.
Van como la seda. Cuando cuaja la nieve, hasta el nórdico más aguerrido necesita un poco de vino especiado para entrar en calor.
Tal vez contásemos con aliados entre los dragones en nuestra lucha contra Alduin si los Cuchillas de antaño no hubieran actuado con tanta arrogancia.
¡Oh! ¡Eso es! ¡Pelagio! Sí, sí, ahora lo recuerdo. Bien hecho, bien hecho.
He estado observando la forma en la que extraes el mineral y tengo que decir que estoy muy impresionado.
Hemming, quiero que supervises personalmente el próximo cargamento.
Juraría que he oído algo detrás de nosotros.
¿Hadvar? ¿Qué haces aquí? Estás de permiso de...
Está en juego algo más que nuestro honor. Pensadlo, es el primer dragón que se ve en Skyrim desde la última era.
¿Tú no tendrías que estar en Markarth? Acaba ese trabajo y luego seguiremos hablando.
Si eso es lo que quieres. Ten cuidado ahí afuera y, si me necesitas de nuevo, ya sabes dónde encontrarme.
Dejando de lado por ahora la constante de inversión universal de Ralston, ¿cómo te plantearías tú la cuestión?
Si estás aquí por el Colegio, no dejes que la gente de la ciudad te moleste. Intenta ir a tu aire.
¿Estaba Mallory dispuesto a comprar el amuleto?
¡Ha llegado tu hora, gusano infecto!
Más te vale, porque hasta que no lo hagas, no verás ni una sola moneda... y no podrás usar nuestros peristas.
Encontrar a Mara fue el mejor momento de mi vida. Nunca olvidaré la calidez que se extendió por mi corazón cuando sentí su abrazo.
¿Qué? ¿Tu historia heroica en la que te encerraste en la Ratonera durante años no te parece suficiente?
Ah, la descarada matrona. Menuda lengua que tiene. Alguien debe de quererla muerta... ¿no es así?
Qué alegría tener buena compañía para variar.
¿Cuándo ha sido de algún provecho hablar con el Imperio?
Venga, déjame en paz...
Mi lugar es ser el jefe y mi desafío es liderar a mi gente.
"Porque lleva en su soplo las semillas del próximo verano". Ese es mi chico.
¡Elixir de sangre de falmer genuino a la venta! Vive durante miles de años... ¡lee la mente de los demás!
¿Estás despierto?
Recordemos que este muro se erigió como crónica para los futuros Cuchillas. Nada está aquí por casualidad.
He hablado más de la cuenta. Olvida lo que he dicho. Ahora, vuelve al trabajo.
Necesito volver a Soledad y contarles lo que ha sucedido.
No se creó para los Ruiseñores. Está para poner a prueba a quienes desean servir a Nocturnal de otras maneras.
Dirígete a Carrera Blanca.
¿Es por aquel asalto de la semana pasada? ¡Ya le dije a Holgrim que no había honor alguno en matar a gente dormida, pero no me escuchó! ¡No fue culpa mía, lo juro!
Maven quiere verte enseguida. Te sugiero que vayas cuanto antes.
Sí, pero tengo que quedarme aquí y esperar el día en que me case y me manden a otra fortaleza.
Así será.
Bien. Acepta esto como muestra de mi gratitud.
Antes de que te dejemos entrar a Riften, tendrás que pagar el impuesto para visitantes.
Claro que ha muerto. He oído que el trabajo en la mina es muy asfixiante... Y a estas horas, es matador.
Oblivion ha estado vigilándote desde el día en que te concibieron, mortal. No creas que tu vida está solo en manos de tu voluntad.
Cree que sus baladas y sonetos van a convencer a Camila Valerio de que se case con él. Como si le fuera a decir que sí.
Estoy recorriendo los 7.000 escalones para honrar a los Barbas Grises y reflexionar sobre mi propia vida. Es una tradición entre los nórdicos de Skyrim.
Este es el Anillo de Hircine. Me dijeron que me permitiría controlar mis transformaciones.
Ocultamos nuestro pasado durante años y nos convertimos en comerciantes, gente con dinero e influencias.
Toma. Quiero que tengas esto.
La arboleda del santuario del Brillo de los Antiguos está al este de aquí.
Poderoso Arkay, dios de los mortales, escucha las plegarias de tu humilde servidora. Bendice a las almas de estos difuntos y acógelas en los reinos del más allá.
Mi hermano Jon tenía razón... Únete al Colegio de Bardos y evita esta guerra absurda. Qué pena que él muriese antes de ponerlo en práctica.
¡No consigo localizarlo!
¿Vienes a trabajar?
Este el cuartel general de los Ruiseñores, que cavaron en la ladera de la montaña los primeros de los nuestros.
Eh, camarada, no estarás buscando objetos inusuales, ¿no?
Sé de uno. Olvidado. Secuestrado.
Es un encantamiento decente, pero sigue estudiando. Solo has arañado la superficie.
Tenemos un pequeño triángulo amoroso aquí en Cauce Boscoso. Faendal y Sven compiten por el cariño de Camila.
Pero la guerra es la guerra, ¿no? Nadie me puede culpar por ello, ¿verdad?
¿Y qué quieres que haga?
Sí, bueno... Eso es todo lo que te pedimos. Sigue así.
Tengo hierbas que mezclar.
Si sigues yendo por ahí con una magia peligrosa como esa, te meterás en un buen lío.
Sí, hay que aprovechar el fértil verano que tenemos por delante.
Vale. Eso será suficiente. Creo que estoy listo para intentarlo otra vez en el Colegio. ¡Gracias!
Tienes que tener claras tus prioridades si quieres llegar a algo por aquí.
Le conté a todo el mundo que murió durante el interrogatorio. Necesito que lo encuentres y te asegures de que no aparezca para demostrar lo contrario.
Bienvenido, estirpe de Malacath. Tu especie te permite ser bienvenido en nuestra fortaleza.
Una sabia decisión. Las cámaras del Salón de los Vigilantes lo protegerán contra posibles tentaciones.
Hemos tenido una visión de la siguiente sibila, que vive en un pueblecito del norte. Se la ha de traer aquí para que empiece su ensueño.
¿Tendrá una llave alguno de los guardias?
Ah, las cenizas de Berit. Era un buen hombre. No hay muchos guerreros que lleguen a la vejez como él.
Seguimos medrando a pasos agigantados gracias a ti. Otro mercader se ha establecido en el espacio que hay fuera de El jarro.
¡Trabaja duro! El orgullo de la mina Rompedor de Hierro está en juego.
¡Perro... nórdico!
Hace mucho tiempo, allí vivía un poderoso héroe de los nórdicos, Olaf Ojo Único. Olaf se enfrentó a un temible dragón llamado Numinex.
Por lo tanto, por mi autoridad como jarl, te nombro thane de Riften y te otorgo todos los beneficios que corresponden a tu rango. Enhorabuena.
Genial. Mucho cuidado ahí fuera.
Si necesitas otra cosa, avísame.
Ah, sí, de su perfidia.
Queremos el control de Markarth. Es nuestro precio por aceptar la tregua.
¿Brynjolf te envía para provocarme?
Aceptable. Un trabajo de aprendiz, pero con solidez. Sigue así.
A los guardias no parece importarles que yo esté aquí con tal de que no estorbe.
Malacath me ha encomendado la tarea de cavar. Los buenos minerales dan fuerza a nuestro pueblo.
Por culpa de la rebelión de Ulfric hay un sinnúmero de inocentes que no pueden alimentar ni vestir a sus familias. Es una tragedia inaceptable.
El mundo se está volviendo loco, y al jarl no le importa. Solo se preocupa de lo suyo.
Primero, un encantamiento para eliminar la barrera.
¡Acabad con esa cosa!
Pero aquí hay demasiado trabajo por hacer, y eso sin contar los peligros de los que ella no capaz todavía de defenderse.
Allá va. Parece que esta vez se ha ido en serio.
¡Tú! ¡No me hagas daño! ¡Otra vez no!
Brynjolf me está contando muchas cosas buenas de ti.
Espera un poco. Creo... que puedo arreglarlo.
Gracias a ti, me han lanzado un desafío delante de toda mi tribu. Un príncipe daédrico, nada menos. No puedo ignorarlo.
Ay, querido, ¿qué ha de hacer una mujer rodeada de brutos tan temibles como estos?
Solo he registrado una parte de esta sección. Tú, hum, podrías buscar por las cámaras que están al norte de aquí.
Aprendes deprisa. Otra vez.
Tengo un último encargo especial para ti. Resuelve esto y Skyrim será toda nuestra.
Namira codicia tu fealdad.
Saludos. No creo que necesiten a nadie en este momento, así que, si buscas trabajo, no es tu día de suerte.
No todos tenemos una vida de grandes aventuras como tú, heraldo.
Tenemos honor. También riqueza y títulos. Sí, y mujeres pechugonas para calentarnos la cama en las frías noches de Skyrim.
No se me ocurre nadie mejor para devolver la llave. Tan solo recuerda mantener los ojos abiertos y ser fiel a las sombras.
Hasta luego, cielo.
Bien hecho.
Ahora podemos dejar todo esto atrás, ¿verdad?
Se alza dispuesta para encontrarse con la sangre de sus enemigos.
¿Dónde crees que serás más útil? ¿Explorando o apoyando al resto de mis hombres?
¡Leed los pensamientos ajenos!
Namira nos concede la victoria.
No hay nada como tener a alguien esclavizado para reducir gastos.
Ah, ¿en serio? Es un buen acertijo. No es el tipo de cosa que te encontrarías en la librería de la esquina. Déjame pensar...
Que la luz de la certeza guíe tus esfuerzos.
El aire es tan puro en Skyrim que se pude ver hasta el infinito.
Mmm... Eso ya lo veremos.
Por supuesto, acólita. ¿Qué te aflige?
Jamás olvidaré tu generosidad.
Cuesta creer que haya gente que tenga que trabajar en lugares como este.
¿A qué esperamos?
Puedo llevarte a la capital de cualquier comarca.
Ella era la más dura del grupo. La verdad es que me sorprende que no te echara ella misma a patadas de La abeja y el dardo.
Podrán profanar nuestra capilla, arrestar a nuestra gente y silenciar nuestras voces, pero el Imperio nunca destruirá nuestro espíritu.
No la has tocado, ¿verdad? Bueno, ya, ¡por supuesto que la habrás tocado! ¿Has intentado empuñarla? ¿Y no has muerto?
¡Ya falta poco!
No saldría ahí ni por todo el dinero del mundo.
No esperábamos visitas, y el anciano necesita descansar. Vuelve en otro momento.
Mi campamento está cerca, en las ruinas de Nilheim. Escóltame hasta allí y te recompensaré.
Se ha escondido en las madrigueras de la Ratonera. Ten cuidado. No eres la única persona que lo busca.
Falion se mantenía ocupado con su trabajo, y yo necesitaba hacer algo, así que nada, aquí me tienes.
¡Me has encontrado! Laelette también me buscaba, pero me alegro de que te hayas adelantado.
Ve a ver al comerciante de Cauce Boscoso. Lucano tiene un poco de todo.
Todavía tienes que demostrar lo que vales, cachorro.
Pero es que tú no conocías a Ysgramor.
Solo estoy aquí para proteger a la prima de su eminencia. Por favor, diviértete.
Un trabajo magnífico. Sabía que volverías con algo útil.
Alduin se ocultará en esta oscura niebla hasta que gritemos al unísono y anulemos su poder.
¿Esto es lo que quieres? ¿Eh?
Así que tú quemaste la hacienda Brillo Dorado.
Si de verdad eres Sangre de Dragón, ellos te pueden enseñar a usar tu don.
¡Saludos, Oyente!
Reuniré un grupo de guerreros hábiles para arrasar la guarida de Movarth. Esperarán fuera a que los guíes.
No es buena idea hablar de esto aquí. Mira, si realmente quieres ayudarme, ven a verme a mi casa. Allí te contaré toda la historia.
Nunca debería haber venido aquí...
Dispondrás de total acceso a las cocinas, y de ahí al emperador. Vas a hacerte pasar por cocinero, así podrás envenenar su comida fácilmente.
Pero ya lo sabrás cuando lo conozcas. ¡Fue él quien me hizo así!
Hasta que consiga algo, solo os pido que seáis fuertes y que confiéis en lady Mara.
Tal vez algún día me aliste en la Legión, igual que hizo mi padre.
Juraría que te he visto antes en alguna parte...
Si Ulfric se saliese con la suya, deportarían fuera de Skyrim a todos aquellos que no fuesen nórdicos.
Es una señal. Una de las señales de que a lady Mara no le place tu constante embriaguez.
Y muy antigua.
Fue el Kel: el Pergamino antiguo. Lo usaron para... para desterrarlo y dejarlo a la deriva en las corrientes del tiempo.
Ah, ya veo. El viejo tratamiento de "intimidación silenciosa" de la Hermandad Oscura.
Tengo muchísimas existencias de pociones y reactivos de alquimia.
Me gustaría darte las gracias en persona por tu ayuda, en mi propio nombre y el de los Thalmor. Toma, por tu trabajo.
Soy el aprendiz de herrero, a tu servicio.
Estás poniendo a prueba mi paciencia. Retrocede. Ya.
¿Y qué estás haciendo aquí? ¡Por los ojos de Lorkhan! ¡No puedes dejar que los Thalmor lo encuentren antes! ¡Vuelve a Riften!
¡Ay!
Ha sido un honor.
El jarl de Carrera Blanca ha solicitado nuestra ayuda.
El Brillo de los Antiguos nos ha bendecido con un árbol joven.
¿Eso fue antes o después de que el Amanecer Mítico atacara al emperador y Valen, sin la ayuda de nadie, lo derrotara? Cállate y bebe, Romlyn.
Está aquí y aún no nos ha visto. Brynjolf, vigila la puerta.
Buena suerte ahí fuera. Parece un momento complicado para andar vagando por Skyrim.
Si conseguimos domar a esa yegua y traerla aquí, le sacaremos una pequeña fortuna.
No estoy segura de que la mitad de estas pociones funcionen. Pero deberían. Creo.
¿Has conseguido dar con el Sínodo o con el Bastón de Magnus?
Zoquete.
Echa un vistazo por aquí. Coge cualquier cosa que parezca útil.
¿Has ido al túmulo de las Cataratas Lúgubres y traído eso? Buen trabajo.
Echa un vistazo a la sala y verás a qué nos enfrentamos. Entre tú y yo, muchas de las cosas que Ulfric dice del Imperio son ciertas.
Necesitarás algo para hablar con mi marido. Vanto Loreio. O Loreio a secas, en tu caso, lo mismo da.
Era un hombre mucho más joven cuando me casé con Katla. Ahora me cuesta seguirle el ritmo.
Por lo visto mucha gente quiere verlo muerto. Astrid me dijo que tuvo que organizar un sorteo para decidir el cliente.
Supongo que no nos podemos escaquear más, ¿verdad? Oh, vaya...
Visitantes. Vaya.
Y has demostrado que fue lo mejor que pude hacer. No me mires así. Eres libre de marcharte.
Lo siento, pero no tengo tiempo para esto. Circula.
Pero... todavía no sé qué puedes hacer para detenerlo. La profecía no lo dice. Pero el Muro de Alduin, sí. Eso espero.
Me decepcionas, Sangre de Dragón. He aceptado tu invitación a este consejo, a pesar de que todo el mundo sabe que colaboras con los rebeldes.
Mira. Antiguas ruinas nórdicas. Quién sabe qué habrá ahí abajo...
¿Contento? No, no estoy contento. Zeymahi lost ont du'ul Bormahu. Alduin fue la joya de la corona de la creación de Akatosh, nuestro padre.
Te advertí que no enfadases a Maven. Si yo no hubiera intervenido y hubiese pagado por tus errores, estarías... bueno, creo que eso ya lo sabes.
Eso está por ver. Pero si es así y Boethiah aparece, te acogeremos como de los nuestros.
Ya no queda nada en Hibernalia. ¡Nada!
¿Pero a ti qué te pasa?
¿Kjeld te está dando la tabarra otra vez?
Los Renegados son salvajes como lobos. Hay quien dice que practican esa magia antigua.
Tan inquietos como siempre, señor, pero no los veo provocando tumultos. Al menos, no de momento.
Podría aprender mucho de las personas que hay en esta sala.
Dioses, más os vale tener algún as guardado en la manga. A mí no me queda nada.
No solo gemas ordinarias. ¡Se dice que están perfectamente talladas y que son tan grandes como la cabeza de un hombre! ¿Te imaginas lo que pueden llegar a valer?
Si se puede recuperar Riften, doblaré mis esfuerzos para garantizar la seguridad de mis ciudadanos y la defensa de la Grieta.
¿No me has escuchado? Todas las historias antiguas concuerdan en que tiene algún modo de viajar a Sovngarde.
Dime que hurgaste en ella antes de tirarla.
¿Sí, Dovahkiin? ¿Cómo puedo ayudarte?
Esto es lo que me gusta ver. Alguien que se encarga de que se hagan las cosas.
Mi madre siempre me decía lo mismo.
Nada, nada... Es muy... bonito. Pero si quieres algo con un poco más de estilo, deberías ver lo que tenemos disponible.
Lo lamento, Enthir, no puedo decírtelo. Lo único que importa es entregar tu traducción al gremio de inmediato.
Con diez tendré suficientes para entender mejor cómo se fabricaban. Eso es todo lo que necesito, ¿vale?
Una vez sufrí de anquilosamiento. Bothela, que trabaja en Cura de la Arpía, me curó al momento.
¡Cuidado! ¡No te acerques demasiado!
¿Jouane?
Sí, sí. ¿De qué se trata?
No me quejaría si tuviéramos unos cuantos días de sol seguidos de vez en cuando.
El hechicero deseó poder poner fin a la maldición que pesaba sobre su hija.
Te han expulsado del Colegio por lo que hiciste. Será mejor que hables con Tolfdir si quieres arreglarlo.
Deberías ir a la villa y hablar con un elfo llamado Nelacar. Estuvo metido en todo el asunto.
Pavo y yo luchamos para salir de Kolskeggr. Los Renegados mataron a todos los demás.
¡Nargh!
No. Creo que se equivocó por completo. La ejecución de Roggvir era lógica y necesaria.
Desde luego.
Ya has aprendido mucho, Sangre de Dragón. Desarrollar tu don demasiado rápido podría resultar peligroso.
Los trabajos que te asignará Astrid serán más importantes y, por norma general, más complejos. Procura conservar el juicio, y por el amor de Sithis, que no te maten.
El khajiita camina tras tus pasos.
No es que valga mucho, pero si recuperamos Hibernalia, nuestra presencia próxima a Ventalia hará que Ulfric sea cauteloso y tenga tropas guarnecidas allí.
Oh, es maravilloso ser sirviente de Escaldo. No es nada exigente.
No sé a qué se refiere. Está imaginando cosas.
Mira, antes de enviarte a buscar a Mercer, tengo que saber qué descubriste de Karliah. Y me refiero a todo.
Tendremos que prepararnos para lo peor. Las arcas están cada vez más vacías y apenas puedo mantener satisfechos a nuestros contactos.
Ten lista tu arma.
Creemos que las posadas El portal nocturno y Aguas bravas son paradas frecuentes de los mensajeros de los Capas de la Tormenta.
¡No conseguiréis nada de mí, malditos hijos de horkers!
Es mediante este conducto que recibimos el don más preciado de Nocturnal: la suerte. Lo que ella gana a cambio es un misterio absoluto.
Mi título es heraldo, hijo. No soy amo de nadie.
Querida hermana, necesito que te cueles en esa cámara y espíes la reunión.
Las brujas no mentían, desde luego. Pero es más que un cambio físico.
¡Pero qué disposición para el trabajo! Siento decepcionarte, pero no tengo nada. Vuelve a intentarlo más tarde.
Primero vamos a limpiar el sitio. Ya recogeremos después el botín.
Te gusta hablar, ¿eh?
¿Trabajar? Tú lo llamarás así; yo lo llamo esclavitud. Me dejo la piel para conseguir que este repugnante lugar esté limpio.
¡Llévate a casa los mejores productos de Ventalia!
Sí. Aunque casi nunca pongo en práctica lo que aprendí. Los Barbas Grises creen que la Voz solo ha de utilizarse para venerar a Kynareth.
Gracias por cuidar de Hrefna.
Entiendo... y esa "fuerza de la costumbre", ¿también te incita a cometer asesinatos?
Me han dicho que tienes algo entre manos en el pantano, Falion.
Un viejo chiflado, por lo que tengo entendido. Para destacar aquí abajo, tiene que estar realmente loco.
¡No podrás vencernos! ¡El Sangre de Dragón prevalecerá!
Espero que te baste con esa respuesta. Buenos días.
Estoy seguro de que esa Aeri no aprecia todo el trabajo que hago por su maldito aserradero.
Mis padres me abandonaron aquí hace un año. Pero van a volver a buscarme. Me dijeron que lo harían.
Te lo diré en términos simples para que lo entiendas. Asesoro al jarl en asuntos mágicos.
¡Al fin!
Un grupo se ha ocultado en Haafingar.
Bueno, eso depende de lo que quieras aprender.
Tú no tienes la culpa, así que no tienes por qué lamentarlo.
Te digo que Ulfric planea un ataque a Carrera Blanca.
Bien. Estoy preparado para cualquier cosa.
Para empezar, porque no vaciaría las arcas de Falkreath para comprarme la mejor ropa y aguamiel cara.
¡Ja! Bueno, la verdad es que así es como me siento.
Papá, mamá quiere que la ayude en la cocina mañana.
Intenta darle al blanco más lejano.
Cielos. Hacía muchos años que no veía algo parecido...
¡No voy a dejar que ocurra eso!
¿Has lavado ya la ropa de cama?
Bueno... Aunque es cierto que prefiero los aspectos más destructivos de la hechicería, no debemos olvidar los muchos hechizos con aplicaciones más sencillas y prácticas.
Por fin, han llegado refuerzos.
Por supuesto, acusan a un grupo de hechiceros. Quién sabe para qué lo quieren, pero tendremos que recuperarlo.
¡Basta!
Me gustaría viajar hasta el Salón de los Muertos de Ventalia para darle mi daga ceremonial a Andurs, el enterrador.
Ahora estoy aquí, trabajando para esta deprimente destilería de la ciudad y para el caladero. A veces me pregunto por qué no dejo todo esto atrás.
Si quieres despertarte de tu próximo sueño, te sugiero que me dejes tranquilo.
Tengo muchos trabajos disponibles. ¿Te interesan?
Vamos, tenemos que llegar hasta el Cráneo y destruirlo.
Ahh... Ahora nadie sabrá que estoy aquí.
¡Ja!
El espíritu de Skjor nos acompaña en esta encomienda. Lo percibo.
Mmm... Eso no lleva a ninguna parte.
¿Entonces puedo ir contigo?
No nos peleamos, hijo. Nosotros... mmm... hablamos. Muy alto.
Por supuesto. ¿Y tú sabes usarlo?
Respecto a esa hacha...
¡Ja, ja! ¡Me encantan los desafíos!
Oh. De acuerdo... Supongo que tendré que seguir practicando solo. Siento haberte molestado.
No soy débil. Muy bien, visitante, iré contigo cuando estés a punto.
¡Por Carrera Blanca! ¡Por el Imperio!
No, no, eso no es lo que me interesa en este momento.
Dov wahlaan fah rel. Fuimos creados para dominar. La voluntad de dominar corre por nuestras venas. Tú también la sientes, ¿no es así?
Viarmo, el Colegio debería tomar partido en esta guerra, en serio.
Todo por una vieja corona, ¿eh?
El que entra allí, no sale. Nunca.
Quizá te funcione con tus objetivos, pero yo no me impresiono con facilidad.
¡Gracias, gracias! Te prometo que te ayudaré. Y luego volveré al Colegio y les suplicaré que me readmitan.
Esperaré aquí y me aseguraré de que ningún alma inmunda salga de las catacumbas.
Pues nada, peor para mí.
Continuemos. Aún tenemos mucho que hacer.
¡Atención! ¡El general Tulio tiene algo que anunciar!
Aquí está tu oro. Intenta no gastarlo todo en un mismo sitio.
Me alegro de tenerte a mi lado. Necesito gente de confianza a mi lado.
J'zargo espera saber qué tal funcionan sus pergaminos.
De acuerdo, soldados. ¡Todos conmigo! ¡Por el emperador! ¡Por sus legionarios!
He dicho que me des carne. Tengo hambre y los Divinos saben que no necesitas llenar más esa panza que tienes.
No... no tengo ningún dinero.
¿Sabes? Tal vez haya algo de oro en alguna parte.
Excelente. Ahora podemos volver a trabajar. Creo que es mejor que olvidemos que esto ha ocurrido y avancemos... ¿vale?
Hacemos lo que hacemos por amor a nuestros hermanos. Ten, acepta esto como muestra de nuestro recíproco amor.
¿Qué tiene de bueno el pescado si hay que comerlo solo?
Vaya par de cobardes. Mi padre no se sentaría aquí de brazos cruzados a esperar que los malvados se apoderasen de sus tierras. Se acabaron las discusiones sobre este tema.
No, no puede ser... Oh, no... Y todo este tiempo yo pensaba que me había sido infiel. Qué estúpida soy.
Que Dibella te bendiga.
Voada, ¡has vuelto a derramar agua sucia de la colada en la olla de la sopa! ¿Tengo que cortarte los dedos para que aprendas la lección?
¡No permitáis que esos Capas de la Tormenta se escapen!
Si nuestros caminos vuelven a cruzarse, recordaré tu bondad. Hasta la vista.
Ahraan. Me ofendes, Dovahkiin. Puede que no te diga toda la verdad, pero no soy un mentiroso.
Oyente. Es un honor estar ante ti.
¿Qué ves desde tu pequeña jaula? Habla.
¿Me abandonas? ¿A mí? No quiero volver a verte nunca más.
Ahora tenemos que preparar un gran festín para darte la bienvenida al aquelarre de Namira.
Recuerda la contraseña: "Silencio, hermano mío".
Hay tanto que aprender en el mundo, tanto que saber, como para ponerse a combatir "leyes" que no sirven para nada.
No creo que debas ir por ahí sin ropa.
He velado por su seguridad durante tanto tiempo...
Hemos sacado algo. Aquí tienes tu parte, cielo.
He oído que uno de ellos acaba de ser arrestado al intentar entrar furtivamente en la ciudad. Lo han encerrado en la prisión. Quizá puedas sacarle algo.
¿De qué sirve? No soy muy buena, y todas las noches actúo para la misma gente.
La Estrella de Azura es nuestra. ¡Nuestra!
Pero también disfruto enterándome de los últimos chismorreos y escuchando los rumores más intrigantes.
Sabe todo lo que hay que saber de las antiguas leyendas de dragones de los Cuchillas.
Que la sabiduría de Azura esté contigo.
Ahora no, chico. Karliah dijo que era importante.
Vaya, esto sí que es inesperado...
La próxima vez la respuesta seguirá siendo la misma, elfo bastardo y arrogante.
Te debo mucho, Ruiseñor.
Y si lo hubieran conseguido, la suerte de Lucero del Alba estaría echada. Tienes una forma única de ver las cosas.
Sí, decana Inge.
¿"Un elfo que estudie las estrellas"? ¿Dónde has oído mencionar tal cosa?
¡Que Nerevar me guíe!
Ancano está haciendo algo con ese... Ojo. ¡No podemos detenerlo!
Claro. ¿Por qué no te preocupas de tus asuntos y así no tendré que hacer que Canto Fúnebre te tire a la cisterna?
¿Qué vas hacer cuando te gradúes? Yo estoy pensando en entrar en la Legión. Dicen que están buscando escaldos. Imagínate, yo... un bardo de la guerra.
Recuerdo a un ladronzuelo que intentó robarme una vez en el camino. Cuando saqué la Cercenadora sombría, ¡creo que el pobre hombre se lo hizo encima!
Pero todo el papeleo se lo pasa a Nepote Gran Nariz, para que lo termine él. El viejo tiene muchas cargas sobre sus hombros.
Ahora bien, si ayudases a limpiar y te disculpases después... quizás podría ayudarte.
Algún día, cuando sea mayor, voy a ser jarl.
Ya te lo he dicho antes, Escaldo, no tengo interés alguno en alinearme con uno de los bandos. No tengo ganas de morir.
Están apareciendo contactos por todas partes y hay un montón de jóvenes rateros llamando a la puerta para apuntarse.
Cualquier cosa que confirme que Thorald no ha muerto, sino que lo retienen cautivo. Sé que esos Batallador las tienen.
Habla con Beirand, suele estar en la fragua. Él te proporcionará equipo.
Has hecho mal en no marcharte cuando podías. Ahora vamos a tener que desparramar tus sesos por el camino.
Dicen que tienes espíritu. Eso es bueno. Aún puede que tengas cabida entre nosotros.
Si no se reúne la asamblea, su pretensión quedará aún más legitimada.
¿Por qué se hacen daño?
Excelente trabajo. Un héroe y su fiel compañero recuperan el antiguo artefacto para el príncipe. Es casi... digno de un libro.
Claro, márchate. Como no estaba hablando ni nada...
Y a mí me llaman salvaje. Al menos yo no dejo mi basura tirada por ahí...
Ahora, vacía los bolsillos o tendré que quitarle el oro a tu cadáver.
¡Cuidado! ¡El Devorador de Mundos espera entre la niebla!
A mí nada de eso me importa. Hasta que alguien ataque a un dunmer, dejo que Ventalia se las arregle con sus propios problemas.
Aquí, en el trabajo, Hjorunn me trata como a un igual. Mejor que muchos del pueblo.
No y, antes de que preguntes, no está en venta.
Solo un Capa de la Tormenta pediría esa canción.
Bueno, lo fue, hasta que pusimos un pie fuera. La casa estaba rodeada de guardias de la ciudad... el cliente nos había delatado.
Exacto, no lo es.
Sí, sí...
Tiene un hambre desmedida de nuestros recuerdos. A cambio, deja atrás pesadillas que son como las secuelas de una grave enfermedad.
Hasta la vista.
¿Ya estás?
Se acabó.
Ahora no es momento de hablar...
No es fácil ganarse la vida en las tierras salvajes de Skyrim.
¡Vaya, me alegro tanto por ti! Qué carga tan difícil de sobrellevar. ¡Pero lo has conseguido! ¡Has conquistado tus propios demonios internos! ¡Bravo!
Estos sueños son reales, créeme. ¡Como la vida misma!
Como desees.
¡Oh! ¡Tienes pinta de haber viajado mucho! ¡Tendrás mil historias sobre el mundo que hay más allá de este pueblo tan soso!
¿No lo sabías?
¡Aparta tus manos birladoras de eso!
Entonces, ¿Delphine aún está viva? Será mejor que pases y me cuentes cómo me has encontrado y qué quieres.
"es cuando el Devorador de Mundos despierta, y la Rueda gira sobre el último Sangre de Dragón."
¿Ninguna? ¿Nada de nada? ¿Ni siquiera del Colegio?
¿Estás aquí para mi próximo interrogatorio? Tengo todo el tiempo del mundo...
No hace falta ser grosera, Grelka. Si no te gustan los argonianos, a lo mejor deberías irte a vivir a otro lado.
Solo he de recoger mis aperos y acabar un par de cosas. No te preocupes. Dile a Cicerón que me ocuparé de arreglar su carromato.
De acuerdo.
Harás bien en largarte de aquí antes de que cambie de opinión y te haga poner grilletes...
El Imperio tiene la suerte de contar con el apoyo de los Thalmor en estos momentos tan difíciles, ¿no crees?
Hrongar no nos dará una respuesta directa.
Es un hombre afortunado por tener una esposa tan joven y hermosa.
No nos precipitemos. Yo... solo te estaba poniendo a prueba. Puedes pasar.
Pero nunca encontramos a ninguno. Hasta ahora.
¡No! ¡No! ¡Seguro que has sido tú el que me ha cogido el skooma!
No me intereso demasiado por la guerra, en un sentido u otro.
Eh, yo te conozco. Y... sé a qué te dedicas... Por favor... estas son buenas gentes. En su mayoría...
¿Oyes eso?
Una pequeña prueba, si quieres.
Lárgate.
¡Es hora de acabar con tu estúpida charada!
¿Te conozco?
Y ahora, hagamos como si esto nunca hubiera sucedido.
El albergue es para el trabajador, no una posada de lujo para turistas.
¡Ha sido increíble!
¿Nos ha abandonado el Imperio? ¿Cómo pudo caer Carrera Blanca en manos de estos estúpidos y apestosos nórdicos?
Déjame que te enseñe dónde están. Quizás a ti sí te reciban con los brazos abiertos. O quizás con una flecha en la cara. ¿Quién sabe?
¿Te estás esforzando? Porque yo no.
Malditos Renegados. Es cuestión de tiempo que asalten este lugar.
Si no lo conoces, ya te lo digo yo... Es un estúpido. Cree que Ulfric Capa de la Tormenta es invencible y que echa fuego de dragón por el trasero.
¿Eso estaba por ahí tirado? Buen hallazgo.
Está claro que el viejo Delvin se ocupa de los suyos, ¿verdad?
Pero no quiere revelarme cómo abrirla. Es enloquecedor.
Quizás te tienen tanto miedo que han huido.
¡Soy un aprendiz de hechicero, no una mula de carga! Oh, muy bien, pero que sea rápido.
¡He dicho que no! ¡Nada de aventuras, de farsas, de perseguir ladrones!
Todo lo que tienes que hacer es pedirlo y los dos podremos salir de esto oliendo a rosas.
Viven aislados en la cima de la Garganta del Mundo, la formidable montaña de Skyrim.
Trata bien a mi pueblo, y yo haré lo mismo contigo.
Adelante, pues. Escoge a tu infortunada víctima y envíala al Vacío. Te daré la llave de esta choza, y podrás seguir tu camino.
Sin duda esos Barbas Grises de Alto Hrothgar te hablarán de eso hasta que te estalle la cabeza.
Otro pobre infeliz perdido.
Papá, he estado pensando que tal vez podrías tomarte un día libre e ir al pueblo. Yo cuidaría la posada mientras estás fuera.
La mayoría de los guardias de Lucero del Alba empuñan espadas forjadas en su propia herrería.
Tus brazos y piernas valen para cazar una presa fuerte y ágil. Me vendría bien tu ayuda.
No sé de qué estás hablando. Pero yo en tu lugar, contendría la lengua.
Mantén los ojos abiertos. No me gusta la pinta de este sitio.
Creo que hasta una única escama debería bastar para completar mi estudio.
¡Fíjate en eso!
¿Ya hay cola para mi próxima actuación? Venga, fuera timidez. Hay sitio de sobra para todos.
Lo único que me preocupa es su guardián. No sé qué espera conseguir Cicerón trayendo aquí a la Madre Noche, pero no tardará en comprobar que este santuario es mío.
¡Por el emperador!
Soy uno de los afectados. Si no llega a ser por la protección de Peryite, habría muerto hace un año por esta plaga.
El sitio perfecto es La yegua abanderada. Ve a ver a Olfina, ella te mantendrá nadando en aguamiel.
Sí, por supuesto, tienes razón. Aun así, daría mi reino por unos pocos granos de azúcar lunar.
Pues compra más. Es tu trabajo como administrador, ¿no? ¿Por qué me molestas con semejantes minucias?
No puedo hablar de ello. No te preocupes, el jarl escucha las preocupaciones de todo el mundo. Pronto podrás volver a visitar a los muertos.
Intento consolarme con la idea de que, cuando todo está perdido, hay mucho que ganar.
Hace años fue un alumno del Colegio. Hoy es... algo muy distinto.
No puedo. Me quedan al menos dos rondas para irme.
¡Eres tú! ¡Por favor, no me hagas daño!
Hay más libros que recuperar y asegurar aquí, en el arcaneum.
Irónico, ¿verdad? Los viejos enemigos dan por hecho que cualquier desastre responde a una confabulación del otro bando...
Temo que esta tregua no dure mucho. Le has concedido demasiado al Imperio. Ulfric no tolerará que esté en vigor durante mucho tiempo.
No puedo estar siempre ayudándote con todo.
En segundo lugar, tenemos intención de liberar un asentamiento de manos imperiales.
Malkoran ha sido vencido. Los muertos de Skyrim seguirán descansando. Las cosas serán como deben ser. Todo gracias a ti.
Por supuesto.
¡A la salida más cercana!
La guerra exige mucho sacrificio, y todo lo que tenemos se lo damos a ella y al pueblo... pero aún conservo algo que puedo darte como muestra de mi aprecio.
Así se hará.
¿Y los Barbas Grises han sido de alguna ayuda? ¿Sabían algo del grito que se usó contra Alduin?
Esto basta para hacer que la cabeza te dé vueltas, ¿eh?
Por fin eres de los nuestros. Ven conmigo. Es la hora de anunciar mis planes a ti y a tus nuevos hermanos.
Eres débil. Cuanto antes te des cuenta, antes nos librarás de tu presencia.
Si no hacemos algo, el encantamiento se desvanecerá con el tiempo y la Estrella regresará a Oblivion. Azura será la última en reírse.
Más te vale tener oro con el que pagar tus bebidas. Aquí no se da limosna.
Ajá.
Los Cuchillas hacen bien en no confiar en mí. Onikaan ni ov. Yo no confiaría en otro dovah.
En aquella época era difícil llevar comida a la mesa, y más aún que sobrara algo que poder vender en el mercado.
Y parece que no ha sufrido daños. Eso les gustará, sin duda. Y a nosotros nos gusta su dinero.
¡Oh, sí! ¡Los Sangre de Dragón! Y tanto, sí.
Tenemos que averiguar si los Thalmor están tras el regreso de los dragones. Tenemos que encontrar la manera de entrar en la embajada de Thalmor...
¿Qué es eso de que Cauce Boscoso se encuentra en peligro?
Me puso una bolsa de oro delante y dijo que tan solo tenía que pagarle a Aringoth por la hacienda.
Me parece que te he enseñado todo lo que sé. Puede que ahora tengas tanta habilidad como yo.
Mi hijo Leoncio vive en Viejo Hroldan. Maldito borracho.
Es vital que llevemos a Ulfric ante la justicia, pero eso no sucederá hasta que derrotemos por completo a su ejército de Capas de la Tormenta.
¿Magia? Aquí no la usamos para nada. Los magos la guardan en su Colegio de Hibernalia. Ve a molestarlos a ellos.
Tienes razón. Tulio no está en posición de pedir Riften.
Una corona no hace a un rey.
La isla de Arteum desapareció hace más de un siglo, y nadie les ha vuelto a ver desde entonces.
¿Qué quiere el Imperio a cambio?
Te pudrirás en la mazmorra de la Cuenca del Dragón.
Ya basta.
No nos están invadiendo, mi señor... Solo es una respuesta a Ulfric y sus Capas de la Tormenta. Pero seguro que todo irá bien.
Tengo un problemilla por aquí.
Tú tráemelo.
¿No me digas? Estuviste en Helgen con los demás prisioneros. Aunque nadie parece saber cómo te metiste en aquel embrollo.
Es sencillo... Voy a causar una distracción y tú vas a robar el anillo de plata de Madesi de una caja fuerte que hay bajo su puesto.
Ah, veo que eres una persona sagaz, distinta de esos mercenarios ignorantes.
Gracias. ¡Aprisa, por favor!
Ah, bien. Markarth está justo delante. Me alegro de haber conseguido atravesar la Cuenca una vez más.
Está fuera, cielo, luchando en la guerra. Con los Capas de la Tormenta.
¡Por fin el tesoro es mío! ¡Todo mío!
Sí. Tal vez sea capaz de hacer el viaje algún día, pero por ahora tengo que atender a los difuntos.
¿Estás pensando en instalarte? Hay una casa en venta: el Hogar de la Brisa. Si te interesa, deberías hablar con el administrador del bastión.
Mira, yo... Yo...
Ah, aquí todo el mundo está tan serio...
Espero que la guerra no llegue hasta Cauce Boscoso. Ya tenemos bastantes problemas en este mundo como para que los Capas de la Tormenta nos causen más.
Por supuesto. Tenía que haberlo adivinado. Esto fue idea de Avulstein, ¿verdad? ¿Dónde está?
¡Ya!
¿Y a mí me lo preguntas? Ella prometió que enviaba a alguien que sabía lo que se hacía...
Muerte a Ulfric, asesino del rey, brindaré por tu muerte, cantaré y bailaré
Pero si fallase una sola pieza de nuestra imperfecta maquinaria, la vida se detendría. Eso demuestra lo frágiles... lo defectuosos que somos.
Gracias. Es bueno saber que puedo contar contigo.
Sí. Desgraciadamente, soy uno de los pocos joyeros saxhleel tradicionales que quedan en Tamriel. Es casi un arte perdido.
El día en que nadie intente degollarme por la calle, me sentiré decepcionado.
Mucho más lo siento yo.
¡Sin nosotros no, de eso nada! De todos modos seguro que hay para todos.
Llevábamos intentando capturar a Ulfric desde el principio de la guerra, pero siempre se nos escapaba de entre los dedos de una forma u otra... como si supiera que veníamos.
Hablemos un momento.
Solo cuando tú estás por aquí. Me encantaría perder de vista al resto de estos imbéciles.
Las demás casas nobles han descubierto su traición, y ella ha huido. Quieren que se la traiga viva.
Ahora, el emperador lo tiene en el bolsillo, como a todos los demás, sin respetar el honor ni la tradición.
Qué bueno. ¿Y ella qué respondió?
Tenías que hacer esto limpiamente y en silencio, y has fallado. Ahora tendré que usar tu paga para cubrir tu error.
¡Síiii! ¡Vamos, podemos derrotarlos!
Vaya, qué amable... Toma, no pierdas de vista la llave, ¡y no dejes que entre nadie!
Es... precioso. ¿Calcelmo escribió esto... sobre mí? No sabía que esos eran sus sentimientos hacia mí.
¿Está muerto?
Una de dos, o yo estoy borracho o tú estás en cueros.
¿Lo dices en serio? La guerra asola esta tierra, los dragones han vuelto, en busca de vete a saber qué... Skyrim se está yendo al cuerno rápido.
Te saludo, visitante. Si tienes asuntos que tratar con nosotros, habla.
Luego solo tienes que usarlas para enfrentarte a Haelga y el resto saldrá solo.
Los Pergaminos antiguos. Desde luego.
Esa tablilla es tu máxima prioridad. Tráela de vuelta desde el túmulo de las Cataratas Lúgubres y estoy seguro de que tendremos mucho de lo que hablar.
Forasteros. ¡Qué pesados!
¡Hala! ¡Cuántos colores!
Así se hace. Vamos. Quiero ver más de cerca a esos indeseables.
Pues a mí no me parecen más que una banda de intolerantes estrechos de miras, como tú.
Puede que encuentre algo que puedas hacer, pero mejor será preguntarle a él.
Ah, debe de ser eso. Hay tantos hombres sirviendo en la guerra. Rezaré a Stendarr para que vuelvan victoriosos.
Respetamos los métodos antiguos y el espíritu nórdico, y hay un Melena Gris trabajando en la Forja del Cielo desde antes de la época del padre de mi abuelo.
Viven bajo las calles, en la Ratonera, como animales inmundos. Y créeme, no son mejores que las alimañas que surgen de ahí en busca de basura.
He venido desde la Provincia Imperial para trabajar con mi hermano Lucano.
Estoy buscando a mi Fenrig. Marchaba con los hombres de Gjukar, y dicen que fueron aniquilados aquí.
Gorm cree que estoy loco. No lo dice, pero lo piensa. ¿Tiene razón?
¿Crees que renunciaría a una oportunidad de guiar a mi familia hacia la gloria?
Te veré en la capilla.
¡Hola! Me alegro de volver a verte.
Mi jarl, estoy preocupado por la seguridad de Lucero del Alba.
No he venido a llevarte de la mano. Averígualo por tu cuenta.
Tú. ¿Qué quieres?
Me temo que no.
Me enorgullece poder llamar amiga a una mujer como tú.
La magia tiene mala fama por los que van así por la vida. No te da vergüenza.
Como mujer-forja, también estoy a cargo de la mina.
Bienaventuranzas, pariente.
No sé por dónde empezar. Ya sabes que me asignaron a la guardia del general Tulio.
La posada El pico ventoso cuenta con los servicios de la mejor bardo de toda Lucero del Alba. Yo.
Si prefieren seguir sumidos en su ignorancia y temerme, que así sea. Pero eso no cambiará la verdad.
¿Y tú qué, Elisif? ¿Son estos términos de tu gusto? Di lo que piensas. Seguro que el general Tulio está esperando para hacer lo que le pidas.
Viejas ruinas de los enanos. Mira lo que hicieron con el metal. Qué desperdicio.
El jarl tiene las cosas bajo control. No te preocupes.
¿Qué estás mirando?
Irás a Riften.
Venga, ¿me dejas salir ahora? ¿Por favor? No le diré a nadie que has sido tú.
Aquí ya no hay nadie.
No me quejaré de que Korir ya no esté, pero no espero que las cosas sean realmente diferentes.
Bien. Así estarás en disposición de enfrentarte a lo que quiera que te depare el futuro.
He luchado con más bandidos de los que puedo contar en sitios como este.
No sé qué habría hecho sin Pavo. Ese hombre es más valiente de lo que admite.
La derrota de Alduin es la pieza central del muro.
Me alegro.
Esto no pinta bien.
Un lugar extraordinario, ¿verdad?
No hasta que nos hayamos presentado debidamente. Zin. Heyv. ¡Pon a prueba tu Thu'um contra el mío, Dovahkiin!
La verdad es que no. Varnio Junio es un necio. Estoy segura de que no pasará nada.
¿No aceptarías una socia? ¿Eh? Piénsalo. Dos mujeres, el camino polvoriento, mozos de buen ver en cada taberna, una fortuna en oro esperándonos...
Eso, sin duda, lo incluiré en mi parte de la edda.
Considérala un regalo a cambio de tu silencio. De todos modos, esa cosa no me trae más que problemas.
Que quede entre nosotros, pero tengo cosas más importantes que hacer que ir a esas fiestas sin sentido.
Mira esas ruinas. ¿Crees que habrá monedas de oro dentro?
¿Qué es lo que quieres, gato?
Malacath nos enseña a honrar lo que decimos con hechos. A exigir sangre de los enemigos y fuerza de los aliados.
Sabes que no me refiero a eso. Tenemos que averiguar cómo salir de esto. Puede que hablando con Laila...
Ya has satisfecho mi debilidad por la conversación. Krosis. Ahora responderé a tu pregunta.
Soy el dueño de la granja de Acebo Helado que está fuera de la ciudad. Es un trabajo honrado, pero algo aburrido.
Si por mí fuera, me pasaría todo el tiempo en fiestas como esta, y no tratando con la chusma.
Creo que este podría ser el fin...
Los Thalmor. Crearon problemas aquí, y nos obligaron a desviar recursos. Perdimos buenos soldados para aplacar esta rebelión.
Es una lástima.
Aquí Vilkas será quien ponga a prueba tu habilidad.
La pregunta es, más bien, ¿qué no tiene de malo?
Pronto serás mayor de edad. Hora de casarte con otro jefe.
Por supuesto. Vayamos en busca de ese templo de Refugio Celestial.
Mi tía ha entrado tras de él, pero aún no ha salido y a mí me da miedo entrar solo.
Ah, hola, khajiita. ¿Andas buscando artículos de caza?
No nos conocemos.
Nos reuniremos en Cauce Boscoso. Si no he vuelto cuanto llegues, espérame. No debería tardar.
El Imperio puede haber sido bueno para Skyrim en el pasado, pero esos días hace mucho que han quedado atrás.
Con gusto te ayudaré de cualquier forma posible.
Nunca lo había visto por aquí.
Haz lo que te pide Yamarz. No hará que empeoren las cosas.
Vuelve tan pronto como hayas conseguido el yelmo.
Servir en la Legión me enseñó a respetar a nuestros líderes. La fortaleza necesita a Burguk.
Mmm... Tal vez lo haya puesto por aquí.
¡Aún soy capaz de luchar!
¿Y qué tal mi padre? ¿Era buen cazador?
No te puedes fiar de estas cosas.
Esa puerta tiene las mejores cerraduras de rompecabezas que se puedan comprar. No hay forma de forzarla.
El Imperio había capturado a Ulfric. La guerra había terminado prácticamente. Entonces un dragón ataca, Ulfric huye y la guerra se reanuda.
Sé que hay una secta que le rinde culto en Vergüenza de Haemar. Allí tendríamos que poder comunicarnos con él.
La desaparición de Thorald ha sido dura para nosotros, pero Avulstein se la ha tomado especialmente mal.
Te encuentras en Alto Hrothgar, a las faldas de la montaña sagrada de Kynareth.
¡Rrrraaaaaaggghhhh!
Vale, vale, cálmate, no hace falta que te pongas así. Ahora mismo te dejo pasar, solo dame un momento para abrir las puertas.
¿Por qué sigues aquí? Deberías estar en Korvanjund, demostrando si Galmar tiene razón o no.
¿Cómo va la caza?
Ojalá pudiera decir lo mismo de nosotros.
Me he pasado años enteros en bibliotecas. He buscado en aldeas pequeñas leyendas que tuviesen el más mínimo detalle que hiciese pensar en el Vial.
Tú... haz lo que sea necesario para que deje de abusar de mí con esto.
Intento que los asesinos Thalmor no me cojan. No soy un héroe como tú. No tengo ninguna posibilidad.
¿Crees que el fantasma volverá? Parece haberse esfumado.
Que los dioses te bendigan.
Sibbi Espino Negro está furioso porque su antigua amante ha intentado asesinarlo. No ha dejado piedra sin remover para buscarla.
Nos reuniremos allí.
¡Aquí no te queremos!
Faida me está enseñando el oficio de posadera. Ella regenta Los cuatro escudos.
Temo que no haya otro remedio.
Quizá, pero necesario. Mi prima Fura está en alguna parte de Skyrim luchando contra Ulfric Capa de la Tormenta y sus malditos insurrectos.
Pagué a Sibbi al contado la mitad de lo que pedía por Escarcha, pero Maven lo mandó encerrar antes de que me entregase al caballo. Sibbi cree que esto le exime de nuestro trato.
Eh, tú. Ven aquí, quiero hablar contigo.
¿Sabes que me recuerdas a mí a tu edad? Todo lo que me interesaba era montar en narvales y dormir en panales y beber lágrimas de bebé...
Tienes que ser más amable con Asgeir. Lo único que quiere es complacerte.
Dicen que se han visto sombras furtivas entrando y saliendo por la puerta negra. Que los dioses nos asistan.
No, no lo he visto desde que apareció el dragón.
Tengo un alma que reclamar en Oblivion. Cuida de la casa en mi ausencia. ¡Ja, ja, ja!
Bienvenido al santuario del Brillo de los Antiguos, caminante. Si te surge cualquier pregunta, habla con Asta.
Espero de verdad que mamá y papá vengan a buscarme pronto. Desde que se fue ese Avento, este lugar es una locura.
Solo está esperando a que lleguen los cargamentos, Lisbet. Volverá en cuanto lleguen.
No te propases, mortal. O Molag Bal podría mandar a otro campeón a recoger su maza de tu cadáver destrozado.
Ciudadano.
Ahora hay que enfocar el cristal. Fue creado tan lejos de aquí que sabíamos que habría que hacer algunos ajustes.
Provencio, eres mi administrador. Tu trabajo es ofrecerme consejo. ¿Esto? Esto no es un consejo.
Es cierto. Te doy la bienvenida a Markarth, visitante. Dales gracias a los Divinos por tener la opción de vivir en otro sitio.
La verdad es que lo tengo todo bien montado. El jarl se beneficia de mis soluciones más creativas, aunque jamás vaya a reconocerlo.
Sabía en lo que se metía. No... no creo que sea culpa de nadie.
¡Tu débil intento por esconderte es un insulto!
Bah, que se moleste. Siempre se enfada diga lo que diga, por lo menos así me divierto.
Me temo que sí. Tenemos problemas con uno de los jarls de Skyrim.
¿Tú vas y vienes, no? Si te encuentras con algún Capa de la Tormenta... destrípalo por mí. Le hicieron lo mismo a mi hermano en Carrera Blanca.
Sí, lo has honrado, incluso después de su muerte. Un resultado digno para un digno guerrero.
Nunca supe mucho de Weylin, salvo que vivía en las madrigueras, como todos los demás trabajadores.
¡Levántate y vive de nuevo!
¿Buscas trabajo?
Incontables muertos acechan en las incontables noches de vigilia... Cuando Skyrim se recupere, quizá yo también lo haga.
Largo tiempo has dormido el descanso sin sueño de la muerte, Potema. Nunca más. ¡Escúchanos, Reina Loba! ¡Te invocamos!
Mira el cielo. Mañana va a ser un día espantoso. Lo sé.
Dice que me necesita aquí para trabajar en la granja y que, aunque me dejara ser aventurero, no nos podríamos permitir la armadura.
Hmm. No estoy segura de cómo te las has arreglado, pero esto es exactamente lo que necesito para empezar mi nueva serie de experimentos. ¡Fantástico!
Lo primero es averiguar los planes de los imperiales. Tenemos que introducirnos en su cuartel general, robar los planes, los mapas y todo lo que sea útil.
Ten los ojos abiertos y no confíes en nadie.
Mi padre nunca creyó que fuera lo bastante listo para ser jefe del establo. Ojalá estuviera aquí para verme ahora.
Auxiliar.
Prueba con Olfina, la nueva posadera de La yegua abanderada. Sigue por el camino, está cerca del mercado.
¡Ah! Bueno... yo... lo siento. Sí, hemos estado trabajando en algo juntos.
¡No podemos seguir así! ¡Sabes que estaremos perdidos si no hacemos algo!
Tuve que dejarles atrás, tuve que sacrificarlos para poder salir con vida.
Por supuesto. Habla conmigo cuando se haya abierto la caja, y todo se revelará.
¡Te enterraré!
Pero no subestimemos a los Capas de la Tormenta. Muchos son veteranos de la Legión. Puede que sean traidores, pero saben combatir.
Vete. Tu presencia misma me enferma.
De acuerdo, me has convencido. Dudo que te fuera de mucha ayuda. Ese pequeño petimetre me ha cortado bien.
Le pedí a Vald que se reuniera con la caravana de Hibernalia en el extremo occidental del lago para evitar los caminos.
Me alegro de que hayamos llegado a un acuerdo.
¿Has regresado, Aren? ¿Viejo amigo?
Sí, simplemente pensé que quizás, ejem, te habías encontrado antes con algo parecido.
En efecto. Aquí tienes tu parte, encanto.
Debes de haber perdido la razón si crees que voy a dejar que alguien lo vea antes de completarlo.
¿Y tú qué?
Mmm. Es una pregunta excelente. Ya lo creo. La verdad es que, ahora que el emperador se pone en camino, voy a renunciar a mi cargo.
El combate va muy mal ahí abajo. Si Alduin no responde a nuestro desafío, me temo que todo estará perdido.
¡Que no lo he tocado!
Sí... uno de sus aliados podría contárnoslo. Motmahus... Pero no resultará tan fácil... convencer a uno de ellos para que lo traicione.
¿De verdad? ¡Gracias! Diez pizcas de sales de fuego deberían proporcionarme lo que necesito para devolver esta fragua a la vida.
Has venido a mancillar el nombre del Imperio, y yo no quiero tomar parte.
Te lo juro, dejé otra botella aquí mismo...
Por favor, ve con cuidado por aquí. Este lugar no es totalmente seguro.
¡¿Qué clase de mentor sería si le negase a un posible estudiante atisbar el ingenio de su maestro?!
Ah, sí. Cierto. Bueno, gracias.
Mi hermano Vilkas es mejor conversador que yo. Debería andar cerca.
Entonces vuelve cuando tengas el dinero.
Elisif ha prohibido la Quema del Rey Olaf, un festival que se celebra en el Colegio de Bardos. Tenemos que conseguir que cambie de opinión.
Oye, pues haber aprendido a usarla correctamente. Una espada debe ser la extensión del brazo, no un cuchillo de carnicero.
De esos que te maldicen y se te aparecen en medio de la noche. No hay nada que tú o cualquier otro pueda hacer.
¿No tienes nada mejor que hacer que molestar a un anciano?
Ocultarte solo pospone tu fallecimiento.
Sé que te costará creerlo, pero en otro tiempo yo era un aguerrido aventurero como tú, dispuesto a enfrentarme a cualquier peligro.
Mi hacha es tuya, visitante. Solo tienes que pedirlo.
Hemos abierto un túnel que lleva a una vieja cripta. Le advertimos a los extraños que no se acerquen.
Debo ponerme en marcha.
¿Sí, Ruiseñor?
Alduin mah nol thur.
Sí, mi señor.
Aunque Kodlak tiene razón. Hemos entregado una parte de nuestras almas a cambio de este poder. Conozco las historias míticas. Los tratos de ese tipo llevan a la ruina.
Ah, esa es una buena idea. Sigue, pero no intentes nada. Madanach es mucho más listo de lo que crees.
Markarth se entregará a las fuerzas de Ulfric. El jarl Igmund renunciará a su cargo y Thongvor Sangre Argéntea se convertirá en jarl de Markarth.
El hipogeo está cerca... Ah, nigromantes. Cuidado.
No me obligues a defender el honor de mi aguamiel. Lleva siendo mi amiga mucho tiempo más que tú.
Acababa de llegar a Falkreath. Necesitaban ayuda para trabajar en el aserradero, y pensé que sería algo seguro. Algo que podía hacer.
Quema todas las colmenas y tendrá que importar miel para la destilería Espino Negro, lo que reducirá sus ganancias.
Al menos, aún no.
Así concluye la lección.
Ah... vaya. Pues entonces nada.
Por supuesto. La causa de Ulfric es justa. Es hora de que Skyrim se libre del Imperio.
Ay... No estoy orgulloso. Ese sitio me aterroriza y la tía Agna lo sabe.
Toda una historia que contar a nuestros nietos, ¿eh?
Y además de eso, una auténtica nórdica nunca deja pasar una oportunidad de demostrar su valía.
¿Aceptáis quedar unidos en el amor, ahora y por siempre?
Todo el mundo está pendiente de ti, chica. No nos decepciones.
Em, gracias, señor. ¿Puedo hacer algo más por ti?
Los rebeldes más peligrosos que queden seguirán acosándonos, pero en general, esta gente quiere paz.
Es una antigua tradición nórdica, una prueba para mostrar tu valía ante los ojos de Kyne. Demostrar que eres un cazador y no un simple carnicero.
Vistes prendas propias de un auténtico nórdico. Te saludo.
No parece que lleves oro encima. ¿Tal vez se ha producido algún tipo de malentendido?
¿Por qué vacila Alduin? Nos lo hemos jugado todo con este plan tuyo, anciano.
Has hecho lo que has hecho por ti mismo, no por mamá.
Toma este símbolo de Mara. Ella te guiará hasta las almas errantes de dos amantes cuyo amor era tan grande que su unión los ata a nuestro mundo.
Que las sombras te consuman.
Dioses, otra vez no...
Sé que no pinta bien, pero tenemos que averiguar qué ha ocurrido y si ese dragón sigue merodeando por aquí.
Bienvenido a La abeja y el dardo, mi señor. Si te apetece probar una de nuestras bebidas especiales, dímelo.
Ja. Que tengas suerte. No es una persona a la que le guste que la encuentren.
Por los dioses, han avistado a un dragón al sur de la ciudad, sobrevolando el mirador de la Lengua Perdida.
Y ahora, tu recompensa. Un hechizo único para invocar a una leyenda de la Hermandad Oscura. Su alma nos sirve en la muerte como su cuerpo lo hizo en vida.
Puede que la tribu sobreviva, pero solo si accedes a hacer lo correcto.
No es lo que acostumbro a leer, pero le echaré un vistazo.
Dicen que algo pasó en el Salón de los Muertos. El hermano Verulo ha hecho que cierren el lugar.
¿Qué pasa, guardia rojo?
Señora embajadora, siento tanto interrumpir...
Muy bien, tú has cumplido, así que yo cumpliré. Aquí tienes la gema que quería Arniel.
Confío en que entiendas el error que supondría entregar la comarca a los rebeldes.
Hola. Por favor, como si estuvieras en tu casa.
Ya he visto suficiente. Ponte algo de ropa.
Al final, confié en las armas naturales de una mujer: la belleza y la seducción. El resto fue pura formalidad. Aunque bastante complicada y húmeda...
Si quieres entrar en Riften, usa la puerta norte. Esta está cerrada.
No tengo nada más que decir.
Solo estoy de visita. Tenía negocios que llevar a cabo, eso es todo.
¡Yupi!
Ah, Cicerón se encarga del cuerpo de nuestra señora. Le da aceite, lo preserva, lo mantiene a salvo. Se encarga de que nadie le falte al respeto al ataúd de nuestra matrona.
Malditos elfos oscuros. Supongo que no les habrás dicho que ahora tengo problemas mayores. Como los de todo Skyrim, por ejemplo.
Si te encuentras en tus viajes con algo que me pueda ofrecer las respuestas que busco, te estaría muy agradecido.
No voy a mentirte, todavía estoy bastante mal.
Yo mismo bajaría, pero dejaría a mi jarl Laila sin protección.
¿Todo listo para partir a la isla de Piedra Ofidia?
Yo... Lo siento mucho, Torbjorn. Debes de estar pasándolo fatal. Ojalá pudiera ayudarte.
Esto... Sí.
Llegaron los Lenguas para participar en la batalla que se iba a librar
Buenas tardes.
Dispersaos y buscad supervivientes. Tenemos que saber a qué nos enfrentamos.
Vignar y yo no damos abasto. Encargarse de toda una comarca no es poca cosa.
Ella ha aceptado ser tu antepasada.
La gente sigue dudando de mí, ¿verdad?
No me impresiona.
Me cuesta creer que me quejase del frío de Riften...
En efecto. ¡Pero no tanto como tu madre!
¿Realmente creías que te ibas a ir de rositas?
Adornos y cosillas en venta, de la mano del mejor herrero de Skyrim.
¿Encontraste todos los recipientes?
Pues sí. Los anillos los hace la propia Adara. Está aprendiendo muy bien a doblar el metal.
Da la orden, y mis hombres te ayudarán con esta trampa.
Brynjolf, aquí apesta algo y no es solamente la Ratonera. Todos lo sabemos. La pregunta es, ¿qué va a hacer Mercer al respecto?
¿Crees que intimidarme va a funcionar? Soy un hechicero. Un viejo, elfo, hechicero. Piénsalo.
Ten, coge mi bolsa y llévasela a mi padre, Verner. Seguro que él también tiene algo para mí.
Mira por la costa este. La barca estará allí.
Este fue el último bastión del Culto del Dragón, y se cree que la máscara de su líder tenía mucho poder.
Admito que tus imperiales son eficaces.
Aunque llevamos aquí más tiempo del que queremos recordar. Así que intenta mostrar algo de respeto.
Madena, ¿podemos contar con tus hechizos para ayudarnos en esta guerra? Seguro que el Imperio enviará a sus magos guerreros contra nosotros.
Nieto. Es un chico fuerte. Sus padres estaban en Helgen cuando, bueno, ya sabes.
Ah, tú eres quien andaba por el mercado.
Seguro que mi hermano Vignar sí se alegra, ya que lo nombraron jarl después de derrocar a Balgruuf.
¡Ja! Bueno, cuando lo pones así, la verdad, lo ves todo con perspectiva. Pero basta ya de darle vueltas. Y gracias, Danica.
¿Un dragón? No digas tonterías, por favor.
Estaremos esperando para llevarla a la cárcel.
¡Gracias, Grelka!
¡Una pelea!
¿Quién va, Malborn? Ya sabes que no me gustan los olores extraños en mi cocina.
Hazlo y me aseguraré de que te lleves un porcentaje.
Es lo que ha causado todos los problemas. Las gemas de alma se usan en los encantamientos, pero después se rompen. Todas excepto una.
Coge cuanto necesites. Dentro de lo razonable, por supuesto.
Sí, no subestimes a Cicerón. Es fácil burlarse de un hombre así, tan pequeño e idiota. Es fácil subestimarlo. Pero no cometas el mismo error que yo.
Has salvado mi negocio y animado el corazón de un viejo herrero. Por ello, te doy las gracias.
¡Reza a Stendarr mientras puedas!
Mathies es un hombre bondadoso y sabio. Los nórdicos podrían echar mano de más como él. Y lo mismo los imperiales.
¿Te vas? Dale una lección al mundo, cielo.
El guardia tiene la llave.
¡Felicidades! ¡Ahora puedes irte!
¡Solo puede haber un jefe!
¿Estás impaciente por ver lo que hay allí dentro? Esto es importante para vosotros los nórdicos, ¿no?
Si deseas comerciar, espera a que salga el sol.
No soy una erudita, Esbern. ¿Cuántas veces debo decírtelo?
Los rechazamos, pero...
Tienes una buena casa. Estoy pensando en establecer una pequeña tienda aquí. Para vender todo tipo de cachivaches.
Muy bien. Sigamos con los ejercicios.
De acuerdo, madre.
No es culpa mía que le hayan dado la espalda al Imperio, ni que el zopenco de su hijo se haya alzado contra él.
¿Ha muerto? ¿Cómo ha podido suceder?
De hecho, una vez salí a pasear a la luz de la luna y descubrí un unicornio... al que inmediatamente apuñalé en la garganta con una aguja de ganchillo.
¡Ya está! Entremos ahí.
Hazle daño, pero no demasiado. No quiero que muera. Y que no te pillen los guardias.
Tendrás que hacerlo mejor.
Claro que no. Perdona.
Tan solo dime a quién hay que aporrear.
¡Las sombras avanzan y... y los fantasmas se lanzan! Un hombre... se asusta. ¡Y un demonio lo apunta! Para... esto... ¡para mandarle de visita lo que teme hasta la termita!
¡Has venido a visitarme! Aquí todo va mucho mejor sin Grelod. Gracias a ti.
Bien hecho. No hay muchos encantadores que puedan lograr esto.
Aaah... Hace falta valor para transmitir este mensaje. Lástima que hayas escogido el bando equivocado...
¿Sabes qué? Quiero que te lo quedes. Mis grandes cazas son cosa del pasado, pero las tuyas aún están por llegar.
Fue apenas un alzamiento desorganizado, pero la Cuenca dejó de estar bajo la autoridad del Imperio durante dos años, antes de que la reclamáramos.
En otro tiempo, esta ciudad fue suya. No se detendrán hasta que hayamos muerto todos.
Mmm. Quieres decir que les ayudarás a beber el aguamiel.
No pretendas tomarme el pelo. Dame eso.
¿Qué es esa tontería de atrapar un dragón en mi palacio?
Lo... ¿lo lograste? ¿Lo hará?
El cielo sobre tu cabeza y la Voz en tu interior.
Y lejos, al oeste, hay unas ruinas. Volskygge. Dicen que dentro hay un muro, negro como la noche. ¡Y que habla! ¡En la antigua lengua de los dragones!
Los Renegados atacaron hace un tiempo. El jarl no tenía hombres disponibles, así que los Sangre Argéntea nos mandaron para hacer limpieza.
¡Volvemos a encontrarnos, mortal!
Fuiste tú quien convenció al jarl para atrapar a aquel dragón en el bastión. Y por Ysmir que resultó.
Sí, voy contigo, y juntos la mataremos.
Como ya te he dicho, una donación de 250 monedas de oro debería bastar para solucionar el asunto.
¡Toma, toma, toma puñalada!
¡He dicho que te muevas!
Vamos a hacer lo siguiente: yo hago como que no he oído nada y tú me dejas en paz. ¿Trato hecho?
Te sugiero que escuches lo que Mercer tiene que decir... si quieres participar.
Siempre estuvo muy cerca de coronarse emperatriz pero, a pesar de sus maquinaciones, nunca lo consiguió.
Puedo ayudarte con las compras, pero, si has venido a charlar, ve a ver a mi hermana. Ella es la que se lleva bien con la gente. La verdad es que es su única virtud.
Siempre ha utilizado la prohibición del culto a Talos para agitar a la gente contra el Imperio.
¿Es cierto? ¿Hay dragones de verdad en Skyrim?
¿Así que crees que ya no necesitas ayuda, eh? Eso ya lo veremos.
Me matarás, he aceptado ese destino. Pero, independientemente de lo que hagas en la vida, en ti siento cierta... ambición.
Si quieres preguntárselo, buena suerte. Pero no pienso volver a acercarme a ella.
El más allá te traerá tinieblas.
¿Qué te parece que pasa aquí?
No me puedo quedar aquí, en Carrera Blanca. Y tampoco Avulstein estará mucho más seguro.
Me alegro de que hayas conseguido poner la Llave a buen recaudo.
¿Qué te sirvo? ¿Aguamiel? ¿Vino?
Deberíamos seguir. Ven aquí. Déjame ver si puedo soltar esas ataduras.
Sangre de Dragón, Sangre de Dragón, presto juramento en su honor, ¡para que el mal de nosotros se aleje!
Carlotta te ha empujado a esto, ¿no? Pues lo siento, pero esa temperamental viuda es mía. Solo que ella aún no lo sabe.
Librarnos del Imperio solo nos ha resuelto el problema a medias.
Mikael, hijo. ¿Qué tal algo con un poco de chispa?
Seguro que el dueño de este lugar se sentirá aliviado. Han pagado su deuda.
Eres un orco, ¿y no sabes nada de Malacath, nuestro amo y el tuyo?
Pero Samuel me ha dicho que ha vuelto a su casa de Ventalia y que está haciendo algún tipo de ritual siniestro. Está intentando llamar a unos asesinos para que vengan a por la vieja Grelod.
Yo no prometí nada. Y, si estás en lo cierto, no lo necesitaré.
Ah... he oído hablar de él. Se supone que estas paredes muestran la historia de los antiguos que construyeron este lugar.
Gracias por contarme la verdad. ¿Podrías hablar también con Faendal? Seguro que te agradece que le hayas defendido.
Geh, Sahloknir, kaali mir.
Madesi, ¿has oído que parece que los imperiales avanzan hacia aquí? ¿Qué podemos hacer?
Mi especialidad es robar. Lo único que necesito es un objetivo adinerado y la luna iluminando la noche, y ya estoy en mi elemento.
Que es muy antiguo. Al parecer fue uno de los primeros santuarios de Skyrim. Ya hace casi cien años que la Hermandad no lo utiliza.
Bueno, la organización nunca ha sido mi fuerte. En absoluto. Necesito toda la ayuda que pueda conseguir.
Ven a verme a Ventalia cuando todo esto haya terminado. Siempre tendré trabajo para quienes luchan por Skyrim.
¿No vas a inclinarte por ninguna de las opciones?
Skyrim necesita gente como tú, si es que esperamos recuperar nuestra libertad del Imperio. Buena suerte.
Cierra el pico y fuera de mi vista.
Nos alegramos de poder contar con ella en Riften. Nos trae estabilidad, oportunidades de trabajo y valor estratégico para la ciudad.
Otra de las incontables víctimas de esta guerra. Aquí tienes, pobre hombre.
Nada de luchar por ahora. No hasta que Skjor lo diga. Seguiremos entrenando.
Más te vale que sea importante.
Aun así, ahora insisto en avisar de que voy a entrar en sus aposentos. ¡La última vez se asustó tanto que casi me tira el orinal!
¡Oh, qué tranquilizador! ¡Más bien me parece que estás con los Thalmor y que esto es solo un truco para que abra la puerta!
Eres tú el que tiene el bastón, muchacho.
Oh. ¿Es esta... tu primera vez?
Si te resistes al arresto, tendremos que matarte.
Sin embargo, debo insistir en que mi laboratorio te sigue estando vedado.
No necesito esto. Mi familia malgastó ocho generaciones protegiendo esa Cuchilla de un culto muerto. Por lo que a mí respecta, puede seguir guardada en mi casa.
Solo un momento más, por favor.
De acuerdo. No me lo cuentes. Pero reconozco esa mirada. La mirada de alguien que se ha enfrentado a su muerte y ha estado en manos de la ley.
¿Deseas vender algo? Pago precios justos por todo tipo de artículos.
Y ahora, a volver a trabajar.
Desde el momento en que te di con una flecha envenenada en el santuario del Velo de la Nieve, mi camino cambió de rumbo.
¡Sé que el honor de tu familia es importante, pero no nos lo podemos permitir!
¿Todavía no tienes noticias de tu familia?
Pero mira cómo divago... En fin, supongo que me dedicaré a lo mío, que es poner mala cara. Tú puedes quedarte ahí en la esquina y vigilar por si vienen asesinos.
Espero que no estés pensando en Alva.
Por desgracia, aún no he podido presenciar personalmente cómo funciona.
¿Qué arma te gusta, heraldo?
Esos dos ya no son un problema.
¿Es seguro ya?
Su espíritu ha partido. Miembros del Círculo, retirémonos a la Forja Inferior a llorarlo juntos.
Vale. ¡Si no puedes pagar con dinero, pagarás con tu vida!
Está su pericia con la magia, su carisma y su fuerza de voluntad. J'zargo alcanzará el éxito, de eso no cabe duda.
Ahórrame un montón de problemas. Toma, llévalo al Palacio Azul.
Entonces... ¿Ulfric consigue su corona y ya es rey supremo?
No tenemos nada de qué hablar. El asesinato de Paarthurnax va más allá de mi capacidad de perdonarte.
Así me gustan las cosas. Breves y sangrientas. Ni se enteraron de qué les pasó.
Si estás pensando en asentarte y montar una granja, has elegido un buen lugar.
Sospecho que Brurid planeó todo esto; ha habido cierto rencor entre nosotros desde la muerte del rey.
¿Dónde has oído tal cosa? ¿Con quién has estado hablando?
Arboleda de Kynes. Allí hay un túmulo antiguo. Si conseguimos llegar antes de que suceda, quizá averigüemos cómo detenerlo.
Es demasiado tarde. No ha quedado nada por lo que debamos volver.
¿Está... muerto?
Tenía que habérmelo esperado. Te daré 200 piezas de oro, y me dejarás en paz.
Nos esperan para luchar aquí mañana. Gjukar ha decidido acampar aquí durante la noche. Aunque a mí no me gusta.
Jugamos a la caza del elfo. Tú eres el elfo.
Espera, déjame adivinar. Lo harás más tarde.
¿Difícil? Soy jarl. Como la carne más suculenta, bebo la mejor cerveza y cazo con los mejores sabuesos del fuerte.
He entrenado personalmente toda una camada para el jarl. Eso me recuerda que iba a entregar un poco de comida para perro en el bastión. Ternera aliñada. Su favorita.
Parece una prenda de las que suelen llevar los elfos oscuros. Pregúntale a Revyn Sadri. Probablemente él lo vendió, fuese lo que fuese.
¡Te concedo una nueva vida!
La idea de pagar la dote a ese, ese... Capa de la Tormenta me revuelve el estómago.
Por los dioses. Aún... ¡aún vives! Pero yo había oído que... vuestro santuario...
¡Por los Ocho! ¿Qué... qué lleva esto?
No, para nada. Si no fuera porque pagas tu habitación, te habría echado hace tiempo.
Ahora vete, por favor. Recoge tu dinero y no volvamos a vernos nunca más. Nuestros negocios, gracias a los dioses, han concluido.
Entonces deberás buscar el despacho de Elenwen y buscar los archivos. Malborn te indicará cómo proceder.
Esbern. ¿Adónde quieres llegar...?
Ser jarl no podría resultar más fácil. Deberías probarlo alguna vez.
Aspiro a ganarme ese título, sí. No obstante, el camino que he de recorrer está repleto de adoquines sueltos y mortíferos fosos.
Pues vayamos al templo de Refugio Celestial. Sabía que tú tendrías alguna pista, Esbern.
Excelente. Creo que te alegrará haber tomado esta decisión.
Cada cosa a su tiempo, chico. Cada cosa a su tiempo.
Reconozco que no es algo que anhele hacer, pero también me ha puesto al cargo de la formación de hombres y mujeres para los nuevos ejércitos.
Estoy de baja en la destilería Espino Negro. Volveré a trabajar por la mañana.
Y por esos mismos motivos no puedo aceptar la corona como "rey supremo".
Sí, señor.
Deja de protestar y mantén los ojos bien abiertos. Podrían venir en cualquier momento. ¡Si fuera ellos, vendría aquí directamente, con la espada bien preparada!
Pronto vendrán comerciantes, y tenemos escasez de pieles de oso.
Que no te vea nadie y no pasará nada.
¿Quién eres? Tú... tú estás con la Hermandad Oscura, ¿no? Lo sabía. ¡Sabía que vendrías a por mí!
Intenta no volver a molestarme, ¡estoy enfrascado en una investigación revolucionaria!
¿Te has metido en algún lío?
Voy a ir contigo te guste o no.
Si los malditos Cuchillas no son rivales para los Thalmor, ¿qué posibilidades tengo yo?
Una mezcla "interesante"... Sigue experimentando. Mejorarás con la práctica.
Vamos, ya hemos discutido eso. No viajaría por todo Skyrim. Solo ir a Carrera Blanca y volver, nada más.
Buena suerte. Ahora nadie puede ayudarte.
Por Ysmir, esto no va a acabar bien...
¡Ve al Colegio antes de que sea demasiado tarde!
Le he estado dando vueltas... tal vez sea yo el Sangre de Dragón, pero aún no lo he descubierto.
Vaya, qué bien, más nórdicos.
Tu escudo... es de factura enana, ¿verdad? Y sin embargo, parece... mucho más.
Cuestor.
Necesito que provoques el caos en la comarca para que yo pueda colocar a los hombres en posición sin llamar demasiado la atención.
¡Hiyargh!
Kust es el responsable del cementerio de Falkreath, yo cuido de la capilla.
Eh, vale. Ya veo que no merece la pena meterse contigo. Lárgate de aquí antes de que cambie de idea.
Bienvenido a La doncella guerrera. No te preocupes por el nombre, tenemos acero de sobra para los hombres luchadores.
Debes de pertenecer a esos hechiceros del Colegio de Hibernalia.
J'zargo irá a donde sea necesario para aprender más. Hasta a la propia Oblivion, si es necesario.
¿Necesitas consejo? Habla con Brynjolf... Tengo cosas mejores que hacer.
¡No había oído un grito de verdad en siglos!
Pero tendrás que hablar con Jorleif. No podemos permitir que cualquiera vaya por ahí afirmando estar en misión oficial.
Trabajo para Eydis. Ella regenta la posada.
La única gente a la que ofendo es a los tramposos que no me pagan suficiente oro y a los idiotas que no reconocerían una buena carne ni aunque se la tirara a la cara.
Si buscas un sitio para tomar un trago, el salón El calor de la vela tiene chimeneas acogedoras y cerveza fuerte.
Es imposible que nadie con autoridad haya aprobado esto.
Esto... No estarás planeando usar esa arma, ¿a que no? Al menos no contra mí... ¿verdad?
Nada que deba preocuparte. Podré seguir observando todo cuanto suceda aquí.
Yo, bueno, claro que no... Estaré encantada de echar una mano.
Al emperador le va a encantar. ¿A que sí?
Creo que tengo más de estos como relleno en mi colchón.
También debes prometer lealtad inquebrantable a tus compañeros Capas de la Tormenta, a Skyrim y a su pueblo.
¿Tienes algo que tratar con Clavicus Vile?
Y yo. Espero que sea feliz en el templo.
Meyz nu Ysmir, Dovahsebrom. Dahmaan daar rok.
¿Llamas... a eso... un... golpe?
Discúlpame, mi señora, pero te recomiendo encarecidamente que no vayas.
Ah, y si te encuentras con Maven Espino Negro, procura caerle bien. La ciudad es suya, y de nadie más.
Disculpa a mi ama de llaves, es un tanto sobreprotectora conmigo.
No me gustan los mimos, los trovadores, los actores, los acróbatas, los malabaristas, los juglares ni los equilibristas. Los flautistas me provocan dolor de cabeza, y odio especialmente a los bufones.
Bien. El honor para ti.
Bueno, tal vez eso se deba a que no eres más que un aprendiz.
Si estás buscando oportunidades para conseguir dinero... yo soy tu hombre.
¡Mi hoja tiene sed de tu sangre!
El hechicero de la corte de Markarth, Calcelmo, puede que tenga el material necesario para traducir este diario.
Soy... Bueno, lo que soy no importa. Dejémoslo así, ¿eh?
No obstante, si perdemos la guerra, los guardas de Soledad no marcarán mucho la diferencia después.
¡La Legión está aquí! ¡Defended la entrada!
Azura, que alejó a sus hijos del desastre de Páramo de Vvarden. Eres quien profetiza y revela nuestro auténtico futuro.
Maldita sea, ese dragón no quiere rendirse.
Los ladrones solían refugiarse allí en el fuerte Halcón de las Nieves, pero los echaron. Unos hechiceros, dicen. Por mí no hay problema, siempre que no me molesten.
¿Por qué? ¡¿Por qué?!
En aquellos tiempos, aún se podían encontrar dragones en las cumbres más remotas.
Quisiera pagarte para que lastimes a otra persona por mí.
La gente dice que hago oro gracias a la miseria de otra gente, pero ¿qué otra cosa puedo hacer? La herrería es lo único que domino.
Carrera Blanca pertenece a los verdaderos hijos de Skyrim, como debe ser.
Aaggghhhh...
¿Por qué no estás en tu puesto, justicia?
El Imperio ha mostrado hoy su verdadera cara, ¿eh? No te preocupes. Yo también fui leal al Imperio, antes de que se me abrieran los ojos.
¡Todos a bordo!
No eres uno de mis trabajadores. ¿Qué estás haciendo aquí?
Calma. No sé lo que está pasando. Vamos a mirar y esperar.
Los argonianos ni siquiera pueden vivir dentro de sus murallas. Están todos atrapados en los muelles.
¡Ahora vete! ¡Los orcos podrían penetrar en el sanctasanctórum en cualquier momento!
Sí. He oído decir por ahí que el Viejo Hroldan estaba encantado, pero nadie ha visto un fantasma aquí desde la Gran Guerra.
Alftand. El punto de perforación, de entrada, de excavación.
¡Pescado fresco! ¡Pescado fresco!
Normalmente se hace para liberar a alguien importante para el cliente... y a veces para... bueno, para matar a alguien en su nombre.
Me inclino ante tu certeza. En cierto modo, te envidio. A menudo, un gran conocimiento conlleva la maldición de la indecisión.
Bien, bien. Tú indícame dónde está, y yo me encargaré del resto.
¡Ya está! Vamos, salgamos de aquí antes de que el dragón nos tire la torre encima.
La gente ha estado oyendo cosas raras provenientes de la casa de Aretino. Cánticos. Se dice que el pequeño Avento intenta contactar con la Hermandad Oscura...
Os envidio a vosotros los viajeros. Los sueños no afectan a quienes no son de por aquí.
(Sollozos)
Cuando se hizo evidente que nos tendríamos que replegar, ella se quedó allí y se aseguró de que los demás estuviésemos bien.
Después de lo que les ha ocurrido a esas mujeres, me preocupa mi propia seguridad.
¿Has acabado? En marcha.
Comprueba las estanterías alrededor del balcón y yo miraré en el nivel inferior.
Tampoco es tu problema.
¿Es una broma?
N'wah demente... ¿Intentas que muera alguien?
Individualmente, los draugr no dan tanto miedo. Son mucho más mortíferos en grandes cantidades.
Bueno, ¿has recuperado ya el Azote de ortigas que tenían esas asquerosas brujas cuervo?
No te cruces en mi camino, elfo.
Por su amor hemos aprendido a amarnos los unos a los otros. Es por su amor que aprendimos que una vida solitaria no es vida en absoluto.
Si lo que buscas es una limosna, busca en otra parte.
Bolli, he estado mirando las cuentas y veo que has donado varias sumas de oro al templo de Mara. ¿Es que te has vuelto loco?
Y hemos llegado tan lejos porque nuestra causa es justa. Porque luchamos como uno solo. ¡Y porque nuestros corazones revientan de ira!
¡Socorro, ayuda!
Buen trabajo. Toma esto.
Ahora Malacath espera mucho de nosotros. No le fallaremos de nuevo.
Algo de volver a colocar esto en la cámara de Yngol, no lo sé.
Qué susceptible. Puede que aún tengas algo de dunmer.
Bueno, vi algo interesante no hace mucho.
Una de las formas más rápidas de hacer dinero en Skyrim es "limpiar" los objetos de valor de algunos de los hogares más ricos.
¡Qué serio! Ja, ja, ja.
Bueno, hicimos lo que había que hacer. Ni más ni menos. Me alegro de seguir con vida para contarlo.
¿Cómo te atreves a pavonearte por aquí vistiendo esa mugrienta piel de los Capas de la Tormenta?
¿Por qué alguien como tú querría estar en un sitio como este?
¿Aquí? ¿Aquí mismo? Muy bien, J'zargo te esperará.
Bien. Yo haré lo mismo. Todavía nos sobran muchos astiles del cargamento de Cauce Boscoso.
Gracias por venir, hermana.
Riften está bajo mi protección. Cuídate.
Siempre es un placer hablar con un bardo.
Vete a Soledad. Es hora de dar al emperador un buen motivo para visitar Skyrim.
¡No necesitamos hechiceros!
Sí, tuve suerte. Vex descuartizó al tipo y después me dio una poción. Si ella no hubiera estado allí...
Ah. Bueno, ya me dirás si necesitas algo.
Temo que esta tregua no dure mucho. El general Tulio aprovechará cualquier oportunidad para recuperar la ventaja.
Aunque estas tallas nos indiquen el paradero de la corona, estoy segura de que tendremos que cruzar esta puerta de una forma u otra.
Excelente. Una vez más has demostrado tu habilidad innata para el asesinato.
¡Uuuf!
Uno de los jarl ha solicitado nuestra ayuda.
Es cierto... Podemos asegurarnos de que ella nunca llegue a Narzulbur.
La mina Panza Roja recibe su nombre de la niebla rojiza que siempre hay en la zona.
Nunca rendiré Skyrim a manos de un Imperio corrupto y moribundo.
Eres una mujer muy valiente. Pero eso ya lo sabía.
Claro. Es tuya por un día.
Tenemos guarniciones en todas las provincias del Imperio. Nuestra misión es servir al emperador, defender la ley y proteger a los ciudadanos.
Vaya, qué forma tan discreta de robar.
Voy a seguir fabricando armas.
Necesito escamas de dragón. Y no unas escamas cualesquiera.
¡Que Mara te bendiga!
Siempre hay algún tipo de problema en la Cuenca, pero un señor de la guerra local se ha pasado. Tenemos que hacernos cargo de la situación.
Los Divinos me rescataron de las calles, y también pueden rescatarte a ti de tus tribulaciones.
Tu poder sobre los demás será grande, como el mío.
Si nadie quiere eso, me lo llevo.
Debemos mantener el orden y meter a los jarl rebeldes en cintura antes de que tengamos una guerra a gran escala en las manos.
Se ve que ha venido un sacerdote de Mara, que dice que los Divinos levantarán su maldición de algún modo, pero eso está por ver.
No mientes. La mejor pelea que he tenido en años. Aquí tienes.
Bien. Ahora, en marcha.
Interesante, por no decir algo peor. Con todo lo que ha sucedido.
Primero tú... ¡y luego la Cuenca entera!
¿Te mantienes ocupado, Sergio?
Te recuerdo. No te conozco... y mi padre dice que no debo hablar con desconocidos.
Necesito que no te muevas del sitio, por favor. No quiero arriesgarme a herir a otros aprendices.
Sí. Eso fue hace años, ¿entiendes? En aquella época éramos más. Antes de que los bruniikke, los akaviri, llegaran y mataran a todos mis zeymah.
Es un arte honorable. Te enseñaré lo que pueda.
Rápidamente, se formaron bandos tras esos hombres y la Ratonera se convirtió en un baño de sangre.
¿Me has llamado?
Rexo te dará ahora dos objetos que deberás pasar a tu superior.
Tengo mucho que hacer en la granja, así que procura ir al grano. ¿Qué es lo que quieres?
¿Necesitas algo más?
¿Cuándo va a sacarme de aquí, Bolli?
¿Necesitabas algo en concreto?
¿Qué esperabas? ¿Que nadie se daría cuenta de que estabas metiendo las narices donde no debías?
Le has hecho un gran servicio a esta ciudad.
Valientes palabras, Batallador. Y cuando estés ajusticiando a los traidores, ¿te ocuparás también del emperador?
Estamos muy cortos de personal por la guerra. Nadie tiene tiempo para este asunto. No es agradable, pero es así.
Exigimos una compensación por la masacre de Baldío de Karth.
Sabía que podía contar contigo.
He pensado que tenemos que ser más... discretos.
No te mentiré... Existe cierto riesgo. Pueden haber pasado décadas desde que alguien ingirió el Letargo por última vez.
¿No está tan claro? Oh, entonces quizá deberíamos echar un vistazo antes, ¿no?
No. No tomaré parte en un Imperio así. Y con gusto rajaré a todo el que diga lo contrario.
Ahora, gracias a la generosidad de mi madre, esta ciudad está dejando huella.
Aquellos que nacen con Sangre de Dragón en sus venas, como el mismísimo Tiber Septim.
La mayoría de mis campesinos se han unido a los rebeldes. No consiguen ver la situación en perspectiva. Skyrim necesita al Imperio tanto como él a nosotros.
Si alguien sabe qué significa la venida de los dragones, es Ulfric.
¿Los oídos del viento?
Siempre.
Hay un viejo refrán que dice que solo un nórdico puede trabajar la tierra en Skyrim. Dudo que nadie más tuviera paciencia para hacerlo.
El señor de las conspiraciones, embaucador de naciones, devorador de Trinimac. Reina de las sombras, diosa de la destrucción, aquel que destruye, aquella que aniquila...
Entonces, ¿has estado pensando en lo que te dije?
Cuanto antes salgamos de este agujero inmundo, mejor.
Muy bien. Nombro con el título de Ruiseñor a tus iniciados y te devuelvo esa condición a ti, Karliah.
Ve tú delante.
Diez septim mañana, pequeño Batallador. O te rompo la cara y la boca.
¿Por qué empuñas un arma élfica? ¿Acaso el acero nórdico no es lo bastante bueno para ti?
¿No deberías estar arruinando el día más especial de cierta persona?
¿Has visto alguno en tus viajes?
Nadie más sabría siquiera por dónde cogerlo.
Vici hablará a menudo con sus invitados, como es costumbre en las bodas. Mátala cuando lo haga, y te garantizo una sustanciosa bonificación.
Que el susurro de Sithis esté contigo, hermana.
Oh, pues sí que era joven, y guapo. Yo hasta me planteé ir a por él, hasta que conocí a mi marido.
¿Cómo te han ido las cosas?
Espero que no tengas intención de usar esa arma aquí dentro.
Vamos.
¿Entonces es cierto lo que dicen todos? ¿Que Avento Aretino está realizando el Sacramento Negro? ¿Que intenta invocar a la Hermandad Oscura?
Muy bien, entrega los objetos de valor o te destripo como a un pez.
Ah, por fin nos envían a alguien para ocuparse de esa persona demente.
Esto ya es casi ridículo. Si no podemos abrirla rápido, el jefe nos cortará la cabeza.
...soñando ... ¡Profanadores! ¡Matad a los profanadores!
¿Hermano? Eres... ¿Eres tú?
Me trata como a un esclavo... Me manda hacer los trabajos más sucios y repugnantes de la destilería.
Si consigues infiltrarte en su campamento y robar sus planes, les tomaremos la delantera.
No despaches tan fácilmente a nuestro adversario. Tienen recursos, son pacientes y, durante años, han logrado evitar que los identificaran.
Jamás había visto a nadie con tal destreza. Solo quiero que sepas que, si necesitas algo, puedes hablar conmigo.
Creo que el legado te ha dado una orden. Espero que la cumplas. Puedes irte.
Esperaba ir a Riften a comprar cosas, pero puedo hacerlo después de acabar con los olmos.
¡Eh! No te he pedido que me lanzases magia.
Vulwulf, siempre es un placer.
Tal vez tendríamos que admitir de una vez que es un lugar espantoso para un aserradero.
Escucha, canalla insolente. Según mis predicciones, algo ha sucedido en la cueva Cráneo de Lobo que ha hecho volver a este mundo a Potema.
Podrías... ¿podrías ayudar a J'zargo?
La gente de por aquí dice que Balimund es el mejor herrero de todo Tamriel. Espero estar a su altura algún día y hacer que esté orgulloso de mí.
Te agradecería que me permitieras hacerte algunas pruebas. Todas en interés del progreso y de la ciencia, claro está.
Me aseguraré de que Sorli esté a salvo, ahora que gobierna Morthal.
¿Buscas algo en especial esta vez?
¿Alduin? ¿El mismísimo Devorador de Mundos? Pero... ¿cómo enfrentarnos a él? ¿No supone su regreso el fin de los tiempos?
Por la corona de Shor, esa mujer nunca se rinde. Supongo que por eso me casé con ella.
¡Lárgate! ¡Este es mi naufragio! ¡Mío!
Aún no. Sabes que pides cosas muy raras, ¿verdad? No es fácil encontrarlas.
Deberías comprar verduras en el puesto de Carlotta. La mayoría salen de mi granja.
Me honra ser el elegido.
Argoniano.
Se trata de Ranmir.
Si quieres captar la atención de Boethiah, debes sacrificar un esclavo ante su capilla.
Los forasteros solo traen problemas.
Quizás si hubiera estado más alerta, entonces Mercer Frey no me habría atraído a mi destino ni me habría robado la Llave maestra.
Oh, ya veo. Sí, por supuesto, echaré un vistazo. Tráemelas cuando te venga bien.
Je, je. No olvides que soy un escama sombría. Nací para matar, literalmente.
¡Y ahora honra a tu padre como se merece y bebe!
¿Hjlati? ¿Eres tú? He estado esperando.
Ya lo sé, querida. Pero es que es un hombre muy ocupado, y fiel a los Capas de la Tormenta.
En verdad, lo que quiero es que le lleves algo. Verás, sus caravanas son famosas por transportar sustancias ilegales.
Haal... ¡Viik!
Disfruto de este trabajo lo suficiente, pero no me importaría retirarme. Llevo tiempo pensando en venderle la posada a Ysolda. Bueno, ¿qué necesitas?
¡Ve tú delante!
¡Soy yo! ¡Soy yo! Pero no solo a mi madre. A nuestra madre, ¿eh? ¡La Madre Noche! ¡Oh, sí!
Es una lástima. ¿Qué tipo de problemas?
Estúpido Lars Batallador... Me las veo con él casi todos los días, pero eso no es ni pelear, porque no contraataca.
Ese maldito lugar está invadido por una niebla roja. No puedes ver nada a más de tres metros.
Toma, quédatelo. Ahora eres parte de la leyenda tanto como Curalmil. Espero que esto te traiga la felicidad que ansiaba mi maestro.
Harías bien en guardar el arma... a no ser que estés pensando usarla.
¡Ah, sí! ¡Eso es! Muchas gracias.
No te lo tomes a mal, pero no tienes muy buen aspecto.
Hoy en día hay una especie de obsesión con los cuchillos y las flechas. Puedes matar a alguien con la misma facilidad usando un buen hechizo.
No puedo esperar a coger del cuello a ese maldito con mis propias manos.
¿Qué decisión hay que tomar? Le he permitido vivir aquí. Y pienso cumplirlo.
¿Has tenido alguna vez un mal pálpito sobre esas hermanas?
Ah, pero es una lástima tener que desprenderse de un arma así, ¿no crees? Supongo que podrías convencerme para quedártela...
Oye, todavía tengo un contacto en Bosque Valen que podría tener trabajo para nosotros. Puedes unirte a mí si quieres.
Wuuthrad era la hoja que llevaba Ysgramor cuando regresó de Atmora.
No voy a advertirte otra vez.
Es nuestra única hija, Boti. ¿Debo arrojarla a los lobos?
Apuesto diez de oro tres a uno por la blanca.
Por si no las maldiciones no fueran suficientes, ahora debo sufrirte a ti también. ¿Qué pasa?
Que así sea. Diles a Ulfric y al general Tulio que los Barbas Grises quieren hablar con ellos.
Ni siquiera conozco a nadie del Colegio. Supongo que todo el mundo lo da por hecho porque soy un dunmer.
¡Un nuevo día, otra oportunidad para aprender!
Lo veo todo, lo oigo todo y lo sé todo.
Empezaba a creer que no volverías.
No habríamos conquistado esta ciudad sin tu ayuda, señora.
Ah. Ya veo.
¿Qué te aflige, esposo?
Y... ¿qué te dijo?
Apoya a Ulfric o muere en el intento. No hay término medio.
Será mejor que permanezcamos juntos aquí abajo.
Tú deberías saberlo. Tú me trajiste el mapa de las Cataratas Lúgubres.
Es una fuerza poderosa que no hay que enojar. Yo lo descubrí demasiado tarde.
Somos una pequeña destilería, pero estamos creciendo rápidamente. Hace poco tiempo que Sabjorn se encarga de este lugar, y fíjate.
No, Farkas. Y no se trata de eso.
La mayoría de los estudiosos creen que los nórdicos de antaño usaban estos instrumentos con el fin de preparar a sus muertos para el enterramiento.
Astrid me mandó investigar el Penitus Oculatus. Sus miembros están muy bien entrenados, son guerreros efectivos. No bajes la guardia, hermano.
La única razón por la que el jarl mantiene a Anton es porque cocina de todo.
Bueno... de acuerdo. ¿Qué necesitas saber exactamente?
Adiós.
Coge lo que puedas, y vámonos.
Pero ahora que tengo este Triturador de rocas, puedo partir piedras como quien corta mantequilla con un cuchillo caliente.
Gracias por avisarme. Veré cómo puedo ocuparme de esto.
Puedo... puedo oír las voces ahí fuera. Por favor, déjame marchar. No te he hecho nada.
Hay que ver, qué gente tan rara. Por favor, échate a un lado, ¡que tengo que seguir con lo mío!
Has conseguido una disolución rara de ver, una infusión de esencias puras. Una elaboración buenísima.
Ya has comprado todas las mejoras disponibles. Me temo que ya no tengo nada más que ofrecerte.
Pero antes, dime. ¿Por qué quiere un guardia rojo luchar por Skyrim?
Los demás tendrán que encontrar otra forma de salir.
Pensé exactamente lo mismo cuando Galo me explicó estas cosas.
Ainethach ha muerto, pero eso no significa que podamos dejar de trabajar.
Es una espada que fabriqué para el jarl Balgruuf el Mayor. Es una sorpresa, y ni siquiera sé si la aceptará, pero aun así...
No voy a volver a advertirte. ¡Sal de aquí, o llamaré a los guardias!
Es hora de reemplazarlo... a la manera tradicional.
Sí, tal y como habíamos establecido. ¿Y también has conseguido esconder el libro? Bien.
Esa es la puerta norte, por si se te olvida.
No estoy seguro. Sé que lleva azúcar lunar, pero después se añaden todo tipo de ingredientes para aumentar su potencia.
Has elegido tiempos extraños para venir a Lucero del Alba. Parece que toda la ciudad está teniendo pesadillas...
No sé cómo harás tú, Tekla, pero yo siempre rezo en silencio y decido a quién lo hago.
Ha sido un placer.
He estado casado muchas veces, pero los dioses siempre las apartan de mi lado.
La mina está cerrada. Piérdete.
Si el mundo ha de llegar a su fin, que así sea. Dejemos que muera y renazca.
¡Bah! Lo haces tan mal como el resto.
No sabes cuánto.
¡Ja, ja! ¡He sufrido cosas peores!
Bueno, digamos que conozco a algunas personas que son expertas en hacer desaparecer a la gente que lo necesita.
Toma, por las molestias.
No, no lo soy. Parece que tenemos algo en común.
Ah, Jora. Me alegro de verte. Me preguntaba si podrías pedirle a Lortheim algo por mí.
Me temo que no hay mucho que decir. Hibernalia ya no se parece a lo que solía ser.
¡Ah! Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que me enfrenté a un pobre héroe infeliz de la Sangre de Dragón.
Cuando mi tía se casó, hicieron un pastel que medía un metro de alto. Aquel día me puse malo comiendo.
Me resisto a creerlo. Wuunferth fue amigo fiel de Ulfric durante muchos años.
Respira y concéntrate.
Mi hermano criminal... ¿qué necesitas?
Ten, toma esto. Teniendo en cuenta que lo idolatran, quizá consigas liberar a tu prisionero.
¿Hola? ¡Tú! ¡Eh, ven aquí! ¡Por favor, necesito ayuda!
Es hora de partir.
¿Y qué hay de la jarl Elisif?
Este santuario ha sido mi vida desde que era una muchacha. Fue entonces cuando descubrí mi... llamémoslo "aptitud". Por la eliminación.
¿Qué? ¿Oyente? ¿De qué estás hablando? ¿Qué es esta locura?
Te seguiré al combate.
¡Por los dioses, deja de jugar conmigo y acaba ya!
Ahora muévete.
Y ya he recibido aviso de que el cliente está satisfecho. Lo has hecho bien en tu nombre y en el de los Compañeros.
Te doy la bienvenida a La gamba empeñada. ¿Qué puedo hacer por ti?
No tienen que estar perfectas. Mándamelas cuando estén listas.
Cuidado, por aquí hay una plancha de presión. La activé antes y me llovieron dardos.
Ojalá pudiera decir que sí, pero no es tan sencillo.
Usa una mezcla secreta de especias, miel fresca de la hacienda Brillo Dorado y unas cubas envejecidas y construidas a propósito para darle el mejor sabor.
Es un trabajo más delicado del que acostumbras a hacer.
Entonces, ¿de qué se trata? ¿Qué has hecho?
Sé que la logística de semejante empresa será muy complicada. Antes será necesario realizar otros asesinatos menores como paso previo... al objetivo principal.
Está bien. Necesitábamos su ayuda, pero ahora ya no, y ya va siendo hora de que pague por sus crímenes.
No sé cómo has convencido a Ulfric para que hablara con el Imperio. Si quieres mi opinión, es una completa pérdida de tiempo.
Morthal no necesita más problemas. No te metas en líos, ¿entendido?
A menos, claro, que esa fuera tu intención. Aquí tienes tu paga.
Aún no he firmado ningún acuerdo con ellos, pero seguro que mi primo querrá su tajada si lo hago. ¿Qué mejor manera de aplacar su orgullo herido?
Bien, pues. Supongo que un poco de diversión inofensiva no tiene nada de malo.
No es ningún secreto que mi familia perteneció al Amanecer Mítico. Uno de mis ancestros incluso fue elegido para asesinar al mismísimo Uriel Septim.
Exigimos una compensación por la masacre de la granja de Cebada Negra.
Sí, Mulush.
¿Has visto a esos guardias? Pórtate bien o tendrás que vértelas con ellos.
Adelante. Skjor va por delante explorando el camino.
Vale. La empuñadura está en un cofre dentro de mi casa. Toma las llaves. Coge esa maldita cosa y lárgate.
¡Estás aquí! Y llegas justo a tiempo. Si le pasase algo a Arn, sería un infierno pagar por ello.
Por favor, ayúdame a encontrar a mi Thorald como sea...
Aquí hay una cueva. Si tenemos suerte, dentro nos esperan osos. Si no, troles.
¿Puedo ayudarte? ¿Solo con la coraza, al menos?
Fue el jarl Olaf Ojo Único, que mas tarde se convertiría en rey supremo.
Igual que en la muerte hay nueva vida, en Oblivion hay un principio para lo que ha acabado.
Me alegro de que el antídoto esté haciendo efecto.
En cambio, a todos los demás... Es horrible. Imagínate soñar que mueres una y otra vez, noche tras noche.
¿No me puedes decir solo si la sujeción está mal?
¡Oye! Ya sé. El hechicero del jarl podría enseñarte. Está muchísimo más cerca.
Somos enviados especiales del Dominio de Aldmer, los dirigentes legítimos de Tamriel. Si lo deseas, puedo mostrarte por qué.
¿Qué cenaremos esta noche?
Para oírselo decir a Farkas; nuestro padre nos crio aquí como cachorros felices, correteando y mordiendo rodillas.
Pero aún hay alguien que tiene algo que hacer. ¿Mmmm?
Vas a preparar otra tanda de cerveza, ¿verdad? Como habíamos hablado. La que tenemos lleva más de un mes dentro de ese barril.
Así que ahora somos ricos y yo soy el jefe.
¡Oh! Bien, en ese caso, adelante. Yo te sigo.
Aquí no hay ningún secreto, por mucha curiosidad que tengas. Nuestra prosperidad no es sino fruto de nuestro duro trabajo, buena fortuna y las bendiciones de los dioses.
Ahora, vamos con tu deseo... Poder, ¿no?
Acércate más. Disfruta de mi presencia.
Pues vuelve cuando te apetezca, camarada. Vuelve cuando te apetezca.
Ah, maravilloso. No sabes lo que me alegra oírte decir eso.
¡Eh! Si estás ahí, amante de las borracheras. Lo hice, así que págame.
Por caridad. ¡Dame carne, nórdico gordo!
Thoring está al frente de la posada. Habla con él.
¿No lo ves? ¡He rezado a la Madre Noche! Yo soy el Sacramento Negro.
Aquí tienes, el nombre y la ubicación del cliente.
Me están saliendo canas. Acabemos con esta ceremonia.
Predicar a los pobres es una pérdida de tiempo. Si tanta hambre tienen, deberían cultivar algo de comida.
Has forjado una armadura de gran calidad.
Eh... ¿Qué ha sido eso? ¿Qué has hecho?
Jarl Elisif, yo me encargo de esto.
Vamos. Prefiero no tener que esperar aquí fuera y sola más de lo necesario.
Yo también.
Los prisioneros se las arreglan para llevarlas encima. Es la única moneda que tenemos en este sitio.
Mercer debe de haber activado estos pistones. Vamos a tener que buscar un modo de abrirlos.
Es una pena que vivamos en tiempos tan violentos, pero ahí lo tienes.
En primer lugar, nunca he visto Morrowind. En segundo, en suelo volcánico las plantas crecen prácticamente solas.
Su Voz encierra el poder del arte nórdico verdadero.
Si me provocas, me veré obligada a esgrimir mis garras.
Yo no dije que no fuese a luchar contra el gigante. Solo dije que ibas a ayudarme a llegar hasta él.
Debes hablar con Astrid. Aquí, en el santuario de la Hermandad Oscura.
Galo había descubierto lo que llamaba "un estilo de vida libertino y desorbitadas sumas de oro gastadas en placeres personales".
¿Ah, sí?
Nunca. No hasta que levantemos esta mina, saquemos a Beitild del negocio, ¡y hagamos que se disculpe por todo lo que me ha hecho!
Mmm... Ahora me siento un poco mejor. Gracias.
¿Nos ponemos en marcha?
Que alguien saque esa cosa de aquí y la queme.
Creo que tienes razón. De hecho, me sorprende lo bien que has hecho las cosas. Que quede entre nosotros, ¿vale?
Ten cuidado. Son más rápidos de lo que crees.
Le diste a Ulfric más de lo que merecía. Está claro que eso prolongará la guerra.
Se han metido con el viejo equivocado.
Casi ni me había dado cuenta de que te habías ido. Aquí tienes tu parte del botín.
Es un mago corrupto que desertó al comenzar la guerra. Yo le entregué a las autoridades, pero parece que escapó y ha acabado aquí.
Me pregunto qué podríamos haber hecho con el Ojo de haberlo utilizado mejor...
¿Quieres saber más al respecto? Pregúntale a Calcelmo. Suele estar frente a las ruinas, bajando por el túnel.
Limita tus intentos de invocación a los terrenos del Colegio. Los lugareños no necesitan otro susto al ver su pueblo lleno de atronach.
Bah, sé quién eres. No te sorprendas. No eres la primera persona que mandan para asesinarme. Ni serás la última. Bueno, acabemos con esto.
Ha remitido un poco, pero sigo sin poder dormir a gusto.
Mátame ya de una vez.
Cuando llegas a mi edad, ya no recuerdas por qué hiciste prácticamente nada.
Tampoco pensé que tuvieras el dinero.
Me muero de curiosidad. ¿Sabrás identificar al objetivo de este contrato? ¿A cuál vas a elegir?
El caso es que sí hay algo que podrías hacer por mí.
¿Has escapado de la mina de Cidhna? ¿Con Madanach? Todo el mundo en las madrigueras te llena de elogios.
Claro, ¿qué puedo hacer por ti?
¿Entonces tienes la Voz? Si lo viera, me impresionaría bastante.
Exigimos una compensación por la masacre de Cerro Pedregoso.
Tenemos otra docena que está madurando. Deberían estar listos en unos días.
Si mueres, tu cadáver no me servirá de nada.
¿Una monedita para un nórdico al que la fortuna ha dado la espalda?
"Y en la realeza, vuelvo a dar mi hálito, para remodelar esta, mi tierra. Lo hago por vosotras, Legiones Rojas, porque os amo".
Bueno, es solo cuestión de encontrar a los proveedores adecuados.
Sí, Ruiseñor. ¿De qué se trata?
Y también hueles a pocilga. ¡Qué peste! ¿Te has pasado el día revolcándote por el barro o qué?
Nuestro maestre del gremio me honra con su visita. ¿Qué puedo hacer por ti?
Qué vergüenza.
¿Mmm?
¿Problemas? ¡Es uno de los lagartos más testarudos que haya encontrado jamás! Este trabajo será todo un reto para ti.
Hun...
Tú espera aquí, sin moverte. Tarde o temprano me pondré con ello.
Mi único objetivo es mantener la paz.
De acuerdo. Es hora de asestar el golpe final a la rebelión de los Capas de la Tormenta.
No... No cuando estamos tan cerca...
Solo quería verte mejor, y me gusta lo que veo, querida.
En ese caso, sufre la ira del emperador.
¿Unos qué? Lo siento, no tengo ni idea de qué me hablas.
El próximo imperial que vea es hombre muerto.
Si no te interesa la música o la bebida, al menos puedes hablar con Corpulo. Te pondrá al día en los últimos cotilleos.
¡Aah!
Nuestros actos fueron vergonzosos. Seguro que la Madre Noche aún sigue llorando.
Supongo que habrás visto la casa que se quemó. Un asunto muy peculiar, ¿no?
El árbol que tenemos aquí en la ciudad creció a partir de un esqueje de ese árbol. Todavía puedes sentir la gloria del árbol materno a través de él.
Es como si un animal la atacara, pero estas heridas son de una hoja.
Bien. Me vendrá bien alguien de confianza.
¡Si dependiera de ti, el Sangre de Dragón estaría aquí soñando sobre la montaña sin hacer nada!
Alinearnos con cualquiera de los dos amenazaría con atraer una atención no deseada hacia nuestro Colegio.
Lame los vidrios y ahúma los cristales...
Si necesitas algo que oficialmente se supone que no puedes tener, ven a verme.
En Ventalia hace un frío insoportable. ¿Cómo lo puede tolerar esta gente?
Cuando trabajas lo bastante duro y encuentras tu ritmo, todo lo demás deja de importar.
Es lo que somos. Renegados. Criminales en nuestra propia tierra. Y abriremos un maldito agujero en la Cuenca hasta que seamos libres.
Pero... ¿quién eres tú exactamente? ¿Y por qué estás aquí? Creo que será mejor que te vayas de Mzinchaleft. Estas ruinas pueden ser bastante... peligrosas.
Así que gracias.
Algún día, los Renegados pintarán las murallas de Markarth con su sangre.
Sí, y al igual que las malas hierbas, no dan nada más que problemas.
Es decir, que sugieren que se podría dar mejor uso a los recursos que se destinan a mi investigación. Cualquier otro uso, de hecho.
Se rumorea que pueden conseguir cualquier cosa si el precio es adecuado.
Te prometo que, cuando esté listo, encontrará abierta la puerta de la celda.
Hablaré con Farkas sobre cómo has actuado. Vuelve luego.
No son magos delicados del Colegio. Bashnag tiene la habilidad de un maestro y la mente de un señor de la guerra. Son gente muy peligrosa.
Mi jarl, debemos hablar de los Renegados.
Tus palabras expresan los sentimientos de todos, Ulfric. Y por eso serás rey supremo.
Es que no me lo voy a creer si alguno de nosotros sale vivo de esta.
Riften me parece la mejor opción. Bien fortificada, de fácil suministro a través del lago Honrich. Además de todo el aguamiel que podamos beber.
Al fin todas las piezas de la Cuchilla de Mehrunes están en mi poder. Es hora de que sepas una cosa.
¡Te he visto robar eso!
Quiero estar en el lado de los buenos.
No creo que sea seguro excavar en una cueva sobre una cripta.
Lo único que puedo decirte es que ha abusado de su autoridad como Ruiseñor.
¿De verdad? Bueno, permíteme que te aclare la situación.
No dejes que la puerta te golpee el trasero al salir.
Tienes razón.
¡Klo!
Muy bien. Colaré esto en la embajada por ti. He de irme. No te preocupes, nos encontraremos en la fiesta.
Escucha, chico. Tengo fe en ti. Sé que suena extraño viniendo de un ladrón, pero estos acontecimientos recientes han cambiado mi punto de vista.
Iba a por Margret. ¿Por qué?
Pues claro, deja a un hombre viejo con su sueño arruinado. Como todo el mundo. Idiota.
¿Y qué? ¿No puedes leerlo? Está bien, le echaré un vistazo.
Ah, bueno. Seguiré buscando a alguien. Gracias de todos modos.
Guarda tu arma.
¡Cuidado, no apagues esa vela que hay en la chimenea de arriba!
Me parece bien.
Además, está el jarl, Laila nunca accederá a...
Quería conocer a Ysgramor y vivir las glorias de Sovngarde. Pero le privaron de todo eso.
Si eso es lo que quieres... Te veré allí muy pronto.
El Pozo de Ébano es un conducto a través del cual Nocturnal influye en nuestro mundo. No a través de la magia o las bendiciones, sino puramente a través de la suerte.
Ah, sí. Se ha producido un incidente, ¿no es así?
¿Qué? ¿Quién eres? ¿Cómo has llegado hasta aquí?
Has de dar con un hombre, matarlo e incriminarlo falsamente. Este contrato es perfecto... para mí. Sin duda, mi querida esposa metió la pata.
Primero, tengo que asir tu alma.
No te preocupes por los perros, se ponen nerviosos cuando les entra hambre.
Por el Concordato Blanco y Dorado. El tratado que firmamos con los elfos después de la Gran Guerra prohíbe el culto a Talos.
Te enviamos a dejar pruebas falsas en la casa del sujeto, y luego avisamos a la guardia del pueblo... El resto viene solo.
Deberías hablar con Ainethach si tienes algún negocio con la mina. No es que haya muchos estos días.
No, ahora mismo no. Tal vez luego, si sigo enfadada.
Esbern, si el Imperio pudiera reconocer la existencia de los Cuchillas, todos tendríamos un motivo de celebración.
Nunca lo había visto tan furioso. Lo mejor será que lo ayudes en lo que puedas.
Bien dicho.
Eh, tú. ¿Qué sabes de eso?
Supongo que ya no tiene sentido ocultar más tiempo la verdad.
Desde hará unos ocho años. Solía ser mercenario, pero un viaje a la hondonada Señal del Cuervo me curó de eso.
Y no es cualquier dragón. Es la mano derecha de Alduin.
Aah... Habla con mi marido si no hay otro remedio.
Los rebeldes han accedido a cesar las hostilidades hasta que fijemos los términos del tratado. Basta decir que no lo espero con los brazos abiertos.
Eh... ¿Por qué no hablamos de esto más tarde?
Me temo que deberás volver en otro momento. He recibido órdenes tajantes de que nadie moleste a lady Elisif.
Estas viejas ruinas... no quieren que estemos aquí. Sería mejor que nos fuéramos.
¿De qué hablas?
¿Qué...? El que lo haya hecho... está muerto. ¿Me oyes? ¡Muerto!
Por algún motivo, esa puerta es especial. Solo pueden abrirla dos personas, Balgruuf y Farengar, el hechicero de la corte.
Sin duda. Mi reverencia por las maquinaciones de Vaermina no debería tener prioridad sobre nuestra misión. Mis disculpas.
Toma, esto es lo que me puedo permitir ofrecerte como compensación. Espero que sea suficiente.
Bien hecho. Y parece que te debo algo a cambio.
Ni me hables, escoria profanadora.
Reldith es la granjera más trabajadora de todo Paraje de Rorik, pero yo soy el que tiene cabeza para los negocios.
No sé muy bien cuántos hombres habrá dentro, pero confío en que no sea un problema para ti. Buena suerte.
Si encontramos algo útil aquí, es que no me lo voy a creer.
Te enseñaré algo de lo que sé, pero ten cuidado.
Ari me dio esta daga cuando empezamos a cazar juntos. Decía que le daba suerte. Ahora deberías llevarla tú.
Claro. ¿Pero y si lo enviamos a él primero?
Sí. ¿Estás disfrutando de nuestro pequeño paseo? O tal vez quieras volver cuando mi señora acepte visitas.
Por eso he traído el Pergamino antiguo.
¿Qué ocurre? ¡No! ¡Dejadme en paz!
No, madre. Se procederá a la ejecución según lo previsto.
Weylin tenía un cupón de más. Se lo llevó directamente a su habitación.
Hola, Bolli. ¿Cómo va la pesca?
Tu atuendo es como una herida abierta... en lo que a ropa se refiere.
Ahora vete y déjame trabajar.
Venga, ahora no te muevas.
¡Ese es! ¡Es mi arco!
Si las infringes, perderás tu parte del botín. Sin quejas ni discusiones. Harás lo que te digamos cuando te lo digamos.
Estoy bien, estoy bien. En marcha.
Ha huido. Volvió a su hogar, en Ventalia. Samuel me ha dicho que está intentando contratar a unos asesinos para que vinieran a cargarse a Grelod. Espero que lo consiga.
Muchas gracias, señora. Adelante.
¡Oh, no! No puedo aceptarlo. Mamá dice que son una carga que debemos soportar por nuestro don.
Vaya... Pensaba que ya no la querías.
¿El jarl Balgruuf? No pretendo faltarle al respeto, porque ha gobernado bien la comarca de Carrera Blanca durante años, pero todo esto le viene grande.
Sí, un mapa de los antiguos túmulos de los dragones. He analizado los que están vacíos, y el patrón está muy claro.
Vale, ¡Cicerón sí que atacó a esa furcia, Astrid! ¿Y qué iba a hacer al ver a mi madre difamada y burlada? Oyente, ¡deberías entenderlo!
Y ahora, empezaremos el ritual...
Voy... voy a hablar con Fastred. ¡Ahora mismo!
Para lo que nos ha servido hasta ahora...
Hará unos 30 años, el Dominio de Aldmer invadió el Imperio. Fue un ataque por sorpresa, cogió desprevenidos a todos.
El problema es que será difícil de conseguir, ya que está en manos de alguien que no tiene una actitud muy amistosa.
Vive una vida digna de ser contada.
Bien. Los hombres esperarán un discurso. ¿Estarás a mi lado? Deseo honrarte, Sangre de Dragón y más fiel de los Capas de la Tormenta.
Ve si quieres. Nunca he visto huesos tan grandes, y quiero asegurarme de recordarlos para poder contar la historia correctamente.
No es tan fácil. Ella iría a hablar con el jarl si supiera que tengo algo que ver con esto. Tienes que hacérselo llegar de otra forma.
¡Vamos, prueba el abrazo de las tinieblas!
Bah. Mi organización atraviesa una racha de mala suerte, pero supongo que así son las cosas.
Mi tío Dengeir fue jarl hasta hace poco. Pero era muy mayor y la salud empezó a fallarle, así que renunció.
Hay túneles de alcantarillas en ruinas por la ciudad. La única manera que conozco de entrar es por una puerta que da al canal.
¡Wagh!
¡Llévanos!
Que camines por arenas cálidas.
Señor, tenemos que hablar.
Comprendo.
Un Dreth jamás olvida a un traidor. ¡Pagarás por esto!
¡Pero los auténticos héroes sois vosotros!
¡Usa el grito de Desgarro de dragones! ¡Es la única oportunidad de derrotarle!
No se me ha olvidado el servicio que me prestaste al recuperar la Piedra de dragón para Farengar.
Mi abuelo era hechicero. Mi padre no hablaba mucho de él. Pero encontré algunas de sus cosas en el desván, incluido este bastón.
"Por nuestro aliento, te la otorgamos hoy en nombre de Kyne, en nombre de Shor y en nombre de la antigua Atmora."
La catástrofe que se produciría dejaría en mal lugar a todos los implicados. ¿Me sigues?
Sí, Grelod.
Esa puerta de enfrente... es perfecta para una emboscada. Prepárate.
Entonces lo cogemos y nos largamos, ¿no?
El Imperio es el último bastión del hombre. Si Ulfric no estuviera tan cegado por su ansia de poder, vería que estamos en el mismo bando.
De Morrowind, por supuesto. Cualquier dunmer que valga su peso en ceniza te dirá lo mismo.
Hay algunos problemas en Falkreath. Siempre hay algún tipo de lío por allí, pero ahora ha alcanzado un punto crítico.
Eh, intento no preocuparme con historias del mundo exterior.
Por algún motivo se limitan a tirar al mar a sus delincuentes pensando que así se acaba el problema.
Nuestras acciones siempre han sido las mismas: ambos mentimos, engañamos y robamos para alcanzar nuestro objetivo.
La vieja señora Telar de las Doncellas es la dueña de los establos. Pero mi padre y yo somos quienes llevamos todo.
¡Maldita arrogancia imperial!
Antes de nada, ronda por aquí un orco que me está dando quebraderos de cabeza. No sé qué de una visión con la que necesita ayuda.
¿Qué? ¿Qué pasa?
Vale, mira. Si me pillan hablando mal de la destilería o de la familia, soy hombre muerto.
¡Sí! ¡Sí! ¡Lo ves, lo sabes, pero te niegas a comprenderlo!
¡Ahí dentro! Al otro lado de la puerta. Un viejo santuario, por lo que parece. Lo habría seguido, pero no conozco la frase.
Solo quería saber si necesitabas algo.
Prueba a poner las manos en el altar. Quizás Mehrunes Dagon se dirija a ti.
Sin dos llaves, es imposible abrirla. Yo tengo una llave, Delvin tiene otra y Mercer tiene la última. Eso es todo. No hay más copias.
Es insólito que el Consejo permita que una nórdica gobierne Riften bajo la bandera imperial. No puede haber sido su primera opción.
Intenta no dejarte llevar.
El marfil producido por esas bestias es tan duro como el hierro. Pero los gigantes han encontrado maneras de hacer que ceda.
Yo mismo estudié allí. Tuve que irme por un malentendido con una directora. Bueno, más bien fue un malentendido con su marido.
Cuando llegue ese momento, tú asumirás su lugar como mi emisario. ¿Qué dices?
Mantén tus armas enfundadas en presencia del jarl.
Te daré dinero. Tesoros. Tengo algunas cosas escondidas. Quédatelo todo. Es tuyo. Pero, por favor... para.
Preferiría un buen pato asado, pero tu sopa me servirá.
Si quieres liderar este grupo cuando yo no esté, tendrás que tener miras más amplias. Observa más de cerca.
Creo que todos podemos sacar partido de la situación en la que nos encontramos.
Por los Ocho... ¡Lo has conseguido! Esto vale más de lo que algunos ladrones ganan en toda su vida.
Tú debes ser la persona de la que tan bien hablaba Falk. Te doy la bienvenida.
Has visto el amor candoroso y veleidoso de la juventud y has ayudado a que un amor más maduro encuentre su camino.
Maldición. ¿Qué estaban haciendo allí? Esos imperiales tienen espías por todas partes. No lo olvides... Supongo que les darías un escarmiento, ¿no? Veamos...
Ya me siento mejor.
"... jarl de Ventalia y verdadero rey supremo de Skyrim".
Vale, ya basta. Regresemos a nuestros asuntos, por favor.
Estoy bien, Madena.
Bueno, es que me sorprende que el Gastrónomo sea un guardia rojo. Pensé que eras un elfo del bosque, la verdad. Será porque usas...
Hola. ¿Buscas artículos de caza?
Las calles son más seguras ahora, y todo gracias a ti.
¡Junto al árbol!
Es para Marise, ¡pero no le digas ni una palabra!
Tengo un buen presentimiento sobre ti. Tu lugar está en el campo de batalla. Te necesito allí.
Creo que no me gusta el rumbo que lleva esto.
¡Constance!
Alduin no podrá ignorarlo durante mucho tiempo.
Vas a matar. ¡Matarás o morirás!
Sigues diciendo eso. ¿Y si se ha marchado para siempre? ¿Y si le han hecho algo?
Fjotra, tesoro. ¿Te han hecho daño?
Me sirvió un trago hace unas noches, pero no es que la conociera.
Soy una de los últimos miembros de los Cuchillas.
En efecto, pero también tienes que tener buena cabeza.
Que quede entre tú y yo, pero no me importaría que el Imperio se marchase para siempre un día de estos.
Pásate por El skeever travieso siempre que quieras escuchar una canción.
Y ahora tengo trabajo pendiente. Déjame hacerlo, si es que quieres llegar a ver el resto de tu pago.
Es una época muy convulsa. Hombres acechando a sus hermanos como si fueran bestias.
¿He oído bien, Thonar? ¿Tu hermano te está pidiendo que zanjes otra disputa entra Mulush y Nepote? ¿En serio?
Curalmil era astuto, incluso después de muerto. Necesitarás la habilidad de un maestro alquimista para llegar hasta su tumba.
¡Ja, te encontré!
Nos tratas con justicia. Gracias.
Seguro que es de Thalmor. Estaba esperando a que saliera para poder seguirme y matarme en un descampado.
Es intrigante la manera en que ciertos materiales son más o menos receptivos a la fuerza del relámpago, ¿verdad?
¡Es el último aviso! ¡Si lo vuelves a hacer, dormirás en la calle de los Mendigos con el resto de la chusma!
Bien, mis experimentos están en un punto crítico y esto es justo lo que necesito para acabar. Toma unas monedas por las molestias.
Puede que seamos Ruiseñores, pero en nuestro corazón seguimos siendo ladrones y somos condenadamente buenos en ello.
Ahora, veamos cuánto tardas en dominar tu nuevo Thu'um.
Cuando empezó el enfrentamiento por culpa del Concordato Blanco y Dorado, Lilija se escapó para unirse a los Capas de la Tormenta. Tenía el mismo fuego de su padre... ¿Cómo podía negarme?
El Imperio que recuerdo nunca se rendía.
Oh, oh.
Qué raro. La historia dice que Soledad atacó Hibernalia, pero Aesgeir parece sugerir que Olaf reaccionó. ¿Qué decimos que ocurrió?
¡Tú ganas! ¡Me rindo!
Vamos, por aquí. He visto a los guardias utilizar esto para deshacerse de unos cuerpos. Tiene que llevar a alguna parte.
Me has sido de ayuda antes y ahora vuelvo a necesitarte, si quieres ayudarme.
¡No toques nada!
Yo intentaba llegar a Morrowind. A los dunmer les dan igual los Thalmor y me imaginé que allí estaría a salvo. Tan a salvo como en cualquier otro sitio, claro.
Vas a sentir haberme enojado.
La ciudad ha cambiado. El gremio de ladrones está cobrando fuerzas... y se han afianzado bien aquí, en Carrera Blanca.
¿Quieres invitar a una dama a un trago?
Está algo oscuro aquí dentro.
¿Qué te dije sobre lo de husmear por esta zona?
¿El qué de qué? No, ni idea.
Tenemos que volver a Jorrvaskr.
Claro que le importa. Tienes que comprender que tu padre era soldado, y morirá siéndolo.
¿Ha terminado?
¿Te lo puedes creer? Otra pila de troncos al garete.
Entonces, ¿Alva provocó el incendio para quedarse con Hroggar? Tenía que haber sospechado de ella.
Son... grandes noticias. Me... mejor que me vaya. Ahora mismo, antes de que vuelvan a encontrarme. Esta es la mía.
Con la iluminación de la esfinge...
Eso que te sale de las orejas... ¿es piel?
No hablo con desconocidos.
Espero que disfrutes de tu visita al museo. Eso sí, no toques nada.
Hazlo, y veré lo que puedo hacer para reclutar nuevas incorporaciones a tu familia...
Los guardias rojos han confeccionado a mano cada pieza.
¡Esto no es seguro! ¡Volved a vuestros hogares de inmediato!
El mundo odia a los hechiceros, ¿no es así?
No, por supuesto que no. Es solo... No me decepciones, Cipio.
Hay un rumor que dice que el chico de los Aretino se trajo aquí a un asesino. A mí me parece absurdo.
Oh, sí estoy bien. Estaré bien. Tan bien como quien sabe lo que cien...
Sí, hijo. Deberíamos intentar capturarla.
Si quieres cobrar, no debes matar. No lo olvides.
Que la sabiduría ilumine siempre tu camino.
¿Y ahora...?
Toma, lo estaba guardando para una mala época. Tal vez ahora pueda conseguir más para mi gente. Cógelo.
Dirígete a Hibernalia. ¡Vamos a organizar el ataque final!
Soy... soy Lucien Lachance.
¡Vas en cueros!
Deja de quejarte. Todos tenemos problemas.
Ahora más que nunca, el mundo necesita relatos de heroísmo.
Estamos listos para desatar nuestra cólera, Sangre de Dragón.
Eh, espera... ¿Has dicho la hacienda Brillo Dorado? Mis disculpas.
Bien. Ya estás aquí. Te seguirá hasta Oblivion y de vuelta, si la cosa llega a eso.
Bueno, no necesitas ni preguntar. No, no tengo nada para ti. Al menos ya no.
Se suponía que a estas alturas ya seríamos ricos. Thorgar insistió en que nadaríamos en oro.
No te preocupes, los Ocho cuidan de nosotros. Eso espero.
Hubo una gran batalla aquí, en Carrera Blanca. ¡Fue bastante emocionante! Algún día debería componer una canción sobre ella.
Eso fue antes de que los Cuchillas los exterminaran a todos.
No, no... En absoluto. Mara cree que la chispa de una unión viene de nuestro interior, no de nuestra apariencia.
Ahora que en Skyrim viven lagartos voladores gigantes y hombres gato que caminan erguidos... ¿soy yo el que te sorprende? Sí. Acabo de hablar. Y sigo haciéndolo.
¿Pero nadie te ha dado una información tan útil, verdad?
¡Vamos! ¡Vamos!
Soy parte de ti, pequeño mortal. Soy una sombra de tu inconsciente, una mancha en tu frágil psique. Me conoces. Sencillamente, no lo sabes.
Algunos pensaban que los magos eran los auténticos responsables, y otros sentían que, al menos, podían haber evitado la catástrofe.
¡Thu'um wah Thu'um!
Cuando era un chaval, visité las bodegas de aguamiel de Riften. Ojalá tuviera su destreza.
Nah... ¡Kest!
Me alegra saberlo, porque necesito tu ayuda. Verás, he perdido algo muy valioso.
¡Te veré arder!
Si te refieres a magia de combate, olvídalo. Ya les he dicho a todos los jarl a los que he servido que no...
Créeme, no tenemos nada que decirnos.
¿Te sobra una moneda para una pobre anciana, mi señor?
La edda poética nunca está completa del todo. Como historia viva de Skyrim, le añadimos partes continuamente.
Si no te importa, mis clientes agradecerían que depusieras el arma.
¡Estabas ahí pasmado cuando deberías estar sirviéndoles bebidas a nuestros clientes!
Los Thalmor, es lo que sucedió. Llevan treinta años persiguiendo a todos los Cuchillas que pueden encontrar.
Tengo una carta de Quinto Navale de Ventalia. Dijo que era urgente.
Lleva mi Luz al monte Kilkreath.
Señorita Stentor, ¡sujeta tu lengua en la corte del jarl!
¿Todo dispuesto para partir?
Molag Bal. ¿Te crees mejor que los adeptos de Boethiah? ¡Ya he vencido esta contienda antes!
Ya veo... Confío en que Tolfdir ofrecerá una explicación... más específica.
¡Más te vale que sea así, porque eres la favorita del archimago!
Vaya, has vuelto.
Te aseguro que funciona. Dejo que se cansen mientras bloqueo todos sus ataques con mi escudo.
¡Por los aedras, vaya día!
¿Tan obvio resulta? Debería intentar parecer un poco más contento. No me gustaría ofender a nuestra anfitriona.
Pero no dicen cómo lo consigue.
¡Noooooooo!
Traidor hasta el final.
Parece que avanzan desde el sureste, en las montañas Jerall, cerca de Riften. Si el patrón se cumple, el que está cerca de Arboleda de Kynes será el siguiente.
No, no lo creo. Responde a su petición, y dejémoslo ahí.
¡No debimos abandonarla a su suerte!
Necesito unas cosas para el barco.
La situación en el Colegio es crítica, y hemos fracasado en los anteriores intentos de ponernos en contacto contigo.
Seguimos los designios de nuestro corazón.
Vamos a entrar, a ver qué encontramos dentro.
¿Por casualidad te diriges hacia Cruce de Agua Oscura?
Mientras tanto, quiero que te quedes con esto. Perteneció a Galo, pero, dadas las circunstancias, creo que estaría de acuerdo.
Elisif...
Me pareció extraño que Aringoth dejara de venir al pueblo. Supongo que tiene problemas en otra parte.
¿Me tomas por tonto? ¿Crees que soy tan estúpido que no veo la relación que hay entre una cosa y otra? ¡Habéis arruinado mi trabajo!
Lo que me lleva a mi actual preocupación.
(jadeos)
¡Somos los legítimos soberanos de Markarth!
Alto, alto, muchacha. Agradezco la armadura, pero... ¿convertirme en un Ruiseñor? Eso nunca lo habíamos hablado.
Sopla un viento helado. Por la barba de Ysmir, aquí cada día hace más frío.
Espera a que se lo cuente a los chicos.
Gracias por venir, hermano.
¿Dónde estás?
¡Se trata de mi mujer, Fjola! Creo que la retienen en esta torre.
¡Cualquiera! ¡Pero date prisa! ¡No hay tiempo para debates cuando los clientes tienen sed!
Es mejor que nada, supongo. Pero Ulfric va a tener que ofrecer mucho más si quiere que entregue Markarth así como así.
Te concederé mi conocimiento para Despejar cielos. Este es nuestro regalo final, Sangre de Dragón. Úsalo bien.
El otro día oí a Lucano gritando algo de que habían entrado a robar en su tienda. ¡Yo no fui, lo juro!
Mmm. Vale. Entra. Pero no intentes nada. Madanach sabe más de lo que crees.
Así es, soy Ulfric Capa de la Tormenta, y a mi lado tengo a la mujer a la que llamamos Hoja de la Tormenta y a la que el mundo conoce como Sangre de Dragón.
Estoy pensando componer una canción sobre ti, Jonna. ¿Preferirías que exaltase tu belleza, tu fuerza, tu...?
Algún día alcanzaremos nuestra libertad. Algún día.
Que Tolfdir no te engañe; es un eminente estudioso de la alteración. Uno de los mejores de toda Tamriel, y siempre está dispuesto a transmitir sus conocimientos.
En este momento, no hay señal de que ninguno de los grupos sea consciente de la correspondencia del otro.
¿Que qué problema tengo? ¡Es ella es la que tiene un problema conmigo!
Ese gigante... no es lo único que hay en la cueva de la Piedra del Calvero. Llegar hasta él no va a ser fácil.
Eso espero; de lo contrario, estaría perdiendo el tiempo.
Yo voy... a descansar aquí un momentito. Aunque aquí fuera hace un frío que pela. No quiero ni pensar en el viaje de vuelta...
¡Por supuesto que sí! Seguro que es solo cuestión de tiempo que nos dejen sin aserradero en nombre de su maldita guerra.
Ufff. Suponía que por un emperador conseguirías al menos el doble. Vaya tacaño bastardo, ese Motierre.
Maldición, justo cuando empezaba a entrar en calor.
Espera. Esto puede complicarse un poco.
Esa cliente importante que mencionó Mercer se pondría furiosa si lo hicieras.
Habla con Amaund Motierre en La yegua abanderada, en Carrera Blanca. Él sabrá dónde se encuentra realmente el emperador.
Debes compensarnos por ello.
De acuerdo. Cógelos y desaparece. Y no vuelvas nunca por aquí, o te enfrentarás a mi ira desatada.
No perdamos el tiempo.
¿Buscas al mejor herrero de toda Skyrim? Has dado con él.
Con el debido respeto, Oyente, has infringido las pocas reglas que teníamos. Nazir insiste en que hables con él para buscar una solución.
Mortal, yo soy Namira, Señora de la Putrefacción. Tu consumo de la sangre y la bilis de los siervos de Arkay me complace.
Ah, y... ha sido un honor que sirvieras a mi lado. Como muestra de mi gratitud, quiero que te quedes con mi espada.
Ah, ¿así que quieres el desván? ¿Por qué no lo has dicho antes?
Estoy buscando una pequeña lista de objetos para completar mi próxima creación: dos zafiros perfectos, un colmillo de mamut y un poco de mineral de oro.
¿No están muertos...? ¡Matadlos, matadlos a todos!
Recuerda, mi señor, que poco sé del arte de la guerra o de tácticas militares.
Iré al grano, porque francamente, no creo que te merezcas otra oportunidad.
Un tanto melodramático incluso viniendo de ti, Laila.
Creía que los aventureros tenían que parecer duros.
No lo sé. Cuando le pregunté adónde iba, tan solo murmuró: "adonde comenzó el final".
Apártate.
¡Ay, pobre! Pásate por el templo, y mi marido y yo te daremos de comer.
Mi temor es que los dioses no olviden que les hemos perdonado.
Si aún te preguntas por qué me llaman Vipir Pies Ligeros, algún día puedo enseñarte cómo doy esquinazo a toda la guardia de la ciudad.
Pero lo que tienes que tener claro sobre Falkreath es que esta ciudad se caracteriza, para bien o para mal, por su inmenso y antiguo cementerio.
Digamos que soy un firme creyente en la doctrina del ojo por ojo, y dejémoslo ahí.
¿En estos tiempos que corren? Sí. La mayoría de cuanto fabrico es para gente como tú.
Estoy peregrinando a la capilla de Azura, la diosa del Crepúsculo. Si me disculpas.
Pronto marcharemos hacia Soledad. Y en ese día, los héroes de Sovngarde marcharán con nosotros, y el Imperio se postrará atemorizado.
Y después, tenemos que preocuparnos de un problema con un gigante que se dedica a asaltar nuestras caravanas de suministro... Me has oído bien, un gigante. Tenemos que poner fin a este asunto.
¿Alguien que realmente se interesa por lo que hago? ¡Increíble! Bueno, deja que te lo explique.
Bueno... una vez más, la Llave ha sido robada y un "adalid" la devuelve al Sepulcro.
¿Qué bicho te ha picado? ¿Quieres provocar un incendio?
¿La Dama Oscura te envía? Espera. El altar de Molag Bal. Pues claro.
Tal vez encuentres un camino por encima de nuestra posición.
¡No me dejes aquí!
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre del aserradero de Anga.
Hum... Si por alguna razón recuerdas algo acerca del incidente, no olvides informar de ello al capitán de la guardia.
Los dos, viviendo juntos. ¡Te veo en casa!
Por Sithis, qué desastre. Supongo que esto es el fin.
Tomaremos la ciudad. Reúnete con los hermanos que preparan el ataque. Lucha bien, o muere. Que Talos te acompañe.
Te he dicho que te marches. ¡No voy a abrirle esta puerta a nadie!
¡Agh!
No mucho, para ser sincero. La noticia de su regreso nos ha conmocionado a todos. Si te interesa, Giraud Gemane tendrá algún volumen sobre ese tema en la biblioteca.
Mi deseo de eliminar a Mercer supera con creces cualquier ansia de riquezas, ilustrísima.
Ni el mismísimo Ysgramor tendría paciencia para tratar con toda esta chusma.
Has elegido sabiamente. Adelante, yo te seguiré.
¿Hay algo en la garra que indique la forma de abrir esta puerta?
Me alegro de que estuvieras aquí. ¡No lo habríamos logrado sin tu ayuda!
Esto no está saliendo como yo pensaba.
Nadie puede dudar ya de que realmente eres Sangre de Dragón.
Drennen, ya sabes que el Léxico guardado en el corazón de este lugar posee los conocimientos acumulados de varios siglos de cultura dwemer.
¿Así que ha sido castigado? ¿Y nosotros, qué? ¿Qué suerte correremos?
Me gusta tener al fin una oportunidad de ayudar a esta gente. Ver cómo sufren sin poder hacer nada ha sido difícil.
Puedo... podría ayudarte. Él ha hablado conmigo, confía en mí.
Si pudiéramos contactar con ellos, serían una manera excelente de que transportaran discretamente nuestro género.
Entonces, nos veremos allí.
Nos has causado aún más problemas que Farkas en su primera conversión.
Podremos comerciar cuando haya luz fuera.
Esperamos a que tú lo estés.
Durante los últimos doscientos años, desde el último emperador Sangre de Dragón, los Cuchillas han buscado su razón de ser.
Nos has salvado a todos. Se harán canciones eternas sobre ti.
Trabajo en la mina. No quiero problemas.
Después de ti, Sangre de Dragón.
Vale, ¿y qué harías tú entonces?
Por supuesto. Desde que Akatosh otorgase su don por primera vez a la humanidad, ha habido muchos.
¡Date por muerto!
Seguro que lo hizo porque pensaba que sería la única forma de demostrar que tenía razón. Y tal vez porque sabía que podía.
¡Ah! ¡La piedra de dragón del túmulo de las Cataratas Lúgubres! ¡Ya la has encontrado! Tú no eres como esos brutos que el jarl acostumbra a endosarme.
Bueno, al final todo ha salido bastante bien, ¿no?
Lo pagarás.
Mejor, Ataf. Pon un poco más de énfasis en "Ragnar" y en "Roja".
Basta. Vámonos.
Los mercenarios son comunes en Skyrim, pero encontrarás pocos tan sólidos y fuertes como yo.
Bueno, yo...
Solo que ahora... Bueno, es simplemente un desastre.
Me alegro de que a Sorli por fin le hayan dado algo de autoridad de verdad.
Eres el orgullo de Kyne. Solo queda un último desafío. Ve y derrota al campeón trol.
¡Grragh!
Puedes usar la puerta norte para entrar en la ciudad o puedes seguir tu camino. Tú eliges.
Haz como si estuvieras en tu casa.
¿Nos vamos cada uno por nuestro lado?
Otro día de tranquilidad.
Lo único que queda por conseguir es el pomo. ¿A que es emocionante?
No estamos causando ningún problema. Lo único que pedimos es que se busque.
Es hora de decidir.
¿Estás de paso por Soledad? Puede que te interese ganar algo de oro fácil, ¿verdad?
Por favor, disculpa mi ignorancia. Gianna, la cocinera del castillo, ha esperado ansiosa tu llegada. Dirígete directamente a las cocinas.
Vamos, piénsatelo. ¡Ella nos recompensará!
Corre cierto rumor entre la guardia. Rumorean que eres... el Sangre de Dragón. No puede existir tal cosa... No es posible...
¿Información sobre ellos? Chico, estás ante ellos.
Ah, los jóvenes y los idiotas... siempre burlándose de los experimentados y brillantes. Mi contrato ha ido como la seda, para tu información.
No hay demasiados nórdicos que acepten trabajar para alguien de la Cuenca, pero Ainethach es un buen hombre.
Ah. Creo que puedo ayudar con esto.
Vamos a enseñarles una lección a esos cerdos.
¡Que los Nueve me libren de aduladores y parásitos! ¡El jarl está ocupado! Y para tu información, yo también.
¡Bestia nórdica! ¡Tu vida y tus tierras han dejado de pertenecerte!
Por supuesto, querida. ¡Puede que sea una pieza única! Uno siempre ha de estar alerta.
Has hecho bien en restaurar nuestro festival.
Solamente lo mejor. Aguamiel Espino Negro, directamente de la cuba.
Oh, no. Hace mucho tiempo que no sé nada de Gorm, así que esperaba que ya se hubiera olvidado de ese plan suyo.
¡Oh, sí, unos ejemplares magníficos! Gracias. Estas monedas deberían compensarte la molestia.
Ainethach ha muerto. ¿Qué pasará ahora con Baldío de Karth?
No te reconozco, pero siento que eres uno de los nuestros. ¿Quién eres?
Aunque le beneficiaría más de lo que alcanzas a imaginar, al final, le haría más mal que bien.
Al menos dos de sus poseedores, Ghunzul y Drascua, son peligrosos maleantes. Del tercer propietario, Jorgen, solo sé que vive en Morthal.
¡Yaaaargh!
¿Has oído hablar de la hondonada Señal del Cuervo? Es una cueva en la isla que hay al oeste. Allí anidan esas repugnantes brujas cuervo.
Y no creas ni por un momento que he olvidado que perdimos esa comarca por tu culpa.
Percibo la sed de batalla en tus ojos. Aquel que se cruce en tu camino sin duda se verá condenado.
Siempre es un placer. Je, je...
Lo sé, maestro. Pero no digas esas cosas... siempre hay tiempo.
¡Deprisa!
Supongo que debería volver con mi hermano. Le va a dar un ataque si tardo demasiado. Es como un crío...
Oh, cielos, casi nos he puesto en una situación muy delicada, ¿verdad?
¡Hala! Así podría sumergirme en un río y nadar muy lejos para que Britte y papá nunca me encontrasen.
Tienes el honor de dirigirte a un miembro de los Thalmor. El placer es todo tuyo.
Bueno, resulta que de chico tuve un skeever como mascota que era muy revoltoso.
¿Tú fuiste quien salió de Helgen con vida, no? Nos vendrá bien alguien que se haya enfrentado a dragones antes.
No consigo encontrar mi alambique. Supongo que podría usar otro, pero... bueno, te sonará a tontería, pero el mío tiene valor sentimental.
Esto requiere un examen más minucioso. Me gustaría quedarme un tiempo para examinar esto.
No creo. Pero podré darte más instrucciones cuando regreses de la cámara. Todo dependerá de lo que descubras.
No tendrás tiempo de vanagloriarte por tus logros.
¿Necesitas una daga? ¿No? ¿Y qué tal un mandoble?
No te engañes... tenemos las rocas en la sangre.
¡Te voy a destrozar!
Oh... Gracias. No entiendo lo que está pasando. No puedo quedarme aquí. ¿Qué voy a hacer ahora?
Puede que seas Oyente, o puede que no estés en tu sano juicio y hayas empezado a escuchar voces. Sea como sea, Astrid es tu señora, no la Madre Noche.
Antes quiero que acabes el encargo de Carrera Blanca. Luego ya te daré más trabajo.
¡Ni siquiera vivirás para lamentar esto!
Han secuestrado a alguien de Skyrim.
Buena suerte.
Yo ni siquiera estaría aquí si no fuera por la idiota de mi hermana.
Ooohhhh, ahhhrrrghhhh... Uuuuggghhh.
Hemos decidido que esta será tu prueba. Hazla bien, y formarás parte de los Compañeros.
¿En serio? Vaya... estoy perplejo.
No, toda mi investigación apunta en la dirección opuesta. Este es exactamente el mismo líquido que bebían los sacerdotes.
El templo de la Visita Nocturna está a pocos pasos de Lucero del Alba. Ven, tenemos que darnos prisa.
Dovahkiin los ok dovahkriid
Bueno, se dice que es muy poderoso. Según rezan las leyendas, tiene la capacidad de acumular una increíble cantidad de energía mágica.
¡Capitán, capitán!
Lo siento, Tythis. Te conseguiré el dinero sea como sea.
Saludos, Ilfhild.
Pero antes, dime. ¿Por qué quiere un extranjero luchar por Skyrim?
El Colegio es un lugar en el que podemos dedicarnos a esa tarea sin las presiones del mundo sobre nuestros hombros.
No sé qué está pasando aquí exactamente, si eres Oyente o si todo esto no es más que una farsa. Pero lo que tenemos ante nosotros...
No es que los dragones regresen, es que están resucitando.
Ay, Oyente. ¿Es que no ves que es imposible?
Que es completamente inútil en este momento. Tienes que llenarla con un alma.
No puedo, Valindor. Me tiene atrapada. Se está apoderando de mi vida.
Oye, bretón. ¡Levántate! Vamos, los dioses no van a darnos otra oportunidad.
¡Vas... a morir!
Las montañas de Skyrim seguían infestadas de dragones. Uno de los primeros reyes nórdicos capturó uno y lo retuvo en Cuenca del Dragón.
Seguro que el Colegio opina lo mismo, pero, ¿tienes idea de cuántas vidas inocentes se truncaron para que Azura pudiera vengarse?
Oh, bien, más.
¡Oh, sí! ¡Desde luego! Tanta gente importante de todo Skyrim.
Deberíamos continuar.
Cobarde. ¡Sal y lucha conmigo!
Sirvo al jarl Baalgruuf como administrador.
¡Vil chupador de sangre!
¿Odias a los elfos oscuros? ¿Has venido a intimidarnos y obligarnos a huir?
Por supuesto. Los hechizos de destrucción tienen diferentes formas y cada una resulta útil para diferentes propósitos.
No es problema mío.
Lo del rey supremo ha sido un buen detalle.
No puedo creer que ya no esté... ¿Y ahora qué voy a hacer sin mi madre?
Sígueme.
Buenos días, esposa.
¡Qué momento tan fascinante vivimos! Recuerda, estos días se recordarán mucho tiempo después de que muramos.
Oh, no. No, no, no. Esto no puede estar sucediendo.
Eres más fuerte de lo que aparentas. Me has cogido, con todas las de la ley.
Zu'u Odahviing. Llámame cuando me necesites, y vendré si me es posible.
Aquí soy yo quien hace las preguntas.
Sigue rechazando trabajos como este y el gremio empezará a perderte el respeto.
¡Hala! ¡Soy transparente!
Así que nosotros tampoco les gustamos.
Lo que hago, lo hago por Skyrim y por mi pueblo.
Esperaré.
Durante un siglo o más, los Thalmor fueron conquistando territorio al Imperio. Primero fue el Bosque Valen y después la provincia de Elsweyr.
¡Síiiii! Así.
Ojalá tu madre siguiera viva. Ella sabría cómo ayudarte. Déjame que lo medite y ya lo hablaremos luego.
Yo no me atrevo a volver. Tendré que confiar en que huyó en medio de la confusión.
Has fabricado un arma más que decente.
¡Esa maldita necia! ¡Se merece que la estrangule!
Grelod me da mucho miedo. Cuando Avento huyó, estaba tan furiosa que ese día me llevé el doble de golpes.
Mara siempre te aceptará entre sus brazos si algún día decides regresar a su rebaño.
10... 9... 8... 7... 6... 5... 4... 3... 2... 1... ¡Que voy!
Yo... no lo sé. ¿Cuál es el problema?
Me llaman Zafiro porque me encanta robarlos.
Pero respetaré tu petición. Los dioses saben de tus victorias, y ellos mismos rendirán homenaje a tus hazañas.
Si está encinta, no le haré daño alguno.
Tu perseverancia solo te llevará a la decepción.
Tú atrévete a poner un pie aquí y te partiré en dos.
¿Qué sucede, sobrino? ¿No ves que estoy intentando pensar?
¿Qué te trae hasta el Peñón de Shor?
Mercer mintió al gremio, me tachó de asesina y me difamó mediante toda su red de contactos.
¡Venga, vamos! ¿Qué es un dragón o dos comparado con un día entero de pesca?
No todo el mundo puede digerir la relación con mi Señor. Pero a Kesh le gustas. Hay una forma para que Peryite hable con aquellos que lo aceptamos.
Fue un error, y ahora quiero recuperar lo que le di. Es un amuleto que pertenecía a mi familia, y nunca debería habérselo dado a Enthir.
Espero verte en Ventalia. Buena suerte.
¡No!
Pero deberías saber que estos asesinatos son el medio para conseguir un fin, porque allanarán el camino hacia el objetivo más importante.
Ulfric y el general Tulio esperan que dé un paso en falso.
¿Serías tan amable de llevarle estas sales de escarcha por mí? Seguro que Arcadia te recompensará de algún modo...
La carne más sangrienta de la Cuenca.
Cuando era joven, prefería las armas grandes, igual que tú. Hoy me resultan difíciles de alzar, pero aún me satisface el peso de un buen martillo.
Los vampiros son absolutas abominaciones. Tenemos que hacer todo lo que podamos para destruirlos.
Sí, tienes razón. Si tenían que morir para que Lucero del Alba pudiera vivir, entonces valía la pena pagar el precio.
Me trasladé aquí desde Helgen cuando mataron a mi familia.
Vaya... es un buen acertijo, sin duda. No es el tipo de cosa que te encontrarías en la librería de la esquina. Aunque creo que podrás afrontar la misión.
Somos los mejores guerreros en toda la condenada Skyrim. Al menos, algunos de nosotros.
Entre toda la familia no teníamos ni una moneda que gastar. Comíamos las mismas gachas que les dábamos a nuestros animales.
Si no sois capaces de controlarla, puede destruiros y acabará haciéndolo.
¿Está... muerta?
Una única vela puede desterrar la oscuridad de todo el Vacío. Si no eres tú, será otro.
¡No te irás de Skyrim con vida!
Sabes que no puedo aceptar estas condiciones. El emperador rechazaría este tratado y a mí me cesarían en el cargo.
Me encantará compartir contigo mi conocimiento.
Vi lo que le hicieron a Galo. Quería emplear los recursos del gremio para dar caza a Karliah. A los demás les daba igual que se hubiera marchado.
Y... ¿te encargarás?
Malditos adictos, siempre robándome.
Tal vez, pero ¿qué pasa con la guerra? De la guerra no es tan fácil escapar.
¿Cómo consigues no ceder tu posición de ese modo?
Y la Dama de los Susurros.
Ah, ¿lo ves? No era tan difícil, ¿verdad? ¿Por qué no olvidamos que nos hemos conocido, eh?
¡Ah, pero Skyrim! ¡Skyrim es la nación suprema! ¡Nuestro pueblo, el original, no tiene igual en todo Tamriel!
Son preciosas. Ahora entiendo por qué las buscaba.
No le pasará nada, es que odio preocuparme por su preocupación.
Parece que no eres tan autosuficiente.
No hay mejor tónico para el alma que un día de trabajo honrado en un buen terreno arado.
Sé breve, por favor. Tenemos mucho que hacer.
¡Yiagh!
¿Quién de entre vosotros podrá ayudarme?
¡Reyda! ¿Has visto a Reyda? ¿Ya le has dicho que Narfi está llorando? ¿Le has dicho que Narfi nunca llegó a decirle adiós, como mamá y papá?
Así que me quedé completamente solo. Y el jarl dijo que tenía que ir al orfanato Salón de Honor. ¡No es justo!
Si alguna vez se te ocurre tirarme carne a la cara, haré que te arrastren a la mina de Cidhna tan deprisa que los guardias te dejarán sin brazos.
No vayas a Kolskeggr. Es peligroso.
Esa tiene que ser la solución más brillante e inesperada que he oído en mucho tiempo. ¡Soluciona todos mis problemas y mantiene estable el campo!
Ahora los elfos deciden todo lo que hacemos, y no quieren que reconozcamos a un "simple humano" como Talos como el dios que es.
Hsss
Las cenizas aún estaban calientes cuando él se ofreció a Alva.
Lo cierto es que algunos de mis compañeros no tienen tanto talento como les gustaría creer.
Si la necesitas, puedes conseguir una habitación por un precio razonable en El skeever travieso, justo al entrar por la puerta de la ciudad.
Puedes buscar un pico y echarles una mano. Yo prefiero no ensuciarme las manos con trabajos manuales.
Hola, lady Mjoll.
Yo no soy de por aquí. Soy un mercenario. Estos son mis hombres.
Solo soy otro Renegado enviado a que me pudra en esta mina.
Se acerca otro suplicante.
Dragones, bah. Se pueden matar. Los Cuchillas mataron a muchos en sus inicios como matadragones.
No lo tomes por necio. Ni mey, rinik gut nol. Nada más lejos. Empezó siendo el más sabio y visionario de entre nosotros.
Te lo agradezco. Esa araña llevaba meses interfiriendo con mis excavaciones.
Mercer cree que sabe el modo de identificar esta nueva espina que se nos ha clavado en el costado. Quiere reunirse contigo en seguida.
¡Tenemos que encontrar un sitio donde escondernos!
¡Dir volaan!
Antes de que entremos, debo advertirte de los peligros que podrían acecharnos ahí dentro.
¡Oh! Oh... no... ¡No!
Svana, me he enterado de que han encerrado a Sibbi. ¿Qué ha pasado?
Ocho septim al día, más alojamiento.
El aire empalagoso de este lugar es casi insoportable.
Muy amable. Shahvee está en deuda contigo.
Le dije que no era buena idea, que no tenía lo necesario, pero no me hizo caso.
¿Has conseguido que Aldis te diga algo? Sabía que lo lograrías. ¿Y qué te dijo?
¡No te lo permitiré!
Más asentamientos han enviado jinetes para avisar de avistamientos de dragones por toda Skyrim.
Y de paso haría algún bien para variar. Claro, iré contigo.
En primer lugar, demuestra que eres capaz de mentir. Busca a alguien, gánate su confianza y condúcelo a la capilla superior.
Un holgazán llamado Sabjorn.
¿Verdad que es fabuloso? ¡Elenwen sí que sabe organizar buenas fiestas!
¿Quieres que te lo demuestre? Apuesto cien piezas de oro a que puedo derrotarte con las manos desnudas.
Eso no te incumbe para nada...
¿Inocente? Igual que yo, por el primero. Pero a los otros sí que me los cargué.
¡Por los dioses, no!
Sería bueno tener ese bastón en caso de que el jarl empiece a preguntarse si de verdad tengo alguna relación con el Colegio.
Estás poniendo a prueba mi paciencia, pero está bien. Te daré otra oportunidad.
Se supone que ahora estamos en paz, pero pedí que me destinaran aquí para no perder de vista a los Thalmor. Algo me dice que estarán tras las revueltas de Skyrim.
Correcto. Es un lugar reservado en el que puedo catalogar mis hallazgos. De vez en cuando, el jarl vendrá con preguntas, pero rara vez.
Incluso le puse su nombre a mi tienda, con la esperanza de atraer a alguien que hubiese oído hablar de él.
Resulta muy apropiado que vivan en la Ratonera, con el resto de la basura.
Es aconsejable llevar siempre encima algunos encantamientos de invocación.
¡Si tuviera dinero, te pagaría! ¡No hagas eso!
Creo que los dragones han venido a ponernos a prueba y asegurarse de que seguimos siendo verdaderos nórdicos.
Quizá te lo enseñe algún día, Madesi. Encárgate de que las envíen al albergue, ¿quieres?
Aferrarse a algo que ha sido útil en el pasado es indecoroso, mucho más si ese algo eres tú.
Me preguntaba si conservas muchos asociados en el sector del transporte.
Los enanos fueron muy listos al acceder al mismo Corazón de Lorkhan para extraer poder de él.
¿Pasas por aquí de camino a Alto Hrothgar? Yo mismo estaba a punto de hacer una entrega por allí.
La otra noche irrumpieron en la tienda de Lucano, en el comercio de Cauce Boscoso. Lo extraño es que apenas robaron nada.
¿Te puedes creer que esos patéticos Melena Gris aún osen aparecer en público?
¿Mi... mi cómo dices?
¡Vuelve a Markarth! ¡Es necesario silenciar a Virane! ¡Es un testigo potencial, so inútil!
Madesi, ¿de qué es esta factura de 300 septim?
Mi esposa Kerah lleva el puesto de joyas, en el mercado.
Revyn se lo dijo a sus proveedores, pero con la guerra, las herramientas escasean. Ambos bandos las han estado requisando.
¿Qué te aflige, hija mía?
Por favor, pregúntale qué le gusta. Es mi única posibilidad.
Ya te he dicho todo lo que sé, lo juro.
¿Estás bien? ¿Qué ha pasado ahí?
Sé lo que estás pensando: "Este Belethor, ¿cómo puede deshacerse de estos magníficos tesoros?"
Puede ser, pero traerla ha sido una provocación deliberada. Tulio tiene que saber que no me dejaré intimidar.
Ah, mi camarada de la mina de Cidhna. Hola.
Créeme, camarada, no quieres vivir en esta ciudad.
Puedes entrar con armas, pero no puedes usarlas aquí. ¿Entendido?
Entonces... ya no hay esperanza. Durante mucho tiempo, lo único que pude hacer fue observar impotente cómo llegaba nuestro fin.
Tú dime lo que necesitas. Estoy a tu servicio.
Toma esto. Ahí llevas hasta la última moneda que tengo, te lo juro.
Thorgar dice que pronto encontraremos rocas, de las que valen oro.
¿Todo listo?
Ah, claro. Perdona
Y ahora, su espíritu ha pasado a ser uno con el Ocaso Eterno... El reino del crepúsculo perpetuo y la cuna de las sombras.
Aquí no. Hablemos en mi casa, donde nadie nos pueda observar.
Muy pocas personas se acuerdan ya de honrar al dios de los muertos. No seas una de ellas.
Ah, sin duda, hermanita. No podemos permitir que nuestros clientes parezcan los cerdos que son, ¿verdad?
Brynjolf quiere la cabeza de ese infeliz en una pica, pero nos conformaremos con lo que lleve encima. ¿Puedo contar contigo?
¿Podrías hacerme unas cuantas cataplasmas más para mi... ya sabes qué?
Naal Thu'umu, mu ofan nii nu, Dovahkiin, naal suleyk do Kaan, naal suleyk do Shor, ahrk naal suleyk do Atmorasewuth.
Entonces me alegraría ayudarte con tu plan demencial para atrapar un dragón.
¡Muere, insecto!
Gracias. Mira, mi padre tenía una técnica muy especial de lucha con espada y escudo. Deja que te la enseñe, en honor a su recuerdo.
He aprendido a no confiar en la suerte.
Claro que el comercio se ha desplomado, Raerek. Los Capas de la Tormenta acechan en cada camino y hostigan a cada una de nuestras patrullas.
Se trata de... Cicerón. Ha habido un incidente. Tienes que dirigirte al santuario. Dejaré que Astrid te lo explique.
En las historias más antiguas, cuando aún había dragones en Skyrim, los Sangre de Dragón mataban a los dragones y robaban su poder.
Te lo juro, esa mujer es la arpía más rencorosa de todo Skyrim. Creo que tiene un carámbano de hielo por corazón.
Debo haberte entendido mal. Creí que me habías pedido ayudarte a atrapar a un dragón en mi palacio.
¡Alto! Aquí no se te ha perdido nada. Vete de una vez.
Rinik vazah. Una frase muy adecuada. Alduin bovul. He acudido a tu llamada para poner tu Thu'um a prueba.
Así que le permití dirigir su pequeña rebelión de Renegados desde el interior de la mina de Cidhna. Ahora está descontrolado.
Los cambios en Morthal apenas tienen consecuencias para mí. Mientras se cumpla la ley, a mí no me importa quién la hace cumplir.
(ladrido)
Pero le di un buen tajo. Estoy bastante seguro de haberle cortado una arteria. No sé qué encontrarás ahí... pero probablemente podrás limitarte a seguir la sangre.
Es mediante esos sutiles medios que Nocturnal influye en nosotros.
Que empiece la fiesta.
Impresionante. Tu Thu'um es preciso. Tienes mucho potencial, Sangre de Dragón.
No solo eso, sino que están tratando de dejarnos mal asesinando a la gente a la que roban.
¿No se te olvida algo, Mercer?
Eh, maestro. Puedes disponer de tu tiempo como quieras, pero... ¿qué pasa con todos los que dependen tanto de ti?
Ni hablar. En esto, no. Acabarás tus días en la mina de Cidhna.
Odio admitirlo, pero por lo menos todos esos combates han supuesto una bendición para este negocio.
Es el amuleto de nigromante de la leyenda.
¡No seas tonta! Llevar una taberna no es trabajo para una jovencita.
Y ni se te ocurra volver a Paraje de Rorik hasta haberla recuperado de las garras de ese gigante.
Confío en que nos estés llevando hacia algún lugar cálido.
Ponte aquí, junto a mí, y prepara tu Torbellino arrollador. El maestro Borri te dará la señal.
¡Ugh!
Entonces, ¿esto se llama Riften o Rifton? Ha cambiado de nombre tantas veces, que ya ni me acuerdo.
El jarl ofrece una recompensa por el dragón que ha estado aterrorizando la campiña. Toma, echa un vistazo a este decreto para informarte.
Parece que aún debes llegar al nivel de habilidad que el Colegio consideraría valioso, así que me temo que no puedo admitirte en este momento.
Solo tenías que preguntar.
La verdad es que la Legión necesita toda la gente capaz que pueda reunir. Tenemos las manos llenas. Un rey muerto, una rebelión, ¿y ahora dragones? Skyrim está hecho un desastre.
Reina Loba. Escucha nuestra llamada y despierta. ¡Invocamos a Potema!
No te enfades conmigo, pero las autoridades me pidieron una compensación por matar a quien robaste. No tuve otra elección.
Te estás haciendo mayor...
¡Por supuesto que sí! Estaba preguntando por Esbern.
Como puedes ver, las raíces del Brillo de los Antiguos son muy grandes y llegan muy lejos, bloqueando cualquier camino hacia su tronco.
Te lo demostraré, ¿de acuerdo? Te traeré la carta. Lo único... reúnete conmigo junto a la estatua de Talos y no le hables a nadie de esto.
¿Has averiguado algo sobre el Carnicero?
Desgraciadamente, la crisis de Oblivion afectó duramente a Hibernalia. Fue entonces cuando el Gran Hundimiento se tragó buena parte de nuestra querida ciudad.
Tengo caballos que necesitan herraduras, así que date prisa.
Como es tu primer contrato, puedes quedarte con lo que te pague Muiri. Estoy segura de que será generosa. Siempre lo son.
Mis hijos, Sibbi e Ingun, se preparan para encargarse del negocio familiar algún día.
Si la encuentras, búscanos en Paraje de Rorik.
Y, cuando llegue el momento, la asamblea se reunirá para decidir sobre las aspiraciones al trono supremo de una vez por todas.
¡Te la vas a cargar, Sissel!
¿Cómo has podido olvidarla? Es la historia más bonita que he oído nunca.
Nos rendimos. La capital es tuya. Si juras que mi gente no sufrirá ningún daño, te entregaré el mando.
¡Bien, avancemos soldados! Aún hay mucho que...
Desde entonces, su obsesión es debilitar el Imperio de la forma que sea.
Parece que no somos los primeros que pasan por aquí.
¡Pues claro! ¡No se puede elaborar buena aguamiel sin abejas felices!
¡Eh! No hagas eso.
¿Ah, sí? La arrogancia de los Cuchillas no conoce límites.
Parece que sigues de una pieza. Y lo que es más importante, el libro también. Gracias.
No sé mucho sobre Morvunskar, pero parece un sitio precioso para la ceremonia. Enhorabuena.
Hoy no he ganado gran cosa, pero si ves algo que te guste, te haré un buen descuento.
Siempre me decía que la compostura es el secreto de un buen arquero.
¿No recuerdas al señor daédrico de los orcos? ¿El guardián del juramento y de la maldición sangrienta?
¡Oh! ¡Compórtate, hombre!
Yo solo cocino, limpio y hago lo que me piden.
Voy a recortar tu paga para este trabajo.
Será mejor que me des cinco septim ahora mismo o te destrozo la nariz...
Esto no es el ejército, hijo, no hay escalafón.
¡Sabía que podíamos contar contigo! Me alegra tenerte de vuelta con nosotros.
Por favor, ten cuidado. No quiero ser la causa de tu muerte.
Alguien va a salir mal parado.
¿Sabes? Había pensado ampliar el jardín de hierbas. Haz sitio para las nuevas plantas que quiero cultivar.
¡Maldición! Lo siento. No se me da muy bien.
Exigimos una compensación por la masacre de Mina Silbante.
No busco conversación.
Pues sí, un asunto personal. Mi padre murió cuando intentaba hacer negocios con los Renegados, cuando eso aún era posible.
¿Dragones? ¿Quieres ir a cazar dragones? ¿Es que has perdido la cabeza, muchacho?
Ya no los tengo. Se los quedó ella... La Convocadora. ¡Es la que me ha metido aquí!
Wuld...
Mmm... Parece que los imperiales no pasaron de aquí.
Salgamos de aquí.
¡Aprende en un momento conocimientos que valen por toda una biblioteca o haz que te crezca ese miembro perdido gracias a mi genuino elixir de sangre de falmer!
Ah, hola. No esperaba verte aquí.
¿Crees que no lo sé? Si alguien supiera de este encuentro, ¡mi cadáver colgaría sobre Soledad toda una década!
Me impresionas. Los mercenarios no suelen ser rivales para los Renegados, pero tú les has dado una lección. Aquí tienes tu recompensa.
Un filo pequeño. Fácil de ocultar. Vamos, que puedes tratar de hundirle un pico en la cara a alguien, pero suelen verlo venir.
¿A cambio de Riften, la joya de Skyrim? Lo dudo mucho.
¡No puedes llevarte eso!
Estoy esperando.
Lo conseguiremos, Greta. Lo hemos hecho hasta ahora...
Eso es lo que querían muchos aquí. Una vida tranquila en un lugar tranquilo, sin el ruido ni los problemas de una ciudad.
Entonces, por mi derecho como jarl, te nombro thane de la Marca de Hjaal. Enhorabuena.
Skyrim está lleno de todo tipo de bestias peligrosas.
La condición era que tenía que ir él allí con nuestra madera. Así que no solo se marchó Leifnarr, sino que se llevó con él gran parte de nuestros suministros.
No lo bastante rápido, o Galo seguiría vivo.
No me gusta que me engañen, Brand-Shei. Ni una pizca.
Te doy la bienvenida al pudridero.
En esta fortaleza se respeta la fuerza y solo la fuerza.
Aún me duele bastante y no puedo caminar mucho sin pararme a descansar.
La sola idea me parte el alma.
Por favor, no me digas que han incinerado a otro aprendiz. Ya tengo bastante ahora mismo.
¡Yol!
Es un honor tenerte allí.
¿No conoces al señor daédrico de la caza?
Tienes razón, querida. Siento haberte preocupado.
Hola, Silana. ¿Quieres una manzana?
Soledad es famosa por su Colegio de Bardos. Vale la pena visitarla si nunca has estado. Algunos de ellos saben cantar tan bien como un ruiseñor.
¿Qué escondes, sacerdote?
Espero que pueda contar contigo si alguna vez necesito un favor.
Por fin he pagado mi deuda.
¡Me encanta una buena lucha!
El número de tumbas en este cementerio nunca disminuye.
Este objeto maravilloso. Prácticamente irradia magia y, sin embargo, no se parece a nada que haya visto antes.
Te desprecio, hermana muerta.
¡Echa un vistazo a tu alrededor! ¿Alguna vez has visto al gremio en un estado tan próspero?
Onmund se rindió cuando le dije que no por primera vez. Pero tú no...
Todas sus vidas se vieron consumidas por el odio hacia los dragones, por lo que volcaron toda su rabia y su odio en ese grito.
La guerra asola esta región, y el pueblo sufre por ello. Los Capas de la Tormenta son una plaga en Skyrim, y como tal han de ser erradicados.
Tienes que cubrirte tus... partes pudendas.
Ahora, si tienes la bondad de seguirme, te mostraré los aposentos.
Markarth es... distinta al resto de Skyrim, de eso no cabe duda.
Dijiste que la ceremonia se celebraría en Morvunskar. ¡Y no olvides que aún me debes algo!
Trata de averiguar dónde está su fortaleza. El capitán, Stig Tabla Salada, tiene que saber algo.
Tú estabas con nosotros en las carretas, ¿no? No es tu día de suerte, ¿eh?
Vamos, por aquí.
¡Ja! No puedes resistirte, ¿eh?
Nunca había visto a Mjoll tan disgustada por algo. Esta ciudad realmente la afecta.
Como siempre. No hay que perder de vista las rocas.
No es mucho, pero nos apañamos.
Odio esas malditas cosas. Ya sabes, demasiados ojos. Son demasiados.
¡Sabía que podía confiar en ti!
Por supuesto. Será lo mejor.
Así que quiere mi ciudad con los muros intactos.
El Colegio está constantemente buscando más escritos de Shalidor con el objetivo de comprender tanto nuestro conocimiento del hombre como de la magia en general.
Algo va mal... El jefe lleva demasiado tiempo ahí abajo.
Yo me alisté porque no soportaba ver a los Capas de la Tormenta destruyéndolo todo. Pero casi nadie en mi familia apoya mi decisión.
Solo intento beber un rato aquí, tranquilamente, ¿vale?
Límite Sombrío... ¿Por qué me suena tan familiar?
Tienes que reunirte con él y darle cualquier cosa que te resulte imprescindible mientras estás dentro de la embajada.
Siento despertarte, hermano. Tengo un encargo de Orchendor.
Soy el comandante de la guardia de Carrera Blanca.
Uglarz es una gran cazadora. Quizá pueda enseñarme algo nuevo.
¿El incendio de la casa de Hroggar? Así es. Perdió a su mujer y a su hija en las llamas.
Increíble... Imagínate cuánta gente y cuánta inventiva habrán sido necesarias para esculpir los edificios de Markarth.
Una familia de ladrones. Llevan su corrupto Imperio desde Markarth.
Pero era Ulfric. Y mató al rey supremo en un combate honorable. Mi hermano se negó a permitir que los imperiales se vengaran por la hazaña.
Intenté explicarlo, pero nadie me cree.
No importa lo que yo crea. Nurelion sí lo cree, y puede que eso sea lo único que le mantiene con vida en este momento.
Dirígete a Hibernalia. Vamos a recuperarla.
¿Por qué? ¿No me crees capaz?
¿Sería muy imprudente detenerse un rato y encender un fuego? Supongo que sí.
Como sabéis, las arcas de Soledad están muy mermadas por la guerra. Thane Erikur, tienes mucha cabeza para los negocios. ¿Qué sugieres?
No sé cómo esos haraganes consiguen levantarse de la cama cada mañana. ¿Para qué molestarse si no eres un ser vivo?
Y por último, está la cuestión del mecenazgo que Elisif quiere que te conceda.
¿La cosa azul? Pero si hasta el más simple de los campos armónicos está compuesto totalmente por...
¿Un septim? Te refieres a... ¿una moneda de oro? ¿En serio?
¡Eres la mejor! ¿Puedes ser mi madre?
Bueno, señor, estaba pensando que, con la guerra y todo eso... tal vez podría alistarme y combatir contra los imperiales.
La estructura de piedra que los enanos nos han dejado nos hace invencibles. Que los dragones chamusquen unas cuantas alfombras. Nunca derribarán Markarth.
A este paso, no vamos a aguantar muchas estaciones más. Después no me quedará más remedio que vender la casa vieja.
Tenemos que cruzar la cocina. Tu equipo está escondido en la despensa.
Si ves a Reyda, dile que Narfi la echa de menos y que venga pronto a casa... muy pronto. Pronto... pronto... ¡como la luna!
Entonces no me hagas perder el tiempo.
¡Puedo vencerte!
Te lo he advertido.
Importo todos los libros que puedo. Las obras nórdicas son demasiado obscenas y violentas para mi gusto.
Déjame, imperial. No tengo nada que decirte.
Ya no puedo soportarlo más, Tythis. Indaryn no deja de mangonearme y yo nunca he hecho las cosas mal.
¿Has visto alguna vez lo que los osos hacen con los árboles? Se ponen sobre las patas traseras y los destrozan, arañándolos... para marcar su territorio o algo.
¡Oye!
¿Cómo va la mendicidad hoy, Brenuin?
Mantengo Arnleif e Hijos en marcha lo mejor que sé.
Te sugiero que apuntes a otra parte.
Podría ser, pero eso era un saludo especial solo para ti.
Ahora solo nos queda sentarnos, relajarnos y disfrutar del viaje de regreso a casa.
Bien. Tengo mucho jaleo. Me vendría bien tu ayuda.
Ah, bueno... Tenía que probar por si acaso.
Los Barbas Grises han convocado un consejo de paz en Alto Hrothgar. Y, por increíble que suene, Ulfric Capa de la Tormenta y el general Tulio han aceptado acudir.
En mi corte hay sitio para un nuevo thane. Es principalmente un título honorario, pero tiene algunas ventajas que podrían resultarte útiles.
Reflexiona sobre tu lealtad, hermano. Esperaba más de ti.
Te doy una semana antes de que acabes siendo un cadáver en una zanja.
Será mejor que permanezcamos juntos.
En otro tiempo, el Ojo de Talos fue un buen navío. Ahora yace varado, cerca de una isla, hacia el norte.
Pero un sanador llamado Jouane me salvó la vida. Desde entonces ha sido mi mejor amigo. Te aseguro que ese hombre obra milagros.
Sienta bien volver a trabajar en la mina.
Eso es lo que me da miedo. Temo viajar a Cruce de Agua Oscura y descubrir que ha ardido hasta los cimientos.
Los bardos no soportáis la competencia, ¿verdad?
Volveré de inmediato al santuario de Lucero del Alba, Oyente.
Si me necesitas, será un honor acompañarte, guardián de la Estrella. Así tendré una misión.
Ah, pero no importa. A pesar de ser mortal y cruel, has tenido éxito y has sobrevivido. No tengo más remedio que cumplir con mi parte del trato.
Bobadas. Tú y tu acompañante podéis quedaros aquí el tiempo que necesitéis.
¡Azote de la naturaleza!
Vacía los bolsillos o acabarás como comida de skeever.
A Torsten le complace ver vengada la muerte de su hija y haber recuperado la reliquia.
Nunca me ha gustado tener imperiales a las puertas de Ventalia. Recuperar Hibernalia aseguraría nuestras líneas de suministro...
Para los daedra no somos nada. Peones para mover, alabar y castigar como crean conveniente.
¿Has hecho eso con los restos de un dragón? Asombroso.
No deberías estar aquí.
Entonces compartes mi temor. Si Cicerón planea algo y está conspirando con uno de los nuestros, sería una calamidad.
¿Ha habido suerte con Zafiro?
Silo proviene de una de las familias más antiguas de Lucero del Alba. Tienen una historia complicada.
Vaya, buen trabajo. Ahora que ya no están, todos nos sentiremos más seguros, ya seamos nórdicos o elfos oscuros.
Por supuesto... De lo contrario, no sería una gran recompensa, ¿a que no?
¿Aún sigues aquí?
Aquí no. Te dije que nos veríamos en Cauce Boscoso.
Bueno, voy a trabajar. Debo arreglar la hoja de otra sierra para el aserradero de Gerdur.
Buen trabajo. Prepárate mientras hablo un rato con nuestro forastero preferido.
Gracias de nuevo por resolver mi... problema.
El Colegio alberga conocimientos sobre hechizos de ilusión realmente poderosos, pero están escondidos para que nadie los use mal.
Ahora veremos si realmente tienes el don.
Nuestro hijo Leoncio se mudó a Viejo Hroldan hace casi treinta años. Todavía le echo de menos.
¿Has oído hablar de la bendición de Dibella? Puede ayudarte a cortejar a las mujeres, si eso es lo que quieres.
Cinco, cuatro, tres, dos, uno... ¡Ya!
Si buscas pelea, estoy preparado.
Cumples los requisitos. El conocimiento es tuyo.
Eso me suena a dinero fácil. Acepto.
Los sacerdotes no suponían una amenaza para la Llave maestra ni para el conducto al reino de Nocturnal, así que los toleraron.
Supongo que todos se habrán marchado antes, como planeamos. Acabo de registrar el castillo y no hay nadie.
Por muy apto que parezca, no veo en él ningún signo de ser ese, ¿cómo era?, "Sangre de Dragón".
Tengo cartas que leer.
Ulfric... ¿Qué has hecho, viejo amigo?
Sé breve, imperial, no puedo estar eternamente sometido a tu hedor.
Ya hablaremos. Espera a que resolvamos este embrollo.
¿Os quejáis? Trabajad. Si os quedan fuerzas para quejaros, os quedan fuerzas para fundir.
Gracias. Ojalá Lucano estuviese aquí para volver a verla.
Por Shor, ¿qué quieres?
No sé cómo darte las gracias. Toma, acepta esto. No es mucho, pero quiero dártelo como muestra de mi gratitud.
Si buscas una habitación, prueba en La abeja y el dardo. Este lugar es para los trabajadores.
Si tienes ganas de aventuras, yo siempre ando buscando gente que me consiga libros valiosos en lugares... algo peligrosos.
Bastantes problemas tenemos ya en la vida real como para inventarnos más.
Su corazón late con la furia y el coraje que han unido a los Compañeros desde los días de los distantes veranos verdes.
Este es el Salón de los Ruiseñores. Eres la primera persona no iniciada que pone el pie aquí en más de un siglo.
Enterrar el pasado es algo mucho más difícil que enterrar cadáveres. Tengo miedo... de qué pensarás de mí si te cuento lo que he hecho.
Creo que las cosas van a ser muy distintas por aquí a partir de ahora, y todo es gracias a ti.
Entonces seguiremos hablando.
Puede que haya muerto, pero... ¿de dónde vino?
Afiladura y su equivalente, División. Las utilizaban los arquitectos dwemer para acceder al Corazón de Lorkhan.
Últimamente he pasado muchas horas en reuniones de consejos tratando de resolver ese problema.
No me hables, ¡se supone que estás en la ceremonia!
Debemos detener el suministro de plata a los rebeldes. Hasta que recuperemos la Cuenca, los Capas de la Tormenta saquearán las minas para financiar sus actos violentos.
Cuando la navegación se te mete en la sangre, no hay forma de sacarla.
Estas ruinas me resultarían interesantes si no fuera ya un experto en historia nórdica.
Hombres de los que, debo añadir, andamos muy escasos.
¡Ja! ¡Me das lástima!
Si aparece un dragón, quizás tengamos suerte y se coma primero a los magos. A lo mejor eso nos da tiempo para matarlo.
Has encontrado la cocina del Colegio de Bardos. Enhorabuena.
¿De verdad? Es que... yo me noto igual, como si aún me vieras.
Y seguro que una tajada jugosa también va para ti. Encárgate de conseguir la mercancía y de librarte del resto adecuadamente esta vez.
Ah, hola. Me alegro de verte. Me preguntaba si...
¡Siempre! La perfección requiere dedicación, al fin y al cabo.
Venga, todo el mundo en la ciudad sabe que pasas más tiempo con Fastred que pescando en el río.
Puede que papá quisiera un hijo, pero me tuvo a mí. Tiene suerte.
El camino de la Voz es una forma antigua de magia espiritual mediante la cual insuflas tu esencia vital en un "Thu'um", un grito.
Nos someten y nos tiranizan sin descanso.
Mi Luz ha de atraer un alma digna.
Por los dioses, ¿a qué estás esperando?
No creo que merezca la pena ceder Markarth, pero no es un mal comienzo.
Siempre me alegra ver a un cliente, pero no comercio con bienes robados. No necesito ese tipo de problemas.
Te agradecería que no molestases a mi mujer, Tova. Aún está de luto.
En su interior, encontrarás un mago elfo capaz de convertir la estrella más brillante en la oscuridad más absoluta.
¡Una cara nueva! Da gusto ver algo así en la vieja y terrible Morthal. ¡Te doy la bienvenida!
Prueba con los magos del Colegio de Hibernalia. Les interesan mucho esos arcanos.
Vaya, gracias, Thonar. Me siento halagada.
De acuerdo. Puedes quedártelo. Es el que lleva la silla de montar.
Permanece fiel al camino de la Voz, y regresarás.
El gremio está a pleno rendimiento gracias a ti. Hemos pasado por tiempos oscuros, pero ahora parecen solo un recuerdo remoto.
Si necesitas algún detalle sobre tus objetivos, estaré a por aquí. Ahora, en marcha.
Hace tiempo que no veía una de esas. Eso de ahí es una Piedra de Barenziah.
¡Has exhalado tu último aliento!
Y si decide dejar Paraje de Ivar, ¿entonces qué? No, no... No puedo soportar la idea.
Oye, que tú no tienes permiso para estar aquí.
Algunos años antes de que Mercer asesinara a Galo, el gremio acogió a un ladrón especializado en antigüedades enanas.
Como desees, mi jarl.
¿Has llevado ya ese contrato de compra a Markarth?
Todo lo que pueda para devolver a mi familia al descanso eterno.
¡Eh! ¡Me ha desaparecido la resaca!
¡Sssh! ¡Silencio! No nos interesa que nadie oiga eso.
Muy bien. Infíltrate en su campamento y nosotros te cubriremos. ¡Buena suerte!
Maldita sea. Bueno, lo comprobaré con mis fuentes y hablaré con Mercer.
¿Cuánto tiempo tenemos hasta que lleguen?
Te gustan las armaduras de cuero, ¿eh? La verdad es que ir ligero tiene sus ventajas.
Lo que quedaba de la destilería Amielada se ha vertido en las cloacas. ¡Adiós muy buenas!
Seré tu sombra tras de ti.
Mara te protegerá.
El Imperio nos convertiría en esclavos, igual que ellos se convirtieron en esclavos de los Thalmor. No viviré ni moriré como esclavo.
Deberías venir conmigo a Ventalia y unirte a la lucha por liberar Skyrim. Hoy has visto el auténtico rostro del Imperio.
Es buena práctica. Casi nadie se fija en lo que estoy tocando.
Eres exactamente lo que andaba buscando.
Ah, pero hay un ligero... problema.
Esa cosa de Saarthal. ¿Qué hace? J'zargo no consigue averiguarlo.
Tengo tanto interés como tú en ganar dinero, pero no conviene enfurecer a los nórdicos.
Puede que seamos pequeños, pero lo que nos falta en tamaño lo compensamos con calidad.
Así que las pistas apuntan hacia la sala del tesoro. Tiene sentido. Thonar está involucrado en todos los aspectos de la ciudad.
¡Buen trabajo! Hemos sido afortunados de tenerte hoy con nosotros.
¿Te apetece tomar algo?
Chssst...
¡Diantres! Espino Negro o no, vuelve a decir eso y por todos los diablos que no te libra de mí ni tu madre.
Mi padre dice que no tengo el don de la lectura, pero mamá dice que no lo voy a necesitar para trabajar en la granja.
Azura me ha concedido el don de la visión de futuro. Tuve una visión en la que aparecerías tú avanzando hacia el altar, mucho antes de que nacieras.
Venga, vosotros los forasteros siempre lleváis un montón de oro encima. ¡Solo una moneda!
Pongámonos en marcha. Quiero ver su cabeza en mi manto.
Nuestro objetivo es el puente levadizo. ¡Si conseguimos bajarlo, la ciudad será nuestra!
Si has venido a Soledad para alistarte en la Legión, habla con Rikke. Si no, evita meterte en líos mientras andes por aquí... o acabarás como Roggvir.
Los dov son los hijos de Akatosh. Por ello, estamos en especial... armonía con el fluir del tiempo. Tal vez también seamos excepcionalmente vulnerables.
No creo que este día se vaya a acabar nunca.
Los Mar Cruel han sido marineros desde hace generaciones. La verdad es que lamento no haber seguido los pasos de mis antepasados.
Espero que estés disfrutando.
Ignora los gritos. Mis padres siempre están discutiendo.
¿Cómo soportas a ese petimetre de Fihada?
Que Arkay te proteja.
Gracias de nuevo. Si necesito cualquier otra cosa, te lo haré saber.
¡Eh, tú! ¿Qué estás haciendo?
Cuando Linwe se trasladó a esta zona, contactó conmigo y me dijo que me mataría si no vendía objetos robados para ellos.
Solía serlo. Me temo que ya no me queda tiempo para eso.
Qué solitario está el cementerio últimamente. Pocos presentan sus respetos a los muertos.
Kaal... ¡Zoor!
El hambre voraz de recuerdos de la señoría daédrica Vaermina es responsable de estas visiones.
Vas a cerrar el puesto, está decidido.
Quinto, ¿Podrías traerme una copia de "El firmamento"? Necesito comparar los antiguos mapas celestes con el de hoy.
Deberías ver la sonrisa que se dibuja en el rostro de Horik ahora que estamos al mando. Él lo oculta, pero yo lo sé.
¡Entonces, a Oblivion contigo!
¿Qué tal un hacha? Malacath sonríe a quien lleva un hacha.
¿Creías que los Cuchillas habían desaparecido?
Venga, chico. ¿Cuál es el gran misterio? ¿Qué andas haciendo por aquí, con aspecto de haber perdido una pelea con un oso?
Se supone que es un honor, pero como tú quieras.
¡Toor!
¡Pero aún vives! Todavía estamos a tiempo de empezar de nuevo, de reconstruirlo todo. Por eso he hecho... esto.
¡Por las barbas de Ysmir! Ese tipo ha sido siempre un poco extraño, pero nunca habría esperado...
Pero necesito tu ayuda. Necesitamos tu ayuda.
Tú compras mi libertad, y yo te diré lo que quieres saber.
¡Alabados sean Talos y todos los Divinos! ¡Carrera Blanca ha sido liberada por los auténticos hijos de Skyrim!
No toleraré esta ofensa contra los míos.
¡Creía que íbamos a morir todos!
Años después, Sinderion simplemente apareció en nuestra puerta y pidió quedarse una temporada... Dijo que iba a realizar investigación de campo.
Si quieres ayudar, primero tendrás que encontrar algo con lo que cortarlo.
¡Me estás enfadando!
Te enseñaré a usarla con eficacia, sin que tus pies pierdan velocidad.
Lo siento. Lo siento mucho. Los Penitus Oculatus... Maro... dijo que, si te entregaba a ellos, dejaría en paz a la Hermandad Oscura. Para siempre.
¡Eres inferior!
Tengo que salir de aquí.
¿Tienes miedo de luchar conmigo?
¿Así que nos vamos a quedar aquí sentados mientras Arvel se escapa con la garra dorada?
Ah, ¡hola, hola!
Espero que a Fastred le vaya bien en Riften. La echo de menos.
La idea de los muertos que resucitan... me pone enfermo.
¡Si no lo encuentras pronto, regresará más poderoso que nunca!
¡Rrrrraaaaa!
Me alegro de que no hayan encontrado mi daga de la suerte. Ya es hora de destripar a esos pájaros podridos. ¡Ve delante!
No me importa lo que es, ¡lo quiero inactivo ya! ¡Quiero saber lo que hace ahí dentro!
Vete ya al túmulo de las Cataratas Lúgubres. El jarl no es un hombre paciente. Ni tampoco yo, ahora que lo pienso.
Vale, vale. No hace falta tomar decisiones precipitadas.
Ah, te has perdido, ¿no? Pues mejor lárgate de aquí mientras aún puedas. La Ratonera tiene la costumbre de tragarse a quienes la visitan sin haber sido invitados.
¿Sí? ¿Por qué?
Has visto cómo vivimos: callejones atestados, edificios destartalados, pocas patrullas de guardias. Incluso el nombre de "barrio Gris" es un insulto.
Puede que tengas razón. Supongo que las victorias en batallas del pasado no ganarán las guerras del presente.
Una vez más, he encontrado notas muy insultantes entre mis efectos personales. Es una atrocidad.
Fue una escena verdaderamente aterradora. Hermosa, desde cierto punto de vista.
¿Entonces fue de cobardes aceptar el Concordato Blanco y Dorado?
¡Capas de la tormenta!
El jarl decidió que yo era demasiado problemático. Me metió aquí dentro con los Renegados.
Todas tus bebidas están aguadas, Kleppr. No me engañas, y además sabes que Lisbet no puede permitirse pagarme por los mejores licores.
Se ve que un viajero dice que una de esas criaturas destruyó Helgen. No dejó ni una sola alma con vida, por lo que se ve.
¿Esto es lo que quieres?
Exigimos una compensación por la masacre de la granja de Sarethi.
Creo que ya casi estamos fuera. ¡Vamos!
No podemos atacar Soledad. Aún no. Poco a poco.
Por supuesto que sí. ¿Qué clase de pregunta es esa?
No te pares, concéntrate en tu objetivo y alcanzarás la cima.
El inútil de mi marido ha muerto, así que ahora llevo yo la posada.
Gran Malacath, te lo imploramos, ayúdanos en este momento de necesidad...
Equivócate y te destriparé como a un pez.
Espera... Oyente, ¿hablas en serio? Oh.
La verdad es que no estoy segura. Mi marido ha estado cuidando las plantas, así que tendré que preguntarle a él.
Ranmir salía con una hermosa joven llamada Isabelle Rolaine. Los dos eran muy felices juntos, o eso me parecía.
Es la profecía, ¿no lo ves? ¡Solo un Sangre de Dragón puede detener a Alduin y evitar el fin del mundo!
¡Era un plan estúpido, y ahora Rigel está tan enfadada que ni siquiera nos deja bajarlo de ahí!
Si quieres intentarlo, por mí adelante. De todas maneras, no te vayas a pensar que puedes meterle algo en esa sesera de granito.
Instantánea, inexplicable. Esas historias me han fascinado... Desde que era joven he querido saber lo que pasó realmente.
Creo que le debes algo al gremio.
Mira estas piedras. Desde luego mis antepasados sabían construir.
Bebida para el sediento, comida para el hambriento.
Krosis. No. Apenas sé qué ha pasado ahí abajo durante los largos años en los que he vivido aquí.
Si realmente Ralof y tú sois amigos, con gusto te ayudaré. Pero no has respondido a mi pregunta... ¿Cómo es que lo conoces?
¡Dovahkiin, vosaraan! ¡Usa Desgarro de dragones antes de que Alduin te consuma!
¿Te he hablado de Valen, cariño?
Tenemos a alguien que acaba de recibir un objeto de un pariente que no vive en Skyrim. Con estas cosas hay que ser más discretos. ¿Te apuntas?
He estado pensando... Quizá Camila necesita que alguien la ayude a ver cómo es Sven.
¿Has herrado al caballo, muchacho?
¿Preocuparme, dices? La verdad es que me aterroriza. Pero he de mantenerme firme por mi mujer y mis hijos.
¿Has conseguido llegar hasta el Peñón de Shor?
Ven conmigo. El festín está a punto de comenzar.
Conque sí, ¿eh? Hablaremos más tarde.
Busca soldados enemigos en campo abierto o que protejan ciudades o asentamientos, y mátalos.
Es solo que de momento no sé si va a salir nada de todo esto. Es que aún es todo teoría.
¡Oh, qué detalle! Gracias.
Un verdadero profesional habría mantenido la calma y se habría ocupado del asunto de una forma diferente, pero lo pasaré por alto.
¡Eh, tal vez estos pieles grises no ayudan en la guerra porque son espías imperiales!
Será mejor que sigamos adelante. Estoy seguro de que los demás encontrarán otra forma de salir.
Podrías si tuviera uno. Vendí el último caballo que tenía a alguien que se parecía un montón a ti.
Solo comerciamos durante el día, visitante. Por la noche, muchos descansan en la casa comunal.
Tantas riquezas al alcance de mi mano, y tuve que renunciar a todas porque esos cobardes tenían miedo de un puñado de cadáveres...
Si tienes algún asunto que tratar, habla con mi administrador, Falk Barba de Fuego.
¡Lo han descubierto! ¡Lo han descubierto de verdad!
Recordaré que no debo enfurecerte.
¡Ja! ¿Una chica llevando una taberna? No seas ridícula, Minette.
Quizá deberías buscar trabajo en vez de mendigar.
¿Has venido a papar moscas, o esto es una reunión social?
Parece que esta vez se ha ido para no volver, pero no creo que tengamos que quedarnos para comprobarlo.
Qué... ¡eh! Eso sienta bien.
Estoy preocupada por mi hija. No quiero perderla de vista mientras esté en este mundo.
Confío en que el día te sea propicio, thane.
Tú. Te vienes conmigo.
Arngeir. Rek los Dovahkiin, Strundu'ul. Rek fen tinvaak Paarthurnax.
¿Gerdur? Regenta el aserradero, si no me equivoco. Un pilar de la comunidad al que no le gusta fantasear...
Los Renegados habían tomado Markarth y Ulfric y sus hombres consiguieron expulsarlos. El Imperio les prometió que, desde entonces, serían libres de adorar a Talos.
Ese... hechicero sigue en la posada. No me puedo creer que Dagur le permita quedarse.
Ahora Zafiro quiere recuperar su dinero, y si no le pago, creo que va a matarme.
¡Primero asesinas a mi hermana y luego masacras a mis hombres!
Mientras, seguiremos persiguiéndolos y pasándolos a cuchillo.
Ver el lamentable estado de esta ciudad casi me hace lamentar mi decisión de marcharme de casa al completar mi aprendizaje.
Excelente. Puedo ordenar el avance de más soldados, ahora que sabemos que esos exploradores están muertos.
Se lo haré saber.
Bueno, ¿alguna pregunta antes de que podamos empezar?
Dentro del ataúd de la Madre Noche, por ejemplo.
Ya te conseguiré algunas monedas. Siempre lo hago.
Así es, mi señora. Pero se ve que a ti te odia un poco menos que a los demás.
Ya te he dicho que todo eso se acabó para mí. Bastante sangre ha manchado ya mis manos. Ahora me interesa crear cosas.
Necesito que elimines a una anciana llamada Agnis, sirvienta en el fuerte Páramo Gris.
Mientes. No eres lo bastante rápido para ir por ahí robando. ¿Cuál es la verdadera razón?
Este sugiere que nos pongamos algo.
Eso es. Lucero del Alba. Mi Lucero del Alba está plagada de pesadillas. Llevo días sin dormir en condiciones.
Son los maestros del camino de la Voz, de los gritos. Viven en la cima de la Garganta del Mundo.
Nos lamentamos.
En vida, derroté a innumerables enemigos sin sentir miedo en el combate, pero no hay espada que pueda defender del terror de este valle sumido en la tristeza.
El trabajo en los muelles no es bueno. Pero es mejor que Ciénaga Negra. Mucho mejor.
Espera, espera. ¡Te conozco! Sí, sí. ¡Nos vimos en aquel camino! Cicerón nunca olvida una cara.
Ranmir te ha suplicado que lo invites, ¿eh? Despídete de ese oro.
Pues claro que sí, hermano. No dejas de subirles el alquiler.
Esto me gusta tan poco como a ti, pero no quiero que los Thalmor se dediquen a capturar ciudadanos para arrojarlos al calabozo.
Históricamente, Lucero del Alba ha sido escenario de batallas que han frenado el destino del Imperio. Espero que siga siendo así.
Aquí tienes tu paga. Bien merecida, como siempre.
¿Se cobra su parte cuando morimos? ¿Se regodea en nuestra miseria cuando sufrimos? Nadie lo sabe.
Deberíamos irnos. Ven aquí. Déjame ver si puedo soltar esas ataduras.
¿Qué? Claro que sé quién eres... No quise sugerir, es decir, no recuerdo ni haber dicho eso...
Rikke. Vamos.
Oh... bueno, dejaré eso en tus manos. Confío en que sabes lo que haces.
Al menos nadie de por aquí.
El principal problema que tenemos es una manada de perros imperiales que babean sobre los recursos que le han robado al pueblo. Un sabotaje les amargará el dulce sabor de la victoria.
¿Alguna vez has querido volver a tu fortaleza? ¿Volver con tu familia?
Siempre quieres complacer. Es buena cosa. Quizá Skjor esté en lo cierto sobre ti.
Pero he conseguido mi propósito. Mi anterior adalid ha sido eliminado, y ahora dispongo de uno nuevo.
Lo único que debe preocuparnos es la seguridad de la ciudad y de los asentamientos, Igmund. El resto de la Cuenca allá se las arregle.
¿O veré qué? No me das miedo.
Te ofrecería un arco, pero parece que ya has cogido el que había en el soporte.
¡No! ¡No puedes estar aquí! ¡Habías muerto! ¡Te he matado una y otra vez!
Un regalo, Dovahkiin. Yol. Comprende el fuego como lo hacen los dov.
No veo que eso sea de tu incumbencia, pero soy el administrador de mam... esto, de la jarl Maven.
Colette ya te lo ha dicho. Debes pasar una prueba antes de que se te pueda comunicar el conocimiento.
Tal vez no con la frecuencia que debería. Creo que, con el tiempo, confiará más en nosotros.
No pasa un solo día sin que me plantee buscar otro barco. Supongo que es mejor quedarme donde estoy.
Por supuesto. No aceptaría ninguna otra cosa.
Oh, hermano...
Ah, sí, señora. Tú "mandas". Por ahora.
Aun así... todos dan por hecho que la Hermandad Oscura ha sido completamente destruida. Quizá estén un poco más relajados que de costumbre.
No trabajo por amor al arte. Si no pagas, no viajas.
No para nosotros, ¿verdad?
Oh, puedo leer el futuro, desde luego, pero solo cuando siento que estoy en condiciones de hacerlo. Y hoy mis energías aún no han llegado a un punto óptimo.
No dejabas de repetir lo suntuosa que sería la ceremonia en Morvunskar. Incluso afirmaste poseer medios mágicos para acomodar a todos los invitados.
No te conviene hablar conmigo. No soy más que el reemplazo de un thane muerto.
¿A Páramo del Martillo? No es que me oponga a la idea, pero, ¿por qué?
¡Cae ante los Thalmor!
Cierto. Pero pocos recuerdan que fue aquí mismo donde Alduin cayó derrotado por los antiguos Lenguas.
¡Qué broma es esta!
¿Alguna vez has tenido que cultivar la tierra durante una batalla? Pues yo sí.
Jamás se les ocurrirá examinarlo. ¿Quién en su sano juicio se ocultaría dentro? Ahora ve, antes de que se reúnan. Y luego ven a informarme de todo lo que descubras.
En otra ocasión será.
Y tú. Si estás aquí en busca de tesoros, sabiduría o lo que sea, me temo que has perdido el tiempo.
Por supuesto que lo soy. ¿Qué parezco acaso? ¿Una tabernera?
Ahora, vamos al tema que nos ocupa...
Ni me imaginaba que hubiera un lugar tan antiguo. Seguro que tiene más de mil años.
Vino de la antigua patria y mató a todos los elfos.
Nada de visitantes. Ni hablar. Ahora lárgate, antes de que me enfade.
Un placer como siempre. Aquí tienes tu pago.
¿Y qué ocurre con esos perros? ¿Cómo están esos preciosos angelitos?
¿Con qué mensaje, señor?
Y por ello gozas de mi favor. Esa piel te servirá bien.
He pagado un extra para tener la habitación más grande de la Posada de Sangre Argéntea. Necesito espacio para estirar los brazos.
El viejo Arnleif estaría orgulloso de Lisbet. Ha mantenido el lugar funcionando contra viento y marea.
Tanto Vittoria como su marido estarán allí mientras dure, y han invitado a todos los habitantes de Soledad. Tendrás numerosas oportunidades.
No, aún no. Aunque es cierto que mi marido Torygg era el rey supremo, y yo soy su viuda... no es momento de reclamar tal título.
Aah... empiezo a ser demasiado vieja para pasarme el día trabajando, pero espero que el maestro Hlaalu me permita bajar el ritmo un poco.
Aunque técnicamente es el archimago quien está a cargo del Colegio, a menudo sus responsabilidades le mantienen ocupado. Por ello, yo gestiono las actividades diarias.
Ya has tomado una decisión. Ahora tendrás que vivir con ello.
Bien. Vuelve a informar cuando hayas completado el trabajo.
Y puedo aventurar más: la negativa de Ulfric a ejecutar a la mujer del enemigo al que ha derrotado será vista como un gran acto de compasión. Bah. Es magistral, la verdad.
De hecho, se sabe de ladrones que han matado por dinero. Esta guerra está sacando lo peor de nosotros.
¿En serio? Te enseñaré encantada algunas cosas sobre hierbas si encuentras el libro.
Mis hombres tienen sus órdenes. Pero es una ciudad grande y hay una guerra en marcha. Además de estos asesinatos.
Gracias, jarl Elisif. Pero sobre la cueva...
No tienes suficiente como para ganarte mi lealtad.
¿Es posible? ¿Me has traído el amuleto? Oh, gracias, Arkay. Y gracias a ti. Oh, por favor, acepta este oro por las molestias.
Oh, eres tú. No estarás aquí para robarme, ¿verdad?
Te lo advierto, los Thalmor te han marcado.
Ojalá hubiera más con la dedicación y la fuerza de ánimo que tú demuestras. Me aseguraré de que se da buen uso a estas monedas.
Tal vez. Al menos, seguirá existiendo. Grik los lein.
¿Conoces a mi padre? Es alguien muy importante. A veces incluso habla con el jarl.
No tenemos nada de lo que hablar hasta que no recuperes el favor del gremio.
Si tuviera algún cliente, me preocuparía que lo espantara. Pero vamos... Mira a tu alrededor.
Así que Hadring consiguió un nuevo cliente, ¿eh?
Una noche, desapareció mi primo. Algunos dicen que se lo llevaron los Thalmor. No pasó mucho hasta que me encontré bajo el estandarte de Ulfric.
Solo tienes que dirigirte al norte, no tiene pérdida. Es la capital de la comarca de Carrera Blanca.
Hibernalia nos permitiría amenazar directamente las líneas de suministro rebeldes de Ventalia...
Todo lo que queda de ese tristemente célebre culto está ahora recogido en mi museo.
Si vosotros dos no podéis afrontarlo, contrataremos a otros.
La enfermedad se está cebando contigo. La Vigilia de Stendarr puede ayudarte, siempre y cuando prometas que nunca ayudarás a los daedra.
La entrada debe de estar pasando el campamento de los Renegados. Busca un cañón o una cueva en la Aguja de Karth.
Pero nos vendría bien una pausa para reagruparnos.
Maven, por favor. No sabía que era de los tuyos. De haberlo sabido, habría hecho la vista gorda, te lo juro.
Ah, ¿sí? ¡Qué detalle!
Gentil. Adorable. Venga, no pongas esa cara de enfado. Solo te tomo el pelo.
Es una nota de un tal Calcelmo, de Markarth.
Puede que seas un huésped en Cuenca del Dragón, pero estás empezando a agotar mi paciencia.
Si deseas comerciar, los venenos orcos son temibles.
¡Qué alguien me traiga un trago, rápido!
Los Capas de la Tormenta son historia, pero nunca olvidaremos a Talos. ¡Por mucho que digan los Thalmor!
Espero que coincidas conmigo en que estos actos oscuros están mejor en el olvido...
¡Ja, ja! ¡Contempla el truco final del bufón de corazones! ¿Creías que ya estaba a punto de morir? ¡Pues no!
Siento tener que decírtelo, Giraud, pero los estudiantes son una desgraciada necesidad para un colegio. Intenta perseverar, de verdad.
Estás poniendo nerviosos a mis clientes. Guarda el arma.
Los espíritus guardianes del oso, el mamut y el gato sable te aguardan. Regresa cuando los hayas derrotado.
Te agradecemos mucho tu ayuda.
Tiene que seguir aquí, en alguna parte...
Si llega a coronarse rey supremo, tengo mis dudas de que sobreviniera la edad de oro que sus seguidores esperan.
¡A morirse tocan!
Hemos recibido un nuevo encargo.
En esas tumbas yacen los hijos e hijas de Falkreath.
Eso espero. Skyrim necesita gente como tú que luche por liberarla.
Vas por el buen camino, y prevalecerás.
Tilma se encargará de mantenerlo limpio. Siempre lo hace.
Pues los estás encontrando. Y eso ya es mala cosa.
Ya he dicho demasiado. Si alguien escuchase lo que estamos diciendo, cundiría el pánico.
Creo que estamos preparados para comenzar a explorar algunas de las muy diversas aplicaciones de la magia a lo largo de la historia.
Tiene que haber algo en esa casa suya. Estoy seguro.
Nos aseguramos de que vuestro emperador no le mentía a sus amos elfos cuando aceptó que el Imperio renunciase a los falsos dioses y a esas estúpidas creencias.
Voy donde va mi hermano. Creo que quiere seguir buscando.
Irás al fuerte Dunstad.
Pues ya no tenemos nada más que decirnos.
¡A por él! ¡Arrancadle la garganta!
Ocurriera lo que ocurriera cuando mataste a ese dragón, algo salió a la luz en ti, y los Barbas Grises lo oyeron.
Marchando ahora mismo.
Trabajo en la mina, igual que todo el mundo.
He pensado que quizá podrías volver a hacerlo... por un módico precio.
¿Tienes la savia del Brillo de los Antiguos?
Hay una ciudad en llamas que necesita ser gobernada.
Observar el mundo que encierra un Pergamino antiguo puede dañar los ojos. O la mente, como le ocurrió a Séptimo.
Yo diría que las cosas no pueden ir mejor.
¿Por qué diantres iba alguien a sellar esto? ¿Qué es este lugar?
El dios Arkay fue una vez como nosotros, sujeto a una tortuosa mortalidad.
Lo siento, Betrid. Creí que las había limpiado bien.
Si este frío me adormece más los dedos, apenas podré empuñar un arma.
Significa suscribir las ideas nórdicas de cómo vivir tu vida. Honor, batalla, gloria y todo eso.
La verdad es que sí. ¿Sabes? He oído que tuviste algo que ver en la muerte de Sybille Stentor.
Markarth vive porque mi familia se asegura de que la ciudad reciba su oro y su plata.
El mundo exterior no nos importa nada, y queremos que siga siendo así.
Bueno, dime si necesitas algo.
Y antes de que lo preguntes, no... no pensé que fueras tú. Bueno, quizá sí lo pensé, pero cuando me salvaste el pellejo se me despejaron todas las dudas.
¡Envidio tu oportunidad para ver de cerca a ese dragón!
Vamos a recorrer los pasos de los Divinos.
También es la única ocasión en la que nos traen comida. Y si no hemos extraído suficiente mineral, no nos la dan.
El camino nos lleva junto a muchos ríos de agua fresca. Allí podremos rellenar nuestros odres.
Tengo otro asunto personal pendiente y me harías un gran favor aceptando el trabajo. ¿Crees que puedes ayudarme?
¡Por Sithis! ¡Estoy impresionado!
Estoy tan cerca de la respuesta...
Me temo que los acontecimientos de los últimos siglos han causado una pérdida significativa de nuestra historia.
¿Es por los establos? De eso se encarga mi marido, Geimund.
Déjame en paz... No estoy de humor para charlar.
Aquí tienes la espada. ¡Dile a Harrald que deje de cargarse muros y quizás su espada se mantenga en mejores condiciones!
Ve con cuidado. Extraño mi amuleto, pero una vida no puede sustituirse con tanta facilidad.
Lo último que supe es que iba a cruzar la frontera de Morrowind hacia la Grieta.
Cuando Ulfric cayó, se hizo justicia. Puede que suene algo cruel, pero es lo que siento.
Hay una guerra en marcha. Necesitamos cada trozo de mineral que podamos conseguir, así que seguiremos cavando. ¿Comprendido?
Después de ese punto hay dos puertas exteriores. ¡Encuentra la forma de abrirlas y podremos tomar la ciudad!
Hermir se ha convertido en un herrero decente. Me gusta pensar que yo he contribuido a ello.
En El mazo y el mortero hacemos pociones. Si no las distingues por el nombre, acércate al mostrador y te aconsejaré.
Me... me someto. ¿Qué ordenas, mi señor?
No puedes ocultarte de los que están ocultos.
¡Ah! ¡Lo has logrado! Cómo me alegro de verte. Jamás olvidaré cómo me salvaste la vida de esos lunáticos Thalmor.
¡Que los que miran desde Sovngarde nos envidien en este día!
¿Se supone que está de nuestra parte?
Me alegro de que estés aquí. Necesito que le entregues un mensaje al jarl de Carrera Blanca.
Seguro que acabas de llegar a Skyrim, o ya sabrías quién soy. Tengo participaciones en casi todos los asuntos importantes de Soledad.
Te veré morir, monstruo.
Pero entonces los dragones volvieron, y recordé que los Cuchillas antes eran matadragones.
Ay, querida mía, ¿a quién le importa? Así que tu esposo es un gamberro. El trabajo que haces aquí, conmigo, no tiene precio. La gente de Carrera Blanca sabe lo que vales de verdad.
Con dinero, todo funciona mejor.
Bueno, encanto, ya sabes dónde encontrarme si alguna vez se te hace insoportable.
Pusimos en marcha el aserradero antes de enterarnos de que el grupo grande de árboles de la colina era sagrado.
Sí, sí, más cerca. No muerdo. Lo prometo.
Pero ella solo puede observar, nada más. No negociaremos con ella, ¿está claro?
Yo solía servir junto a Trilf y Steirod. Son buena gente, pero más te vale caerles bien, ¿me sigues?
Supongo que la energía liberada por el Ojo de Magnus no fue totalmente contenida y que parte se ha aglutinado en esta zona de Skyrim.
Pero quién sabe... Ya me he equivocado antes.
Esas visitas furtivas a la taberna te convierten en objetivo fácil para un asesino enemigo. Deberías haberme informado antes.
No te metas en líos, o tendrás problemas.
¿Un par de años...? No era un Renegado cuando llegué, pero me uní a ellos cuando me encerraron. Así es más fácil.
Seguro que incluso en Cyrodiil la gente ha oído las noticias de la guerra en Skyrim, ¿verdad?
(Inhala profundamente)
Y sin compromiso. No está mal. Aquí tienes algunas monedas.
Pero ahora controlamos nuestro destino.
¿Has hablado ya con Brelas? No soy un hombre muy paciente, ¿sabes?
Quebrantahuesos.
He partido un par de caras para Maven Espino Negro, cuando ella no quiere verse involucrada. Paga bien, así que ¿por qué no?
Te doy la bienvenida. Si no puedo servirte en algo, estoy seguro de que cualquiera de mis otras caravanas podrá.
Maven te envía recuerdos, Letrush.
Uno de mis monjes, el elfo Orchendor, fue enviado para reunir a estos afectados. Llevó el rebaño a Bthardamz por mí, pero, desde entonces, ha perdido el rumbo.
Si los Preceptos siguieran acatándose, tendrías que vencer la Ira de Sithis. Ahora, basta con pagar una multa a Nazir. Ah, los métodos antiguos...
Pero no tengo nada que ocultar. He venido del sur, en viaje de negocios.
Grelod dirige este orfanato porque es mayor, es su vocación y no conoce otra forma de ganarse la vida. Estos niños necesitan amor y consuelo. Yo hago lo que puedo...
Al menos ahora no tenemos un dragón del que preocuparnos, de momento.
No es nada. Continúa.
¡Proteged al jarl con vuestras vidas!
Muy bien, muy bien. Hablaré con ella.
Sí, no sé ni cómo sentirme con lo que pasa ahí.
Mi estancia en el Colegio de Bardos fue breve. Un prodigio no necesita recibir educación formal.
Los otros... He hablado con ellos. Y van a venir, lo sé. El hechicero, Festo Krex... Quizás incluso el argoniano y la no niña...
Y ahora te irás, si sabes lo que te conviene.
En nombre de los hijos e hijas de Skyrim, de todo lo que es bueno y puro, acepta esta muestra de nuestro aprecio por tus servicios.
Oh, vaya. Probablemente sea algún asunto de chicos. Qué no daría yo por tener sus problemas...
Lo sé. Es que no quiero que te marches; eres lo único bueno que le ha pasado a esta ciudad en mucho tiempo.
¿Ligera, intermedia o pesada?
Y, si un asesino pasa sin que la guardia nocturna lo detecte, nos quedaremos sin jarl. Sin el liderazgo de Balgruuf, Carrera Blanca se sumiría en el caos.
Toma ya... ¿Quién es invisible? ¡Yo!
¿Necesitas... alguna cosa más?
Pero creo que han dejado que la muerte de mi hermana empañe la imagen que tienen de Ulfric y de lo que realmente significa su aportación a esta guerra.
Primero, un poco de historia. Tras la crisis de Oblivion, se formaron varios grupos con el objetivo de erradicar los restos del Amanecer Mítico.
No me molestes si no tienes novedades acerca de la máscara.
Casi me siento ya como en casa en este lugar. Serán las manchas de sangre.
Seguro que Naris disfruta con ello. Menudo tipo más desagradable.
Podría haberlo dejado. Podría haberlo puesto donde estaba en un principio.
¿En serio? Parece difícil de creer. ¿Seguro?
Mi madre y mi padre murieron hace años. Falion se ocupa de mí ahora.
Sí. Así ahora no tendrás que irte, ¿verdad?
Mientras nosotros luchábamos contra los elfos en la Gran Guerra, Madanach estaba ocupado gobernando la Cuenca.
Hay un... un problema, sí.
Oye, orco. ¡Levántate! Vamos, los dioses no van a darnos otra oportunidad.
¿Pero sabes cuál es nuestra mejor arma? El valor. Así, aunque no podamos dar muerte a la bestia, al menos tendremos la tenacidad para ahuyentarla.
Te envidio, ¿sabes? Por volver a subir los 7.000 escalones... Yo hice la peregrinación una vez, ¿lo sabías?
Cuando llegaron por primera vez a Tamriel, llevaron a cabo todo un genocidio de dragones, y ahora volverán a hacerlo, con tu ayuda.
A estos combates solo se accede con invitación. Y tú no la tienes, así que andando.
Qué decepción.
No sé quién te crees que soy, y me da igual. ¡Déjame en paz!
Es la prisión más segura de Skyrim. Echamos escoria dentro y cerramos las puertas. Nadie sale.
¡Se ocultan allí, en los establos!
He encontrado esto. Pensé que te gustaría.
Unos elfos de aspecto peligroso que no dijeron sus nombres. Saca tus propias conclusiones.
¡Atrás, mi señor!
Bueno, ahora iniciarás una nueva vida en la Hermandad Oscura. Después de todo, eres parte de la familia.
Ya sé que el padre Rorlund y tú tenéis muchas cosas que debéis hacer en el templo, pero a veces creo que hay cuestiones más importantes que atender.
Fueron poderosos en su tiempo. Tanto como para intentar derrotar a Alduin... sahrot hunne. Los nórdicos acabarían teniendo muchos más héroes, pero ninguno ha estado a su altura.
Aún me gusta. Es que prefiero tener un plato de comida esperándome cuando vuelvo a casa.
¿En serio? No me equivoqué contigo.
Supongo que pasaremos toda la vida juntos. ¿Dónde deberíamos vivir? Podrías quedarte conmigo...
Cerca del Desfiladero de los Gigantes, en la penumbra antes del amanecer, marchamos, sin sospechar de la trampa imperial.
Mi padre ha muerto. Las cosas no serán lo mismo sin él.
Arregla la que has armado, luego pide disculpas y, si creemos en tu sinceridad, nos pensaremos el ayudarte.
Y recuerda siempre esto: aquello que desees habrá de cumplirse.
¿Qué? Cómo... ¿Dónde lo has conseguido?
Me enorgullece que cuides de nosotros.
Puede que el Imperio intente reconquistar la ciudad, o aún peor, que nos visite un dragón. Debemos estar preparados para ambos casos.
Ojalá pudiera irme a alguna de las capitales... quizá incluso a El Duelo. A cualquier sitio menos aquí.
Vamos. Rápido. Puede que lleguemos demasiado tarde.
¿Y podrás manejarlo? ¡Ja! Claro que puedes.
¿Dónde está Elvali? Iba justo detrás de mí.
No hay tiempo que perder en ceremonias. Necesito tu ayuda de nuevo.
Me has sido de gran ayuda. Déjame que te compense por la información.
No, lo siento, pero no puedo ir contigo a ninguna parte. No lo haré. Por favor, debo volver a mis quehaceres.
¡La Corona dentada! Data de un tiempo anterior a los jarl y las asambleas.
Lucharé contigo de nuevo, pero no hasta que tengas el oro necesario para respaldar tu apuesta.
Ahora mismo estoy ocupado, chica. Podemos hablar más tarde.
¡Alabado sea Talos!
Perdí tantas cosas...
Ya no es momento de charlar. Debemos darnos prisa.
Es el momento de demostrar lo que vales.
Llevaba un libro consigo, "Canción de los alquimistas", que leí una y otra vez. Echo de menos tener un ejemplar.
No estoy preparada para separarme de mi esposo.
Sí, suponía que eso había quedado claro.
Sí, mi jarl.
Me alegro de ver que adoptas nuestros métodos. Sería un desperdicio perder un contacto en la Compañía del Imperio Oriental antes de conocer toda la historia.
No has sido capaz de recuperarlo. ¿Por qué íbamos a entregarlo ahora?
A medida que pasara el tiempo, nuestra suerte disminuiría hasta desaparecer. Y, no sé si lo sabes, pero nuestra asombrosa suerte es básica para nuestro oficio.
Mi administrador tiene un hogar adecuado a la venta. Creo que encontrarás las dependencias de lo más placenteras.
Las manos fuera.
Esta posada es propiedad de mi familia, pero he puesto a Kleppr al mando. Hay un ratón para cada ratonera.
Haces muchas preguntas, ¿no? Me gusta. Quizá no te importaría solucionar un problemilla que tengo.
Tengo espadas fuertes y armaduras recias, si es lo que quieres comprar.
Deberías deshacerte de parte de ese equipo que no quieres. Ve a Artículos Usados de Sadri, y habla con el elfo.
¡Me vas a cortar estas ataduras ahora mismo! ¿Me oyes? ¡Córtamelas ahora mismo!
He estado guardándote esto. Espero que te guste.
Alto, visitante. Debes pagar por tus crímenes con sangre u oro.
Hasta la próxima.
Al fin.
Karliah destruyó todo aquello que representaba el gremio. Traicionó y asesinó a sangre fría a mi predecesor.
... nunca el oro suficiente... Necesito un nuevo cargamento...
Ruinas dwemer. El pueblo bajo las montañas, hoy completamente desaparecido.
Supongo que lo suyo es darte las gracias.
¡So!
Querían una confesión. ¿De qué? No importaba. Solo querían que admitiera algo.
¡Que se encarguen ellos del trabajo, que para eso les pagas!
Una típica sirvienta de Soledad es como la propia ciudad. Tormentosa por fuera, pero llena de encantos por dentro...
Y que lo digas. Uno no llega a la posición que ostenta mi madre por pura suerte. Su diplomacia y su ojo para los negocios son legendarios.
Una vez, Ulfric intentó que luchara en una guerra para él, pero desfilar me aburre.
No me lisonjees, Alvor, no después de lo de anoche. Te llevaré agua cuando acabe mis otras tareas.
Ahora tengo muchos asuntos importantes en la cabeza. Y tus preocupaciones no se cuentan entre ellos.
Avisa a J'zargo cuando todo esté listo.
¿Vas a estar en la posada esta noche?
¿El qué?
"¿Pasa algo?", me pregunta. ¿Qué te parece? ¡Pues claro que pasa!
Está claro que no tienes ni idea de quién soy o no te atreverías a dirigirte a mí.
Ese sí que fue un verdadero héroe nórdico, una leyenda tan grande que los mismísimos Divinos elevaron su alma a los cielos y lo convirtieron en un dios.
A decir verdad, es muy interesante. Tiene una factura extraordinaria.
Entonces... llevar tu arma por ahí de esa forma te da sensación de seguridad, ¿no?
¿Te apetece un trago?
Y pensar en lo cerca que he estado de perderte... ¡Ohh!
Esto es una destilería Espino Negro; puedes tener la certeza de que vendemos solo la mejor aguamiel de Skyrim.
Ya conoces las leyendas en torno a la tumba de Ysgramor.
¡Eres nórdico! ¡Nunca lo hubiera imaginado! ¿Se puede saber dónde aprendiste a cocinar así? ¿Aquí en Skyrim? O tal vez en algún lugar menos...
Y aquí, los humanos se rebelan contra sus señores supremos, los dragones... la legendaria guerra de los dragones.
Se llama Torsten Mar Cruel. Es rico de verdad, porque es dueño de la granja de Acebo Helado.
Por todo este templo hay muchos objetos valiosos.
Nada. Estoy ocupada y no me gusta que me molesten salvo que esté esperando algo de ti.
¿Qué? ¿Eres idiota o algo así?
¿Te imaginas lo antiguo que debe de ser este lugar? ¿Tendrá cientos de años? ¿Miles?
El propietario de Amielada, Sabjorn, está a punto de organizar una cata para el capitán de la guardia de Carrera Blanca, y nosotros vamos a envenenar el aguamiel.
Pocos te lo admitirán, pero nosotros conocemos la verdad sobre el Gran Hundimiento.
Ya es hora de que afrontes la verdad, viejo amigo. Tú, Vex, Mercer... sois una especie en extinción. ¡Las cosas estan cambiando!
Oh, perdona. Tras la muerte de mi tío, todo está un poco patas arriba.
¿Qué pasa? ¿Tienes uno de los fragmentos de la Cuchilla?
Mala idea.
Sí, sufrimos por ti.
El mazo y el mortero tiene curas para todos los males, desde la ataxia al atontamiento.
Hace eones, Sithis concedió cinco hijos a una mujer. Ella los mató para granjearse su favor, convirtiéndose así en la Madre Noche. Si es que uno cree en este tipo de cosas.
Sí, ya lo sé. Lo del último trabajo fue culpa mía. Obviamente pensé que Niruin estaba preparado, pero me equivoqué.
Traigo coles frescas. Estaba pensando en hacer un estofado de coles y manzanas.
Apuesto a que te gustaría llegar a Carrera Blanca y escapar de este tiempo.
Solo soy un sirviente de Escaldo el Anciano. No soy digno de que nadie me preste atención.
Buenos días, Lemkil. Cuando estuve en Carrera Blanca, vi unos vestidos preciosos para tus chiquillas. No me importaría comprárselos, si tú quieres.
Vaya, ese tipo estaba como una cabra.
Exacto. Juntos tendremos más posibilidades de que esto funcione.
¡No he vivido todo este tiempo para que me derrotes tú!
Claro. Skyrim siempre ha sido parte del Imperio.
Otra vez tú. ¿Qué haces aquí?
¡A por él!
Algún día pretendo ser el jefe, y para ello, lucharé contra mi padre y mi hermano, como es tradición.
Muy gracioso. Mi amo es Clavicus Vile, príncipe daédrico de los deseos. Como podrás imaginar, es un tipo bastante importante.
Entiendo. Bueno, si cambias de opinión, el encargo sigue disponible.
Eres dulce. Pero ahora mismo no estoy preparada para eso. Lo siento.
No me sorprende. No son partícipes de lo que yo veo y yo no puedo explicárselo.
Sí, la garra. Sé cómo funciona. La garra, las marcas, la puerta del Salón de las Historias. ¡Sé cómo encaja todo!
Considéralo parte del trabajo sucio. Yo ya me ocupé de introducirla, y ahora tú tienes que eliminarla.
Os enseñaré una custodia y veremos si podéis usarla para bloquear hechizos con éxito, ¿de acuerdo?
Ah, claro, dijeron que te habían capturado al cruzar la frontera.
¡Muere ya para que pueda enterrarte!
En efecto, hay muchas cosas que sabemos que tú aún no conoces. Eso no significa que hayas avanzado lo suficiente en el camino como para comprenderlas.
¿De verdad? Quizá por eso tengo tanto sueño.
Cuídate y ve con las bendiciones de los Nueve.
Sé que he oído algo.
Y no hagas siempre lo que te mandan sin más. En los Compañeros nadie manda sobre los otros.
Espero que no estés pensando en robarme.
Un hombre inteligente vino y nos habló de un fragmento de hoja.
¿Te sobra una moneda para una pobre anciana, mi señora?
Ah, sí, tu paga. La compañía te agradece tus servicios. Pásate por aquí si alguna vez podemos ayudarte en algo.
Quizás pare a beberme una jarra de aguamiel de Espino Negro en Riften. Eso ya casi justifica el viaje por sí solo.
Soy un orco y un guerrero, pero no tengo ningún deseo de ser jefe.
Mmm. Está bien.
Mi marido Thonar se encarga de todos los negocios familiares. Es un hombre importante.
Sigue portándote bien con nosotros y recibirás mucho más de donde viene eso.
¡Ja, ja, ja, ja! ¡Otra vez, otra vez! Repite el momento en que intenta comprarte caramelos.
¿Otra vez borracho, Embry? Más vale que Alvor no te oiga hablarme así. Te clavará la cabeza en la forja.
Esperaba que vuestros eruditos estuviesen a un nivel comparable al de mis compañeros. Veo que no es así.
Mjoll no me trajo otra cosa que seguridad, alguna que otra bronca... y lecciones con la espada.
¿Por qué iba a dejar entrar a un dragón en el corazón de mi ciudad, después de todo lo que he sufrido para mantenerlos fuera?
Mira. Ruinas nórdicas. Espero que haya oro dentro.
Y, como me dijiste una vez, el siguiente mundo tendrá que apañárselas solo. Ni siquiera yo puedo ver más allá del fin de los tiempos.
Si has venido a informar de algún caso de corrupción, ten por seguro que estamos investigando esos rumores como corresponde.
Por los dioses, la enfermedad te consume. Ve a Blanco Vial y cómprate una cura antes de que nos contagies a todos.
Lo que importa está en su corazón.
En cuanto tenga la piedra sello, inscribiré los hechizos que buscas.
Se está mejor aquí dentro que ahí fuera.
Los escamas sombrías han caído en el olvido. Una tradición antigua, de otro tiempo.
Es peligroso. Muy peligroso. A un mago elfo oscuro renegado que investiga los artefactos de los enanos hay que tenerle respeto... y miedo.
Dicen que en el templo de los Divinos se comen cosas aún más raras.
¡Quémalo! ¡Quema al vampiro!
Llevo picando piedra desde que tengo edad para coger un pico, y mira lo que te digo: esta mina se está agotando.
Larga vida al Imperio.
¿Mejor miel?
Mi deber es salvaguardar al jarl, no hacer de niñera de sus aduladores.
He ido aprendiendo unos cuantos trucos cuando leía los tomos repartidos por la tienda, pero no le tengo cogido el punto para hacer bien la mitad de las fórmulas.
¿Tienes buena vista? Tal vez veas al viejo Hajvarr en la Guardia del río Blanco. Menudo elemento. El jarl debería echarlo de allí y acabar ya con esto.
Se rumorea que no has cumplido las normas del gremio, así que no puedo hacer negocios contigo hasta que lo soluciones.
¿Sí?
Avulstein... niñato estúpido...
Si te diriges a Arboleda de Kynes, no te salgas del camino. Entre ambas ciudades hay unas cuantas cuevas bastante peligrosas.
Reza la leyenda que Lenne, uno de mis antepasados, descubrió las minas cuando buscaba una cueva oscura en la que hacer sus necesidades. Demasiada aguamiel.
Si vas a buscar la garra, tendrás que saber hacia dónde ir.
Te ruego que disculpes mi anterior rudeza. Me interrumpen tan a menudo las visitas que de vez en cuando pierdo la compostura.
Lloramos.
¿Lo harías? Ah, eso sería maravilloso.
En mi opinión, esta rebelión debería acabar cuanto antes. Me vi obligada a concluir mi gira por las cortes de Skyrim. Viajar ahora es demasiado peligroso.
Sigue el camino que va hacia el norte. Cuando llegues a la destilería Amielada, gira a la izquierda y el camino te llevará hasta las puertas de la ciudad.
Entre el acantilado y la cueva Pierna Rota de allí, odio este tramo del camino. Hasta el aire huele a maligno. Arre, caballo.
Mi padre dice que soy demasiado joven para entrenarme con la espada, ¡así que practico con los puños!
No te queremos por aquí. Vete.
¿Cuándo podré ir a cazar?
¡Tenemos que derribarlo!
Prefiero ganarme la vida liberando a otros de su dinero a pasarme todo el día de carpintero como mi padre.
No puedo. Supondría deshonrar el puesto que el jefe me ha dado.
No. Así no.
¡Pues claro que sí! Recé y tú viniste, ¡así que ahora vas a aceptar mi encargo!
Toda mi vida he sido una hija de Skyrim. Siento amor por esta tierra y sus habitantes, y como yo, todos los nórdicos que sirven al Imperio.
¿De lado de quién estás, Reburo? No es Skyrim lo que me preocupa, sino la Cuenca. Y, en concreto, la parte de la Cuenca en la que nos encontramos.
Si tanto interés tiene en esta ciudad, que luche contra mí.
Los beneficios siguen subiendo. El almacén continúa dando buenos ingresos y los alquileres de tus tiendas en el Pozo son aceptables.
Mi hermana no deja de repetirme que la granja es lo que nos mantiene con vida, pero yo no llamaría a esto vivir.
Las armaduras de los nórdicos tienen muchas pieles. A veces, eso le pone nervioso a M'aiq.
Deberíamos tomar la Marca de Hjaal. Será un buen terreno desde el que presionar a los imperiales. Estaríamos a tiro de piedra de la capital.
Es duro, leal con sus hombres y un buen líder, pero si no eres nórdico, Ulfric nunca confiará en ti.
Por favor, date un poco de prisa. El barco del emperador no va a permanecer amarrado allí para siempre. No volveremos a tener otra oportunidad como esta.
No sé qué estamos haciendo aquí, pero las órdenes son las órdenes.
Primero expulsaremos a los Thalmor y a sus malditos peleles imperiales del país. Después reconstruiremos Skyrim para que vuelva a ser lo que fue.
Aunque eso suponga dejar Paraje de Ivar, quiero que Fastred sea feliz.
Si ya tienes los materiales, puedes usar la fragua para forjarte algo nuevo.
Es un placer conocer a la persona que fue a la tumba del rey Olaf.
Pregúntame a mí. A estas alturas, conozco nuestra historia casi tan bien como Vignar. Salvo que yo puedo acordarme.
Se agradece el calor de Cerro Pedregoso en estas tierras frías e lóbregas.
¿Estás mal de la vista o solo te falla el cerebro? ¿Crees que la tribu no te ha visto hablando conmigo? ¿Crees que no lo sabrían?
¿Te das cuenta de que, cuando los orcos atacaron, solo me preocupé de mí mismo? Salí huyendo... y abandoné a mis hermanos y hermanas ante la muerte.
Después, tengo que investigar los trapos sucios del administrador del jarl. He oído que hay posibilidades de chantaje.
¡Ja! Esa es la pregunta más importante de todas.
¡Mi padre dice que soy "gregaria" o no sé qué, como él! Dice que significa "lista", pero mi hermano dice que no.
No temas. Recibirás tus baratijas; satisfarás tu deseo de poder, tu ansia de riqueza.
El anciano confió en ti, así que yo también lo haré.
¡Es el momento! ¡Gathrik nos espera!
Infiltrarse en un fuerte militar ocupado y salir de una pieza no es motivo de broma. Así se hace.
¡Estas malditas hijas mías no sirven para nada! Mi esposa era mucho más mujer de lo que ellas serán jamás. Murió al traerlas a este mundo. Qué desperdicio.
Hay a quien le gusta ir de aventuras con sus amigos. M'aiq piensa que es mejor ir solo. Así se discute menos sobre cómo dividir los tesoros.
¡Es la hora, soldados! ¡Ha llegado la hora de tomar la ciudad!
La propia Hibernalia murió en los años posteriores. Tan solo queda de ella un cascarón vacío. El Colegio es su único legado vivo.
Por favor, ¿qué pretendes? ¿Insultarme?
Pero recuerda que ser un cuchilla es un compromiso para toda la vida. Una vez dentro, su lealtad debe estar con nosotros.
Sinding. Vino como trabajador. Parecía un hombre honrado.
Además, no te dará miedo un puñado de hombres de metal dormidos, ¿eh, Drennen?
Hablarás cuando sea el momento, ¿verdad? Verdad...
Tu hijo escogió su bando, y se equivocó. Y ahora está muerto. Así es la guerra. Cuanto antes aceptes su pérdida, mejor.
Fastred, he de decirte algo.
¿Por qué me inoportunas con batallas que no podemos ganar? Necesito que mi administrador planee nuestra victoria, no que me atosigue con minucias y penurias.
Leifnarr dijo que iban a pagarle el doble de lo que se suele pagar en los mercados.
Un montón de chusma perezosa intentando ganarse la vida. No pueden conseguir mejores trabajadores, porque todo el mundo tiene miedo de la tumba que hay sobre la mina.
Si no hubiera sido por Talos y unos modestos sobornos para los captores adecuados, ¡hoy no estaría delante de ti, resplandeciente por mi fe!
El atronach de las llamas es un compañero vital para cualquiera que confíe en la conjuración. Probarías tu habilidad si convocaras uno.
Sujetaré con un anclaje mágico tu alma mientras estés dentro. Cuando termines, será tan sencillo como tirar de ti y devolverte a tu cuerpo.
¿Sabes? Hay buenas razones por las que la guardia de la ciudad nunca baja por aquí.
Lo perdimos.
Tradicionalmente, es la madre la que enseña a sus hijos el arte de la herrería. Si un jefe tiene una segunda esposa, recibe con honor el nombre de "mujer-forja".
Has hecho el trabajo y lo has hecho bien; es lo único que pedimos. Disfruta del oro.
Parece que, en el fondo, no se te da muy bien esto de la investigación.
Se te acaba el tiempo.
¿La emisaria? ¿De qué se trata?
Esperas conseguir en el consejo lo que no has sido capaz de lograr en la batalla, ¿no es así?
Saludos, mortal. Me has permitido guiarte por los velos del Crepúsculo y has rescatado mi estrella de Malyn Varen.
Nuestra posición y políticas actuales son irrelevantes. Independientemente del contenido de la respuesta, con toda seguridad se retorcerá para ajustarse a los caprichos de cada grupo.
Te envidio. Enfrentarte a una bestia así en combate. Oler su sangre en el aire. De eso tratan las canciones, hermano de escudo.
Es que papá prometió que podría hacer algo en la forja, así que a lo mejor podríamos fabricar algo juntos, mmmm... ¿la semana que viene? ¿Te... viene bien?
No he hecho tales cosas, ni tengo intención. Lo único que quiero es vivir en paz.
Aquí tienes, querida.
Venga, andando. Tenemos nórdicos que matar.
Soy thane. En el futuro, quizá te convenga informarte de esas cosas antes de hablar con alguien. Te arriesgas a quedar en ridículo, y todo eso.
El gremio de ladrones solía dominar esta ciudad. Ahora no son sino matones y bravucones pudriéndose hasta morir en su Ratonera...
¿Seguro que es la verdadera razón? Espero que no tenga nada que ver con que otros no reciban bien a un argoniano, porque de contrario...
Mi hija Adara se convertirá en una gran orfebre cuando sea mayor.
Puedes fingir cuanto quieras que no me oyes... pero mejor no te metas en los asuntos de los Espino Negro.
Por cierto, no sé quién eres, pero si no quieres que te delate, te aconsejo que me evites durante el resto de la fiesta.
"cuando el tres veces bendito falla y la Torre Roja se estremece,"
De capitán de barco a modesto tripulante... Supongo que me lo merezco por gastarme todo el dinero en mujeres y apuestas.
Lo que ves aquí.
Ahora que sabemos con certeza que el emperador viene a Skyrim, los Penitus Oculatus, su servicio de seguridad, tendrán que comenzar los preparativos enseguida.
Tengo un poco de todo a la venta, ¡ven a verlo con tus propios ojos!
Desde su ciudadela situada en el centro, reúne nuestros recuerdos sin dejar otra cosa a cambio que visiones de horror y desesperación.
¿Te ha enviado Viola para incordiarme?
Cachorro, la has armado. Has infringido las reglas y te has metido en un buen lío.
Tú... estabas hablando con aquel salvaje asesino. Y luego él escapó. ¿Qué me estás ocultando?
Lo siento, el templo de Dibella está cerrado. Puedes recibir tu bendición si lo deseas, pero las demás hermanas están recluidas.
Está bien. Esperaba que dejaras a un lado tus lealtades por un bien mayor, pero veo que te aferras al bando de Ulfric. Aun así...
Debería comprobar que Svari está bien.
Bueno, mejor duermo un poco. No os preocupéis por mí. Estáis en vuestra casa.
El emperador de Skyrim. Muerto. Corren tiempos oscuros, créeme. Tiempos oscuros de verdad...
Yatul y yo nos hemos encargado de la caza. Mul y Gadba de la minería. Parece que lo único que haces tú es buscar más esposas para que se mueran.
Tenemos una posibilidad de destruir a la Hermandad Oscura para siempre. Todo depende de ti.
Ahora no. No me apetece hablar.
Ya apenas conseguimos nuevos clientes.
Mantente fuera de mi camino.
¡Hola, hola, hola! Te doy la bienvenida. No veo muchos forasteros por aquí. ¿Vienes a mancharte las manos en una granja de verdad?
Mira, ya se te ha dicho que no se te permite entrar aquí. Da media vuelta y márchate por donde has venido.
Grelka, ¿te apetece pasear mañana?
¿No te da la sensación de que los colores son más intensos? Y todo parece más grande. Qué raro...
Solo te enfrentas a otro fracaso...
Recuerda, te ofreceré los mejores tratos o moriré en el intento.
Pues sí. Todos deberíamos encontrar la muerte mientras aún somos hombres de verdad.
¡He dicho "siguiente prisionero"!
Te doy la bienvenida. Aquí tengo muchas cosas que no encontrarás en ningún otro lugar.
Tú verás, pero bajo la mina hay una cripta infestada de draugr.
Pues nada de cerveza hasta entonces.
Mi hermano, Thorald, luchaba a favor de los Capas de la Tormenta y desapareció. Todo el mundo cree que está muerto.
Hoy no. No podemos.
Esa pregunta acarrea más de lo que imaginas. Es el tipo de preguntas sobre las que algunos de nosotros reflexionamos durante toda la vida.
¿Es posible? ¿Es esa... la Voz?
Toma, dale a Camila esta carta. Está llena de tonterías ponzoñosas. Dile que es de Faendal.
Hasta ahora he disfrutado compartiendo este viaje contigo. No por las riquezas que hemos acumulado, sino por poder llevar la voluntad de Mara a todos los rincones de Skyrim.
¿En qué puede ayudarte Ma'randru-jo, mmm?
Las puertas más profundas de los dwemer escuchan el canto. Toca las notas correctamente para la apertura. ¿No la oyes? ¿Muy baja para tu oído?
¡Strun!
Si deseas oír algo de música, avísame.
Quizás encuentre algo bueno ahí. Lo que es basura para una persona, es un tesoro para otra.
Me alegra saberlo. Puedes ser una mujer muy difícil de encontrar. Menos mal que esos mensajeros son muy tenaces.
Hay alguien a quien quiero que hagas daño. No te preocupes, te pagaré.
¡Mi más cálida bienvenida a Falkreath! ¡Todos los auténticos hijos de Skyrim son bienvenidos!
Voy, muchacha.
No, Karita. No creo que pueda.
¿Podrías? He ganado algo de dinero con el último envío. Es tuyo si me traes la garra.
Bueno, pues parece que tengo la misión perfecta para ti.
Hum... Vaya. Sí, quizá sea algo interesante. Deberías enseñárselo a Tolfdir ahora mismo.
Bueno, sí. Probablemente.
¡Aggghh! ¡Sol... tadme!
Un buen número de elfos oscuros fueron expulsados de la ciudad, y la gente comenzó a sentirse... incómoda con la presencia del Colegio.
Bueno, es obvio que está loco. Que eso lo haga peligroso o no, ya es otra cuestión.
Seguro que los guardias serán más cordiales contigo en el futuro.
Muchacha, sé lo que has estado haciendo.
¡Hemos destruido a esos traidores Capas de la Tormenta!
Confía en mí. No hay nada que temer. Piensa en Tiber Septim. ¿Crees que habría fundado el Imperio si hubiera escuchado a los Barbas Grises?
Con Irileth, o regresas cubierto de gloria, o no regresas en absoluto.
Te agradezco tus esfuerzos. Toma esto.
Entonces, encantado. Desde el momento en que te puse la vista encima, supe que merecías la pena.
El templado final del Vial se realizó con un tipo de magia antigua que se había perdido desde la guerra de los dragones.
Lleva contigo la bondad de Mara a todos los confines de los páramos helados.
¡El trono de Ysgramor! El trono de mi padre... Espero poder demostrar que soy digno de tal honor.
Ya no. Y gracias a ti. Te debo una.
Lo siento, no sé nada más. Solo he venido de visita desde Cyrodiil.
Yo de ti, haría el equipaje y me largaría antes de que acabes en uno de esos túmulos funerarios.
No dudes en quedarte y mezclarte con tu nuevo aquelarre, si tienes fuerzas.
Lo has hecho bien, adalid. Te has ganado mi respeto, hazaña que pocos alcanzan y viven para contarlo.
¿A qué debo el honor?
Voy a preparar al sujeto...
¡Traidor!
Toma, llévale esta carta. Quizá no sea tan buena con las letras como él, pero espero que me entienda.
Si ese oso tiene aquí su guarida, eso quiere decir que la entrada debe de estar cerca.
No lo ha dicho, pero más vale que te apresures.
¡Ya cantan sobre vuestro valor y habilidad! ¡No hay duda de que en los salones de Sovngarde resuenan alabanzas en vuestro honor!
¡Muere!
Me gusta ser más fuerte cuando me convierto en lobo. Pero Kodlak dice que es malo para el alma, y yo me fío de él.
Creí que se habría percatado de que ya todo era inútil. Intenté decírselo hace años...
¿De qué estamos hablando exactamente?
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre de Cerro Pedregoso.
Tengo lo que había venido a buscar, así que mejor me vuelvo a Puente del Dragón.
No te lo había preguntado porque temía que me dijeras que no. Te agradezco la ayuda.
Quizá pienses que esta guerra está prácticamente ganada. Te equivocas. He luchado contra ti con poco más que un puñado de tropas.
Me alegra oírte decir eso. Ojalá mi mujer fuera tan simple como tú.
Eso que está sobre la colina es Carrera Blanca. Estaremos en la puerta principal antes de que te des cuenta.
¡Fue una jugada maestra del general Tulio! Solo lleva al mando unos meses, pero ha cambiado mucho las cosas para el Imperio.
No me obligues a meter a tu padre en esto.
¿Qué? No. Apártate de mí.
Entonces sí que verás auténtica magia.
Por eso, cuando volvieron a nombrarle jarl, no esperó ni un segundo para nombrarme su administradora. Dijo que era la única elección posible.
La presencia de los vivos está próxima...
¡Matad al maldito dragón! ¡A menos que tengáis una idea mejor!
Insolente canalla...
El único problema es que reunir materiales se ha vuelto algo peligroso. Los caminos a las minas y a las otras ciudades están llenos de bandidos... y cosas peores.
Tal vez podríamos invitar a algunos de esos simpáticos guardias a cenar...
Acerca una silla y tómate un trago.
¿Cómo ha sido matar por primera vez, eh?
Vendió la ciudad al Dominio de Aldmer. Si no llega a ser por su traición, Taneth podría haber resistido durante la guerra.
Pero por encima de todo, vosotros luchasteis por Skyrim, por el derecho a librar nuestras propias batallas...
No me enorgullece, pero me quedaré atrás con Vilkas. Dale recuerdos a Ysgramor.
Los tapices colgados aquí y afuera se encontraron en los escondrijos en los que los miembros del Amanecer Mítico se reunían para conspirar.
Pero eso cambiará tras el asesinato de su prima. Todos creerán que ha sido consecuencia del conflicto entre la Legión Imperial y los Capas de la Tormenta.
No hay mayor locura que la de aquellos que pretenden convertirse en vampiros. Eso sí que es hacer un pacto con las tinieblas.
Estoy familiarizada con los caminos de la mística. Tengo remedios y curas si los necesitaras.
Oh, no. Eso no servirá.
Sería un honor. Sería mucho más que un honor tener algo así en el Colegio.
Postulaba que la verdadera razón por la que nórdicos y elfos lucharon por Saarthal fue porque alguien descubrió algo que estaba enterrado allí.
Mira esas piedras antiguas. Los antiguos nórdicos sí que sabían construir.
Seguro que te esforzaste mucho.
Si aceptas llevar uno de los atuendos de Ropajes Radiantes y hablar con el jarl, no solo te pagaría, sino que te dejaría quedarte con esa indumentaria.
Correcto.
Tengo todo tipo de cosas interesantes que venderte, y te aseguro que son de la mejor calidad.
¡Ah! Bien, si cambias de opinión, vuelve a verme.
Sin su respaldo, tendríamos verdaderos problemas.
Fuera de mi camino, visitante.
Ah, mi salón. No hay mejor lugar para hervir ojos, no...
Hasta ahora, todo va bien.
Una auténtica nórdica no teme a la muerte. Lo único que importa es el cómo y el por qué.
¡No le importamos a nadie! ¡A nadie! ¡Podríamos morir aquí y nadie lo sabría! ¡Simplemente arrojarían nuestros cadáveres al canal!
Me da igual que lo hayas escrito tú. Si quieres un libro de aquí, me lo pides.
Es nuestro señor y creador. El guardián daédrico del juramento y de la maldición sangrienta.
Muero por mi pueblo.
Este grupo... esta familia... esta banda... es la mejor cosa de la que he formado parte en mi vida.
Igual que hizo el mismísimo Talos en la batalla de Viejo Hroldan, reclamando la Cuenca a esos nativos salvajes.
Bueno, ya se ha acabado todo. El teniente dice que se podía ver el humo desde Carrera Blanca.
¿Cuánto tiempo llevas en Skyrim? Sí. Dale mi hacha.
Por favor, sé que te estoy pidiendo que hagas algo difícil, incluso peligroso. No sé en quién más confiar.
Creí que era verdaderamente obvio que Gulum-Ei era importante para el gremio.
Quizá, pero desde luego no sois los buenos.
¿Has oído la historia de Mathieu Bellamont y la gran traición de Cheydinhal? Si matas a la madre de un muchacho, la venganza crecerá en él como una úlcera...
"Largo tiempo ha languidecido la Corona de Tormenta, sin un rey digno sobre el que posarse."
¡Tu cabeza será mi trofeo!
Si simpatizas con el Imperio, ten la sensatez de dejar atrás Falkreath.
Al este de aquí hay una arboleda escondida donde se encuentra el Brillo de los Antiguos. Es el ser vivo más antiguo de Skyrim. Y quizás de todo Tamriel.
No me asustan los abusones. Ahora lo vas a ver.
Que Arkay te bendiga.
No olvides recomendarles nuestros servicios a tus socios.
Helgen... destruida por un dragón. Cuesta creerlo, ¿verdad?
¡Dile a esa lamentable panda de ladrones que dejen las jarras y que se pongan a trabajar si quieren mantener su categoría!
¿Cuánto tiempo será cantado? Mis pies estaban sobre la roca, pero se volvió barro y me hundió.
Significaría cortar la Estrella de Azura para abrirla. Solo las almas negras podrán entrar una vez terminemos.
Está bien, está bien. Tráemela mañana y te la arreglaré.
Agh. Tendré que bañarme a conciencia para librarme de este hedor.
Tiene amigos en las altas esferas, y no solo en Skyrim.
M'aiq sabe mucho y te cuenta cosas. M'aiq sabe muchas cosas que los demás ignoran.
Por favor... ¡No rompas mis mercancías!
Hasta otra, señora.
J'zargo ha visto que a Tolfdir le caes bien.
¿Entonces qué ocurre, por Sithis? Cicerón habló con la Madre Noche, ¿pero habló ella contigo? ¿Son estos más desvaríos de ese necio?
No es una orden. Es una cuestión de educación, echarle una mano a un viejo herrero. Tengo que volver al trabajo.
Es...
¡No se puede culpar a nadie por eso! Siempre y cuando odies al Imperio tanto como yo, podré soportarlo.
La magia aporta cierta tranquilidad, ¿no te parece? Es simple energía, a disposición de quienes posean la voluntad y la sabiduría para manipularla.
Algo huele a podrido.
Que Talos te acompañe.
¿Estás atendiendo, Delphine? Quizás aprendas algo de tu propia historia.
He reunido esta colección utilizando todos los medios a mi alcance.
¿Estás bien, querida? Creo que he visto lágrimas en tus ojos hace un momento.
Traemos honor a los Compañeros.
Ah, sí... Veo que te ha llenado la bolsa de cartas. Estoy deseando leerlas todas.
A veces pienso que tienes la cabeza de roca.
¡Ahora te toca pagar!
Mátalo con discreción para que todo te resulte más fácil, pero si aparece algún testigo, pues que sea lo que tenga que ser.
Cada noche paseo por el barrio Gris y dejo que esos pieles grises sepan lo que pienso de ellos.
Hola.
Las posadas de Puente de dragón y Paraje de Rorik son paradas habituales de correos imperiales.
Y con el cachorro a mi lado, habré recuperado todo mi poder. ¡Todo un mundo me aguarda!
Bueno, has logrado algo que Vex no consiguió en Brillo Dorado, así que estás en muy buena posición.
Solíamos creer que los piratas tenían un batallón de magos guerreros a su servicio.
Ahkari me liberó de una prisión de Cyrodiil, y ahora tengo que saldar mi deuda con él.
Auxiliar, haz lo que mejor sabes hacer. Intenta encontrar la forma de abrir esa puerta.
¿Olvidaste el juramento de los Ruiseñores que hicimos? ¿Esperabas que él ignorase tus métodos?
Quemaron su cuerpo antes de que pudiera resucitarlo... Tendrían que habérmelo devuelto...
Casi puedo oír su corazón.
Hazle daño a ese. A esa. Bueno, lo mismo da. Pero nada de matar. Y no pienso pagarte las multas si te pillan.
¡Que alguien haga algo!
Lo siento. Nuestro único interés son nuestros clientes.
Bien hallado seas, Brand-Shei. Hoy he venido a echar un vistazo a tus artículos.
Déjame que sufra. Solo.
(gemido)
Estas tierras son duras y despiadadas, aunque también son hermosas.
¡Tú, espera! Si eres fiel a Skyrim, me ayudarás con mi misión.
Han sido muchas las bendiciones de la mina, pero no tengo pareja con quien compartirlas.
¡No te creas que te vas a ir de rositas!
¡Aaayyy!
He criado a mi Sven para que sea fuerte y orgulloso. Un nórdico de verdad.
Hay quien dice que son basura. Para mí, son tesoros.
"Sangre de Dragón", ¿eh? ¿Y eres dragón por parte de padre o por parte de madre?
¿Te conozco? Creo que no.
No sé si serás capaz, y no tengo tiempo de averiguarlo. Si Kodlak responde por ti, podría tener algún trabajo que puedas hacer.
¿Esto es lo que querías? ¿Hermanos y hermanas de escudo luchando entre sí?
La verdad es que no.
Estuve allí, y combatí en la Gran Guerra. Estuve en el campo de batalla de Yunque. Pero, cuando caí herido, me abandonaron a mi suerte.
¡Ya he dicho que no lo sé! Lo he visto en la Ratonera. Quizá vive ahí abajo, pero no lo sé seguro.
Tal vez podrías hacer algo por mí antes... Duach tiene una botella de skooma, el mejor azúcar lunar destilado. Tiemblo solo de pensar en él.
Mi hermana y yo solíamos recorrer el mundo, aumentando nuestra colección. ¡Menudas aventuras vivimos!
Durante los últimos doscientos años hemos buscado al siguiente Sangre de Dragón, para guiarlo y protegerlo, como juramos hacer.
No vas a pasar. Vas a darme todo lo que tienes. El que salgas de aquí de una pieza depende de ti.
El sueño eterno aguarda...
El dominio de Mara abarca las emociones por las que más luchamos: el amor, la compasión y el entendimiento.
Solo puedo darte mi palabra como sacerdote de Mara de que mis intenciones son honorables.
Como puedes ver, hay muchos asuntos que requieren mi atención. Si tantas ganas tienes de charlar, sé de unos guardias de calabozo que estarán encantados de escucharte...
Llevamos la herrería en la sangre durante generaciones. Debo mi éxito a mis antepasados y a su fórmula para lograr la llama.
A ti te interesa lo que yo diga que te interese o, de lo contrario, mi hija preferida acabará sin hogar y sin un septim a su nombre. ¿Está claro?
Pavo y Gat son los únicos supervivientes. Avisaré al jarl de esto, pero no sé cuándo llegará la ayuda.
¡Venga! Quien pierda paga la próxima.
¡Apresúrate! ¡Se han despertado!
Puf. Qué cerca ha estado.
Aguantad la posición. La Legión ya se ha enfrentado a cosas mucho peores que un puñado de esqueletos polvorientos.
Dependen de hechizos como Luz de vela o Invisibilidad.
Aela dijo que le pertenecías, y se supone que no debo interferir. Ella me da miedo.
Bien. Cuanto más anhele a sus esposas fallecidas, menos tiempo pasará buscando una nueva.
Lo siento, no me queda ni un septim después de pagar a la guardia del pueblo para que guardara silencio sobre la persona que mataste.
La idea se me pasó por la cabeza. La guerra que se avecina, rumores de una sublevación en Helgen, ¿y ahora bufones? Skyrim ha perdido la cordura. Hay que ir con cuidado.
Mara es la diosa del amor. El templo extiende sus bendiciones cuidando de los enfermos, los pobres y los perdidos.
Alguien de Hibernalia ha solicitado nuestra ayuda.
Qué día más increíble hemos vivido. Espero que estés disfrutando de las celebraciones. Me... me siento tan abrumada... Tanta generosidad... hacia mí.
Seguro que os llevaréis de miedo.
Si lo que quieres son caballos, estás hablando con la persona adecuada.
¿Qué? ¿Por qué Fjola no te acompaña?
Así aparezca el hechicero del jarl y se te lleve.
Gracias. Toma, esto es para ti.
Siempre puedo contar contigo, ¿verdad?
Puedo enseñarte, pero no seré responsable de lo que hagas con ese conocimiento.
Has demostrado de sobra que el gremio de ladrones ha regresado a esta ciudad, y te has ganado toda la recompensa.
Si necesitas algo, cualquier cosa... no dudes en preguntar.
¿Y por qué no te vas tú a... vender algo?
Yo debo permanecer junto a Idgrod, así que tengo que quedarme. ¿Podrías encargarte de que la carta llega hasta el capitán Aldis, en Soledad?
¡Oh, y estar contigo!
Que vinieron aquí, pidieron una información, se la dimos y siguieron su camino sin dar más pistas de lo que querían hacer.
Entonces te sugiero que lo "reúnas". Hasta que pagues la multa, te excluiremos de todos los deberes y contratos de la Hermandad Oscura.
¡Voy a arrancarte esa cola tuya y usarla como cinturón!
Estaremos listos cuando nos lo ordenes.
El tiempo vuela y Mercer sigue ahí fuera. Vamos a poner esto en marcha.
¡No tengo por qué aceptar eso de ti!
Para ese tipo de asunto, Esbern es tu hombre. Al menos podrá indicarte en qué dirección debes ir.
¿Qué? ¿Quién es, hermano? ¿Otro de esos pieles suaves en busca de comida? Pero este no quedó atrapado con nosotros...
No me gusta esta tregua. A mí me parece una traición.
En cualquier caso, nuestro chef anónimo comparte su pasión por la comida con toda Tamriel. Y ese anonimato será la perdición del emperador.
Tu amistad es buena. Ten. Toma esto. Te gustará.
Tu buena obra no quedará sin recompensa. Dile a Erik que he cambiado de opinión y que iremos a Carrera Blanca para que le tomen las medidas.
¡Eh, tú, eh! Ayúdame, estoy atrapado.
Lo cierto es que sí. Si te apuntas, necesito una gema de alma llena.
¡Un mago se oculta tras aquella ventana de allí!
Necesito a alguien en quien pueda confiar para entregar un mensaje de gran importancia al jarl Balgruuf de Carrera Blanca.
¡Zok morokei! Más almas para aplacar el hambre de mi señor.
Estoy con el Guardián de Stendarr. Creemos que esta casa puede haber sido utilizada para el culto a los daedra. Ritos malignos y cosas así.
Tendrás que apañártelas con lo que tengamos, Provencio.
Solo pido unos septim para poder cenar.
Te lo explicaré por el camino.
¿Que tengo el qué? ¿De qué rayos estás hablando?
Sin embargo, el levantamiento de Ulfric Capa de la Tormenta nos ha dividido. Ahora hasta nos cuesta mirarnos a la cara sin acabar a golpes. Es burdo y estúpido.
Está obsesionado con ello, en serio. Nadie le prestó mucha atención. Supongo que no estaba tan loco como todos creíamos.
¿Qué te crees que haces? Deja las llamas de una vez.
Sí, muy bien. Mi alojamiento aquí sigue siendo cuanto necesito.
Vaya, vaya. ¿Qué tenemos aquí?
Por el dulce aliento de Arkay, gracias.
Ahora estamos seguros aquí. ¿Pero qué pasa con Morthal?
No tiene ni idea de cómo se enfurece Maven cuando la dejan fuera de un negocio, pero estoy seguro de que lo averiguará.
No puedo decir que me sorprenda, tal y como han ido las cosas por aquí últimamente.
Muy bien. Y vas a regresar a... Si no te importa la pregunta, ¿adónde te diriges ahora, señor?
¡Yargh!
¿Por qué no me lo contaste? ¿Qué decía?
Mira, si quieres quedarte de brazos cruzados en El jarro todo el día emborrachándote, es tu problema. Deja de hacerme perder el tiempo.
Claro, ningún problema. Encontraremos a otro que lo haga.
Silencio, traidor. Muévete poco a poco.
Cada día me siento más afortunado.
No, me temo que no lo sé.
Venga, calma, nuestro deber es registrar los grandes relatos de la historia, no elegir un bando en ellos. Es mejor no meterse en la guerra, creo.
En tu vida has trabajado honradamente para todo ese dinero que llevas, ¿eh, chica?
Una espada de hierro, ¿eh? Qué estás cazando con ella, ¿mariposas?
Si hay menos oro en los bolsillos de la gente, también habrá menos en los míos.
Podría atrapar tu alma y colocarte dentro de la Estrella. Y traerte de vuelta cuando te hayas ocupado de Malyn.
Pero te has ganado el perdón prematuro. Vamos.
¿Alvor? El herrero, ¿verdad? Un tipo fiable y de confianza al que no le gusta fantasear.
¿Cuánto?
No te mofes, cachorro. Incluso la menor de las bestias puede acabar con el débil y el arrogante. Si sobrevives a esto, pasaremos a enemigos más poderosos.
Y creo que estamos de acuerdo en que Cicerón ya ha traído locura de sobra a este santuario.
Algunos temen a nuestro nuevo hechicero. Cuando aprendan a conocerlo, lo aceptarán.
Si eso es lo que deseas.
Mira, esa Vici tenía un guardaespaldas. Sé que es terrible que la mataran en su propia boda, pero la guardia de la ciudad no puede cargar con las culpas...
Recuerda, no servirá nada excepto verdaderas sales de fuego... la fragua reconoce la diferencia.
Cuanto antes acabe esta guerra, antes podremos seguir con nuestras vidas.
Más les vale a esos rebeldes no intentar venir a Haafingar.
No hay tiempo para hablar. Si me delatas o me traicionas, te mataré. ¡Lo digo en serio!
Parece que hace más calor aquí abajo que ahí fuera.
Lleva conmigo desde que sus padres fueron asesinados por bandidos y ella quedó a mi cuidado.
¡Salud! Es bueno ver otra alma alegre disfrutar de este hermoso día.
¿Tú? ¿Sirviendo al rey de la corrupción? ¿Tan bajo han caído los estándares de las bestias? Cuéntame otro.
Cuando crezca, seré un asesino. Así podré ayudar a muchos niños, igual que has hecho tú.
Quiero un trago, no compañía. Ahora, vete.
Me encanta ser aprendiza. Uso muchas veces el martillo.
Ahora será mejor que te vayas a ver a Astrid. ¡Es la hora! La hora de llevar a cabo la última fase de esta gloriosa y gran operación.
¿Te ha entrado ya el tembleque? Está bien. Toma. Que los viejos dioses te protejan.
Los antiguos nórdicos eran un pueblo salvaje, pero construyeron algunas criptas y templos excepcionales.
Alduin cubrió con sus alas el sol, su aliento de fuego era estremecedor
Espero que Fjotra sea feliz en el templo. Es un honor para nosotros haberla entregado.
La verdad, no puedo seguir el ritmo. Pero no te pares ahora.
Nada... Nada...
Cuéntame, ¿por qué estábamos haciendo esto?
Eres un idiota, Kleppr. ¿Por qué me casaría contigo?
Tengo un pálpito al respecto.
Avísame si averiguas algo sobre ese fuego.
...orden de su eminencia... poseedor de estos documentos... el "Gastrónomo"...
He hecho lo que tenía que hacer para mantener feliz a mamá. Lo que yo crea realmente no importa.
Ay, me encantaría ayudarte a averiguarlo, pero estoy demasiado ocupada limpiando el estropicio que has armado en nuestro templo...
No te apiades de mí. Simplemente... si hubiera sabido que todo esto iba a terminar así... Madre...
Ahora me puedo permitir comprar carne. De todas formas, prefiero trabajar en las minas.
La determinación de esa muchacha me convenció. Supongo que ayudó cuando me dijo que solo quería aprender de manos del mejor herrero de Skyrim.
Vaya. Antes, en Markarth todo el mundo llevaba un colgante de su provincia natal, desde Elsweyr hasta Roca Alta pasando por Páramo del Martillo y Cyrodiil...
Por no mencionar que los rebeldes tienen el control total de Ventalia y de la comarca de la Marca Oriental.
Cuando estés en la atalaya, ve al norte. El túmulo de las Cataratas Lúgubres debería estar más adelante, al girar un recodo.
Por favor, llévale lo que tengas a Avulstein ahora mismo.
Terminé vendiendo ese barco para abrir este lugar. Parecía apropiado llamarlo así en su honor. Bueno, supongo que lo he cambiado un poco.
Ahora, si no me equivoco, la legada Rikke tiene un cometido para ti.
Asimismo, comunicaré a mis guardias tu nuevo título. No queremos que te traten como a la plebe.
¡Vaya! ¿Vas a enseñarme a convertirme en un cangrejo del barro?
¡Ese sonido podría hundir montañas!
Muy bien... ¿Quieres irte?
Tuvimos que arrestarlos a todos, y Ulfric Capa de la Tormenta, su líder, lo interpretó como una prueba de que el Imperio había abandonado Skyrim.
Sin embargo, como te prometí, no me importaría para nada quedarme con algo de mercancía robada.
¡Eh, no es justo! ¡Atrápala, Muñón!
¿Qué miras? No me das miedo, ya lo sabes. Aunque seas mayor.
Dime, Ragnar, ¿qué opinas de los orcos?
La mina de mercurio es la mejor mina de Lucero del Alba, y puedes decirle a los de la mina Rompedor de Hierro que lo he dicho yo.
¿Delphine necesita mi ayuda? No la conoces muy bien si esperas que me crea eso. ¡Ahora, márchate!
¿Y qué tal una armadura?
No te preocupes. Llevaré a Esbern de una pieza. Te esperaremos cerca de la Aguja de Karth. Buena suerte.
Por eso que buscamos guiarte en el uso correcto de tu don, que trasciende las restricciones que limitan al resto de mortales.
No esperes que los nórdicos locales te traten con mucha amabilidad en cuanto sepan que formas parte del Colegio.
¡Ni faas, Dovahkiin!
Bien, y llévale este mensaje a tus jefes.
Ya sabes cómo son los niños. Sus caprichos cambian con la luna.
Es como en las leyendas antiguas. Un Sangre de Dragón...
¿Podrías ayudarme? Está en la tumba; solo los dioses saben qué andará haciendo con mis difuntos parientes.
Incumple la ley en Markarth y te mandaremos a la mina de Cidhna.
No, simplemente registrar a los huéspedes, gestionar el dinero y mantener un techo sobre tu cabeza. Nada importante, vamos.
Entonces, ¿qué me dices, querida? ¿Podría una mujer hermosa como tú verse alguna vez junto a un abuelo como yo?
Ahora debo concentrarme. Este ritual es muy importante.
¿Alguna vez te has encontrado con alguno de esos gatos? Creo que se llaman kayitas o algo así. He oído que hay muchísimos en las tierras del sur.
Gracias por tu ayuda. Me estableceré aquí, lejos de cualquiera al que pueda hacer daño.
Si te vas de la fiesta, luego no podrás volver.
El cementerio de Falkreath nos recuerda que la guerra es una vieja conocida.
Prefiero que el mar de los Fantasmas se trague Hibernalia entera a que la gobierne el Imperio.
Qué idiota, desfilar por ahí con tu arma desenvainada. ¿Es que planeas herir a alguien?
Buenas gentes de Soledad.
Ah. Pues sí, pues sí. Lo recuerdo.
Oooh... Qué exquisito. Ni se me habría pasado por la cabeza.
Bueno, supongo que no te queda otra.
Que Talos te guarde de todo mal.
¡Nunca me someteré!
Vale, vale, te lo diré.
Aerin me ha dicho que podrías estar pasando armas al gremio de ladrones. ¿Es cierto eso?
Ahora, vuelve a tus asuntos.
Mi familia ha servido a la familia de Escaldo Felgeif desde hace generaciones.
En segundo lugar, estamos organizando un ataque sobre el fuerte. Quiero montar una posición fortificada aquí antes de lanzar el ataque final sobre la capital.
Algún día crearé un arma digna de un jefe, y tal vez ese jefe sea yo.
¡El acero puede ser tan letal como la magia, pero más mortífero es aquel que esgrime ambos!
Hay algo en Sybille que no me encaja. ¿Sabes que nunca le he visto probar bocado? Eso no puede ser natural.
Que tu tiempo en Falkreath sea grato.
Muy bien, iré a matar a ese gigante.
Muy bien. Tengo uno sencillo. Solo tienes que entrar, cambiar los libros y volver a tiempo para tomarte algo en la última ronda. ¿Cómo lo ves?
Valía la pena volver por esto.
¿Todo esto no han sido más que mentiras inventadas por ese tal Wyndelio? No me puedo creer que hayamos sido tan estúpidos.
Mirabelle Ervine... o Tolfdir. Ellos sí que pueden hablar sobre él. Yo no, desde luego que no.
Igmund sigue vivo, y yo haré que siga siendo así, sea jarl o no.
... quizá pague mi recompensa esta vez... Y entrar en la ciudad como hombre libre...
Dirígete a La yegua abanderada en Carrera Blanca y busca a Mallo Maccio. Te pondrá al tanto de todos los detalles.
¿Crees que vivir con Grogmar es fácil? ¿Tú has visto cómo vive?
Debes llevar esta información al gremio de ladrones de inmediato.
Estoy impaciente por que levemos el ancla. Cuando el barco no se mueve, empiezo a impacientarme.
Algún día yo misma seré una galante heroína. Tú haces que resulte... deseable.
No creo que nadie aquí entienda lo útil que va a resultar mi trabajo.
Hace muchos años que no tinvaak con un desconocido. He sucumbido a la tentación de prolongar nuestra conversación.
Lideraré a la tribu lo mejor que pueda, pero no sé por qué Malacath me eligió a mí.
Vaya, otra vez él.
Noo...
Vale.
Nada, nada... Es muy... bonito. Pero si quieres algo con un poco más de estilo, deberías venir a nuestra tienda, Ropajes Radiantes.
¿Tienes algún tomate de sobra para un sacerdote de los Divinos?
Al principio me daba un poco de miedo, pero me gusta tener a mi hermano cerca. Me reconforta.
La mayoría de la gente requiere muchos años de aprendizaje para siquiera aprender el grito más básico.
Fuera de mi camino.
¡No! ¡No me hagas más daño!
Eres todo corazón, Kodrir. Apuesto a que lady Mara estará llorando por ti en este momento.
Este será tu espacio. Esta cama y esta mesa son para ti. Te rogamos que te comportes de forma considerada con tus compañeros.
Tu victoria justifica nuestra fe en ti. Has demostrado ser más que digno para dirigir el Colegio de Hibernalia.
Sí, ya.
¡Ya no puedo formar parte de este lugar! Las cosas que hacemos aquí... cosas realmente malvadas. ¡Se acabó!
Típico. Pues entonces, no te preocupes por mí.
Esto es una ofensa. No se puede ni considerar soborno.
La vieja mina de Ascua está ahí arriba. Solía producir mucho hierro, pero se vino abajo y la tomaron unos delincuentes, creo.
Sí. Esas manchas de aguamiel son siempre difíciles.
Tengo que hacer un pequeño recado, pero necesito un par de manos extras.
Y sabréis que aquí llega el Sangre de Dragón.
Hay una cuarta pieza, esa vaina que ves en el expositor. Fue construida para albergar la Cuchilla. Y hay algo más.
Snilf, te dije que mendigar no es la solución. Espero verte en el templo más tarde.
No vas a conseguir ese tesoro.
Mira, ejem... Gracias. Y siento haber sido tan desagradable. Si hablas con Cicerón, asegúrate de decirle que pronto iré a ayudarlo.
Ahora ser minero es mi vida, y no querría hacer ninguna otra cosa.
Oh, vale. Recibe mi bendición y acabemos con esto de una vez. Tengo tratos más interesantes que cerrar.
Toma, usa mi espada para hacerlo. La he afilado para la ocasión.
¡Haré los preparativos inmediatamente!
¿Tienes algún problema con eso?
Todo está estupendo, como siempre, Eola.
Ah, ¿eres del Colegio? Te he estado esperando.
Parece que somos los únicos que hemos conseguido salir de esta.
Vine a Skyrim en busca de una vida mejor. ¿Y qué me encuentro? Otra guerra.
Nos ha pasado a todas, querida. Vivir con ese dolor es lo que te hace mujer.
Los imperiales son débiles. Ellos crearon el problema de los Renegados, pero ahora que mandamos nosotros, lo resolveremos.
Vas a lo fácil, ¿eh? Pues venga, ve y causa estragos. Pégate a las sombras y que no te vean, ¿eh? Entonces, ¿quieres intentarlo?
Ya sabes dónde encontrarme si cambias de opinión. Porque lo harás. Tienes que hacerlo.
Ahh. Quizá tengas razón. Supongo que no quería que nadie pensase que no podía con una moza nórdica.
Ten cuidado... a buen seguro que encontraremos más despertados en el interior.
Me llamo Ennis. Si tienes amigos con negocios en Carrera Blanca, tal vez me conozcan.
Adelante, Hadvar. Oigamos el resto.
¡No pienso daros ni una moneda más a ti ni a Brynjolf! ¡Márchate de mi taberna!
Hace tiempo que no la ven. Parece que se ha desvanecido sin dejar rastro.
¿Cómo va la caza, hermana?
Es sorprendente que muchas de estas creaciones dwemer aún funcionen.
Tú iniciaste la cadena de acontecimientos en Saarthal.
O sea, que admites trabajar para los imperiales. Y aun así, entras aquí y preguntas si puedes unirte a mí. ¿A qué estás jugando?
No digas tonterías. Esta ciudad es nuestra, no suya.
Cómo has podido, Erandur...
Parece que algo te inquieta. ¿Has venido en busca de orientación?
Venga, ¿dónde quedan tus modales? ¿A quién se le ocurre extorsionar así a un pobre anciano?
Galo me dijo una vez que se sentía cómodo cerca de mí, que podía bajar la guardia. No puedo dejar de pensar que soy responsable de lo que le ocurrió.
Torsten Mar Cruel me ha hecho saber desde Ventalia que un gremio rival está intentando establecerse.
No, lo siento. Ven a verme más tarde.
Quizás te hagamos una visita esta noche, pequeña espía. Tenemos formas de descubrir quién eres en realidad.
Bueno, ya sabes cómo va. Si no lo ves aquí, que te lo consiga te costará un extra.
Algún día, hermano. Algún día.
Cuando los orcos asaltaron el templo, salí huyendo. Abandoné a mis hermanos y hermanas ante la muerte.
Te doy la bienvenida. Si necesitas algo, avísame... Debo de tener una taza limpia en alguna parte.
Bueno... hay un tipo así. Ha pagado un buen dinero para que nadie sepa que está aquí abajo, pero supongo que puedo decírtelo.
Oh, eres tú.
Sé que tus miras están puestas más allá de esta ciudad, pero mientras estés bajo nuestro techo, necesito que arrimes el hombro un poco más.
Ulfric es un necio y un cobarde, tan ingenuo que cree poder instaurar la paz mediante la guerra. La verdad, es muy triste.
Unos haraganes y unos incapaces, eso es lo que son. Ni siquiera pueden contener a los Capas de la Tormenta. No pienso confiarles la vida del emperador a ellos.
Enviarme aquí es talento desperdiciado, ¿verdad?
Ya te he facilitado la llave del museo. Deberías considerarlo un honor. Pocos tienen la posibilidad de visitar mi colección.
Entonces Ulfric Capa de la Tormenta vino con su milicia. Tiene que haber sido digno de ver cómo mataba a la gente a gritos.
Oh, no, para nada. Seamos sinceros.
Ah, mátalo. ¡Mátalo!
A mí me lo vas a decir. Hacer de niñera de una colmena de abejas y beber aguamiel todo el día es mucho mejor que morirse en algún campo de batalla.
Esta vez tendrás que tener cuidado. Los hombres del jarl no te tratarán con cortesía si te ven registrar los aposentos del administrador.
Y no se va a acabar aquí. Moriría antes que regresar.
Aia, esto es un asunto delicado. ¿Por qué no te pones a repasar tus lecciones y te callas un poco?
¿No quieres hablar del tema o es que no lo sabes?
Muy bien. Infíltrate en su campamento y te cubriremos desde la cresta. ¡Buena suerte!
Ya tomaré el control de la familia cuando lo considere oportuno, Betrid. Hasta entonces, mi hermano seguirá al mando y tú mantendrás la boca cerrada.
Eso es. Otra vez.
Te la vendería por esa cantidad, pero no tienes tantas monedas de oro.
¡Narri! El aguamiel que me has dado sabe más a agua que a miel, y la carne está pasada.
Así es. Estoy a cargo del templo que hay en esta ciudad.
Traidores, guerras civiles, dragones. Bah. Esos problemas no cruzan mi puerta. Así que siéntate y relájate.
Venga, intenta hacerme daño al menos.
¿Ayudarías a este pobre anciano con una moneda?
Trae más aguamiel, hijo. ¡Este barril ya casi está seco!
Quiero decir que sí. Sin duda está allí, pero eso no importa ahora, porque sé que atesoráis algo muchísimo más importante en vuestro Colegio.
Vuelve cuando tengas el dinero.
Normalmente, el amor en Skyrim es tan ardiente como la gente que vive aquí. La vida es dura, y breve, por lo que no tienen cabida los largos cortejos.
¿Thalmor en la Ratonera? ¿Qué me falta por ver, spriggan en La abeja y el dardo?
¡A ver qué sabes hacer!
¿Qué haces aquí? ¡Tienes que hacerte con el bastón o no tendremos la menor oportunidad!
Eh, tú. ¡Alto ahí!
Saludos, honorable camarada. ¿Puedo ofrecerte algunas joyas de calidad?
No estoy muy seguro de entender lo que me pides.
Vale, creo que esta puerta debería llevar a la cámara funeraria principal en la que se refugia Vals. Entremos ahí y acabemos con esto.
Gracias. No es mal tipo, es solo que el dinero y la bebida no son lo suyo. Mi esposo Dagur podría contarte alguna que otra cosa, allí.
Mmm, lo siento, pero no puedo correr el riesgo. Seguro que puedes encontrar a alguien con algo menos de dignidad.
Como quieras.
Ahora no somos más que compañeros que huyen de los Thalmor. No sabía que aún vivía, pero no me sorprende. Era una superviviente.
Claro que no. Puedo adiestrar perros, pero ¿un lobo hambriento? Ni soñarlo.
Pero ahora Kematu ya no está, y el resto de sus serpientes deberían deslizarse de vuelta a su desierto.
¿Qué tal se llevan las nuevas razas con mis perros?
Tienes que estar deseando morir.
No me... no me menciones ese nombre.
Qué cerdos.
Gracias. Esto... que te bendiga a ti también.
Has hecho lo que has podido, Sangre de Dragón. Pero he aprendido por las malas que a los imperiales es mejor tratarlos a golpe de espada.
¿Necesitas una espada? Esto... ¿Qué tal una espada pequeña? Como un clavo de pequeña.
Las fuerzas imperiales se retirarán de El Pálido, y el jarl Escaldo el Anciano podrá volver a Lucero del Alba.
¡Eso resuelve completamente todos los problemas básicos: la combustión de magia, el colapso dimensional y la deriva térmica!
Azura. Madre de las Rosas. Diosa del Atardecer y del Amanecer. El campeón que elegiste te ha devuelto tu Estrella.
Y pensar que Mirabelle cuestionó que te dejara entrar en el Colegio. Me imagino la cara que pondría ahora.
¿Y a quién tenemos aquí?
¡No puedes derrotarme!
Sin Cedran, me toca a mí encargarme de los caballos. Echo de menos al viejo.
Las calles están llenas de mendigos, los criminales campan a sus anchas y la amenaza de la guerra espanta a la clientela.
La prisión no está tan mal. Hay menos quejas cuando mato a la gente.
Ah, pero podemos hablar de eso más tarde, ¿no? ¿Qué necesita la Hermandad?
Dado que parece estar ocupado, y que tendré que ver este descubrimiento por mí mismo, tal vez deberías empezar a investigar este asunto.
¡Ríndete ahora que estás a tiempo!
Escaldo apoya la rebelión de Ulfric, y no le gusta que haya un par de viejos legionarios en la ciudad.
Mmm... Vale. Bueno, todavía no tengo las botas. Espero que lleguen en la próxima caravana khajiita.
¡Aaaaaahhhhaaaaa!
Y serás quien porte mi radiante pureza.
Pero yo me niego a abandonar la capilla. Estas visiones son una bendición. Azura me advierte de las tragedias, guerras y muerte antes de que ocurran. No pienso renunciar a su guía.
¡Criatura debilucha!
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre de Mina Silbante.
Tú y yo solos, prisionero. ¡No te alejes!
Os doy las gracias, una vez más, por hacer de esta la mejor boda que cualquier mujer pudiera desear.
Por lo menos ese viaje a Saarthal ha tenido algo positivo. No he encontrado nada más que polvo.
Trabajo en la fragua y en las minas. Madre dice que eso la satisface a ella y a nuestra gente.
Hola, golosina.
¿Y ahora qué?
Hizo lo que tenía que hacer. Era más que necesario. Lo único que lamento es no haberlo matado yo misma.
¿Eran dos partes de liquen gigante, o tres? Mmm...
Muy bien. Tengo listo todo lo que pediste.
¡Fjotra!
Éramos un gremio de asesinos autorizado por el Imperio para proporcionar ejecuciones tanto públicas como privadas.
¡Déjalo ya! ¡No puedes ganar!
Aunque desde aquí puedes verlas. La montaña está justo sobre esos edificios.
¡Fuiste enseguida a dárselo a tu prometida! ¿Ni siquiera recuerdas dónde la dejaste?
Si me perdonas la vida, puedo ser un poderoso aliado. Y prometería no volver al mundo civilizado.
Espero que te quedes un poco. Desde luego, nos vendría bien.
¡Arrancadle los ojos!
No quiero robar nada. Además, una temporadilla en la cárcel no va a conseguir que me domestique.
Tras huir del templo de la Visita Nocturna, vagué por Skyrim durante años hasta que me acogió un sacerdote de Mara que vivía en Morthal.
Bien, tal vez ahora pueda volver al trabajo.
Sobre todo los nórdicos. No les gustan los forasteros en su tierra, y por lo tanto tenemos prohibido entrar en las ciudades.
Los tiempos desesperados demandan medidas desesperadas. Quizás ha encontrado ahí lo que buscaba.
Y tú que pensabas que solo era una cara bonita.
Hay rumores acerca de Helgen, bandidos, escaramuzas entre Capas de la Tormenta e imperiales... La lista es interminable.
(Llorando)
Vaya, vaya. Has masacrado a mis seguidores. ¡Debería destruirte por tu insolencia!
¿Es tu primera visita a Narzulbur? Si tienes cerebro, pasarás de largo. Hay una sombra malvada sobre este lugar.
Aquí está el Libro del destino, descubierto en una sala secreta del Colegio Arcano.
Esto no será fácil, pero por eso te envío a ti. ¿Te ves capaz de asumir la tarea?
Tal vez comiences a ver el mundo como un dovah.
¡Ayuda! ¡Aquí!
No dejes que me alcance. ¡Ayuda!
Soy la mujer-forja de Burguk. Yo le doy forma al acero de la fortaleza.
Lo tendré en cuenta.
Las noticias no han cambiado desde el inicio de la guerra. Las fronteras están seguras a costa de los guardias de nuestras ciudades y carreteras.
Gracias. Por favor, no la abras. Es... privada.
¿No sabes hacerlo mejor? ¿Eh?
Voy a desviar a los hombres de Gar y de Haddring para que se unan a él.
Averiguarás de qué está hecho un auténtico guerrero.
Oh, vaya. Ojalá hubiera algo que pudiéramos hacer por él.
No has respondido a mi pregunta. ¿Por qué necesitas aprender este Thu'um?
Tenemos armas y armaduras de todo tipo.
Gracias por tu confianza. Ardo en deseos de volver a mi patria.
Podría escucharlo tocar todo el día.
¡Maldita sea! ¿Por qué Ulfric no se da cuenta de que está desgarrando Skyrim?
Creo que hay un laboratorio en el ala este. Si vamos allí, tendríamos que poder encontrar una muestra.
Esa es la pregunta clave, ¿no? Nadie puede negar que Elisif tiene derecho a reclamar legítimamente el trono de reina suprema de Skyrim...
Si mi madre pudiera verme ahora me reñiría pero bien. Me diría que tendría que saber que no se debe ir fisgoneando por fuertes abandonados.
Gracias. Desde que me desterró, Vile ha estado bastante débil. No se puede manifestar a mucha distancia de una de sus capillas.
Pero... Yo... De acuerdo.
Que los dioses te guíen, Hadvar.
Ninguno de mis augurios predijo nunca esto. Una mujer para Mauhulakh, ¿eh? Ya veremos cómo sale esto.
Atub es más sabia de lo que aparenta. Yo me tomo muy en serio sus consejos, y tú también deberías.
Pareces alguien que sabe cómo empuñar un arma. Bueno, has venido al sitio apropiado.
Si eso supone forzar sus cajas fuertes y robarles algo valioso, que así sea.
Se trata de un asesinato público. El método lo dejo a tu elección. ¿Un flechazo en la garganta? ¿Una puñalada en el estómago? Lo que quieras, pero que sea ruidoso y sangriento.
¿Entonces los Capas de la Tormenta tomaron la Cuenca? Tal vez Talos realmente esté de su lado.
No he sabido nada de ella últimamente. He intentado hablar con el capitán Aldis, pero no ha sido nada cooperativo.
Qué va. ¡Soy muy rápido!
Todo se lo debo a mi padre, que me inició en el manejo del pico cuando yo solo era una niña pequeña que aún iba descalza.
¡Que arda el rey!
¿Me has traído algo? Me duele mucho...
¡Yiiaaaggh!
De acuerdo, no levantes la voz... ¿Es que quieres que te oigan? Ahora te dejo pasar, dame un instante para abrir las puertas.
¿Y qué me dices de tu familia? Habrá alguien esperando tu regreso en la granja, preguntándose si algún día volverás a casa...
Gracias, viajante.
Viarmo se preocupa demasiado por la precisión. ¿Y qué hay del instinto, eh? ¿Mmm? ¿Y de la pasión?
¿Adónde vas? ¡Vuelve!
¡Y no hay... ningún... Oyente!
Oooh. ¿Hora de matar?
Tendremos que organizar brigadas de bomberos para combatir los incendios.
Bueno, no olvides el orden: primero el trabajo y luego a emborracharse. Toma esto y lárgate.
Asegúrate de reparar la valla. Te juro que ayer vi skeevers mordisqueando las hojas.
Qué pena, parece que necesitaremos que otra persona se ocupe de esto.
Bueno, avísame si necesitas un remedio... o cualquier otra cosa.
Pero ya he vivido de primera mano lo que puede llegar a hacer si tiene la oportunidad. Baste decir que no es bien recibido, ni por Markarth, ni por mí.
¡Fascinante! Bajorrelieves akaviri originales... ¡y están prácticamente intactos!
Eso de ahí delante es Soledad. Ya solo nos faltan unos minutos.
Bien. Aún controlamos medio Skyrim pese a todos los problemas que nos ha supuesto el Imperio.
No me impresionas. Así que ni lo intentes.
Sin entrenamiento, ya has dado los primeros pasos para proyectar tu Voz hacia un Thu'um, un grito.
Tú puedes invitarme a todo lo que quieras.
Si te descuidas, hasta vas a ganarte el respeto de Vex. Eso sería digno de ver, ¿eh?
Reclutado para una guerra, ¿cómo podría mi vida ir a peor?
Por favor, por favor... ¡deja las preguntas hasta que haya terminado!
¿Te gustaría casarte? Es bueno ver cómo florece el amor, incluso en estos tiempos difíciles.
No tardé en mostrarles de qué era capaz y les enseñé cómo se hacían las cosas. Ahora cualquiera con una espada de aquí a Ventalia quiere tomar parte en lo que hacemos.
Se perdió hace años en unas ruinas dwemer.
Mmm... Olaf se convirtió en rey y Numinex huyó más tarde. Es posible... y estoy seguro de que a la corte le gustará. Lo escribiré.
Bien. Cuando vuelvas, tendré un saco de oro esperando para ti.
¡Wo lost fron wah ney dov, ahrk fin reyliik do jul, voth aan suleyk wah ronit faal krein!
¿Y bien? ¿Qué significa esto?
Aquí nunca me encontrará.
Tengo que volver a Markarth. Toma, acepta esto. Es lo menos que puedo hacer por quien me ha salvado la vida.
La primera es que había referencias antiguas a "escamas de corazón". Lo poco que he averiguado al respecto parece indicar que son lo que necesito.
¿Me estás amenazando? Ah, ¡eso tiene gracia!
Deja que lo intente de nuevo...
Lamento que mi padre esté tan distraído. Han pasado muchas cosas.
Así se habla.
Puedo percibir que esa... esa cosa, ese orbe... es realmente impresionante. Algo realmente único y, sin duda, digno de estudio.
¿Entonces todo está bajo control? Estupendo. Buen trabajo.
Eres una vergüenza para los altmer. Debería matarte por principios.
Dicen que un dragón atacó Helgen. A mí me suena a tontería.
¡Bienvenido, hermano! Me alegro de que tus ojos se hayan abierto por fin a la verdadera naturaleza del Imperio.
El Imperio. Huyeron con ellos. O eso es lo que creen. Los que vieron. Los que creyeron que vieron.
Estás buscando algo, ¿no? El... Bastón de Magnus.
En serio... No nos interesa ver todo eso. ¡Desaparece hasta que te vistas como está mandado!
Supongo que debo volver a mis papeles...
Sí. Y puede que eso te salve la vida.
Tienes que entender que hacía mucho que Brynjolf no me enviaba a alguien en quien pudiera confiar.
¿Alguna vez te has arrepentido de hacer este viaje?
No dispongo de ninguna, y estoy seguro de que tú tampoco. Por eso necesitamos que un daedra nos la consiga.
¿Crees que has terminado? Tengo mucho más de donde vino eso.
Recuerda que es a causa del tratado que puso fin a la Gran Guerra, cuando los Thalmor obligaron al emperador a que prohibiese el culto a Talos.
Este sí que va a ser un buen festín.
De acuerdo. Esta de aquí es suficiente para impedir que derrames las tripas, excepto para los golpes más feroces, y no debería pesarte mucho.
Buen trabajo. Por favor, acepta esto como pago.
Bien, chico, ya eres uno de los nuestros. Confío en que no nos defraudarás.
¿La mitad del campo? ¿Qué vas a plantar que necesite la mitad del campo?
¡Ajá! ¡Así que tú también estudias la armonía teórica aplicada!
Y cuando lo averiguaron, o arrestábamos a Ulfric y a la milicia o entrábamos en otra guerra con el Dominio de Aldmer.
La mina va a funcionar mejor que nunca, y todo gracias a ti.
No te avergüences. Tú deberías encargarte de trinchar.
Me estoy quedando sin gemas de alma inferiores.
Soy Savos Aren, archimago del Colegio de Hibernalia.
Mira, debes haberme confundido con algún otro.
Eres un muchacho bien parecido. Pásate por aquí de vez en cuando.
¡Nyyarrggh!
Guárdate tus excusas para la fábrica de sangre, hechicero.
En cuanto Kodlak comenzó a buscar su cura, apuesto a que Skjor no volvió a hablar del tema.
¡Cuidado! Yo no haría eso, a menos que estemos seguros de que se va a abrir.
Mmm. No lo había visto así.
Sigue así. ¡Tenemos que trabajar el doble, ahora que ese cabezón de Leigelf nos ha declarado la guerra!
Hasta la vista, "camarada"... ¡Ja, ja, ja!
Bah. Todo el mundo me parece ahora tan insignificante.
¿Un amuleto de Mara? ¿Y no te has casado? Sorprendente.
Yo es que no entiendo qué clase de persona hace eso.
Mmm... Hemos oído rumores sobre un par de guanteletes encantados, ocultos y protegidos por hombres peligrosos, bestias y cosas peores.
Bah, ahora no importa. Gavros nunca va a volver, y se suponía que él tenía el cristal. Sin él, estamos perdidos.
No me importa... Vamos a seguir hasta el fondo. Quiero saber lo que escondió aquí Shalidor.
¿No es asombroso?
Te deseo un viaje seguro.
La única manera de conseguir comida más fresca es cazándola uno mismo.
Sí, señor. Bien, señor.
Por lo que, cuando nos encontrábamos con más de un ciervo en un mismo sitio, era fundamental que matáramos tantos como pudiéramos.
Tráeme los cuatro, y los usaré para apuntarte los hechizos.
Estas energías quedan en ocasiones... contaminadas. Nos hemos de esforzar por mantenerlas limpias y puras.
Pero si es la persona más pendenciera de Skyrim... ¡Me alegra verte de nuevo!
¿Qué esperas encontrar? ¿Chucherías y mi muñeca? ¿O quizá un poco de mi belladama?
¿Qué tienes hoy para mí? ¡Espero que nada ilegal!
Ah, Yngvar, ¿has venido a cantar? Ya sabes que un empleado de la familia Sangre Argéntea siempre es nuestro invitado de honor.
Nos quedaremos aquí y buscaremos algo que pueda ser de utilidad.
Si crees que puedes robarme el trono conquistando los corazones de la gente, te equivocas. No lo olvides.
En realidad no es cuestión de dinero. No te habría vendido la alianza a crédito si tu amor no fuese tan evidente.
No deberíamos haber traído esa cosa...
¿Qué opinas tú de eso... del dragón? ¿Qué significa?
Nada menos que la banda de guerreros más famosa de Skyrim. ¿Acaso vives en una madriguera de horkers?
Af, menos mal. Toma esto en agradecimiento.
¡Todo rebajado! ¡Hoy no hay nada que buscar en otras tiendas!
Fui a Ventalia para ver a los Escudo Quebrado. Eran viejos amigos míos, muy queridos... y estaban de luto. Friga había muerto no hacía mucho. Asesinada...
La cuestión es que nunca quise seguir sus pasos... En cierto modo, sigo sin querer.
Puede que haya una salida si vamos por aquí.
Me temo que es cierto. Cicerón era como un torbellino en miniatura, cortándolo todo a su paso. Habría tenido su gracia si no hubiera intentado asesinarnos a todos.
Los caprichos de Nocturnal son el mayor misterio para todos. Se han escrito libros y libros al respecto.
¿Qué? ¿Y tú te consideras hijo de Skyrim?
Ya te lo dije, lo sé todo de este castillo.
Nuestras hadrimme, nuestras mentes no alcanzan siquiera... a comprender sus conceptos.
Reyda recogía ingredientes en la pequeña isla que hay en el río, al este de aquí. Un día, simplemente desapareció.
Hay otros que aceptarían con sumo gusto mi favor.
Parece que nunca podré reclamar mi legítimo puesto como reina suprema.
Semejante confianza no se da a cambio de nada.
Sin duda estarás al corriente de la pérdida que sufrí hace quince días.
Ahora, muéstrame de qué eres capaz. ¡Salúdame como un dovah y no como un mortal!
¿Quieres hablar? Termina primero esos trabajos para Brynjolf.
¿Te refieres al problema del Puente del Dragón? Seré sincero contigo, estaba pensando dejarlo pasar. En el mejor de los casos, Varnio está un poco nervioso.
No lo sé. Un tipo inquietante con túnica negra. No pude verle la cara, pero me pagó una buena suma para que te la hiciera llegar.
Bloquear el Paso Pálido interrumpiría una de las principales rutas de suministro del Imperio... y Carrera Blanca quedaría expuesta a un ataque desde Falkreath.
Entonces, por mi derecho como jarl, te nombro thane de Haafingar. Enhorabuena.
Es algo que necesito para acabar mi trabajo. Todos estos años, tanto tiempo, tanta energía...
Pues bien, creo que una pizca de sales de escarcha le dará el toque especial, ¿verdad?
Llevamos aquí mucho tiempo y no tenemos nada que enseñar.
¿Cómo sabes tú eso?
Nada por aquí. Qué raro.
Escoria, piérdete en el horizonte antes de que te dé caza.
Todo se debe a este maldito anillo.
Antaño, Falkreath estaba lleno de trotamundos y guerreros como tú. Eran tiempos mejores.
Tenemos un problema con las cloacas de la ciudad. He oído que algunos entraron en ellas y no han vuelto a aparecer. ¿Tú sabes algo?
Oh, sí. Tienes bien de grasa, ¿verdad?
Esto sí que es un auténtico trabajo de guardia. Los soltaremos en la mina y asunto resuelto.
No he hecho nada.
Si has venido a acusarme de sacrificar niños, o de comerme el corazón de los muertos, mejor que no gastes saliva.
¡Qué modales! ¡Qué amabilidad! Le caes bien a Cicerón. Seguro que a la Madre Noche también le caerás bien. Ah, vamos a ser muy amigos. Muy amigos.
Sé que este lugar acabará por matarnos. Y he llegado a aceptarlo. Pero siempre me arrepentiré del día en que te presenté a Orchendor.
Pactamos que quizás algún día nos reuniésemos... pero creo que aún falta mucho para que llegue ese día.
Si le pones un dedo encima a Igmund, te liquido, Capa de la Tormenta.
¿Qué pasa, Madanach? No harías que matasen al viejo Grisvar a menos que no planeases necesitarle.
Según Hroggar, había grasa de oso en la chimenea.
(Silba)
Los Barbas Grises temen tanto el poder que se niegan a usarlo.
Dame un motivo para intentarlo.
¡Vun!
Anuriel, ¿quieres hacer el favor de no decir más que la ciudad es segura para el jarl? Los dos sabemos que no es cierto.
Tienes que ayudarnos a aplacar a Malacath.
Hablas de Roggvir. Sí. Apelé al capitán Aldis. Él dio permiso para que Roggvir tuviera un funeral nórdico en condiciones, como es costumbre en Soledad.
Ay. Sí, como siempre. Ahí estaré.
Habla con Burguk, el jefe de Dushnikh Yal.
¡Aggghh!
Si quieres que te paguen, no saques tu arma.
Cuando todo el humo se disipó, se firmó el Concordato Blanco y Dorado. Se suponía que sería un tratado que establecería la paz en el Imperio.
Parece que no has tenido problemas.
¿Oyes algo?
Buscamos información sobre una mujer, una extranjera en estas tierras. Una guardia roja, como nosotros.
Muchos de los nuestros bloquean el recuerdo de su primera comida. Se avergüenzan demasiado. Pero tú no tienes que ocultarlo más.
¡Por los Divinos, los Renegados han llegado a la ciudad!
Ya basta de entrenamiento. Quiero luchar contra algo.
Espera solo un momento...
A veces hablas con acertijos.
Ya lo sé, ya lo sé. Otra vez tengo la cabeza en las nubes. Tú... olvida lo que he dicho.
Silencio.
Lamento lo de Roggvir. Es una pena, me caía bien.
Coge tus libros y lárgate, antes de que cambie de opinión.
El aire arrastra el olor de las bestias. Hoy la caza será buena.
Así que es eso. "No vuelvas".
No deberías estar aquí, visitante.
Pago una buena suma por cada mena de hierro que saques, si buscas trabajo.
¡Vendo fruta madura y verdura fresca! ¡Directamente de los huertos y frutales de Carrera Blanca a vuestras mesas!
Pues sí, la verdad. No digo que fuera perfecto, pero sabía lo que significa ser nórdico.
Soy marinera en el Viento del Norte. Hemos atracado un tiempo en Ventalia.
¿Entonces ahora quieres ir en busca de un bastón? No le veo ninguna lógica.
Hasta ahora has demostrado ser muy útil. Estos imbéciles temen tanto a Haldyn que no se adentrarán mientras la niebla no se disipe.
Una limosna... He dicho "una limosna", miserable. Ayuda a un pobre trabajador tullido.
Muchas tareas que hacer...
Temo por tu marido y por ti. Si los Thalmor vienen aquí... Pero quizás pueda ayudarte.
No, es cierto que no. Soy Brelyna Maryon, de la Casa Telvanni. La primera de mi familia en abandonar Morrowind desde hace tiempo.
¡Pero, desgraciadamente, en esa posada se ha corrido la voz de que alguien ha matado a uno de sus clientes! ¿Qué pasa, ocultar el cuerpo era mucho para ti?
¿Pescado? ¿Otra vez?
Como cualquiera te podrá confirmar, Morthal puede ser un lugar peligroso.
No quiero que tener que arrepentirme de ello.
Al paso que va esta guerra, pronto habrá un montón de veteranos como yo bebiendo aquí.
No podría haber ido mejor.
Vaya, ya te hacía de camino al túmulo de las Cataratas Lúgubres...
Mi padre es más generoso de lo que aparenta. Me da mucho dinero para mis gastos.
Ven a verme en el mercado cuando busques las mejores joyas personalizadas de Skyrim.
Ahora bien, por la ley y tradición únicamente puedo conceder este título a alguien que sea conocido en toda la Marca Oriental, y que tenga propiedades en Ventalia.
No estoy seguro de qué acaba de ocurrir, pero te aseguro que llegaré al fondo de la cuestión.
Qué gracia. Un día se arrepentirá por tratarnos con tanta tiranía.
Los elfos oscuros y los argonianos tardarán en olvidar los prejuicios de Ulfric, pero estoy intentando solventar esas diferencias.
Sí. Si me tumbase y me dejase morir sin más, Malacath no estaría satisfecho.
¡Naggh!
Quería aprovechar esta ocasión para daros a todos las gracias por venir. Quería agradeceros a todos que hayáis venido a compartir este día tan feliz conmigo y con mi marido.
Deberíamos estar dentro, llenándonos las mochilas de tesoros. Pero aquí la voz de la preocupación piensa que deberíamos esperar. No te hagas ilusiones, nosotros llegamos primero.
Vale. De acuerdo. Maravilloso. ¡De nada! Ahora mismo me marcho...
No hay duda de que el trabajo de la hacienda Brillo Dorado ha interrumpido el suministro de miel que necesito para elaborar mi aguamiel.
Todos conmigo. ¡Vamos a mostrar a esos imperiales bebedores de leche el verdadero aspecto de un nórdico!
El trabajo de la Legión no ha hecho más que empezar, pero tú eres libre de irte. Tengo la sensación de que serás más útil para Skyrim vagando por el mundo.
Lo mismo que les hacemos a todos los nativos que quieren cambiar las cosas.
¿No tienes ninguna tarea que hacer?
El secreto está en tomarle la medida a tu objetivo, chico.
Vaya, es la mejor noticia que me han dado en toda la semana.
Por favor, dame otra oportunidad.
Todo el que sugiera que es mejor dejar la restauración a los sacerdotes de los templos, creo que olvida algunas cosas.
El templo de Refugio Celestial. Un antiguo santuario de los Cuchillas, oculto entre los riscos de la Cuenca. Allí encontraremos el Muro de Alduin.
Mis garras son afiladas. Mi voluntad de matar... inagotable.
Jarl Espino Negro. Debo admitir que me gusta cómo suena.
¡Es asqueroso! ¡Hay porquería por todas partes, y es como si los cerdos regentaran el lugar!
Hay noticias de la rebelión contra el Imperio. Han oído ruidos extraños en los pantanos por la noche.
¿Qué pasa?
No me decepciones ni me hagas quedar mal, ¿vale?
Quédate a mi lado. El maestro Borri abrirá la puerta. Usa el Torbellino arrollador para cruzarla antes de que se cierre.
Me alegro de que Vittoria y Asgeir hayan optado por una recepción pública. Así toda la ciudad podrá disfrutar de su sagrada unión.
Los padres nunca deberían sobrevivir a sus hijos. Tener aquí al espíritu de mi hijo... es como si no hubiese muerto.
Perdona, pensé que te mandaba Escaldo el Anciano. Tengo un pedido que surtir, y Escaldo no es conocido por su paciencia.
¡Me alegra verte, chica! ¿Qué tal va todo?
Kharag, descansa un poco y bebe conmigo. ¡Que los árboles no se van a ir a ningún sitio!
¡Ya basta! ¡Lucha conmigo!
¡Gloria a Nocturnal!
Casi todos los míos están en la casa comunal. Vuelve durante el día si deseas comerciar.
Tienen catapultas.
Gracias por la ayuda. Hoy día casi nadie se atreve con los Renegados.
¿Dónde estoy? ¡Tú! Habla de una vez.
¡De rodillas!
Nos hemos detenido. ¿Qué pasa?
Son esas pesadillas. Ni yo ni ninguno de mis trabajadores podemos echar una pequeña siesta sin tener una.
Para que Mara te toque, antes deberás actuar como su mano en este mundo.
¡Saludos a quien ha salvado a la Hermandad Oscura! ¡Salve, Oyente!
¿Alzarías tu escudo para defenderlo?
Ese hechizo parece peligroso... Guarda las distancias.
Es difícil no hacerlo.
Ten cuidado con ese fuego. Procura no quemar nada.
Sí, corren tiempos aciagos. Me temo lo peor para Morthal y mi pueblo.
No sé si lo sabes, pero Nocturnal decide lo bien que lo hacemos como ladrones.
No lo sé. Si ves algún hombre recio y fuerte por aquí, avísanos. ¿Vale?
¡Mi padre siempre me advertía sobre estas cosas!
Eh, si te preocupa que yo me entrometa...
Está enterrada en las afueras. Yo buscaría allí.
Tenemos cualquier cosa que puedas necesitar.
Estoy aquí para garantizar que el general Tulio no se extralimita en el ejercicio de su autoridad.
Algunos hermanos te apodan Quebrantahuesos en testimonio de tu ferocidad y determinación. Es un nombre apropiado, así que todos te llamaremos por él.
Pero yo sí sé cosas de él. Y de la guerra. Más de lo que cree.
No lo será.
¿Dónde? Pero si yo no... ah, ya veo. Parece que sabes algo de encantamientos.
El humilde Cicerón vive para servir.
Si consigues que Braith me deje en paz, seré tu mejor amigo... ¡para siempre! ¡Y te pagaré! Los ahorros de toda mi vida... ¡dos septim!
Así que los Cuchillas han sobrevivido a otro desastre que ellos mismos han creado, y siguen inmiscuyéndose en cosas que no entienden.
Solo fueron tres días. Ahora tengo pensado irme para tres semanas.
Es por tus cánticos. Bueno, no por tu forma de cantar, sino por tus canciones. Ya sabes lo que quiero decir.
¿Por esta zona? Buena suerte. Pero no vuelvas por aquí.
Al principio nos llamaban así para menospreciar nuestra causa, pero con gusto aceptamos llevar el nombre de Ulfric Capa de la Tormenta, el único y verdadero rey supremo de Skyrim.
Tú no eres de por aquí. ¡Apuesto a que has venido a ayudar con la guerra!
No... Pero yo sí le pertenezco.
Se te ha caído esto. Menos mal que lo he encontrado yo y no otra persona, porque entonces lo habrías perdido para siempre.
¡Una intrusión en el Sepulcro!
Sé todo lo que hay que saber sobre cómo beberla, y con eso me basta y me sobra.
A veces, cuando se va a su habitación a trabajar o a dormir, me escapo un rato. Al mediodía, todos los días... y es cuando aprovecho para salir a la calle.
Ya soy muy mayor para esto.
¿Buscas trabajo? Nos vendría bien otro par de manos en la mina. Tráeme el corindón que extraigas.
¿Qué es lo que buscas, criatura?
Paciencia, Dorthe. Ya tendrás tiempo de trabajar en la forja, te lo prometo. Pero ahora no. Debes seguir mirándome. Así es como aprenderás.
Sírvete, faltaría más. ¿Qué más da si me muero de hambre?
¡Nuestra voz te invoca y la sangre inocente te ata, Reina Loba!
Habrá que brindar por tu marido. Que los Divinos bendigan su memoria.
Mi madre me enseñó el oficio de maderero... Ya sabes, qué árboles talar y cuáles dejar.
Perdí mi yelmo en una de las antiguas cuevas. Mi hermosísimo yelmo... Todo me empezó a ir mal desde ese momento. Seguí perdiendo cosas. Muchas cosas...
¿Mmm? Ah, no. No, la verdad. Yo... lo cierto es que he olvidado qué andaba buscando.
Y ahora, déjame. No quiero despertar sospechas por hablar con alguien que no pinta nada aquí.
¡Me rindo, me rindo!
Dicen que algunos de estos antiguos túmulos nórdicos son inexpugnables.
Parece que ahora estamos solos.
¡Vaya, qué colores!
No lo sé, Babette. Parece que haya sufrido una herida en la cabeza. Mejor no perderlo de vista...
Ahora, todo esto se ha terminado, así que dejemos de hablar de ello.
Aerin, nunca dejas de sorprenderme. Siempre sabes ver el lado positivo de todo.
He oído rumores... Sobre ti y Skjor.
Esperaba más de ti.
Ah, ¡ahora me siento mucho mejor! A uno se le olvidan los placeres del poder supremo después de estar unos años metido en una cueva.
¿Quién ha dejado eso ahí?
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre de la granja de Sarethi.
El humo me despertó. Hacía calor y me entró miedo, así que me escondí.
Sí, cachito amable. Subamos y cuidado con Melka al subir.
Si no te importa, voy a preparar el cadáver.
Algunos dicen que Alduin es Akatosh. Algunos dicen que M'aiq es un mentiroso. No te creas ninguna de las dos cosas.
Y si veo a un ave cantora, le retuerzo el pescuezo ahora...
Claro. El líder de nuestra lucha contra el Imperio. Se me olvida que la mayoría de la gente no conoce su aspecto, excepto por los carteles imperiales de "se busca".
Síguelo de cerca y se meterá en algún lío del que no podrá salir.
Hola, mi amor. De vuelta de una aventura, imagino.
Tolfdir como maestro hechicero. La verdad es que no lo vi venir.
Ten cuidado al dirigirte a Soledad. Esos malditos Capas de la Tormenta pueden estar en cualquier parte.
Se decía que, si un peregrino conseguía completarla, se unía a las sombras. Nadie sabe exactamente qué quería decir eso.
¿Está... mirando en la basura?
¿Quién te crees que eres para decirme qué debo hacer? Le pagaré cuando me convenga.
Nos estamos quedando sin pan. Espero que lleguen pronto los suministros.
No, no, no. ¡Tengo más sangre de la que crees!
Tú decides.
Me siento... invencible.
Queremos que las fuerzas imperiales se retiren de Hibernalia y permitáis que el jarl Kraldar regrese del exilio.
Así es, eso hago. Debo hacerlo si quiero llegar a ser tan buena como Eorlund Melena Gris algún día. De hecho, acabo de terminar mi mejor obra.
Así que siguiéndome, ¿eh? No se te da muy bien, ¿verdad?
Hemos recibido una carta que indicaba que alguien necesita un poco de fuerza bruta en la Grieta.
Muy bien. Te daré una oportunidad. Pero si no lo logras, lo haré yo.
Vale. Espera. ¿Que lo has matado? No es eso lo que te pedí. Yo... eh... deberías marcharte. Necesito beber algo...
No parece que estés a gusto aquí.
En Falkreath, si no me entero de algo es que no merece la pena saberlo.
Bueno... en ese caso, supongo que podría dejarte entrar. Pero solo un rato. ¡Ve con cuidado, y vuelve enseguida!
¿Otra vez? ¡No puede cancelar por las buenas una cita con el jarl! ¡Sirve en mi capital!
A lo mejor si yo no hablo, ellos tampoco.
Sospecho que puede deberse a la naturaleza de la gema de alma en oposición a los cristales para los que se diseñó esto. Destruye el equipo en el proceso.
¡Para! ¡Su valor es incalculable!
Casi desde que se convirtió en líder de la tribu.
Soy el herrero personal del jarl, pero eso no implica que no te pueda vender algunos objetos a buen precio.
Solo se tarda un momento en rezar una plegaria en silencio a Mara. Ven pronto, por favor; si no lo haces por mí, hazlo por ti.
¡Un vampiro! ¡A la hoguera!
O me sirves otra bebida o te largas, Ambarys.
¡Mi Thu'um es poderoso!
La próxima vez que desees acusar a alguien de un crimen, ¡te sugiero que tengas pruebas!
Es una pena que el Festival de la Quema del Rey Olaf se haya cancelado este año. Creo que algunos de los bardos más jóvenes se lo habrían pasado en grande.
¿Pero qué...?
Soy... ¡soy invisible!
Yo prefiero el esplendor. Como esto. Ten, por las molestias. Y supongo que debería enseñarte alguna cosa sobre la magia de ilusión, ¿verdad?
Todo prisionero de la Cuenca es otro obrero más para nuestra familia.
¿Puedes? ¿Tienes el poder de la Voz? Ahora sí me interesa.
Lo siento, pero no sé de qué estás hablando.
¡Descansa un poco! Tampoco tienes que trabajar cada minuto de tu vida.
No busco un trato especial, Aval. Lo único que hice fue hablar con Ulfric.
El jarl necesita saber si hay un dragón suelto. Cauce Boscoso está indefenso...
Cógelo. Coge el abrigo y diviértete. Nos veremos en el festival.
Esperaba que pudieras ayudarme. Según parece, he perdido un anillo que significa mucho para mí.
Ojo avizor. ¡El Carnicero puede estar a la vuelta de cualquier esquina!
No podemos hacer eso. Cada soldado que mandamos a cazar dragones es un hombre más que no puede defender la Cuenca.
Sí, conozco a alguien... Yngvar. Es bastante popular entre las mujeres.
No me olvidaré de decírselo.
Bien. Esperaba que no te hubieras olvidado.
No tienes sentido del humor, ¿lo sabías? Anda, sigue por donde nos quedamos en "La auténtica Barenziah".
Por favor, no puedo... solo... déjame.
Si crees que puedes lograr lo que él no puede, te lo venderé. Entonces podrás ir corriendo a llevárselo, si quieres.
El gremio ha invertido mucho en esto. No lo fastidies ni me hagas quedar como un tonto.
Admito que dudaba de ti, pero eso se acabó. Has sometido un dragón a tu voluntad. ¡Es una hazaña propia del legendario Olaf Ojo Único! ¡Gloriosa!
Las mayores arañas que haya visto jamás.
Hace poco nos enteramos de que había muerto... Yo... me cuesta hablar de esto. Quizá deberías preguntarles a mis padres.
Venga. Piérdete.
Viejas ruinas. Nórdicas, me parece.
Estos Capas de la Tormenta no son nada más que una turba armada. Esta guerra no va a durar mucho más.
Yo desde luego voy a hablar bien de ti si regreso antes a Soledad.
La cosa ha ido bastante bien, visto lo visto.
Después de tanto tiempo, por fin Ventalia es libre. Ya no tendremos que sufrir la persecución de Ulfric Capa de la Tormenta.
Aquellos que lo derrocaron hace siglos, no impidieron que llegara la hora de la verdad, solo la pospusieron.
Por los dioses...
Empieza por el principio, como siempre.
No existen héroes en esta guerra. Aunque Ulfric esté aquí, en Soledad, no hay ganadores que proclamar, y su conclusión no parece nada clara.
Muerta Lisbet, yo cuidaré de ti.
Eorlund Melena Gris era un estúpido cabezón. Nuestra relación terminó cuando le dio la espalda al emperador. Ahora está muerto.
Tu presencia... me pone de los nervios. Por favor, márchate.
Mmm. Hacía bastante tiempo que no partía a alguien en dos. Se me había olvidado lo duro que es sacar la cimitarra después.
Magia. Maldita magia...
No sé cómo expresarte lo mucho que me has facilitado el trabajo.
Sin embargo solo concedo ese título a alguien que sea conocido en toda mi comarca.
Se necesitan más almas para la Estrella. La última murió antes de poder cosecharla.
Cierto, muchacha... y estaremos preparados.
Cuando los Capas de la Tormenta tomaron Carrera Blanca, fue una victoria para todos los nórdicos.
Por Sithis.
Todos tramamos algo, cariño. Todo va como tiene que ir.
Ha sido un invierno brutal. No recuerdo la última vez que hizo tanto frío y durante tanto tiempo.
Han secuestrado a alguien de la Cuenca.
Los Compañeros me dejan luchar a cambio de oro, así que lucho.
Ahg. ¿Has visto, por casualidad, mis notas de investigación? Me parece que las he extraviado.
Puede ser una ciudad agradable cuando te haces a ella. ¡Solo tienes que fijarte en las vistas!
Toda la que aún no conozca.
Iguala la apuesta y lucharemos hasta que uno de los dos se rinda.
¿Quién va ganando?
No tengo nada en contra, pero, para mí, lo que alimenta mi espada es la promesa del dinero.
Lo que significa que debes interpretar bien tu papel y no llevar armas. Toma, ponte esto.
No me hacía ninguna gracia que el Imperio estuviera encima de mí diciéndome lo que podía hacer y cómo.
Adelante. Yo te sigo y te cubro la espalda.
Con Joric será lo que tenga que ser. Dale tiempo.
A veces me pregunto si mis tías tendrán razón sobre mi padre... Parece débil.
Correcto. ¿Y bien?
Shadr, qué detalle... Me encantaría.
¿Qué misterios macabros revelarían si pudiesen hablar?
Que la fuerza y honestidad de tu Voz te ayuden en tu camino. Recuerda: respiración y concentración.
Lo tengo cuando mis clientes pierden el tiempo charlando y no comprando.
¿Que... querías algo? Mira, si no vas a hablar o a darme unas monedas, puedes marcharte...
Sencillo. Que el Imperio libre su propia lucha, con sus propios fondos, y sin secuestrar nuestros suministros y nuestros soldados. Que Haafingar se pueda reconstruir.
Habré roto como cinco o seis picos en los últimos meses.
Regreso a Roca Alta. Nuestro pastor se ha descarriado, y me temo que la ira de Peryite pueda consumir a quienes se queden con él.
Es una ceremonia simple, pero será suficiente. Estás aquí. Con eso basta.
Cómo te envidio. ¡Solo puedo imaginarme la emoción de ver la historia a través de los ojos de otro!
Vaya, gracias. Es muy galante de tu parte.
¿Te está costando últimamente conseguir provisiones? Apenas puedo alimentar a los trabajadores de mi palacio.
Oh, sí, claro, por supuesto.
Pero ninguno sabe mejor que tu vino especiado, Evette.
Veo que has comenzado el aprendizaje del grito Torbellino arrollador.
Confío ciegamente en ellos, porque los comprendo.
¿Tienes un Pergamino antiguo? ¿Tú?
No. Wilhem, créeme que si pudiera me la llevaría de aquí mañana mismo, pero Klimmek aún tiene mucho que aprender.
¿Qué te aflige, querido?
¿Crees a esta vieja bruja?
Los nombres no significan nada para nuestro señor. Solo le importan los que se ocupan de sí mismos, cuyo corazón persigue una meta, y cuya vida rebosa hazañas.
Gracias. Ojalá Camila estuviera aquí para verlo.
Te aseguro que el viaje onírico es muy conocido en las leyendas sobre Vaermina.
¿Estás preparado para la caza de esta noche?
Si os veo salir de aquí aunque sea con una viruta de plata, os romperé una pierna y os tiraré al río.
Espero que la torre resista hasta que lleguemos.
¡Asqueroso mercachifle!
¡Hola! ¿Cómo te llamas? ¿Vienes de visita? ¿Qué haces?
Tengo que ponerme mi equipo de viaje. Dame un minuto para prepararme.
Pero no lleguemos a conclusiones precipitadas ni le atribuyamos más importancia que la que realmente nos conste.
Ya he obtenido todo lo que necesitaba de ti. ¿Qué quieres?
Oh. Oh, no. Esto no servirá.
Ya sabes qué quiero decir. Dile a tu jefe que una cosa es ir de duro pero, si alguien saca una daga, se acabaron las bromas.
Voy a escribirle una carta a Rythe. Si pudieras enviarla a Cheydinhal por mí, eso compensaría tu metedura de pata.
Que tu voluntad deje huella en el mundo.
Se extendió a propósito por el gremio la suposición de que los Ruiseñores eran solo un mito.
Que los cielos te guarden.
Segundo, ¿cómo podemos olvidar las custodias? Se han convertido en algo esencial para cualquier mago que trabaje en situaciones peligrosas.
Quiero que hables con Sibbi por mí. Y luego quiero que me traigas a Escarcha y los documentos que demuestran su pedigrí.
¿A cambio de Riften, la joya de Skyrim? Lo dudo mucho. ¿Qué tal la Cuenca? Las minas de plata serían un recurso muy valioso.
Te dije que quitases las malas hierbas del jardín antes de que anocheciera, y ni caso. ¡Te has metido en un lío!
Maven está triste porque Ingun no tiene ningún deseo de continuar el negocio familiar, pero siempre dice que "le daremos otras utilidades". No sé bien a qué se refiere.
Este khajiita te sigue.
¡Ja! Me temo que el botín ya no está aquí. Pero has sido de mucha utilidad para los Sangre Negra. Mereces una muerte rápida.
Me temo que, en términos de hospitalidad, no tenemos mucho que ofrecer.
Sí, por supuesto. Luego ya tendremos tiempo para husmear, supongo. Veamos qué hay ahí delante.
¿Puedo ayudarte en algo, o solo querías hablar?
Alguien de Haafingar ha solicitado nuestra ayuda.
Bien. Tal vez haya comprendido que está derrotado. Tal y como van las cosas, pronto estaremos a las puertas de Soledad.
Ten cuidado con Zafiro. Se mezcla con todo tipo de gente desagradable.
(gruñido)
Aquí se pueden ver perfectamente los ataques que se infligía. Siempre contra las partes más débiles de su frágil ego.
Lo siento. ¿De qué te gustaría hablar?
Bien. Entonces lo invitaré a jugar. Vive justo ahí. Voy a llamar a su puerta...
Los restos de la Legión no me preocupan. Con el tiempo, todos se acabarán rindiendo y volverán a su casa.
Vale. Hasta la vista.
Ya me encargaré yo de eso. Tendrás una invitación, no te preocupes. Siempre y cuando te hagas pasar por lameculos de los Thalmor, los guardias te dejarán acceder.
Lo siento, mamá. Solo quiero saber más de él. ¡Nunca me cuentas nada!
Y yo estoy ocupado. Si me ayudas, yo te ayudaré a ti, e incluso conseguirás algo de oro en el trato. Así son las cosas.
Dispara al objetivo del centro.
Por favor... Ten compasión...
¡No te alejes! ¿Adónde crees que vas?
Ohh, arrogante.
Ha pasado mucho tiempo. Lo echo de menos, pero está claro que no va a volver.
Mmm. Una pena. Había esperado obtener al menos un mínimo de justicia.
Esta guerra dejada de la mano de dios divide a nuestro pueblo y asola nuestra tierra.
Fue ella quien estuvo a punto de provocar el colapso del Imperio hace casi quinientos años. Creo que tengo un libro sobre ella...
Soy el maestro Arngeir. Hablo en nombre de los Barbas Grises.
¡No! ¡Por favor! ¡De verdad que no tengo dinero, Braith! Mañana te daré diez, pero no me pegues.
Por último, la campanilla de la muerte solo crece en terrenos pantanosos. Sus racimos invertidos de flores azul purpúreas son inconfundibles.
Háblame de la Gran Guerra. Dicen que estuviste en la batalla de...
Los dos dirigimos La gamba empeñada, pero él ha mantenido el negocio a flote sin la ayuda de nadie y a pesar de todos nuestros problemas.
Es difícil seguirle el rastro a Hrefna. Si su padre no fuese tan cobarde, estaría por aquí echándonos una mano.
Pero escucha, creo que puedo ayudarte. La recepción de la boda es fuera del templo de los Divinos, ¿verdad? ¿En Soledad?
Ve allá donde esté el mayor desafío.
Has cumplido bien.
Antes solía andar con un clan de bandidos en el Pálido. Al final terminaron por no gustarme, y yo no les gustaba a ellos, así que nos separamos.
Gulum-Ei se volvió codicioso y nos dejó fuera del trato. Apenas puedo decir que se lo eche en cara a ese maldito desgraciado.
No logro imaginar que Escaldo haya sido joven alguna vez.
Wuuthrad es una reliquia de Ysgramor. Mediante esa arma, trazamos nuestro linaje directamente hasta el primer heraldo de la humanidad en estas tierras.
Te necesitan en la Marca de Hjaal. Hay mucho que hacer allí.
Dioses... Qué dolor...
El motivo por el que un niño quiere ponerse en contacto con un grupo de asesinos se me escapa, pero está atrayendo el mal a esta ciudad.
¡Que vengan esos soldados! Nunca me has visto lanzando incienso. Podría derribar a un gigante.
¿De verdad te jugarías la vida por el honor de un desconocido? No sé qué decirte. Gracias. Aguardaré aquí.
Hay un bosquecillo de olmos al este. Nos vendría muy bien esa madera.
Sal de aquí. Me aseguraré de que no hemos dejado ni uno con vida, y veré si se puede obtener información de los cuerpos.
Si quiere quedarse al margen de la protección del Imperio, allá él. Que Ulfric saquee su ciudad.
Su asesinato propició, podríamos decir, un cambio necesario en la política imperial.
Por favor...
Exigimos una compensación por la masacre de Paraje de Rorik.
Te... agradecería que esto quedase entre nosotros. No me gustaría que mis padres "perdiesen" otro hijo.
¡Ingun! Si quieres seguir en mi tienda como aprendiz, espero que actúes como tal. ¡Sin excepciones!
Se trata de un trabajo doble. Primero, roba una carta que se envió desde Soledad para advertir a la guardia de Carrera Blanca de que buscasen a Arn.
¿Vas a perder miserablemente y decirme luego que te has dejado ganar?
Pido disculpas por la interrupción en una celebración como esta.
La carta sellada explica todo lo demás con detalle. Tendrás que entregársela a tu superior. Sea quien sea.
Ve con cuidado si cruzas el río que hay al este. El viejo Hajvarr Mano Férrea y sus bandoleros están apostados en esa cueva, en la Guardia del río Blanco.
Sí, lo es.
Me temo que pretendes negociar sin metal que te cubra las espaldas.
¿Qué ocurre?
¡Nivenor! ¿Cómo puedes decir eso? Te consiente todos tus caprichos.
¿Y qué? Es nuestra posada, y no hacen daño a nadie.
No llevas mucho aquí, ¿verdad? Me he fijado en ti, pero todavía no hemos hablado.
Yo me tomaría esto más en serio si fuera tú. Si un dragón decide atacar Carrera Blanca, dudo que seamos capaces de detenerlo.
Toor... ¡Shul!
Eras débil, y ahora has muerto. ¿Qué huella has dejado a tu paso por la que podamos recordarte?
¿Te atreves a desafiarme?
¿Qué está pasando ahí fuera? ¿Qué ha ocurrido?
He pasado mucho tiempo creando una lista de proveedores de mercancía por todo Tamriel.
Discúlpame, mi señor. ¿Te gustaría oírme tocar el laúd?
Cazamos juntos.
Tengo miedo de que conservar el Vial solo sirva para recordarme la obsesión de Nurelion, y lo mucho que lo consumía.
Vale, si lo que quieres es luchar, lo lograste.
Es agradable recibir buenas noticias por una vez. ¿Has recuperado algo del almacén digno de mención?
De acuerdo, me iré ahora.
Avanchnzel nos espera.
Mira, tengo un entrenamiento pendiente.
No, madre. No me sorprende que nuestros enemigos se atemoricen cuando ven a un guerrero orco.
Siempre es un placer hablar contigo... camarada.
Por la forma en la que han crecido nuestros cultivos, Paraje de Rorik debe de tener el suelo más rico de la comarca.
Los Sangre Argéntea me pagan, me dejan romper unos cuantos cráneos y me libran de los guardias. Es todo lo que necesito.
Los Ojos serían de gran ayuda para ayudar a que el gremio se recuperase.
¿Por qué estás aquí, visitante?
¿Tú eres quien tiene Sangre de Dragón, no?
Irás al fuerte Neugrad.
Bien, por fin has llegado.
Acude enseguida al campamento militar oculto que tenemos en la Cuenca. Ulfric lleva ya mucho tiempo beneficiándose de esas minas de plata.
Muy bien, veamos lo que tenemos aquí.
Últimamente, no. ¿Por...?
Para Huki es muy importante que los combates sean justos. Para mí es importante que la paga sea justa.
Lo mejor de todo es que también ha prometido que nos abrirá algunas puertas en Soledad y que nos ayudará a ponerlo todo en marcha.
Al principio no sabía por qué me escogió a mí. ¡Yo no había cogido un martillo en mi vida! Pero en cuanto tuve uno en la mano, ¡sentí que era lo mío!
Primero tenemos que limitar la capacidad de los Capas de la Tormenta y sabotear uno de los recursos que pretenden controlar para enviarles un mensaje claro y contundente.
Me alegra que salvases esta aguamiel de caer en sus manos. Mira, te voy a enseñar a bloquear puñetazos, algo muy útil para los que estamos casados, ¿eh?
¡Ja! Y tú tampoco, ¿eh? Me alegro de ver a otro Guardia rojo. Me gusta pensar que traemos un poco de calor a este yermo helado.
Pronto lo entenderás.
Se han vuelto a reír de mí, Dinya. No entienden nada.
Y hemos hecho todo lo posible para prepararnos ante eso.
Sin embargo, detener a Alduin es una cosa, pero ayudarte a exterminar a los dragones de nuevo es una cosa bien diferente.
General Tulio...
Sí, manifiéstate. Hasta ese día, seguiremos consagrando nuestras vidas a ti y a sufrir por ti.
La llaman "la Desolladora".
Quiero saber qué tenemos entre manos antes de empezar a arrancarlo de la tierra.
Me estaba acostumbrando a tener a ese fantasma alrededor, y de repente, va y desaparece.
¿Y no podría ser fiel a su esposa?
Sí, no dudo de su trascendencia. Sin embargo, este asunto no puede esperar.
Si surge la necesidad, un portal conecta el sepulcro con el Salón de los Ruiseñores. Úsalo cuando desees.
Estaré encargándome del museo si me necesitas.
Gracias. Permite que te enseñe unos cuantos trucos sobre la forja.
¡No! ¡Esa urna tenía un valor incalculable!
Me enteré de que una matrona que sirvió a la Casa Telvanni se había escapado de Morrowind durante la Guerra de Adhesión.
Así que si deseas realizar un servicio más para la Compañía, podríamos zanjar este asunto de una vez por todas.
Un arco y flechas para cazadores sin par.
La fuerza y el acero están bien, pero la magia es el auténtico poder de este mundo.
En fin, si Hadvar responde por ti, supongo que eres de fiar.
Vaya, puede que me haya equivocado contigo. Cualquier persona lo bastante sensata como para callarse y escuchar no puede ser mala.
No te preocupes, Me ocuparé de esos cargamentos como si fueran míos.
¿Cómo van los negocios?
Ahora ponte en marcha antes de que a Sabjorn se le ilumine la mente y contrate a alguien para hacer el trabajo.
Antes de morir, Hevnoraak planeó de forma obsesiva su resurrección. Mi deber en la vida y en la muerte consiste en asegurarme de que permanezca en la tumba por toda la eternidad.
¿Calcelmo? ¿Le interesa Faleen? Ese ladino abuelete. Tenía que haberlo adivinado.
Eso parece, cuando estás cerca de Silana.
Está conmigo.
Siempre han intentado alejar a la Sangre de Dragón de la senda de la sabiduría.
Me gustaría saber por qué pierdes el tiempo preguntando cuando ya deberías estar en camino.
Mentiría si dijese que no me lo pasé bien. Pero, lo que es más importante, conseguí un oro muy necesario para este santuario. Al final, eso es lo que importa.
Si ves algo que te guste, será un placer hacerte un descuento.
¡Por fin, un rival digno!
Dicen que el Colegio de Magos ha vuelto a la normalidad. Si es que existe tal cosa para esa gente.
Pero espera. ¿Y qué pasa con la inversión de almas? Seguro que eres consciente de las consecuencias de usar el aparato cerca de un campo mágico abierto.
La entrada a la ciudad de los enanos. En su interior habrá todo tipo de trampas y extrañas máquinas.
Espero que me hayas traído algo.
¡Un asesinato! ¡A sangre fría!
Toma, esto debería ser suficiente por tu parte de... O más bien, como recompensa por tus acciones. Y ahora, si me disculpas...
Dime, hermana: ¿son ciertas esas historias?
¡Idiota! Ahora tenemos que enmendar tu metedura de pata y eso nos cuesta oro..., lo que significa que para ti no hay nada.
Tiid...
Sí. Según Giraud, el conservador de historias, puede que la parte de la edda referente al rey Olaf exista y se encuentre en Respiro del Muerto.
Conque en extinción, ¿eh? ¡Y entonces qué es eso!
Espero que sea algo que quepa en un bolsillo y que nadie eche en falta si desaparece.
¿Esto te ha dicho él? No.
Tengo que decir que ha sido todo un placer que dirigieras el Colegio. En serio.
No había muchas opciones. Ranmir y yo crecimos aquí, y él se gastaba en bebida todo el dinero que teníamos.
Quiero que sepas que no confío en ti, Madena. Y te estaré vigilando.
Pero no cometamos el error de subestimar a la Legión. Muchos de ellos son nórdicos, igual que nosotros.
Me metieron aquí porque alguien dijo que yo era un Renegado.
Mi amiga Maven y yo... ¿Conoces a Maven, de Riften? Sabemos cuál es nuestro sitio en el mundo. Y sabemos cuál es el de los demás.
La arquitectura de este templo es maravillosa. ¿Alguna vez has visto una mampostería como esta, Delphine?
Todas se reducen en una: respeta a tu familia. Si lo haces, todo lo demás irá rodado.
A "Saadia", como tú la conoces, la buscan las casas nobles de Taneth por traición. Nos han contratado para que la llevemos a Páramo del Martillo, donde pagará por sus crímenes.
Reúnete allí conmigo. Nos abriremos paso hasta el abrazo de Namira.
Luché en la Gran Guerra. Ya he acortado bastantes vidas jóvenes; no pienso volver a hacerlo.
Podrás examinar las cenizas que otros temen tocar. A ver qué te cuentan.
Un día, en el prado, vino a mí corriendo, muy animado porque había hecho nosequé descubrimiento, y dijo que iba a emprender otro viaje.
Los Melena Gris tenemos tanto de qué enorgullecernos como los Batallador, pero no nos verás ir por ahí presumiendo.
¿Y tú dices que combates?
¡Guardia! ¡Han pagado mi fianza! ¡Libérame!
Hace doscientos años, hubiera dado la vida por la impía matriarca, pero esa época ya pasó. Astrid es ahora mi matriarca.
Intenta establecer contacto con el vendedor de veneno y convencerlo de que ponga fin a sus actividades de forma permanente.
¡Pero bueno! Pues muy bien, si vas a comportarte así... Quizás sea mejor que me vaya. ¡Buenos días, señor! ¡Buenos días, he dicho!
¿Buscas algo?
¡Daría un ojo si con ello pudiese sacar a esas malditas arañas de la mina!
Eso es. ¡Es este! No sé quién eres, pero puede que hayas salvado este pequeño proyecto...
Por supuesto que sí. Como deberían hacerlo todos los verdaderos hijos de Skyrim.
¿Ves? ¡También ella está de acuerdo con nosotros! ¿Por qué no nos enseñas algo?
La gente tiene pesadillas que jura que son reales. Se van a la cama, pero solo para despertarse más cansados aún.
No es de extrañar que ella huyera en plena noche.
Aun así, los Divinos suelen cobrarse la vista del lector como precio.
Ra'jirr siempre la ha metido en líos.
Un jarl tiene muchas responsabilidades, y asistir a fiestas no es la más importante de ellas, pero tampoco es desagradable.
J'zargo sigue teniendo dificultades con las Custodias. ¿Tienes tiempo para practicar?
Sigue mi consejo y no apuestes nunca. Irnskar me tiene endeudado hasta las cejas.
Vamos a dejar el tema mientras cenamos.
Bueno, si funciona en un caso, ¿por qué no en el otro? ¿No quieres intentarlo al menos?
El jarl ofrece una recompensa por unos bandidos. Toma, echa un vistazo a este decreto para informarte.
Aún sueño con aquellos días. Excepto que yo no soy yo. Puedo verme ahí e intento impedir lo que ya sé que va a ocurrir, pero...
Bueno, también está Farengar. Puede que sea el hechicero del jarl, pero al menos es nórdico.
Gracias. Por favor, acepta esto como pago por tu trabajo.
Ahora que depende de nosotros, tengo ganas de que llegue el desafío. ¡Voy a ser más famoso que Olaf Ojo Único!
Habré perdido un poco de sangre. Lo cierto es que no voy a llegar a ninguna parte así. Cuando respiro, me duele.
¡"Señor"! Jo, jo, jo. Qué modales tan anticuados...
El gremio quedó completamente desorganizado. Muchos intentaron reclamar el puesto de Galo como maestre del gremio.
Por tu bien, no tengas hijos. No sirven para nada.
No puedo protegerte si nos asesinas. Solo te lo voy a advertir esta vez.
Ten fe, mortal. Estaré observándote.
La pobre niña debe de estar suplicándonos que colguemos al asesino de su padre.
¡Entonces no me dejais alternativa!
Digamos que es... una pequeña mancha en la reputación del Colegio. Una de muchas, desgraciadamente.
La ciudad no ha cambiado tanto, cielo. Las mismas piedras enanas acumulando el musgo de siempre.
Y yo un mozo de carga de un pueblo al que no llega carga. No me vas a sacar una sola moneda, Degaine.
Esos Thalmor también son elfos. Seguro que están trabajando juntos.
Cuidado. Riften no es el más seguro de los lugares para dar un paseo nocturno.
Eh... Este sitio parece peligroso.
Mirad, aquí. El templo de Refugio Celestial, construido cerca de uno de los principales campamentos militares akaviri de la Cuenca, durante la conquista de Skyrim.
¡Y lo apostamos! Mantén los ojos bien abiertos. Creo que no estamos solos. Ve a comprobar la entrada, yo voy a mirar por aquí.
¡No debería habérmelos llevado, ya lo sé! Fue una estupidez. Fui estúpido. No volverá a suceder.
¡Soy invencible!
¿Te refieres a Hildolf el Abre Cabezas? ¿Recuerdas cuando reunimos a la gente del pueblo y le sacamos a rastras de aquella cueva?
Los estudiosos de todo el mundo vendrán aquí algún día.
Y adivina quién regentará la destilería Espino Negro de Carrera Blanca. Lo tienes delante.
Perfecto. Es justo lo que necesitaba. Toma, un poco de oro por tu tiempo.
Bueno... Sí. Aunque yo no puse el oro. Tengo un socio en la sombra que me ha ayudado con las finanzas.
¿Seguro? Cuando veas a Giruad, pídele que te dé una propina. Seguro que estará de buen humor cuando lea esto.
Ven. Afronta tu final.
El Muro de Alduin fue donde los Cuchillas dejaron constancia de todo cuanto sabían de Alduin y de su regreso. Parte historia, parte profecía.
Pero si ya te pasas todo el tiempo aquí, mangoneándome y pidiendo a gritos más bebida. Ya estás prácticamente retirado...
Date prisa y die a Lucano que tienes la garra. ¡Le va a entusiasmar!
Entonces, esa es mi misión.
Deberías tener más cuidado con lo de dejar cosas tiradas por ahí. Toma.
La pintura no nos va a dar de comer, pero las cosechas, sí. Ten paciencia, Aduri... Algún día podrá ser, te lo prometo.
Eso me entonará.
¡Por favor! ¡No pienses que yo he tenido nada que ver con eso! ¡Yo quería matar al emperador! ¡Al verdadero emperador! ¡Y aún quiero! ¡Fue Maro! Él...
Ya era hora de que apartasen la mirada de los cielos y la posaran sobre nuestra sangrante patria. ¿Qué quieren?
Mira, a lo mejor podemos llegar a algún tipo de acuerdo.
Ahí empieza la diversión. Tendrás que escabullirte de la fiesta sin llamar la atención.
Si hubiera alguien más a quien Ulfric pudiera confiar toda esta absurda planificación, yo estaría ahí con vosotros partiendo cráneos.
¡Qué impertinencia! No me hablabas así cuando aún era Jarl.
Podemos hablar de ese asunto una vez nos hayamos ocupado del dragón.
Así me gusta.
A mí me parece que casi todas estas tienen nueve partes de ficción.
Ven a verme cuando termines de trabajar.
Hay un cazador de brujas en la ciudad, del culto a Stendarr. No deja de hacer preguntas sobre esa vieja casa abandonada.
¡Los rumores eran ciertos! Llevas la única arma que teme el Brillo de los Antiguos... ¡El Azote de ortigas! Te lo ruego, ¡no le hagas daño al árbol! Eso no traería nada bueno.
Me pregunto si deberíamos dejar Markarth de una vez. Estos ataques de dragones... Creo que Skyrim está maldita.
Tengo la impresión de que te interesa reunir estos ingredientes para mí. ¿Me equivoco?
¿El miasma? Pero, hermano...
¿No puede una mujer disfrutar de un momento de intimidad? ¡Vete!
¿Y qué hay del jarl Erikur?
Hay otras dos más adelante.
Muchas cosas turbias para ti son transparentes para nosotros. Hace mucho que sabemos que vencerías.
No me creo que esté sucediendo esto, chica.
Que Arkay te bendiga por tu ayuda.
Este es el día más feliz de mi vida. ¿Dónde viviremos? Ahora mi casa es tu casa, por supuesto.
Mi primo está destinado en la atalaya. Espero que esté bien.
Sabes que apoyo al Imperio, igual que todos. Sin embargo, temo que el general Tulio subestime a los Capas de la Tormenta.
Muy bien. Toma. Llévale esto a Brynjolf y dile que ya no le causaré más problemas.
Lo primero que tenemos que hacer es intentar asesinar a su comandante, para así poder atacarles cuando salgan con el rabo entre las piernas.
Ah, ahora lo entiendo. Esto es por el escondite secreto de mi padre, ¿no? Con la dote para mi boda.
Ahora vete. He de mover unos hilos que requieren toda mi atención. Puedes seguir tu propio camino allá donde te lleve.
Bueno, Arniel. ¿Cómo va ese pequeño proyecto? ¿Algún progreso digno de mención?
Brillo Dorado es muy importante para uno de nuestros mejores clientes.
Chssst. Está bien. No tienes que decir nada más. No tenía ni idea de que tuvieras tantos... matices distintos.
Y Mila y yo solíamos subirnos al tejado de Cuenca del Dragón a buscar huevos de pájaros.
Por ahora, voy a sacarte de la acción. No se te ofrecerán trabajos y no podrás vender tus mercancías.
Los Pergaminos antiguos hablaban de su regreso.
¿Dónde has oído hablar del grito que se usó para derrotar a Alduin?
Una cosa... Esta conversación nunca ha tenido lugar. ¿Entendido?
Buenos días, Assur. ¿Qué quieres hacer hoy?
Los hombres de verdad demuestran su amor. Las palabras están tan vacías como el aire que exhalan.
Y solo hay un hombre que puede darnos lo que necesitamos: Delvin Mallory. Es un perista, un intermediario privado. Trabaja en la Ratonera, en Riften.
He hablado con Brynjolf y me asegura que se encargarán de ello.
Disiento respetuosamente, señor. Puede que Stendarr y Zenithar les pidan ser fuertes, pero Mara y Dibella nos piden ser compasivos.
¿Quién más se beneficia, aparte de los Thalmor?
Saboreo en el viento las voces de los aliados de Alduin. Pogaan nahlaas, vokrii wah jun.
Correr no te salvará.
No creo que sea necesario, Horik. Es la misma estrategia que utilizamos en las principales tácticas defensivas de la Gran Guerra. Nos servirá ahora también.
No.
Por el corazón de Dibella, hijo, espero que no.
En el confín suroeste de Skyrim, en el Pinar, hallarás la entrada a nuestro santuario. Está oculto por debajo del camino.
A raíz de esta disposición, los Capas de la Tormenta consideraron al Imperio indigno de alianzas con ningún auténtico nórdico.
Toma, esto es para ti.
Desátame. Ahora.
¿Crees que eres mejor que yo porque sabes hacer eso?
Los Capas de la Tormenta no son ni mucho menos la única amenaza a la comarca. Las carreteras están infestadas de bandidos y bestias... y se empieza a hablar incluso de dragones sangrientos.
Siempre has sido un modelo de decencia en estos tiempos tan agitados, Yngvar.
Pensaba que no volvería a ver un rostro amigo nunca más.
Cuando era muy joven, me mandaron a Skingrad, en Cyrodiil, para estudiar con él.
No, nada. Al menos que yo sepa.
¡Ha sido una gesta extraordinaria! Por fin se ha completado la destrucción de Alduin, y Sovngarde se ha purificado de su trampa maligna.
Me alegro de verte, cielo.
Ah, hola. ¿Buscas suministros de caza?
¿Qué ha ocurrido?
Ah, y antes no fui del todo sincero. Esto va a doler muchísimo. Es que tienes que estar en cama para que el hechizo se asiente.
¿Tienes idea de lo que me va a costar tu pequeña travesura?
Los enanos eran maestros de la construcción subterránea... Estas ruinas muestran solo una pequeña parte de sus habilidades.
Tienes trabajo pendiente.
¡Esta es tu oportunidad, Dovahkiin! ¡Ataca con todas tus fuerzas!
Estoy tratando de hablar con el jarl.
Ahora, hazte a un lado, hay trabajo por hacer.
No te preocupes, mis fiestas están bien surtidas con la mejor comida y bebida del país.
Y acaba con sus recursos, como aserraderos, molinos u hornos, por medio del sabotaje.
Sería mejor si... no le mencionases a nadie que me has visto aquí.
Por suerte, Ventalia es tan fría que los muertos tardan en pudrirse. Aunque hemos de esperar a que la tierra se deshiele para enterrarlos.
De veras, tengo que marcharme.
Tía Haelga, ¿por qué te... rebajas con estas personas a las que apenas conoces? No te muestran ningún aprecio.
¿Qué? ¿Esperabas reclamar esta casa para ti? Siempre le he caído bien a la familia Aretino, y creo que soy familia de sobra para quedármela.
¿Sabías que Vittoria se va a casar? ¡Dicen que es posible que el emperador venga a Skyrim para la boda!
Gracias. Todavía estoy dando mis primeras lecciones, pero Inge... la decana Seis Dedos... dice que la flauta se me da bastante bien.
Tal vez esa garra tenga algún tipo de pista. Ya sabes, cómo girar los anillos para que se abra la puerta.
¿No trabajas ya para Vilkas? Ven a hablar conmigo cuando termines.
La mitad de Skyrim lo sabe. Cuando matan a una vieja en su propio orfanato, la gente acaba enterándose.
¡Ah! He oído hablar de ese grito, pero nunca lo he visto. Fascinante...
Puedes echarle un vistazo a esta casa. He oído que tienen bastante pasta y probablemente tengan un montón de cosas buenas que llevarnos. ¿Suena bien?
Viajar por la Cuenca es peligroso. Necesitas un buen carruaje.
No puedo creer que Ulfric esté muerto. Skyrim ya nunca será libre.
Pero es demasiado tarde para huir. El dragón me sobrevuela; fuego y oscuridad descienden sobre mí como un relámpago.
Ese martillo... ¡Pero si es Mal de Aegis, reliquia familiar del clan Escudo Quebrado! La última vez que oí hablar de él lo habían robado un par de estafadores. Alain y... Muiri, sí.
¿Conoces relatos de nobleza y coraje? Me encantaría ponerlos por escrito.
Espero verte con ese oro pronto.
Muy bien, aquí tienes.
La naturaleza crucial es pura apariencia. Una visión mundana cambiada por otra clase.
He oído que tu cosecha se ha vendido bien en el mercado. Bien hecho, Ennis.
Espero averiguar algún día lo que me sucedió... Cómo acabé así.
Hasta entonces, solo yo tengo el derecho a tener mujeres e hijos. Eso asegura nuestra fuerza.
¿Por qué no averiguas si el archimago Aren quiere venir conmigo a comer?
Volveré al orfanato dentro de un tiempo. Antes esperaré un poco para que puedan... ya sabes, limpiar el estropicio.
Ilas-tei practicaba hechizos de ilusión. La pobre estaba teniendo problemas con los hechizos de Calma, pero solo trabajaba con skeevers.
Habla con el sacerdote blasfemo en el templo de Kynareth, en Carrera Blanca. Acepta su oro y mata al objetivo. ¡Salve, Sithis!
Me temo que no, tesoro. La fruta solo durará un día más. Tenemos que vender toda la que podamos, y lo antes posible.
Lo que tú digas, madre.
Lo siento mucho. Espero que los Ocho te den más paz en el futuro.
En realidad hoy solo quiero una botella. Estoy pensando en dársela a Vivienne.
El Crepúsculo nos vigila a todos.
Maldita sea, ¿en qué página estaba...?
Pareces una persona muy agradable. Me encantaría saber más de ti.
Me paso las horas muertas asegurándome de que los mineros trabajan eficazmente.
Eso es "Feim." Deja que ese significado te inunde. Su'um ahrk morah. Descubrirás cómo tu espíritu te da más fuerza.
Que Kynareth nos salve. Ahí vuelve...
Soy un viajero. Un peregrino. Sigo la voz de Kynareth allá por donde se deja oír.
Prepárate y reúnete conmigo en las ruinas tan pronto como puedas. No podemos dejar que se nos escape.
Vamos, querido esposo. Tú mejor que nadie deberías saber de lo que soy capaz.
Maestro, eres demasiado viejo para esta clase de viaje. No sabemos qué hay dentro...
¿Eso crees...?
¡Me aseguraste que este sitio estaba limpio! Me... ¡me encargaré de que pases el resto de tus días entre rejas!
Ahí es donde aprendí a cocinar, y donde debería estar. No aquí, con estos perros.
Aquí es donde vimos a Mercer. Debemos de estar cerca.
¡Te enseñaré un combate de verdad!
¡Te maldigo!
¡No os quedéis ahí parados! ¡Matadla!
¿Ah, sí? A ver, ven que te eche un buen vistazo.
No te emociones. Recuerda que estamos aquí en misión oficial, ¿eh?
¡No es posible!
Dos cosas tengo para ti. Dos formas. Una con filo, otra redonda.
¡El otro jefe!
Qué pregunta tan curiosa. Pues me gustan las noches con luz de luna, dar largos paseos por la playa, hacer ganchillo y los unicornios.
¡Dentro, camarada, dentro! Donde solo las mujeres y la bebida están frías.
¿Trabajas para los Batallador? ¡Habla ahora, antes de que acabe contigo!
No me gusta este sitio. Siento como si nos... observaran.
Vamos a empezar con buen pie.
Conseguimos honor y gloria no solo para nosotros mismos sino también para los otros Compañeros.
Oh... es una casa preciosa, mi amor. Si no te importa, voy a abrir una tiendecita, para tener algo que hacer cuando estés fuera.
Ten cuidado, a saber qué acecha entre estas paredes.
Tengo que admirar el valor necesario para ir por ahí de esa forma.
Kematu está al oeste de Carrera Blanca, al norte de Colina de Granito. En una cuevecita muy modesta llamada "Antro de los Timadores".
Lo admito, nunca me he sentido del todo a gusto en la embajada de Thalmor.
¡Yo he apostado por el grande!
Frío como las entrañas de un espectro de hielo. Eso y unos imperiales acampados en la entrada, calentitos y contentos alrededor del fuego.
Tiene que dolerle. Mucho. Pero no te pago para asesinar a nadie. Ah, y si te pillan, no es mi problema.
Ayudo a mi marido Rustleif en la fragua. Es maravilloso trabajando el acero.
Sigue esforzándote, chico. Ten siempre la vista en el horizonte.
Tengo un nuevo pedido de escudos. Voy a necesitar algunas tablas de madera noble. Esta vez, nada de ese pino suave.
Mi tío ha muerto. Las cosas no serán lo mismo sin él.
Ya lo he hecho yo. Es parte de los motivos por los que ahora vivo aquí fuera. Pero gracias por ofrecerte.
Tendrás que utilizar el Azote de ortigas para conseguir algo de savia.
El jarl Hrongar...
Soy demasiado viejo para trabajar, pero no demasiado viejo para beber.
Y después vuelve aquí. Porque si Ulfric va en serio, necesitaré a todo el que pueda defender Carrera Blanca.
¿Entonces la conseguiste? ¡Déjame ver!
¿Tú? ¿Alguien de fuera? Antes me rajaría la garganta que aceptar tu ayuda.
¡Ahí está! Sobre la mesa.
De hecho, si pudieras traerme una serie de cosas, podría empezar con la siguiente serie de experimentos.
Voy a regar el suelo con tu sangre.
Queremos guiar a sus gentes en estos tiempos de transición, y ayudar a que avancen hacia un futuro mejor.
No son "mi pueblo." Estoy con el Imperio porque me pagan. Y esto significa que yo estoy aquí fuera y tú ahí dentro. ¡Así que cállate, escoria!
¡Qué bien! Ya me veía pidiéndoselo a J'zargo.
Podría llevar este barco mucho mejor que ese crío que se hace llamar capitán. Tal vez algún día haga algo al respecto.
¿Eso es todo lo que tienes?
¿Necesitas un arma? Prueba a hablar con Adrianne, en la fragua.
Si ves a mi padre, Octieve, no te acerques. Te pedirá dinero o aguamiel.
Parecía que era allí donde se dirigían, aunque ocultaban sus razones con bastante celo.
Debes saber que muchos solicitan su ingreso, pero aceptamos a muy pocos.
Hay poco tiempo para charlar, ¿qué quieres?
Te doy la bienvenida a la Legión, auxiliar. Presta atención.
Creo que lo haces de maravilla. Sería una pena si pararas.
Déjale en paz. ¡No quiero que Skaggi tenga que volver a decirme que le has estado molestando!
¡Muchas gracias!
Hace tan solo veinte años los habitantes de la Cuenca se rebelaron. Hasta llegaron a controlar Markarth por un tiempo.
Y por eso soy el mejor.
La próxima vez que decidas hacer una de las tuyas, recuerda lo mucho que duele desprenderse de esto.
Mara te perdona, criatura.
¡Por los Nueve!
En fin, rey... Si no te importa, cogeremos tu corona y nos iremos.
Como quieras. ¡A por la corona, soldados!
Es muy simple... Ulfric fundó los Capas de la Tormenta hace años como una especie de ejército privado para conseguir sus ambiciones.
Se te da la bienvenida a El skeever travieso.
Será un buen día. Algo en mi interior me lo dice.
¿Algo más?
Una figura curiosa. Malvada y sanguinaria, por supuesto, pero también era asombrosamente brillante y llegó a ser una gran nigromante antes de morir.
¡Eh, esas pelusas son mías! Ja, Cicerón está de broma. Anda, quédatelo.
¿Necesitas algún tipo de toxina para una ocasión especial? Pues ahí entro yo.
Pero los señores daédricos tenemos nuestros enemigos. Boethiah, mi rival, ordenó a su sacerdote su profanación. Hace tanto que no prueba la sangre... Hasta que viniste.
Permanecemos firmes en el frío, como hermanos, al calor de la certeza de saber que luchamos por el derecho de los ciudadanos libres del Imperio.
Vamos allá. Aquí tienes mi invitación, no llevo una daga envenenada atada a la pantorrilla ni nada de eso...
Mamá dice que el Imperio es malvado, pero yo no veo a esa gente tan mala.
Ralof... ¡Sal de ahí, idiota!
¿Buscas alojamiento?
¿Te lo parece? Estoy bien. Gracias por preguntar.
He tenido que ser muy cuidadoso al manejar esos fragmentos del filo que encontraste. Son tan afilados que podrían amputar un dedo sin esfuerzo.
Mira, cuando estés en disposición de hacer algo útil, me encontrarás en el exterior de Vergüenza de Haemar, en Falkreath.
¡Cómo olvidarlo! Aquel viejo macho dominante casi me arrancó la pierna.
Parece una causa noble. Le echaré un vistazo.
Supongo que no fue nada después de todo.
Yo nunca he sido mercenaria... No creo en vender mi talento por dinero. He ido siempre de aventuras siguiendo mis propias reglas.
Me... me siento fatal por lo que ocurrió. Por lo que hice. Probablemente lo mejor para todos sería que desapareciese.
... retirarme algún día... comprarme una isla...
Mira, te lo pondré muy fácil.
Ah, bueno, ya sabía yo que era improbable... Perdóname por hacerte perder el tiempo.
¿Avento Aretino? Solo vivió aquí una temporada. Creo que su madre se puso enferma y murió o algo así. Pero ahora ha vuelto a casa. Bueno, se escapó.
Así que, Mikael, ¿qué va a ser esta noche, mmm? ¿Algo alegre? ¿Una giga bretona, quizás?
Iré delante hasta el comedor con la olla con el guiso. Seguro que el emperador y sus invitados se mueren por conocerte.
Antes de comenzar, esperemos a que llegue Brynjolf.
Malditos sean los jarls.
Ah, estupendo. La verdad es que no esperaba encontrarme con alguien que hubiera estado allí.
Puede que no sea tan grande como algunos de mis compatriotas nórdicos, pero en combate apenas pueden echarme el guante.
Tú... conoces a la Dama de los Susurros, ¿no? Te lo noto.
Pero es más que eso. Nazeem está obsesionado con esta guerra civil, como todo Skyrim. Te juro que nos va a consumir a todos.
Mmm. Mucho.
¿Para qué estás hablándome aquí afuera? La fiesta es dentro.
Claro que sí, Lod. Claro que sí.
No es seguro estar por aquí. Hay ladrones que tratan de robar todo lo que tienes.
El Colegio no es el único sitio para aprender magia.
Me temo que sí.
Buen intento, pero mi madre ya me ha encerrado en la cárcel. Quizá deberías probar con Letrush.
Mi lugar está a bordo de mi navío, en el mar de Abecea.
Pero, me pregunto... ¿concederías a un anciano unas últimas palabras antes de que el acto sea consumado?
Como es obvio, aquí no tengo nada, pero... tengo un zulo oculto en la posada, y conseguí conservar la llave...
Cuando vi a la pequeña, pude sentir cómo se acercaba esa ansia. Pude saborear el... Necesitaba cazar.
¿Qué has dicho? ¡Debería arrancarte uno de esos colmillos y usarlo como cuerno para beber!
Claro, aprovéchate del tipo de la cárcel. Bien, vale, supongo que puedo hacer que el trato te resulte más interesante.
Mejor deshacerse de los que veamos, por si acaso.
No te preocupes. Cuidaremos bien de tu ciudad en tu ausencia.
Ooohh... Las cosas que haría ahora...
Lo haré.
Mantente alerta por si ves a algún espía de los Capas de la Tormenta.
Añoro los días de esplendor de este lugar. Teníamos más oro apilado en las arcas del que podíamos utilizar.
¡Armas y armaduras! ¡Forjadas por un maestro artesano!
Pues lo mismo que cualquiera: que son los hombres gato de Elsweyr. Guerreros formidables y buenos comerciantes.
¡Saffir!
Si le eres leal al Imperio, entonces no tenemos mucho de qué hablar.
¿Ya está todo? ¡Por aquí!
Bueno, ¿y por qué la dejaste caer? Me he entusiasmado para nada...
¡Ahora ve a conseguirnos algo de dinero, chica!
Esperaba que dijeras eso.
Hace años, tuve que ocultar cierto botín por aquí. Acabábamos de hundir un galeón imperial en la costa. Una buena tajada, pero debíamos aligerar.
Ten los ojos abiertos y camina con las sombras.
La lucha entre Olaf y el dragón culminó con un impresionante duelo en la cumbre del monte Anthor, y Olaf se proclamó vencedor.
Eres tú la que tiene el bastón, querida.
Lógicamente, he seguido practicando un poco mis antiguos pasatiempos. Echa un vistazo a los frutos de mi trabajo y coge lo que quieras.
Hemos vivido en Skyrim desde antes de que vinieran los nórdicos. Nuestra forma de vida es sencilla, todos trabajamos para que la tribu sea fuerte.
Señor, están avanzando. ¡Llegarán a las puertas en cualquier momento!
Es posible que la profecía fuera lo que llevara a los akaviri a Tamriel en un origen, para buscar a los Sangre de Dragón.
Los árboles nunca te han dejado ver el bosque, ¿verdad que no?
Te juro que Elenwen celebra estas fiestas solo para dejar mal al Imperio. Casi me dan ganas de unirme a los Capas de la Tormenta.
La idea de que los Ruiseñores son un grupo ficticio ya no se la cree nadie.
Cualquier cosa que puedas encontrar será de gran ayuda. Buena suerte.
Te doy la bienvenida. Creo que no nos conocemos. Soy Elenwen, embajadora de Thalmor en Skyrim.
Tienes que ir aquí.
He estado en contacto con mucha magia negra, pero por suerte eso ya es cosa del pasado.
No te preocupes por ella. He enviado a mis mejores hombres a capturarla.
¡Por favor, déjame salir!
¿Quieres que se convierta en cuchilla? ¿Seguro?
J'zargo no encuentra nada más que polvo en estas ruinas.
Creí haberlo dejado claro cuando te dije que no lo sabía.
¿Es el asesino?
Vale... Helgen...
Te va la violencia, ¿eh? Pues será mejor que no alardees de ello, sangre nueva. Cuando se enteren los demás, lo considerarán un reto.
No. No puedo enseñártelo porque no lo conozco.
Probablemente a uno de esos artesanos dwemer le llevó un año construir una de esas cosas.
Nunca tienes nada pendiente en la agenda, archimago. Yo velo por ello.
Dedico mi siguiente canción al Sangre de Dragón, que ha salvado a Skyrim.
Esta es una oda a los devotos protectores de Skyrim... Los imperiales.
Esta es una oda a los más leales de entre los hijos e hijas de Skyrim... los Capas de la Tormenta.
Hónrame con un encargo, visitante. Dale la espada a mi hija si la ves. Con ello sabrá todo lo que tiene que saber.
Esta pieza está entre las favoritas de las gentes de estas tierras y es una de las primeras que aprendí. Ragnar el Rojo.
He conversado con mis fuentes de información de las comarcas, y creo que he averiguado dónde vive uno de ellos.
Sigue tu camino. Hoy no tengo nada que venderte.
Pero hay un khajiita rondando por la puerta principal. No me gustó la manera en la que me miraba.
He enviado un jinete a Helgen. Pronto lo sabremos.
Pues date prisa, entonces. No quiero que tu hedor me espante a la clientela.
Bueno, con los falmer merodeando por aquí no puedo ocuparme de esto yo solo. Supongo que tendrás que venir conmigo.
Paz y prosperidad, es todo cuanto le piden a la vida las buenas gentes de Paraje de Rorik.
Búscate problemas en Carrera Blanca y yo mismo te arrastraré hasta el calabozo de Cuenca del Dragón.
Capto el mensaje. Considérala olvidada.
Me escondí aquí, en Soledad, durante mucho tiempo, pero la guerra... la guerra siempre persigue a un hombre hasta que ha acabado con él.
No creo que eches de menos unas cuantas escamas... o una pequeña cantidad de sangre...
Tenía que haber supuesto que Astrid te enviaría.
Tienes razón. No estamos solos.
Es una regla fundamental de la magia, y resultaría ridículo. No se puede extraer energía armónica sin un extractor de almas.
A continuación, tenemos un asunto de reclutamiento pendiente. Tengo en mente a alguien que quiero que se una a la campaña.
¿Soy yo, o empieza a hacer calor?
No, mi señor. Simplemente volaba en círculos cuando me fui. Nunca he corrido más rápido en mi vida... Pensé que vendría a por mí sin ninguna duda.
Ya hablaremos de esto en otra ocasión.
Adelante. Convoca a ese dragón tuyo.
Te debo una, camarada.
Esa elección es tuya. Nosotros no te lo impondremos. Pero para unirte al Círculo, tu sangre debe ser la misma que la nuestra.
Con esta actitud llegarías lejos, si fueras una especie de mercader arrogante o el escabel de un jarl.
Era una de las grandes casas de Morrowind hace mucho tiempo. No sabría decir si eso significa que soy uno de ellos o no.
Tu reputación está aumentando, eso está claro. Pero lo importante es que estás haciendo que aumente la del gremio. Sigue así.
Mi mujer confía en ti, y yo me fío de su criterio. Así que no puedes estar del todo mal.
Mi amo y yo hemos tenido ciertas diferencias. Nos enzarzamos en una discusión, que se tornó un tanto... acalorada.
Señorita Stentor, son bastante caros. Eres consciente de lo limitados que están los fondos de la comarca ahora, ¿verdad?
Por la ley imperial que proscribe el culto a Talos, podemos hacer lo que nos venga en gana.
He tenido mis años de guerra y luchas. Y nada de eso ha tenido sentido. Lo único que quiero ahora es un rastrillo y un poco de tierra fértil.
Estamos intentando recuperar una reliquia de un cliente. Dice que le pertenece, y siempre y cuando pague, a nosotros no nos importa. ¿Te apuntas?
Por favor, permíteme que te ofrezca esta llave. Abre la caja fuerte que tengo bajo mi puesto en el mercado. Puedes coger lo que quieras.
Sí... Sí. ¡Es esto! No sé cómo lo has encontrado, visitante, pero está claro que has tenido éxito donde yo fracasé.
Sé que mi cargo no resulta muy popular, pero alguien tiene que encargarse de que todo funcione bien.
¡Déjame ver eso!
Vuelve a hablar conmigo cuando hayas limpiado el desastre que has armado.
Me enseñó la manera de picar dientes de espectro de hielo y utilizarlos como conservante. Lo mantiene todo frío y fresco, pero solo durante un tiempo.
Cálmate. Te lo contaré todo.
¿No se te ocurre que pueden haberme pagado ya? Piérdete.
No te preocupes de esas cosas. Tenemos trabajo por hacer.
Bolar y yo te lo diremos.
¿Te la has encontrado tirada por ahí? Debe de ser mi día de suerte.
Hola, maridito mío. ¿Me traes más joyas de plata para que las venda?
Guárdatelo para el campo de batalla.
Si me trajerais la escritura de la hacienda Brillo Dorado, de modo que yo fuera la única propietaria, daríamos un paso en la dirección correcta.
Cuando tengas todo a punto, vigilaré el resto de tu equipo hasta que vuelvas.
Prepárate.
Vamos con retraso en la entrega de plata de este mes. La culpa no es mía, es de Nepote.
He oído que Ulfric Capa de la Tormenta murió mientras defendía Ventalia contra un dragón, pero suena demasiado bonito para ser verdad.
La gente de aquí no se acerca. Supersticiones.
Llegas justo a tiempo. Precisamente tengo unos clientes nuevos.
Adoro a Kodlak. Lo respeto y lo sigo, pero en este asunto se equivoca. No es una maldición. Nos hemos convertido en los mejores cazadores de esta tierra.
No querríamos ofender a nuestros señores supremos de Thalmor, ¿verdad?
Lo han encerrado en alguna parte para vengarse de mi familia. Estoy seguro.
Tienes razón. Lamento haberlo mencionado.
Ainethach necesita librarse de esos Sangre Argéntea. Después, tal vez podamos seguir trabajando.
¡Otra vez!
Cuando el tiempo lo permitía, Aerin y yo solíamos pasear por los bosques de la Grieta. Los árboles aquí son muy hermosos.
Eso sí, no olvides barrer, Julienne. El suelo tiene una ligera capa de polvo.
Endon, ya lo hemos hablado... ¿Sigues decepcionado con la elección de Cade?
Convéncela de que la hemos encontrado y de que tiene que irse. Llévala a los establos de las afueras de Carrera Blanca.
Pero no, Dovahkiin. Ya no vienen otros a instruirse. Saraan. Tú has sido la primera persona en más de un siglo.
Eso no se puede hacer.
¿Qué sucede, Malborn?
Por el olor, nadie conocido.
Están empezando a ser un problema. Pero no me enviaron a Skyrim a luchar contra dragones.
Aaah... No, nada de especias élficas. Solo un poco de sal para conservar la carne. No temerás un poco de sal, ¿no?
No, no, no, no. Esto no puede estar pasando.
Tengo un antiguo acuerdo con la Hermandad Oscura. Si necesito encargarme de alguien del gremio, lo hacemos nosotros.
Preferiría pasar más tiempo en la mina llevando hierro que hacer el trabajo de una mujer y mantener limpia la casa.
Ahora, volvamos a asuntos más agradables.
Eso es "Fus." Deja que su significado te inunde. Su'um ahrk morah. Empujarás al mundo con más fuerza de la que él ejercerá sobre ti.
Ah, ¿dices en la mansión, durante la tormenta? Je. ¿Qué puedo decir? Ocurrió, tal y como has oído.
Si necesitas algo, ven a verme. Soy tan ingenioso como discreto.
¿Puedo ayudarte?
No olvides echar un vistazo por la tienda si necesitas algo.
Clavé su cabeza en una estaca junto a los restos de la caravana.
Las tropas imperiales se retirarán de Hibernalia, y Kraldar regresará como jarl.
Onmund no se atreve a tratar conmigo directamente y por eso te envía a ti.
¡Voy a buscar a ese ladrón y lo voy a asesinar!
Pues ven a por mí, "hijo de Skyrim". ¡Ven a por mí!
¿Mmm? ¿Qué haces?
Había una vez un extranjero, con ojos de artero, que al hablar no fue certero, pero su mensaje llegó por entero... ¡Canta, dulce Lurbuk, compañero!
Muy bien, pues.
Ha estado bien eso que has hecho por Nurelion, recuperar ese vial para él antes de que muriera. Estaba obsesionado.
Así que enhorabuena, seas quien seas... Has encontrado el Sínodo. Yo solo, rodeado por máquinas furiosas y falmer aún más furiosos.
En tu lengua, esta palabra significa simplemente "Fuego." Es el cambio encarnado. El poder en su manifestación más fundamental.
Es hora de actuar.
¿Que necesitas, mi thane?
¡Larga vida al Sangre de Dragón!
Ah... ya veo. Entonces, permíteme decir que ha sido todo un honor servir a tus órdenes, comandante Maro.
De momento, no se ha confirmado ninguna de las diversas teorías relativas a su naturaleza.
Ya he aceptado pagarle muy generosamente por... bueno, por el objeto en cuestión.
¡Vamos, padre! ¡No puede ser tan peligroso! Son solo... lagartos gigantes. Y seguro que esas escamas y dientes valen una fortuna...
¡Tal vez algún día escriba una canción sobre ti!
Confío en que este sea el principio de una larga y mutuamente beneficiosa amistad.
Pero ya basta de charla. ¡Ven! ¿Por qué no te tomas algo con mis compañeros y conmigo?
No estamos preparados para armar el ataque final.
Hazlo de nuevo y tendré que matarte.
Te ungiré con el símbolo del oso, el gato sable y el mamut. Ve con cuidado, son bestias peligrosas.
Puede que no seas tan débil después de todo. Ahora podrás enfrentarte a un reto de verdad.
¡Oh! ¡Eso no me lo esperaba!
No permanezcas inmóvil para preparar tus ataques envolventes. La dirección en que te desplaces determina el resultado y puede suponer una gran diferencia.
Esa maza... aléjala de mi vista. Llévatela de aquí...
¿Por qué insistes en defender a esa mujer? ¡Lo único que hace con su dinero es gastarlo en esa basura de los elfos oscuros!
Como decía, lo primero que hay que comprender es que la magia, por su propia naturaleza, es volátil y peligrosa.
Es un buen brebaje, pero sigue probando cosas nuevas. La alquimia recompensa a las mentes inquisitivas.
Puedes irte.
Ropajes Radiantes tiene la mejor ropa de toda Skyrim. Así es como conseguimos clientes.
Iiz...
Tenemos todos los mineros que necesitamos, así que espero que no hayas venido a buscar trabajo.
¡Lo!
Puede, pero seguro que no iban a estar tan buenas como un pan de centeno recién horneado.
Espero poder estar esperándote ahí.
¡Pero si es él en persona!
Cuida de tu hermano y él cuidará de ti.
Que Talos vele por ti.
Ve con los dioses.
Compra en la tienda de Belethor si quieres la mejor selección y los mejores precios. Me paga por decir eso.
¡Date la vuelta, caminante! El terror espera dentro de esta niebla.
Un consejo por si montas un narval. Cuidado con el extremo puntiagudo.
Agh...
Está aquí, entre nosotros.
¡Uffff!
Roggvir. Mira que eres tonto.
¿Y si intentas que no te pillen?
Gracias, Madena. Agradezco tu ayuda.
Vaya, uno de los míos. Mi corazón se alegra cuando ve a un hermano bosmer. ¿Necesitas algún artículo de caza? Estaré encantado de vendérselo a alguien de mi raza.
No me casaré con un jefecillo orco sin voluntad. Preferiría unirme a la Legión.
¡Te ofrezco la eternidad!
¡Por los dioses! ¿Qué clase de poder es ese?
Límpialas tú mismo, Kleppr. Tampoco es que hagas nada importante por aquí.
¿En serio? No estoy seguro. No es que no sienta un gran respeto hacia Sithis, hacia la Madre Noche y hacia las tradiciones ancestrales. Las respeto.
Por todo lo sagrado... ¡Eso es un grito! ¡Como los de los Barbas Grises en su montaña!
Tú verás, pero más vale que decidas cómo quieres proceder con este arresto. Nadie sale impune sin más.
Todos los gritos se componen de tres palabras de poder. Al alcanzar el dominio de cada palabra, el grito aumenta de poder.
¿Te interesa el comercio? Ofrecemos mejores servicios que la Compañía del Imperio Oriental.
Sí, estoy de acuerdo contigo. ¿Has tenido noticias de las otras partes de Skyrim?
¡Haz el amor como un tigre o convierte en polvo a tus enemigos como lo haría un gigante! ¡Todo esto podría ser tuyo por tan solo 20 piezas de oro!
Irás al fuerte Páramo Gris.
Silencio, Frodnar. No tenemos tiempo para juegos.
Hemos llegado a la conclusión de que tienes el potencial para sustituir perfectamente a Mercer como líder del gremio de ladrones.
Esta es la posada Viejo Hroldan. Hay camas limpias y bebida fuerte.
Atrás.
¿Un dragón?
No tuvo que forzar la cerradura.
Eres huésped del Colegio y estás aquí a voluntad del archimago. Espero que sepas apreciar la oportunidad.
Espero que ambos sobrevivamos a este día.
Maestro, mira. Es el Vial.
Elenwen se toma muy en serio la organización de estas fiestas, como se puede comprobar.
No se puede decir que haya sido un gran padre la primera vez. Ahora que está aquí, es como una segunda oportunidad. Es un buen chico.
¡Ja, ja, ja, ja! ¡No! ¡Encontrarme, nunca!
Tintero. Piedra. Cubo. Libro. Cuchillo.
Bien. Elimínalos a todos. ¡Mientras quede uno con vida, vendrán a por mí!
Protégete bien... Cómprale una armadura a Grelka.
Si no... llámame Sheogorath, príncipe daédrico de la locura. Encantado.
¡Cómprate una armadura y vive para contarlo!
Mi madre fue una compañera. Y su madre, y todas las mujeres de mi familia hasta los tiempos de Hrotti Espada Negra.
¡Las verduras están crujientes como una mañana de invierno!
Claro, yo solía ser un soldado... pero eso es un juego de niños comparado con picar piedras.
¡Eh, carnaza de trol!
Pero los sangre del dragón son diferentes: se les confiere una capacidad innata para usar la Voz, para gritar como los dragones.
Oh, vaya. Ahora vas a matarme, ¿verdad?
Como dije, ve a hablar con Gabriella. Me ha estado ayudando con tu nuevo contrato. Este asunto del emperador... bueno, afecta a todo el mundo.
Cicerón puede hablar un momento. Solo un momento. Luego tiene que encargarse de su madre y... atenderla.
Grita todo lo que quieras. No voy a cambiar de opinión.
Quiero ser un aventurero, como tú, pero mi padre dice que no puedo.
¡Carne y verduras frescas! ¡Lleváoslas antes de que se acaben!
Encuentra los tres recipientes que hay dentro de Valthume y luego vuelve conmigo. Con ellos podremos derrotarlo.
¡Joyas pertenecientes a la legendaria artesanía argoniana!
Me estoy quedando sin gemas de alma superiores.
Allí abajo hay una especie de taberna, El jarro ajado, donde se reúnen todos los granujas de Riften para emborracharse y apuñalarse.
Deberías tener más cuidado con los hombres, querida.
No es así de simple. Ulfric quiere una Skyrim para los nórdicos. No confía en los que él llama extranjeros.
Hablaré pronto con Ulfric, pero no puedo prometer que cambiará de opinión.
Tu visita es bien recibida, pero debes respetar las normas de la casa del jarl.
¡Qué...! ¿Es que no sabes quién soy yo? ¡Debería hacer que te azotaran!
La Mano de Plata. Al fin se han atrevido a atacar Jorrvaskr. Acabamos con casi todos ellos, pero creo que unos cuantos rezagados consiguieron escapar.
Tuve un gran mentor. Me enseñó todo lo que sé sobre la raíz de nirn y sus extrañas propiedades.
¡Me alegro de verte de una pieza, chico!
Ahora mismo, solo hay silencio. Tal vez más adelante podamos oír una de las palabras perdidas.
Pero en Skyrim hay muchas palabras de poder grabadas en la lengua de los dragones. Incluso desde aquí podemos sentir el Thu'um que resuena en ellas.
Esto... es por la herencia, ¿no? ¡Vale, vale! Te diré dónde la he escondido.
¡Grrr!
Si quieres saber más cosas sobre ellos, puedes consultar el libro que tengo sobre la materia. Creo que está en la mesa.
Sí, Thongvor.
Quiero que le cuentes todos los detalles.
Tienes razón. Esto es culpa mía. ¿Deberíamos dar media vuelta y regresar?
¿Todo dispuesto para tomar el carruaje a la embajada?
Es todo lo que pido. Con tu ayuda, tenemos una oportunidad de mejorar la vida que llevamos aquí. Por eso, te doy las gracias.
Claro. Echa un vistazo. Pero devuélvela pronto. Es casi la hora de la medicina de mi señora.
Lo siento. No tenemos nada de qué hablar. Vex te pondrá las cosas claras.
Cambia la entrada de Arn en el libro por cualquier otra cosa que quieras y se verán obligados a liberarlo tras servir durante unas semanas.
Lo siento, no quería importunarte.
Hasta que no hagas esas fórmulas con los ojos cerrados, nunca estarás a punto para dominar las más difíciles.
Luego añade la crisis de Oblivion, provocada por el uso de la magia, y los problemas con el Dominio de Aldmer, que son elfos y practican la magia.
Ha de haber una manera de activar esas puertas, en el corazón de las ruinas. Toma esta llave. Te abrirá las puertas que hay a ambos lados de esta cámara.
¿Delvin?
No puedo cumplir una orden así por mi cuenta.
Quería pedirte algo... personal... Un favor especial que esperaba que me hicieras.
Habla con Falk cuando tengas el dinero. Y gracias.
Te has ganado con creces el derecho a comprar propiedades y dar el siguiente paso para convertirte en thane.
Aquí huele fatal... El lugar apesta a muerte. No bajes la guardia.
¿Estaba el jarl Ulfric contigo?
Falk dijo que podía contar contigo.
Nos vendría bien contar con alguien con tus habilidades.
No creas que voy a aceptar deudas de bebedores de leche que no conozco.
Lo único que supera mi odio por el Imperio es mi odio por esas brujas elfas que lo manejan.
Sí, cuando enterramos a mi esposo no pude presentar una ofrenda adecuada a Talos.
Daba mucho miedo. ¡Parecía de verdad!
Aquí estamos tan lejos del resto del mundo que esto es casi como no estar en Skyrim.
Cuando enterramos a mi esposo, hice ofrendas a todos los dioses... salvo a Talos.
¡Victoria para Nocturnal!
Falk me ha contado lo que hiciste por nosotros en la cueva Cráneo de Lobo. Dice que eres de fiar.
El emperador sigue en Skyrim, pero no por mucho tiempo. Está a bordo de su barco, el Katariah, que está amarrado a cierta distancia de la costa en la bocana de Soledad. ¡Pero debes darte prisa!
¡No puedes esconderte de mí!
No, necesito un nombre que infunda temor en los corazones de mis enemigos. Cuando tenga enemigos, claro.
Muy bien. Sigamos trabajando así.
No pasa nada. Pero si cambias de opinión, ven a verme.
¡Por las barbas de Ysmir! ¡No sabía que había una fiesta!
La forma más sencilla de definirlo es como "conocimiento", pero no hay nada sencillo en un Pergamino antiguo.
Muy astuto. Ahora que lo pienso, podría... Bueno, no importa.
Por supuesto, señor.
Stendarr protegerá Falkreath hasta que los hijos de Skyrim se alcen.
Oye, ¿no quieres que hagamos el cambio?
¿Cómo te sientes?
Vino de fuera de Markarth. Era casi como si llevara un letrero colgado que dijera "forastera".
Seguro que solicita guarnecer a sus hombres en mi castillo. ¿Cuántas veces tengo que decirle que no?
Nos veremos en las afueras de la ciudad.
No te vayas, por favor. Debes ayudarme.
¡Grrarrgh!
Creo que me gustará vivir aquí.
He oído que Riften cobija lo peor de Skyrim. Espero que no tengamos ningún problema mientras estemos por aquí.
Lo haré, lo haré...
Estás interrumpiendo la actuación.
¿Todo listo para entregarme la Estrella?
Al ayudarme, estás ayudando a las buenas gentes de Carrera Blanca. ¿Cómo podría negarme?
¡Que alguien detenga al intruso!
Me temo que se ha visto obligada a cambiarla, ilustrísima. Sin lugar a dudas, la guerra lo tiene muy ocupado.
¿Te has perdido, visitante?
¡Estás cometiendo un error!
Escucha bien; por si no lo sabes, estamos en guerra. Apenas disponemos de soldados para patrullar las calles, y mucho menos para vigilar cada esquina.
Prefiero no pensar en cómo consiguió mi tío todas las partes del centurión dwemer.
El hacha no es el único objeto que tiene nuestro querido Clavicus.
Clavicus le dio un hacha.
Por supuesto que no. Esa ala ha estado sellada durante cientos de años, y por una buena razón. Dicen que el fantasma de Pelagio el Loco aún la ronda.
Gracias, legada. En el futuro, cuando quiera saber tu opinión, te la pediré.
Una de las bromitas de Clavicus. Un hechicero llamado Sebastian Lort tenía una hija que rendía culto a Hircine.
Tengo buenos artículos, si quieres comprar algo. Dentro hay más.
Hago negocios con las caravanas comerciales, y me he hecho con una serie de objetos de aventureros como tú.
¿Por qué voy a pagar la reparación de algo que acabo de comprar?
Todo es posible, cariño. Pero creo que llevas el éxito dentro.
Recuerdo esa hacha.
Si Ulfric le echa el guante a esa corona, no será un cuento de hadas. Será un problema.
¿Todo esto para matarme, Clavicus?
Eso es. En la Segunda Era, el mismísimo Tiber Septim lideró al ejército que arrebató el Viejo Hroldan a los bárbaros de la Cuenca.
Pero al menos nos hemos hecho con la maldita corona. Bueno, pues...
Espera un momento, tenemos otra opción.
Enemigos y oídos. Hay de ambos por todas partes.
Ya te lo he dicho, me llaman Canto Fúnebre, porque soy lo último que uno oye antes de que lo entierren.
Deberíamos ir a por el hacha.
Me pregunto... ¿qué efecto pueden tener tus hechizos?
No me quejaría si volvieses con un poco de skooma.
¡No puedes quedarte con el anillo! ¡Te comprometiste!
Solo nos ha hablado en contadas ocasiones, y jamás habla con forasteros. Ya el hecho de que se te permita verlo se considera un gran privilegio.
Y aquí estás, hablando con una viuda que aún está en duelo. ¿Por qué? ¿Tan interesante te resulto? ¿O es que tienes otras cosas en mente?
¿Así que no sabes nada sobre esta casa?
¿Te ha comentado Roggi que hemos encontrado una fuga de vapor bajo el andamiaje?
El jarl, Balgruuf el Grande. Es un hombre lo suficientemente honorable. Nunca nos ha perjudicado a los míos o a mí.
Ataf no deja de lanzarme miraditas.
Algo arcano. Muy antiguo y poderoso. ¿Crees que...?
Deberías decirle que mire a otra parte.
Te deseo suerte y que encuentres el verso.
Supongo que no debería sorprenderme, dado el modo en que las cosas funcionan por aquí.
¿Es que no has escuchado nada de lo que te he dicho? ¡Solo tú puedes derrotar por fin a Alduin y evitar el fin del mundo!
Pero siempre hay más cosas que aprender. Creo que ya puedes dar el siguiente paso.
Nadie se fía de esos magos, bien al norte en su Colegio. Solo los dioses saben qué hacen allá arriba.
Toda buena historia tiene nueve partes de verdad y una de ficción.
¿Qué más da quién adora a qué dios muerto? Dame algo que me haga desenvainar la espada.
Aun cuando te estés inventando la historia.
Parece que Galo sospechaba de la fidelidad de Mercer Frey al gremio desde hacía meses.
Alto. Quiero escuchar a Irileth.
Pues lárgate con viento fresco. Tengo cosas mejores que hacer.
Por supuesto. Alduin wahlaan daanii. No te habría ayudado de no pensar lo mismo.
Te doy la bienvenida una vez más a La gamba. Avísame si necesitas cualquier cosa.
Es todo por hoy. Podéis iros.
Si te matan por culpa de esta cosa no es culpa mía, ¿entendido?
Lo único que se necesita es un poco de sentimiento para convertir cualquier canción en un clásico.
No osarán concederle a Ulfric un juicio justo. ¡Traición, por luchar por tu pueblo! Entonces todo Skyrim sabría la verdad.
Se te da la bienvenida a El skeever travieso. Descansa y disfruta del ambiente.
Y como te prometí, mi parte del trato. Espero que te guste.
Te doy la bienvenida al Colegio de Hibernalia. Soy Faralda, una de las hechiceras más veteranas de aquí.
Nunca deberíamos haber sacado esa cosa de Saarthal.
Tu camino te ha llevado al mejor flechero del país.
¿Te ha enviado Harrald para burlarte de mí?
Entra y cierra la puerta.
¿Te asusta la muerte? A mí sí. He oído que todo se detiene... para siempre. Todo se va, pero tú no te das cuenta. No quiero morir.
Maravilloso. Pues habla con los diversos bardos que corren por el mundo, consigue partes de la edda poética y vuelve con ellas.
Le abrió la puerta a Ulfric Capa de la Tormenta. Ulfric llega cabalgando, derrota al rey supremo y Roggvir es el que deja que se marche por donde ha venido.
Oh... Ojalá fuera cierto.
Mañana necesitaré tu ayuda en la cocina.
El problema de Cicerón no es su locura, sino su obsesión por llevar un estilo de vida anticuado y desfasado. Los métodos de la Madre Noche... sencillamente no son los nuestros.
Hasta el Sangre de Dragón traiciona a Skyrim.
Coloca el cristal en el centro de la esfera armilar. Entonces podremos preocuparnos de ajustarlo.
Es parte de mí. Protégelo con tu vida.
¡Por supuesto! Estoy acostumbrada a encargarme de un hogar y de la gente que vive en él.
¿Un estofado envenenado, eh? Yo siempre he sentido cierta debilidad por las manzanas.
Usa la sutileza y la sugestión para hacer que reflexione sobre la guerra. Eres su administrador, él te escuchará.
¡Muy bien! Has recopilado hasta el último verso. No sé cómo darte las gracias. Esto merece una gratificación especial.
Maravilloso. Pronto tendremos completada la última parte de la edda. Sigue trabajando así de bien.
Eh... me lo tomaré como un cumplido.
Pero no es asunto mío a quién quieren ejecutar los imperiales. Especialmente ahora. Lo que quiero saber es qué sucedió exactamente en Helgen.
No se te dan bien estas cosas, ¿no?
Bueno, pues todos se equivocan. ¿Qué tal si te callas un rato?
¿Sabes? El skeever travieso no es solo la mejor posada de Soledad. Es también la única posada de Soledad.
Mientras tanto, me acomodaré en el santuario como en mi casa. Seguro que mi madre necesita... que la atiendan.
¡No me importa! Apártate de los soldados y ocúpate de tus asuntos. Es la única forma de que salgamos adelante en esta situación.
Una comida no es comida sin carne. Ven a probarla.
Pues muy bien.
Toma un poco de vino especiado. El favorito del festival.
Vino especiado. El Colegio invita a la primera.
Vosotros fuisteis quienes combatisteis contra aquellos de los vuestros que no comprendían nuestra causa, contra aquellos que no estaban dispuestos a pagar el precio de nuestra libertad.
Sabrosos dulces azucarados.
Caramelos. ¡Consigue tus caramelos del Festival del Rey Olaf!
¡No dejéis que se acerque!
Solo una botella por cliente. Excepto para el que salvó el festival. Aquí tienes un par de botellas.
Manteneos a cubierto. Por esto hemos venido. Tenemos que ver qué sucede.
Vamos, que no muerdo.
¿Ya no... das... más de ti?
Entonces, estaremos esperando.
Sí, exactamente. Bueno, eso creo. Sin duda, es nuestra mayor esperanza. Los Cuchillas tenían un gran conocimiento akaviri sobre los dragones, pero se ha perdido.
Perdona... Normalmente tengo olfato para estas cosas.
Tienes suerte. Hay una bendición que los Cuchillas utilizaban antes de la batalla. Según dicen, prepara la mente para cazar dragones.
Esa armadura... ¿Has jurado acaso proteger al emperador? No puedo decir que envidie tu trabajo.
Aún necesito ayuda, si tienes tiempo de sobra.
Acuérdate de lo que te digo: si Bolli piensa regalar toda nuestra fortuna a algún indigente, lo dejaré seco.
Me llevaría todo un mes explicarte por qué esa pregunta no tiene ningún sentido.
¿Los otros Cuchillas? No, es mejor no pensar en lo que los Thalmor les hacen a sus víctimas, cariño.
He estado escribiendo algunas notas acerca de todos los diseños akaviri que hemos descubierto. Si la Biblioteca Imperial pudiera ver mi investigación...
¡Espléndido! Por favor, toma asiento en la silla que tengo detrás, ¿quieres?
Sigue sin mí. Necesito estar sola un momento.
Muy bien, muchacha. Ya tenemos estos atuendos... ¿Ahora qué?
Bah. Al diablo, tienes razón.
Agh. ¡Agh!
No cabe duda de que el amanecer comienza contigo. Debes llevar su luz para que todos la vean.
Vamos. Hiciste algo más que sobrevivir todos aquellos años. Tu fuga de los Thalmor sería útil para que los futuros Cuchillas la estudiaran.
Así que Delphine sigue luchando, después de todos estos años.
Tienes sesenta segundos. Adelante.
¿Quiénes son, papá? ¿Adónde van?
¡Proteged al jarl!
Tienes que ir dentro, cachorrito.
Una cara nueva. Y fea de ganas, por cierto. Sin ánimo de ofender.
Como esas llamas se descontrolen, vas a desear que no lo hayan hecho.
Si conoces a leales hijos e hijas de Skyrim, diles que se dirijan a Ventalia. Diles que Ulfric Capa de la Tormenta quiere verles.
(Ataque de tos) Uuughhnnn...
Hemming, ¿has enviado la carta que te di ayer?
Cierto... Aunque no pienso ser la única que intente plantarle cara.
Uuuuhhhnnnn... me duele...
Me alegro de que Eola te haya invitado a cenar.
¿Buscas a Falion? ¿Por qué no vas a molestar a esos magos a su Colegio de Hibernalia y dejas tranquilo a mi hermano?
Un lugar así tiene mucha historia. Seguro que estas paredes podrían contarnos cosas sorprendentes.
Señor...
¡En el puente!
No me gustan los vagos, si es eso lo que has venido a hacer aquí.
Archimago, el Sínodo ha vuelto a contactar con nosotros, y nos ha preguntado si sabíamos algo de sus investigadores. ¿Qué les digo?
Más vale que el Léxico merezca la pena.
En este día, nuestro enemigo conocerá el alcance de nuestra determinación, la verdadera profundidad de nuestra ira y la exaltada rectitud de nuestra causa.
Ha habido algún tipo de malentendido. Es evidente que yo no debería estar aquí. Simplemente debería retirarme.
¡Somos los hijos e hijas de Skyrim!
Y todos ellos te ven a ti. Has honrado el nombre de los Compañeros. No lo olvidaremos fácilmente.
¡Pero no! ¡Somos granjeros! ¡Somos obreros! ¡Somos los hijos e hijas de los tenderos, camareras y soldados!
Vamos. Querrás aparecer en Sovngarde renovada. Tienes una eternidad de diversión por delante.
Echa un vistazo.
¡Estás mal de la cabeza! ¿Cómo te atreves a hacer esa acusación?
Los dioses observan. Los espíritus de nuestros antepasados se revuelven. Y los hombres bajo soles aún por amanecer se verán transformados por lo que hagamos aquí hoy.
Pero mis agentes me informan de que Galmar está completamente convencido de que Korvanjund es la tumba del rey Borgas.
Y ese día, confiscaremos la ciudad y restableceremos el estado de derecho en este territorio.
Eso no ha cambiado, ¿verdad? Entonces díselo de nuevo.
Cualquier rey que no reconozca al emperador un día se encontrará con la Legión apostada a sus puertas.
¿Vienes a mirar con la boca abierta al monstruo?
Este es el mensaje.
El emperador estará prestando mucha atención a lo que suceda hoy aquí. Los hombres que se distingan serán recompensados.
Una vez más, con esto concluye tu suspensión. Por favor, intenta controlarte.
Solo treinta más y será para ti. ¿Quién es la afortunada, si puedo preguntar?
No lo sé, pero nadie la ha atravesado.
Ve y dile a Erik que he cambiado de opinión. Buscaré en Carrera Blanca la forma de pedir dinero prestado para pagar la armadura.
¡No te vanaglories antes de tiempo, sabandija!
No me amenaces, muchacho. O eres nórdico y respetas nuestras tradiciones, o no lo eres.
Parece que ya puedes prestar el juramento.
¿Deseas renunciar a todos los derechos y títulos de tu vida anterior? ¿A vivir aquí y dedicar tu vida a proteger Tamriel de cualquier peligro?
Somos una aldea pequeña, pero trabajamos duro y cuidamos de los nuestros.
No hace falta. No es que sea amigo mío ni nada parecido. Cálmate.
Eh, tú. El Sangre de Dragón quiere darte la oportunidad de unirte a los guardianes perdidos de Tamriel. Los matadragones. Los Cuchillas.
La cosa está tranquila, Sangre de Dragón. Tal vez más tarde encontremos dónde se oculta alguna de esas serpientes.
¿Confío en él? Ni en lo más mínimo.
Solo tú puedes derrotar de verdad a esos monstruos, Sangre de Dragón, pero no por eso debes hacerlo solo. Los Cuchillas pueden ayudarte.
Sería un honor, pero tengo trabajo que hacer en las minas.
¡Muere, como los orcos inmundos!
¿Ciudadano?
Buena suerte, Sangre de Dragón.
Entonces, avísame cuando lo estés.
Siempre es un placer conocer a un futuro bardo.
Es como si tuviéramos encima una montaña entera de roca.
Cuando gritas, hablas en la lengua de los dragones. Por ello, tu Sangre de Dragón te otorga una capacidad innata para aprender las palabras de poder.
¿Quieres un buen trozo de venado o de cordero? Pues claro que sí.
Bueno, hay un chico que...
¡Y te pisotearán hasta matarte!
¡Nunca debí aceptar este trabajo!
Y que tú sabías dónde conseguir más. ¡Vamos a por una!
Lo siento, pero no voy a comprar nada hasta que no arregles esto con Vex.
Creo que voy a pedirme otro trago.
Se te da la bienvenida a nuestra pequeña familia. Soy una de las guardias del gremio. Le cubro la espalda a Delvin.
Si te gusta tanto el aguamiel, ¿por qué no te vas a vivir a Riften?
Las hachas sirven para cortar más cosas aparte de madera, ¿sabes?
¿Oportunidades para qué?
Asegúrate de que los documentos falsificados llegan a manos del legado de Morthal. Así se harán una idea falsa... y nosotros tomaremos ventaja.
Dame un momento mientras hago unas, ejem, "correcciones" en estos informes... Vamos allá.
La discreción está sobrevalorada, ¿eh?
Ah, qué delicia. Otro encantador cliente...
Bien, bien. Estos trabajos no son los más gloriosos, pero están bien pagados.
Cuidado. Los espíritus pueden hablar con los vivos si tienen una conexión intensa.
Sin embargo, no puedo celebrar su caída. Zu'u tiiraaz ahst ok mah. En otro tiempo, fue mi hermano. El mundo no volverá a ser el mismo.
Asegúrate de que esos documentos falsificados llegan a manos del comandante Capa de la Tormenta en Lucero del Alba. Lo alejarán de nuestra pista y podremos maniobrar con mayor libertad.
Este asunto requerirá sigilo y discreción. Los guardias del jarl actuarán con contundencia contra cualquiera que hurgue en las dependencias privadas del administrador.
¿Una inversión? Muy bien, no veo por qué no.
Entrega esta hacha a Balgruuf el Grande.
Estuvo aquí, pero se fue. Si sales ahora, seguro que lo alcanzas.
Está en la posada. Echa un vistazo. Seguro que lo encuentras.
¿Sí? Bueno, eso es diferente.
Ha llegado a mi conocimiento que un miembro de los más brillantes de la Mano de Plata ha estado curioseando por el Pálido.
Os aconsejo que os fiéis más de la fuerza de vuestra espada que de los cuentos y leyendas.
Aunque, lo creas o no, algunos rumores afirman que hay un arma que haría que hasta el Brillo de los Antiguos levantase sus raíces, más por miedo que por respeto.
¡Déjame salir, maldita sea! ¡No soy una criminal!
No soy el amo de nadie, Vilkas. Y la última vez que lo comprobé teníamos catres libres en Jorrvaskr para los corazones ardientes.
Un ladrón hizo que la piedra se desprendiera de la corona ceremonial de Barenziah para despistar.
Cuando te decidas, ve a buscarme allí y hablaremos sobre tu futuro.
Ah, Avento Aretino. Lo mandaron aquí cuando murió su madre, pero se escapó.
Regresa cuando hayas derrotado al skeever, al lobo y al cangrejo guardianes.
Karliah, ¿cuándo aprenderás que no se me puede coger por sorpresa?
¿Qué necesitas saber? Está en el templo. Tú la sacas de ahí, me la traes y te pago. Venga, en marcha.
No, no he visto a nadie.
¿Eh? ¿Es que tú también ibas tras ella? En ese caso no me interpondré en tu camino. Tienes mi palabra.
¿Cómo estás de tan buen humor en este infierno?
Espero que algún día lleguemos a conocernos mejor.
¿Has oído todos esos rumores sobre una guerra? Espero que nunca llegue aquí.
Como parte de los Ruiseñores, he jurado guardar en secreto lo relativo al sepulcro.
¿Y bien, Sangre de Dragón? ¿Qué me dices? ¿Aceptas el honor?
Soy el espíritu de la caza, un mero aspecto del glorioso acechador que tu especie llama Hircine.
Es un orgullo tener una pareja con quien compartir mis bendiciones.
Así es, y si te cuentas entre sus alumnos, tú también compartes su culpa.
¡Déjate de cariños! ¡No hace ni una hora que dejé un cuenco de polvo de vampiro sobre mi mesa de trabajo, limpias tú y ya no está!
Se sientan ahí, en sus torres, y solo los dioses saben lo que hacen. ¿Y quién los vigila a ellos?
Mira a tu alrededor. Hibernalia se halla en este estado por culpa de esos condenados magos.
Eh, he encontrado una corona en este cadáver. ¿Es la que estamos buscando?
Hecho. Ahora sigue tu camino, antes de que me meta en un lío.
Ahora sal de aquí y no vuelvas hasta que tengas los bolsillos llenos.
Gracias por la oferta, Jouane, pero estoy ahorrando para una espada nueva.
En cuanto entremos, todo quedará claro.
¡Maravilloso! ¡Esto complacerá a mi señora Mara!
Con Ulfric muerto y los Capas de la Tormenta en desbandada, ¿quién será el valiente que abandere la causa de Talos?
Por aquí... La librería no está lejos.
¿Familias destrozadas?
Supongo que el Imperio va a necesitar hierro en abundancia con todos esos combates. Creo que eso será bueno para nosotros.
Prometo que responderé a todas tus preguntas. Sígueme.
¿Qué? ¿Ves a un hombre caído en desgracia y ya das por hecho que siempre ha estado así?
Espera, ¿qué?
El Letargo tendría que estar en una botella alta con un líquido oscuro. Si lo encuentras, tráemelo.
Ah, ¿quieres protección? Puedo conseguirte lo que necesitas.
Por aquí, hija mía.
No en mi contra. En contra de toda Falkreath. Esos imperiales nos están espiando a todos.
Mi hermano Anoriath y yo nos lo inventamos una noche tras consumir... demasiada aguamiel.
Deberíamos cavar un gran agujero, tirar dentro a todos los elfos oscuros y a los argonianos, y dejar que se destrocen unos a otros.
Algún día tendrás que tomar una decisión. Y espero que sea la correcta, hermano.
No te dejes engañar por mi apariencia. Tengo más años que tú. Muchos más. Es lo que pasa cuando un vampiro muerde a una niña de diez años.
Por aquí, hijo mío.
¿Y qué sugiere, si no, mi impetuosa thane Bryling?
¡Maldito seas, Mercer!
¡Agh! ¡Canalla!
Me parece que han pasado... años, pero quizá todavía puedas encontrarlo.
¡Eso estaría bien! Podría usarla para romper otras rocas. Sería más fácil el trabajo en la mina.
A ver si acierto... ¿dicen que es por los problemas que les dan los Capas de la Tormenta?
Bien, adelante.
No puedo comprender por qué Jorn quiere unirse a la Legión Imperial. Los soldados solo saben apreciar una cosa, y no es la música.
Matar a Gayo Maro en una ciudad no será fácil, sobre todo por sus guardias, pero las peleas, e incluso los asesinatos, son bastante habituales.
Mira allí. Son ruinas de los enanos.
¿Quieres tomar algo?
La Estrella es libre de purificarse. No te preocupes, mortal. Te devolveré cuando te hayas limpiado.
¡Que alguien me ayude!
Hrmph. Es el colmo del aburrimiento. Supongo que tendré que buscar entretenimiento en otra parte.
Solo hacerle daño. No quiero una muerte sobre mi conciencia. Si te pillan, yo no sé nada.
Al menos Sabjorn ha acabado en la prisión de Carrera Blanca. Qué mala suerte ha tenido.
Nunca se sabe lo que puedes encontrar tirado en un cajón o en un barril. La gente tira en ellos las cosas más curiosas.
No sigas.
Yo muy bien. ¿Y cómo van las cosas por los establos? ¿El viejo Hofgrir te agobia mucho?
Has venido a la ciudad equivocada, pues. Ventalia es un nido de prejuicios y mentes estrechas, indigna de alguien como tú.
Quédatelo. No merece la pena ir a la cárcel por eso.
Mis órdenes son decirle a la gentuza que use la puerta norte. Eso es todo.
Ventalia ha sido ingrata con los míos. Pero pronto cambiará nuestra suerte, y tendremos comida y un techo bajo el que cobijarnos.
Alto, depón las armas.
Una buena casa. Has elegido bien. No me gusta quedarme quieta, así que he decidido abrir una tienda. Comprar y vender lo que se necesite.
Somos el único templo de Skyrim que adora abiertamente a Talos.
Abre los ojos, Harrald. Se avecina una tormenta y va a desatar toda su furia sobre nosotros. Es hora de elegir un bando.
No podía dejar que fuera corriendo a los brazos de ese farsante de Eorlund Melena Gris, ¿verdad?
Ya no tenemos viajeros de Elsweyr ni de Páramo del Martillo, Endon. Ahora solo los nativos y los nórdicos se quedan en Markarth.
¡Yyyyyeeeaaaaahhhhhh!
Si quieres entrar, tendrás que cooperar.
Bien. Consíguelo, soldado.
Esto me da mala espina.
¿Te has decidido ya a pagar el impuesto para visitantes?
Ahora sí que me estás cabreando.
En mis tiempos, los Cuchillas protegían al emperador. Parece que esos Penitus Oculatus van a resultar tan incompetentes como ellos.
¿Dices que lo has encontrado en Hjerim? Allí vivía Friga. Echemos un vistazo por ahí.
¿No te das cuenta? He sido yo. Te tendí una trampa, quería que murieses. Te he traicionado a ti, a la Madre Noche... a todo lo que amo. Y ahora Maro me ha traicionado a mí.
Ha sido un placer hacer negocios contigo. Dame un instante para abrir las puertas y podrás pasar a la ciudad.
Por favor, hermano, no seas tan engreído. Sé que te importa un bledo quién gana o pierde la guerra.
Llamo a los dominios de Oblivion. El hogar de los que no son nuestros ancestros. ¡Responded a mi llamada!
No tienes consideración, pavoneándote con el arma a la vista, amenazando a todo el mundo...
He establecido intercambios con Tonilia en el gremio de Riften, y eso ha demostrado ser muy rentable.
Cuando te hayas labrado una reputación, Skjor y Vilkas podrían tener más tareas para ti.
¿Y cuánto cuesta?
Ah, puedes haberme complacido a mí, pero sin duda has complacido a la Madre Noche. Y nuestra madre nunca lo olvidará.
Cumple con esta tarea y estarás más cerca de conseguir un título en Riften.
He conocido a los daedra y a los dwemer, y todo lo que existe entre unos y otros, y sé lo suficiente para ver un vampiro donde los demás verían un humano.
Si un hombre tiene tiempo para quejarse, también tiene tiempo para trabajar.
No quieres entrar, ¿eh? Perfecto. Disfruta de tu paseo hasta la siguiente ciudad.
Esto es Paraje de Rorik, un lugar tranquilo y con buena gente. Encontrarás alojamiento y bebida en la posada La fruta gélida si lo deseas.
Mira cómo descubriste mi pequeño chanchullo en la puerta norte. Sabías que era un timo y te la jugaste con él. De eso es de lo que hablo.
Él me trajo aquí, y comprendí... que en realidad había vuelto a casa.
Creo que requeriremos una donación de 500 monedas de oro por tu parte, para dejar correr este asunto.
¡Tienes una voz poderosa!
Estoy por coger un pico y comenzar a cavar. Nunca se sabe qué se puede encontrar uno.
Sí, si alguien apagase el fuego del faro y luego se reuniese conmigo en los muelles... Seguro que podría indicarle cómo llegar hasta ese gran botín.
Le dijeron que se encargara de estafar a los mercaderes, pero olió el oro que llevabas y perdió el juicio.
Mantuviste la calma y no lo mataste. Esa es la marca de los ladrones profesionales.
Cuidado con las trampas. Si divisas alguna, intenta que un enemigo la active.
Matarlo fue un poco... impulsivo.
Ah, se te ve el cansancio en la cara. Ven, ¡compartamos una botella de aguamiel de la destilería Amielada!
¡Kyne! Mujer-guerrera bendita. Viuda de Shor, sagrada para todo auténtico cazador nórdico. Es la madre de hombres y bestias, y su velo es la tormenta.
Esos aduladores del templo la llamarían Kynareth. Solo una tenue sombra de la verdad, como todos los Divinos del templo.
¡Crecí escuchando canciones sobre Eyldi la Osa! ¡Luchó con una tormenta hasta que la echó del cielo!
Sangre de Dragón, ¿qué necesitas?
¡Seguid disparando!
Nos acercamos. Cuidado... Su líder es peligroso.
El patrón Mar Cruel a veces viene y trabaja en los campos. No creo que a la patrona le guste, pero no vendrá aquí fuera a buscarle.
Olvídate de Hroggar. Últimamente siempre está cansado. Necesito a alguien con un poco de fuego en la sangre.
Sí... Vamos a esperar un poco más. Y entonces...
Yamarz ha caído. Ahora recae sobre ti la misión de devolver el martillo del gigante a Atub.
Nos iba muy bien, con dinero de sobra, una mansión enorme... e incluso tenía una prometida, una joven encantadora.
En marcha, entonces.
Hasta que nos volvamos a ver, chica.
Ya tengo la alianza dorada, pero necesito tres amatistas perfectas para completarla.
Vamos corriendo al templo antes de que los Renegados vuelvan a encontrarme.
Hasta que nos volvamos a ver, chico.
Vuelve a verme si algún día necesitas que te enseñe a robar.
Si necesitas que te enseñe más sobre el arte de robar, tú dímelo.
Ven a verme si necesitas más prácticas de puntería.
Falkreath volverá a estar bajo control imperial, bajo la autoridad del jarl Siddgeir.
Ulfric. Para.
Sorli y yo solo estamos aquí para asegurarnos de que la mina funciona bien.
Una buena observación, viejo amigo.
Me ha bajado un poco la fiebre, y casi puedo pensar con claridad.
Si necesitas practicar más con el arco, ven a verme.
Se llama alianza de Tejedor Nocturno. La llevé durante años, y ahora quiero que la tengas tú. Te dará ese "empuje" tan necesario de magia y discreción.
Quizás nos veamos en el gremio.
Espero que volvamos a encontrarnos de nuevo.
Estoy seguro de que volveremos a hablar.
En otra ocasión, quizá.
No vamos a sobrevivir, ¿verdad?
Claro que sí. Y lo haría de nuevo.
Ve a buscar pelea.
¡Para ya! No quiero que me violen... ¡lanzadores de hechizos de tres al cuarto!
Vas a por algo de vino, ¿eh? Tómate un trago a mi salud.
Buena suerte con tu próximo trabajo.
No te des prisa en volver. No te voy a estar esperando.
La única forma de que este gremio pueda seguir creciendo es que aceptes trabajo extra.
Ro fus... tal vez tú simplemente estés compensando las fuerzas que se afanan en precipitar el final de este mundo.
¡Eso daría para una conversación fascinante!
¿Qué te pasa? ¿Tienes miedo de ensuciarte las manos?
¿Y por qué no? Soy guapo, fuerte e inteligente. ¿Qué más podrías necesitar?
Dovahkiin.
...el miasma ... ¡Siguen aquí! ¡Detenedlos!
Eh, este gremio necesita el dinero... Rechazar trabajos no te va a hacer popular por aquí.
Si buscas pociones, creo que puedo ayudarte.
¡No permitáis que avisen a los demás!
¿Puedo darte un pequeño consejo? Acepta todos los trabajos que puedas o acabarás pidiendo limosna.
¿Cómo te encuentras? Creo que hoy tienes alguna enfermedad.
Te recuerdo... Tú estabas con nosotros en Helgen... He oído que recobraste la razón y elegiste el bando correcto. ¡Te doy la bienvenida a la Legión!
No hay más remedio.
Nocturnal me envía al Ocaso Eterno. Mi contrato se ha cumplido.
No importa si están en la ciudad. Si los combatimos donde viven, no tendremos que hacerlo aquí.
No olvides que representas al gremio. No cometas ninguna estupidez.
No metas la pata con esto.
Lo que se desconoce puede provocar malestar, incluso miedo. Es de esperar que lo haya.
Ayer Torsten me echó otro sermón.
Recuerda las reglas... Con limpieza y en silencio. Aquí están los detalles.
Oye, ¿dónde crees que vas? Tenemos trabajo que hacer.
Vamos, acepta otro trabajo para que ambos salgamos ganando.
Largarte sin terminar un trabajo es como ver un monedero abultado encima de una mesa y dejarlo pasar.
Oye, me queda mucho trabajo que hacer aquí.
No te rindas ahora... Hay un montón de botín ahí fuera esperándonos.
¿Vas a ir a verlo? Le saludarás de mi parte, ¿eh?
Has cometido crímenes contra Skyrim y su pueblo. ¿Qué tienes que alegar en tu defensa?
No quiero un rastro de cadáveres hasta aquí. No hagas tonterías.
Si te arrestan, es tu problema.
Que no muera nadie. No lo olvides. No somos asesinos.
¡Déjales claro a esos ladrones lo que les pasa a los que roban a Lucano Valerio!
No hay nadie que pueda interponerse en mi camino.
Tus bolsillos se ven un tanto ligeros, chico.
Busca lo que quede del cadáver de Potema, probablemente su esqueleto. Sácalo de las catacumbas y tráelo para que lo santifiquemos ante Arkay.
No tanto como para preocuparse por ello. La actitud del archimago Aren es la de dejar que estas cosas se arreglen solas.
En Hibernalia. El Colegio de Hibernalia es lo que buscas. Allí enseñan a bastante gente.
¿Hay alguien ahí? ¿No hay nadie?
Habla con Galmar. Vas a acompañarle en una misión.
¿Estás ciega, chica? Me dedico a la herrería. Hasta un imbécil puede verlo.
¿A qué esperas? ¡Sube por las escaleras!
Vex me dijo que huyese, así que eso fue lo que hice. La mitad vino tras de mí, la otra mitad la persiguió a ella.
Eres valiente. Balaan hokoron. Tu derrota me llena de honor.
Cobarde. Eres basura. ¡Basura!
En cuanto a mí... corrí... y corrí... atravesé las puertas de Ventalia y volví a Riften.
Sí. Gayo Maro, siguiendo órdenes de su padre, preparó hace meses la llegada del Gastrónomo a Skyrim para que se convirtiese en el chef personal del emperador.
¿Estás de broma? Vex los despistó en cuestión de segundos... en cuanto se mete entre las sombras, desaparece.
Antes encontré algo. Toma, para ti. Creo que te gustará.
Pronto será hora de reabastecernos de agua.
Aprecio el gesto, pero preferiría no estar en deuda con alguien que no conozco.
Vex me estaba esperando en El jarro, cuando entré... empapado en sudor. Todos me miraron y se rieron.
¡El equipaje! ¿Dónde lo habré dejado?
Procura no prenderle fuego a nada.
Así que así es como me gané el nombre. No se lo cuentes a nadie.
¿La Dama Oscura te envía? Ja. Ahora cuéntame el chiste del trol que les hace regalos a los niños buenos.
¿Tengo pinta de poder moverme? Antes tendrás que desatarme.
¡Oye, tú! Mira lo que hemos encontrado mi camarada y yo. ¡Te puedo vender un poco si quieres!
¿No entienden que me utilizaron? ¿Que yo también lloraba la pérdida de Friga? No... Me trataron como a basura y se libraron de mí.
Yo solo soy quien cocina, chica.
Porque me aburría. Cada día la misma rutina de siempre: trabajar en la bodega, compromisos sociales, fiestas que no le importaban a nadie...
Moldea mundos, crea y destruye la vida... Merece que la respeten y estudien como es debido.
Ganaba bastante dinero, pero eso me daba igual. No lo necesitaba realmente... Iba con ellos porque me estimulaba, me servía para sentirme vivo.
Cuando estés allí, ofrécete como sacrificio.
Paraje de Rorik es una aldea bastante agradable, pero es un destino de lo más tedioso para un guardia. Si atacase un dragón... bueno, sería otra historia.
Zah... ¡Frul!
Oh, bueno, hace poco hablé con Sibbi Espino Negro para comprarle a Escarcha, uno de los mejores caballos de cría de Skyrim. Dijo que me lo vendería.
¿Y sabes qué? A pesar de lo que dejé atrás, no me arrepiento en absoluto.
Sí, pero mi honor me obliga a permanecer aquí.
Acabé en Skyrim gracias a un contacto que hice cuando estaba con los Mediaslunas... El buen Delvin.
¿Qué más te da? No es que seamos familia. Esto es un negocio.
Mira, la verdad es que no te conozco. Ni siquiera conozco a nadie por aquí.
Tienes ese fuego bajo control... ¿no?
Solo quiero encontrar un buen esposo y empezar mi propia familia.
Esto me parece una pésima idea.
Ser propietario de una granja tiene sus ventajas.
Ha sido el combate más espeluznante en el que he estado, y han sido unos cuantos.
Ese viaje que hiciste a Cruce de Agua Oscura nos fue de mucha ayuda. Gracias.
¡Te doy la bienvenida! Acabamos de empezar. Por favor, quédate y presta atención.
Los Thalmor ven nuestra orden como una amenaza porque tenemos poder y no permitimos que nos controlen.
¡Eso es! ¡Aguantad como sea! ¡No cedáis terreno!
Una lástima. Tal vez en otra ocasión.
Oh, espera... la cosa mejora.
Mis padres no dan su brazo a torcer.
No te pienses que te vamos a dar un trato especial solo por tener una casa en la ciudad...
Adiós. Ten los ojos abiertos y camina con las sombras.
Entonces la decisión de este Círculo está tomada.
Da miedo pensar que esos botarates disponen de un ejército de armas élficas. Demos gracias de que están a medio mundo de distancia, ¿eh?
¿Podrías ayudarme con la demostración? ¿Conoces bien los hechizos de custodia?
¿Has venido a reírte de la cuidadora de tumbas?
¿Mi chico va a crecer sin una madre? ¿Qué clase de vida es esa? No está bien, te lo digo yo.
Tenemos una visita inesperada.
Así que esta es mi triste historia. ¿Qué opinas?
Nunca volví a esa granja de cerdos. Allí ya no hay nada para mí.
Quizás algún día, pero hoy no.
Se suponía que la pluma me iba a permitir duplicar al detalle cualquier escrito que tuviera delante.
Marchamos para combatir en la guerra y esa escoria llegó y se hizo con el lugar. Mi familia está ahí dentro.
Pero no, a ti te basta con recoger las migajas que caen de la mesa del emperador. Bien, toma mi casa. Toma mi ciudad. Ojalá veas todo arder ante ti.
El fuerte Hraggstad es una de las pocas que permanece casi intacta.
¿Qué? ¿Por qué? No lo comprendo... No te he hecho nada malo. ¡Piedad, por favor!
¿No te has enterado? Nadie en Lucero del Alba consigue dormir bien últimamente.
No. No lo es, créeme.
No quiero decir que me estuviera ganando la vida de forma honrada.
En cualquier caso, la clave es fugarse, y ahí es donde es útil mi habilidad.
Bueno, no sé muy bien cómo se las arreglan, pero lo hacen. No tienen líderes desde Ysgramor.
He hecho trabajos para el gremio de ladrones y para la Hermandad Oscura, pero las cosas no salieron como yo planeaba, así que voy por mi cuenta.
Vamos a brindar por nuestra juventud, y por nuestro futuro de sosiego y quietud
Continuará sembrando el caos y la discordia donde quiera que pueda.
Después de aquello, me prometí que no volvería a hacerlo.
La última fuga que intenté fracasó. Me encerraron en Roca Alta durante tres años y luego me soltaron.
Tu equipo está en ese cofre. Cerraré la puerta cuando entres. No la fastidies.
Regresemos al Salón de los Elementos, donde se reúnen la mayoría de los miembros para lecciones y sesiones de estudio.
Si curas mis cicatrices, vamos a tener problemas...
He visto esto y he pensado en ti. Con alguien que lo mereciera menos sería un desperdicio. Espero que te guste.
Ahora no se te olvidará decirle a Mercer que he cooperado, ¿verdad?
Toda la comida que pudiera comer, el vino que pudiera beber y las mujeres con las que me pudiera acostar.
No me malinterpretes. Los primeros años con ese clan fueron los mejores de mi vida.
Te doy la bienvenida a Soledad. El hogar de las artes en Skyrim.
Entonces... ¡hay esperanza! ¡Los dioses no nos han abandonado! Debemos... debemos...
La presa es fuerte. Más fuerte que los cazadores.
Si vuelves a intentar herirme, quizás tenga que matarte.
¿Y eso te supone un problema? Háblalo con Madanach. Seguro que al rey harapiento y a sus Renegados les encantaría conocerte.
¡Soy demasiado veloz para ti!
Nos machacamos unos a otros, y cuando todo acabó, los que quedábamos con vida nos fuimos cada uno por nuestro lado.
Por suerte, tenía amigos en el clan que se pusieron de mi parte.
No, normalmente los dejábamos libres. Yo me negué, y Garthek ordenó al clan matarme a mí también.
Tienes razón, cierto. Puede que el tipo esté mal de la cabeza, puede que no. Pero necesita ayuda, y yo lo he echado. ¿Qué clase de hombre soy, mmm?
Nunca supe qué fue de los supervivientes del clan. Supongo que continuaron con sus vidas, igual que yo.
Rápido, si no te importa. Estoy muy liada con recados para el malnacido de mi hermano...
Todos tenemos aptitudes latentes, el potencial de llevar un gran poder, guardadas a buen recaudo en nuestra mente.
¿De dónde has salido?
¿Recuerdas nuestras lecciones de los maestros de esgrima de Alcaire? Déjame mostrarte unas cuantas cosas que tal vez hayas olvidado antes de que dejemos Hroldan.
Sí. Y da bastante miedo.
Como todos, ¿no?
Adelante, prepara la ceremonia de matrimonio cuando te parezca.
Puedo cuidar de mí yo sola.
Y en mi trabajo, a las manos extras se las paga bien.
Así que no te bastaba con llamar la atención con eso del Ojo, sino que... ¿ahora buscas al augur?
Nadie lo sabe. Incluso llevé aquella dichosa piedra al Colegio de Hibernalia.
Eso está mejor. Ahora podemos hablar.
Pero si no es así... si realmente tienen un significado, quizá averigüe de dónde procedo... en qué barco viajaba. Todo.
Puede ser. Tal vez sea un galimatías, garabatos sin sentido tallados por puro aburrimiento.
Gracias, Aia. Significa mucho para mí.
... le dije que me entregara el oro, ¿pero me hizo caso? Oh, no... siempre tienen que resistirse...
Bah, no te preocupes por mí. Me gusta el desafío.
Ah. Esto es lo que andábamos buscando.
Te lo agradezco.
Me temo que tenemos poca asistencia. Hay muy pocos parroquianos que vengan a vernos. ¿Crees que la guerra habrá debilitado su fe?
Que Azura te bendiga.
Es una historia un tanto divertida.
Para qué iba a necesitar yo... ah. ¡Oh! ¡Guardias! ¡Guardias, necesito ayuda!
Tú mantienes la boca cerrada y yo te pago generosamente.
Aaah, ya veo. Creo que sé lo que me dices. Ahora mismo no tengo nada parecido, pero mi Eorlund puede fabricarte uno enseguida.
Por lo que a mí respecta, solo te he ocultado aquello que creía que no estabas en disposición de saber. Y veo que, por tu pregunta, estaba en lo cierto.
Juntos, acabamos con ellos enseguida y el último se alejó cojeando, lamiéndose las heridas.
Bueno, en realidad había ocho de ellos y ella ya había liquidado a tres para cuando me uní a la pelea.
Muy bien, a ver si encontramos una manera de salir.
Aunque tuviéramos un preso que respondiera a ese nombre, solo lo liberaríamos por orden de la Legión Imperial.
Luchamos durante un rato, nos rompimos las armas mutuamente y, finalmente, caímos exhaustos al suelo.
En realidad, fue entonces cuando me pidió educadamente que le diera la bolsa con mi dinero. ¿Te lo imaginas?
Señor.
¡Raaarr!
Tras unos minutos, me miró fijamente a los ojos y me preguntó si quería unirme al gremio. Así, sin pedir disculpas.
Te lo aseguro, no querría tener que volver a enfrentarme a Vex, pero ciertamente no me importaría una pequeña escaramuza...
Algo me decía que no lo lamentaría. Había oído que el gremio se había recuperado y que controlaba la mayor parte de Skyrim.
Algún día, un galante héroe aparecerá a lomos de su corcel y me llevará con él. Algún día...
Solía ser miembro del Morag Tong.
Si puedes ver tu destino con claridad, tu vista es más aguda que la mía.
Bien. Preferiría usar agua para enfriar el metal, pero así lo quiere el jarl.
Toma esto. Lo necesitarás. Úsalo en la isla y no lo pierdas. Es toda la ayuda que recibirás.
¿Dónde tengo la cabeza? Ni siquiera te he dado la bienvenida como está mandado.
Me temo que la naturaleza exacta de mi investigación es un secreto, pero es realmente muy valiosa.
¡Ah, no!
Solo los valientes y los locos se acercan a un jarl sin haber sido requeridos...
¡Oh, gracias, jefe mío!
Si ellos actuaban en las sombras, nosotros actuábamos en el lado de la justicia.
Ya sabes, hay noches en que cierro los ojos y veo todo el campo de batalla frente a mí, como si siguiera allí...
Mi familia es dueña de Baldío de Karth. Es raro para alguien de la Cuenca que no es nórdico.
Yo no regateo. Si buscas un precio más bajo, vete a otro sitio.
No tuve elección. Cuando la Montaña Roja entró en erupción en Morrowind, el Tong huyó... dispersándose a los nueve vientos.
Arre, caballo.
Pregúntame con total libertad. El Palacio Azul es un foro abierto.
Era un gran líder guerrero de los antiguos nórdicos, un maestro de la Voz, o Lengua.
¡Es como si ya hubieras muerto!
Si vas a viajar por la Cuenca sin acompañantes, necesitarás una armadura gruesa.
Eh, lo siento. Claro. Después de todo, es tu receta más famosa.
Aunque no hablen mucho de ello, la gente tiene opiniones muy radicales sobre el Colegio y los que estudian aquí.
¡Reclamo la gloria de tu derrota, Dovahkiin!
Tienes que matar al emperador. Al maldito emperador. Mejor será que disfrutes de esta ocasión. Nos lo debes. Así que haz que sea sangriento, doloroso... y espectacular.
Eso espero. La Hermandad Oscura también es famosa por inscribir contratos contra los que se asocian con el Morag Tong.
La sangre de bestia me ha otorgado poder, pero ahora habré de entregar mi alma a Hircine cuando muera.
¡Has vuelto! Te he preparado unas cuantas sorpresas.
Sabía que este día acabaría por llegar.
¿Te aburre? Esa comida lo paga todo. Si perdemos una sola cosecha, nos moriremos de hambre o tendremos que mendigar. ¡No lo permitiré!
El skooma me lo vende Sarthis Idren. Ha montado una especie de tinglado en el almacén de Riften.
La muerte es el momento de dormir para siempre en el Vacío.
¿Raíz de nirn carmesí? Sabía que esa variante existía, pero no pensé que pudiera llegar a verla.
¡Incorrecto!
Aunque... ¡muchos de vosotros ya la tenéis! Pero, de nuevo... hablo en sentido figurado, ¡claro está!
¡Por supuesto! Ahí es donde mi mentor, Sinderion, me dijo que iba a hacer su investigación de campo.
Soy el sobrino de Calcelmo. Lo ayudo con el laboratorio.
Bajemos. Tenemos que hacer algo.
"La llama de un héroe puede volver a forjar lo que una vez se quebró".
¡No pienso sucumbir tan fácilmente!
Veo que has recogido bastante.
Oh, me metería en un buen lío si te dejase. Está prohibido. ¡Además, da mucho miedo!
En realidad, aconsejo al jarl en asuntos políticos. Mi opinión es valiosísima. Pero probablemente te cueste un poco entender todo esto.
Ya le has oído. Adelante.
El Pálido se encargará de acabar con esos difamadores imperiales cuando vengan a por nosotros.
Como dice el refrán, no hay que ser más rápido que el dragón, solo más rápido que el resto de cuantos huyen de él.
En efecto. Hubo otros antes, pero las visiones de Azura pusieron a prueba su fe. Se marcharon uno a uno, temerosos de conocer su propio futuro.
Una de esas cosas tiene la llave de la jaula. Si me sacas de aquí te ayudaré a matar al resto de esos cuervos.
¿Quieres cobrar? Pues haz tu trabajo.
Eres demasiado duro contigo mismo, querido y homicidamente demente Pelagio. ¿Qué haría esta gente sin ti? ¿Cantar? ¿Bailar? ¿Sonreír? ¿Llegar a viejos?
Ah, sí. Soledad. Sede del trono del rey supremo de Skyrim. Con sus negocios turbios y matando reyes. Ah, pero es todo tan satisfactorio...
Algún día, estas hermosas plantas nos harán famosas y podremos irnos de esta granja... gracias a Sinderion.
¿Ah, sí? Escucha, hermana... Astrid es mi señora, y yo idolatro el suelo que pisa. Pero este asunto de Cicerón la ha vuelto un poco... paranoica.
Si te estás planteando unirte a nosotros, Kodlak es tu hombre.
Aaaah... Quizás algún día vuelva a abrir una tienda aquí en Skyrim.
Si necesitas ayuda con los hechizos de destrucción, házmelo saber.
Yo solo...
Oye, ¿pero qué...?
Sí, supongo que alguien ha de serlo por aquí. ¿Has visto el estado tan lamentable en el que se encuentra esta ciudad?
¡Comprad y vended joyas de calidad aquí!
Ahora que hemos desenmascarado a nuestro "fantasma", espero que veamos más visitantes que los peregrinos ocasionales.
Llevará tiempo decriptodificar esto. Puedes marcharte, y Séptimo te encontrará si te necesita.
A cambio, Maven nos permitía extorsionar a Aringoth y obtener un pago enorme.
Sí. Era un auténtico genio en lo que a raíces de nirn se refiere.
Mi marido Leigelf ha muerto. Nunca... pensé que echaría tanto de menos a ese zoquete.
Sobre el trabajo, podrías ir a ver si Escaldo está de buen humor, pero si quieres ir sobre seguro, habrá trabajo en las minas. Están en los extremos de la ciudad.
¿Has oído eso? Pavo ha sido expulsado de su mina. Casi todos han muerto.
Era un altmer extraño... Le prestaba más atención a la investigación que a su propio bienestar. ¡Hasta vivía en el sótano de una taberna!
Sé lo que quieres. Las palabras viajan rápido. Has descubierto un gran misterio, ¿eh?
Todos vosotros habéis contribuido a hacer de esta una boda extraordinaria. Todos mis sueños se han cumplido. Muchas gracias. Gracias a todos.
Has prestado un gran servicio a la alquimia ayudando a completar la obra de Sinderion.
Te enseñaré cómo se hace.
Gemas, pociones, ingredientes exóticos... ¡Lo tengo todo!
Necesitarás algo más de dinero del que llevas encima.
Bueno, tal vez te convenga estudiar algo por tu cuenta.
Ah, creo que eso servirá.
¡El Pavoroso Padre nos aguarda!
¿No se atreve a hablar conmigo y por eso te envía a ti? Era de esperar.
Ah, has regresado. ¿Te apetece volver a intentarlo? Empecemos desde el principio. Te han enviado a matar al Gastrónomo. Y está...
Oh, qué brutal. Séptimo no te tiene miedo. Pero como un bloque eleva otro, quizá nosotros mismos podamos ayudarnos mutuamente.
Está hecho. La profanación ha sido vengada. Coge a Quebrantadora del amanecer de su pedestal.
Debería taparse con algo.
Estás aquí.
Un sinfín de nórdicos murieron defendiendo el Imperio contra el Dominio. ¿Y para qué?
Gracias. Todavía estoy dando mis primeras lecciones. La decana Seis Dedos solía decir que la flauta se me daba bastante bien.
Si yo hubiera estado de guardia en la embajada de Thalmor, nadie habría perturbado la fiesta...
Es todo cuanto diré; hablar del tema me produce un gran pesar.
Una armada, mi señor. Podríamos detener el flujo de tropas imperiales a Soledad y cortar sus líneas septentrionales.
Me temo que te falta dinero. Sin oro no hay arreglos.
¡Agh! ¡Patético mortal!
Coloca el Léxico dentro de su artefacto y concentra en él los conocimientos. Cuando el brillo se desborde, tráelo de vuelta y Séptimo podrá leer una vez más.
Los dwemer encontraron un truco para evitarlo, como de costumbre. Para concentrar el conocimiento lejos y dentro sin sufrir daño.
Dámelo, rápido.
Sí, señor. Aunque no sé si le gustará saberlo.
Por tanto carga con este extractor. Beberá la sangre fresca de los elfos. Vuelve cuando el juego esté completo.
No digas algo de lo que puedas arrepentirte.
Ni siquiera me limpiaría el trasero con esta basura.
La sangre de altmer, bosmer, dunmer, falmer y orsimer. Los elfos aún vivos proporcionan la llave.
¿Qué se supone que significa eso?
Una panoplia de sus hermanos podría reunirse para formar un facsímil. Un truco. Algo que no anticipaban, no, ni siquiera ellos.
La sangre dwemer puede aflojar los ganchos, pero nadie vivo queda para cargar con ello.
La estructura de sellado se entrelaza en los más mínimos fractales.
Te enviaré a la isla de Piedra Ofidia. Si sobrevives, te aceptaré. Si mueres, en fin, tampoco ibas a serme de mucha utilidad.
Extraordinario. Ahora lo veo.
Podías haberme avisado de que me ibas a usar como cebo para una trampa.
Apestas. Acepta un consejo. Date un baño y ponte ropa limpia.
¡Después de esa historia tan bonita que me contaste sobre cómo os conocisteis en la arboleda de Bruma Embrujada! Ahora entiendo por qué te ha dejado.
Deberíamos hacernos con un dragón para el foso. Me encantaría combatir contra uno.
Y mi honor es ser la primera en dirigirme a ti como heraldo.
Te has ganado el derecho. Tu fuerza y honor son evidentes para todos.
Tengo mucho que aprender para dominar la clase de magia avanzada con la que he estado experimentando.
¡Algún día, forjaré mi propia espada!
Sí, cuídate.
El tiempo es esencial en esto, date prisa.
Desde lo del túmulo del Hombre de Polvo, las cosas grandes que se arrastran son demasiado para mí.
No puedo ir más allá, hermana de escudo.
No puedo ir más allá, hermano de escudo.
No. Desde luego, no para volver con él.
Los demás, preparaos para viajar a la tumba de Ysgramor. Por Kodlak.
Sé que así será. En cualquier caso, acuérdate de todo lo que te he dicho. Permanece alerta, y cuando llegues a las ciudades, haz tus inspecciones y sigue tu camino.
Procura que tus flechas nunca abandonen tu carcaj.
Necesitamos guerreros entrenados, disciplinados y creativos dispuestos a todo.
Lo siento, pero he llegado a los límites de mi generosidad.
Las llamas de Kodlak alimentarán el renacer de Wuuthrad. Y tú volverás a reunirte con él.
Esta es la primera vez que dispongo de todas las piezas, gracias a nuestra hermana de escudo.
Muy bien. Sigue así. Puedes irte.
Que algo exista no significa que deba existir.
Da gracias a Su Benevolencia de que no se quemase como los otros tomos.
A Kodlak no le importa la venganza.
Nuestra señora Mara te da la bienvenida a Su Benevolencia.
No te preocupes. Quédatelo.
Ni siquiera podemos entrar en la tumba sin Wuuthrad, y está fragmentada, como ha estado durante mil años.
Oye, no sé nada más. No te he dicho nunca que tuviese todas las respuestas.
¡Sácame de aquí!
Tienes razón. Es lo que quería, y se lo merecía.
Y tú lo vengaste.
Y mientras estás en ello, yo intentaré conseguirte una invitación para la fiesta de Elenwen.
¿Es eso? ¿Has reparado la hoja?
Farengar, tienes que venir enseguida. Han avistado un dragón en las proximidades.
Aia, cállate, por favor. Viarmo y yo estamos discutiendo asuntos de política nacional.
Es difícil ver trabajos de artesanía como este en estos tiempos. Impresionante.
Deberíamos estar honrando a Kodlak, sin importar qué pensemos sobre la sangre.
Mi sobrino, el emperador. Que está muy ocupado para asistir a la boda de su querido primo... No pienso perdonar este desprecio, te lo aseguro.
Perdona, ¿qué has dicho?
Para ti está bien. Pero él quería estar limpio.
No es un buen momento.
Si estas ruinas te dan miedo, consuélate sabiendo que yo estoy aquí.
He visto casas mayores, pero es la tuya, así que me gusta. Creo que necesitaré algo que hacer por si te vas a algún sitio, y he pensado que abriré una tienda.
Gracias. Estaré aquí.
Me alegro por él. Por ambos.
Las reservas de maíz disminuyen, Orgnar.
Te daré una buena razón: Maven Espino Negro.
Tenía interés por expandir el negocio, y tu inversión sin duda me ayudará a hacerlo. ¡Acepto!
Mis sirvientes sirven a sus propios propósitos. Pero si su voluntad es insuficiente, o no está alineada con la mía de forma adecuada, simplemente los destruyo.
Estoy reuniendo ingredientes para llevárselos al Gastrónomo. Cuando se los ofrezca, pensará que tengo unos gustos muy refinados.
El triunvirato se disolvió hace veinticinco años, cuando Mercer Frey nos traicionó al matar a Galo y tirar su cuerpo a las ruinas del santuario del Velo de la Nieve.
Su madre debería de tener la llave, pero... Esa familia está maldita, te lo digo yo.
Obligarnos a sentarnos con esa... perra Thalmor. O se va ella, o nos vamos nosotros.
Fortuna para ti y para tus hijos.
Puede que eso sea cierto, pero ordené a Irileth que trajera una prueba. Mejor que te presentes ante ella de inmediato.
El viaje hasta Cruce de Agua Oscura es muy peligroso. Ve con cuidado.
En la mina, los pobres excavan en busca de piedras preciosas que solo los ricos se pueden permitir.
Y Meieran, ¿qué cree?
Lisbet se encarga de los clientes. Y yo, de los pedidos.
Que los Nueve Divinos te bendigan. ¿Cómo puedo ayudarte?
Si alguno de los grupos utiliza canales menos oficiales e intenta contactar contigo directamente, por favor, remítelos al maestro hechicero del Colegio.
¿Porque los orcos sois así de amables?
Puede que sea una mujer, pero puedo excavar la roca como el mejor.
Me alegro de que hayas podido negociar una tregua, pero no me fío de Ulfric. Romperá su promesa en cuanto le resulte provechoso.
El guardián llegará pronto con el cuerpo de la Madre Noche. Hay tantos preparativos por hacer...
Sí, señor profesor Gemane. Es un cantar épico sobre el último combate de Hoag el Asesino de Mer.
Oh, ya no tienes tanto aplomo, ¿verdad?
Te seguiré hasta que me convierta en polvo en el viento. ¿Lo sabes, verdad?
Con demasiada frecuencia el general ha perdido buenos soldados por no tomarse en serio a Ulfric y a sus hombres.
Sí, tienes razón. Debería haberlo hecho, pero no sabía qué decir.
¡Nocturnal, guía mi mano!
Te digo, Vulwulf, que es la inversión que estabas esperando.
La siguiente estación, seguro... ¿Seguro que qué? Tío Calcelmo, no entiendo qué quieres decir.
Tú dirás.
Nos has traído buenas viandas.
Toma esto como pago. Al jarl le gustaría darte las gracias, pero quiere mantener en secreto el regreso de Potema.
¡Tienen arqueros arriba, a lo largo del muro!
Este castillo es muy antiguo. Tiene muchos sitios en los que nadie ha estado en mucho tiempo.
Avísame si quieres tomar algo. Para eso estamos aquí.
Solo importaba aquello que era lo mejor para Morthal. Dejarla en manos de Ulfric... No es lo correcto.
¡Tienes suerte de que respete al consejo de los Barbas Grises, Galmar!
Es el día de nuestra boda. Me siento como si todo Skyrim estuviera pendiente de nosotros.
Los objetos que ves aquí pueden parecer mundanos a simple vista, pero te aseguro que cada uno tiene una historia de lo más insólita.
Bueno, que está muerta. Pero supongo que no es nada raro, al menos no para alguien de aquí.
Maldita sea. Se me ha escapado dónde está, ¿verdad?
El maestro Borri te enseñará "Nah", "furia", la segunda palabra del "Torbellino arrollador".
Jorgen y yo trabajamos mucho y sin parar. Morthal es importante para los dos.
Sí. Gracias, archimago.
Me preocupa que dentro de poco puedan salir de la mina en busca de comida... Entonces sí que estaremos en un buen lío.
Entonces ya sabes hasta qué punto es hermosa.
El trabajo en esta vieja roca es mucho más tranquilo ahora, gracias a los Divinos.
Yo que tú me plantearía ponerme... algo. Lo que sea.
No puedo explicarte los detalles. Tendría que desvelarte muchos secretos que el Sínodo ha descubierto con los años.
Parece que esos malditos rebeldes han llegado aquí antes. No importa, contamos con el factor sorpresa. Disponte a avanzar.
Hace falta un hacha bien afilada para cortar toda esa grasa...
Eso es absurdo. Venga ya.
¡Madanach! ¿Crees que puedes huir de mi prisión? ¡Pagarás por lo que le has hecho a mi familia!
Un día estábamos rompiendo rocas en lo más profundo de la mina y al día siguiente estaban por todas partes.
Seguir sin hacer nada no aliviará a la tribu de esta maldición. Debemos intentarlo.
Solía ansiar el día en que fuera mayor de edad para ver nuevos lugares y gentes, pero ahora me siento enjaulada.
Aprovecha y llévate todo lo que quieras de la mansión de Frey mientras estés allí. Yo lo haría.
Todavía no ha salido nadie herido, y parece que se limitan a quedarse en la mina, pero ¿quién sabe cuánto durará eso?
Entraron todas allí y se instalaron como en casa. De la noche a la mañana. Ni siquiera sé de dónde han salido.
Te propongo una cosa. Hazlo y yo llenaré tus bolsillos con cuanto pueda reunir.
Bien. Pero ten cuidado. Aquí tienes.
Mmm. La audaz esposa y madre, y el solapado khajiita. Tenía que ser uno de los dos, ¿cierto? Interesante elección.
Vayamos con cuidado.
Mis únicas lealtades son hacia mi sobrino y hacia esta ciudad.
No todos, pero los del Círculo sí que lo son. Es un secreto para todos.
Creo que serías una adquisición soberbia para el Colegio. Te doy la bienvenida, aprendiz.
Por lo que yo sé, hoy no ha venido nadie por la carretera del sur.
Entonces, adiós.
Esto es una prisión propiedad de la familia Sangre Argéntea. Utilizamos a los prisioneros para extraer minerales.
Caramba, has descubierto mi plan maestro. Supongo que ahora ya nunca te marcharás.
Zu'u lost ofan hin laan... ahora que he respondido a tu pregunta, ¿me dejas marchar libremente?
Con suerte, un héroe se presentará y resolverá nuestros problemas, como en los cuentos de antaño.
¿Qué? ¡Traición! ¡Profanación! ¡Traición y profanación! ¡Has violado la santidad del ataúd de la Madre Noche! ¡Explícate!
Es una lástima que nuestra hija no pudiera hacer el viaje ella misma, pero al menos sigue pensando en nosotros.
Esto me trae muchos recuerdos. Vuelve cuando hayas terminado y tal vez pueda mostrarte algunos trucos.
Solo me despedía.
Ve con cuidado en Alto Hrothgar. He oído que hay lobos acechando por los escalones.
Si quieres fabricar armas o armaduras nuevas, utiliza la fragua. Pero se necesita mucha materia prima, como hierro o acero.
Lo siento, me temo que no entiendo.
Estuve bastante grave durante un tiempo, pero un sacerdote de Mara que iba de camino a Lucero del Alba me sanó hasta donde le permitieron sus capacidades.
Sufrí una mala caída en la mina mientras llevaba comida a los trabajadores.
¿Vas a comprarme algo o vienes a entrenarte? Si no, largo.
Alguien de la Cuenca ha solicitado nuestra ayuda.
Dudo que el Imperio tenga estómago para seguir derramando sangre.
Oh, si insistes...
Así que tú eres el miembro más reciente de nuestra menguante e inoperante familia. He oído hablar mucho de ti.
Salvo que sea oro para otra ronda, no me interesa.
Vuelve cuando haya muerto el elfo y será tuyo.
Siento la mirada de espíritus furiosos sobre nosotros. Aquí no somos bienvenidos.
Sí, Oyente. No me moveré hasta que me lo ordenes.
Puede ser. Mira, yo quiero volver, pero no me sentiré bien allí sin un vínculo a Talos.
Tenías razón, Galmar.
Vignar el Venerado es el jarl en Carrera Blanca. Supongo que una vez fue un gran héroe, porque todos los Compañeros le llaman de ese modo.
Deja que le eche un vistazo...
He inspeccionado nuestros campamentos. Estamos preparados, Ulfric...
Bueno... Tenía derecho legítimo a reclamar el trono de reina suprema de Skyrim.
No podría. Avergonzaría a mi jefe, a mi madre y a mis antepasadas.
¿Cuánto tiempo podremos seguir así?
Dejad que los Renegados arrasen la Cuenca. Gozamos del favor de Talos. Seguro que venceremos.
Lo quieren tanto como tú. O quizás más.
Vivo... una vez más.
Me aseguro de que Erikur sigue respirando.
Pero debes hacerlo, Ulfric. Lo hiciste antes y volverás a hacerlo de nuevo.
Thongvor. Debí ejecutar a todo tu traicionero clan cuando tuve la oportunidad.
No siento miedo ni remordimientos. Paga mi precio y juntos derrotaremos a cualquier enemigo.
Se nota que la naturaleza no te resulta desconocida. Seguro que tenemos lo que necesitas para tus cacerías.
Yo he jurado protegerte, mi jarl, pero estoy en la última línea de defensa.
Dioses, qué frío hace. Ya pueden encontrar algo bueno ahí dentro para que esto valga la pena.
¿Seguro que estamos preparados?
¡Puede que sea viejo, pero derribaré esos malditos muros a patadas si hace falta! ¡Basta con que me lo pidas!
Han colocado barricadas para impedirnos el paso, pero las derribaremos y, con ellas, a los rebeldes que haya detrás.
En cuanto te marchaste, envié a buscar al general Tulio, que ha sido lo bastante amable como para prestarnos parte de sus tropas, y al legado Cipio, aquí presente.
No hay problema, pero, si te alejas demasiado, iremos a por ti.
Le gustaba el buen vino, también buen yantar, relatar sus hazañas por tierra y por mar
Ya está.
Toma. Aquí tienes un detalle.
Y estoy seguro de que los echarías abajo.
Enhorabuena por conseguir resucitar el festival.
¡Sí!
Envía la noticia: "un nuevo día amanece y el sol se alza sobre Carrera Blanca".
La ironía es que, aunque el general Tulio no es nórdico, la gente de Skyrim estaría perdida sin él.
Ya conoces las reglas.
Ocúltalo cuanto quieras. Sé que formas parte del gremio de ladrones... y el resto de guardias también lo saben.
Me... sorprende que hayan nombrado jefe a Gularzob.
Parte sin demora a nuestro campamento de Carrera Blanca. Te quiero en el frente.
Entonces, al fin sabes lo que significa ser un auténtico cazador al estilo nórdico.
¿Sabes por qué vivo aquí, en la cumbre del Monahven, lo que vosotros llamáis la Garganta del Mundo?
Esperemos que sea tan poderoso como creen los psijic.
La embajadora Thalmor, Elenwen, celebra fiestas donde los ricos e influyentes se congracian con los Thalmor.
Entonces más vale que se encomienden a los dioses que aún veneren.
Muy bien, si tú no quieres ese oro de más, puedes sin duda dejar que Letrush se lo quede como gesto de buena voluntad.
¿Crees que todos los consejos que mi padre le da al jarl son de su propia cosecha? Ya. Digamos simplemente que yo aconsejo al consejero, y ahí lo dejo.
¡Oye! Vigila lo que haces.
Por favor, deja que me ocupe de ello. No es ningún problema.
Bien. Ahora recuerda: dolor, y mucho. Pero sin matar. Si te detienen, no es mi problema.
Contigo a mi lado, ¿no es cierto, Horik?
¿Qué haces hablando conmigo? ¿No sabes que Brynjolf te anda buscando? ¡Es hora de nombrarte maestre del gremio!
¡Alzaré mi copa sobre tu tumba!
Brynjolf me cuenta que serías excelente como maestre del gremio. Oh, por cierto, te anda buscando.
Brynjolf ha estado buscándote por la ceremonia del maestre del gremio.
Así que te van a hacer maestre del gremio, ¿eh? Bien. Busca a Brynjolf para que lo haga oficial.
A mí me parece poco veloz.
Adiós, señor.
No hay nadie más, pero está bien. No puedo obligarte a aceptar tu destino.
He oído que Brynjolf te anda buscando. Creo que es hora de que el gremio tenga un nuevo líder.
Creo que es hora de que hagamos oficial esto del maestre del gremio. Ve y habla con Brynjolf, que está haciendo los preparativos.
La Compañía del Imperio Oriental está en deuda contigo.
No te preocupes, te prometo que será dulce y breve. Si te reúnes con nosotros en el centro de la sala de la cisterna, podremos comenzar.
Ahora no, idiota. Hablaremos después de esta ridícula ceremonia.
Aún hay esperanzas de que se puedan restablecer las relaciones con el Colegio.
Dios, vaya follón.
Supongo que toca felicitarte. Ahora no metas la pata.
Hace mucho tiempo, los Cuchillas eran matadragones al servicio del Sangre de Dragón, el mayor matadragones de todos.
Soy el comandante de la guardia.
Genial, debes de estar muy cómoda. Creo que la mía es demasiado pequeña. ¿Hacemos un intercambio?
Cuando Brynjolf te proclame maestre del gremio, podremos hablar largo y tendido.
Solo porque te hayan aceptado con esta rapidez, no creas que te ayudaré a medrar.
No veo para qué más los necesitamos. Mientras mantengan a esos perros lejos de nuestras fronteras, todo irá bien.
Eso... no es nada...
Hablaremos cuando termine la ceremonia.
¡Enhorabuena, mandamás!
Probablemente deberías hablar con ella.
Lo he de llevar ante el gremio para que responda por lo que ha hecho. Debe pagar por el asesinato de Galo.
¡Lo siento! ¡No es esto lo que quiero!
Mi hermano es un gandul borracho. Si dependiera de él, habríamos perdido ya la casa.
Me alegro de que eligieran a la persona apropiada para el trabajo.
¿No habría que completar primero la ceremonia?
Prometo estar a la altura de tus expectativas.
Por los huesos de Shor... ¿Dónde acaban las exigencias?
Si te digo la verdad, yo creo que no es más que una racha de mala suerte.
Todos somos ricos gracias a ti. ¡Hurra!
Estoy a tu servicio.
¡Siente el trueno de mi Voz!
¡El poder de Mzinchaleft es mío! ¡Desaparece de aquí!
Podemos hablar después de la ceremonia del maestre del gremio.
Has pasado de ser aprendiz a dar las lecciones, ¿eh? ¡Buena demostración!
¿Tú también lo has oído? Dicen que un dragón arrasó todo el pueblo.
Por favor, disculpa el estropicio.
Supongo que te lo mereces. No podría ser peor que Mercer, de todos modos.
En otro tiempo fui un escama sombría. Un asesino al servicio del rey de Ciénaga Negra. La Hermandad Oscura me entrenó desde el día en que nací.
Ah, ya entiendo. Es una prueba, ¿verdad? Quieres comprobar si conozco bien el potaje magnífico.
Teniendo eso cuenta, propongo que tú ocupes el cargo de maestre del gremio.
Dime, ¿por qué has matado a quien confiaba en ti aquí, en mi capilla?
Ser maestre del gremio supone algo más que llevarse una parte de todos los botines, hay que ejercer de líder y mantener el orden.
Oye, estas cosas nunca se me han dado bien, así que seré breve.
Necesitamos dinero, Ranmir, y no traes nada a casa.
Bien. Pues no hay mucho más que decir.
¿Vex?
¿Con quién habla? ¿Qué planean? Temo que piensen traicionarnos.
Claro, por qué no.
¡Cobardes! ¡Raptar a una mujer en su casa! ¡Qué vergüenza!
¿Karliah?
Si no te importase llevarle esto de nuestra parte, te lo agradecería muchísimo.
Dime, mamá... ¿nuestra fortaleza tiene el favor de Malacath?
Estoy tan ocupado que no tengo ocasión de ver a mi hija tanto como me gustaría. Quizá la conozcas. Se llama Adrianne. Es la dueña de la tienda La doncella guerrera.
Parece que ya está. Tengo que irme.
Todos están de acuerdo, así que ahora te nombro maestre del gremio y te deseo buena suerte y una larga vida.
Si siguiéramos viviendo en mi tienda de alquimia en Vivec, no importaría mucho. Podría pasarse todo el día en los canales.
Normalmente, un periodo de servidumbre.
A Malacath le agrada tu fuerza, Larak.
No dejes que el nombre de la tienda te asuste. Tengo a la venta un montón de tónicos aliviadores y pociones curativas.
No necesito suerte, sino un descanso.
Fantástico. Me preocupaba haber pedido demasiadas, pero gracias por demostrarme que me equivocaba.
Hroggar dice que fue un accidente, pero hay quienes afirman que lo provocó él.
Esa fue la primera lección que nos enseñó Galo.
Mientras los rebeldes estén dispuestos a morir luchando por el Imperio, nosotros estaremos dispuestos a complacerlos.
Al menos déjame que te ofrezca algo por tu esfuerzo... Seguro que encontrar todo esto no ha sido fácil... ni barato.
Da igual... Aprecio tu generosidad.
Es increíble... ¿Cómo has conseguido tantas?
Aaah... De vuelta al trabajo.
Buena suerte con la búsqueda de las uvas de jazbay. Son bastante difíciles de encontrar.
¿Has cambiado de opinión? ¿Quieres descubrir la verdad de Markarth?
Esta es la última advertencia. Sal de ahí o te pondremos bajo arresto.
Ven a visitarme alguna vez.
Si tienes el valor para ir a la Ratonera y recuperar mi arco, te pagaré lo que pueda.
Hace unos días, ¡unos ladrones de Riften entraron aquí y me lo robaron! ¿Puedes imaginártelo? Se llevaron lo único que teníamos de valor.
Eso te lo garantizo. Los conocimientos que contiene el Léxico han creado todo lo que nos rodea.
Lo sospechaba. La verdadera cuestión es si debemos hacer algo al respecto, o informar de ello al jarl.
¡Ese es! ¡Lo has encontrado!
¿Y bien, qué noticias traes? ¿Está Alain...?
Era una reliquia de la familia. Ni siquiera podría ponerle un precio de lo mucho que significa para mí.
¡Nada, maldito zoquete!
¿Crees que encontraremos pepitas de oro aquí dentro?
Me alivia que digas eso. Si te fueras, te echaría muchísimo de menos.
Sé que esas sabandijas se lo llevaron de vuelta a la Ratonera. Dejaron a su paso un hedor inconfundible.
No, no ha muerto... se ha unido a las sombras.
¿Intentas darme miedo, mmm? ¡Esfuérzate más!
Ah... encantador. Ahora, mi querido Pelagio solo tiene que preocuparse de cientos de amenazas legítimas...
Gracias. Sería estupendo que lo recuperases... Significa mucho para mí.
... "ve al colegio", decía papá... "Aprovecha tu inteligencia", decía... Como si tuviera que adivinar a qué colegio se refería...
Vale. Esperaré a encontrarme con alguien un poco más valiente.
Me encargaré de que el mismísimo emperador sepa todo lo que has conseguido. Has hecho de Skyrim un lugar mejor.
Ya ni siquiera sé qué pensar...
Con mucho gusto. Por el código de Malacath, te nombro "hermano de sangre de los orcos".
¿Qué pasa, imperial?
Ayuda a Irileth a matar al dragón antes de que pueda atacar Carrera Blanca. No hay tiempo que perder.
Excelente trabajo. Tienes un auténtico espíritu luchador. Lo hiciste mejor de lo que lo habría hecho yo.
Ve con cuidado por ahí fuera o te lo van a quitar todo.
La Ratonera está en alguna parte debajo de Riften. No tendría que ser muy difícil de encontrar.
Dragones, ladrones y guerra. Debería haberme quedado en Morrowind.
No solo se han llevado mi arco, sino que me quitaron todo mi dinero. Para esta gente no hay nada sagrado.
Somos presa fácil de los ladrones que quieren arrebatarnos el fruto de nuestro duro trabajo.
Supongo que eso significa que has acabado. Toma tu paga.
Era mi hogar. Pero me marché. Sentía más la vida en los bosques, al menos por un tiempo.
Por fin alguien con carácter. Así me gusta.
Que te vaya bien en la lucha.
Debo decir que no me apasionan los Capas de la Tormenta, pero tampoco es que me entusiasme el Imperio, la verdad.
Querían usar magia de escarcha para enfriar el aguamiel por un cierto periodo de tiempo. Me pareció inútil, pero el archimago se lo permitió.
Pero cuando buscaba entre sus cosas, encontré un libro que no había visto nunca. Todo relacionado con los ídolos.
¡Hrraaggh!
Es la maestra hechicera de aquí. Puede que el archimago Aren esté al mando, pero es Mirabelle quien dirige el lugar.
¿En este momento? No. Sin embargo...
¡Vaya! ¡Cuidado!
Lo siento, pero un tesoro me está esperando...
Sabemos que Shalidor tenía una comprensión de la magia muy superior a la de cualquiera de su edad o de la nuestra.
Dijo que se iba al este hacia la frontera de Morrowind para vender parte de nuestro grano a alguien de la hondonada del Timón Roto.
Lo hecho, hecho está. Toma, quiero que aceptes esto. Al menos gracias a ti sé la verdad.
Es el orfanato Salón de Honor, en Riften.
Me alegra saber al fin que Malacath no nos ha abandonado.
No importa. Seguro que hace mucho que se ha largado de todos modos.
¿Se te cayó por error? Pues si fuera tú, iría a cogerla antes de que alguien se te adelante.
Bueno, dijo que unos cuantos hombres habían ido a algunas granjas de la zona prometiendo un buen precio a los aserraderos y granjas locales.
Bueno, muy bien. Y ahora, si pudieras... marcharte ya...
No tardes. No puedo esperar eternamente.
¡Por supuesto que no! ¡Protesto...! Eh, eso es, sí, por supuesto. Aún no comprendo qué... oh, no importa.
Claro que puedes. ¿Cuánto quieres pagar?
Bien, bien. A seguir trabajando duro. Tendrá su recompensa.
Esta copa la pago yo.
Samuel me dijo que se volvió a su casa de Ventalia e hizo algún tipo de ritual siniestro. Llamó a unos asesinos para que matasen a la vieja Grelod. Nos salvó a todos.
Para nada. Lo considero una bendición.
Oh, Faida. Tal vez viaje solo, pero sabes que siempre te llevaré en mi corazón. Hasta pronto.
Bien... si has acabado de quejarte del dolor de tripa como los críos, ¿qué tal si te encargas de unos aprovechados por mí?
Claro, buen hombre. Toma.
¿Te apetece otra apuesta?
Vieron cómo entrabas. La muchacha de la puerta es una agente de los Renegados haciéndose pasar por una criada.
Pásate por aquí a vernos si alguna vez vuelves a estar por la zona.
¡Chusma! ¡Los habitantes de Riften no sois más que eso!
Adiós, señora.
¡Oh, no! Tú eres del gremio de Brynjolf, ¿no?
Así que te van a hacer su líder, ¿eh? Será mejor que vayas a buscar a Brynjolf para que pueda sellar el trato.
Dentro está el corazón. ¡El corazón de un dios! Tu corazón, y el mío.
Ahh... Gracias, querida. Eres muy amable. El corte de ese bufón tiene mala pinta y duele tanto como parece, me temo.
Creemos que debemos centrarnos sobre todo en las posibles repercusiones, pero no podemos predecir cuáles serán.
Tienes que hablar con el peón de la granja Escalofrío.
Exacto.
Estando yo sola con una criatura, es poco menos que imposible.
¡Tengo que salir de aquí!
Bueno, tal vez no sea completamente cierto, pero nuestro clan tiene una larga y orgullosa historia.
Tenemos un antiguo dicho: los Melena Gris han vivido en Carrera Blanca desde que la primera nevada cayó sobre Skyrim.
Olfrid Batallador hizo fortuna como granjero y se hizo nuevos amigos entre la nobleza del Imperio.
Sí, son un antiguo clan, como el nuestro, pero ellos apoyaron al Imperio al iniciarse la revuelta.
Cuando empezaron los problemas, se pusieron de parte del Imperio. No hemos hablado mucho desde entonces.
Era como si nos estuviera desafiando a ir a por él.
Eres mío, Logrolf.
Menudos indeseables, ¿eh?
Hazle daño a alguien con ese hechizo, y lo lamentarás.
Kynareth ha puesto la Voz de la sabiduría en tu interior, Sangre de Dragón. Lo único que tienes que hacer es escucharla y te revelará qué camino seguir.
Me estoy quedando sin gemas de alma insignificantes.
Éramos los dos clanes más antiguos y más respetados de la ciudad, nuestras historias se remontaban hasta los compañeros de Ysgramor.
Sí, solíamos ser amigos íntimos, aunque eso fue hace mucho.
Pero bueno, prometo estudiarlo. Muchas gracias.
Cuando las cosas se calmen, quiero reclutar más guardias para la ciudad y luego llenar nuestras tiendas de comida y agua.
¿Ya no quieres más pan y estofado? ¿Estás hasta las narices de aves y pescado? ¡Date el gustazo a ti y a tu familia con un buen filete y unas tiernísimas costillas!
Pensarán que puedo hacer comprender a Ulfric lo difícil de su situación y conseguir que mueva un dedo para cambiarla.
Horik, ese soldado tuyo, viste su vieja armadura de legionario. ¿Cómo se supone que me lo debo tomar?
Mi conocimiento de este templo procede de la experiencia personal. Yo era sacerdote de Vaermina.
Muy agradecido. Toma. No es gran cosa, pero acéptalo de todas formas.
Alduin siempre fue pahlok... arrogante en su uso del poder. Uznahgar paar. Consideraba que el dominio era su derecho de nacimiento.
Es que la polinización sería más sencilla con muchas plantas a la vez.
Ha sido Talos quien nos ayudó a recuperar la ciudad. Estoy tan seguro de ello como de que el sol sale por la mañana.
¿Tienes ya algo para nosotros?
¿Te gusta luchar? ¿Qué te parecería una pequeña apuesta?
Confío en que sepas lo que haces con ese hechizo.
Tamriel está lleno de magia y sabiduría, si uno está dispuesto a buscarlas. Pero pocos tienen los ojos abiertos.
¿Y yo qué sé? Nunca imaginé que ese vejestorio me seguiría hasta aquí. Tú líbrate de él.
Perdona, pero confío en que habrás estado trabajando en tu poema sobre los héroes clásicos de Skyrim, ¿no?
Ah, tú y yo tenemos cuentas pendientes.
Bueno, supongo que tengo que cumplir mi parte del trato.
¿No has hablado con Astrid? Está junto al estanque, saludando a la Madre Noche y a su pequeño bufón. Tiene un contrato para ti. Ven a verme más tarde.
Es como... que quiere hablar. Le gusta la gente y tal, pero se mantiene al margen, porque es lo que se espera de él.
¿Qué? Pero si ni siquiera... Ah, ya veo. Posees conocimientos de las artes arcanas.
Son capaces de molerlo tan fino que se puede mezclar perfectamente con la nieve compacta.
Son casi... reales. Dicen que un sacerdote de Mara ha llegado al pueblo. Veremos si la fe puede curar esta maldición.
Ah, ¿no lo ves? Los nombres de dragones son siempre tres palabras de poder... Gritos.
Esperadme.
Permanecería con ella para que el mundo nunca pudiera darnos alcance.
Ahora tú y yo vamos a hacer como si nada de esto hubiera ocurrido.
Vaya, lo siento.
Creo que tendrá que ser muy lejos de aquí.
¿Y ahora qué hago? No puedo dejar que me vean así en público. Y eso si pueden verme de alguna manera...
Y si no lo eres, no soy yo ante quien debes responder, sino ante los habitantes de la ciudad y la comarca.
Ah, queridísimo Urag. ¿Cómo estás hoy, mi verdoso amigo?
Me han robado la cosecha de la granja. Como me entere de que fue uno de los tuyos, me aseguraré de que se pudra en un calabozo.
Hemos venido para darte una lección.
Lo... lo siento.
Ten, toma esto. Es la espada de un oficial imperial. Un arma digna para ser usada contra nuestros enemigos.
Sí, con mi hijo pequeño. Es un muchacho siniestro. No sé qué hacer con él.
Ya he presentado una solicitud para quedarme con tus tierras y propiedades cuando te encarcelen por colaborar.
Dejarás de reír cuando los Thalmor busquen simpatizantes de los Capas de la Tormenta.
¿Por qué no te mueres?
Si no confías en mí, has cometido una estupidez al venir aquí.
¿De veeeeeerdad?
Es un granjero medio decente. ¡Pídele que te enseñe a labrar la tierra!
¿Qué? No te andes con rodeos, anciano.
La mayor parte de los días, lo único que puedo hacer es mantenerme alejada de mi hermana y mi padre. Los dos me dan unas palizas...
Soy uno de los agentes del general Tulio. Me han enviado a investigar la sala del tesoro y a la familia Sangre Argéntea.
No me des un sermón sobre la traición. Ni siquiera entiendes su significado.
Pero sí, ha sido mucho trabajo. A Vignar no le gusta que el cambio altere las vidas de su gente. Ya tienen bastante de lo que preocuparse.
Bueno, podría haber sido peor. El antiguo administrador, Provencio, guardaba registros muy detallados.
¡Nunca he estado más a punto!
Podría ser. Está resultando difícil pasarlo por la frontera con tantas patrullas argonianas.
Buen trabajo. Enviaré unos cuantos hombres con un carro a recoger la recompensa. Podremos usar las armas, y enviaré el dinero a Soledad.
Últimamente, la vida en Morthal se ha vuelto agitada. La gente está inquieta, insegura. Miran hacia el jarl en busca de liderazgo.
Pero recuerda, Carrera Blanca es el hogar de los Compañeros. El dragón que venga aquí se va a encontrar un recibimiento que ni se espera.
Ha estado quejándose de que un miembro del Colegio está sembrando el caos en su comarca.
El secreto está en la oscilación. Deja que te lo enseñe.
Vaya, ¿te has perdido la ceremonia? La verdad es que duró muy poco. Los novios parecían más interesados en la recepción.
Usa Despejar cielos para abrirte camino hasta Paarthurnax.
"cuando la Torre de Bronce camina y el tiempo vuelve a conformarse,"
Estaba dispuesto a darle esto al que me hiciera el favor de matarla, pero supongo que te lo has ganado al traerme la información.
Estupendo, con tu ayuda me resultará más fácil.
¿Estabas en Helgen cuando lo atacaron? ¿Lo viste con tus propios ojos?
Bueno, has venido al lugar adecuado.
Debes de estar muriéndote de hambre. Toma, gástalo bien.
¡Que la oscuridad te destruya!
Escucha, deberías ir a Soledad y alistarte a la Legión Imperial. Realmente nos vendría bien alguien como tú.
Sí, el Devorador de Mundos se ha ido... Que los espíritus se apiaden de nuestras almas.
Nunca te oirán llegar.
El maestro Borri te enseñará la primera palabra de un nuevo grito. Atiende.
Pues ponte en cabeza.
Hay oro de sobra para llevarnos... si asumes el reto.
¿Necesitas algo?
Ah, no, no, no... Esto no está nada bien...
Es mi primo. Por favor, dale otra oportunidad.
Vamos, Sangre de Dragón. Atiende al maestro Borri.
Karliah ha pasado por aquí. ¿Qué esperará encontrar?
¿Es que no puedes estar atento al trabajo por una vez, en lugar de a tu jarra?
Las cosas van bien por aquí, chica.
Mejor así.
¿Acaso importa? No hace frío, estás a salvo... y aún conservas la vida. Es más de lo que se puede decir de la vieja Grelod, ¿no?
Uffff...
Pero no es necesario cometer ninguna imprudencia...
Es agradable pasar algún tiempo en tierra firme.
Coge una silla... Es una larga historia.
Los Thalmor salvaron a los elfos en la crisis de Oblivion. Hemos velado por esta tierra más de 200 años.
Nunca te compararás a mí, pero puedo intentar enseñarte de todos modos.
Una mujer como tú debería tener un caballo. Ve a hablar con mi marido.
Te enseñaré lo que sé.
Sin embargo, aquellos que te han enviado no te han dicho lo que buscan. Lo que tú buscas.
Ni por todo el oro de Skyrim me pasaría la vida trabajando en estos túneles.
¡Unh!
De acuerdo, pero si te detienen, no me eches la culpa.
¡Ja! ¡Sin duda, deberíamos haber matado a ese viejo canalla hace años!
Lo he oído jactarse en La yegua abanderada, diciendo que "me conquistaría como un nórdico somete a cualquier mala bestia". Bah.
Podrás correr en círculos alrededor de los matones lentos y grandes con armaduras pesadas.
Te doy las gracias.
Exactamente. Hay algunos que aún pueden llamar a Nocturnal "Señora de la Fortuna" y por una buena razón.
Cura de la Arpía está aquí para todo lo que necesites, discretamente...
No te lo pierdas... ¡compra una botella de mi genuino elixir de sangre de falmer! ¡Solo 20 septim cada uno!
La reconstrucción requerirá bastante tiempo, pero los nórdicos sabemos trabajar duro.
Oh, casi seguro. Al menos, cuando lo solicita la propia Elisif.
¿Qué pasa, argoniano?
Creemos que se esconde en Carrera Blanca, pero estamos revisando los demás sitios para asegurarnos.
Sin los medios para coger mis cosas y marcharme, decidí dedicarme al comercio.
Así que, si no tienes ningún asunto urgente, márchate.
Yo te explicaré los misterios de los reinos exteriores.
Te vigilo, Maven Espino Negro. Un día, te pegarás un resbalón y tus amiguitos imperiales no estarán ahí para cogerte.
Úsala bien, y no notarás nada.
Te enseñaré lo que pueda sobre cómo protegerte.
Has llegado al lugar adecuado. Te enseñaré con mucho gusto.
Si entras en el lugar equivocado con tu arma desenvainada, quizá no salgas...
El culto a Talos está estrictamente prohibido.
¡Ah! ¡Maldición y ofuscación! ¡Atrapado aquí! ¡Atrapado! Mi madre, mi pobre madre. Inmóvil. Descansando, ¡pero tan quieta!
¡A por ella!
Ejecuta a todos y cada uno de los bandidos. Que no quede ni uno vivo.
No estés tan decepcionado. Tampoco tendrías permiso para llevártelo aunque lo hubiera.
Gracias. Toma, has honrado el encargo de mi madre y deberías recibir una recompensa.
Vaya... Ni siquiera yo estoy tan borracho...
Y hay mucho más trabajo que hacer, pero me temo que Kodlak ya se ha enterado de nuestras recientes maniobras. Ha solicitado verte.
¡Vamos! ¡Iremos en cuanto podamos!
¡Sí! ¡Maravilloso! ¡Sabía que podía contar contigo!
En efecto. Me han dicho que te han aceptado en los Compañeros.
¡Me sé todos los sitios buenos! ¡Vas a perder!
¡Nos veremos en el santuario! Estaré bien. ¡Vete!
Maldita sea, ¿dónde te has metido?
Deja de quejarte.
¿Qué hay, Drifa? ¿Cuál es el problema?
El suelo que pisamos se alza sobre la sangre de nuestros ancestros. Hemos luchado por esta tierra... Y hemos muerto por ella.
Está bien, lo intentaré, mi señora.
¿Qué miras? ¿Te dan miedo las mujeres fuertes?
¿Quién?
¿Crees que estoy indefensa? ¡Pues te equivocas!
Al final todo ha salido a pedir de boca, ¿no?
Cuando aparezca y responda por ti, ya veremos qué puedo hacer.
Es tan gratificante como peligroso. Veamos lo que puedo mostrarte.
Aparta el pensamiento de tu mente y no vuelvas a mencionarlo.
Coloca la gema de alma dentro y calienta el convector al menos tres segundos. Seguramente tendrás que encontrar varios convectores.
Te he preguntado qué pensabas de los orcos, no de mí.
No queda lejos. Solíamos ir allí al mercado prácticamente cada mes, hasta que la ruta se volvió demasiado peligrosa por la guerra.
Ulfric Capa de la Tormenta. Jarl de Ventalia.
Sí, vale.
Ah, no, en absoluto.
Y bien podría haberse olvidado de la conversación. No quiero darte falsas esperanzas.
Bien. A mí me parece una guerrera. Le tomaré juramento.
Esos elfos oscuros refugiados se apoderarán de la ciudad si no vamos con cuidado.
Un cambio ha barrido Soledad, como la brisa del océano... el gremio de ladrones ha llegado...
Bien. A mí me parece un guerrero. Le tomaré juramento.
Muy bien. Haré el juramento más tarde. Que se equipen y se preparen para luchar.
Adiós. Y si te topas con Mikael, dile que he estado preguntando por él...
Vendo todo lo que puedo. Si hay algo a lo que merezca la pena ponerle un precio, ten por seguro que lo haré.
¡Cae ante la voluntad de Sithis!
Eso es lo que quiero.
Ya son suficientes reclutas por ahora. Pregunta a Esbern por las guaridas de dragón que ha estado examinando.
Ahora no te dará miedo una anciana, ¿verdad?
Yo de ti, me quedaría aquí arriba, con los pies calentitos.
¿Te has encargado de todo? Muchas gracias.
Al parecer, el emperador se ha dado cuenta de que su presencia le exigiría tomar partido en las hostilidades. Y como es lógico, no es plato de su gusto.
Puedes romper fácilmente una hoja contra la piel metálica de una creación dwemer.
Soy Tsun, thane de escudo de Shor.
Muchísimas gracias... Este pergamino significa mucho para mi familia. Toma esto por las molestias.
Entonces está decidido.
Lo siento, pero he pasado por muchas cosas para perderlo ahora.
Bardo insolente.¡Muere!
¿Qué hace metiendo ahí la nariz?
No tengo tiempo para nadie demasiado vago o cobarde para abrirse paso en este mundo.
Nada de funerales, solo algo de dolor. Si te capturan, no será problema mío.
Aparta de mi camino, tengo trabajo que hacer.
No te resistas. Las profecías de Azura siempre se hacen realidad. Negarlas es precipitarse hacia la oscuridad sin luz que te guíe.
¡Me alegro de verte de una pieza, chica!
¿Qué ha pasado con la Llave maestra?
Madre, ¿qué significa esto? ¿A quién has traído a nuestra casa?
Busca a Arnbjorn. Asegúrate de que mi marido está sano y salvo.
El gremio se ha recuperado de nuevo y se encamina hacia un futuro próspero.
¿Te pongo algo?
Nos vemos, visitante.
Seguro que tú y yo nos parecemos mucho. ¿Por qué no damos el siguiente paso? Podemos ayudarnos.
Buena suerte. Ven a Ventalia y habla con Ulfric. No te arrepentirás.
Pero ya basta con eso... Estoy seguro de que contigo al mando, pronto tendremos más oro del que podríamos gastar.
¿Muerto? ¡No, no, no, no, no! Esto es terrible. Yo no te conozco. ¡Aléjate de mí!
Tu destino es la capital.
No estaba buscando problemas.
Espero que podamos devolver al gremio su antiguo esplendor y enmendar todo el daño que ha sufrido.
Todavía me duele donde recibí aquella flecha. Odio a los arqueros.
¡Usa el grito de Desgarro de dragones, Dovahkiin!
Te he visto. Con los Renegados. Por los dioses antiguos, menuda proeza.
No... No puede ser.
Me gustaría ofrecerte este volumen... Es una de las grandes obras de Sinderion. Creo que te lo has ganado con creces.
Renegados arrasando las calles. Como si no fuera ya bastante mal el negocio sin ayuda.
Mi mujer y yo creemos que ha de estar afectado por alguna magia oscura. O quizá la influencia de Arkay es fuerte aquí, y a él le gusta que sea así.
Aquí no. Nos reuniremos en la cueva de Cuenca Acantilada.
No puedo creer que Madanach vuelva a estar en libertad. Espero que no haya nada de cierto en todos los rumores que oigo sobre tu implicación en eso.
No puedo creer que haya alguien tan estúpido como para confundirte con un agente Renegado.
Ve al bastión Guardia del Norte en Haafingar. Nos encontraremos cerca de allí, y podremos planear nuestro ataque.
Ya sé lo de que te han perdonado. ¿En qué estaban pensando los guardias al aceptarte?
Desde que era niño había tenido la extraña sensación de que un extraño sentido de destino envuelve el culto del Amanecer Mítico, y ahora sé de qué se trata.
Empiezo a pensar que aquí ni siquiera vamos a encontrar hierro. Llevamos mucho tiempo excavando.
No tengo tiempo para soportar tu estupidez. Ayúdame o márchate de aquí.
No puedo dormir aquí. Los sueños son aún peores que antes.
¿La agente imperial? Es verdad. Lo sabía. ¿Cuántos perros enviará el Imperio a por mí?
Malditos sean esos Renegados. ¿Se creen que pueden matar gente en mi ciudad? ¡Quiero la cabeza de Madanach!
Creo que algunos la quieren, lady Mjoll. Pero están demasiado asustados como para hacer algo al respecto.
Al matar a Madanach has liberado Markarth de su tiranía encubierta. En nombre de la ciudad, te doy las gracias.
Se ha averiguado que Madanach es el verdadero asesino de Markarth. En nombre de la ciudad, te pido disculpas por haberte encarcelado por error.
Los Sangre Argéntea pagan sus deudas. Tienes mi agradecimiento.
Creo que tienes que calmarte antes de que llame a los guardias.
Que Su Benevolencia te haga volver de una pieza.
Bueno, solo sé lo que he oído en los viejos relatos. Gritar es una antigua forma de magia que consiste en proyectar poder a través de la propia voz.
Bueno, eso es una cuestión diferente...
¡Eh, espanto!
No le escuchéis, se lo está inventando.
De hecho, la noche en que desapareció, se suponía que iba a reunirse con ella.
Aquí comenzará todo. Un nuevo levantamiento.
¿Eso es magia? Cuidado, por favor...
Que los Ocho Divinos te bendigan. ¿Cómo puedo ayudarte?
La Cuenca será nuestra de nuevo.
Sí, Thongvor. Redactaré la carta ahora mismo.
Sus llamas iluminaron la noche. Por todo el lago Rumare, como estrellas caídas del cielo. En realidad fue muy hermoso.
No, no me lo estoy pasando bien. Mi chico se acaba de casar con una imperial olvidada de las manos de los dioses. Skyrim está lleno de nórdicas ardientes y él se acuesta con el enemigo.
Pero tal vez el bastón pueda absorber parte de la energía que emana del Ojo, y así debilitarlo. Tal vez eso nos permita acercarnos a Ancano.
Muy bien. ¿Quieres saber qué son en realidad los Renegados?
No lo sé, al menos no con seguridad.
¡Por los huesos de Shor, puede que tenga que hacerlo!
No estoy segura de qué serviría.
Aunque me temo que no veo la conexión.
Tarde o temprano, todos tenemos que elegir un bando.
No lo sé. Si el augur lo sugirió, debe de haber un buen motivo para localizarlo.
O si no, podrías hablar con el hechicero de mascotas del jarl en Soledad.
Últimamente hemos tenido una mala racha, pero nada de lo que preocuparse.
¡Agrupaos! ¡Ya quedamos pocos!
No mucho más que el resto, que yo sepa.
Luego todo se enfrió y oscureció. Ya no tengo miedo.
Nuestro jefe está débil. No descansa, no duerme. Sufre, y la tribu sufre con él.
Yo me lo tomaría como un cumplido. Los psijic solo se dirigen a aquellos que consideran dignos de ello.
Pero al menos ahora sé por dónde empezar. Gracias, me has sido de gran ayuda.
¿Y de repente han decidido ponerse en contacto contigo? Vaya, ¡qué fascinante!
Has hecho lo que has podido, hermano. Pero he aprendido por las malas que a los imperiales es mejor tratarlos a golpe de espada.
Bueno, quizás no empuñe ya una espada en nombre de Ulfric, pero aún creo en sus ideales. Skyrim es la tierra de los nórdicos, y nosotros deberíamos gobernarla.
¿Como qué?
¿En persona? Pues no. Uno de los suyos solía supervisar a los archimagos cuando yo solo era un aprendiz.
Por aquí.
Arniel se preguntaba si tal vez se hayan podido perder en los dominios exteriores, pero creo que eso sería sobrevalorarles.
Skyrim no te pertenece, Ulfric.
La cueva tiene mala fama. Hace mucho tiempo, Potema, la Reina Loba, la usaba para rituales nigrománticos. De ahí recibe su nombre.
Pero no hemos tenido contacto con ellos en bastante tiempo.
El Thalmor también llegó buscando respuestas, sin darse cuenta de que serán su fin.
De alguna forma siento que esto es justo lo que quiero, una nueva vida como aventurero. Esto es lo que tenía que ser.
¿Sithis? Déjame adivinar: "¡En el Vacío!" Por todos los dioses, los de la Hermandad Oscura sois gente predecible, ¿no es verdad?
Déjame pensar... ¿En qué trabajaban?
No había pensado en el tiempo... Supongo que ha pasado al menos un mes.
Haré lo que pueda.
Esos dos chicos estaban obsesionados con el aguamiel. Estaban convencidos de que podían preparar algo para competir con la destilería Amielada.
Si no recuerdo mal, Yisra intentaba mejorar los hechizos de Manto de llamas para que funcionasen mejor en el entorno hostil de Skyrim.
¿Eso ha dicho, eh? Bien, por lo que parece, tenemos unos cuantos contratos que se prolongan mucho y tenemos que finalizar de una vez.
Y, soldado, más vale que me ayudes a recuperar Markarth o que mueras en el intento. Por culpa de tu maravillosa estrategia se la entregamos a los rebeldes.
Espero que no estés aquí para causar problemas. Lucharé contigo si tengo que hacerlo.
¿Por qué querría alguien matarla? No tiene sentido.
Por desgracia, Morthal sigue en peligro. El diario hace mención a Movarth, un poderoso vampiro maestro que yo daba por desaparecido.
Golpea a los objetivos según vayan apareciendo. Respira y concéntrate.
¡Esbern, cuidado!
¿Qué traición?
Oh, vaya...
Si tienes armas y armaduras de sobra, tráelas aquí.
Aparecen referencias a piedras similares en las leyendas de todas las culturas de Tamriel.
¡Papá te dijo a ti que lo hicieras, no a mí! ¡Déjame en paz!
Bueno... pero acaba ya.
¡Qué tortuga!
Me han designado administrador de Riften. ¿En qué puedo ayudarte?
¿Sí? ¿De qué se trata?
Algunos prefieren pasar la eternidad en su divino coto de caza, pero yo anhelo la compañía de Sovngarde.
No obstante, no confundas mi admiración con complacencia. Nuestro rival va a pagarlo muy caro.
Legado.
Toma, acepta esto. Iba a ser una recompensa para los mejores del grupo por su duro trabajo.
¡Vale, vale!
Si me encuentro tu mano en el bolsillo, te la corto.
Pero no va a poder conmigo, ah, no. No dejaré que esto me afecte ni lo más mínimo. Eso es lo que busca.
¡Se siente amenazada por mí! Por mi habilidad como hechicera, por mi elegancia y mi porte, ¡por mi belleza superior!
Tiene sus ventajas. Nunca me gustó tener al Imperio ante las puertas de mi hogar. Y Riften sería fácil de defender...
Mira, tengo que saberlo. ¿Qué hay entre tú y Brynjolf?
Así que primero necesitarás su aprobación. Ve a hablar con él. Seguro que te prestará atención y te estará esperando.
Si pasáis los dos a la armería a poneros vuestras armaduras de Ruiseñor, podremos comenzar el juramento.
¿Pero qué pasa con la prohibición del culto de Talos? ¿No merece la pena luchar por eso?
¿La mayor ilusión de la vida?
Dispara al objetivo de la izquierda.
Lo siento, mamá. Ahora que está muerto, solo quiero saber todo lo que pueda de él.
Por los huesos de Shor, chico. ¿Qué te dije?
No... Así no...
No le he visto en muchos años. Me pregunto qué habrá sido de él...
Me... han dicho que hay cierta tablilla de piedra en el interior del túmulo de las Cataratas Lúgubres; una "piedra de dragón" que supuestamente contiene un mapa de lugares de enterramiento de dragones.
Desde entonces, hemos vivido buenos y malos tiempos, pero había gente que no soportaba no reinar en su propia tierra. Ellos son los Renegados.
Necesito veinte para mi cosecha actual.
¿En serio? Estaría bien, para variar.
¡La aversión a sí mismo aumenta la cólera de Pelagio! Ah, pero su confianza empequeñecerá con cada golpe. Debes poner las dos en equilibrio.
No sé si soy la persona más indicada para husmear en sus cosas.
Ve, pues. Yo me mantendré alerta.
¿Especias? No tengo ni la menor idea de qué estás diciendo.
Por supuesto, tengo que pedirte un pequeño favor.
No me arrepiento de nada de lo que hicimos en Sombra Errática. Pero no puedo continuar con la mente nublada o el corazón apesadumbrado.
¡La excavación, Aicantar! En cuanto termine mi libro, comenzaremos de nuevo a excavar en Nchuand-Zel.
Kodlak tenía razón. Dejé que la venganza dominara mi corazón.
Pero, de vez en cuando, alguno vuelve nadando a la orilla.
El jarl tiene demasiadas cosas en la cabeza ahora mismo, así que no le molestaremos con esto.
Por desgracia, me he resignado a leer solamente sobre sus maravillas a través de mi investigación del Cráneo.
Ese era el último.
Ese simulacro de prisión de Riften tiene más fugas que una de sus redes de pesca. Es lo que pasa cuando dejas que los ladrones controlen tu ciudad.
Siempre acabo llorando en las bodas. ¿Qué se supone que debo hacer si soy yo quien se casa?
Y, por supuesto, mira qué sorpresa, uno se les ha escapado. Otra vez.
Se agradece dejar un tiempo la fragua.
¡Mételo en la trampa antes de que nos mate a todos!
Ah, te doy la bienvenida a Perfumes de Angeline. ¿Necesitas alguna hierba?
Parece que los infractores de las leyes del Pálido no tienen ningún deseo de permanecer allí. No les culpo.
El maestro Borri te enseñará "Wuld", que significa "torbellino".
Pero parece que sus criminales tampoco lo soportan y lo único que quieren es salir de allí.
¿No deberías estar camino de Carrera Blanca?
Siento tener que mandarte a la Marca de Hjaal. Ni yo soy capaz de soportar su olor.
¿En serio? Entonces quizás mi madre no esté loca después de todo.
¡Oyente! ¿Eres tú? Sabía que vendrías. Envía a los mejores para derrotar a los mejores. Astrid sabía que su lobo estúpido no podría matar al astuto Cicerón.
Creo que ha dado a entender que a él sí que le perjudican.
Mmm... Sí, ya me he enterado de todo ese lío. Por mi parte, estoy seguro de que no es más que un terrible malentendido. Estoy seguro de que eres inocente.
Me preguntaba si... no tienes ropa, o es que te gusta sentir el viento.
Bien, pues. Reunámonos esta tarde y dispongámoslo todo.
Me cuesta mucho creer que esta excavación haya sido aprobada.
Mi amiga ha muerto. Las cosas no serán lo mismo sin ella.
Alguien se les ha escapado, y tú tienes que encontrar a esa alimaña.
Toma. Me gustaría que te quedaras esto como muestra de mi amistad.
No pienso hablar contigo hasta que hayas limpiado todo este desastre.
Sí, pero lo ofreció como idea viable. Tal vez espera que sea útil, pero no desea arriesgarse a un fracaso personal.
Sí, claro, lo entiendo. No hace falta decidirse ahora.
Llegado este punto, ya les da igual lo que le ocurra a la fugitiva, y a mí también. Mejor que la mates y así pasamos a otra cosa.
Papá dice que no veré más a Roggvir, pero no me dice por qué no.
La copia está incompleta, y tan vieja que tiene partes ilegibles.
¿Que necesitas?
Sobre todo en Carrera Blanca. Ennis se encarga de los arreglos comerciales, pero sé que tiene varios compradores que nos ofrecen un precio justo.
Tenemos camas cómodas en la posada El bosque trenzado, por si andas buscando alojamiento.
Ten cuidado. Dicen que ese hombre es peligroso.
Necesitarás hacerte con el Colmillo de Kahvozein, por supuesto.
¿Tuviste una visión? ¿Hablas en serio?
Uno elige sus batallas, y tú has hecho tu elección. Ya se encargará otro.
Lo recordarás. Hasta entonces, tendrás que probar cada poción que hagas antes de venderlas.
Otro trabajo bien hecho. Te has ganado tu paga, y mi agradecimiento.
Quizá se hayan ido en busca de pastos más verdes. Sea cual sea el motivo, me alegro.
Poco a poco, traemos honor a esta tierra. También has traído honor a los Compañeros. Y algo más importante... oro.
Un momento... ¿qué es eso?
Han robado una baratija a una familia acaudalada, y quieren que la recuperemos.
Sí. Dijo que el jarl planeaba atacarnos por sorpresa, pero, gracias a sus dotes de persuasión, no lo hará. Dijo que nos ha ahorrado muchas molestias.
Mantenemos segura la Cuenca y llenamos de riqueza Markarth, pero ¿escucha el jarl lo que tenemos que decir? No.
Muévete. Tiemblo al pensar lo que pueda ocurrir si llegas demasiado tarde.
Una familia adinerada ha... perdido una de sus reliquias.
Esta vez tenemos un asunto bastante delicado entre manos.
Debe de ser mi imaginación.
Por la presente te concedo autorización para comprar propiedades en mi ciudad. Si te interesa, habla con mi administrador.
Toma. Se te prometió una recompensa por resolver el crimen, pero necesito que me hagas otro favor.
Entonces pronto deberíamos vender flechas a granel. Contra los dragones no sirven las espadas.
Esos habitantes de las colinas que se hacen llamar "los Renegados" no muestran ninguna piedad.
Recuerda, el camino de la Voz te instruye para algo más que para la batalla. De hecho, creemos que su uso en combate es la menor de sus utilidades.
Aunque algunos ni siquiera creen que existan, los falmer pueden ser muy ladinos. Entran en las casas a través de un túnel y se llevan los objetos de valor.
La Gran Guerra... Solo han pasado treinta años y ya es historia antigua para la mayoría.
Tu destino es Markarth.
No me puedo creer que todo haya terminado. Veinticinco años en el exilio y se acabó, como si nada.
Vipir "el Raudo". El único hombre lo bastante idiota como para ponerse un alias acorde con sus proezas de alcoba.
Me alegra saberlo. Puedes ser un hombre muy difícil de encontrar. Menos mal que esos mensajeros son muy tenaces.
¡Estabas en Helgen!
Confiamos en ti para esta misión. Trae honor a los Compañeros.
Mmm... Conocen nuestros planes mejor de lo que esperaba... No me gusta.
Supongo que sí. Al menos aprecian las costumbres y tradiciones del pueblo nórdico.
En Skyrim, nosotros asumimos la carga de aquellos que no quieren defender su honor.
Sí, y estoy en ello, pero también estoy intentando...
¡Vamos, ni siquiera te estás esforzando!
Tú y yo somos los mensajeros de la muerte. Juntos, daremos rienda suelta a la furia impía de Sithis, nuestro Pavoroso Padre.
Yatul ha estado enseñándome a cazar. Todavía estoy aprendiendo, pero ella es la mejor profesora que podría tener.
Ya he tomado las primeras medidas.
Te doy la bienvenida al Colegio de Bardos. Soy el director. ¿En qué puedo ayudarte?
Trae aquí. Han pedido la máxima discreción al respecto, así que yo me encargaré de que les llegue.
El género tiene un aspecto delicioso. Dame una manzana.
Los nórdicos nos desprecian, ¿y qué? Yo tampoco les tengo ningún cariño.
Ahora que estáis todos aquí, tomad asiento para que podamos empezar.
¡Son los imperiales! ¡A cubierto!
Vaya, no tan rápido, camarada. Me debes dinero.
¡Idiota! ¿Qué crees que estás haciendo?
Así es. Mientras, tenemos una guerra que planear.
Las cosas van mucho peor por aquí desde que Ulfric está al mando.
Si vienes de su parte, me temo que tendré que insistir en el pago original.
Creo que he localizado otro ídolo. Acompáñame e inscribiremos nuestros nombres en la historia.
Estoy demasiado enfadada para charlar...
No me interesa, Jaree. Me da igual cuántas veces me lo preguntes.
En fin, me alegro de que mi puesto en la fábrica de aguamiel de Espino Negro me mantenga ocupado. Me ayuda a no pensar en ciertas cosas.
Por Ysmir, ¿eres imbécil o demasiado joven para entenderlo?
Descansa, soldado. Todo forma parte del plan del Sangre de Dragón.
Objetos de aspecto común capaces de canalizar los poderes del hombre lobo hacia nuevas direcciones.
En una ocasión oí a Skjor y Kodlak hablar sobre los ídolos de Hircine.
¿Quieres acompañarme?
¿El Renegado? Sí, eso es, no temo decirlo. Todos los sabíamos. Hasta ese déspota necio de Mulush lo sabía. Y si no, pregúntale.
¿Buscas una armadura? ¿Un arma, quizás?
Como quieras. ¡Al ataque, Hewnon!
¿Es que has perdido el juicio?
Tú viajas de un sitio a otro, ¿no? ¿Has pasado por Carrera Blanca?
Primero Torygg, y ahora Elisif. Mal rayo parta a esos Capas de la Tormenta. Esperemos que Erikur tenga mejor suerte.
Solo hago lo que me han dicho.
Ah, alguien va a acabar haciéndose daño, lo sé...
¿Deberíamos arriesgarnos a dejar que esas nenazas pongan a la mujer de Thorryg en el trono? Entregará Skyrim a los elfos en bandeja de plata.
Que esto sea una lección para vosotros, cachorros. No hay reto que la magia no pueda superar.
¡Y maldita sea la asamblea!
¡Aaah!
Una normal no, pero esta...
¡Era una misión suicida! Eso dijo Astrid. Pero aquí estás, sin un rasguño.
Skyrim necesita a ese rey. Tú serás ese rey, Ulfric. Debes serlo.
Existe. Y será el símbolo de la justicia de nuestra causa. Piénsalo.
¿Seguro que la has encontrado?
Entonces, ve. Cumple tu destino. Lleva el Pergamino a la grieta temporal.
Hay quien dice que la Hermandad Oscura ha regresado con más fuerza que nunca. Y que han hecho de Lucero del Alba su hogar. Dime, ¿me equivoco?
Como Ruiseñor, hice un juramento y he de guardar el secreto.
Bien. Sin sangre vendrá aquí contigo.
Abajo en los muelles. Allí hay varios sitios buenos, si puedes evitar a los trabajadores de la Compañía del Imperio Oriental y a los matones de la Ola Roja.
Estaba trabajando con Vex y entramos sin problemas. Encontramos el botín y salimos.
Sabes, estás empezando a gustarme, pero aún no te has ganado un puesto aquí.
Me aseguraré de que acabe en la tumba lo antes posible. Gracias por traerla.
¿Lurbuk?
Con todos los soldados combatiendo en la guerra, no queda nadie para perseguir a los bandidos. Últimamente viajar se ha vuelto muy peligroso.
¡Sigues con vida! ¡Estoy impresionado! Galmar tenía sus dudas sobre ti, pero sabía que lo conseguirías. Deberías hablar con él. Va a necesitar tu ayuda.
Creo que Galmar te ha encargado un trabajo. Cúmplelo.
Esta es la última advertencia. Sal de ahí o enfréntate a las consecuencias.
Pero que te superen veinte a uno...
¡Tenemos que subir por las escaleras, es allí donde se encuentra! ¡Allí están los libros!
Lo siento mucho, esposo. Debes recordar que van a La abeja y el dardo a beber, no a escuchar sermones.
Te juzgué mal. Sin duda tienes madera de Capa de la Tormenta.
Sigues con vida. Le debo un trago a Ulfric. Debo admitir que no esperaba volver a verte.
¿Qué? No tenemos nada de qué hablar hasta que vuelvas de la isla de Piedra Ofidia.
Antes de convertirte en uno de nosotros, debes jurar fidelidad al jarl Ulfric Capa de la Tormenta, futuro rey supremo de Skyrim.
¡Exhibe tu valor en el foso! ¡Y si no tienes valor, exhibe tu dinero!
Así que voy a hacer lo siguiente. Me voy a marchar. Eso es. Ya he tenido bastante. Vacaciones... completadas. Es hora de volver a la rutina diaria.
Puedes atravesar con una espada a un imperial siempre que quieras, pero eso no te convierte en Capa de la Tormenta.
Por lo que oigo, le diste a los Thalmor donde más les duele. Parece que sabes elegir bien a tus enemigos, ¿eh?
Vuelve cuando te hayas comprometido con la causa o ve a unirte a la Legión. En estos tiempos, aceptan a todo lo que se mueve.
¿Vas a escribir una carta, señor?
¡Esto es terriblemente inapropiado! ¡Estamos sumidos en una investigación muy seria!
Debes de estar hablando del trabajo en la caravana...
¡Tocar para el hombre de a pie, claro está! ¿Por qué habrían de ser solo las cortes y las posadas de las ciudades ricas las que recibieran el don de la música?
Nos vemos.
"Juro poner mi sangre y mi honor al servicio de Ulfric Capa de la Tormenta..."
Los dragones son parte del orden natural del mundo. Los Cuchillas creían que podrían cambiar ese orden a su antojo, exterminando a los dragones.
Ese es el espíritu. Al prestar juramento te conviertes en uno de los nuestros. Un héroe del pueblo. Un auténtico hijo de Skyrim. Un Capa de la Tormenta. Repite conmigo.
¡Esa es nuestra ley! ¡Así es la antigua costumbre de Skyrim, y de todos los nórdicos!
"¡Saludad todos a los Capas de la Tormenta. Los verdaderos hijos e hijas de Skyrim!"
Sea cierto o no, ¿quién se atrevería a negar el derecho de Ulfric, cuando es él quien lleva la legendaria Corona dentada en su frente?
No se ha vuelto a ver a los merodeadores Sangre Negra desde el ataque al Corredor del Hielo, por lo que los envíos son más regulares.
La corona está hecha de huesos y dientes de antiguos dragones, y se dice que contiene una porción del poder de todos los reyes que la han llevado.
"Vientre que libera nieve afilada, dragones derribados de la nada, engendra el errante dolor de la helada, el rey supremo con su Corona dentada".
Ven a verme si encuentras un suelo sin fregar o una cama mal hecha.
¿No tienes nada que esté remotamente fresco?
Aquello fue para entrar en calor.
Si la corona existe, estará allí.
Lo habrá. Con toda seguridad.
Sí, muy bien.
Ya has demostrado que eres Sangre de Dragón. Tienes el don innato.
Vale. Como quieras, es hora de luchar.
Mi mujer Beitild ha muerto. No puedo decir que vaya a echar de menos a esa vieja tigresa de dientes de sable.
Gracias a fuentes que no se pueden revelar, he seguido la pista hasta la que parece ser la última morada del rey Borgas, Korvanjund.
Es cierto. El paradero de la corona se perdió con el rey Borgas. Después de morir en la Gran Caza, cuando estaba en las malditas campañas alesias.
Será mejor que entres. Deprisa. Han visto a los agentes Thalmor por la Ratonera.
Con tu tiempo, haz lo que quieras, pero no con el mío. Un aprendiz obedece a su maestro. Al menos, los buenos lo hacen.
Dime, ¿por qué has matado a los que se declaraban a mi servicio?
Supongo que sería muy persuasivo.
Aunque en mi opinión la causa de Ulfric es justa, me preocupan los habitantes de la Grieta.
Llevas sangre de lobo en tu interior. Pero tendrás que ganar en fuerza para volver a recurrir a ella.
Ah, sí, claro. Dije que te lo contaría, ¿no?
Aun sin maldiciones, las tumbas de los reyes están siempre repletas de trampas para protegerlas de los ladrones, ¿no es así?
Solo soy el edecán. Si necesitas algo, deberías hablar con Kraldar.
El clan Batallador goza de un orgulloso linaje en Carrera Blanca, pero, a diferencia de los Melena Gris, también tenemos riqueza.
Espero verte en Soledad. Buena suerte.
Algunos habitantes de las madrigueras solían trabajar aquí. Degaine se rompió algunos huesos hace tiempo. Eltrys lo dejó. Cairine ha contraído alguna enfermedad.
Tú calla y permanece alerta.
Tu objetivo es el fuerte Dunstad.
Me temo que tendrás que afrontar el final de tu viaje sin ayuda de nadie.
Así es. En la Gran Caza murió el viejo rey Borgas. Solo los dioses saben con qué artes profanas maldijeron los elfos sus restos.
Jefe mío, Gharol me ha amenazado con hacerme trabajar en las minas. No permitirás que mis hermosas manos se ensucien, ¿verdad?
Entrega esta hacha al jarl Hrongar.
Solo me preguntaba si tenías familia...
Suelo mantener la privacidad de mis clientes.
Ya me acuerdo... tú acabas de entrar en los Compañeros. ¿Y qué haces, servirles aguamiel?
Supongo que me equivocaba.
Mi hermana está ciega. Le he dicho que no debería pasar tanto tiempo con Yatul, pero no me escucha. Cree que es simpática.
Deberías hablar con mi hija, Evette. Ella es la que usa el cerebro en esta familia.
Sí, me he enterado. Creo que, a estas alturas, lo sabe ya todo Skyrim.
Llevo aquí desde que dejé el Colegio de Bardos. Resulta que un poco de músculo puede ganar más oro que un maldito laúd.
Tienes razón, vale, vale. Es que... Estaba segura de que era cosa suya. Y si no son los Thalmor, ¿quién? O... ¿qué?
Ahora no, chica. Karliah dijo que era importante.
Por fin... Ya tenemos el último ídolo. Vayamos a completar el conjunto.
Por desgracia, el futuro es tan incierto para nosotros como para ti. El sobrecogedor poder del Ojo nos dificulta su visión.
En segundo lugar, cambia el nombre de Arn en el registro de prisión por su nueva identidad.
¡Así es! Es el segundo ídolo. Aprisa, coloquémoslo junto al otro.
Sin duda coincide con la descripción del ídolo del libro antiguo de Skjor. Llevémoslo a la Forja Inferior.
El Imperio trajo estabilidad y seguridad al pueblo de Morthal, incluso aunque no lo agradeciesen. Y ahora, ¿qué es lo que tienen?
Era uno de los más fuertes que teníamos, pero la inferioridad numérica es aplastante. No debería haber acudido sin un hermano de escudo.
Mi novia ha muerto. Las cosas no serán lo mismo sin ella.
No es momento de hablar. Vayamos a la Forja Inferior y veamos lo que esto puede hacer.
En el año 41 de la Tercera Era, el emperador Pelagio Septim fue asesinado en el templo del Único en la Ciudad Imperial. Fue eliminado por un asesino de la Hermandad Oscura.
Esto es... No debería haber ido él solo.
Balgruuf rechaza el derecho de la Legión a guarnecer tropas en su ciudad.
Hircine nos bendecirá si encontramos su ídolo.
¿En qué puedo ayudarte, Oyente?
¡Llevaré a mis ancestros de vuelta a Sovngarde, y tú los acompañarás!
Claro. Bueno, pues es lo único que tengo.
He suavizado las cosas con ella por ahora, pero ya te puedes olvidar de tu parte.
No sé qué haremos ahora con él. Quizá tú consigas averiguarlo.
Procura no incendiar nada.
Las he oído, pero no pensé que fueran ciertas. ¿Has visto uno alguna vez?
Han estado viniendo viajeros a Carrera Blanca y cuentan historias de dragones.
Malditos rebeldes.
Me sería de gran ayuda que me trajeses tres más.
Por Sithis, ¿qué... qué ha pasado?
Tengo entendido que Korir se ha vuelto a quejar de nuestros clientes.
Así que puedes decirle a ese despiadado daedra que se acabó hacerle el trabajo sucio.
Adelante, mis leales. Dispersaos y examinad el terreno.
¿Necesitas algo? Habla con mi hermano, Elrindir.
Me alegro de que hayas venido. Hace tiempo que no tenemos un corazón como el tuyo en nuestras filas.
Eres un hombre muy valiente. Pero eso ya lo sabía.
Me alegro de verte. Por fin hay alguien útil por aquí.
¿Los círculos de piedras que hay al suroeste? Eso es el Beso de Secunda. Es sagrado para los gigantes, así que ve con cuidado.
¿De él? Oh... Ah, se llama Balablob o Malaclob, uno de esos divertidos nombres orcos, aunque habla bastante bien. No es un salvaje.
Entonces, ¿qué necesitas? ¿Quizá un poquito de esto y un poquito de lo otro? ¿Hmm?
Exigimos una compensación por la masacre de Río Congelado.
Vamos a tomar Lucero del Alba. Acude a la llamada y únete al resto de soldados que se agrupan para atacar. ¡Ahora mismo!
Esa es la clase de cosas que solía decir Kodlak. Y tenía razón. Pero, aun así, me gustaría verlo yo mismo.
Martillo Nevado.
¿Necesitas que repare tu arma? ¿O tal vez quieras una nueva?
Bueno, esa es una de las formas de averiguar si son reales. Incluso sé dónde podríamos encontrar uno. ¡Abre la marcha!
Que el jarl venga a pedirme dinero es cuestión de tiempo. Esta mina va a hacerme... quiero decir, a hacernos ricos.
Dicen que mató a doce miembros de la Legión Imperial y que les destrozó los huesos con su aliento.
¡Sí! Me gusta cómo piensas. También hay rumores de dónde podemos encontrar uno.
Los fragmentos que tenemos están expuestos en su honor, pero siempre buscamos más.
Brynjolf me contrató hace unos años. Me dijo que hacía falta algo de fuerza bruta en el gremio, así que me uní a ellos.
Te doy tres días antes de que metas la pata y acabes con un cuchillo en la garganta.
Bueno, entonces vamos a lo nuestro, ¿mmm?
El general y yo tenemos nuestras diferencias, pero él es la esperanza del Imperio y de Skyrim.
Gracias, heraldo.
¡Por la gloria de los Compañeros! ¡Por Ysgramor!
Me entrenaré mejor para el futuro.
¡Umf!
De lo contrario, Vilkas dirá que me lo estoy inventando.
No me atrevería a pedirte que acometieras un viaje tan traicionero. Sería una misión imposible.
Bueno, bueno, amiga mía. Tienes que ver el lado positivo. Si los soldados arrasan la ciudad, hay muchas posibilidades de que asesinen a tu marido.
¡Eh, por aquí!
¿Harías eso por un desconocido? No sé qué decirte. "Adelante", supongo.
¡Dovahkiin, tu Voz no es rival para la mía!
Tú eres quien apagó el faro, ¿no?
Hace un año, entraron ladrones en el Colegio y se llevaron varias cosas valiosas. Sobre todo, de oro y plata.
Por supuesto, siempre hay trabajo. Aunque se me ha ido el santo al cielo.
Mi hermano Dengeir puede ser... difícil. Tómate sus palabras con cautela.
¡Vaya! ¡Alguien ha matado a Grelod! ¡Ja, ja, ja, ja, ja!
Tulio ha montado campamentos en el Pálido, con idea de entrar en combate. El Imperio no deja de subestimar la fuerza de nuestra causa. Será su perdición.
No pensé que pescarían.
Mira qué idiota.
Quisiera purificarme para poder conocer la gloria en la otra vida.
La última enseñanza de Kodlak. Creo que tenía razón sobre la sangre de bestia y Sovngarde.
Ah, si ves a Shadr, recuérdale que aún está en deuda conmigo.
Pagarás... por esto...
Ayúdame a salir de aquí y te ayudaré a encontrarlos. ¡Por favor!
Sería un honor que me acompañaras, heraldo.
No tenemos el lujo de poder esperar a ver quién gana para elegir a nuestros amigos, Bryling. Y tú lo sabes.
Un ritual extraño, pero no me importa matar a una de esas horribles cosas.
Debes de ser de los peregrinos que van camino de Alto Hrothgar. No hay más motivos para pasar por aquí.
Vamos a la tumba. Allí podemos realizar la purificación.
Una vez que hayas adquirido la casa, vuelve a verme y te obsequiaré con tu título.
No es mi suerte, es el aguamiel lo que maldigo.
Mi alma ya está preparada.
Aún llevas una cabeza de las traidoras de Glenmoril, ¿verdad? Entonces abre la marcha a la Tumba de Ysgramor.
¿Cogiste la cabeza?
Muy bien. ¿Podrías volver a indicarme el camino hacia la tumba?
Voy... tan deprisa... como puedo, súcubo estúpido. No veo que tú... ayudes...
¿Qué? Es que has perdido la cabeza. A ese vejestorio solo le interesan los enanos muertos, más que a nadie que yo conozca.
No tengo nada que tratar contigo, así que largo de mi vista.
¡Sin piedad para los débiles!
Ya lo sé, nos acabamos de conocer. Pero creo que, para cuando haya acabado la fiesta, ya seremos amigos. O eso espero.
Necesitaré esto... No, no, es basura inútil... ¿Dónde he metido mi anuada anotada?
Cuanto más esperamos, peor se pone.
Gracias por tu ayuda. Voy a quedarme en la tumba durante un rato. La vergüenza me mantuvo fuera antes, ahora quiero verla.
Así es como debería sentirse un guerrero. Vivo y capaz. No enturbiado con pensamientos sobre la caza.
Es como relajarse en una jarra caliente de aguamiel especiada. Voy perdiendo dolores que no sabía que tenía.
¿En qué puedo ayudar?
Faralda puede enseñarte hechizos de destrucción, y se ofrece a enseñar las artes de esa escuela.
Con todo mi respeto, jarl. No puedes pedir a todo el mundo que se lance contra legionarios instruidos. Dejemos el combate en manos de los Capas de la Tormenta.
Ah, tú prefieres oír, ¿eh? ¡Claro, claro! ¡Un Oyente oye! ¡Es un chiste! ¡Menudo chiste! Lo he pillado.
Ahora... me gustaría pasar un tiempo comulgando con Ysgramor. Mi alma ya está limpia. Tal vez aún me reciba cuando llegue mi hora.
Permíteme que te obsequie con esta compensación por tus desinteresados esfuerzos.
Iré delante, pero será mejor que me cubras.
Ahora ya puedo respirar más profundamente. No puedo oler el latido de tu corazón como antes. Pero mi mente está... despejada.
Sin embargo, muchos se ven atraídos por ellas debido a las historias locales, que las describen como fuentes de gran poder.
Es... como despertarse de un sueño.
A veces hasta miran hacia arriba. ¿Qué es lo que ven? ¿Qué pasa si se tiran de cabeza? Entonces la locura comienza.
Pero los Pergaminos antiguos... Miras a izquierda y derecha en el cauce del tiempo. El futuro y el pasado son uno.
Soy el mejor guerrero de Morthal, y no es una fanfarronada.
¿Te lo he pedido? ¿Me has oído pedírtelo?
Yo no he perdido a una amante, Viola, he perdido a mi esposa. No es lo mismo.
¿Y qué pretendes hacer con él? ¿Sabes al menos de qué estás hablando, o no eres más que la chica de los recados de alguien?
En aquella época, buena parte de las tropas del Imperio eran nórdicos. Puede incluso que muchos fueran de por aquí.
La magia es para los débiles. Para los elfos, quiero decir. Ya procuran quedarse en ese Colegio de Hibernalia. Saben cuál es su sitio.
Estamos casados. Supongo que tendremos que decidir dónde vamos a vivir, ¿no? Siempre puedes quedarte conmigo.
¿Acaso pretendes dar la espalda a mi luminosa gloria? ¡Ve!
A juzgar por lo bien que manejaste a esos tenderos, diría que has hecho mucho más que demostrar tu valor. Necesitamos gente como tú en esta banda.
Un Pergamino antiguo es un instrumento de gran conocimiento y poder.
Hace siglos que no hay constancia de un Sangre de Dragón. Desde que el mismísimo Talos recorrió los 7.000 escalones hasta Alto Hrothgar.
Muy bien, Roggvir. Agacha la cabeza.
Lo sabía. Todo el mundo viene aquí buscando mi ayuda, pero nadie sabe cuáles son las preguntas adecuadas.
Haré lo que has pedido. Esto es por un buen fin, ¿verdad?
¡Muerto! Alguien va a pagar por esto.
Encárgate de que esto llegue puntualmente. Y no lo rayes.
Lo hemos conseguido. Se ha extraído la Estrella de Azura, y el alma de Malyn por fin experimenta algo de paz, aunque sea en la inexistencia.
Será mejor decírselo al jarl.
Estaría guardado bajo fuertes medidas de seguridad. Ni el mayor ladrón de este mundo lograría ponerle un dedo encima.
¿Acaso crees que, aun en el supuesto de tener uno aquí, te lo iba a dejar ver?
Las piedras no son lo que me preocupa, amor. Los Renegados están destrozando la Cuenca.
No sé su nombre, pero por aquí hay un tipo parecido. Pagó bastante dinero para que nadie supiera de él.
M'aiq ha oído muchas historias sobre la guerra... pero pocas son ciertas.
Ya han tenido conflictos con el Dominio de Aldmer en el pasado, y no tengo intención de que eso suceda aquí.
¿Qué pasa con...? Espera. ¿Eres tú? ¿Eres tú a quien llamaban los Barbas Grises?
¿Por qué no vas a charlar con la legada Rikke?
Yo fui de los pocos que sobrevivimos. Durante mucho tiempo, solo me preocupé de seguir con vida y de vengarme de los Thalmor en cuanto tuviera ocasión.
Bah, tendría que haberlo supuesto. Los tuyos no salen de ese Colegio de Hibernalia, como tiene que ser.
Tienes razón. Supongo que seguiré enseñándote... de momento.
Spriggan. Niels cayó antes de que echáramos a correr, y Ari murió dentro. Todo pasó tan deprisa que no parecía real.
Qué... ¿Qué ha sido eso? Me ha parecido que, durante un momento, todo resplandecía.
No tengo tiempo para tonterías. Ahora, ven tranquilamente y no tendremos que ponernos violentos.
No vuelvas hasta que todas y cada una de esas cosas hayan muerto.
Cada lector ve reflejos diferentes a través de lentes diferentes, por lo que el resultado puede ser una lectura muy diferente.
Es un reflejo de todos los posibles futuros y todos los posibles pasados.
Algún día dejaré de tener miedo. Y será pronto. Jouane me está enseñando magia. Dice que se me da bien.
No me creo que hayamos llegado a esto.
Soy inocente. Los nórdicos me tendieron una trampa. Yo no estaba cerca del arma del crimen para nada.
Los Pergaminos existen aquí, entre nosotros, pero también más allá. Antes y después. Son fragmentos de Divinos convertidos en sustancia de que podamos conocerlos.
"Que las escamas de dragón se astillen con el roce de tus flechas y se rompan bajo el peso de tu espada".
No hay honor en ser el sirviente de un jarl. No hay Sovngarde esperando para los que limpian el polvo.
Puedes ayudarnos con esto, y asegurarte de que nadie salga herido.
Me vuelvo a Narzulbur. Quiero ver cómo está ahora.
¿Tenía razón al oír que te dirigías a la arboleda del Brillo de los Antiguos?
¿Necesitas unos septim? Tengo la solución aquí mismo.
La verdad es que espero que te enfrentes a los dragones por nosotros. Un simple humano no es rival para un dragón.
Soy Uglarz, cazadora de todo.
Sí, legada.
Si alguna vez puedo ayudarte de alguna forma, dímelo.
Muy inteligente por tu parte. Ahora, lárgate de aquí, lamecabras, antes de que me dé por subirte el peaje.
Es en su capilla donde rezan los visitantes cuando visitan el Salón. Quieren que su divinidad guíe a sus ancestros en el camino a la próxima vida.
Una carta... No estoy seguro de quién la manda. No quiso decírmelo. Solo dijo que era amigo tuyo.
Malditos rebeldes Capas de la Tormenta.
Pienso en Uglarz. Una vieja amiga. Cuando éramos pequeños, se fue al bosque a cazar y nunca regresó.
Ahora en serio. ¿Cuál es el mensaje?
Tengo que atender a los clientes. Seguiremos hablando cuando vuelva a casa esta noche.
He tenido varias esposas. Pero cada una muere antes que la anterior.
La mina es rica, y nosotros también.
¡Al fin, ya podemos reabrir la mina y devolver la grandeza al Peñón de Shor!
¿Con solo rumores como base? No. Pero tú, siendo alguien de fuera, puede que descubras la verdad.
¿Tu familia? ¡Has envenenado a toda la Cuenca con tu plata impura demasiado tiempo, Thonar!
Por su negligencia. Durante la Gran Guerra, permitieron que los sucios nativos recuperaran la Cuenca y declararan su propia soberanía.
Es mi hijo. Yo... lo noto en mi corazón. Lo entenderías si tuvieras hijos.
Nunca regresó. Por el diario que descubriste, sin duda ya sabes el resto.
Los hombres y los mer construyeron el Sepulcro del Crepúsculo alrededor de él para protegerlo de aquellos que quisieran aprovecharse de su poder.
Ella dijo que te quedases ahí, y no hay más que hablar.
Puede que sea así, pero no deberíamos hacer concesiones antes de empezar la negociación. Es un signo de debilidad.
¿Cómo has acabado aquí?
Ten cuidado con esos Thalmor. Nunca se sabe...
Así que tenías razón. Ve a buscar al jarl. ¡Date prisa!
No puedo decir que me importe ver a todos esos guardias imperiales. Es un cambio a mejor.
Empecé a rezar a Zenithar, el dios de la riqueza, para que nos procurase mejor suerte, pero unos ladrones me robaron mi amuleto sagrado poco después de comprarlo.
¡No conseguirás nada de mí!
He explorado las ruinas y estoy seguro de que Karliah aún está dentro.
No, hablo de uno en concreto. El herrero ofrece una recompensa a cambio de un perro que vio en el camino. Esperaba que lo hubieras visto.
¿En el Vacío hay cantos? ¿Y bailes? Espero que el señor del temor permita al menos que el pobre Cicerón dé cabriolas...
Es sencillo, no sé a qué viene tanta historia con las cerraduras. Lo único que hace falta es un poco de conocimiento y mucha habilidad.
He oído que esos Renegados del oeste viven en cuevas. No será mucho peor que tratar de vivir en Ventalia.
Deshazte de Haldyn, y nosotros haremos el resto.
Iría a mirar yo mismo, pero... eeh... Sí, hay cálculos que comprobar y volver a comprobar. Muchos cálculos.
¿Mi consejo? Actúa siempre con honestidad con el anciano, pero no le digas nada que no necesite saber.
Luego, tendrás que... ¿todavía me estás haciendo caso?
¡Ojo con lo que haces!
Oh, era una persona distinta. Feliz, extrovertida... Como cualquiera que está enamorado.
Sucede siempre antes del amanecer. El mundo entero sumido en la oscuridad.
Tu nombre ha sido autorizado... por Thonar Sangre Argéntea. No puedes quejarte de tu suerte.
¿Sabías que esa vela no se ha apagado en cien años?
Me equivoco del todo, ¿verdad?
Ah, entonces mi reputación como amante me precede. ¿Quieres pensártelo mejor?
¿Esta es una ciudad de los enanos? He oído que el tesoro de sus ruinas vale una fortuna.
Tu última proeza ha dado mucho que hablar en el santuario...
Dicen que hacía experimentos indescriptibles sobre reanimación... rituales que solo un nigromante osaría realizar.
Temía no volver a verte nunca. Temía que te volvieras como los otros.
Si no fuera por esta Ruiseñor, tus temores habrían sido más que fundados. Nos honra con su presencia.
Si no fuera por este Ruiseñor, tus temores habrían sido más que fundados. Nos honra con su presencia.
No recuerdo haberte visto en una de estas antes. Y mira que conozco a todo el que es alguien en Skyrim.
¡No cruces el puente sin ayuda!
¿Qué harás ahora, amor mío?
Ven a verme en alguna otra ocasión. Podría necesitar tu ayuda.
Ten cuidado ahí fuera... No querría perder a alguien tan prometedor robando bolsas como tú.
Bueno, tienes a Maven, que se encarga de casi todo el tema. Tiene amigos en las altas esferas, si sabes lo que quiero decir.
¿Volveré a verte?
Pero está claro que comprar una de nuestras armas siempre te puede dar algo de ventaja en la lucha.
Cuando satisfagas tu deuda con Nocturnal, volveremos a abrazarnos.
Adiós, Galo. Abre los ojos... Camina por las sombras.
Busca recursos controlados por el enemigo, como aserraderos, molinos u hornos, y sabotéalos.
¿Otra vez? Pero si por allí no pasa ningún flujo de tierra.
Por favor, déjame... ¡déjame en paz!
Adiós, Karliah.
No saquemos conclusiones precipitadas. Investigaremos cuanto sea necesario hasta que sepamos qué tenemos entre manos.
En la ciudad todos conocen la existencia de la puerta negra y saben que no deben acercarse jamás.
Desde que ese cobarde imperial me ensartó por detrás me cuesta respirar. En cambio, no tengo problemas a la hora de beber.
Gracias por la visita.
Sigue buscando. Aquí hay alguien, puedo sentirlo.
Me muero de ganas de que se acabe esta fiesta.
Bueno, bueno, mírate. Los nórdicos te han convertido en un animal. Una bestia salvaje enjaulada y abandonada a la locura.
¡Ahora, Dovahkiin! ¡Ahora es vulnerable!
Si te involucras en este asunto, ahí es donde tienes que empezar a buscar.
¡Kren sosaal!
Si tratas bien a un caballo, te llevará hasta Oblivion y te traerá de vuelta.
Había leído el idioma de los dragones, pero escucharlo es más interesante.
Justo a tiempo. La gente de esta casa puso a uno de tus compañeros de gremio entre rejas. ¿Qué tal si haces que paguen por ello?
No se puede pedir mejor maestro que Oengul.
¿Tienes ya el oro o qué?
He decidido establecerme en el Salón de los Ruiseñores. Como también es vuestro hogar, espero veros allí a Brynjolf y a ti.
¡Hemos perdido! ¡Retiraos!
He oído decir a unos marineros que escondieron una botella de skooma de doble destilación en el garito de la esquina de Nueva Gnisis. Con probarlo me llega.
Ahora solo necesitamos los fragmentos del filo y la empuñadura.
Si este lugar llega a estar en peligro otra vez, las sombras te llamarán.
Te escucho.
Ir por ahí cargando con un peso así... duele tras un tiempo. Te corta por dentro como una daga clavada en el corazón.
No se espera nada. Este Colegio es un lugar para practicar y estudiar la magia con libertad.
Escucha, ¿podrías llevarle esta espada a mi padre, Provencio Avenicci? Es el administrador del jarl. Él sabrá cuál es el mejor momento para ofrecérsela.
¿Cómo van tus tareas, hijo mío?
Es un auténtico nórdico. Atenderá a razones.
No estés tan seguro. Hemos interceptado correos de Soledad. El Imperio está sometiendo a Carrera Blanca a mucha presión.
Si no está con nosotros, está contra nosotros.
Ya lo sabe. Todos los saben.
¡Por Ysmir, pagarás por eso!
¿Cuánto vas a esperar?
Entonces, ¿es cierto lo que dicen? ¿Los dioses me han bendecido?
No te pongas tan cursi conmigo, muchacha.
Mi querida Bryling. A excepción... de locuras y disparates... las buenas gentes de Haafingar son sin duda capaces de encargarse de los escasos bandoleros y de algún que otro perro callejero.
Yo solo quiero escapar de toda esta locura. Y si Olfina puede venirse conmigo, pues tanto mejor. Pero creo que ya he hablado de más.
Crees que debo enviar un mensaje más contundente a Hrongar.
Y ahora los dragones atacan por todas partes, de forma indiscriminada. Skyrim está debilitado, el Imperio entero lo está.
Crees que debo enviar un mensaje más contundente a Balgruuf.
Es difícil saberlo. El tiempo ha cambiado algo por aquí.
Sí, si por mensaje te refieres a una espada entre pecho y espalda.
Vaya, ¿qué tenemos aquí? Mmm. Déjame adivinar.
Hay uno de ellos al que recuerdo bien. Odahviing. Él nos dirá dónde ha ido Alduin.
No tenemos mucho tiempo para hablar, pero, ¿qué necesitabas?
Tomar su ciudad y dejar que la desgracia se cierna sobre él sería un mensaje más contundente, ¿no crees?
¿Por qué me desaparecen constantemente los materiales de mi investigación?
Hemos recibido una carta que indicaba que alguien necesita un poco de fuerza bruta en la Cuenca.
Todos los días son buenos, siempre y cuando no tenga que ir al pueblo. Pero a veces, Hjorunn está demasiado borracho...
He oído que Brynjolf quiere verte por lo del puesto de maestre del gremio. Supongo que me llegará el turno algún día, pero, por ahora, tú servirás.
Ah. Por supuesto. No todo el mundo sabe apreciar las maravillas artísticas del mundo.
Bah... Lo que es capaz de hacer un hombre por unas pocas monedas...
Me sorprende que te hayas atrevido a hacer acto de presencia.
Mzinchaleft. Juré que nunca volvería aquí.
La gente te apoya.
¿Tienes la osadía de intentar robarme?
A la mayoría de habitantes de Skyrim no les importan los dunmer. Roggi es el único un poco decente de por aquí.
Bueno... A decir verdad, no he sido muy discreta últimamente a la hora de expresar mi frustración por esta situación.
Que se mueran con sus falsos reyes.
Tal vez hayas visto ya el Colegio, al norte de aquí. Es un lugar muy prestigioso. Magos de toda Tamriel viajan hasta allí en busca de conocimientos.
No es una cuestión de religión, Brynjolf... Son negocios.
Oh, vamos, Niv. Las dos sabemos que te casaste con ese pescador por el oro. Conmigo no hace falta que te des estos aires.
Trabajo para ellos. La posada recibe su nombre de ellos. Cuando los guardias realizan un arresto, lo comprueban con ellos primero.
¡Tu sangre adornará mi espada!
Cuídate bien y ten presente que la orden está observando.
Deben pensar en sus familias.
¿Cuántos de sus hijos te seguirán en combate? Nosotros somos sus familias.
Bien dicho, amigo mío. Dime, Galmar, ¿por qué luchas a mi lado?
Sabes que te seguiría hasta el fin de Oblivion.
Moriría antes de permitir que los elfos dicten el destino de los hombres. ¿No estamos de acuerdo en eso?
Yo lucho por sus mujeres e hijos, cuyos nombres susurraron en su lecho de muerte.
Oh, eso. Eh, sí. Es... bastante prometedor, creo. Sin duda, voy por el camino correcto. Pronto, eh, tendré resultados.
Y recuerda siempre esto: no has de responder ante autoridad alguna, sea mortal o divina... Aquello que desees habrá de cumplirse.
Yo lucho por los hombres moribundos que he sostenido en mis brazos, por los hombres que han muerto en tierras extranjeras.
Yo lucho por mis paisanos empobrecidos que deben pagar las deudas de un Imperio demasiado débil para gobernarlos y que aun así los tacha de criminales por querer gobernarse a sí mismos.
Yo lucho por los pocos que regresamos a casa y encontramos nuestra tierra llena de extranjeros con rostros familiares.
Yo lucho para que todas las guerras anteriores sirvan para algo.
Faleen... Yo...
Ese dragón tendría que haberse quedado matando imperiales. Ahora descubrirá cómo combaten los auténticos nórdicos.
Casada. La sensación es distinta de lo que me esperaba, pero estoy feliz. ¿Dónde viviremos? Podrías quedarte conmigo...
Pero el día en el que las palabras basten será el día en el que los soldados ya no seamos necesarios.
Así que te lo preguntaré de nuevo, ¿Melena Gris o Batallador?
¡No toques esa daga! Es mía.
Bueno, hay un infusor aquí, en el gran salón.
He aquí un rostro que no esperaba ver. Ten cuidado, pues caminas entre víboras.
Muchos han desafiado al valle sombrío, pero todo el valor es en vano contra los peligros que guardan el camino.
Tú eres quien nos ha devuelto al bendito Sheogorath. Sería un honor que me wabbajackaras, excelencia.
Es una de esas cosas que pasan. Los pulmones... se rinden. Hasta los elfos envejecen.
Aaah, sí...
Una observación muy razonable... Bien, has venido al lugar indicado. Habla con Galmar.
Carne de cadalso, si no me equivoco.
Mientras tu pasado criminal siga siendo pasado y luches para mí con honor e integridad, te daremos la bienvenida a nuestras filas.
Veo que has meditado a fondo el tema. No te detendré, pero por favor, intenta también cumplir con tus deberes para con el templo.
¿Alguna noticia de nuestro pequeño problema en la Ratonera?
¡Te voy a despedazar!
Esto es Falkreath. No hay mucho que ver si uno está acostumbrado a las grandes ciudades, pero aquí la gente te trata bien si les das la ocasión.
Siempre busco luchadores capaces. Pocos pueden jactarse de haber salido de Helgen con vida.
¡Qué poca vergüenza, sugerir algo así, a mí nada menos! ¡Si estuviéramos en Riften, haría que te arrojasen a la mazmorra!
Mmm. Helgen, ¿eh? Ulfric nos ha contado la historia. Si has sobrevivido a todo eso, sin duda me resultarás de mucho valor.
Yo trato de incluirla en las clases de Maramal en el templo de Mara, pero ella prefiere ir de compras. Sobre gustos...
En primer lugar, nuestros datos sugieren que reina el descontento en una de las guarniciones rebeldes. Si jugamos bien nuestras cartas, puede que consigamos que se unan a nosotros.
Eso es lo que quiero oír.
Bueno, no hablaremos de esto nunca más, ¿vale?
Del tipo que se usa para medirse uno mismo.
Con el asesinato de Vici nos has permitido emprender un camino que la Hermandad Oscura no ha recorrido desde hace siglos. El magnicidio de un emperador.
Dos borrachos imperiales que pensaban que estaban por encima de la ley.
Nada más que unos bandidos de poca monta. Cobardes que no requerirán demasiado esfuerzo.
Tú ve y mata a un espectro del hielo, y para mí será la prueba que necesito.
¿A qué juegas? ¿Es alguna estratagema para retrasarme en mi tarea?
Esperemos que puedas demostrar que no se engañaba. Buena suerte.
Es una extraña formación rocosa, construida por los antiguos. Hay algo en ese lugar que atrae a los espectros del hielo.
Qué a gusto me metería ahora en una cama calentita...
Ahora te tenemos que endosar todos estos asesinatos. Y acallar a los testigos. Trabajo, trabajo y más trabajo.
Pero los señores daédricos tenemos nuestros enemigos. Boethiah, mi rival, ordenó a su sacerdote su profanación. Y dejó que se pudriera. Hasta que viniste.
La paciencia no es exactamente lo mío, pero vale.
Odio este lugar. Grelod la Buena es la persona más perversa de Skyrim.
Antes de poder acompañar a tu hermano de escudo, debes ser capaz de valerte por tu cuenta.
¿Has cambiado de idea? Bueno, no puedo rendirme tan fácilmente. Voy a regresar.
Al final del viaje, todos los guerreros acaban solos.
Lo siento, Marise. No puedo sentarme y ver que nos tratan como una fuente de ingresos. ¡Este es nuestro hogar!
Ah, por fin, alguien con quien hablar además de esos estúpidos guardias.
Que Talos te guarde.
¿Una oferta para captar más clientes? Camila, todo Cauce Boscoso compra ya aquí. No quedan clientes nuevos.
No sabía que fueras tan cruel...
Los reyes nórdicos... Perdón, los "jarl", no parece que sean capaces de controlar a su propia gente. Por eso la Legión ha tomado la iniciativa para restablecer el orden.
Buscas el sentido, el refugio del conocimiento. No lo hallarás.
No... No, eso es todo. Ahora... Por favor... De pronto me encuentro muy cansada.
Cuando mates a ese espectro del hielo, hablaremos de tu incorporación a los Capas de la Tormenta.
Vaya, ¡eres un amor! Si me traes el anillo, te enseñaré algo de alquimia, lo que pueda.
Aléjate un paso y déjame solucionar esto. Después hablaremos.
Procura no morirte.
Carne de unas presas recientes.
Ya lo veremos. ¿Verdad?
Mi familia lo es todo para mí. Despeja el fuerte de enemigos y, además de la recompensa que anunciamos, puedes quedarte con lo que quieras.
Pero aún no ha regresado, así que tendremos que esperar a oír su recomendación. Por ahora, ve a hablar con Galmar.
¿Ralof está vivo? Espero que así sea. Es uno de los mejores.
Con gusto. Te prometo que no volverá a molestarte más.
¡Venga, di el nombre de tu veneno! Ja, ja, ja. ¡Ah, nunca me canso de ese!
Dorthe... Tenía pensado tejer un par de mantas y vendérselas a Lucano. ¿Te gustaría hacer una? Quizá nos lo pasemos bien trabajando juntas.
Derkeeto me llevaba a bucear por las profundidades del río. Lo echo de menos.
Pero antes, dime. ¿Por qué quiere un bretón luchar por Skyrim?
¡Eh! ¿Qué intentas conseguir?
Los hombres sois unos cerdos... Solo os importa una cosa.
Thoring, ¿recuerdas la vez en que aquella manada de lobos irrumpió en el pueblo?
Ysgramor fue el héroe que originó los Compañeros. Wuuthrad era su arma.
No me importa que hayan elegido a Vex como tercera del gremio antes que a mí. Se lo merecía.
Ya lo veremos. ¿Verdad que sí, chicos?
Buen intento, tesoro, pero no soy un caballero, soy un mercenario. La respuesta sigue siendo no. Además, tu madre te echaría mucho de menos.
Cruzaremos cuando sea seguro.
Pero antes, dime. ¿Por qué quiere un orco luchar por Skyrim?
Vamos. Parece que hay problemas.
Aah... Pero antes, dime. ¿Por qué quiere un gato luchar por Skyrim?
Pero antes, dime. ¿Por qué quiere un elfo luchar por Skyrim?
No buscamos mercenarios. Los Capas de la Tormenta necesitan hombres y mujeres devotos a la causa y dispuestos a morir por ella.
¿Qué esperabas encontrar? ¿Querías verme haciendo malabares? Je, je.
Si no hubiera invertido hasta la última pizca de oro que tenía en el aserradero, ya me habría ido de Paraje de Ivar.
¡No hace falta ser bruscos!
¡Otra alma para nuestro señor!
Tienes permiso para entrar.
Oh, gracias; ahora que conozco el camino, no creo que tenga ningún problema. ¡Aunque hay que detener a esos bandidos!
Hace un frío espantoso aquí arriba. Y solo permiten entrar a los invitados. Malditos extranjeros y su falta de hospitalidad.
Mi marido y yo nos acabábamos de casar.
Si alguna vez se te ocurre coger algo de mi casa... te mataré.
Gayo Maro sigue con vida. Me sorprende. Había dado por hecho que eras más... competente.
Tenemos que irnos.
¡Mamá!
Ha llegado a mi conocimiento que un miembro de los más brillantes de la Mano de Plata ha estado curioseando por la Grieta.
Esto se acabó.
No obstante, me aseguraste que podías conseguirlas.
Entiendo. ¿Pero te atreverías a morir por tu hogar?
Es un honor contar con Viarmo para la instrucción de los tamborileros, pero es demasiado reservado para mi gusto.
El grupo que represento tiene su sede en la Ratonera, debajo de Riften... en una taberna llamada El jarro ajado.
Muy bien, pero antes de encomendarte algún trabajo, necesito saber cuánto eres capaz de soportar. Te haré una pequeña prueba.
Si eso no funciona, síguelo y comprueba en qué anda metido. Si conozco a Gulum-Ei, estará metido hasta el cuello y podrás usarlo en tu ventaja.
Vete y déjame en paz.
Si encuentras esa savia, te pagaré lo mismo que le ofrecí a él. No encontrarás mejor precio en ninguna otra parte.
¿Ah, sí? ¿Entonces Ulag no logró pasarla a través de esos gigantes? Qué lástima.
Ahora que ya se ha alcanzado cierta estabilidad entre el Dominio y el Imperio, nuestro único fin es ayudar a Skyrim.
¿Por qué no? El negocio va fatal. Casi todo el mundo prefiere cazar su propia carne antes que comprar la nuestra.
¿Entonces tu pueblo se puede rebelar contra el Imperio, pero el mío no?
Esperé y esperé, pero nunca regresó. Seguramente se haya ido a vivir con alguna furcia elfa. Pues nada, que le zurzan.
Todos en la Cuenca tienen una historia como la mía. No son espectadores inocentes en esta lucha. Son los culpables, y los muertos.
¡Por Carrera Blanca y Skyrim!
Yo no soy Madanach. Nunca fui líder de los Renegados. La única rabia que justifico es la mía.
Si necesitas un arco, hay uno en el soporte a la izquierda de la puerta.
Exacto. Cuando manejas un gran peso con la parte superior, la parte inferior del cuerpo debe compensar el peso o te caerás.
Vaya, es esta, ¿verdad?
Llegar tan siquiera a considerarlo sería señal de debilidad y tendría que abandonar la tribu.
No olvides llevarte a esta auxiliar. Podrás enviarla de vuelta cuando llegues allí y no veas más que huesos viejos y telarañas.
Tu intromisión me ha recordado lo alejado que estaba de la lucha. Mis hombres y yo deberíamos estar en las montañas, luchando.
Y hablando de música, he oído tocar a un par de compañeros de clase tuyos en la calle.
Imagínate tener que oír una historia como esta una y otra vez. Una familia distinta cada vez, una injusticia distinta cada vez.
Sí, pero necesito una prueba de lealtad. No quiero sentir un cuchillo en la espalda cuando nos fuguemos.
¡Por los dioses!
De acuerdo, Wilhlem. Supongo que es lo menos que puedo hacer por ti.
¿Qué? No. ¡No, no me mates! ¡Por favor!
Veamos... Tenemos el símbolo de "rey"... y "guerrero"...
Márchate. Ahora.
Ha sobrevivido más de lo que merece. Encárgate de él y nos iremos de la mina de Cidhna de una vez por todas.
¡Seguro que es mentira!
¿Has conocido a Grisvar el Cenizo? Su nombre es muy apropiado, y además es un ladrón y un soplón.
La espera me saca de quicio.
Ahora, apenas puedo contener su poder, y mucho menos derrotarlo si despierta. Pero con la ayuda de un adalid vivo podría tener éxito.
El Sínodo parece convencido de que se encuentra en Skyrim, en alguna parte. Me interrogaron acerca de las ruinas de Mzulft, pero no recuerdo mucho más.
Estamos preparando un ataque sobre Soledad. Acude allí y reúnete con el resto del ejército. Iniciaremos el ataque pronto. Que Talos te acompañe.
Necesito más hijos.
Bueno... Si tú lo dices.
Algunos queríamos averiguar cómo. Por aquel entonces trabajaba con Malyn Varen. Si supiéramos lo que planeaba en realidad.
¿Así que eso es lo que lleva? ¿Dinero y armas? ¿Cómo lo sabes?
¿En serio? ¡Pues resulta que hemos estado siguiendo una carreta un día entero!
La redonda, para afinar. La música dwemer es suave y sutil, y necesaria para abrir sus puertas más ingeniosas.
No hay mucho más que contar. Ese dragón pasó volando y destruyó todo el lugar. Se desató el caos.
Has llegado justo a tiempo.
Podemos acometer a la bestia o tratar de pasar desapercibidos. Tú decides. Te seguiremos.
Ah, eso son buenas noticias.
Es una suerte para nosotros que la carreta haya tenido hace poco un pequeño accidente. Ahora están allí tirados, ¡siguiendo por el camino!
Por la sangre de Shor, ¿qué han hecho?
Muy bien. Tener un administrador en el bolsillo siempre es práctico.
Además, los Thalmor recompensan generosamente a sus amigos. Hay que ser un testarudo idiota para no aprovecharse de eso.
Acabemos con este asunto.
Venga, vamos.
Boziik, Dovahkiin. Nuz mey.
Het siiv nunon dinok.
Si vuelves a deshonrar a los míos, te enterraré.
¿Qué pasa? ¿Busca pelea? Si no es así debería guardar su arma.
¡Alduin saraan hin sil ko Sovngarde!
He pasado mucho tiempo en los puestos del mercado para aprender el oficio de mercader. Necesito experiencia si pretendo regentar una posada algún día.
¡Un dragón cautivo! ¡Imagina las posibilidades!
Sigue esforzándote, joven. Ten siempre la vista en el horizonte.
¿De verdad? ¿Te ha elegido a ti? Espero que sepa lo que se hace.
Me alegraré cuando esa bestia se haya ido de Cuenca del Dragón. Nunca he entendido el sentido de todo esto.
Ulfric Capa de la Tormenta diría que le debo lealtad al pueblo nórdico, ya que ellos luchan por la independencia de Skyrim. Tal vez también sea así.
¡Mir!
Entonces mi hermano sí lo hizo. ¡Carrera Blanca será el orgullo de Skyrim por ello!
Un dragón en Cuenca del Dragón. ¿Quién se lo podía esperar?
Han secuestrado a alguien de la Grieta.
¡No puedes golpearme!
Mercer está aquí. Lo noto.
¿Es cierto? ¿Realmente capturaste un dragón en el gran pórtico?
No me fío de ellos. Ahora que lo pienso tampoco me fío de ti, pero al menos eres de la familia.
¿Quién de los dos crees que ha matado más rebeldes? ¿Tú o yo?
Me alegro de que se haya acabado ya ese asunto con Malyn. ¿Qué necesitabas?
También superviso las actividades de los justicias mayores Thalmor por todo Skyrim, aunque por desgracia esto ha sido interrumpido por la guerra.
Una de mis tareas principales es fomentar un mejor entendimiento entre el Dominio Aldmeri y el pueblo de Skyrim.
Ya sé por qué a los nórdicos les gusta Skyrim. ¡Este aire es maravilloso para los pulmones!
Pero estoy segura de que no has venido aquí a recibir una conferencia sobre política de alto nivel.
Vuelvo a mi libro...
Los dwemer eran, eh... eran maestros de la magia de una forma que no podemos ni concebir.
El Imperio y el Dominio estuvieron de acuerdo en que el culto a Talos era una reliquia del pasado, y que como tal debía ser eliminada en interés de la paz.
¿Otra vez? ¿Estás seguro? Aún no ha respondido a tus últimas invitaciones.
Tras la Gran Guerra, el Concordato Blanco y Dorado fijó los términos para la coexistencia pacífica entre los dos poderes.
¿Podemos hablar más tarde?
¡Hermano! Que Mara nos ampare, ¡estás vivo! Esa amistad tuya me contó lo de Helgen...
Un pez gordo está que trina por esto. ¿Cuento contigo para que lo hagas por mí?
El culto al falso dios Talos contribuyó a la desafortunada tirantez que condujo a la Gran Guerra.
¿Comprártelo? ¿Esto? ¿Un amuleto del consejo de ancianos?
Es... es muy valiosa. Resulta crucial para mi trabajo, y no hay otra igual. Eso es todo lo que diré por ahora.
Mientras el Imperio siga cumpliendo las obligaciones acordadas en los tratados, a mi gobierno no le incumbe la política interna de Skyrim.
¿Quieres algo de mí?
Cuando se puede adivinar el futuro, quizá no se pueda asegurar el éxito... pero al menos se puede anticipar. Ayuda el que ya haya pronosticado mi propia muerte.
Con todos esos asesinatos, es mal momento para los delincuentes.
Las presas siempre esperan.
No pasará nada.
Sí, coincide con la descripción de ese tal Esbern al que buscas. Puede que sea él. O puede que no.
¿Ah, sí? ¿Y tú qué? ¿Qué derecho tienes a entrometerte en mis asuntos? ¿A matar a los míos? ¿Merece la pena esa verdad tuya?
Ahora eres de los nuestros, ¿lo ves? Estás bajo una esclavitud, con la bota de los nórdicos oprimiéndote el pescuezo. Quizá si comprendieras eso podría ayudarte.
Con el tiempo acabas acostumbrándote al frío. Cuanto más trabajas, menos frío sientes.
Ahora eres de los nuestros, ¿lo ves? Estás bajo una esclavitud, con la bota de tus congéneres oprimiéndote el pescuezo. Quizá si comprendieras eso podría ayudarte.
Si alguna vez quieres sustituir esos viejos harapos, pásate por Ropajes Radiantes.
Muy bien. Entonces ven a por mí. ¡Acabemos con esto de una vez!
¡Por Ysgramor!
Solo tardaré un momento...
Reflexiona sobre el significado del espíritu. Unslaad zii. Cuando la carne mortal se aja y muere, el espíritu perdura.
Yo te conozco. ¿Dónde te he visto antes? Mm. ¡Ah! Tú me ibas a conseguir algo, ¿no?
Vaya que sí. Cazar es mi gran pasión.
Mmm. Sienta bien.
Vaya, qué idea tan interesante. Creo que, si alguien se atreviese a hacer algo así, habría, sin duda, un importante botín para compartir...
Dile que te envío yo. Pregúntale por qué está aquí. Quiero que comprendas lo extendida que está la injusticia de Markarth.
Dentro de estas minas se encuentra un hombre llamado Braig. Aparte de mí, es el que más tiempo lleva aquí.
Si cambias de idea, habla con Braig. Dile que yo te envío. Quiero que comprendas lo extendida que está la injusticia de Markarth.
Bueno, no exactamente.
Muchos dicen eso al principio, hasta que descubren la verdad.
No te acerques más.
Algunos de nosotros no quisimos postrarnos. Sabíamos que haciendo las cosas a la antigua usanza recuperaríamos nuestro reino.
Este era nuestro territorio. Estábamos nosotros antes. Entonces llegaron los nórdicos y nos encadenaron. Nos prohibieron adorar a nuestros dioses.
Vosotros los joorre, los mortales, lo creasteis como arma contra los dov... los dragones.
Y lo hice. Al principio fue humillante, pero yo sabía que con el tiempo bajaría la guardia, que se confiaría y se creería que me tenía bajo control.
Thonar Sangre Argéntea lo impidió. Quería tener a los Renegados a su disposición, y que yo condujera su ira hacia sus enemigos y dejase en paz a sus aliados.
El castigo no tardó en llegar. Me capturaron y juzgaron al instante, y me sentenciaron a muerte. Pero nunca llegaron a ejecutarme.
Yo tenía Markarth. Mis hombres y yo expulsamos a los nórdicos. Habíamos ganado, o eso creíamos.
Mmm. Puede que tengas razón. Siempre me sorprende la seriedad con la que los nórdicos se toman estas cosas.
El exilio es la experiencia más humillante que he tenido en mi vida.
¿Y por qué querrías dar conmigo, eh? No estoy seguro de disfrutar con tu presencia.
Yo no "temo" nada. Simplemente prefiero mercancía de calidad. No, esta carne no sirve. Demasiada grasa, y huele... mal.
Los Thalmor nunca olvidan.
¡Muere, asqueroso orco!
Has hecho un gran servicio a esta ciudad al atrapar a ese asesino. Bien hecho.
Claro que, al estar separados, Vile está mucho más débil. Supongo que le pareció que bien lo valía a cambio de no tener que seguir escuchándome.
Eso es cierto. Pero empiezo a preguntarme de qué lado estás. Aun así...
¿Qué... qué está pasando? No puedo controlarme.
Normalmente, solo se comunica información cuando es vital.
Estoy deseando aprender de las sacerdotisas.
Bien hecho. Ya has superado todas las pruebas.
Un final abrupto para nuestro juego.
¿Tienes familia? ¿Alguien que te espere fuera de aquí?
Y después de obligarme a contemplar cómo su cabeza caída rodando del bloque, me arrojaron aquí a extraer su plata.
Pero mi pequeña Aethra no quería que su papá la abandonara. Le rogó al jarl que la llevara en su lugar.
A los nórdicos les traía sin cuidado quién estaba involucrado en el alzamiento de los Renegados y quién no. Había conversado una vez con Madanach, y aquello bastó.
No hay peor enemigo para la humanidad en Tamriel. El Imperio casi no sobrevive a la última guerra, y los Thalmor no tienen intención de perder la siguiente.
Hum... De acuerdo... ¿Qué tal esta?
Esta vez no dispondrás de ningún hermano de escudo. Pero el espíritu de Ysgramor te acompañará para restaurar el honor de su legado.
Yo tuve una hija, una vez. Ahora tendría 23 años. Se casó con un platero muy fanático, o quizá aprendió por su cuenta el negocio de las hierbas.
¡Ah, por fin! Espero que no hayas tenido problemas.
Oh, venga, esto es aguamiel... No es vino para dar sorbos y saborearlo.
Si no te importa que te dé un consejo, evita buscar problemas en Markarth. O te meterán en la mina de Cidhna y ya no saldrás de allí.
Espero que nadie se pierda eso...
Nuestro destino es la torre de aquella colina. La gente de la zona la llama la Torre del Amanecer.
¿Cuánto tiempo más tendremos que trabajar en esta remota mina?
No conozco la historia de la torre, pero estuvo desierta durante muchos años, hasta que el templo de la Visita Nocturna se estableció en su interior.
No me atrevo a dejar esto sin vigilancia. ¿Puedes regresar al Colegio a informar a Savos Aren de este descubrimiento? Por favor, apresúrate.
Incluso cuando el templo seguía en activo, rara vez se veía a sus sacerdotes por Lucero del Alba. Preferían vivir vidas solitarias.
Nos encontraremos allí. Ten cuidado. Esa parte de la Cuenca es muy inhóspita últimamente.
Ni se te ocurra llevar nada encima. Los Thalmor se toman la seguridad muy en serio.
El templo lleva décadas abandonado. Resulta irónico, ¿no te parece? Unas ruinas... dentro de otras ruinas.
¡Me das lástima!
El jarl Igmund puede rehusar verme todas las veces que quiera, pero acabarán escuchando a la familia Sangre Argéntea.
Te está engañando.
Cuando el ritual se complete, el Cráneo será libre y Erandur se volverá contra ti.
Soy responsable de las operaciones diarias del Colegio, lo que significa que, si nos das problemas, te enviarán a verme.
Al mismo tiempo, esta atadura mejorará la energía vital del agente y le hará más fuerte.
¿Vas a subir los 7.000 escalones otra vez, Klimmek?
¿Quieres trabajar en algo que no tenga permiso oficial? No le digas a nadie lo que haces.
Vaya, vaya. ¡Mira quién es! ¿Qué tal estás?
Entonces no hay tiempo que perder. Los aliados de Sarthis no tardarán en enterarse de su muerte.
¡Libera el miasma! ¡Hazlo ya! ¡Date prisa, Casimir, vamos!
Ya le pillaremos cuando vuelva a pasar. No dispares.
Cuando llevas décadas haciendo negocios, te das cuenta de que solo te puedes fiar de tu sombra.
Solo te quedarás con lo que Malborn haya ido a buscar y con lo que puedas coger del interior.
¿Qué? ¿Y por qué iba a hacer eso?
¡Sangre de trol! Es una sala de torturas.
Estupendo.
No puedo. Si lo hago me cortarán la garganta.
No... No debería decir eso.
Lobos, trols, mamuts y gigantes que no tendrían ningún reparo en comernos como almuerzo.
Si usas dos armas no tendrás defensa y no podrás bloquear nada, pero si golpeas con ambas armas a la vez, puede que no se vuelva a levantar.
Es una tarea ingrata y, sí, preferiría estar en Elsweyr, mi hogar, pero no tengo elección.
¡Rulindil, bah! Algún día, cambiarán los papeles.
Hin laas los dii.
¡Bah!
¿Para qué conformarse con media aleta si se puede tener toda la ballena?
... aguamiel, aguamiel, aguamiel... ¡Mataría por un poco de cerveza de vez en cuando! ... Malditas abejas y maldita miel...
Pero mi negocio ha perdido actividad. Los Capas de la Tormenta no suelen comprarle a nadie que no sea nórdico.
Muy bien. Le dejaré en paz. Pero márchate.
Bueno, la verdad es que no mucho, no.
Tú delante, yo te sigo.
Bueno, es que... Endon es platero en Markarth, así que pensé...
¿Seguro? Tendré que pedirle que haga el juramento de abandonar su vida anterior y quedarse aquí a partir de ahora.
He notado un patrón en el momento en que se producen las muertes.
Además, estoy seguro de que tu encarcelamiento fue un grave malentendido.
No lo sé, veamos qué averiguamos.
Así que, en realidad, no ha cambiado gran cosa.
Por otro lado, son gente violenta. Cada noche hay una pelea y acabo con sillas rotas y alguna mesa partida.
¿Espino Negro? ¿Cómo te atreves a restregarme esa bazofia por la cara? ¡Preferiría beberme las babas de un mamut!
Al menos, los hombres de Balgruuf se bañaban con regularidad. Estos Capas de la Tormenta siempre huelen a cerveza y sudor, y les apesta el aliento.
No más de los que ya tenía.
Creo que le alegraría saber que nuestra colección ha provocado sonrisas en los rostros de jóvenes y ancianos.
Mi hermana falleció hace ya unos años, así que me asenté aquí y abrí la Casa de las curiosidades.
Sabía que había algo raro. Me aseguraré de que no le falta más el respeto a este sitio. La honradez es algo raro hoy en día. Gracias.
A medida que viajábamos por Tamriel, oímos relatos sobre artefactos exóticos y asombrosos. Así que nos dedicamos a reunir tantos como pudimos.
Bueno, ¿me has traído un poco de aguamiel?
De acuerdo. Coge tus libros y márchate de inmediato.
Pero... no hay manera de saber lo que significa "grito". Seguramente, algo propio de los dragones o del mismísimo Alduin.
Tienes que hablar con Mirabelle Ervine. Sus aposentos se encuentran en el Salón de la Tolerancia, pero ella podría estar en cualquier lugar.
¡En efecto! Por unos pocos septim, te hablaré de algunas de las curiosidades más interesantes de mi colección.
Una mano nueva toca la Luz.
¡Espléndido! Sígueme, por favor, y te contaré historias y te mostraré maravillas como no has visto ni oído en tu vida.
¿Mi personal satisface tus necesidades?
Buen trabajo. Acepta esto como pago.
¿Querías verme?
Ya sé que huí con la garra, ¡pero necesito ayuda!
He estado allí, pero no la conozco bien.
¡Qué va! De hecho, no sé cómo consigo hacer nada con todas las distracciones a las que debo hacer frente.
Los mejores guerreros de toda Skyrim me entrenaron para empuñar una espada como si fuera una extensión de mi brazo.
Vulwulf ha sido muy generoso al dejar que me encargue de su granja teniendo en cuenta que no formo parte de su familia.
¡Ah! ¡Auténtica sangre nórdica! Espero que vengas a luchar contra el Imperio.
Cobardica...
Mmm, mmm... ¿Algo más?
Otra trampa, seguramente. Estos trastos son peligrosos... tres de nuestros guardias murieron la semana pasada cuando la sala inferior se inundó de vapor.
Tenemos que llegar al interior. ¡Ya!
Te enseñaré un hechizo para percibir las cosas ocultas de las demás. Con él, podrás conseguir los textos que necesitas.
Sí, yo debo morir. Y tú debes asestar el golpe. Las cosas son así.
Hechiceros Renegados. Nunca me he fiado de los que se dedican a la magia. Ya tenemos bastante con el Colegio. Destrúyelos.
¿Adónde vas? ¡Los cuarteles están por aquí!
¡Venga! ¡Tenemos que llegar dentro!
Cuando Ulfric Capa de la Tormenta sea coronado como rey supremo, Skyrim será al fin como mis antepasados soñaban. Amanece un nuevo día en Markarth.
Recuerdo la Skyrim de mi juventud, y el resplandecer carmesí sobre los campos blancos.
Encantado de conocerte.
Comprueba tu mapa.
Muy bien. Si cambias de opinión, generalmente me encontrarás aquí. Mientras, puedes echar un vistazo.
Dile a Cicerón que ha llegado el momento. Transmítele las palabras que estaba esperando: "La oscuridad se alza cuando muere el silencio".
Si alguna vez quieres vender cualquier mercancía obtenida ilegalmente, también te ofrezco mis servicios como perista. Es lo mínimo que puedo hacer.
A ver si lo adivino. Preferirías jugar a "daedra y magos guerreros" con Ordnar. O ir a pescar, o atrapar ranas...
No te preocupes por él. He enviado a mis mejores hombres a capturarlo.
¡Yah!
¡Por supuesto que no! ¿Y qué ofrecerás por Riften, Tulio? ¿Promesas vacías? ¿Quizá más bravatas imperiales?
Algunos solo ven hojas en blanco, y nadie sabe por qué. Quizás algunos de nosotros nacemos sin destino, o quizás las páginas en blanco significan una muerte inminente.
La escritura del libro describe el destino de su lector, de modo que las palabras cambian de una persona a otra.
Escondimos lo que no podíamos transportar, y lo oculté con un truco que conozco. Te puedo decir dónde está y luego cada uno seguirá su camino.
La verdad es que estoy deseando volver a la superficie.
Ah, aquí tenemos un objeto de leyenda. Esta es la Cuchara sopera de Ysgramor.
Ya me imaginaba que no recordarías la primera vez que viniste aquí. Fue una gran noche. Creo que, definitivamente, te has ganado el bastón.
Aunque también puedes probar con el hechicero del jarl. Pero no te lo aconsejo.
Nadie conoce sus orígenes, pero las historias dicen que los hombres que escuchan su música se sienten forzados a bailar de forma descontrolada, sin importarles el peligro.
La leyenda cuenta que el Caramillo del bailarín ha ganado guerras, derribado Imperios y cambiado el mismísimo curso de la historia.
Tiene pinta de ser un mensaje del Gastrónomo a un tal Anton Virane. He seguido a Virane hasta el bastión de Markarth. Parece que es el cocinero.
Bueno, no se ha perdido, solo se ha olvidado. Los archivos de los Cuchillas guardaban tantos secretos... Solo pude salvar unas migajas...
Eh, ¿tienes algo más que decir?
Tu pago te espera. Y no te preocupes, que no soy tan estúpido como para traicionarte.
El aguamiel de Espino Negro está bien, si necesitas algo para lavar las pezuñas de tu rocín.
Las antiguas historias dicen que puede viajar a Sovngarde para devorar las almas de los muertos.
Ay, Sayma me despellejaría vivo si se me ocurriese sugerir poner un solo pie en el campo de batalla.
Puede que haya una cuestión en la que tus... habilidades... resultarían útiles.
Por último, fíjate en que el Colegio fue lo único que quedó en pie cuando casi toda Hibernalia fue destruida. Es bastante comprometedor.
¿Que has encontrado qué?
Ahora mismo, el gremio necesita a alguien que mantenga el orden. Todo el mundo espera las noticias de la desaparición de Mercer; no podía ser un momento más precario.
Hay que llevarle esta información al administrador. Él te escuchará.
Soy tuya, señor.
Si te encontrases con otras chucherías poco comunes como esta, no olvides traérmelas. Te prometo que te compensaré el esfuerzo.
Durante su vida mortal, Talos gozaba de una habilidad sin igual como estratega, una sabiduría ilimitada y la capacidad de ver el corazón de los hombres.
Mira, si vas a ir por Lucero del Alba, ¿podrías darle esta nota al jarl? Quiero que sepa que va a tener su madera.
No estuvo bien que me enamorara de Galo. Fue una distracción que permitió que el sepulcro se profanara y puede que también le costara la vida a él.
Hace mucho tiempo que formo parte de los Ruiseñores. Prometí fidelidad a Nocturnal a cambio de muchos años de robos provechosos.
Un grupo se ha ocultado en Falkreath.
Como muchos ya saben, se está intentando investigar las obras del archimago Shalidor.
Dile a Shadr que he olvidado su deuda.
Pese a que el Muro de Alduin fue muy famoso en sus tiempos -llegó a ser una de las maravillas del mundo antiguo- hemos olvidado dónde se encontraba.
Camila, ¿en serio? ¿No tienes nada mejor que hacer? Porque si quieres te busco unas cuantas tareas...
Como parte de sus "deberes", inventaron toda suerte de rituales y ceremonias en nombre de Nocturnal, pero sin ninguna base.
Aunque Nocturnal no desea que la adoren en el sentido tradicional, en el Sepulcro del Crepúsculo se creó un pequeño grupo de sacerdotes.
¿Qué crees que estás haciendo?
Ahora silencio. No pienses más en ello.
Teníamos un acuerdo de lo más interesante entre Thonar y Madanach, hasta que Eltrys y tú habéis empezado a husmear.
No sé lo que has oído, pero el comercio de Cauce Boscoso sigue abierto. Compra lo que quieras.
Sí, el bardo tiene talento, se lo concedo. Tan solo asegúrate de que su música es lo único que admiras de él.
No. Ya lo que creo que no. Pero ten cuidado e intenta que tu destreza no sobrepase tu sabiduría.
Si encontrases esa espada, caminante, te estaría muy agradecido.
Una de sus ceremonias incluía la Senda del Peregrino, una presunta "prueba de valía".
El conducto al reino de Nocturnal, el reino del Ocaso Eterno, lleva en Skyrim... bueno, desde siempre, que se sepa.
Sí, señor, por supuesto.
Avisaré a mis proveedores esta misma noche y haré el doble de pedidos.
Me estoy quedando sin gemas de alma comunes.
Ah, sí, me imagino que querrás ajustar cuentas con él. Lo último que he sabido es que estaba en los muelles de Soledad, supervisando la marcha del emperador.
¿Qué puede hacer uno cuando no puede acudir a su jarl en busca de ayuda?
Me gusta ver cómo se ríe de esa manera.
¡No temas a la penumbra, no hay nada que temer! El viejo Lurbuk iluminará tu espíritu. ¡Tú préstale atención!
Podrías probar allí, si es que consigues salir con vida de la Ratonera.
No me han nombrado guardia, aunque se lo he pedido. Así que, de momento, me encargaré de trabajos dispares; lo que vaya saliendo.
Oh, bueno, ya sabes. Hago de todo un poco.
Por eso abrí una tienda para tratar de salir adelante. Pero ahora...
No es que tuviera elección, te lo aseguro.
No había muchas opciones. Ranmir y yo crecimos aquí, y casi todo lo que gano, él se lo gasta en bebida.
Lástima que no haya tenido el mismo éxito aliviando la pobreza de esta ciudad. Nivenor cree que pierdo el tiempo intentándolo, pero yo no opino así.
Ahora pasa muy poco dinero por Hibernalia, pero si hay algo que no falta, es gente con ganas de echar un trago de vez en cuando.
(Ruido de una puerta abriéndose.)
Ah, deseo conocerte mejor. Pero tengo que atender a mi madre. Tal vez podamos hablar un momento...
Algunos somos o demasiado testarudos, o estamos demasiado locos para irnos, así que hacemos lo que podemos para sobrevivir.
Un cadáver no tiene nada de bonito, por muy reciente que sea.
Supongo que la respuesta sirve para ambos. Hibernalia está pasando por un mal momento, por decirlo sutilmente. Muchos hicieron los bártulos y se marcharon hace años.
¿Te refieres a la posada, o a Hibernalia?
Mmm. Supongo que servirá. Deberías pasar por uno de los invitados, al menos hasta que abras la boca.
¿No te he visto yo hablar con Sven? Puede que no. Puede... No importa. Pero yo que tú no me acercaría a él.
Por favor, ayúdame a buscar. Tiene el cabello y la barba de color rojo intenso.
Nos honra tenerte como thane de nuestra ciudad, Sangre de Dragón.
No te disculpes. Todos nos equivocamos.
Asimismo, comunicaré a mis guardias tu nuevo título. No queremos que te traten como a la plebe, ¿verdad?
¡Hola, señoritas! ¿Hay algo que un hombre recio y fuerte pueda hacer hoy por vosotras?
El comandante Cayo se pavonea por Cuenca del Dragón como un gallito de pelea. Yo podría hacer su trabajo con los ojos cerrados...
Te asigno a Lydia como tu edecán personal y esta arma de mi arsenal que te servirá de insignia.
Por mi derecho como jarl, te nombro thane de Carrera Blanca. Es el mayor honor que puedo concederte.
Ve al túmulo de las Cataratas Lúgubres, encuentra esa tablilla que sin duda estará en la cámara principal, y tráemela. Es sencillísimo.
Entre las tareas de la granja, cultivar raíces de nirn y tener controlada a mi hermana Aduri, me queda poco tiempo para descansar.
A mí me pareció un necio, pero en el caso de que tenga razón, el honor de los Compañeros nos exige que vayamos en su busca.
¿Ulfric Capa de la Tormenta? ¿El legítimo rey supremo? ¡Eso bordea la traición, amigo! ¡Levántate! ¡Te digo que te levantes!
No debería dejar que te fueras, sabiendo lo que sabes, pero supongo que incluso mi paranoia tiene un límite.
Un placer.
Las típicas sandeces imperiales. Hablas de Skyrim como si conocieses a sus gentes y sus tierras. ¡Eres de Cyrodiil! ¡No nos conoces en absoluto! ¡En absoluto!
Un grupo despreciable, pero no son más que simples ladronzuelos. Son perspicaces y astutos. No conviene tomarlos a la ligera.
Tengo mucha mercancía interesante para ti. Echa un vistazo.
Gorroneamos contratos, abandonamos los Preceptos. La Hermandad Oscura se ha visto reducida a un grupo de asesinos comunes. Sinceramente, es vergonzoso.
Más vale que esos argonianos haraganes muevan el trasero.
Ahora ve. Y dale un beso especial a la novia de mi parte.
El jarl me ha designado para ser tu edecán. Es un honor servirte.
La boda se celebra en esa ciudad, en el templo de los Divinos. Su muerte causará un gran revuelo, y eso es exactamente lo que queremos.
Tu objetivo es el fuerte Neugrad.
Está preocupada por ti. Todos lo estamos. Queremos que seas feliz, hacerte feliz.
Tu víctima se llama Vittoria Vici. Supervisa los negocios de la Compañía del Imperio Oriental en Soledad.
Ahora ve. Y dale a la ciudad de Soledad una celebración que no pueda olvidar fácilmente.
Los nórdicos no confían en la magia ni en los que la usan. Eso hizo que mi infancia fuera muy complicada.
Keevara tiene familia en una granja, a las afueras de Morrowind. Puede que te escuche si le dices que sabes algo sobre ella.
Vaya, qué pena. Y yo aquí, en la fábrica de sangre.
Has dado muestras de tu fuerza en combate. Que no se derrame más sangre.
¿A esto lo llamas pelea?
Quizá me estoy volviendo blando con los años, pero la verdad es que te creo.
Buscas pelea de la buena, ¿eh?
Namira, la Señora de la Putrefacción, te acepta tal y como eres. Tiene un lugar para nosotros donde podemos saciar nuestros apetitos sin que nos juzguen.
Después, ordena al esclavo que se entregue a la columna del sacrificio. Su magia lo atrapará y lo dejará indefenso.
Bandidos... El peor tipo de escoria.
Bien. Sabía que podía contar contigo. No es más que una bestia, pero ten cuidado. Las bestias de Skyrim son más resistentes que las demás.
Gracias a tus esfuerzos, la traición de Mercer ha quedado expuesta. Una vez nos ocupemos de él, todo lo que queda es restablecer la fuerza completa del gremio.
Ah, una última cosa. Un regalo de bienvenida: la armadura de la Hermandad Oscura. Que te sirva bien en tus... propósitos.
Mira el tamaño de este sitio. ¿Habías visto algo parecido en tu vida, muchacha?
Te sugiero que aprendas más cosas por tu cuenta. Vuelve cuando hayas logrado tener éxito.
Pocos quieren que les recuerden su mortalidad en tiempo de guerra, Kust.
Pues eso mismo, me temo. Tu falta de habilidad en alguna escuela de magia, para contribuir positivamente a las investigaciones del Colegio.
Es el mayor honor que probablemente pueda conseguir un Ruiseñor. En la muerte, se convierte en parte de donde solemos morar.
Bueno, bueno, mírate. Tus congéneres nórdicos te han convertido en un animal. Una bestia salvaje enjaulada y abandonada a la locura.
Y bien, mi querida bestia, ¿qué quieres? ¿Respuestas acerca de los Renegados? ¿Venganza por haber intentado matarte?
¿Tu libertad? Sí, pero incluso si consiguieras escapar de la mina de Cidhna, tu nombre seguiría manchado con toda esa sangre.
Buscan a un viejo llamado Esbern. Tiene algo que ver con dragones, o eso les oí comentar mientras creían que estaba inconsciente.
Dice que nos pagará muy pronto. Todavía conserva su empleo en la fábrica de aguamiel, así que algo tendrá.
Aquí hay mucha gente que aprecia el trabajo de Eorlund, cariño. Nunca tuvimos motivo alguno para comerciar con esas caravanas suyas.
¿Sigues trabajando en La yegua abanderada por las mañanas, Olfina?
¿Te parece mal? Que sea una Melena Gris no significa que no pueda ganarme la vida.
No pretendía... Perdona por habértelo preguntado.
Ah, tú eras Ysolda, ¿no? ¿Qué te trae al mercado?
A toda esta gente le traen sin cuidado los aspectos religiosos de esta guerra. Un signo más de la degeneración del Imperio.
He venido a comprar comida, Nazeem. Supongo que no necesitas preocuparte por eso.
Te hablaré de aquella vez que era una jovencita, apenas pasada la adolescencia... que vivía en una granja de cerdos en mitad de la nada.
¿Has visto a un perro ahí fuera?
Solo hay una forma de averiguarlo. Intenta gritar...
Estoy tan contenta de que hayas podido asistir hoy.
Oh, vaya. El herrero ofrece una recompensa a cambio de un perro que vio en el camino. Esperaba que lo hubieras visto.
Ah, bien. Estaba esperándola.
Con quien tienes que hablar es con mi padre, Kleppr. Yo me limito a limpiar.
Estoy ocupada, y me estás molestando. Así que vete.
La verdad es que no lo sé. El herrero ofrece una recompensa a cambio de un perro que vio en el camino. Esperaba que lo hubieras visto.
Les pedí a los guardias de la puerta que lo buscasen. No puedo permitirme perseguirlo, pero me iría bien la compañía de una bestia leal y fiera.
Ugh...
Ay, no sé. Sí, ganaríamos más dinero, pero no me gusta la idea de que viajes solo, con la guerra y los rumores de dragones.
¡Bien! Puedes ganar algo de dinero si tienes éxito. Aquí está la carne... Busca en el camino que hay al salir de la ciudad.
¿Una tregua? ¿Con los imperiales? Nos matarán a todos en cuanto tengan la oportunidad.
¿Es absolutamente necesario que me molestes ahora mismo?
No, este anda solo por el camino a la salida de la ciudad. No puedo permitirme perseguirlo, pero me vendría bien la compañía de una bestia leal y fiera.
Además, Melena Gris nunca forjará aceros para la legión.
Si quisieras atraparlo por mí, te daría algo de carne fresca para que lo atraigas en el camino.
¿Te parece un septim? Espera, mejor que sean dos. Hoy tengo ganas de fiesta.
Supongo que estará en la atalaya. No te metas en líos mientras sigas aquí, forastero.
Como si encuentra a un enano saltarín: no puedo permitir que vaya liándolo todo. Ya tenemos bastantes problemas sin ella.
Verás, me llamo Barabas. Tengo un problema y creo que puedes ayudarme a resolverlo.
Pudimos descifrar el último texto que nos trajiste. Me pareció que lo mínimo que podía hacer era transmitir el conocimiento.
Va avanzando poco a poco. Espero tener resultados pronto.
Le acabo de poner la mano encima. No puedo trabajar más rápido.
¿Reconocerá que los nórdicos merecemos elegir nuestro propio futuro?
Ha intentado no involucrarse en la guerra, pero esto ya no puede durar. Tendrá que elegir un bando. Y me temo que va a tomar la decisión equivocada.
Tenéis la oportunidad de preservar el Colegio y seguir con vuestras vidas.
¿Estás segura de que no quieres algo para eso? Podría prepararte algo que ayude.
Bueno... bien. Da igual, tampoco iba a hacer nada con ella. Mmf.
Ahora... Ahora veremos si mis teorías son correctas.
Kaan...
Me disculpo por no haber sido más claro acerca de mi trabajo. No quería hablar de ello por temor a que este momento no llegase nunca.
Todo el mundo sabe que los enanos desaparecieron. Nadie sabe por qué.
Por la autoridad de Mara, divina del amor, declaro casada a esta pareja.
Este pequeño experimento es el primer paso para recrear los acontecimientos de su desaparición, con la intención de resolver el misterio.
En ausencia de un dios muerto, lo sustituiré por el cristal que habéis ayudado a crear.
Tampoco cuento con División, el equivalente de la daga Afiladura. Sin embargo, estoy seguro de que funcionará.
Ah, la magia solo trae problemas. Si ya no hay vuelta atrás, tienes el Colegio de Hibernalia, o el hechicero de la corte de Ulfric. Pero luego no vengas con que no te lo advertí.
Lo cierto es que no espero obtener los mismos resultados. ¡No soy ningún arquitecto tonal, por supuesto!
Un muchacho que vivía aquí. Avento Aretino. Era muy agradable, pero muy callado y triste porque su madre acababa de morir.
Bien, supongo que ha llegado la hora, ¿no? Veamos lo que ocurre. Tú, eh... Mejor será que retrocedas un paso o dos.
Dile que cuidaré de ellos. Solo quiero que mi hija sea feliz.
Mmm. No... no ha ocurrido nada, ¿verdad?
Quizá un poco más fuerte.
No lo entiendo. Esto debería tener resultados considerables.
¡Funciona, maldita sea!
No tiene sentido luchar.
No hay ningún motivo para pelear.
No veo ningún motivo para luchar.
Madanach. He traído lo que pediste.
Por suerte no saben quién es. Si no fuera así, no serviría bebidas en las fiestas de la embajadora.
Ya no me interesa luchar.
Esta lucha no tiene sentido.
No veo ningún motivo para seguir luchando.
¡Brrr! ¡Qué frío! Esto te encantará. No formaba parte originalmente del santuario de por sí. Digamos que es un "añadido forzado". ¿Forzado por qué? Ah, ¡ven y lo verás!
No veo por qué nadie iba a usarlas.
¿Por qué nos estamos molestando con esto?
¿Por qué estoy luchando?
Si te diriges al Palacio Azul, quizá debas pensarte mejor si ir con esa indumentaria.
De repente, no me apetece luchar.
Un asesino anda suelto...
Ahí, por favor. Justo frente a mí. No quiero que nadie se ponga en medio.
El sanctasanctórum espera delante. Tenemos que alcanzar el Cráneo y poner fin a los problemas de Lucero del Alba. Te sigo.
Aunque la idea parece dudosa siendo generosos, no hemos sido capaces todavía de descartarla completamente.
Además, sugiere que nosotros estamos de alguna forma fuera de nuestra propia existencia mientras la estamos contemplando.
Esto por supuesto significaría que Tamriel, la entera totalidad de Mundus, está realmente contenido dentro de la esfera.
Se ha propuesto que el objeto sea de hecho la totalidad de Aurbis en un espacio físico.
Se ha sugerido que el objeto es un portal al dominio de Aetherio, pero no hay ninguna prueba en este sentido ni en el otro.
Actualmente no tenemos ninguna indicación de que, tal como se rumorea, el objeto sea realmente parte física de Magnus, el dios de la magia.
Apártate de mí, basura de Skyrim.
Y se están considerando absolutamente todas las teorías. Aquellos que tengáis cualquier idea, por favor pasad a hablar con Mirabelle.
Es responsable de atrocidades tan infames que serán recordadas durante miles de años.
Claro. ¿Pero y si la enviamos a ella primero?
Continúan las obras en eso que la gente llama el Ojo de Magnus.
Ni liivrah hin moro. Cierto, no es la krongrah... la victoria final. Pero ni siquiera los héroes de antaño pudieron derrotar a Alduin en una batalla frontal.
Tenemos en marcha proyectos para discernir el origen y la naturaleza del reciente hallazgo del Colegio en Saarthal.
Todavía no hemos tenido señales de vida suyas.
Agradeceríamos enormemente cualquier información sobre el paradero del anterior grupo de aprendices.
Sí, ya dijiste eso ayer.
Eso va contra la política del Colegio, así que rogamos a los sujetos responsables que depongan su actitud de inmediato.
También quiere recordaros que, si encuentra al responsable, es un especialista en hacer desaparecer cosas permanentemente.
Solo te diré que tienes el Thu'um de un dovah, pero jamás pondrás un pie en Skuldafn si no tienes alas de dovah.
No se realizarán más experimentos allí, y el mago que pretenda entrar en el pudridero lo hará bajo su propio riesgo.
El acceso al pudridero continúa prohibido. Aunque el brote inicial ya ha sido erradicado, la zona sigue considerándose peligrosa.
Hemos tenido otra torcedura de tobillo debido al abandono de gemas de alma en el suelo. Tratad de limitar en lo posible este tipo de lesiones.
Una vez más debo pedir la recogida de cualquier material utilizado en las zonas comunes.
¿Eres de la ciudad? Yo voy a Carrera Blanca de vez en cuando, sobre todo para cerrar tratos.
El no cumplir esta norma conllevará, en palabras de Urag, el pago de "un precio de sangre". No le pedí que me diera más detalles.
Si es imposible debido a un uso incorrecto o a un accidente, Urag recomienda encontrar una copia sustitutiva para entregarla al arcaneum.
El pago te espera en un punto de recogida. Está dentro de una urna, en la misma cámara donde nos encontramos por primera vez, en Volunruud.
Sí, la verdad. Alquimia y las bendiciones de un Divino destiladas en forma de líquido ingerible.
Los atronach tienen tendencia a asustar a los lugareños. Los muertos vivientes... Bueno, creo que eso no tengo ni que decirlo.
Evita practicar hechizos de conjuración si te puede ver alguien de Hibernalia.
Me gustaría aprovechar esta oportunidad para comentarte algunas regulaciones del Colegio.
He recibido órdenes de informar a todos los visitantes de que lady Elisif no se encuentra bien. Te desea un buen día y te ruega que vengas en otro momento.
Los khajiitas no son bienvenidos en las ciudades, así que acampamos en el exterior de los muros.
¿Incrementó su inteligencia y conocimiento de formas que no podemos comprender? Es posible que nunca lo sepamos con certeza.
¿Es posible que, de algún modo, haya contribuido a su trabajo? ¿Tal vez le permitió vivir varias vidas en un corto espacio de tiempo?
¿Qué pasa entonces con ese Glamoril? Significa "secreto de la vida" en élfico. ¿Podría ser una explicación para la obra de Shalidor?
Tú... te quedarás al mando aquí hasta que pueda arreglar todo esto.
De hecho, el abanico era tan amplio que sigue generando mucha curiosidad.
Lo interesante es que, según parece, también era muy prolífico y escribía sobre un amplio abanico de temas.
Antes de que todo este jaleo empezara, aquí solían trabajar el doble de mineros.
Lo único que está en mi mano es pulir sus habilidades y fortalecer su corazón. El resto depende de los dioses.
¡Escúchame!
Como su edecán, la seguridad de Igmund es mi principal preocupación.
¿Entonces Cicerón no estaba hablando con nadie? ¿Él... hablaba con el cuerpo de la Madre Noche?
Tu trabajo consiste en colarte en la fiesta sin que te detecten como espía. Yo me ocuparé del resto.
¿Qué ocurre? ¿No soportas la imagen de una recia mujer nórdica?
Hubo historias desde la Primera Era, pero nadie ha confirmado nunca la existencia de ese "Glamoril", ni su propósito o función.
A Oblivion contigo.
Escucha, chica. Tengo fe en ti. Sé que suena extraño viniendo de un ladrón, pero estos acontecimientos recientes han cambiado mi punto de vista.
Si se hubieran salido con la suya, no harías nada más que sentarte en lo alto de su montaña y hablar al cielo, o lo que sea que haga esa gente.
Todo mago de este Colegio usa custodias normalmente para practicar, así como para evitar daños físicos.
¡Acércate más!
Y lo que es más importante, las custodias salvan vidas, y eso es un hecho.
Sé de buena tinta que, en un momento u otro, todo el mundo de este Colegio ha confiado en los hechizos de restauración para mantenerlos a raya.
Primero, que no se puede ignorar la capacidad de repeler a los no muertos.
Pero bueno, cariño, estoy hablando de asuntos académicos, no de política.
Ante la llama antigua...
Ah, ¿y cuándo va a ser eso? ¿Cuando venda mis tierras a los Sangre Argéntea?
Me gustaría recordarle a todo el mundo, una vez más, que la escuela de la restauración sí que es una escuela de magia válida.
¿No has oído? ¡He dicho que están atacando el bastión!
Di lo menos posible para evitar comprometer nuestra posición neutral.
No, no... Maramal... Ya lo hemos hablado. Talen...
Permite que te alivie del peso de esa bolsa de monedas. Y también de esas botas tan bonitas que llevas.
El archimago Aren creía que su conflicto supone una amenaza importante a la autonomía de nuestro Colegio, y yo estoy de acuerdo.
Parece que podemos atravesar esta cámara por arriba o por abajo. Tú decides.
El archimago Aren cree que su conflicto supone una amenaza importante a la autonomía de nuestro Colegio, y yo estoy de acuerdo.
Los Thalmor son paranoicos y meticulosos. No cruzarás la puerta principal con nada que no sea la ropa que lleves puesta.
El Crepúsculo cuida de ti.
Pero eso es lo que les prometimos a Ulfric y a sus hombres. Parece absurdo volviendo la vista atrás, pero en aquel momento esperábamos que los elfos no lo averiguaran.
No me cabe duda. ¿Cuál quieres?
Si necesitas algo, deberías hablar con Anton. Es el jefe de cocina.
¿La verdad? Fue tan fácil que me siento un poco culpable. De nuevo, la dulce e inocente niña despertó más confianza de lo sensato.
Eso sí que es una forma rápida de plantarse ante el verdugo.
De esta forma, podrán afirmar que el Sínodo es una minoría política en el Imperio y que debería ser tratada como tal.
El Colegio de los Susurros espera descubrir que nuestro Colegio también apoya estas vías de investigación.
Débil. Es débil. Tú eres fuerte. Aplástalo.
... debería haberme dado cuenta de que mentía...Dijo que me esperaría... pero nunca esperan...
El círculo de magos de Bashnag. Vivimos... bueno, "viven" aquí. Han dejado bien claro que ya no soy bienvenida.
Kodlak es el que decide quién puede formar parte de los Compañeros. Ve a hablar con él. Yo no puedo hacer nada.
Hablaré con Aela sobre cómo has actuado. Vuelve más tarde.
Decidí contar con los servicios de Enthir para que, eh... para que se hiciera con algo concreto.
¡Por favor, desátame!
Aren creía que, aunque los comunicados iniciales eran lo bastante inocentes, fueron enviados con un motivo en particular.
Hasta ahora, y por petición del archimago Aren, el Colegio de Hibernalia ha declinado peticiones de reuniones directas.
No es ningún secreto que tanto el Sínodo como el Colegio de los Susurros han investigado recientemente el estado de nuestro Colegio, aquí, en Hibernalia.
¿La muerte? Oh, desde luego hay muerte por aquí, eso está claro.
Su antigüedad aún no se ha determinado oficialmente, aunque la mayoría supone que se colocaron durante la Era Merética.
Además, su colocación por Skyrim no se corresponde con ningún otro fenómeno mágico que se conozca.
Algún día, los Renegados pintarán las murallas de Markarth con la sangre de tu gente. Procura no estar allí ese día.
El trol guardián de Kyne te aguarda. Completa esta prueba y habrás demostrado tu valía en la caza.
Gerdur...
No obstante, ninguna coincide exactamente con las marcas o la distribución propias de las piedras de Skyrim.
¡No puedes escapar!
La opinión dominante entre los habitantes de Skyrim es que las piedras tienen una naturaleza mágica.
Pero me oyes, es obvio. Hay algo que no funciona bien. Al menos, voy haciendo progresos.
¿Es que no hemos acabado de cotorrear? Te has enamorado de esa fresca de Esmerelda, la del plumaje oscuro, ¿verdad? ¡No pienso dejar que te posea!
Los Thalmor me usarían para dar ejemplo a los demás... Me tirarían a un calabozo y el honor de mi familia quedaría mancillado durante generaciones.
Sin embargo solo concedo ese título a alguien que sea conocido en toda mi comarca, y que tenga al menos una propiedad en mi ciudad.
Quería volver a darte las gracias por el pastel de carne que me enviaste. Estaba delicioso.
Me llevaría a la ruina.
¡Venga, solo una manzana, Carlotta! Una pequeñita. Te la pagaré mañana, te lo juro.
Tengo una mina que llevar, si me perdonas...
Es una caravana que se mueve bastante despacio. El cargamento es bastante pesado y está custodiado por muchos hombres.
Nunca. Han acabado con nosotros para siempre. Los Divinos nos han abandonado.
Creo que me quedaré aquí y disfrutaré del calor del Brillo de los Antiguos un poco más.
Dibella, guíanos.
Es una caravana que se mueve muy despacio. El cargamento es bastante pesado y está custodiado por muchos hombres.
Lo están llevando en carromato hasta Ventalia. Si te das prisa, los alcanzarás antes de que se alejen demasiado.
No, no me convences. ¿Cómo sé que no seguirás chantajeándome? ¿Es que no te basta con un carromato cargado de plata?
De acuerdo. Confío en que una buena bolsa cargada de septim sea suficiente...
Pero no lo tienes, ¿verdad?
¡Me has derrotado!
¡Qué día tan bonito! ¡Huele el aire! ¿No es maravilloso?
Supongo que no tengo elección en este asunto, ¿no?
Por favor, sírvete más vino.
Según las leyendas de la antigüedad, solo los Sangre de Dragón pueden gritar sin instrucción de la forma en que lo hacen los dragones.
Oh, no. No pienso decirte nada más hasta que no hayamos llegado a un acuerdo.
¡Este es mi tesoro!
Mujer, ahí hay un filón de malaquita tan grueso como mi pierna.
Cuando un nuevo gobierno toma el mando, puede perder algunos registros, olvidarse de ciertos impuestos y no aplicar determinadas leyes.
Por el momento, querría hablar con Karliah.
En cuanto a ti, general Tulio, ahora veo que Galmar tenía razón. Dialogar con el Imperio es tan inútil como siempre.
Nocturnal, sálvame...
Nueva hermana, te doy mi más sincera bienvenida a la Familia.
Tan solo quiere que sigas sus pasos.
¡Y esta es, amigos, la fea verdad! ¡Somos hijos del hombre! ¡Talos es el auténtico dios de los hombres! ¡Emergido de la carne para gobernar en el reino del espíritu!
Pero qué... ¡soy invisible!
¡Sé uno con el Ocaso Eterno!
Con mi habilidad forzando cerraduras, tengo facilidad para el escapismo... Y he ganado mucho dinero haciéndolo.
Silencio. Ya conoces las reglas: no hables a menos que se te diga. Rulindil hará las preguntas.
Tengo toda la eternidad para encontrarte.
Ya está muerto. Y lo que es peor, el encantamiento que lo mantiene intacto requiere almas negras. No sé a cuánta gente habrá matado.
¿Se mueve algo en la oscuridad?
En los tiempos de leyenda, cuando los mortales sufrían grandes penurias, la diosa Kynareth nos concedió la capacidad de hablar con los dragones.
Y no nos olvidemos de su tripulación, leales y sanguinarios, todos ellos,
Sí, sí. Vamos a ver qué tenemos...
Ah, y hay una enemistad declarada entre las dos familias de los Melena Gris y los Batallador. Ve con mucho cuidado por ahí.
Se acabaron los juegos. ¡Es hora de enfrentarte a tu muerte!
¡Las sombras te han traicionado!
Has atraído mi atención, mortal. Eso ha sido muy imprudente.
No espero que seas capaz ni de hacer eso.
¡Defended el Pozo de Ébano! ¡Matad al mortal!
Esta no es una orden para cobardes. Estoy seguro de que encontraré a alguien más capaz.
¡Has exhalado tu último aliento, mortal!
¡Que la oscuridad te parta en dos!
¡Papá!
¡Defiende el Sepulcro a toda costa!
No me malinterpretes, el tipo podría quitarle hasta el último septim a un mendigo... pero no es ningún genio.
¡Acéptalo, mortal!
"Con Talos como testigo, que este juramento me comprometa hasta más allá de la muerte..."
Les interesaba la investigación en campos que van más allá de lo que el Colegio permite, así que se les... convenció para marcharse.
Quizás no era nada...
Cuidado en tu viaje. Acechan grandes peligros.
Gracias. Puede ser un poco difícil de tratar, pero seguro que aprecia tu ayuda.
Mmm... Entonces tal vez seas tú el que habla con él...
Bruja cuervo o horker, eso da igual. Tenemos flechas para derribar cualquier pieza.
¡Otra alma reclamada para lady Nocturnal!
Me encantaría tener a una de esas ratas imperiales bajo mis botas...
El intruso ha desaparecido.
Déjame darte un consejo.
¡Lagarto estúpido! ¡Te he dicho que me pongas otra bebida o ensarto tu cabeza en una pica!
Tú y yo detendremos a esos dragones, hasta que consigamos que no quede ni uno más en el cielo.
Pero no puedo prescindir de un aliado potencial en estos tiempos. A ver si eres algo más que un simple mercenario.
Dicen que los Sangre de Dragón pueden gritar sin apenas entrenamiento. Como el mismísimo Talos...
Helgird ha llevado el cuerpo al Salón de los Muertos para prepararlo para el entierro. Está un poco loca, pero si de algo sabe, es de cadáveres.
"Justo" es una palabra que rara vez se oye en política, ilustrísima. Me temo que debes aprender a aceptarlo.
¡Las sombras te han fallado!
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre de la granja de Sarethi.
Hay demasiados salvajes sin educación que creen que pueden tirar basura por donde les plazca...
Espera, solo queremos...
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre del aserradero de Duramen.
Otra chica muerta. Es Susanna, del salón El calor de la vela.
No estoy seguro. Creo que voy a emprender otro viaje.
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre de Paraje de Ivar.
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre de la granja de Loreio.
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre del aserradero de Anga.
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre de Heljarchen.
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre del aserradero de la Media Luna.
Está bien conocer a alguien que, para variar, no pretende robarme ni arrancarme la cabeza.
No sé si hicieron bien ejecutándolo por lo que hizo, pero te diré algo...
¡Es ella! ¡Es la que preguntaba por Esbern! ¡Matadla!
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre de Baldío de Karth.
Los Capas de la Tormenta pagarán una compensación adecuada por la masacre de Paraje de Rorik.
Mira, no es mala idea. Pareces alguien que sabe defenderse bien contra esas bestias.
¿No he sido siempre un buen padre? ¿Un buen jefe?
Es el dios de la misericordia. El patrón del orden y la justicia para todos en Tamriel.
Esto es muy atípico. Confío en que, sea lo que sea, no comprometa mi posición de ninguna forma.
¡Condenados basureros! ¿Por qué no os quedáis muertos?
Esos mequetrefes de Hibernalia se han rebajado a pedir nuestra ayuda.
¿Necesitas un caballo? Habla con mi padre, Skulvar.
Pensaba que el barrio Gris sería un lugar seguro para los míos. Me equivoqué.
¡Sométete a su voluntad!
¡Que caigan las sombras!
¿Veis de qué sirve hablar con ellos?
¡Pues claro! Cada vez que miro el cielo de noche, doy gracias a mis estrellas de la suerte porque Maven me diera esta oportunidad.
¡Que las sombras te lleven!
No es que se fueran de viaje todos estos años. Estaban muertos. Asesinados hace años por mis antepasados.
Necesitarás recurrir al sigilo y la mentira para superar a sus guardias. Asesina al jarl rápida y silenciosamente. Y si has de entablar combate, sobrevive y escapa.
Ahora hay una cierta preocupación porque ese mago, Falion, lo enturbie todo.
Hemos conseguido un poco de oro. Toma, cielo, tu parte.
Hay más encantamientos por hacer. Puedes conseguir lo que sea y traérmelo aquí, luego ya me ocuparé yo de ello.
(Grito ahogado) ¡Al fin ha venido alguien!... Yo...
Jo, gracias por la ayuda.
Es reconfortante ver que no todo el mundo la desprecia por entero, como muchos miembros del Colegio. Reconfortante de verdad.
Solo quería darte las gracias como corresponde por todo lo que has hecho.
Soy Hermaeus Mora, guardián de lo invisible y conocedor de lo desconocido. Te he estado observando, mortal.
En este punto, he aprendido a confiar en su criterio. Después de todo, los Ruiseñores debemos permanecer unidos, ¿eh?
Bájame. ¡Bájame!
Ha costado mucho llegar a este día. Tanta preparación, tantas maniobras. Es como si las estrellas por fin se hubieran alineado.
No, estoy casi segura de que pretende tendernos una emboscada aquí abajo.
¿Para qué te pago, para estar ahí plantado todo el día? Tendrías que estar trayendo mercancía a la tienda.
Justo al norte de Ventalia, hay una roca cuyo interior está hueco. Allí escondo algunas cosas. ¡Quédatelas! Son tuyas.
Me pregunto quién le sustituirá en el Círculo.
Mercer ha sido muy cauteloso hasta ahora. No creo que dejara estos planos a menos que tuviera sus motivos.
He previsto ese problema. Mientras tú preparabas este encuentro, yo estuve trabajando en la biblioteca del templo de Refugio Celestial.
A Enthir no le llevó mucho encontrar un libro en la biblioteca del Colegio en el que se hablaba de Irkngthand y de una gran estatua que tenía gemas en lugar de ojos.
Hay algunos problemas en Haafingar. La Legión está demasiado ocupada con la guerra, y nos han contratado para que nos ocupemos de sus problemas.
Oye, te has acercado tú. Si te falta valor, es tu problema.
El escudo de mi clan. Así que Lenne sí que se topó con aquella cueva y fue devorado por monstruos...
Pues yo preferiría que no lo hicieran. ¿Has visto sus ojos? ¡No tienen! Qué asco.
Como muestra de mi aprecio, he dado instrucciones a Avenicci para que te permita adquirir una propiedad en la ciudad.
Yo, ehh... espera, ¿qué?
Ahora lo tenemos encerrado allí, pero aún desafía a cualquiera que lo mire mal.
Nos veremos allí.
Es probable.
Ven, mortal, ¡acabemos con esto aquí y ahora!
No te preocupes, hiciste el trabajo y lo hiciste bien. Y lo que es más importante, hay más en el lugar de donde vino eso... si crees que puedes ocuparte.
¡Torolf!
Ahora nos sirve honorablemente como thane, y para el gran beneficio del fuerte, yo soy el jarl.
Háblame, hermana de escudo.
¿Si los Capas de la Tormenta logran su objetivo de derrocar el dominio imperial en Skyrim, quién sería su protector? No. Aplastaremos esta rebelión. Debemos hacerlo.
¡Sí! No es perfecta, ¡pero con eso tendría que bastar para las pruebas iniciales!
Esto será todo por ahora. He de decir que me sigue decepcionando tu falta de cooperación. Espero que la próxima vez lo hagas mejor.
Hay algunos problemas en la Marca Oriental. Los granjeros se están viendo acosados por algunos indeseables que han construido una fortaleza en la zona.
¿Nos vamos ya?
Sigo esperando esas notas, si es que puedes conseguirlas.
Y luego está la tragedia de la casa de Hroggar.
¡Estoy tan furiosa que voy a explotar!
He oído que Valdr ha vuelto sano y salvo. Lo siento por los demás, aunque mira, una cosa menos de la que preocuparse.
Ahora todo está en tus manos... Oyente.
Y no fue hasta un tiempo después que se descubrió que ese individuo haría un... uso inadecuado de ese bastón.
Espera... ¿quién diantres es ese?
¿Por qué está esto tan enterrado en las profundidades de Saarthal?
Es demasiado tarde para eso. Déjame. Sálvate tú.
Venga. Dame la mano, voy a sacarte de aquí.
Oh, ¿de verdad? Así que ese elfo oscuro me cogió el anillo. Es tan típico de los de su raza.
Aunque es difícil creer que hasta Balgruuf escogería a Elisif antes que a Ulfric.
Sí, padre. ¿Y qué barril abrimos?
Sigamos avanzando.
Dadme... un momento tan solo...
¿Te has enterado? ¡Han robado en el comercio de Cauce Boscoso! El pobre Lucano debe de estar destrozado.
Me... me impresiona tu iniciativa. Por supuesto, alguien tendrá que averiguar más cosas sobre esto.
En honor a tu servicio en combate, por la presente te concedo permiso para comprar propiedades en Ventalia. Habla con mi administrador si te interesa.
¿Cómo te va, thane?
El jarl me ha aconsejado no hablar de los sirvientes de la corte a los que me gustaría golpear. Es una pena.
Supongo que ahora es jarl Elisif. Se casó con el rey supremo Torygg justo antes de que Ulfric lo matara. El Imperio apoya su reivindicación de ser reina suprema.
Nos estamos quedando sin flechas.
Aquí no. En la Forja Inferior. Vamos.
Gracias. ¡Gracias! La profecía de Azura siempre te guiará hacia la fortuna.
Vamos a marchar a la guarida de Movarth tanto si nos acompañas como si no.
No me digas que a ti, nada más y nada menos, te da miedo el combate.
Ulfric lo acusó de traicionar a Skyrim y lo mató en combate singular.
Hay quien dice que lo asesinó, pero fue un desafío legítimo al modo antiguo.
Tenemos problemas justo aquí, en la comarca de Carrera Blanca. Nada que no podamos manejar.
Ha estado bien pasar el rato con alguien que disfruta el tiro con arco tanto como yo.
No, doy la bienvenida abiertamente a todos los extranjeros que no tienen razón alguna para ocuparse de nosotros.
Hasta otra, señor.
Vamos a entregar la ciudad a Brunwulf Invierno Libre, un hombre honorable y fiel.
Ten los ojos y los oídos bien abiertos.
Matad a cualquier intruso. Pedid refuerzos de ser necesarios. Pero que no pase nadie.
Comida reciente. La madera no está podrida. Alguien ha estado aquí. Hace poco.
Si el bosque no fuera tan peligroso, me pasaría todo mi tiempo libre cabalgando.
Bah. Los dioses tienen un lugar para los asesinos. ¿No soportas la carga? Eres débil.
Mentiroso.
Ahora te vienes con nosotros. Te ha caído una cadena perpetua en la mina de Cidhna.
Te enviaré a despejar el fuerte Hraggstad. Si sobrevives, superarás la prueba.
¿Acaso te crees que nadie más lo sabe? Teníamos un acuerdo de lo más interesante entre Thonar y Madanach. Hasta que apareciste tú.
¿Los nórdicos no respetáis vuestras tradiciones? Creía que la asamblea elegía al rey.
Eso me han dicho. Procura dar la talla.
Lo único que espera Madanach es una botella de skooma como tributo de vez en cuando. No vas a pasar.
Si no podemos poner freno a esto, ¿qué le sucederá al resto de Skyrim?
Eso parece.
¿Qué tal todo hoy en la forja?
Estaba deseando que lo dijeses.
¿No me digas? Qué bien.
Escuchad. ¡Todos vosotros!
¡Me prometiste que barrerías la entrada!
Está bien. Da la vuelta y lárgate.
¡Muerte a los nórdicos!
Una historia prometedora. Ahora ni siquiera se encargan de su propio trabajo sucio, ¿eh? ¡Bueno, no me vencerás!
No vayas trasteando con las cerraduras de la gente o vamos a tener un problema de verdad.
El viejo Delvin seguía llamándolo una maldición y nos reímos de él. Parece que ahora se ríen de nosotros.
Puede que Mercer haya dañado nuestra reputación y saqueado nuestros cofres, pero esto va incluso mucho más allá de su retorcida forma de robar.
¡Atrás!
Sí, y algunas de las cosas que dijo Karliah comienzan a tener sentido.
Además, prefiero morir con sangre de Mercer en mi espada que pasar el resto de mi vida lamentando haber corrido en sentido contrario.
¿Has estado alguna vez en Cruce de Agua Oscura? Es un nombre terrible para tan hermoso lugar.
Con cuidado. Tenemos que averiguar lo que ha pasado.
Te lo repito, yo no... Espera, ¿y este anillo? ¡Esto no es mío!
Si me lo hubieras preguntado ayer, te habría dicho que no. Pero ahora creo que nuestras opciones han mejorado.
Ah, sí. No soy un maestro de la Voz como esos caballeros tan dignos, pero está escrito aquí, en este pergamino.
Con la Llave maestra desaparecida del Sepulcro del Crepúsculo, me temo que Mercer ha conseguido que ninguno de nosotros pueda beneficiarse de los dones de Nocturnal.
No te ofendas por los apodos, bocadito. Soy un hombre lobo. Es difícil no verte como un aperitivo.
Para que recibamos nuestras habilidades... nuestra parte del trato, me temo que hemos de recuperar la Llave.
¿Conoces Cuenca del Dragón? ¿El palacio del jarl de Carrera Blanca?
¿Estás pensando usar esa arma?
Sin duda, seguimos contando con su favor y creo que eso nos da ventaja suficiente como para acabar con Mercer Frey.
Un grupo se ha ocultado en la Marca de Hjaal.
Si Nocturnal estuviera realmente disgustada conmigo... o con cualquiera de nosotros, no habría respondido a mi llamada.
Mata a esos magos lo antes posible, o convocarán monstruos a los que te aseguro que no nos interesa enfrentarnos.
Cuando la Llave maestra haya vuelto al Sepulcro del Crepúsculo, yo también convertiré este lugar en mi hogar.
Sheogorath, príncipe daédrico de la locura. A tu servicio.
En mi época, sabíamos sacar la basura como es debido.
Verás que este lugar ofrece muchas cosas que te ayudarán en tus empresas, además de toda la información que tienes a tu disposición.
Bueno, pues los gigantes se encargaron de él, y tú te has encargado de ellos. Dos problemas resueltos.
Sé que va a ocurrir pronto, estoy seguro. Encontraremos algo mejor que el hierro. Plata, quizás oro. Ya lo verás.
Sí. Ahora que eres de los nuestros, puedes considerarlo tu casa.
El único modo de devolver este lugar a su época dorada es terminando estos trabajos y consiguiendo que el oro vuelva a fluir.
¡Todavía puedo luchar!
Habla con el jugador desesperado del cuartel de Ventalia. Acepta su oro y elimina al objetivo. Así comienza un contrato, con un pacto de sangre.
Haciendo estos trabajos extra y metiendo algo de miedo a la gente, podremos recuperar las ciudades y que nos tomen de nuevo en serio.
No es más que una flauta. Una flauta muy vieja y valiosa, pero una flauta, al fin y al cabo.
No podemos llevarnos a otro campesino de la superficie tan pronto. ¡Te dije que lo prepararas todo como es debido!
Hace años, el gremio solía estar asentado en todas las ciudades importantes de Skyrim. Nadie se atrevía a levantar ni una manzana sin pedirnos antes permiso.
El festival no habría sido posible sin la dedicación y el duro trabajo de nuestro último candidato.
¿No deberías estar ayudándome, esposa mía? ¿Compartiendo mis problemas? ¿Siendo mi media naranja?
Ventalia es un poco fría para mi gusto. Y no hablo del tiempo. Tú no eres de Ventalia, ¿no?
¿Y si no, qué, exactamente? ¡Esta ciudad no funcionaría sin mí! Y ahora, si me perdonas, mi trabajo me espera.
Gracias a Maven Espino Negro, todavía tenemos cierto peso en Riften. Pero si te arrestan en Carrera Blanca, te encarcelarán sin contemplaciones.
Habla con Urag en el arcaneum. Entérate de si conoce algo que encaje con tu descubrimiento.
Será un placer.
El jarl ofrece una recompensa por matar un gigante. Toma, echa un vistazo a este decreto para informarte.
¡Esperad a que se acerque para disparar!
Mañana. A la misma hora.
Lo mejor de todo es que volveríamos a tener oro suficiente para vivir de nuevo a cuerpo de rey.
Si volvemos a hacernos un nombre en Skyrim, estoy prácticamente segura de que los mercaderes volverían.
Pero no me cabe duda de que al final demostrará ser leal al Imperio. No es un traidor.
Un perro de guerra es buena compañía y protección.
Padre, ¿qué edad tenías cuando dejaste tu casa?
Ah, y habla con Tonilia en El jarro... te proporcionará una nueva armadura.
Lo siento, pero creo que has bebido suficiente por hoy.
Karliah me ha proporcionado los medios para librarme de ti y esta antigua tumba será tu última morada.
Estoy aquí para ayudar a cualquiera que esté interesado en unirse al Colegio. Además, mi presencia asusta a los lugareños y así no se acercan.
Vive mucho tiempo. Lucha bien.
Ah, si tuviera todo mi poder, concederte ese deseo sería algo trivial para mí.
Vaya, genial. Ahora me va a matar un hechicero loco...
Las mejores joyas de todo Markarth.
Respuesta equivocada.
Las olas acabaron retrocediendo, pero el daño ya estaba hecho. Casi todos los habitantes de Hibernalia abandonaron lo que quedaba en pie.
¡No somos más que gusanos que se arrastran en la inmundicia de nuestra propia corrupción! ¡Mientras que tú ascendiste desde el estiércol de la mortalidad, y ahora caminas entre las estrellas!
Ya me he ocupado de eso.
¿Alva? No creía que fuera tan mala.
Hibernalia había aguantado el paso de los siglos, pero no soportó la furia del mar. La ciudad perdió distritos enteros de la noche a la mañana.
¡Esos malditos osos me están volviendo loca!
¿Quieres darme dinero? ¿Así por las buenas? Vale, pero pretendo ganarme esa inversión. No necesito limosnas.
Oh, muy bien. Probablemente eso sea lo más seguro.
Me ha costado un año perfeccionar el veneno de esa flecha. Solo tenía suficiente para hacer un disparo y, aun así, la he usado contigo.
Cuidado.
En cuanto a la investigación... Bueno, con una buena explicación se puede hacer de todo.
Matar a propósito a compañeros del Colegio es mala idea, te aconsejo que no lo hagas. Robar y asaltar también pueden costarte caro.
Todavía no se han peleado. No hay mejor señal que esa.
Ha llegado mi hora. Soy viejo. Demasiado viejo para llegar a jefe. No estaría bien tener esposas con esta edad. Así que moriré.
Pero prométeme que en cuanto los tengas, hablarás conmigo primero.
¡Otra alma para ti, Padre!
Dirígete a Lucero del Alba. ¡Vamos a organizar el ataque final!
Vaermina reside en un extraño reino conocido como Tremedal... Una tierra de pesadilla en la que la realidad se retuerce sobre sí misma de formas incomprensibles.
Ponte algo de ropa, idiota.
Hasta la vista, señor.
Aún no puedo creer que Isabella ya no esté con nosotros. Era una chica tan servicial...
Explicaría lo que vimos antes... volando por el valle desde el sur... Yo ya pensaba que estaba imaginándome cosas...
Estás interfiriendo en un asunto imperial. Sí, así que tendrás que pagarnos una multa de... digamos, 100 piezas de oro. Paga.
Pero mira... si necesitas trabajo, Hod siempre necesita ayuda en el aserradero.
Siento tener que rechazarte. Espero que lo entiendas.
Las cosas solo van de mal en peor. Primero la guerra, luego dragones... ¿Qué es lo que pasa con el mundo?
¡Por las barbas de Ysmir! Tú sabes cómo llegarme al corazón. Me encantaría otra botella.
Hay algo que podrías hacer por mí. Por todos nosotros.
Por si cambias de parecer, la siguiente ciudad queda bastante lejos.
Vaya, parece que has completado el contrato tal y como se te ha dicho. Por fin. Un poco torpe, pero bueno... lo hecho, hecho está.
Ven, entra. Tenemos comida caliente, bebidas calientes y camas calientes.
Te juro que si una de esas cosas hubiera llegado a tocarla...
No sé nada de esas cosas, pero he oído que los Barbas Grises te han convocado. Eso me basta.
Cierto. Ya ha demostrado su fuerza personal. Ahora querrá demostrar la de su ejército.
Bueno, he oído algunas historias desagradables acerca de esos Thalmor y cómo persiguen a todos los siguen venerando a Talos.
Márchate, mago. No pongas a prueba mi promesa hacia el Dovahkiin.
Adelante, avísame si puedo ayudarte en algo, o siéntate junto al fuego y enviaré a alguien.
Galmar cree que deberíamos doblar la dotación en la Cuenca.
Pactur y yo nos aseguramos de que los mineros no roban y de que el mineral llega a Soledad.
Riften sigue siendo aliado de la causa de los Capas de la Tormenta, bajo la autoridad de la jarl Laila la Legisladora.
Espera. En este camino hay que pagar peaje. Vas a tener que aflojar, digamos, 200 monedas de oro, si quieres pasar por aquí.
Entra. En la posada de Sangre Argéntea hay bebidas fuertes y habitaciones limpias más que de sobra.
Por fin viene alguien. Quítate las botas y acompáñanos un rato. Avísame si necesitas algo. Estos días lo único que tengo es tiempo.
Mmm... No dices mucho, pero tienes un aura extraña. Caminas a la sombra de la muerte...
Ah, ya estás de vuelta. ¿Qué has descubierto?
Mientras no ataques a mi gente, siempre tendrás un lugar aquí, adalid de Malacath.
Te doy la bienvenida a la posada de Vilemyr. Avísame si puedo ayudarte con algo.
Cuando me convierto en lobo, soy la traición encarnada. Y entonces, entonces... no hay nadie que se interponga entre el cazador y su presa.
No tenemos nada de qué hablar. Si quieres entrar en Riften, ve por la puerta norte.
Te conozco por lo que eres. La sangre de esta ciudad es nuestra. ¡Déjalo! Ahora debemos volver a nuestros papeles, no vaya a ser que las ovejas sospechen de los lobos.
¡Frabbi, aquí hay alguien que necesita un trago!
Toma, deja que te invite a un poco de aguamiel.
Eso aún está por ver. Por su derecho de nacimiento, puede reclamar legítimamente el trono de reina suprema de Skyrim.
Oye, Talen... ¡Mueve el trasero y atiende a los clientes!
Lynly, ¿te importaría atender a los clientes?
¡No podemos luchar contra el enemigo en esta niebla!
Probé con un nuevo hechizo. Una pequeñez en la que he estado trabajando en mis ratos libres. Estuve "así" de cerca de volver a ese sacerdote del revés. Bastante sangriento.
Espero que no tengamos que volver a hablar de este asunto... con nadie.
Puede que en otra ocasión.
Mi familia ha capeado su buena dosis de problemas, pero no vivimos en el pasado.
¡Sí, mamá!
Estamos vagos para servir bebidas, ¿eh? ¡Bah!
¿Cómo es que me conoces?
Ten cuidado, no te estreses.
No habéis sido invitados. No sois bienvenidos.
Otro día de tranquilidad... espero.
De acuerdo. Estaremos juntos.
¿Hay algún lugar donde podamos hablar? No sabemos cuándo se enterarán los imperiales de lo sucedido en Helgen...
Espadas para matar a tus presas y a tus rivales.
¿Te inclinas ante mí?
Eso es lo único que puedo hacer, idiota. ¿A qué estás esperando?
Ahora que los dragones han vuelto, su razón de ser es obvia. Tenemos que detenerlos.
Sibbi y yo íbamos a casarnos. Se suponía que íbamos a ser felices para siempre.
Ni siquiera para echar un vistazo.
Ah, libertad. Ahora quítate de en medio. Tengo asuntos que atender.
Salvo que hayas venido a traerme otra ronda, sigue tu camino.
Yamarz era un cobarde y un debilucho. Ya habéis pagado bastante sus malas artes.
Mey... ¡Gut!
Sígueme, es por aquí.
Ya he usado la llave, pero la cámara sigue tan cerrada como la puerta de un convento. Ahora utiliza la tuya.
¿Y si lo desatamos y os metemos en una celda juntos? Podrías preguntarle todo lo que quieras, a ver cómo responde.
Claro, tú te retiras y yo también.
Libérame, súbdito del Odiado. Debo ir a Markarth.
Tu sangre, Sangre de Dragón.
Preferiría no hablar de mi hija, si me disculpas.
Supongo que será nuevo por aquí.
Vaya. Así que el rey de la corrupción me envía un mensajero para desafiarme. Muy bien.
Sí, un buen montón de dinero. ¿Ves ese templo? ¿Ese de ahí, en lo alto?
Que el espíritu de Lavinia y de todos los que han abandonado este mundo y sus sufrimientos conozcan la querida serenidad de Aeterio...
Tú abres la marcha y yo te sigo. ¿Está claro?
Los nuevos guardias suelen estar demasiado ocupados aprendiendo sus responsabilidades como para fijarse en algunos objetos de contrabando o robos menores.
Vale. No haré preguntas. Libérame.
Basta. Sus servicios serán más que suficientes. Continuemos.
Razón, razón, razón. Tu raza y sus razones.
¡Te destriparé como a un horker!
Menuda piltrafa de elfo...
Desaparece de mi vista, dunmer, o te mandaré de vuelta a Páramo de Vvarden en un cajón.
¿Cómo me has podido abandonar aquí?
Escabúllete con el rabo entre las piernas, khajiita.
Me vendría bien algo de ayuda.
Ve con cuidado por ahí fuera. Los mercenarios que contrató Aringoth son asesinos bien entrenados. Si no pregúntale a nuestra pobre Vex.
¿Cuál es la situación?
Cuidado con ese fuego.
No me gusta alardear, pero una vez maté a un oso a casi trescientos metros. En una ventisca.
Sí, espero que esto te ayude.
Sí, sí. Entra.
Asquerosos nórdicos... Algún día, toda tu raza será aniquilada.
Ahora vete. Vuelve a tus patéticas actividades.
¡Gracias! Volveremos al trabajo ahora mismo. Toma esto. Es lo mínimo que puedo hacer.
Luego, cuando tengas el anillo, mete la mano en el bolsillo de Brand-Shei y déjaselo allí.
¿Los has echado tú? ¿Sin ayuda de nadie?
¡Mi investigación se centra en una creación mágica y un reactivo que permitirá a mi creación mantener un campo de energía armónica permanente!
El título de thane es un honor, un regalo por tus servicios. Los guardias sabrán mirar hacia otro lado, si les dices quién eres.
Mira, la Hermandad Oscura es una familia. Este santuario es una familia. Y siempre hemos acogido a los... rechazados por la sociedad.
El jarl te ha reconocido como una persona de gran importancia para la comarca. Una persona heroica.
Haré cualquier cosa para salvar a mi hermano. Te nos unirás, ¿verdad?
El Peñón de Shor... Un pueblecito insignificante que ni siquiera tiene posada. Solo son unos mineros arañando la tierra.
¿Has oído hablar del Gastrónomo?
Muy bien, las condiciones son aceptables. Adelante.
¿Qué peligros y maravillas descubriremos en esos gélidos páramos? ¡No puedo esperar a descubrirlo!
Hombres, mujeres, niños... nadie se libró de mi ira. Yo solo destruí aldeas enteras.
Esto es Baldío de Karth, una población minera. He oído que han tenido muchos problemas con los Renegados.
¿Recuerdas cuando eso de ahí era la destilería Amielada? No tuvieron nada que hacer ante los Espino Negro de Riften.
Márchate, visitante. El mal se agita en este lugar. Temo por la seguridad de toda la tierra si se libera.
Cualquier guerrero que se hace viejo es un guerrero temible o un cobarde. Ya averiguarás de qué clase es Skjor.
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre de la granja de Río Congelado.
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre de Cerro Pedregoso.
He oído que has sacado a Laelette de su miseria.
¿Qué? No, ese no soy yo. Yo no soy Esbern. No tengo ni idea de qué me estás hablando.
Probablemente deberías llevar esto directamente a Faleen. No queremos que ese viejo cabeza de chorlito tartamudee las palabras.
Sondas cuida de mí cuando no está mi madre.
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre de Viejo Hroldan.
Guíame. Mi acero está a tu servicio.
¡Alto, al ladrón!
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre de la granja de Cebada Negra.
Me atreví a hablar del Imperio y de las mentiras que ha propagado Ulfric, el líder de los Capas de la Tormenta.
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre de Mina Silbante.
Luchó en el lado equivocado, y pagó por ello. Es todo lo que tengo que decir.
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre de la granja de Loreio.
Ah, deseas aprender, ¿no es así? Me temo que no se me da bien enseñar. Deberías probar suerte en el Colegio de Hibernalia.
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre de Heljarchen.
La trampa es que no puedes arrasar todo el lugar.
¡Sabía que había oído algo!
El Imperio pagará una compensación adecuada por la masacre del aserradero de la Media Luna.
Siento un gran respeto por la escuela de la restauración. A Skyrim le convendría contar con más sanadores.
Yo provengo de Cyrodiil, pero me marché de allí por desavenencias con mi familia.
La casa que mencioné antes sigue disponible, si quieres comprarla.
Dime, hijo... ¿Son ciertas esas historias que han llegado a mis oídos? ¿Le tapaste las ubres a una vaca con pegamento? ¿Tú has hecho eso?
Los únicos adultos que hablan conmigo son precisamente con los que no quiero hablar.
Si quieres dominar el arte del robo como yo, puedo enseñarte.
Cuando fui capitán de embarcación, era famoso por aplicar disciplina.
Todos necesitan armas y armaduras: tanto los hombres que siguen la instrucción aquí en Soledad, como las tropas que están en el frente.
¡Ah! ¿Te cebas con un pobre anciano? ¿Qué te hecho para merecer esto?
Lisette es una buena muchacha, pero no es de las que se quedará esperándome cuando me aliste en la legión.
Gracias, de corazón.
Los mortales la llaman Quebrantadora del amanecer, pues fue forjada con una luz sagrada que cae sobre mis enemigos para consumir la corrupción y la falsa vida.
Espero que no se dejen llevar demasiado por aquí.
Así que tienes que ir a Volunruud. Es una cripta. Queda bastante lejos, al noreste. Habla con ese tal Amaund Motierre. A ver adónde nos conduce todo esto. ¿De acuerdo?
¡¿Qué diablos ocurre ahora?!
Venas Heladas.
Los hechizos de concentración pueden lanzarse inmediatamente, aunque son más débiles. Son buenos para un apuro, y cuestan menos si fallas.
Has hecho un trabajo excelente con esto. Excelente, sin duda. Solo hay una cosa que falta, y tendría que llegar muy pronto.
Mira, no es asunto mío decirle a la Hermandad Oscura lo que tiene que hacer, pero si has matado a un miembro del consejo de ancianos, yo que tú desaparecería.
Esa persona, sea quien sea, debe ser castigada por su traición.
Aquí estamos. Soledad. Sanos y salvos, como siempre.
¿Sabías que Viola Giordano quería poner uno en mi puerta?
¡Vamos, déjate ver!
Oh. Bueno, gracias por intentarlo, supongo. Tendré que sacar el dinero de alguna parte.
Esa espada de hierro es bastante poco fiable. Deberías probar con una de acero.
Nos... daba las gracias por contactar con él, pero decía que por el momento no necesitaba más madera.
¡Esto no es solo una daga!
Que yo sepa, las monedas de oro no crecen en los árboles. Más te vale aceptar algún trabajo si quieres ganarte tu parte.
¡Rargh!
Afiladura, una de las más importantes herramientas del mismísimo Kagrenac, está por fin en mis manos. Nunca pensé que llegaría a ver este día.
¿Ya has terminado de mirar a los grotescos? Supongo que debo darte las gracias por no haberme atacado sin más.
¿Mi piedra? Oh, no, la piedra es tuya. Yo solo necesito que me la dejes un momento...
No sé, tampoco veo que seas para tanto. Vamos, que no es que seas el Zorro Gris, pero algo debes de estar haciendo bien.
Un grupo de cazadores de hombres lobo conscientes de nuestro pequeño secreto.
Creo que está sentada junto al fuego. Pobre chica.
Aún tienes una de las cabezas de las brujas. Eso está bien.
Supongo que no estás bien del oído. Nunca he oído hablar de este amigo tuyo.
Solo tengo que mirar un momento...
Ah, sí. Ahora lo veo.
Llevo meses siguiéndolo. Bueno, siguiéndolo no. Intentando encontrarlo.
Apuesto a que un disparo certero en el mecanismo de la rampa la haría descender muy deprisa.
¡No quería decir nada! ¡Déjame en paz! ¿Qué quieres?
Tengo el conocimiento que necesito. Ya puedes quedarte con tu piedra, y además te ruego que aceptes esto.
Me parece que lo más correcto es que sea el archimago en persona el que reciba una parte importante de la recompensa. Bien hecho.
Bien, una preocupación menos para mi pueblo.
¿Cómo lo consigues, Valindor? ¿Cómo haces para trabajar en la fábrica de aguamiel de Espino Negro y en el caladero sin acabar exhausto?
Tantas horas de herrería... No es bueno para una niña pequeña. No es... propio de una dama.
El mar de los Fantasmas prácticamente cobró vida. Nadie se lo esperaba. Olas monstruosas batieron la costa durante semanas.
Ha sobornado a las autoridades innumerables veces, tiene amigos en la Ciudad Imperial y se asocia despreocupadamente con el gremio de ladrones.
Aguantad. Un puñado de esqueletos polvorientos no nos darán más problemas que los imperiales.
Considéralo como un trabajo extremadamente peligroso pero con un potencial enorme de beneficios, y te irá bien.
Supongo que esperaba demasiado de ti.
Es una pena lo que le ha ocurrido a la joven Elisif. Una tragedia. Una chica tan joven y bella.
Siento como si estuviésemos excavando más mineral que antes.
Cuidado con los imperiales. Aún ocupan toda esta región. Mientras que no hagamos nada estúpido... no deberíamos tener problemas.
La justicia puede ser dura. Pero sigue siendo justicia. Paarthurnax merece morir.
Dale un beso a Vex de mi parte.
Y aquí estás, hablando con una mujer casada. ¿Por qué? ¿Tan interesante te resulto? ¿O es que tienes otras cosas en mente?
Vaya, debes ser de la nobleza. Vas por ahí de fiesta y pagando a los demás para que limpien.
No empujéis, no empujéis. ¡Hay sitio de sobra!
¿Qué pasa ahora, Viola?
No quiero saber cómo has convencido al jarl de esto.
Sálvalo. Deja que celebre sus ritos una vez más. Y cuando lo haga, lo estaré esperando.
Sin embargo, el sacerdote de Boethiah también ha sido apresado. Y no por mí. Está herido. Sufre.
Es una antigua familia, muy respetada en toda la Cuenca.
De acuerdo. Te ofrecí una recompensa. Te daré la libertad con la que tu raza tanto disfruta.
Estoy sometido a mucha presión. Si no me dejas en paz, no me hago responsable.
Me aseguraré de recomendarte si llego a Ventalia antes que tú.
Y Lucero del Alba es célebre por su mala estrella. Somos el último fondeadero que hay antes de Ventalia, y el mineral que vendemos enriquece a futuras víctimas de la piratería.
Por supuesto que sí. No hace falta ser nórdico para luchar por la libertad de Skyrim.
Arqueros. ¡Tras las ventanas!
Karliah es la ladrona responsable del asesinato de Galo, el anterior maestre del gremio. Ahora va a por Mercer.
No, desde luego. Y... sea por el motivo que sea, ha optado por transmitirte la información de Motierre.
En las viejas historias, los héroes nórdicos usaban el poder de la Voz para derribar gritando las puertas de las ciudades y acabar con sus enemigos.
Iremos allí, y tú matarás a ese dragón. Si lo conseguimos, te diré todo lo que quieras saber.
Si se me cae un poco de metal, Mulush me hará recogerlo con la lengua.
No me puedo creer que hayamos perdido Carrera Blanca. Ahora los rebeldes tienen una gran ventaja para controlar el centro. ¡Tenemos que recuperarla!
Eh... Verás... He estado pensando mucho en Faleen. ¿La conoces?
Ah... sí. Ahora que lo mencionas, creo que... Lo siento.
Soy la madre de Burguk y la sabia de nuestra tribu, visitante.
Cariño... Deberías guardar esa arma.
Pero sé que después de pensar en lo que has visto hoy, te darás cuenta de que Skyrim se merece la libertad.
Infíltrate sin llamar la atención, libera a nuestro hombre y sal de ahí. No entres en combate si puedes evitarlo, y si no puedes, envíalos al infierno.
No hay forma de saber si alguien ha salido con vida, pero este lugar pronto estará infestado de imperiales. Más vale que nos larguemos de aquí.
¡Imbécil! ¡Nadie puede conocer mi secreto!
Si tiene que ver con la mina, soy todo oídos.
Es duro, tener que hacer lo posible para ir tirando, pero me las arreglo.
Eres diferente, ¿verdad? No eres como los demás, ni de Morthal ni de Skyrim.
Mírala, revolviendo entre los desperdicios. Me pregunto qué ha perdido... además de la cabeza.
Solo soy una pobre anciana, cielo. No tienes que preocuparte por mí.
¡Pues claro que sí! Nunca he llevado en secreto mi lealtad al Imperio. No soy un cobarde.
Este es el puente que sale de la ciudad. El camino que sube por las montañas del noroeste lleva a las Cataratas Lúgubres.
Siento ser siempre tan duro contigo, chico. Es que me preocupa que no me quede mucho tiempo.
Para activar este extraño poder, uno solo debe pronunciar las palabras mágicas, que son...
Nos vemos al otro lado, mortal.
Ni idea. Uno de esos cadáveres. ¿Acaso importa?
Mauhulakh era un encanto de niño. Hasta que creció y empezó a tener opiniones.
Gracias. Agradezco tu ayuda.
Buen trabajo. Sabía que me traerías algo a tu vuelta.
Uhhh... (tose, jadea) Ahhhh...
¡Dispara!
Hay un centinela patrullando por la zona. Entraremos silenciosamente y lo derribaremos con una descarga combinada de flechas. No te dejes ver y dispara a mi señal.
Hay un centinela patrullando por la colina. Entraremos silenciosamente y lo derribaremos con una descarga combinada de flechas. No te dejes ver y dispara a mi señal.
Parece que no tengo más elección que permitir que el Sangre de Dragón decida. Aunque estoy empezando a poner en duda tu ecuanimidad.
Venga, los dos... ¡fuera, fuera!
¡No tienes escapatoria!
Pues yo empezaba a acostumbrarme a esto. ¿Adónde iríamos?
Hemos perdido más clientes en la última década de los que puedo contar, pero Maven permaneció a nuestro lado durante toda esa pesadilla.
Ve a Soledad. Acecha y mata al jarl.
He consultado con mis contactos respecto a la información que recuperaste de la hacienda Brillo Dorado, pero nadie puede identificar ese símbolo.
¡Mírate! Seguro que te crees alguien, ¿eh?
Resulta difícil recuperarse de algo como el Gran Hundimiento, pero creo que Hibernalia es capaz.
Así que tú eres su Oyente, ¿mmm? Bueno, eso no parece muy justo. Acabas de llegar. La Madre Noche debería haber hablado conmigo. Cualquier idiota lo vería.
Deberíamos haber acabado ya con los asesinos del Palacio Azul. He incrementado la seguridad en el área.
Y la Forja Inferior contiene una magia de tiempos pasados más antigua que los hombres o los elfos.
Aunque espero el día en que un nuevo líder defienda esta causa. Cuando llegue ese momento, lo seguiré sin dudarlo.
Vaya, eso no puede ser bueno...
Toma, toma. ¡Por las molestias! ¡Oro reluciente y tintineante! ¡Unas moneditas por una buena obra! ¡Y gracias! Gracias de nuevo.
Eh, he encontrado una corona en este cadáver. ¿Es la que estábamos buscando?
Afiladas, ¿verdad? Esto fue lo último que vieron muchos antes de ser sacrificados en mi nombre.
Hace frío aquí dentro, ¿no? Debería echar más leña al fuego...
La verdad es que van muy bien. La guerra ni siquiera ha mermado la producción ni los envíos.
Muchas gracias. El festival ha mejorado mucho mis ventas.
Que manden unos cuantos hombres... con una nueva carreta. Esta ya no va a ninguna parte.
Me quedaré aquí y guardaré el cargamento. Tú vuelve al campamento para informar.
¡Ajá! ¡Has vuelto!
¿Qué te trae por aquí? Veo la resolución en tus ojos.
¿Has visto a esos corazones de espino? Eso sí que es magia malvada.
La Cuenca es un lugar hermoso pero peligroso, ¿eh? Un paso en falso significaría la muerte, eso si los Renegados no te atrapan primero.
No molestes a los mineros. Tienen trabajo que hacer.
Con un poco de suerte, les pillaremos completamente desprevenidos y eso equilibrará un poco la balanza.
Nunca creí que yo llevaría la tienda. No estoy acostumbrado.
Habla con el cocinero desconsolado, en la posada El pico ventoso, aquí en Lucero del Alba. Acepta su oro y elimina al objetivo. ¡Salve, Oyente! ¡Salve, Sithis!
¡Ffffiiiargh!
Bueno... No. No, la verdad. No directamente, quiero decir.
Avísame cuando estés a punto.
Tú... eres el heraldo. El heraldo de los Compañeros. Es para mí un honor hallarme en tu presencia.
Buena idea. Avísame cuando sea el momento.
Si no fuera por los peligros que hay aquí, este sitio sería casi acogedor.
Si no hay nada más, tengo trabajo que hacer...
Oooh... ¡Cicerón quiere Acero de Skyforge! Afiladísimo, para que apuñalar sea más fácil...
¡He visto a un enano! ¡Lo vi, lo vi! ¡Cicerón ha visto a un enano! Allí... Ah. No, perdón. No hay ningún enano...
La corte del rey supremo necesita un bufón... pero no a mí. No, no a Cicerón. El bufón de corazones está ocupado de sobra, muchas gracias...
Soy el lugarteniente de Ainethach. Ayudo a supervisar las minas.
Espero que sepas lo que estás haciendo.
Bueno... Se trata de tu hijo. Nelkir. El chico ha estado actuando de forma cada vez más peculiar. Más de lo habitual, quiero decir. Habría que hacer algo...
Cicerón nunca ha entendido a los ladrones... ¿Robar a alguien antes de matarle? Y luego dicen que yo estoy loco...
Oh. Vaya. ¿Fue por algo que dije? No puedo permitirme bajar el precio, pero vuelve si cambias de opinión.
Debo llevarle a mi madre unas flores... Unas bonitas florecillas...
Los guardias dicen muchas cosas sobre ti... Que eres el que... Bueno... Dicen que la Hermandad Oscura... Bueno. No me haga caso. Señor.
Hroggar no tiene por qué saber que nos sentamos juntos. O que bebemos juntos. Hasta dudo que le importe.
Cicerón tiene hambre... Necesita un bollo dulce... o una zanahoria...
Así que le di un consejo y le dije que se dirigiera a ____________, y eso fue todo.
A mi Saffir no le gusta que me haya pasado tanto tiempo buscando la vieja espada de mi padre.
Tu querido Cicerón te protegerá, adorada madre. Por siempre jamás...
Espero que disfrutes de la música, señor.
Su hija fue enviada a Carrera Blanca, donde se han producido fuertes escaramuzas. El legado de Carrera Blanca necesitaba conocer las posiciones de los Capas de la Tormenta.
¿Qué? ¿Madre? ¿Estoy oyendo tu voz? Mmm... No, no... Es mi mente que me la está jugando... Estúpido Cicerón...
Tal y como te prometí, toma la llave del museo dwemer. Cuidado con lo expuesto. Algunas cosas son muy frágiles.
La locura es alegría, y la alegría poder, cuando el bufón acude con su cuchillo al anochecer...
Ten cuidado. No querrás verme cuando estoy trabajando.
En calidad de una de las ciudadanas más influyentes de la ciudad, ha asumido la responsabilidad de supervisar su encarcelamiento.
Y si me encuentro a Nelly, mi amiga, le hundiré el cuchillo en la barriga...
Y le dice al tipo: "¡No es un horker! ¡Es mi mujer!". Ja, ja, ja, ja, ja... Ay, me encanta contarlo...
Te presentaré para el sacrificio. Tú sígueme la corriente. Mientras mi madre comienza el ritual, atacaré. Entonces podremos... podremos matarla.
Estoy con los Capas de la Tormenta. ¡Los perros imperiales nunca quebrantaréis mi voluntad! ¡Nunca!
Jo, jo, jo... y ji, ji, ji, parto ese laúd así... Y si el bardo quiere pelear, sus ropas voy a flambear...
Por ahora, ya puedo volver con mi vida.
Je, je, je... ¿Loco? ¿Cicerón? Je, je, je... Qué locura...
¿Qué? ¿A qué te refieres?
Me alegro de que Orto pudiera encontrar una ayuda competente.
¿Osas invadir este santuario?
Tribuno.
¿Qué presa nos aguarda?
¡Eh, ese animal es valioso!
Pero, hablando del tema. ¿De verdad crees que tú, mortal insignificante, endeble y prescindible, puedes convencerme para que me marche?
¿Mi Oyente?
El Pavoroso Padre trabaja, yo soy su instrumento. Y su trabajo no ha hecho sino empezar.
Mi acero es tuyo.
Si... desde luego. Pero si ese poder pudiera ser aprovechado. Controlado. Las posibilidades serían...
¿Podrías marcharte ya?
En vida, no era sino un Hablante para la Mano Negra. Pero a ti te han nombrado Oyente. No hay mayor honor.
¿Esperando a qué?
Creo que llegué aquí para proteger este lugar de la oscuridad que invade Soledad.
Lóbrego, húmedo, frío y pobremente iluminado. Todo un santuario al que llamar hogar.
¿Sabes? Puede que una buena purificación sea justo lo que necesita este santuario...
Te sigo, hermano.
Ulfric retirará sus fuerzas de la Marca de Hjaal, y permitirá que el jarl Idgrod Cuervo Viejo regrese a Morthal.
Tal vez deberíamos buscar a un desconocido al azar que asesinar. La perfección se alcanza practicando.
Solo tienes que dirigirte al norte... No hay pérdida.
Por favor, ¡ten piedad de un viejo loco!
Acuérdate de El skeever travieso cuando necesites descansar.
Ve en cabeza y yo te seguiré, vástago de la oscuridad.
Son los mamonazos más duros que han pisado Skyrim. Y quieren hacerlo.
¿Sientes eso? Magia. Profunda y antigua. Resuena desde el Colegio, como el latir de un corazón.
Me temo que los he perdido.
¿Qué has hecho? Van a pensar que fui yo. Espera, ¡fui yo! ¡No te voy a pagar! ¡Es todo por tu culpa!
Para no conocerte de nada, me caes bien.
De acuerdo. Podéis entrar.
¿Qué he hecho yo para granjearme tanto odio? Le das buenos precios y buena comida a la gente y solo consigues insultos.
¿Recuerdas al tío Sinderion? Estas son las plantas que buscaba... La raíz de nirn carmesí.
Algún día servirás a nuestro Pavoroso Padre, como yo le sirvo ahora.
Ha llegado el momento de que cumplas con tu destino, Oyente. Mata al emperador y devuelve la grandeza a la Hermandad Oscura.
¡Debemos purgar el santuario de esta escoria invasora!
¡Te voy a sacar los ojos y a venderlos!
¿Mmm? Ah, sí. No habrían destacado tanto el grito de no haber sido importante.
Cuando la Madre Noche habla, su Oyente debe obedecer. ¡Debes hacerlo! Porque su palabra es la voluntad de Sithis. Y Sithis es la Hermandad Oscura personificada.
Ese de ahí, saliendo por la puerta. Era el que andaba preguntando por el anciano que buscáis.
No puedes esconderte de mí siempre.
Sacerdotisa de Arkay. Soy tu amiga.
Ayudando a Ainethach, ¿eh? Dame un buen motivo para que no te hunda mi daga en el pecho.
Pues sí. Llevo un tiempo trabajando en el mío.
Veamos, ¿qué más...? El Colegio de Bardos está aquí, y la oficina principal de la Compañía del Imperio Oriental.
Cogerlo era la única forma de asegurarme de que no era una trampa Thalmor.
No deberías molestarme.
Aún no entiendo por qué la robaste. Dejaste una nota en la que me lo explicabas, pero la mitad eran tonterías sin sentido y el resto estaba manchado de aguamiel.
¡Dad la alarma! ¡Tenemos intrusos!
Como este es su final, los Capas de la Tormenta lucharán como ratas acorraladas. Serán feroces y astutos.
Han desaparecido las pesadillas de Lucero del Alba y dicen que tú has contribuido a ello. Te lo agradezco.
Acechar a la presa, colocar indicios falsos y destruir la reputación de un hombre inocente. Realmente, un contrato digno de un Oyente.
Tengo cosas que hacer. ¿Es importante?
Abandona... Abandona... Abandona...
(Suspira)
Comenzaron la Gran Guerra y casi destruyen la Ciudad Imperial. Después el emperador siguió el camino del cobarde y se rindió.
Maldita sea. Parece que en esta ciudad todo el mundo tiene amnesia.
Ulfric luchó por este sueño con más coraje y honor que ningún otro nórdico. Pero ahora está muerto, y el sueño ha muerto con él.
Savos Aren es demasiado sabio para su edad. Reconoce el verdadero talento cuando lo ve.
¿Necesitas algo, cielo?
No es ningún secreto. Me da igual que el Imperio controle la ciudad, no pienso ocultar mi lealtad al sueño de un Skyrim libre.
Unas cuantas almas intrépidas incluso han traído objetos de Morvunskar, el fuerte que hay al suroeste de la ciudad.
Tengo una deuda contigo y pretendo saldarla. Algún día volveremos a vernos. De momento adiós, y gracias.
Mis hombres saben lo que hacer. Asegúrate de cumplir con tu parte. Voy a poner mi ciudad en tus manos.
¡Quiero que encuentres a ese necio miserable y pongas fin a su vida!
Pero no quiero ser marinero ni granjero. ¡Quiero ser guerrero! ¡El más fuerte del mundo!
Se llamaba Torsten Mar Cruel. Era rico de verdad, porque era dueño de toda la granja de Acebo Helado.
Dovahkiin zol mul. Zu'u gahvon miri Alduin.
Una vez me dijo que quería que creciera y me hiciera marinero, porque de ahí viene nuestro apellido.
¡No estoy aquí para que juegues conmigo!
¿Qué es esto...? ¡Es... tan solo un libro! Puedo ver. El mundo del más allá me quema la mente. Es maravilloso...
En tal caso, casi seguro que es el que intentó invitarme a una copa anoche.
Los antiguos construyeron muchas de las fortalezas que salpican el paisaje de Skyrim.
¿Qué ordenas?
¿Has hablado ya con Reldith? Es como una madre para mí.
No, me... me someto. Basta.
¿Dejarás que tu esposa y tu hija mueran de hambre con tal de conseguir una espada oxidada?
Sí, mi señora. Invócame de nuevo y te traeré la piedra.
Sí, mi señor. Invócame de nuevo y te traeré la piedra.
Déjame, estoy trabajando. Salvo que quieras quedarte a echarme una mano...
Tu piedra sello. Lord Dagon... dista mucho de estar satisfecho con su ausencia.
Pero ten cuidado, porque la lealtad del Imperio es voluble. Se cansarán de esta guerra, y entonces seré yo el que te imponga condiciones.
¿No lo hago siempre?
Yo no te he contado esto: a Faleen le gusta parecer dura, pero en realidad tiene debilidad por la poesía, entre todas las cosas.
Estarás contenta, Elisif. Te ha ido bien como jarl mascota del Imperio.
Tus esfuerzos han ayudado a iluminar la región entera. Confío en que, a estas alturas, ya hayas alcanzado una comprensión del amor más profunda.
Oh. ¿Qué es esto?
Su espíritu noble... eras enteras de sabiduría... su profunda comprensión de nuestra existencia... todo perdido para siempre. ¿Y para qué?
Gracias, jarl Elisif. Aprecio tu lealtad.
Después de eso, Ulfric... habrá un ajuste de cuentas. Cuenta con ello.
Parecen ruinas de los enanos, ¿no?
Ha hecho algo bueno. Se llevará este regalo como muestra de gratitud.
Oh, no... ¿Qué ha pasado aquí?
Vah...
Hoy no. No estoy listo para el ascenso a Alto Hrothgar. El camino no es seguro.
Ve a Ventalia y comunícale a Ulfric nuestra victoria.
¡Muere ahora y aguarda tu destino en Sovngarde!
Mi hermana Camila y yo estaremos encantados de ayudarte.
Oye, ¿te acuerdas de esa muchacha, Eisa? ¿La que rajó a ese ladronzuelo que encerraron aquí?
¿La Sangre Negra? Menuda luchadora. De no haber sabido quién era, habría jurado que se trataba de una renegada.
Me estaba preguntando si ha pasado por aquí Faralda. ¿Recuerdas si ha tomado prestado algún libro?
Bien, por fin has llegado. El jarl te espera.
Al contrario, tú destacas de entre todos.
Hrongar, cálmate. ¿Qué tiene que ver toda esta majadería nórdica con nuestro camarada?
Ugh, draugr. Apestan a podredumbre.
Creemos que ya estás en disposición de enfrentarte a tu última prueba.
¡Vaya! ¡Mira allí!
Está al otro lado del puente, subiendo esa colina.
No quería ofender, obviamente.
Nunca subestimes la capacidad de influir en los demás. Sean amigos o enemigos, casi todos son influenciables por los hechizos de ilusión.
Conque una inversión, ¿eh? Muy bien, seguro que le doy buen uso al dinero extra.
Es solo que... ¿Qué tienen que ver los Barbas Grises con él?
Es una misión muy solitaria, enfrentarte a todos los peligros de Skyrim por tu cuenta. Ven a verme si echas de menos mi compañía.
Estamos llegando al punto en el que los túneles están profundizando demasiado en la roca. La gente se queja de una tos horrible y del aire viciado.
Dejas que los gigantes... ¡gigantes!... tomen mi capilla. Tráeme el garrote de su líder como ofrenda, y puede que os quite esta maldición.
La familia de Gerdur se asentó allí hace unas generaciones para trabajar como leñadores.
Deberías subir a Alto Hrothgar de inmediato. No se puede rechazar la invocación de los Barbas Grises. Es un gran honor.
Si ellos creen que un Sangre de Dragón, ¿quiénes somos nosotros para discutirlo?
Pero él ya no quiere tratar conmigo. Habla con él y entérate de lo que hace falta para que me devuelva el amuleto.
Hrongar. No seas tan duro con Avenicci.
¿Así que el jarl piensa que puedes serme de utilidad? Sí, debía de referirse a mi investigación de los dragones.
Eres culpable de insurrección, de homicidio de ciudadanos imperiales, del asesinato del rey Thorygg, y de alta traición contra el Imperio.
Bueno, cuando digo traer, me refiero a adentrarse en unas peligrosas ruinas en busca de una antigua tablilla de piedra que podría estar allí o no.
Sí, me vendría bien alguien que me trajese cierto objeto.
No sé si lo has oído, pero el jarl Balgruuf dijo que mi trabajo era prioritario. Lo que significa que ya deberías haberte ido.
El hecho de saber lo que se avecina no me produce ningún consuelo.
¡Eh, oye! ¿Pero tú has visto qué sitio? ¡Está tan frío que mi aliento se convierte en carámbanos! ¿Qué hacemos aquí arriba esta noche?
¡Y una cosa más! ¡No quiero oír hablar más de adopciones! Sois chusma y nadie va a adoptaros. ¡Nunca! Nadie os necesita ni nadie os quiere.
Soy la única persona viva que sabe cultivar raíces de nirn a partir de semillas y conseguir plantas adultas.
Sí, lo has conseguido. Hombres de violencia se han congregado aquí, en estos salones cuyos sillares están consagrados a la paz.
Ya puedes decirlo. ¡Nunca criaré a otra cabra ganadora de premios como Gleda!
¡Pero, para empezar, tú siempre dices que quieres más chicas en el bar!
Claro, buena mujer. Aquí tienes.
Si lo preguntas, eso quiere decir que te han condenado a cadena perpetua. Mala suerte. Esos guardias te han vendido pero bien.
El guardia de Madanach. Es grande incluso para ser un orco. Al parecer le arrancó a alguien un brazo y le atizó con él hasta matarlo. Qué tradicional.
El maestro Borri te espera.
¡Eh! Se te ha caído esto.
Permíteme darte la bienvenida oficialmente a Riften. Tu incorporación a la ciudad es muy estimable.
Pero si me dijeron que nadie entraba ni salía...
La nueva carne. Tan suave. Tierna.
Espera. ¿Has oído eso? Creo que vino por aquí.
No. Hay demasiada gente alrededor. Ven conmigo.
La prueba siguiente tendrá lugar en el patio. Sigue al maestro Borri.
¡Muéstrate! ¡Sabemos que estás aquí!
¡Que Stendarr nos ampare! Ese no es un daedra ordinario. Necesitamos ayuda.
Acércate allí y a ver qué puedes hacer.
Se centran en investigaciones prohibidas por el Sínodo, tales como la conjuración y la nigromancia.
Carillones de hueso... muy astuto. Dispuestos para despertar a los draugr, seguro. No tropieces.
¡Cierra el pico o nos matarán, idiota! Una vez se larguen, forzaré la cerradura...
Tú primero. Adelante. Vamos.
Hay que tener valor para andar rondando por aquí con pinta de legionario imperial.
Recuerda que estaré aquí, por si cambias de opinión.
¡Sal de mi cabeza, daedra!
Estamos organizando el asalto final a Soledad. Te necesito allí. Preséntate en el campamento de Haafingar.
Ve a cada punto focal y elimina todas las impurezas que encuentres.
De niño solía jugar con mis amigos a "la caza del wumpus" en cuevas muy parecidas a esta.
Muy bien. Se lo pensarán dos veces antes de enfrentarse a nosotros sin una cadena de mando bien organizada.
Ya nos las arreglaremos. Siempre lo hacemos.
Ahora que el Imperio ha llegado a Riften, al fin hemos establecido una cabeza de playa sobre Morrowind... por si acaso.
Si te centras solo en los hechizos de llamas, harás que sean más poderosos, pero podrías encontrarte en desventaja contra enemigos inmunes al fuego.
Pero también quiero que visites nuestro campamento oculto en Falkreath. Galmar tendrá misiones especiales para ti, y te necesitará para liberar la capital.
Sospecho que serás de mayor utilidad si te concedemos más libertad. Puedes enfrentarte a los imperiales como consideres oportuno.
Estamos organizando el asalto final a Ventalia. Preséntate en el campamento de la Marca Oriental.
Bueno, supongo que ya no tenemos que preguntarnos dónde está.
Y no he olvidado que fuiste tú quien se lo entregó a Ulfric.
¿Qué? ¡Caramba, qué atrevimiento! ¿Cómo te atreves a insinuar algo así?
Para ti no. Ni para nadie.
Por supuesto. Cada noche rezo para que no nos visite un dragón o no aparezcan dos ejércitos para disputarse el puente.
¡Insolente! ¿Acaso pensabas que Molag Bal, señor de la dominación, te recompensaría tan fácilmente?
Vaya, gracias... Qué amable. ¿Te sigue interesando?
Rescata a nuestros hombres y dirígete al patio. Allí nos encontraremos contigo.
Acude a nuestro campamento, en la Grieta. Tenemos unas cuantas sorpresas preparadas para los Capas de la Tormenta.
¡No lo creo!
Hermana, querida, ¿te importaría coser esas mangas un poco más ceñidas? No podemos permitir que nuestros clientes vayan hechos unos esperpentos.
¿Ahora qué quiere? Ya le he explicado que no se le pueden pedir peras al olmo.
Dirígete al campamento militar oculto en el Pálido. Rikke te asignará misiones importantes, y yo te necesitaré cuando reclamemos la capital.
Te daré un consejo... Aquí la gente no aprecia la magia ni la gente que la usa. Si no cambias de idea, ve al Colegio que está en Hibernalia.
Lo has conseguido. Hemos recuperado la capilla.
Ya le presentaré esto al jarl más tarde. Y en cuanto a ti, permíteme que te enseñe unas técnicas de herrería.
Pero conseguir que ambos bandos accedan a pactar una tregua va a ser difícil en este momento. El rencor es demasiado profundo.
Sissel se cree muy especial. Pero no es ni de lejos tan especial como yo.
Esto ya está.
Harás lo que Rikke te ordene hacer. Y espero que tengas recursos para desestabilizar a los Capas de la Tormenta que te encuentres.
Bueno, ejem, sí. Siento haberte molestado.
Sí, el Bastón. Interesante...
Son mis marionetas. Su "rey" se está pudriendo en la mina de Cidhna.
Claro que sí. ¿Esperabas menos de mí? Toma, aquí está tu mitad, mi amor.
Thongvor, ¿tú crees que es sensato? Quiero decir... el rey Ulfric es un hombre muy atareado y hay muchas zonas de Skyrim que proteger.
Tras el ataque, Arnbjorn montó en cólera. Cuando Cicerón se marchó... Arnbjorn se fue tras él. Ambos desaparecieron en la espesura.
Ese no ha sido un ataque justo.
Mira, no me hace falta ningún tesoro. Mi padre tiene tierras; nuestra familia es rica. Solo quería vivir una aventura. Pero así no.
Me gustaría ofrecerte un puesto en mi corte como thane. Es más que nada un título honorífico, pero acarrea ciertas ventajas.
Verás, ambos objetos se guardan dentro de Cuenca del Dragón, y no se admiten visitas dentro de los aposentos del jarl y del administrador.
Ah, ya veo. Muy bien. Lo haré.
Marchamos.
¿Y se la damos a Erikur?
Mira, no puedo hacer que el dinero aparezca de la nada. Por favor, sé razonable. Le... le pagaré el mes que viene.
Significa que te corre por las venas, dándote una capacidad innata para usar tu Voz igual que los dragones.
Eso. Y mientras lo intentas, quizá deberías coserte la boca cuando la clientela esté escuchando, ¿mmm?
¡Ugor, no! Puede ser la persona que necesitamos.
Por ahora has actuado con justicia. ¿Qué respondes a nuestra petición?
Svari, tienes que ir a casa. Ve allí y espera a que llegue tu madre.
¿Eres tú?
¡Señor!
¡Señor! Tengo... tengo... (resopla)
Tómate un momento para recuperar el aliento, soldado.
Prepárate para tener problemas. Es cuestión de tiempo.
Pero... señor...
Aunque no todos los Compañeros lo son. Solo los miembros del Círculo comparten la sangre de la bestia.
A mí me parece un poco corto.
Ojalá pudiéramos ofrecerte más ayuda, pero nuestro último ataque se ha frustrado y solo quedamos nosotros.
Eh, damisela. ¿Quieres carne fresca para tu familia? Mira cómo sangra esta pieza...
¡Recupera el aliento!
Te doy la bienvenida al almacén de Belethor.
La muralla exterior es resistente. Si logramos contenerlos allí...
Aún estoy aprendiendo, pero le cogeré el tranquillo.
¡Rápido, vamos! ¡Buscaré a Mirabelle para ver si podemos ponerle freno a este asunto!
¡Cuidado! ¡Draugr!
Me complace saber que puedo seguir siendo útil incluso al final de mis días.
Puede ser, pero traerla ha sido una provocación deliberada. Tenemos que dejar claro a Tulio que no nos dejaremos intimidar.
Me alejé de las ruinas tambaleándome y comenzó a nublárseme la vista. Entonces me di cuenta de que había envenenado las flechas.
Mis exploradores me han dicho que las están cargando con fuego.
Los hombres combatirán entre las llamas.
Mis hombres son valerosos. Son las nenazas imperiales las que me preocupan.
Quiero mucho a mi marido, pero a veces puede resultar un poco... aburrido.
No se puede. Ni tú ni nadie.
¿De veras? ¿Por qué has hecho eso? Tienes que marcharte.
Estamos aquí para guiarte en tu búsqueda, igual que otros Barbas Grises ya intentaron guiar a los Sangre de Dragón que te precedieron.
Que los Divinos te protejan por tu heroísmo. Reabriremos el Salón ahora mismo.
¿Qué hace? ¿Busca rubíes entre la basura? ¡Búscate un trabajo!
Nada, Vulwulf... Salud.
Maldita sea. ¿A qué está esperando?
Hablas en serio, ¿verdad?
Es una túnica del Colegio de Hibernalia, ¿no es así?
Eso dice todo el mundo. Pero no la has matado. Por eso pregunto.
Aparentemente, el Ola Roja lleva atracado en Soledad más de un mes sin mostrar señal alguna de que vaya a zarpar pronto.
Noto una gran paz interior... Algo que hacía mucho tiempo que no notaba.
Tengo un negocio que proponer a cualquier marinero que esté interesado en ganar unos septim extra.
Lo intenté, señor.
¡Ya está! Es hora de comprobar de qué están hechos esos Capas de la Tormenta.
Los hombres ya se están reuniendo a las puertas.
Los Capas de la Tormenta viven de prestado, créeme.
Adelante, soldado. Difunde la noticia. Vamos, vamos.
No se detienen ante nada para robarte hasta el último mendrugo de pan, si es todo lo que tienes.
Así es. ¿Aún quieres comprarla?
Y ahora está a mi alcance... pero parece que los Ocho se están divirtiendo a mi costa.
Es casi imposible encontrarla. ¿Quieres comprármela?
Bien, pues estás hablando con la persona adecuada. Soy la única que queda en Tamriel que puede acceder a ella.
Mucho, y gracias por preguntar.
Protegeremos a Erikur lo mejor que podamos, pero temo que el trono de Soledad pueda estar maldito.
Tras convocar al dremora, le ordenarás que te traiga una piedra sello de un portal de Oblivion.
Los bandidos son hombres desesperados. No tienen nada que perder, y así luchan.
La balmora azul está guardada en un cofre bajo los muelles, cerca del Ola Roja. Espero que no te importe mojarte.
Cuando llegues a Carrera Blanca, sigue subiendo. Al llegar a la cima de la colina, estarás en Cuenca del Dragón, el palacio del jarl.
Bien. Toma esta llave.
Te ruego que me perdones, mi señor. Tu esposa ha comprado muchas cosas a cuenta en los últimos meses.
Oh, por favor, ten cuidado...
Fueron de los primeros hombres que llegaron a Atmora, y adoraban a una serie de animales como encarnaciones de los dioses; los dragones eran los más preeminentes.
Me temo que no. ¿Cómo si no una pobre y explotada marinera como yo podría ganarse la vida?
Ah, eres una mujer lista. Es exactamente lo que quería oír.
Dile que le pagaré el doble. Nos hemos ido arreglando con una horca rota, pero ya no aguanta más.
Mira, si la quieres, te la vendo. Ya sabes el precio, así que vuelve cuando quieras aflojar el dinero.
Ten cuidado con los respiraderos de vapor aquí abajo. Te quemarían más que el fuego.
Lamento que pienses que mi material de contrabando ilegal es caro. Quizá debas comentarlo en la próxima reunión del gremio de mercaderes.
Primero, tienes que encontrar la forma de salir. Buena suerte con eso.
También es en extremo ilegal. Si trincan a alguien con balmora azul, le espera una buena temporada entre rejas.
Dioses, no puedo huir de todo esto. Tengo que detenerla.
No te aburriré con los... aah, con los detalles, pero estoy intentando recrear las circunstancias de lo sucedido.
Esto no quedará así. Si os pillo enviándole otra carta al general Tulio, haré que os ejecuten a ambos.
¡Ese estúpido se volvió completamente loco! Hirió a Veezara, intentó matarme y luego huyó. Sabía que ese lunático no era de fiar.
Suelen hacer incursiones a lo largo de la costa entregando todo tipo de mercancía de contrabando con origen y destino en Morrowind.
No quiero hablar del tema.
Me siento honrada de liderar a la última generación de fieles de Namira, que han abrazado lo que son.
Un día no muy lejano, todos entraréis en combate, y lo que hagáis hoy aquí puede salvaros la vida.
Y el emperador se verá obligado a poner orden.
No. Este aquelarre ha existido durante miles de años. Namira es una diosa. Se la adora desde el comienzo de los tiempos.
¡Huuragh!
Hasta unos trapos serían preferibles a tu vestuario actual. O la falta del mismo...
Bueno, esto se acaba ya, ¡y es mi última palabra!
El sueño interminable llega para todos nosotros...
Agh. ¿Has estado cuidando de tus sabuesos? Hueles a perro mojado.
La Cuenca ha formado parte de Skyrim desde hace mil años, pero sus habitantes aún no lo han aceptado.
Te necesitan en Hibernalia. Ve a informar al campamento oculto que tenemos allí.
Escucha una cosa... Tocaré una canción, solo para ti, y no tendrás que pagar nada.
Después, ronda por aquí un orco que me está dando quebraderos de cabeza. No sé qué de una visión con la que necesita ayuda.
Gracias, mi señora.
Gracias, mi señor.
Has regresado.
Ahora mismo, mi señora.
Ahora mismo, mi señor.
No me malinterpretes. No digo que no, pero quiero conocer tus intenciones.
El negocio se está yendo a pique, mi aprendiz nunca me hace caso y ahora se habla de dragones.
Oh, sí. Tienes que matar a la novia. En su boda.
Así que seguí su consejo, y aquí estoy. Esta vida no te parecerá gran cosa, pero estoy contento, ¿y no es eso lo único que importa?
Me dijo: "Gwilin, tienes todo el mundo ante ti. Sal ahí fuera y empápate de él... Sé lo que quieras ser".
¡No soy tu juguete, alimaña!
Hace años que perdí a mi familia. La verdad es que no sé por qué sigo adelante.
No te metas en líos.
¡Jamás!
Es una lástima. Demasiada gente de Riften comparte tu punto de vista, y mira para qué les sirve.
Soy una cuchilla. No me lo puedo creer.
Después de lo que has hecho pasar a ese hombre. Deberías serle fiel.
Me aburro, Benor. Nadie quiere divertirse conmigo.
Si abandonas a ese asesino de Hroggar, yo mismo te haré compañía encantado.
No estoy preparada para morir. No lo estoy...
Si tuvieras claras tus intenciones, no tendrías que disculparte.
Puedes preparar tus propias pociones combinando tres ingredientes. Utiliza el laboratorio de alquimia.
Era evidente que disfrutaba más escalando y colándose por una ventana que examinando un libro polvoriento.
¡Por Kodlak!
Mjoll me dijo que las cosas no están así de mal en todas partes. Quizás algún día me aventure a ir a otros sitios para ver si tiene razón.
Puedes comer un ingrediente para aprender una de sus propiedades. Sin embargo, tienen mal sabor.
Para encantar tu arma o tu armadura necesitarás aprender un encantamiento sacrificando un objeto encantado. Utiliza el encantador arcano.
Es de... Falk Barba de Fuego, del Palacio Azul. Vaya, tienes amigos bien situados.
¿Necesitas un veneno para tus cacerías? Mi madre, Murbul, conoce varios.
Claro, lo entiendo.
Muy bien, confío en que no estarías aquí si no fuera algo significativo.
Caray, lo sabía. ¡Sabía que existían! Que no se me olvide contárselo a papá.
Cualquiera de nosotros podría colarse en esa sala sin hacer ruido. Inadvertido. ¿Pero quién osaría conspirar contra el santuario?
¿Quieres mejorar tu arma? Usa el banco de trabajo. Asegúrate de que dispones del material adecuado, como hierro o acero.
Si quieres afilar la hoja, usa la piedra de afilar, aunque necesitarás el material adecuado, como hierro o acero.
Asegúrate de que tensas tu arco por completo para buscar la mayor potencia de disparo.
Hevnoraak ha sido derrotado.
Toma. Dale esta carta a Camila y dile que es de parte de Sven. Veamos qué piensa de él después de leerla.
Esos golpes grandes y potentes son agotadores. Baja el ritmo hasta que recuperes el aguante necesario para realizar uno.
No, no, muchacha. Primero echas la lengua de araña en vinagre y luego la raíz podrida. Si lo haces al revés, la cura se convierte en veneno.
Pues muy enfadada. No puedo creer que haya metido la pata en lo de Brillo Dorado. Tendría que haber sido como quitarle un caramelo a un niño.
No, ni espero tenerlas. De momento sería demasiado peligroso.
Pero primero has de restaurar mi Luz.
Permíteme que te dé un consejo: no mezcles la bebida con el juego. Si los juntas, acabarán con el último septim que puedas tener.
Por desgracia para ti, no permitimos hombres en el sanctasanctórum.
Como todos. Es la carga que soportamos. Pero podemos prevalecer.
Estaría muerto si no fuera por Vignar. Me acogió y me ayudó a cambiar el rumbo de mi vida.
Galo tenía su riqueza y te tenía a ti. Solo tenía que mirar a otra parte.
Ya soy mayor para decidir cómo vivir mi vida, y me honraría llevar tu armadura, si me dejaras. Soy lo bastante fuerte como para manejarla.
Aunque tu rival no tenga escudo, esos golpes grandes y potentes pueden hacerlo tambalear. Así abrirá su defensa para que puedas realizar otro ataque rápido.
Me han dicho que hay un objeto muy interesante en este lugar. Queremos que entres allí y nos lo traigas. ¿Qué te parece?
Si el rival tiene su escudo alzado, los golpes normales son inútiles. Prepara un ataque envolvente y ataca con todo tu poder para atravesar el escudo.
Alguien intenta hacernos caer enfrentando a Maven y al gremio.
¡No dejaré que hagas daño a Alva!
¡Es mía! Es mi recompensa. ¡No puedes quedártela!
Como desees, Oyente.
Cuando era joven, nuestros líderes se obsesionaron con la amenaza de los Thalmor.
Muy bien, Oyente.
No viene mucha gente a verme. ¿Qué quieres?
Mamá, ¿cuándo vendrá Cade a casa?
¿Estás buscando pelea?
Llevo casi 20 años jugando a este juego. Enviando a jóvenes a una muerte segura. Todo, en nombre de los Renegados. Y estoy cansado, muy cansado.
Ah, de acuerdo, Oyente. Cicerón seguirá con lo que estaba haciendo. Hasta que le pidas hacer otra cosa.
Pronto lo averiguaremos.
Cómo apesta... Este sitio hiede a falmer.
Sí, Oyente.
Si tropiezas con cualquiera de nuestras caravanas en tus viajes, gustosamente te pagaremos sumas razonables por cualquiera de tus bienes robados.
¡Ooh! ¡Oyente! ¡Me haces cosquillas!
Ahora, escucha su nombre. Odahviing. Saboréalo en el viento. Od-ah-viing. Siéntelo en tu su'um. ¡Od-ah-viing!
Con el respaldo de los Capas de la Tormenta, Ulfric está abocado a librar Skyrim de las fuerzas del Imperio y anular nuestra implicación en el Concordato Blanco y Dorado.
Esto es demasiado para digerirlo de una vez. Ve a que Nazir te encargue algún trabajo. Necesito tiempo... para pensar...
Bien. Está claro que eres más competente que yo para esta clase de tareas serviles.
Aunque estas imágenes nos indiquen el paradero de la corona, estoy seguro de que tendremos que cruzar esta puerta de una forma u otra.
¡Permaneced cerca del muro!
Sí. Esta vez tenemos planeado algo un poco distinto.
Yo tengo mis propias creencias, pero gracias de todos modos.
¡Levanta, papá! ¡Levanta!
Creo que están peleándose por aquella cosa.
¿Pero no está el Círculo al mando? ¿Y no los lideras tú?
No hace falta disculparse, y tienes razón en cuanto a la guerra.
Muchos de nosotros hemos empezado a cuestionarnos el señorío de Alduin y si realmente su Thu'um es el más fuerte.
Qué muchacho. Lo estás haciendo muy bien.
Sin problema. ¿Cuánto espacio necesitas?
Si quieres hablar de mi hermano, no me interesa.
Eso es, hijo. Haz que me sienta orgulloso.
Necesito que comuniques unas órdenes falsas al legado Imperial en Morthal.
Tu libertad es una ilusión. Tanto si me aceptas como si no, es asunto tuyo. Pero yo estaré en tu mente.
Hay que darles una lección a los Thalmor.
Has cumplido tus órdenes al pie de la letra.
Nah...
¡Haal!
No solo te has ganado tu paga, sino también mi respeto. Y créeme, eso no es fácil.
He cruzado Tamriel de lado a lado. He visto muchas cosas tan insólitas como esta.
Ah, ojalá pudiera darte más que esta moneda. Espero que ayude.
Al final, tu información resultó ser correcta. Y debemos agradecerle al camarada que la consiguiera.
Envíame una copia cuando lo hayas descifrado.
Mmm... ¡Ah, ya sé quién eres! ¿Has vuelto del túmulo de las Cataratas Lúgubres? Parece que no has muerto.
Hay un grupo de cazadores de hombres lobo acampado cerca, en la Roca del Cadalso.
Y permite que te enseñe otra cosa que he encontrado... Es muy intrigante. Creo que también interesará a tus patrones...
Ahora he de cuidar de Alva. Ya no necesito a Helgi.
Así que enviamos a Vex, y descubrimos que ha contratado a un montón de mercenarios para que guarden el lugar.
Te lo advierto, Melena Gris, pisas un terreno peligroso.
¿Qué haces aquí todavía? El jarl dijo que recuperar esa tablilla de piedra era una prioridad. ¿Lo recuerdas?
¡Ahí viene! ¡Poneos a cubierto y no falléis ni un disparo!
De eso tendrás que hablar con el jarl. O quizá con su administrador, Avenicci. Seguro que uno de ellos te compensará como mereces.
Mi padre decía que era "gregaria" o no sé qué, como él. Lo echo de menos.
Pues de hecho, sí.
Mi... colega estará encantada con tu ingenio. Ella descubrió su paradero por medios que se niega a compartir conmigo.
Ah, muy bien. Prueba a limpiarte.
Entonces está decidido. Soledad seguirá en manos de su jarl y acuartelaré ejércitos aquí para evitar que los imperiales vuelvan a hacerse con la ciudad.
Oh. Pues deberías ir a por ella antes de que te la roben.
Si pierdes, pues bueno, con suerte conocerás la libertad de Sovngarde.
No tiene sentido seguir hablando. ¡Vete ya!
No puedo ni imaginarme lo que le ocurrió a los enanos. ¿Cómo puede desaparecer por las buenas una raza capaz de construir un lugar como este?
Por robar, ¿eh? Como el pobre Grisvar. Espero que aprendas la lección antes que él.
¡Ya lo habéis oído! ¡A beber y alegrarse!
Ahora mismo, no. Te llevaste el último.
Camina siempre por la luz, o te arrastraremos a ella.
Saludos. ¿Podrías conjurarme un lecho caliente?
¡Inclínate ante tus superiores!
¡Alto!
Si buscas vender cualquier cosa a un precio justo, yo regento La gamba empeñada, que está junto al mercado.
Por eso huí. Me uní a los Renegados. Empecé a matar. Me cogieron. Y aquí me tienes.
Dime, ¿cuánto tiempo hace que estás al frente de esto?
Un noble nórdico al que servía fue apuñalado en mitad de la noche. No fui yo, pero sabía que me iban a echar la culpa.
Porque la vida era mejor en los viejos tiempos. Nada de nórdicos ni sus leyes.
Los imperiales son buenos para el negocio, y el negocio es bueno para Skyrim.
¿Y bien? No voy a resistirme, así que acabemos con esto.
¿Es que las abejas tienen que ser felices?
Tenemos tanto derecho a estar en este consejo como tú. De hecho, más, ya que fuimos nosotros los que encaminamos al Sangre de Dragón hacia aquí.
Gracias. No te preocupes, tendré ese pincho listo para ti.
Ah, mira qué inteligente. Aquí tienes tu pincho. Prométeme que nunca lo usarás contra mí, ¿vale?
Sí, sí. Creo que debemos de estar cerca de la entrada.
Muy bien, pero si cambias de opinión... tampoco es que tú o yo vayamos a marcharnos a ninguna parte.
Pide lo que quieras, no se le pueden pedir peras a un olmo. Al menos no en esta parte del mundo.
Bueno, muy bien. Toma, te he apuntado el último lugar del que he oído hablar. Revísalo, pero ten cuidado.
Como me vuelvas a mirar, te destripo. Ese skooma es mío.
Acabas de llegar a Morthal. No habíamos hablado antes. Interesante.
Ya basta. Ponte algo. La gente está nerviosa por tu culpa.
El camino hasta Paarthurnax es peligroso. No hay que embarcarse en él a la ligera.
Piérdete, escoria drogadicta.
Parece que elegí a la persona adecuada para el trabajo.
Primero, debes abrir la puerta.
¡Basta! No podemos encerrarlos. Son los dueños de la prisión en la que los retendríamos. Nadie va a tocar a la familia Sangre Argéntea. ¿Hablo con claridad?
Un amigo verdadero es como un regalo. Toma, quiero que aceptes esto.
Prueba la carne del festival. Es la mejor.
Muy inteligente.
¿Osas traicionarnos, Illia?
Mira esto.
Es mi chico, Sven, al que tienes que escuchar. Canta en la posada casi todas las noches.
Aquí está tu pincho. Prométeme que nunca lo usarás contra mí, ¿vale?
¡Marchando, señor!
Querías que hiciese algo, ¿verdad?
Serviré a Gularzob lo mejor que pueda, aunque sea mayor que él.
Eso no cambia nada.
Aquí todos somos hermanos. Una familia, una tribu.
Yamarz nos traicionó a todos. Mientras yo esté al mando, no permitiré que eso vuelva a ocurrir.
Oí que los hombres de Gjukar habían sido eliminados. He venido a buscarte.
Por favor, ignora a Joric. No está loco, de verdad que no.
Me honra haber sido elegido para liderar, pero sé que ser elegido por Malacath no implica que esté preparado.
Hemos aprendido de nuestros errores. Las necesidades de Malacath han de ir primero, y le serviremos fielmente.
Estupendo. Si lo ves, coméntale que Grosta ha dicho que se puede ir derecho a Oblivion... Aquí ya no es bienvenido.
Ro...
Largashbur no olvidará pronto lo que has hecho. Tenemos una segunda oportunidad gracias a ti.
Gularzob ha sido elegido jefe. Algún día será grande, pero tiene mucho que aprender.
Piensa bien a quién profesas tu lealtad... hermana.
En la Gran Guerra maté a un montón de altos elfos y sobreviví. Supongo que eso me convierte en un héroe de guerra.
Llevo tanto tiempo trabajando con el metal que ya casi nunca me quemo.
No sé quién podría tener algo así en Ventalia. Aparte de mí, claro.
Solo un verdadero orco sabe cómo templar bien el oricalco.
Bueno. Confío en que tengas algo de vital importancia que contarme. ¿Tan vital como para interrumpirme en medio del consejo?
Eso no importa. La planta ignora los rayos que le dan el calor del sol. Cuando lleves a Quebrantadora del amanecer, mi luz tocará el mundo.
Lo único que debes saber es que casi destruyeron el mundo, pero los pararon. Hace mucho tiempo.
Y de este modo, el Imperio se abre paso a través de Skyrim, como de costumbre.
Estos hechizos son complicados, incluso para alguien con tanta habilidad como yo.
Te enseñaré el hechizo para invocar al dremora, pero tienes que saber que solo funcionará en un lugar preparado a tal efecto.
Cuídate, esposo.
Skyrim no era la primera opción de J'zargo, pero Hibernalia no entra en política y se concentra en el estudio de la magia. Aquí, J'zargo alcanzará la grandeza.
¡Aléjate de mí! Me hiciste daño la última vez.
En este mismo momento está ayudando a preparar el retorno del gremio a Ventalia.
Con una buena planificación y vigilancia constante.
¡Sí! Claro que puedes. Ya está ensillado y todo.
Pero aprender una palabra de poder es solo el primer paso... Debes practicar sin cesar para desbloquear su significado y poder usarla en un grito.
Aquí está el hechizo que necesitas. Ve a la cima del Salón de la Conquista; allí he preparado un lugar para ti.
No pasa un solo día en que no sienta la tentación de sucumbir a mi naturaleza innata. Zin krif horvut se suleyk.
Primero tienes que demostrarle que tú estás al mando.
En fin, es una pena que mi mujer ya esté adjudicada.
¡No sirvo a mortal alguno!
Está bien. Vámonos.
¡Tú no controlas nada, mortal!
Te vigilo para asegurarme de que te comportas con honor.
¡Una vez más, y romperemos su cruel yugo sobre el reino de Shor, y lo salvaremos para siempre!
Ve tú primero, te sigo.
Sigo oyendo rumores sobre avistamientos de dragones en Skyrim.
Vaya, hacía bastante tiempo que no oía mencionar su nombre.
Eh, tú. Procura no acercarte demasiado a mi nueva novia, ¿estamos?
Un tiempecito en la mazmorra del Castillo Severo te pondrá en el buen camino.
Si es que existe.
Perdóname, he sido... demasiado temperamental. He dejado que mis emociones nublasen mi juicio. El maestro Einarth me ha recordado mi deber.
Es cierto. Por ahora estamos rechazando a los Capas de la Tormenta, pero ya estamos al máximo de nuestra capacidad.
Espero que mi hijo haya encontrado una chica simpática y modosita con la que sentar la cabeza.
Por favor, apártate, se está llevando a cabo una ejecución.
Pero él cree que todo solía ser mejor antes. Yo, en cambio, confiaría mi vida a cualquier compañero.
Tal como lo cuenta Vignar, son una pandilla de quejicas vagos e inútiles que antes sabían luchar.
¡Eh! ¿Planeas hacerme daño otra vez?
Qué bien, una cara nueva. No vendrás por casualidad de Carrera Blanca, ¿no?
Un desván, ¿eh? Bueno, no tenemos desván, pero puedes quedarte en la habitación de la izquierda. Entra y acomódate.
Ve a hablar con ese... monje... y averigua para qué ha venido y cuándo se retirará del recinto del Colegio.
¡La muerte es la única forma de poner fin a tu miseria!
¡Las noticias se extienden como un fuego mágico! ¡El gran mal ha sido derrotado! ¡Nos has salvado a todos!
¡Conseguid aquí la fruta y las hortalizas frescas!
No creas que no sé lo que se avecina.
Cuando llegamos, derramamos sangre y nuestro acero canta a la gloria de Ysgramor.
La respuesta corta es: luchamos. La larga es... Eh, olvídalo. No me hagas perder el tiempo.
¿Quieres entrar? Yo no me haría muchas ilusiones.
¡Por favor! ¡No dispares!
Nunca ha supuesto ningún problema. La gente dice que ayudaste con ese asunto de la cueva Cráneo de Lobo.
Ah, Mal de Aegis. El sello del clan Escudo Quebrado. Pero, ¿no lo habían robado tiempo atrás? Hmph. Supongo que mi memoria me falla.
Si buscas cualquiera de esas dos cosas, has encontrado el lugar adecuado.
¿Para qué te molestas siquiera en venir a Jorrvaskr sin saber ni lo que representamos?
El líder de los Horker Sangrientos. Se asegura de que la batalla se decante hacia el lado adecuado.
Pero tú no sabrás nada de eso, ¿eh? No. No... Claro que no. Porque entonces Cicerón se enfadaría, y eso sería... desagradable.
La diferencia entre una noble banda de guerreros y un hatajo de asesinos es tan delgada como el filo de una espada.
No te había visto antes por aquí, hermana. ¡Bienvenida!
Escucharás a algunos de los más animados de por aquí hablar de honor y gloria.
Los Compañeros son mi familia. Luchamos para que otra gente no tenga que hacerlo.
... Sí. No podemos tener a ese botarate dormilón como vigía, por mucho que sea el tío de Hajvarr. Ya es hora de que tratemos con ambos.
Llevo aquí más tiempo que la mayoría de ellos. A veces ni yo mismo lo sé. Solo espero que no se maten unos a otros.
Fueron los Renegados, ¿verdad? Cada estación pierdo docenas de cargamentos por culpa de esos bárbaros. ¿Ahora están en la ciudad? Que los dioses nos ayuden.
¿Has visto cómo unos mástiles asoman sobre el agua, al noreste? Es el pecio del Guerra de Invierno. Un gran navío en su momento.
Mercenarios. Guerreros honorables. Hermanos del acero. Una turba de borrachos. Escoge la definición que quieras.
El único mercado que no trabajo es Markarth. Sin embargo, acabo de enterarme de que Kleppr, de la posada Sangre Argéntea, podría estar interesado.
Alabados sean los dioses.
Lo dudo muchísimo.
Y aparecemos para solucionar problemas si la paga es buena.
Una orden de guerreros. Somos hermanos y hermanas de honor.
La versatilidad es la clave de la supervivencia. Contrata mis servicios y estarás preparado para enfrentarte a amenazas mundanas y mágicas.
No me gusta. ¿A qué esperan?
Infíltrate sin llamar la atención, libéralo y sal de ahí. No es una misión suicida. No entres en combate si puedes evitarlo, y si no puedes, envíalos al infierno.
Lo cierto es que descubrí lo de los espías imperiales que había por Falkreath. Con unos sobornos bien seleccionados, no tardaron en traerse a unos amigos.
Esto es vida, hermana. La lucha es lo que nos impulsa a seguir respirando.
Solían proceder de la Madre Noche. Los clientes celebraban el Sacramento Negro y ella respondía a sus plegarias.
Sujeta esa lengua. Estás hablando con Ulfric Capa de la Tormenta, el verdadero rey supremo.
Claro que lo sé, Thonar. Solo una loca traicionaría a la familia Sangre Argéntea.
Ah, y necesitarás la pelvis... es muy importante. Nadie puede entrar al ala de Pelagio sin ella.
Sí. Esto... sé que has herido a alguien en la ciudad hace poco.
Este frío es insoportable. Es cuanto puedo hacer para no temblar hasta que me castañeteen los dientes.
Parece que tienes más trato con Brynjolf que el resto de nosotros. ¿Te ha dado alguna idea de por qué parece que este lugar se está viniendo abajo?
¿De verdad nos las podemos inventar? No me parece correcto.
Quizá se... requiere una reacción más... temperamental...
¡Ajá! Aquí estamos. Honorables invitados, os presento... ¡al Gastrónomo!
Demasiado confuso para mí. Imperio, nórdicos, Talos. ¿A quién le importa?
Deberías ver a mi madre, Sharamph, si necesitas una cura o un veneno.
Pero seguiré las órdenes del anciano, como siempre.
Alain me usó para acercarse a mis amigos. Y ahora todos creen que soy una especie de... monstruo. Alain Dufont me quitó la vida. Y ahora yo le quitaré la suya.
¡Tengo uno!
Eso no te incumbe. No hay honor en las riñas entre los jarl.
La política es algo que más vale evitar. Yo prefiero enfrentamientos más personales.
Sé que resulto un poco hiriente. Es solo que amo tanto a Mauhulakh que quiero que seamos felices juntos.
No, este tipo de hechizo no. Créeme, no te lo pediría si no fuese necesario.
Tú. Debes coger el Léxico. Libérame de mi carga.
¿Al mando de qué? Yo estoy al mando de mí mismo, como tú.
¿Te atreves a luchar contra un dunmer?
Parece que no te han seguido. Estupendo.
Realmente echaba de menos viajar así. Caminar a lo largo y ancho de Skyrim siempre me ha llenado el corazón de entusiasmo.
Kodlak les asesora, pero, en realidad, él tampoco les da órdenes.
Aela, Skjor y los hermanos, Farkas y Vilkas.
El Círculo es el que asigna las tareas.
Si quieres ponerte en evidencia, no te lo impediré. Kodlak es el heraldo. Es lo más parecido a un líder que encontrarás por aquí.
Parece que el guiso está listo. Si añadimos algo más, se podrían diluir los distintos sabores. Entonces... ¿estamos?
No vayas dándote esos aires por aquí y ve a hablar con el jefe. ¿Quién te crees que eres?
Es una verdadera lástima.
Los Barbas Grises pueden contarte mucho más que yo. Son los maestros del camino de la Voz, y adiestraron al mismísimo Tiber Septim.
Realmente, el Colegio de Hibernalia es la gran baza de nuestra ciudad... digo, pueblo.
Yo, dentro de poco. Mientras tanto, el Círculo se encarga de nuestra rutina diaria, y Kodlak les asesora como heraldo.
¡Eres el mejor! ¿Puedes ser mi padre?
Trátala bien y te enriquecerá, pero intenta engañarla, y tendrás que responder ante todo el gremio.
Serviré a Lucero del Alba como siempre he hecho.
Deberías estar en la cama. Parece que no te encuentras demasiado bien.
¿Qué? ¿Cómo?
Oh, pero yo no soy un compañero. Me limito a ayudar a Vignar. Me acogió cuando pasaba una mala época, y... bueno, estoy en deuda con él.
Solo sé que ocurrió así.
Bueno, chico. ¿Destruyeron Helgen? ¿Cómo te escapaste?
¿O de lo contrario, qué? ¿Me matarás? Ya me he tenido que enfrentar hoy a la muerte.
Se comenta que Mercer Frey es hombre muerto. El gremio quiere su sangre.
Un hombre de mi condición tiene muchas deudas. No sirvo ni para trabajar ni para aprender, pero puedo liarme a puñetazos con los mejores.
Solo eres joven una vez en la vida. Créeme: lo sé.
Pero... J'zargo se alegra de ver que estás aquí, ¡y de una pieza!
Ten cuidado, chico. Ese es el último sitio de toda Skyrim al que quisiera enviarte.
Skjor dice que eran más bien cuarenta, pero solo peca de modesto.
¿Acaso no has oído las historias sobre Kodlak y Skjor, y cómo lucharon contra ciento un orcos dementes?
¡Alabada sea Mara! Hay una forma de pasar la barrera para llegar al sanctasanctórum.
Ah... ¡Viing!
Para no tener que responder a preguntas estúpidas de idiotas.
Por la fortuna y la gloria, camarada. Por la fortuna y la gloria.
Es una época dura para todos nosotros. Espero que tú también puedas encontrar refugio aquí, Mathies.
¡Excelente! Les hemos dado donde más duele. Habrá que hacer reparaciones cuando tomemos el control, pero al menos los Capas de la Tormenta no seguirán sacando provecho.
Marchando, señor. El mejor brandy coloviano.
Me he consagrado al honor de esta familia, y al de la familia que perdí. Por mi madre, mi padre y mi abuelo. Por todos mis hermanos de escudo.
Mi predecesor, Askar, me encontró en Páramo del Martillo. Trabajaba como guardaespaldas de un noble petimetre.
Ha tenido muchos nombres: Daga de las heridas finales, Perdición de los justos, Asesina de reyes...
Has aceptado mi oferta, ¿eh? Bien.
Trabaja honradamente en mi aserradero un día y te pagaré el jornal. Ya beberemos luego.
La encendieron hace ciento sesenta y tres años, cuando este edificio era el hogar de un gran guerrero llamado Vundheim.
Partió para luchar en la Gran Guerra y no volvió nunca más. Así que ya no es problema mío.
Si quieres saberlo, pregúntale a Nelacar, en El hogar helado. Él conoce toda esa triste historia.
Nos trajo Jergen. Me da igual si era nuestro padre o no.
Adoro a mi hermano, pero pensar no es lo suyo.
¿Por qué hablas conmigo, imperial?
¡Incluso Vignar no podía recordar Compañeros más jóvenes que nosotros!
Ooh, cuanta dureza, blandiendo tu arma por ahí...
Que Talos te proteja.
¡Sabía que te encontraría!
Nuestro padre, Jergen, nos crió aquí.
¡Krah!
Skyrim pasa por días cada vez más oscuros, y la Legión se verá obligada a servir como nunca antes. Pero estaremos listos, como siempre, para atender esa llamada.
Bueno, tal vez si al fin convencieses a Thongvor de que te ponga al mando de la familia, no tendría que seguir interrogándote.
Permanecí con mi padre en los bosques hasta que tuve edad suficiente para la prueba. Cazábamos todo lo que se podía cazar.
¿Quieres seguir con vida? ¿Para qué arriesgarse?
Por supuesto, sigo teniendo bastante dinero. ¡Y bebida!
Me alegro que hayas podido enmendar tu error. Liberaré a Wuunferth de inmediato.
Tuve suerte de que me encontrasen los Compañeros. Ahora tenía un motivo para luchar. El honor de mis hermanos es más valioso que el dinero.
Hay pocos lugares en los que uno pueda dedicarse a mi trabajo sin temor a que lo persigan.
Eres la comidilla de todos los guardias. Fuiste a aquel santuario... ¡y eliminaste a toda la Hermandad Oscura! Te debo un buen trago.
Tenía bastante dinero, bastantes mujeres y bastante bebida. Pero estaba perdiendo algo. Mi corazón.
La mina de Cidhna es solo para la escoria prisionera. No puedes estar aquí.
Aprendí a manejar la espada en la Gran Guerra. Casi perdí la vida fuera de la Ciudad Imperial.
Y Betrid Sangre Argéntea siempre pide más pociones para alimentar las "ambiciones" de Thonar. Le da un temperamento más fiero que el de un oso.
Toma. Déjame que te enseñe alguna de las cosas que me enseñaron sobre pociones las sanadoras del templo.
Familia y honor. Eso es lo que entraña ser uno de los nuestros, muchacha.
Prometió que el paraíso esperaba a sus seguidores cuando muriesen, y que renacerían junto a Mehrunes Dagon.
Las condiciones no son aceptables, y lo sabes.
Familia y honor. Eso es lo que entraña ser uno de los nuestros, muchacho.
¡Oh, gracias!
Odio esas cosas. Tienen demasiados ojos.
Es una maldición caída sobre nosotros. Eso está claro.
Es difícil de descifrar, lo sé, pero las señales de Azura nunca son erróneas. Creo que con la fortaleza se refiere a Hibernalia. Pregunta si conocen a ese encantador elfo.
Es como volver a nacer. Una y otra vez.
No les gusta que hablemos con la gente cuando estamos trabajando.
Déjame darte un consejo. Si quieres ganar dinero de verdad en este negocio, tienes que seguir las reglas.
Y cuando siento bullir la sangre del lobo en mi interior... es como si me invadiera toda la fuerza de las bestias.
Yo me crié en el bosque. Cazaba todo animal que veía, con mi padre. Los conozco tan bien como a mí misma.
¿A mí qué más me da Sovngarde? Prefiero tener el poder de hacer pedazos a mis enemigos como bestia salvaje, y saborearlo.
¡Es hora de morir!
El viejo y yo tenemos nuestras diferencias con este tema. Es una bendición concedida por Hircine.
Una pregunta delicada. Procura ir con cuidado cuando toques el tema con ciertas personas.
Sigo albergando esperanzas de trascender a Sovngarde, pero son en vano.
Para mí es una carga muy pesada.
Un gremio de ladrones altmer. Se hacen llamar las Sombras de Estivalia.
No sé con quién has estado hablando, pero está claro que se equivocaba.
En cualquier otra circunstancia estaría de acuerdo contigo. Sin embargo, estos no son sueños normales.
Vomindok. No lo sé. Tal vez al crearlos eliminaron del propio tiempo los conocimientos necesarios para hacerlo.
Creo que hay algunas cosas que... Oh, espera. ¿Intentas engañarme? Aún no eres un sangre completa. No podemos hablar sobre eso.
Si gano bastante dinero con la granja, me compraré un drakkar para navegar por los ríos de Skyrim.
¿Qué te he dicho? No hables de ese tema.
Y si los rebeldes cuentan con un dragón, el general Tulio es el único que puede detenerlos.
Últimamente no viene mucha gente por aquí. A veces creo que se han olvidado de mí.
Eso es algo que no tendrías ni que saber. Recuerda que aún no perteneces a los Compañeros. Aprende a estar en tu sitio.
Te lo estás imaginando. Nadie sabe lo que sentimos el uno por el otro.
¡Gracias! ¡Gracias! ¡No se lo contaré nunca a nadie, lo prometo!
No quiero que trates mal a ninguno de estos libros. ¿Está claro?
¿Pero qué...? ¡Nos han traicionado! ¡Cuidado!
¿Mi consejo? No pienses demasiado. Lucha bien y el resto llegará por sí solo.
Eso creo.
Tenemos a los hermanos de escudo, que hacen que nuestra retaguardia sea tan peligrosa como el frente.
Significa que, cuando estoy en apuros, siempre tengo a alguien de mi lado.
¡Ah! Me siento como si me acabara de despertar de una siesta.
Trabajar en el aserradero es aburridísimo, pero sería muchísimo peor tener que trabajar en una mina.
Formar parte de ellos es ya como ser inmortal. Incluso si nunca llegase a ver Sovngarde, me quedará esa gloria.
El grupo de combatientes más antiguo de Skyrim, y totalmente glorioso desde los tiempos de Ysgramor hasta el presente.
Muchísimo.
Me temo que no se le puede molestar. Tiene negocios importantes que atender.
Cuando hayas reunido las monedas necesarias, hablaremos.
Hazte con el cuerno de Jurgen Llamador del Viento, nuestro fundador, que está en su tumba, en el ancestral templo de Ustengrav.
Intentamos defender el legado de Ysgramor. Llevamos su buen nombre para que nunca se olvide y siempre se hable de él con veneración.
No tienes nada que hacer en nuestra fortaleza, visitante.
Era una mujer joven, lozana, con pelo negro, largo y ondulado.
Pero siempre ha conllevado una especie de honor. No nos metemos en política ni en asuntos turbios.
Sin él, no somos más que un puñado de ladrones de poca monta.
Durante más de 4.000 años ha habido un grupo llamado los Compañeros. En ese tiempo ha sido muchas cosas diferentes.
Cuando entramos en combate, luchamos por nuestro propio nombre, y por el de los Compañeros.
Nunca he sido muy inteligente. Pero los Compañeros dan la bienvenida a cualquiera que tenga el corazón de un guerrero.
Significa levantarse todas las mañanas sabiendo que puedes morir, y ganarse la vida luchando para seguir respirando.
Mi hermano me dijo que vendrías. Estoy aquí para darte lo que te has ganado.
Pero cuando llega la hora de la sangre, no hay nadie en todo Skyrim a quien prefiriera tener a mi lado.
Significa poder descansar en Carrera Blanca todo lo que quieras, para empezar.
Le confiaría mi vida a cualquiera de ellos, y eso es más de lo que puedo decir de los bebedores de leche que me criaron.
¿Quieres echar un vistazo alrededor? Esto no es, me atrevo a decir, el jardín botánico de Soledad. ¿Tienes idea de dónde estás? ¿De por qué estás aquí en realidad?
¡Tendremos que conseguir árboles en alguna parte! Esto empieza a resultar absurdo.
Desearía que más de los nuestros hicieran esas preguntas
Asombroso... se puede ver cómo los artesanos akaviri empezaban a adoptar el estilo nórdico, más fluido...
Resuelve tus problemas de forma directa. Deja los susurros y el sigilo para las ratas de alcantarilla que no pueden luchar por sí mismas.
La destilería Amielada solo utiliza la mejor miel natural, no ese fango que encontrarás en la hacienda Brillo Dorado.
Gloria en la batalla, honor en la vida.
Los Barbas Grises tienden a no salir demasiado, si entiendes lo que quiero decir.
Suministros de comida, principalmente; como pescado seco y carnes saladas. Ya sabes, cosas que aguanten bien durante mucho tiempo.
El problema es que mis piernas no son lo que eran, y subir los 7.000 escalones se cobra su precio.
Bueno, tenemos una especie de acuerdo. Quiero decir, no me parecería correcto cobrarles por un poco de comida en conserva.
Eres muy generosa, Jala, pero prefiero pagar como los demás.
Ten, toma esta bolsa de suministros. En lo alto de los escalones verás el cofre de las ofrendas. Deja la bolsa dentro y habrás terminado.
No debería haber accedido a acoger este consejo de paz. A los Barbas Grises no nos corresponde inmiscuirnos en este tipo de asuntos.
Nadie ha sabido de ellos en más de un siglo. Desaparecieron, junto con su santuario en la isla de Arteum.
¿De veras? Muy amable por tu parte.
Al menos has conseguido salir con vida. Tu equipo está a salvo en mi habitación, como había prometido.
¡Alto, en nombre del jarl!
Oh, espero que no, la verdad. Sería bastante malo para mi investigación.
Me alegro de haber recuperado Hibernalia. Mientras los imperiales la ocupaban, sus valiosos recursos se pudrían en nuestra frontera septentrional.
No te entiendo, Elgrim. Las fórmulas que me estás dando son para novatos, pero para mí todo eso ya está más que superado.
Tengo un familiar. Un sobrino. Está en la cárcel por pertenecer a los Renegados.
No tienes tanto atractivo como te gustaría creer.
Es difícil explicarlo a una persona no iniciada... Perdóname si me paso con las explicaciones alquímicas.
¿Conoces el relato de nuestra transformación en hombres lobo?
Esta fortaleza es para los orcos. Márchate. Ahora.
Toda una escalada, ¿verdad?
Nunca podremos descansar en paz, ya que los enemigos de Balgruuf tampoco lo harán.
Además de eso, mira por dónde pisas. Con tanto viento, las escaleras pueden ser traicioneras.
Bueno, la ocasional manada de lobos o algún descarriado, pero eso es todo a lo que me he tenido que enfrentar. No debería suponer un problema para alguien como tú.
¡Que tengas un buen día!
¡Y ahora, dales a esos estúpidos osos lo que se merecen!
Si tienes ocasión, mata a unos cuantos osos más por mí, ¿quieres?
Ja. Me gustaría ver a esos desgraciados arrogantes puestos en su sitio. Siempre mirándonos por encima del hombro a los que vamos a pie.
Cachorro, supongo que es hora de reunir más suministros.
Gracias de nuevo por los trabajillos.
Es Falion. Él... lo hizo. No sé el qué, pero lo hizo.
¡Me estoy... desvaneciendo!
Bah. Qué conversación tan aburrida.
¡Reyda! ¡Reyyyyda!
Bien. Espero que hayas tenido cuidado en el aserradero. Las astillas y clavos oxidados son bastante peligrosos.
¡La montaña te comerá! ¡Cuidado con la montaña!
¡Narfi es tan feliz! ¡Muy feliz! ¡Muy feliz!
Buena suerte con lo de conseguir que algún guardia te ayude con lo que sea.
Ojalá pudiera ir contigo...
Solo digo que esas lámparas de cerámica me ponen nerviosa. Parecen muy... frágiles.
La mayoría han de entrenarse durante años antes de poder intentar siquiera un solo grito.
Parece que nadie sabe aún lo que ha ocurrido. Vamos, probablemente Gerdur esté trabajando en su aserradero.
¡En marcha!
Esbern probablemente tenga razón. Prueba a usar tu sangre con el sello grabado en el suelo.
Sal de la ciudad tan rápido como puedas. Aquí no hay nada para nadie.
Llevaba una vida de privilegios y excesos. Le interesaba más complacer a su reina que gobernar sus tierras.
Un viaje agradable, mi señora.
Farengar te puede explicar la situación mejor que yo.
Dispara al objetivo más lejano.
Si pasas por aquí alguna otra vez, ven a tomarte un trago.
Si te diriges al monasterio, mira bien por dónde pisas... es una buena caída.
Cuando estés en el túmulo, mantén los ojos bien abiertos... ¡así es como caen todos!
¿Sabes que se acostó con tres hombres distintos el mes pasado? ¿Qué clase de mujer haría algo así?
"¡Pues, claro! ¿Acaso crees que la regalan?"
Es sospechosamente amable por su parte. Creía que odiaba a todo el mundo.
Un accidente en la mina, cuando estaba en la cárcel por robar bolsas.
A M'aiq no le importa lo fuerte o inteligente que sea uno. Solo importa qué puede hacer.
Tu compasión es admirable, pero ya sabes que no podemos ayudar en esto. Los pobres deben seguir el ejemplo de los dioses y superarse.
Por las barbas de Ysmir, vas a helarte y a morir aquí...
Ve a ver a Arniel Gane. Está en la sección norte de las ruinas, en alguna parte. Él te dirá qué hacer.
Deberías haber actuado. Ya están aquí.
Vale, muy bien. Prefieres escuchar, ¿no? Bueno, doy por hecho que representas a la Hermandad Oscura. Yo tampoco estaba esperando a nadie más.
No, no mucha. Algún que otro viajero en el camino, pero sobre todo el viejo Fultheim. Apostaría a que viene a ahogar en la bebida una vida de malos recuerdos.
¿Este viejo lugar? Ha estado aquí desde siempre. Construida por mi abuelo, y regentada por él y por toda la familia hasta llegar a mí.
Tienes mucho ánimo, pero no mucho sentido común.
La mayor parte del tiempo se limita a pasar el rato. Va al lago, a veces prueba las reservas de vino de la bodega. Por lo que a mí respecta, puede hacer lo que quiera.
¡Ya basta... ya basta!
Si necesitas cualquier cosa, dame una voz y te ayudaré.
¡Esto es por Haldyn!
Pobre Roggi. Si tienes el día generoso, invita al nórdico a un aguamiel. Le harás un favor.
¿Has visto alguna otra posada por aquí? ¿Dónde iba a beber si no?
Un poco triste, la verdad.
Sí, una ley impuesta a golpe de espada aldmer. Una espada manchada con sangre nórdica.
O se trata de una especie de broma, o me ocultas algo.
La próxima vez, puede que quieras vestirte antes de salir de casa.
Te doy la bienvenida a El brezal. Si necesitas algo, estaré por aquí. Me alegro de tener clientes.
Matemos a alguien.
Supongo que es hora de responderle...
Esta es nuestra fortaleza. Vete.
Ah, sí.
Todavía sigue en el pueblo, sobreviviendo a base de malvender sus hechizos a la gente de El hogar helado. Es lamentable.
Pero lo cierto es que tengo una montaña de papeleo pendiente en Ventalia que no se va a hacer solo.
¿Quieres cuchillos? ¿Los quieres en las tripas? ¿No? Pues no hables con Deeja.
¿Te lo pidió? Tengo que reconocer que el hombre es insistente.
Ahora, volvamos al tema que nos ocupa.
¿Y qué preferías que dijera? ¿Perdón por seguir las absurdas enseñanzas de un Divino enloquecido? ¿Perdón por robarles los recuerdos a los niños?
En el nombre de Dagon, ¿quién eres tú? Habla, o te partiré en dos aquí mismo.
Claro, toma. Cuídate.
Supongo que tenías tus motivos.
Vaya, vaya, dichosos los ojos. Siempre tengo tiempo para bellas damas.
¡Que no me puede obligar a quedarme!
Algunos creen que son los dioses los que envían a los Sangre de Dragón a nuestro mundo en momentos de gran necesidad. Ya hablaremos de eso más adelante.
Cuando me convertí en administrador, tuve que dejar la bebida. La gente de la comarca me necesita en plenas facultades.
Y allí no estás solo tú. Hay otros. Un vástago de la noche... ¿Un acechador de las arenas? Ah, pero antes de que seáis familia, habrá sangre. Mucha sangre.
Pero, hasta que nos ocupemos de ese dragón, Ulfric va a tener que esperar.
Ya veo... Dale los documentos a mi administrador.
Eso suena bien. No estoy seguro de que la corte crea que Olaf tenía poderes mágicos, pero lo comprobaremos.
Me muero de ganas de ser la novia algún día. Algún día...
Por el momento, dale los documentos a mi administrador.
Buen trabajo. Veo que sabes lo que haces.
Toma. He tenido que usar palabras muy simples para que Camila pueda creer que la ha escrito él.
No vienen muchos visitantes a la mazmorra. De vez en cuando, Sybille Stentor se pasa buscando... voluntarios.
No seas idiota. Provencio es como mis ojos.
Bien. Sígueme. Tendremos que abrirnos paso luchando. No creo que nadie más de por aquí vaya a cambiar de parecer.
Mmm... estos informes son interesantes...
¡Vamos, vamos!
Pero diez cortes pequeños...
Según veo, también tienes el salvoconducto. Magnífico, magnífico...
Provencio, ¿qué opinas de esto? Si Ulfric ataca Carrera Blanca...
Es probable que encontremos resistencia. Hay muchos campamentos de Capas de la Tormenta ocultos en las colinas.
Tuve la fortuna de que me guiase un maestro armero de Silvenar hasta que falleció.
Eres más que una agradable compañía. ¿Y tú qué me dices? ¿Te interesaría... compartir tu vida conmigo?
Como siempre, señor, aconsejo precaución... Sugiero esperar y ver qué pasa.
¿Ayudarla...? ¡No, no! Oye, ni siquiera sabía quién era hasta que contactó conmigo.
Buen trabajo. Con esos espías imperiales fuera de juego, puedo arriesgar más a la hora de enviar hombres.
¿Piensas marchar sobre Ventalia?
No soy estúpido, Provencio. Me refiero a que es el momento de desafiar a Ulfric a que se enfrente a mí como un hombre, o a que envíe sus Capas de la Tormenta hasta las puertas.
Estaría mucho más caliente y feliz con la panza bien llena de aguamiel...
No soy estúpido, Provencio. Me refiero a que es el momento de desafiar a Ulfric a que se enfrente a mí como un hombre, o a que declare sus intenciones.
¡No hará tal cosa! ¡Lo más que puedes esperar es una puñalada trapera!
¡No hará tal cosa!
Fue bastante directo con Torygg.
¿Con Torygg? ¡Lo único que hizo fue acercarse al muchacho y asesinarlo!
Qué lástima que nadie se lo dijera a los elfos. Vino todo un grupo de Thalmor y exigieron que arrestaran a Ulfric.
Ese "muchacho" era el rey supremo de Skyrim.
Debo muchísimo dinero a alguien y creo que me han estafado. No sé qué hacer.
Aunque supongo que preferirá enviar a sus "Capas de la Tormenta" a que le hagan el trabajo.
Si Ulfric quiere desafiar mi gobierno al viejo estilo, deja que lo haga.
Ni siquiera eres capaz de concebir el poder que domino...
Un día, ella desapareció por las buenas. Ranmir estaba convencido de que se había escapado con otra persona, dejándole tirado.
Yo no soy el rey supremo, pero tampoco soy un muchacho.
Puedes intentarlo, pero nosotros no hemos conseguido nada al hablar con él.
O no. No hay ninguna garantía en las profecías. Tan solo esperanza.
Intenté decirle que no conseguiría superar las trampas, pero no me hizo caso...
Hay ruinas delante. Es decir, viejas trampas y esqueletos polvorientos.
¿Entonces puedo pedirte que medites la petición del general Tulio? Es decir, si te has decidido a ofender al jarl Ulfric...
Me preocupa que pases tantas noches fuera.
Pero Provencio tiene cierta razón. Ulfric lo ha dejado claro. Él cree que rechazar su pretensión supone aliarse con el Imperio.
¿Y qué hay de malo en dejar que unos pocos legionarios mueran en lugar de tus propios hombres?
No, no, no. ¡Necesito el trabajo! Es el único sitio de la ciudad donde me lo darán.
Sí, soy un hechicero poderoso. No, no te voy a hacer un espectáculo de magia.
Parece de cobardes.
Mantener alimentado Soledad es trabajo duro, pero que no le confiaría a ninguna otra familia.
Siempre y cuando las órdenes provengan de Ulfric.
Sí, eso dice también papá.
¿Otra vez con eso? Aquello fue diferente. ¿Acaso le dieron a Balgruuf la opción de negarse? No se preguntó a los jarls. Le dieron una orden y tuvo que hacerlo.
No se preguntó a los jarls. Nos dieron una orden y tuvimos que hacerlo.
¿Sabías que Vittoria es la prima del emperador? Te conviene caerle bien.
Ulfric es quien ha ofendido.
Illdi. ¿En qué año se produjo la invasión del Imperio por parte del Dominio de Aldmer?
Un momento. Hay un oso ahí delante. ¿Lo ves?
Los nenazas de esta ciudad no aguantarían ni cinco minutos en una batalla de verdad.
¡Maldita sea! ¡El oro es lo de menos!
Ahora no. Si no me toca turno de noche, me tomaré un trago contigo en El gigante dormido.
¡Espera, vuelve!
¿Te apetece más?
Oh, va en serio. Pero yo también.
He vivido en el río desde que aprendí a andar. No lo cambiaría por nada en el mundo.
Tengo un mensaje para que se lo entregues a nuestro amigo, el estimado jarl de Ventalia.
Vuelve cuando averigües cómo gastar el dinero.
Entrega esta hacha a Ulfric Capa de la Tormenta.
Un momento. Pero no te alejes, te voy a necesitar.
Primero, necesito que limpies la cámara principal de esas monstruosidades. Me quedaré aquí hasta que termines, planeando el siguiente paso.
Si te la devuelve, significa que tenemos que ajustar cuentas. Si se la queda, entonces estamos en paz.
Ulfric lo entenderá.
Tenemos informes sin confirmar de que alguien se ha colado en Hibernalia en estado de invisibilidad provocando... situaciones problemáticas.
M'aiq te da sus mejores deseos.
Ah, a nadie le interesa que pase eso, ¿verdad? Sería doloroso para ti, y molesto para mí. Paga la multa... y podrás marcharte.
Ahora que hemos resuelto ese tema, me llevaré todo lo que tengas... o tu vida.
Bien...
Ayúdanos a acabar con esto, por favor. Estamos lanzándole todo lo que tenemos.
¿Qué es esto? Si ese zoquete cree que me va a echar el lazo para tenerme en su casa de doncella, le...
Acabó quedándose décadas... Se convirtió en una especie de tío de Aduri.
Provencio, trae mi pluma. Y un pergamino de los buenos.
Los soldados de la Legión resplandecen como la nieve recién caída y rechinan como si fueran gallinas. Si vienen hacia aquí, lo sabremos.
Sí, al general Tulio.
La verdad es que no me viene nada bien para el negocio. ¿Quién iba a querer una habitación cerca de un túmulo encantado?
¿No me digas? Me preguntaba cuándo aparecería.
El maestro Borri ha accedido a enseñarte la primera palabra de un nuevo grito. Atiende.
¡Este es tu último error!
¿Podría hablar con ella, por favor, y así aclarar todo esto?
El Colegio de Hibernalia tiene un aspecto increíble. Nunca he puesto el pie allí, pero siempre he querido hacerlo.
Está ocurriendo algo...
¿Son de piel? Si llevan refuerzos de metal, deberías hablar con Balimund, en El martillo quemado.
No tengo nada que decir a ese asesino.
Me encerraron más veces de la cuenta. Ahora ya no saldré de aquí en toda mi vida.
Espero que no te estés mojando demasiado ahí atrás.
¡Por favor! Te pagaré. Te daré lo que quieras. ¡Pero no me dejes aquí!
¿Otra bebida, Cosnach? Aquí, alguien que trabaja para Arnleif e Hijos solo se merece lo mejor.
Esperaba que mi vida fuera mucho más sencilla aquí, pero parece que la guerra me sigue a todas partes.
Antes de lo que crees.
Pregunta a cualquier idiota de por aquí y cada uno te dará una respuesta distinta.
Es muy atrevido pavonearse así por ahí, buscando pelea. Este estará dispuesto a complacerte si llega el caso.
Es preciso derrocar al Imperio y a los jarls que lo respaldan. El pueblo lo exige. Yo lo exijo.
No hay progreso sin sacrificio. Hay que trillar la mies para cosechar el trigo.
Ahora debo mostrarles el camino que nos devolverá a nuestra antigua gloria.
He demostrado al pueblo que cuando nuestros jarls beben la leche del Imperio, nos debilitan.
La corona debe de estar por aquí, en alguna parte. Atento por si aparecen más esqueletos polvorientos...
Eres un héroe de guerra, Brunwulf. Ulfric te escuchará.
Todavía no sabemos quién o qué ha sido responsable. Es como si se diera cuenta de mi presencia.
¿Ah, sí? Cierto, puede que acabe mis días en un callejón oscuro con un puñal en la espalda. Pero el pueblo ha visto la verdad, y no se echará atrás.
Que no encaje aquí no es motivo para que los demás se rían a mis espaldas.
Teniendo en cuenta cómo acabó la Gran Guerra, es mejor que seamos prudentes y que no nos confiemos con ninguna táctica.
Nos aseguraste que la ciudad era segura. ¿Cómo ha podido suceder esto?
Cuidado, estas ruinas nórdicas son famosas por sus trampas.
¡Cae de una vez, gusano!
Se dice que Hircine entrará en comunión con cualquiera que acabe con ella. Seguí su pista por estos bosques y entonces tuve mi... accidente con la niña.
Esa es la verdadera cuestión, ¿no crees? Entra el bufón, cierra la puerta y empieza la conversación. Así que alguien debía estar esperándolo dentro.
Bah. Otro hombre honrado perdido en esta locura. ¿Y para qué?
Te devolveré a tu Legión. El legado Cipio puede necesitarte. Que los dioses nos acompañen a todos.
Mmm... Es como hablarte del frío del espacio o del terror de la medianoche. Sithis es todas esas cosas.
Has vuelto con mi hacha. Sabía que esa sería su respuesta.
¡Por supuesto que no! La complacencia es la enemiga del arte. Contigo están en buenas manos, Inge.
Muy gracioso. Esto es cosa de Enthir, ¿verdad?
... no podría pasar otra temporada en esa apestosa prisión... Mejor morir que entregarme...
¡Hurra! ¡Grelod la Buena está muerta! ¡Estamos a salvo!
Ah, sí. Parece ser que la entrada está cerca de lo que ahora se conoce como la Aguja de Karth. Habrá que ver qué nos encontramos al llegar.
Espera. ¿Hablas... hablas en serio?
Eso no es asunto tuyo, y te agradecería que no volvieras a sacar el tema.
Una mujer bella e inteligente no se va a dejar enredar con esas tonterías... Espero.
Sabía que podía contar contigo, soldado.
¡Pero no quiero estar seguro! No me asustan los peligros de ahí fuera. Lo único que me da miedo es desperdiciar mi vida en esta granja.
Los Thalmor saben cómo manejar a los adoradores de Talos.
Esto nos abre campos de investigación completamente nuevos. ¡Ojalá Séptimo pudiese ver esto!
Toda esta espera es una estupidez. Deberíamos luchar contra los Capas de la Tormenta.
Ya llevamos tiempo solos. Temo que no sobrevivamos.
Muestra respeto mientras estés aquí, y yo estaré bien.
Ah, Nana Ildene, ¿qué haría mi familia sin tu ayuda?
¿No has oído hablar de Malacath? Es el guardián de los juramentos, el señor de las maldiciones.
He oído lo que hiciste. Has hecho daño a alguien. Mucho daño.
Exige lealtad y fuerza de sus orcos. Hemos intentado complacerle, pero ahora está enojado con nosotros, así que sufrimos.
¡Ja! Has hablado como un líder del gremio de ladrones.
Pero tú podrías camelártelos lo suficiente para que bajen la guardia.
Si necesitas más trabajos de herrería, ven a verme de nuevo.
¡Dales a esos piratas su merecido!
Si deseas comerciar, ven a verme de día.
Gracias por contarme la verdad. Deberías hablar con Sven. Seguro que él también te dará las gracias por defender su nombre.
No tarda en enfadarse, pero sí en perdonar. Quien ofende a Malacath tendrá que sufrir a cambio grandes tormentos.
Pero, bueno... hay una cosa más. Si te interesa.
¿Semanas? ¿Más? Parece que haya pasado una eternidad. No he dormido en todo este tiempo.
Como quizá ya sepas, el culto a Talos está prohibido en el Imperio.
Ataf, haz el favor de volver a tocar esa pieza.
Mira, yo he visto uno de esos espíritus con mis propios ojos. Cuando me miró, te juro que me atravesó el alma como si fuera mantequilla.
Entre tú y yo, creo que sus motivaciones son un tanto más interesadas. Se sirve de esta guerra santa para hacer presión y así acceder al trono.
Una deuda es una deuda. O la paga él, o la pagan los suyos.
Dicen que no hago más que entrometerme y molestar a los demás, ¡pero solo intento salvar vidas!
En tal caso, lo he juzgado mal.
El faro de Soledad será el que lo guíe... Pero si su fuego se apagase, el Corredor del Hielo encallaría.
He dicho que te largues. Los Renegados no son más que un hatajo de chalados. Tenemos todo bajo control. No te inmiscuyas.
Hemos hecho una oferta justa. ¿Tienes un interés serio en esta tregua, o has venido solo a figurar?
Nunca volvimos a verlo.
¿Qué tienes que decir, Sangre de Dragón?
No hay que hacer mucho caso a las habladurías, Torbjorn.
¡Calma! ¡Tened calma! ¡Permaneced a cubierto hasta que haya bajado!
Yo le avisé de que no fuera al túmulo, como ya te he avisado a ti. Durante la noche siguiente oímos gritos que procedían de allí, y así quedó la cosa.
Jorleif, quiero que envíes un mensajero a los campamentos de occidente.
Como todos, una crisis los empuja a la devoción. He visto a muchos Escudo Quebrado, desde que perdieron a su hija.
Hace cosa de uno o dos años, un tipo llamado Wyndelio vino por aquí. Dijo que era una especie de cazador de tesoros.
Ahora soy el jarl de Markarth. La familia Sangre Argéntea al fin está donde le corresponde.
Bueno, más bien la recepción pública. Será un acontecimiento encantador. Te mezclarás con los invitados, comerás tarta... y apuñalarás a la novia.
¡Protesto! ¡Esto es un insulto a mi dignidad! ¡Esta vez soy completamente inocente!
Si me haces una lista, las tendrás todas en el puerto mañana por la mañana.
¡Me rindo! Concédeme unas horas para reunir mis cosas y me marcharé. Tienes mi palabra.
... No puedo creerlo...
Si es trabajo lo que necesitas, ¿qué me dices de cortar un poco de leña para el fuego?
No, es que básicamente no existen.
¿Conocías a mi padre? Era alguien muy importante. A veces incluso hablaba con el jarl.
Yo no lo habría dicho mejor. Ha pasado bastante desde que he tenido noticias de otras partes de Skyrim. ¿Tú qué has oído?
La buscaron todos y nadie la encontró. Wilhelm dijo que volverá... Le dijo a Narfi que no se preocupase... Reyda volverá.
No... te referías... a ti. Te referías a... Pelagio...
Reyda estaba aquí y, de repente, desapareció. Se fue a recoger plantas y nunca volvió a casa... no, no.
No quiero que ningún elfo estirado me diga a qué dioses puedo adorar y a cuáles no.
No podría haberle ocurrido a un tipo más "agradable".
Hace que Narfi esté muy, muy triste. Narfi necesita que Reyda le diga adiós.
¡Eso es! ¡Ahora esperad hasta que esté bien dentro!
¿Necesitas algo en especial hoy?
Cuando papá se fue, le dije adiós... a mamá, le dije adiós. Reyda se marcha y Narfi no puede decirle adiós.
¡No seas condescendiente conmigo!
Aquí tienes el pago por la muerte de Alain. Y no te daré nada por dejar vivir a Nilsine. Recuerda que la decisión fue tuya.
Se recluye solo en lo que queda de la granja de su familia, al otro lado del río.
Es inofensivo. Ha estado así desde que su hermana Reyda desapareció, hará ya más de un año.
¿Pero estarás seguro aquí? ¿No te estarán buscando los imperiales?
Intenté encontrarla, pero nunca apareció.
Ese condenado bufón pagará por lo que ha hecho...
Probablemente, lo mejor será que la evites por ahora... A Reyda no le hizo ningún bien.
Allí vi una especie de entrada a una cueva. La gente la llama "la Sala de Geirmund", pero no sé por qué.
Lo siento, necesito prestar toda mi atención para recordar esto.
¡Estupendo! Lamento que lo vuestro no acabara bien. Sé que estabas muy emocionado por la boda.
¡Oh, no! No, no, no. ¡Narfi no ha podido decir adiós! Ahora Narfi se queda solo.
¡Ven! Ven a ver mi mercancía.
Bueno, mira, es un poco complicado, y... ¿sabes qué? No importa. Creo que de momento no pienso jubilarme.
¡Por obtener ventajas mutuas! Hasta el más necio se daría cuenta.
Recuerda, Sabjorn necesitará ayuda. Da buena impresión.
Pero eso fue hace muchísimos años, antes de que todos los miembros de la orden tuvieran que volver a la isla de Arteum, y después desapareció.
¿Los Barbas Grises? ¿Qué quieren de mí esos viejos ermitaños?
Mira. Tráeme diez pieles de oso de cualquier lugar de Skyrim y estaré encantada de pagarte por reducir su población.
¿Bromeas? ¡Esos malditos bichos me van a dejar sin negocio!
Tú recibes una generosa cantidad de oro, yo completo mi colección y nadie tendrá que morir.
Me alegro de encontrar por fin alguien capaz de seguir instrucciones simples.
Vendo todo tipo de venenos para casi todas las ocasiones.
Ha llegado el punto en que tengo que barrer todo Skyrim en busca de árboles ilesos del tamaño adecuado. Me cuesta mucho tiempo y dinero.
Pero no a todos, porque algunos de ellos siguen aquí.
¿Así es cómo nos paga el Imperio nuestra lealtad?
¡Por Talos, mereces que te apedreen! ¡No estás en posición de imponernos condiciones, Tulio!
Qué raro me resulta sujetar una empuñadura que no está unida a una daga. Bueno...
Heraldo, sería un honor para mí que te unieras a mi búsqueda.
Vahrukt unslaad... tal vez ya nadie salvo yo recuerde cómo lo derrotaron.
Espero que todos hayamos venido con ánimo de...
No ha llevado mucho tiempo.
Muy bien. Te he apuntado el último lugar del que he oído hablar. Que no te maten.
¡Escuchad, escuchad!
¡Vaya, menuda sorpresa!
Gran diplomacia, como siempre.
Forma parte de la delegación imperial. No puedes decidir a quién convoco al consejo.
¿En otra ocasión? Eso no me va a ser de mucha ayuda ahora, ¿verdad?
¡Capas de la tormenta! ¡A por ellos!
Gretta, Engar, quedaos aquí y vigilad la entrada. No queremos que los refuerzos imperiales nos ataquen por sorpresa.
No te moriste. Una batalla de la que sales con vida es un gran honor.
Es todo un detalle por tu parte.
Pero mamá, me aburro mucho sin nadie más que Torom. Solo estaba haciéndole unas preguntas a Skaggi.
Habrase visto, menuda cara.
Tiene algo especial dispuesto para ti. Será mejor que hables con él.
¡Yo pensaba que lo único que te importaba era pescar!
Pero también robaron el laúd de Finn. Nos hemos enterado de adónde huyeron los bandidos, y quiero recuperar el laúd como sea.
Si buscas pelea, la vas a encontrar.
En segundo lugar, sabemos que hay espías imperiales rondando por la comarca. Tenemos que acabar con ellos.
¡Ja, ja, ja, ja, ja!
Tomaremos Carrera Blanca. Reúnete con los hermanos que preparan el ataque. Lucha bien, o muere. Que Talos te acompañe.
Muchas gracias. Y, por favor, acepta este regalo. Espero que este detalle esté a la altura de lo que has hecho.
Hasta que encontró la manera de ponerles más cuerdas, los bardos solo tenían laúdes de seis órdenes.
Finn fue el bardo que inventó el laúd de ocho órdenes que se utiliza hoy en día.
Esto solo es una muestra de los beneficios que puede esperar quien simpatiza con los intereses de Thalmor.
Me sorprende que hayan dado permiso al Colegio para excavar aquí.
En Morthal, hay poco que dirigir, pero mucho que enseñar. Por eso, soy jarl.
Siempre que pienso en ello, me entristece.
El capitán heredó la Borrasca Marina de su madre cuando ella falleció. Tal vez yo pueda heredar el barco si él también muere...
Cometí el error de pedir dinero prestado a Sabjorn. Me permite devolvérselo, pero me está sacando la sangre y la vida.
Por desgracia, no puedo alcanzar tu plano directamente.
Te aseguro que no queremos hacerte daño.
¿Qué? ¿De verdad? ¡Oh, grandes Divinos! ¡Es verdad!
¡Este lugar apesta a escoria de piel gris!
Bueno, no te quedes ahí como un pasmarote. ¡Ve a recuperar mi flauta!
Largo.
Sí, así es. Toda mi vida. Nosotros los Batallador vivimos aquí desde el principio. Junto a los Melena Gris.
Acabo de recibir una nota de rescate por ella. ¡Esa flauta ha pasado de padres a hijos en mi familia durante diecisiete generaciones!
A Larina. Esa estudiante estúpida mía me ha robado la flauta y se la ha vendido a no sé qué nigromante.
No tengo dinero que darte, pero puedo enseñarte unos cuantos trucos que aprendí mientras tocaba para los hechiceros de Hibernalia.
Quizás... Te voy a entregar los recursos de los que pueda prescindir. Pero te advierto que como acabe siendo un desperdicio de tiempo y hombres...
¿Qué haces aquí? ¿Me has seguido?
Trabajas en la fragua.
Me formaron para ser escaldo, igual que a mi padre, y al padre de mi padre.
No debes jugar con fuego, ya lo sabes.
No pasó mucho antes de que perdiéramos aquello de lo que más dependíamos para sobrevivir... el respeto.
Al parecer, Larina le contó no sé qué historia de que la flauta hacía bailar a los muertos.
No dejes que te afecte. Tarde o temprano, Indaryn se cansará de buscarte las cosquillas e irá a por otro.
Halldir era el eslabón que faltaba. Rjorn entró en el túmulo de Halldir en secreto y, al parecer, murió allí.
Ellos representan la razón por la que estoy aquí. No puedo limitarme a ignorarlos, Aerin.
Boethiah habla de dejar tu marca, una señal de tu paso... Bueno, pues es posible dejar una marca en el mundo sin tener que recurrir a la traición y al asesinato.
Ah, hola, camarada. ¿Tendrías un detalle conmigo? Parece que no me queda ni una gota de licor. Y estar sobrio no me hace mucha ilusión.
Sí, y no sabría decirte por qué.
Muchos se niegan a hablar con nosotros. Nos llaman ladrones y contrabandistas. Me alegra ver que tú no eres como ellos.
Rjorn siempre andaba en busca de nuevas historias que contar. Se ve que estaba escribiendo un poema sobre Halldir cuando desapareció. Esa era la pista que faltaba.
Quien deshonra a su familia, se deshonra a sí mismo. ¿Es que no hay nada que te importe? Demuestra que sí: habla con Nazir y arréglalo todo.
¿Qué? ¿El emperador? Pero yo...
Bueno, me he graduado allí. Trabajo aquí, en El skeever travieso. Sin embargo, lo recomiendo encarecidamente. Habla con Viarmo si te interesa.
¿Bromeas, no? ¿Rjorn? Solo es el tamborilero de combate más famoso de la Segunda Era. Bueno, al menos famoso entre los bardos.
Parece que acabases de llegar. Es de mala educación hacer una pregunta tan directa en una de las pequeñas veladas de Elenwen.
Las arcas del Colegio andan un poco escasas, pero puedo enseñarte algunos trucos que aprendí durante mis días en el ejército.
Los bandidos hostigan a las caravanas a cada paso que dan, pero este khajiita suele espantarlos.
Uno de ellos me robó mi amuleto de luna, que me dio mi madre cuando apenas era un cachorro. Es el único recuerdo de mi hogar que me queda en esta tierra helada.
Hace unos días que nos tendieron una emboscada. Poco más que una molestia, en realidad, pero muchos de esos maleantes tienen los dedos largos.
No dejes que te intimiden, hermana. Ambas sabemos mantener la cabeza fría cuando los hombres se dejan guiar por el corazón.
¿Has averiguado algo útil?
Alain hizo que el dolor... desapareciera. ¡Pero era todo mentira! Alain me utilizó. Mancilló mi nombre, arruinó mi amistad con los Escudo Quebrado...
¡No tenemos ninguna oportunidad!
Vengo a cavar. Eso es todo.
Es un honor verte, guardián del anillo de Namira.
Estoy preocupado por Idgrod, y no sé qué hacer.
Si algún día quieres contar con las habilidades de un guerrero khajiita, viajar a tu lado sería un honor para mí.
Aquí está. Ah... Mi hogar...
¿Y qué quieres que haga? Si no enviamos a más hombres a la guerra, acabarás de guardaespaldas de uno de los hombres de Ulfric.
No estoy seguro de que las intenciones de Ulfric sean tan nobles como ellos creen. En mi opinión, Ulfric solo se preocupa de sí mismo, todo lo demás es pura fachada.
¡Nunca deberías haber venido aquí!
Voy a comprarle pescado a Noster. A él sí le gusta.
¿Algún avance en la búsqueda de la máscara?
Excelente.
Es el sacerdote de Arkay de Soledad. Fue él quien descubrió que Potema seguía por aquí. Nos ayudará todo lo que pueda.
Esta es nuestra fortaleza. Aquí somos libres para vivir como Malacath deseaba, lejos de los ojos curiosos de los nórdicos.
El oro soluciona casi todos los problemas, ¿no?
Confío en su opinión respecto a esto. Como sacerdote de Arkay, ha tenido que tratar antes con la nigromancia, aunque con nada tan poderoso como Potema.
No estoy muy seguro. Styrr cree que tienes algún tipo de vínculo con Potema.
Cada dos días o así, algún trabajador corre colina abajo diciendo que va a unirse a los Renegados.
Creo que ya sé lo que estaba haciendo mal...
¿A ti qué te parece, genio?
No será fácil enfrentarse a Potema, pero tú eres la persona más indicada.
Buena suerte. Cuento contigo.
Oh, pensé que ese asunto ya estaba solucionado. Creo que Falk se ocupa de ello.
No haré tal cosa. Aquí no se te ha perdido nada. Lo siento, pero debo insistir en que te vayas.
La corte se encuentra reunida.
Y después todos luchamos por sobrevivir. Ninguno de nosotros estaba preparado. Es increíble que el resto sobreviviera.
¿Quieres que sonría? ¿Y qué motivo tengo para sonreír? Este año nos van a pisotear la cosecha o soldados o dragones, te lo digo yo.
Ah, sí, buena idea. Será mejor que un hombre de negocios profesional se ocupe de ese dinero por ti.
Arrogante, ¿eh? Hazlo a tu modo, pero escucha.
Dicen por ahí que volvió su casa de Ventalia, y que han oído extraños cánticos saliendo de allí. ¡Parece que realmente lo ha hecho!
Más me vale que vuelva a limpiar la tienda. Qué desastre.
¡Dovahkiin, Dovahkiin, naal ok zin los vahriin, wah dein vokul mahfaeraak ahst vaal!
Por favor, no interrumpas al tribunal.
Oh. Ejem. Bueno... Veamos...
¡Raagghh!
Cuando acabemos, llevaremos el ejército contra el Dominio y les demostremos a esos desgraciados de orejas puntiagudas que no todos los hombres están dispuestos a ser sus esclavos.
No dejes de cantar en tu corazón para guardarte de la melancolía.
¡Vamos!
¡Ah! Malditos hechiceros... Aleja tus hechizos de mí.
Me alegro de que vayas a estar conmigo aquí dentro. No me gusta la pinta de este sitio... y no me refiero a los Capas de la Tormenta.
No te justifiques... Conozco bien los métodos que utilizáis en el gremio.
Suerte en tus viajes, caminante.
¡Tengo uno ya ensillado para ti! ¿Cuánto te parece que vale?
Olaf volvió triunfalmente a Carrera Blanca y ordenó que el bastión de la ciudad fuera reconstruido como prisión para Numinex.
¿Por qué te detienes?
Ulfric, ¿por qué tanta hostilidad? Al fin y al cabo, no son los Thalmor los que queman vuestras granjas y matan a vuestros hijos.
Hemos servido el tiempo que nos correspondía en la Legión. Ahora simplemente tratamos de ganarnos la vida cada día.
¡Cuidado con lo que dices! El Imperio tiene oídos por toda la ciudad.
¡Haz que Laelette se vaya!
La Luz de Stendarr te purifica de tus males.
Éramos seis. Llenos de ambición, ansiosos por conquistar el mundo.
Ayudo a mi madre en la tienda. También solía ayudar a mi padre... hasta que intenté usar la forja...
Un placer hablar contigo.
Mis espías informan de que la administradora del jarl, Anuriel, tiene una serie de acuerdos con el gremio de ladrones que serían bastante humillantes si se hicieran públicos.
Todo el pueblo está asolado por espantosas pesadillas. Corren un serio peligro, pero me temo que no hay mucho que pueda hacer por ellos.
Todos nos reuniremos con Arkay, antes o después. Más nos vale disfrutar del tiempo que nos quede.
Habla con Vex. No tenemos nada más que discutir.
La vida es demasiado breve. ¡No la desperdicies!
Ya te lo he dicho, no sé nada más sobre eso.
Si te enteras de algún chisme jugoso de la ciudad, ¡no olvides compartirlo conmigo!
Si robas algo de mi tienda lo lamentarás.
Kust es mi ayudante. Me ayuda a limpiar las lápidas y a mantener limpio el cementerio, como corresponde a un lugar de reposo.
Por supuesto. Algo que parece que no abunda mucho estos días.
Solo he venido a trabajar en la mina. Ya es lo único que me importa.
¡Oh, válgame Arkay, no! Soy demasiado viejo y frágil, y este cementerio es demasiado grande.
¡El Tambor de Rjorn! Nadie sabía dónde murió ni, por tanto, dónde estaba su tambor.
Teniendo en cuenta que la mayoría de nosotros ha muerto, yo diría que sí.
Sí, sí. Estos tentaculillos que salen de aquí, de la boca de los héroes nórdicos... es cómo los akaviri indican un "grito".
Tras cada batalla, se fueron enterrando más muertos, y el cementerio creció. He oído que ahora es el cementerio más grande de Skyrim.
No soy un erudito, pero sé que aquí se han librado muchas batallas a lo largo de la historia.
Este cementerio es muy antiguo. Lleva aquí más tiempo que la ciudad.
Los verdaderos hijos e hijas de Skyrim nunca dejarán de adorar al poderoso Talos. Si no podemos hacerlo en nuestros templos, lo haremos en nuestros corazones.
Suficiente para saber que no vale la pena.
¡Eh! ¿Planeas robar algo? Ni se te ocurra.
Ahí tienes la puerta. ¿Por qué no la usas?
Hasta luego, jamoncito.
Se llaman a sí mismos la gente de la Cuenca. Por su aspecto, diría que tienen mucha sangre en común con los bretones.
He visto documentos que se remontan al final de la Segunda Era. Más allá de eso, no sabría qué decirte.
Antes de hablar de negocios, hay algo que necesito que hagas.
Lo único que nos falta es un medio fiable de transportar la mercancía por Skyrim.
Malur, necesito que te ocupes de algo.
De acuerdo, pero luego no digas que no te lo advertí.
¡Vaya! ¡Bonita arma! ¿Puedo cogerla? Prometo no romper nada. ¡En serio!
Una sustancia ilegal que a los khajiitas les encanta. Muy difícil de encontrar.
¿Vald? ¿Por qué quieres ayudar a ese idiota?
Nos abordas como si nos conocieses, visitante. ¿Quién eres y qué buscas?
Ah, veo que tienes el vino. Dámelo y hablaremos.
A veces, buscar en todas partes da sus frutos.
Mi padre quería que siguiera sus pasos y que fuera cazadora, pero yo tenía unas metas un poco más altas. Nunca se quejó... Le echo de menos.
Antes de que lo preguntes: sí, mi linaje ha practicado la magia, y no, no quiero hablar del tema.
Paciencia, Illdi. Estudiamos los héroes del pasado para poder comprender mejor a los del presente... y los del futuro.
Dicen que una mujer nórdica puede conseguir lo que quiera si se lo propone.
No, no. Lo siento si te he parecido desagradable. Mi hermano siempre dice que soy un bocazas.
Ah, azúcar lunar. Ya olía que la llevabas encima. Estoy complacido por tu oferta, y la acepto.
Buen trabajo. Toma, deja que te dé esto en agradecimiento por todas las vueltas que has tenido que dar.
De acuerdo, contactaré con mi gente y les diré que preparen las primeras remesas de inmediato.
Muy bien. Me encargaré de que este oro se use para volver a la normalidad.
¿Ri'saad ha aceptado nuestra oferta?
¿Querías alguna otra cosa o ya hemos completado nuestra transacción?
Encontrarás a Ri'saad con su grupo de caravanas. No cometas ninguna estupidez cuando llegues ahí.
¿Quién de los dos crees que ha matado más imperiales? ¿Tú o yo?
Dale mis recuerdos a Tonilia. Dile que pronto me pondré en contacto con ella.
¡Rápido, sígueme!
¿Os creéis dignos de llamaros nórdicos si huis de este monstruo? ¿Vais a dejar que me enfrente a esa cosa yo sola?
Skyrim no es muy hospitalario con los argonianos, por eso acostumbramos a no meternos en líos.
¡Nuestra será la gloria de su muerte si me acompañáis!
Deberíamos perseguir a Vals Veran antes de que haga más daño aquí.
Está aquí arriba.
Bah, deja ya de disculparte. Pareces una idiota cuando lo haces. ¡Aprende a replicar un poco, muchacha! Cuando yo estaba en el templo...
Ya te daré más detalles cuando estemos cerca.
Gracias. Les echaré un vistazo e informaré a Mirabelle si encuentro algo importante.
¡Por la gracia de Mara! Un dragón... ¿en Helgen? ¡Cielos, podría venir aquí en cualquier momento!
Gracias de nuevo por tu ayuda.
Gracias. El dolor se alivia.
Ah. Me duelen las articulaciones, no puedo comer nada y la cabeza me va a estallar. He tenido días mejores.
Todavía no puedo sujetar nada, pero estoy mejor que ayer.
Apuesto mi último septim a que hay un mecanismo por aquí, en alguna parte.
Eorlund Melena Gris es un estúpido cabezón. Nuestra relación terminó cuando le dio la espalda al emperador.
A algunas personas no se les puede confiar ninguna tarea. No se enorgullecen de su trabajo.
El dolor ha remitido un poco, pero sigue siendo intenso.
Sí, sí, como ya lo has contado innumerables veces...
¡Mirad, aquí está Alduin! Este panel nos remonta a los inicios de los tiempos, cuando Alduin y el Culto del Dragón gobernaban Skyrim.
Eh... así es. Vimos cómo venía desde el sur. Era muy rápido... más rápido que nada que yo haya visto antes.
¿Has oído? El sonido de metal sobre piedra... Hum... Quizás no era nada.
¿Qué hace? ¿Está atacando la atalaya?
¿Ves? Es evidente que la terminología es de la Primera Era, o incluso anterior. Seguro que solo es una copia de un texto mucho más antiguo.
Tal vez haya draugr por aquí. Puedo oler la podredumbre en el aire.
Quizás date de justo después de la guerra de los dragones. Si es así, podría buscar referencias a los nombres en otros textos posteriores.
Di que lo sientes. Dilo ahora mismo.
¿Por qué la llaman mina izquierda? ¿Es que son todos zurdos?
Bien. Me alegra que estés haciendo progresos. Mis patrones desean respuestas tangibles.
Oh, no temas. El propio jarl por fin se ha interesado, así que ahora puedo invertir la mayoría de mi tiempo en esta investigación.
Sí, sí. No te preocupes. Aunque la posibilidad de ver de cerca a un dragón vivo sería extremadamente valiosa...
El tiempo corre, Farengar, no lo olvides. Esto no es una mera cuestión teórica. Los dragones han regresado.
¡Por Sithis, se acabó! ¡Atrás, pobre idiota! ¡Despídete de lo que quiera que planearas!
¡Ah! ¡La piedra de dragón del túmulo de las Cataratas Lúgubres! Veo que no eres como esos brutos que el jarl suele endosarme.
Un aprendiz tendría que saber forjar unas cuantas bisagras. Tácito es que no sabe ni eso.
¡Farengar!
¡Vamos! ¡A ver cómo peleas!
Kodlak solía hablar de una forma de limpiar su alma, incluso en la muerte.
Bueno, no me esperaba que el Gastrónomo fuera bretón. Resulta demasiado obvio. Algunos de los grandes cocineros son bretones, y...
He oído que hay combates en Skyrim. Puede que se trate de una rebelión. Me pregunto si estarán usando nuestro hierro para fabricar armas.
No das más que problemas.
Los dragones han vuelto y tú matas dragones. Por ahora no necesitas saber más.
Intenta "convencer" a uno de los posaderos para que te ayude.
Pronto seré vieja. Eso me deja un sabor amargo.
¿Mi amiga Olava? ¿La vidente? Dice que las cosas mejorarán en cuanto empiece a hacerme valer.
Gracias. No lo habríamos conseguido sin tu ayuda.
Dile lo que me has dicho a mí sobre el dragón.
¿La vieja casa de Friga Escudo Quebrado? Lleva abandonada desde que la mataron.
No te preocupes, mi señor. Soy la cautela personificada.
¿Qué quieres, imperial? ¿No es mi vida ya lo bastante difícil?
Entonces, esto... ¿cómo le va a Astrid últimamente? Dile que se pase por aquí alguna vez. Podríamos tomar algo y ponernos al día.
Qué, ¿estás sin hacer nada? ¿Qué tal si me haces un trabajito?
No soy tan buen mago como mi tío, pero aún tengo algunos hechizos que vale la pena comprar.
Necesito que recuperes el poema.
Me alegro de haber hablado contigo. No hay muchos dispuestos a hablar con la servidumbre.
Ru... ¡Maar!
El último, pero no el menos importante. ¡Vamos!
¡Muy bien!
Haz lo que puedas, y lo consideraré un favor personal.
Escucha, lo único que pretendo es revelar la verdad al gremio. Respetaban a Karliah, y ella se merecía algo más.
¿Profanarías esta maravilla de la gloria de Kynareth para arreglar ese tocón mestizo de Carrera Blanca?
Si tan solo supiéramos dónde se encuentra...
Pero ahora veo que esto no es en absoluto una negociación.
Prometen a la gente que matarán a todos los nórdicos que gobiernen en la Cuenca. Son solo unos asesinos y unos saboteadores.
He aprendido a manejar objetos de dudoso interés de vez en cuando, así que veré lo que puedo hacer.
Que Oblivion se los lleve. A todos y cada uno de esos miserables.
Rikke. No tienes por qué hacer esto.
El Imperio ha aceptado nuestras creencias, y sus ciudadanos tienen la responsabilidad de poner fin a su culto herético.
Sí y no. Viik nuz ni kron. Alduin tampoco fue derrotado realmente. De haber sido así, no estarías hoy aquí, buscándole... para derrotarle.
¿No trabajas ya para Aela? Ven a hablar conmigo cuando termines.
Si intentas deshacerte de mercancía robada antes de que se convierta en una carga, y por casualidad pasas por Hibernalia, hazme una visita al Colegio.
Tengo un cliente que quiere cambiar los libros de contabilidad de un negocio rival. No sé el motivo, ni quiero saberlo. ¿Puedo contar contigo?
Admítelo. ¿No hemos jugado ya demasiado a este juego? Desátame y cada uno se irá por su camino.
Yo mismo solía ir con ellos, pero acepté un trabajo con Maven, después de que atravesaran una mala racha.
¿Acaso no has aprendido nada de nosotros? ¿Te conformarías con servir a los Cuchillas como una simple herramienta y que te utilicen para sus propios fines?
Te lo prometo, compro muchas más cosas que simples baratijas de plata.
Me alegro de que estés aquí. Busco cierta mercancía que comprar. Tengo muchos pedidos que atender y a mis clientes no les gusta esperar.
Ven a visitarme a Soledad algún día.
¿O es que no has visto al hombrecillo demente ese vestido de bufón, camino abajo? ¿El tal Cicerón...?
No. No, no tengo ni idea de qué me hablas.
La única razón por la que estoy aquí es porque mi ausencia provocaría un conflicto diplomático.
A ver lo que tienes hoy para mí. Espero que algo fácil de revender para sacar beneficio.
¿Cómo te atreves a robarme?
Si tú tienes tiempo para vender, yo tengo tiempo para comprar.
No dejes de echar un vistazo a la estupenda selección de ropa de Ropajes Radiantes. Estoy segura de que tenemos muchos artículos de tu gusto.
Disculpa.
¿Tienes problemas con el gremio? Pues me temo que no podremos comerciar contigo hasta que no los soluciones.
Y bien, ¿te ha vuelto a enviar Delvin o has venido por tu cuenta?
Esos desgraciados se hacen llamar legionarios imperiales...
Pero lo que buscas no se logra fácilmente, y puede destruir a aquellos que no tengan una voluntad fuerte.
No estoy seguro. Al principio me acusaron de ser un Capa de la Tormenta, un adorador secreto de Talos...
Vi a Cayo... ese dragón lo agarró y... No sé ni cómo logré salir con vida de allí...
Tienes razón. Es el mío.
Te he contado lo que querías saber ¿Qué más quieres?
¿Qué te trae a Carrera Blanca? ¿Tienes mercancía interesante para vender?
Un grupo de ellos se ha refugiado en el Pálido.
No muy bien. Está convencido de que su casa está encantada, así que duerme en la calle.
Tengo varios elixires a la venta.
Confío en que me habrás traído algo más que un poco de vino de fuego.
Si eso te deja tranquilo, me la llevaré la próxima vez. Lo siento.
Ah, has regresado. Se oyen cosas buenas del gremio por todas las viñas.
¿Has venido a venderme algo especial, o simplemente querías echar un vistazo a mi mercancía?
Y cierto es que muchos nos consideran héroes.
Ah, llegas justo a tiempo. Tengo un cargamento de artículos estupendos, cortesía de la Compañía del Imperio Oriental.
¡Por el Imperio!
¿Te está gustando la fiesta?
Vuelve pronto... y trae más mercancía.
Saluda a Karliah de mi parte si la ves.
Voy a hacer como que no he oído eso. El comandante Maro es el mejor que jamás haya salido de entre las filas de los Penitus Oculatus. Procura tener, aunque sea, la mitad de hombría que él.
Soy el administrador del jarl. Si tienes asuntos de la corte que atender, habla conmigo.
Hazme un favor. Si hablas con Maven, dile que aquí todo está bajo control, ¿vale?
Por Mara, no me había dado cuenta de lo tarde que era. Tendremos que cerrar la tienda.
Eres la bestia que me atacó antes.
Yo... no sé por qué empujé a los demás a continuar. Les convencí de seguir adelante.
De un tiempo en el que el rey detentaba el trono porque sus enemigos caían a sus pies y el pueblo se alzaba porque lo amaba.
Parece que todo va saliendo muy bien, ¿no crees?
Años de trabajo, al fin van a dar fruto...
No hemos sabido nada de los supervivientes de las Sombras de Estivalia, así que daré por hecho que los eliminaste a todos o que se han marchado de Skyrim.
¿Cómo es que estás en Hibernalia? Mi papá dice que la gente como tú es la razón por la que aquí ya no vive nadie.
Además, la destilería va muy bien. Incluso tengo problemas para satisfacer la demanda.
No me puedo quejar. He pasado de ser el lacayo de Sabjorn a uno de los mercaderes más adinerados de Carrera Blanca casi de la noche a la mañana.
Lo mejor de todo es que ya no es necesario pasar cosas de tapadillo. Con la influencia que tenemos en Soledad, puedo salir por la puerta delantera sin más.
Estaré esperando en Cuenca Acantilada.
Un thane de Riften debe fijar su residencia permanente dentro de los muros de la ciudad.
Haremos guardia aquí fuera y entraremos en cuanto oigamos ruido de lucha.
Necesito que te cueles ahí dentro, que liberes a nuestros hombres y que mates a quien te cruces. Cuando rescates a los prisioneros, sal al patio.
Por su aspecto, yo diría que conduce directamente al interior de la prisión.
No estoy preparado para separarme de mi esposa.
Hay una rejilla en el exterior de la muralla. Según parece, solía estar cubierta por la nieve. No creo que sepan que está ahí.
Tú solo sigue a Gulum-Ei de cerca y ya se meterá en algún lío del que no podrá salir.
Eh, ¡te doy la bienvenida al aserradero!
Hemos encontrado una cueva bajo el lago. Con suerte, llevará a la prisión.
Sinceramente, habría que ponerle una medalla al que los retira.
¿Has hablado ya con el templo de Mara? Estoy muy emocionada.
Pero si ves que esto se te va de las manos, sal corriendo al patio. Acudiremos si oímos señales de lucha.
Entonces le habrás echado sal, y no germinará nada, lumbrera.
Tengo fe en ti.
Lo sé, mi señora. Pero necesitaba verte fuera de la corte, lejos de todo el politiqueo.
No puedo abrirla.
Perdona, pero soy un poco dura de oído. ¿Has dicho algo?
Esos ladrones deben de estar locos, para esconderse ahí. Estas criptas están llenas de trampas, trols, y quién sabe qué más.
¿Qué puede ser más importante que escuchar las plegarias de los fieles y responder las preguntas de los devotos?
Vaya, vaya... No te lo pierdas. Me parece que he perdido las llaves. Puede que me lleve un rato encontrarlas.
¡Alto! ¡Suficiente!
Y aquí estamos. ¿Entramos?
Y no odian solo a los elfos oscuros. También tienen su mira puesta en los argonianos.
Nada me complacerá más. Los distraeré mientras tú haces lo que hayas venido a hacer.
Y, aun así, has seguido mis órdenes. Me pregunto por qué.
A algunos de esos nórdicos les vale cualquier escusa para despreciarnos.
Yo estuve allí durante ese asunto tan sórdido. ¡Una época maravillosa! Mariposas, sangre, un zorro, una cabeza decapitada... ¡Ah, y el queso! De morirse.
Si encuentras a Staubin, me encantaría ver las notas que haya podido reunir. Aunque dudo que lo encuentres con vida.
¿Oh, de verdad? Mmm... Parece de alguien del grupo de Staubin. Un erudito lleno de valor, aunque no de sabiduría...
¿Y alzarías tu espada para honrarlo?
No he oído ni un arañazo en la puerta. ¿Lo has hecho tú?
Toma, suelo pagar a los investigadores por su trabajo una vez que han salido de las ruinas, pero ellos ya no lo van a necesitar.
¿Buscas ayuda con algo? Es un mal momento.
Desgraciadamente, la piedra angular de la educación se alza sobre los cimientos de la muerte. Informaré a su familia.
Ah, has vuelto. ¿Cómo ha ido la tarea que te encomendé?
¡En serio! Te... ¡Te cortaré en dos!
Sí, esta mañana. Era de Logrolf. Nos escribió para darnos las gracias por la comida que le enviamos.
¿Prefieres atacar sigilosamente? Tengo dagas muy buenas por aquí, en alguna parte...
Y que juramos proteger a quien fuera Sangre de Dragón, el matadragones supremo.
Los dioses te han dado este don por algo. A ti te corresponde averiguar cuál es la mejor manera de usarlo.
Ahora afrontaremos el mundo juntos. ¿Dónde deberíamos vivir? Mi hogar es tuyo.
Le hemos enseñado a ese dragón lo que pasa cuando alguien desafía a Carrera Blanca, ¿verdad?
Entonces plantamos cara y luchamos, defendiéndonos con nuestro muro de escudos hasta que, al amanecer, las filas de la Legión vacilaron.
Espero que tengas bienvenidas más cálidas en tus viajes que las que tenemos nosotros.
Bien, si hemos acabado con sentimentalismos, es hora de prestar juramento.
Solo un pequeño detalle: necesito todo el oro que te dieron. Por aquí nadie manga. Vuelve cuando tengas hasta la última moneda.
Espero que vuelvas a hacer negocios con nosotros.
Eh, ten cuidado con ese fuego.
Me temo que "aceptables" ya no me parece aceptable. Seguro que pueden soltar unas moneditas más cada mes.
¿Ya nos estamos quedando sin aguamiel?
Me has quitado las palabras de la boca. Apártate de mi camino y quizás no te lance un hechizo para encoger algo que te importa mucho.
¡Ah, qué maravilloso! ¡Lady Mara estará muy satisfecha!
¿Qué quieres? ¡Aquí no se te ha perdido nada!
¿Algún asunto oficial, quieres decir? Hum... pues no. No, lo cierto es que no.
Los dragones y la guerra han espantado a muchos comerciantes, pero aquellos con el valor suficiente pueden amasar auténticas fortunas.
Supongo que también te debemos algo por haberte encerrado. Toma el anillo de mi familia. Y todo lo que te confiscaron los guardias.
El comerciante más sabio es aquel que da con las mejores oportunidades, por muy lejos que tenga que viajar. Y Skyrim es una oportunidad muy jugosa.
Una pregunta perspicaz, pues estamos lejos de casa, en tierras frías y agrestes.
¿Qué te ha estado contando Karliah? ¿Cuentos de ladrones con honor? ¿Juramentos repletos de falsedades y promesas rotas?
Cuando nos miran solo ven ladrones y traficantes de skooma. Es extremadamente injusto, pero intentamos no hacer ni caso.
Parece ser que poseo un desgraciado talento especial para tener malentendidos con la ley.
¡Salid de nuestra ciudad, pieles grises! ¡Esto es la tierra nórdica!
No mucho, la verdad. Vine a Skyrim cuando sentí que no era bienvenida en Elsweyr ni Cyrodiil.
¡Han entrado! ¡No dejéis que ganen terreno!
¿De verdad no recuerdas haber robado una cabra para vendérsela a un gigante? ¿Estás mal de la cabeza?
El albergue no es una posada. Te recomiendo que te pases por La abeja y el dardo.
Lo digo sin amargura, pues fue Ri'saad quien me salvó de una vida de esclavitud a bordo de un mercante.
No hablo solo de mis súbditos. Hablo de mi pueblo: los orgullosos nórdicos de Skyrim.
Odio hacerme esto a mí misma, pero no puedo evitarlo. Probé un poco de skooma hace un año, ¡y desde entonces no puedo parar!
No tienes que disculparte conmigo. Solo espero que los Ocho nos traigan más paz en el futuro.
Hace tiempo, yo era un huérfano perdido en las calles de Corinthe. Me embarqué como polizón en una mercante que me trajo aquí. Y Ri'saad me encontró.
Gracias por hablar conmigo.
En Cauce Boscoso no recibimos nuevos visitantes todos los días.
Lo de venir aquí, ahora que estas tierras están sumidas en el caos, fue idea de Ri'saad. Donde otros solo veían peligros, él veía oportunidades.
Los soldados se cuentan entre nuestros mejores clientes, ya que les ofrecemos suministros y mercancía que no pueden obtener de otra forma.
Dado el estado de Skyrim, yo tampoco me atrevería a afirmarlo.
¡Un vampiro!
Me pediste ayuda. Y no para nada, espero.
No te hagas el tonto. He dicho que vacíes los bolsillos... ¡ya!
¿Y alzarías tu jarra para brindar por ella?
¡Acabaré contigo!
Si se fueran de la ciudad juntos, podría convencer a mi marido.
Maestro, no estarás pensando en aceptarlo, ¿verdad?
Tu piel es pálida como la nieve. ¿Tienes fobia a la luz del sol o algo?
¡Trucos de magia! Un orco se enfrenta al enemigo, no se oculta de él.
Si te diriges hacia el oeste desde el punto en el que el río Blanco se desvía hacia Carrera Blanca, podrás ver a los gigantes de Cuna Triturada.
Ojalá Elgrim hubiera pasado tanto tiempo enseñándome a mí como el que le dedica a esa Ingun.
Creo que tienes una entrega que hacer.
Ah, me alegro de verte, hermana. ¿Preparándote para matar al emperador? Es una época emocionante. Una época emocionante, sin duda.
¿Quieres hablar con el rey harapiento? Vale. Pero primero tendrás que pagar el peaje.
Me temo que eso es imposible.
No eres una amenaza... sino una mera molestia.
He estado intentando averiguar por qué el aguamiel de Riften sabe mejor que el de Carrera Blanca.
Debes acabar con un objetivo más antes de que podamos atentar contra el emperador.
¡Nocturnal se alimentará de tu alma!
Sí, mamá, ¿de qué se trata?
Mantén las manos alejadas del arma y nos llevaremos bien.
La forma en la que andan, lo que llevan. Eso los delata por completo.
Puede que no me haya explicado bien. La mejor decisión que puedes tomar, y la menos dolorosa, es disculparte y prometer que dejarás en paz a mi familia.
¡Salgamos de aquí, demonios!
Alguien tiene que partir y encargarse de las bestias.
Deberías decirle al sacerdote que nos casamos. Así se encargarán ya ellos de todo.
No veo la relevancia.
Este es el último aviso. Nosotros mantenemos la paz en este lugar. No te entrometas en nuestros asuntos.
Dime, ¿crees en el poderoso Arkay, dios de la vida y la muerte?
¡Ahora morirás!
Lo que te dije. Una bruja cuervo.
No creo que merezca la pena nuestro tiempo con la guerra en marcha, pero si quieres despejar la cueva, me aseguraré que te paguen por tu trabajo.
Bueno, pues sí, hay dos. Pero estás ya acabando todos los contratos que tengo.
Hay uno fuera en el camino. No puedo permitirme perseguirlo, pero me vendría bien la compañía de una bestia leal y fiera.
Es inteligente pedir parte del pago por adelantado. Te daré una parte del dinero ahora y la otra cuando tenga mi perro. Aquí está la carne.
No echo de menos mi casa ni lo más mínimo. Me alegro de haber dejado atrás esa vida.
Se llama Bolund. Es el que trabaja en el aserradero que hay junto al río.
Mi madre me acompaña desde que murió. Al principio se me hacía raro, pero ahora me alegro de tenerla conmigo.
Condenado bufón...
A ver... ¿qué dices que necesitas?
Por favor, déjame solo. Necesito estar solo.
Toma, coge esto. A mí no me sirve de nada, pero supongo que tengo que pagarte por los objetos.
Habla con Filnjar en el Peñón de Shor. Tiene algún tipo de muestra de mineral que quiere que identifiquemos y estaba dispuesto a pagarnos bien por hacerlo.
Ha sido un honor para mí interpretar en el Palacio Azul en múltiples ocasiones. El difunto señor era admirador mío.
Hagamos el cambio.
¿Has... perdido... la... razón?
¡Ja! ¡Lo has hecho! He de admitir que no estaba seguro de que lo consiguieras. Pero sin duda te has ganado tu recompensa.
Porque no me vas a sacar nada mejor.
¿Por qué...? Bueno, olvídalo, es solo un símbolo. Volveré al templo. Aquí tienes algo por tu ayuda.
Trabajo la plata, como mi padre, y su padre antes que él.
¿Otra vez con eso? Aquello fue diferente. ¿Acaso me dieron la opción de oponerme a los términos del tratado? No.
Ha tenido problemas en la vida, pero no puedo tenerlo aquí bebiendo sin que pague aunque sea parte de lo que debe.
Afortunadamente, Faleen no es su tipo, pero han mantenido amistad durante cierto tiempo y tal vez él sepa.
Hay una cueva ahí delante. ¿En ella habrá tesoros o problemas?
Estoy casada con Thonar Sangre Argéntea. No olvides eso cuando hables conmigo.
No permiten la entrada a todo el mundo. Aquellos que deseen entrar deben mostrar cierto grado de habilidad con la magia.
Vaya, vaya. Cálmate. Vamos a pensar en esto un momento.
Me lo pensaré, pero no prometo nada.
La confianza es difícil de ganar, sobre todo entre los míos. Pero hemos de confiar en el liderato de Tulio. ¿Qué otra opción nos queda?
Espero que, cuando muera, no acabe como un cadáver errante.
Espero que algún día esta ciudad quede libre de corrupción y que todos podamos vivir en paz.
En la tienda hay muchas cosas que memorizar. Nunca me las sabré todas.
La gente dice que un hombre ronda por las calles, cerca del Palacio Azul. Parece afligido, pero no dice nada cabal.
¡Un vampiro! ¡A las armas!
Últimamente, no. El negocio está muy parado.
¡Así se hace! Dudo que nadie en Skyrim pudiera haber tejido un encantamiento mejor.
¿Llamas magia a eso que haces? ¡Te desafío a un duelo!
Hace falta un buen dinero para pagar una multa. Y no tienes suficiente.
¿Qué es esta tontería? Bah.
Hecho. Y ya que estás, convéncelo de que no vuelva a entrar en la ciudad.
¡Rrrrraaaaaarrrrr!
Lo siento. No creo que pueda vender nada de momento.
No. Es una mujer agradable. Viene a diario en busca de joyas para su familia en Cyrodiil. ¿Será porque es noble?
Me temo que, como administradora de Riften que soy, la ayuda que puedo prestarte es limitada. Pero dime qué buscas.
Lo encontrarás en su despacho, en la fortaleza que la Legión tiene en Puente del Dragón. La elección es tuya. Ahora ve, y que Sithis apresure tu paso.
Thane Bryling, a tu servicio.
El Imperio, en su sabiduría, se ha avenido a reconocer el culto a Talos como un vestigio bárbaro de una época pasada.
No lo sé. Se rumorea que fue asesinada... Descuartizada por un chiflado. Yo intento no tener nada que ver con esas cosas.
Ya estamos otra vez. No te conformas con un techo y un oficio, no. Quieres ser algo completamente... diferente.
Debo volver a Markarth.
Tú. El arma. Guárdala. Ya.
¿Quién te envía? ¿El Colegio? ¿El jarl? Acordamos que no habría más preguntas.
Ah, por supuesto, la pobre chiquilla que fue asesinada. Una joven tan hermosa y buena... Una tragedia, sin duda.
Fjotli... Fjotli... ¿Dónde he oído ese nombre?
Bueno... si lo pones de ese modo, creo que conozco al tipo del que hablas.
Sí, creo que eres exactamente la persona que necesito.
¿Me acusas de tomar parte en un... un... acto tan abyecto? ¡Debería hacer que te arrestasen por insinuar algo así!
Sirvo a mi jefe y a mis hermanos trabajando en las minas. Es el único lugar apropiado para un viejo orco.
Tú. Te he visto husmeando por ahí y haciendo preguntas.
Bueno, esa es la verdadera pregunta, ¿no? Porque, sinceramente, ¿cuánto tiempo de descanso podría necesitar un daedra loco?
Todos adentro. ¡Ahora!
A ver, ¿cuáles son esas pruebas de las que hablas?
¡Cómo te atreves!
No te preocupes, Clavicus no me dirige la palabra.
Karliah y yo hemos mantenido una larga discusión antes de que llegases.
Te preocupas demasiado. El emperador nunca ha estado más a salvo. ¿Te crees que los intentos de asesinato se planifican de la noche a la mañana? Descubrimos el complot y se acabó el problema.
Para serte sincero, dudo que alguien fuera lo suficientemente estúpido como para intentar asesinar a Maven... Perdón, a la jarl Maven.
Un momento, un momento... Vamos a pensar en esto... Ya sabes, a discutirlo como personas racionales.
Deberías ir a El hogar helado a hablar con Nelacar. Es su historia y no querría desacreditarle contándote cosas a sus espaldas.
¡Imperiales! ¡Matadlos!
Mira, no tuve elección... Están locos... ¡Podrían haberme matado!
¡Pero madre dice que eres un pésimo posadero!
No puedo creer que Fastred se haya ido. Yo... debería haberla tratado mejor.
Su líder, Linwe, es el peor de todos. Les roba objetos de valor a los muertos.
Solía vender objetos robados para el gremio de ladrones de Skyrim hace mucho tiempo.
Cuando acabes con todo este asunto, vuelve en cualquier momento y cumpliré mi parte del trato.
Continuando con el tema de la seguridad, comenzaremos con las custodias. Las custodias son hechizos protectores que bloquean la magia.
Nunca hubiera sospechado que el Ojo pudiera ser tan peligroso. Tolfdir tiene razón, ¿verdad? La magia puede ser abrumadora.
Linwe está refugiado en un sitio llamado la cueva del Cerro de las Voces. Todo su gremio está allí con él, así que ten cuidado.
Aun así, me sorprende que no hayas oído hablar de Ulfric. Es nuestro líder, el líder de los Capas de la Tormenta.
¡Y ahora te toca caer al suelo y desangrarte hasta morir!
Perdón, embajadora. He permitido que este... idiota me provocara. Es culpa mía. No es necesaria mayor interrupción por mi causa.
¿Ahora qué quieres? ¿Sigues lanzando acusaciones sin fundamento?
¿Hay alguien ahí?
¿Supongo entonces que tú eres el nuevo valor?
Cuando Mercer robó la Llave maestra del Sepulcro del Crepúsculo, perdimos el derecho a acceder al sanctasanctórum.
Es maravilloso poder dormir profundamente, ¿no crees?
Es una cantidad considerable.
El barrio Gris es una vergüenza. Esos elfos oscuros viven como animales.
Habíamos oído rumores de muerte y... y de fuego que caía de los cielos, pero ninguna noticia de verdad.
Sí, sí. Por eso he permitido esta... violación de todas nuestras tradiciones.
¡El Devorador de Mundos ha muerto! ¡El camino está despejado!
Igual está buscando algo para comer...
No puedo darte detalles. Nunca he oído usarlo. Kogaan. Fue el primer Thu'um creado únicamente por mortales.
¿Necesitabas saber más?
Sí. Tú le pegas a la gente.
Tras esa terrible experiencia, la conquista de la paranoia debería ser un paseo, ¿mmm?
¡Bueno! ¡Eso merece sendas felicitaciones! Ya sabes, por lo que has hecho por el emperador loco.
Has comprendido mal la naturaleza de nuestra autoridad. Los Barbas Grises nunca nos hemos implicado en cuestiones políticas.
Pero no lo está. Lo sé. Los imperiales lo capturaron y lo retienen en algún sitio. Los Batallador saben dónde.
Krosis. Lamentablemente, no. No puedo conocerlo.
Pero aún no has terminado. Y aún podrías morir...
¿Mortal? Insufrible.
Si pudieras... Quisiera que mates a alguien más. No tienes por qué hacerlo, no es parte de nuestro acuerdo. Pero si lo haces... te pagaré aún más.
Como en los viejos tiempos, ¿eh, Horik? Tú y yo luchando en una guerra por un pedazo de tierra olvidado de la mano de Dios.
Sin el faro, el Corredor del Hielo oscilará hacia el banco de arena occidental y encallará en la costa oriental.
Brrrr... Qué frío.
Mmm... No estamos hablando de Barabas, ¿verdad? ¿El perro de... Clavicus Vile? Ooohh... extraño.
¡Ah! ¡Bien, bien! No más ladridos a todas horas ni mordisquear mis zapatillas. Entonces, ¿usaste la cicuta? ¡Una idea rematadamente buena! Yo...
Por supuesto. He reservado una cama ahí. ¿Dónde iba a dormir, sino?
El guerrero asustadizo y el astuto khajiita. Sin duda habrá sido uno de los dos, ¿no?
No estoy enfadada contigo. Te diré lo que haremos, cariño. Ven a mis aposentos luego y discutiremos este asunto en privado.
Quiero que las encuentres. Ve al aquelarre que celebran en la espesura. Aniquílalas como un verdadero guerrero salvaje.
Ah, eres tú. No esperaba volver a verte.
Excelente. Sugeriría que fuéramos a buscarlo inmediatamente, pero antes tenemos asuntos más urgentes.
Sí, bueno, veo que persistes. Eso es todo.
Vuelve a vernos cuando quieras.
Abrió una puerta y apareció el hombre equivocado. Si ese hombre no hubiera sido Ulfric Capa de la Tormenta... Si Ulfric no hubiera matado al rey supremo Torygg...
¿Hjalti? Es la primera vez que oigo ese nombre. Tiber Septim tenía muchos nombres. ¿Será uno de ellos?
Si alguna vez consigues acceder al Colegio e intentas deshacerte de mercancía robada antes de que se convierta en una carga, ven a visitarme.
Por supuesto, ya no hay tantos peregrinos actualmente.
No intentes esconderte de mí.
Los discípulos de Kynareth sentían algo sagrado en él, y venían desde muy lejos para oír cómo los vientos de la diosa mecían sus ramas. Ellos construyeron el templo.
Hace unas décadas, aquí había tanto movimiento como en la Ciudad Imperial. Ahora, ya se puede decir que tienes suerte si no tropiezas con un skeever.
Este es el Verdeoro. Fue transplantado aquí cuando solo era un arbolito durante los primeros años de Carrera Blanca.
¿Es cierto? ¿Uno de los psijic estuvo aquí, en el Colegio?
Este es el templo de Kynareth. El Verdeoro, en el exterior, fue transplantado aquí cuando solo era un arbolito durante los primeros años de Carrera Blanca.
De la seguridad se encarga un tal comandante Maro. Astrid y yo hemos ideado un plan para destruirlo, y con ello dejar coja la protección del emperador.
Entonces, por mi derecho como jarl, te nombro thane de Hibernalia. Enhorabuena.
Sí, encima tú restriégamelo. Imagínate qué podría llegar a hacer si contase con todo mi poder y no estuviera limitado por esa molesta "moral".
Lo has conseguido. Has encontrado a la sibila de Dibella. Le has hecho un tremendo servicio a Markarth.
Ahí está de nuevo. ¿Lo has oído?
El cómo consigas que la abran depende de ti. Nadie notará si falta Farengar, te lo aseguro. O puedes hacerle la pelota a mi padre.
Revisa cada caja, barril y cofre que veas. ¿Quién sabe? Puede que alguno contenga algo valioso.
Y, la verdad, desde la muerte de Torygg, no había tenido ningún poder en la corte. Aun así... no merecía morir.
Continúa, Tormenta Solitaria. Y relájate un poco.
Kynareth da vida, y su símbolo tiene que ser un árbol vivo.
Llevaré una manta y un poco de vino.
Tengo un collar que te quedaría perfecto... A ti, o a alguien especial.
Todas chicas jóvenes y adorables. Esperemos que la guardia dé con ese diablo cuanto antes, y lo envíen al hacha del verdugo.
Estabas con nosotros y lo viste. El día que el Imperio firmó aquel maldito tratado fue el día de su defunción.
De acuerdo, ya has tenido suficiente.
Creo que si tuviéramos savia del árbol originario, podríamos despertar a su hijo.
No mucho, pero como bardo, todo este tema me parece muy deprimente.
Mis compañeros de barco se ríen de mí por mis gustos delicados, pero sé que en el fondo me envidian.
Y en ese momento, supe que esto terminaría con uno de nosotros al otro extremo de una espada.
Ah, y oculta su cadáver si puedes. Cuanto más tarde la gente en determinar su identidad real, mejor.
Tú... Tú no eres Aren, ¿verdad? ¿Te ha enviado en su lugar?
Le dices que el bufón no trama nada bueno, y se encargará de él. Luego vuelves y te doy unas monedas por hacerlo, ¿sí?
Acepto la apuesta.
Hasta robó el guardapelo de la pobre chiquilla asesinada... o lo que quedó de él.
Vuelve cuando quieras.
¿Por qué? Teníamos un trato, Madanach. ¡Un trato!
Aparentemente han asesinado a unas mujeres nórdicas. No sé por qué me tiene que importar.
Se llama "Azote de ortigas". Esas brujas me aterran, o ya habría ido a buscarla yo.
Tendrás que vértelas con las brujas cuervo. He oído que crearon un arma para sacrificar spriggan.
¿Todo dispuesto para comenzar?
El Brillo de los Antiguos es más viejo que el metal, procede de una era anterior a hombres o elfos. Para poder tener algún efecto en él, hay que recurrir a la magia antigua.
Será mejor que te quites esa ropa de Capa de la Tormenta. Hoy no es día para ir vestido como un rebelde.
Puede que custodiemos Carrera Blanca, pero el gremio de ladrones nos custodia a nosotros. Ya sabes a qué me refiero.
Lo tienen en un nido de las brujas cuervo llamado la Roca Huérfana.
Tu espíritu es fuerte. Que los vientos de Kynareth guíen tu camino.
No te mereces mi tiempo. Largo.
No tengo tiempo para Marla, Mara, o como quiera que se llame... ¡Hay trabajo que hacer!
Ignorándome, ¿eh? Como quieras. ¡Al ataque, Hewnon!
Yo dispuse todos los arreglos del trato. Se suponía que un mensajero me lo traería de Morrowind. Nunca llegó.
Nada sabe mejor que la comida que ha plantado una misma. Hay algo mágico en que la tierra y el sol produzcan comida.
Su savia es inestimable. Puede restablecer tierras baldías o darle vida a las rocas. Puedo usarla para reparar el Verdeoro y que podamos volver a adorarlo otra vez como es debido.
Pronto, pronto. Hay que hacer las cosas bien. Te investirán como parte del propio festival.
Te doy las gracias. Y que las suaves lluvias de Kynareth desciendan sobre ti.
Puede que no viva lo suficiente para ver a este pequeñín convertirse en un nuevo Verdeoro, pero puede que me recuerden como la mujer que lo plantó.
Por favor. No tenemos mucho tiempo.
La próxima vez, ten más cuidado. Esto no es un juego.
Deberías llevar eso a Carrera Blanca. Danica querrá ver que las bendiciones de la naturaleza residen en la renovación, no en la preservación servil.
Paciencia. Dame un momento y te lo explicaré todo.
A partir de ahora, haremos como si nunca hubiéramos mantenido esta conversación.
Ha sido un placer. En cierto modo, te envidio por llevar contigo una señal tan directa de la gracia de Kynareth.
Buena suerte con tus viajes. Que el viento de Kynareth arrastre solo los aromas más dulces.
¡Tienes que ayudarme! ¡Por favor!
Odio trabajar en estas fiestas. Los invitados suelen ser agradables, pero siempre se cuela alguno como Erikur.
¡Do vah kiin!
Pero era a sí mismo a quien odiaba más profunda e intensamente.
Lo siento, pero no puedo hacerlo. Tendremos que seguir luchando contra los dragones lo mejor que podamos.
Pero no lo comprendo. ¿Por qué dejar a un dragón entrar en el corazón de la ciudad si hemos trabajado tanto para mantenerlos fuera?
Te he dicho dónde está el templo de Refugio Celestial. Confío en que nos podrás llevar de una pieza.
Oye, oye... A mí déjame fuera de esto...
Por supuesto. Ya has salvado Carrera Blanca de ese dragón. Te debo mucho.
Sibbi será un magnífico líder, pero Ingun... esa muchacha tiene la cabeza en cualquier parte menos en el negocio.
¿Por qué? ¿Qué he hecho?
Puede que tengas razón. Cada vez es más difícil trasladar tropas sin provocar un ataque de los dragones.
Creo que sobreestimas la capacidad de Ulfric. Aún no se ha esforzado todo lo que puede.
La sublevación de Ulfric ha alcanzado su punto álgido. Pronto los jarl rebeldes comprenderán lo que significa enfrentarse al Imperio.
Ahora, si me disculpas, no tengo nada más que decir. Te animo a que te tomes tu tiempo y a que te lo pases bien. Me parece que te vendría muy bien un descanso.
Ja, disfruta de la Fresquera.
Constance intenta detenerla. Se porta muy bien con nosotros, pero nunca es suficiente.
Sí, eso es. El símbolo del pilar de la derecha.
Es cierto. Nos vendría bien una pausa para consolidar nuestros logros, y el Imperio puede darse el lujo de aparentar magnanimidad en la victoria.
Me encargaré de este pedido ahora mismo. Toma, unos septim para ti.
Me gustan las luces bonitas.
Aunque ambos sabemos que esto no tiene nada que ver con honor ni juramentos. Todo es por la recompensa, el premio.
No, la verdad es que no.
No estarás planeando quemar nada con eso, ¿verdad?
No harías eso, ¿verdad? ¡No me abandonarías aquí con ella!
Tu paga por los servicios prestados.
Pero... vencer al mismísimo Malacath... Eso sería una muestra de auténtico poder.
Brynjolf me ha vuelto a enviar a alguien sin sangre en las venas.
No hemos vuelto a saber nada de él.
Lo único que entiendo es que estás molestando.
Cree que está enamorada de Bassiano y quiere irse de aquí con él.
Alok, Vuljotnaak. Tiid boaan.
¿Alduin? ¿El Devorador de Mundos de canciones y leyendas? Si es así, nada importa; estamos todos condenados.
Incluso Tulio entrará en razón si nos enfrentamos a semejante amenaza.
¿Alduin? ¿El Devorador de Mundos de canciones y leyendas? Si es verdad... Bueno, eso cambia las cosas, ¿no?
¿Tienes trabajo?
En ocasiones me cuesta mucho... diferenciar lo que es real de lo que no.
Tus palabras son sinceras, Sangre de Dragón. A veces el feo juego de la política nubla mis ojos.
¡Nunca aceptaré su muerte! Mi hijo aún vive. Lo noto en mi corazón. Así que decidme, familia Batallador, ¿dónde está? ¿Dónde tenéis a mi Thorald?
No necesito tus consejos para jugar a la política de estado en Skyrim.
Admito que me sorprende verte aquí. Por lo general estas fiestas son solo para los jarl y los empresarios de Skyrim.
Si encuentras a alguien que pueda ser un buen recluta, sin duda le echaré un vistazo.
¡Ha faltado poco!
Creo que voy a salir un poco. Me tomaré unas vacaciones de tanto tallar madera, ¿sabes? Buena suerte.
Lokir, de Paraje de Rorik.
Está pudriéndose en el foso mientras decidimos qué hacer con él, si tienes estómago para mirarlo.
Oh, vaya. Qué bonito.
Son mineros. Inofensivos.
No les concedí esa satisfacción.
Creo que lo único que querían era doblegarme. Utilizarme para acceder al resto de la familia Melena Gris.
No tenemos ningún interés en negociar con el Imperio. Es cuestión de tiempo que sean expulsados de Skyrim.
Ahora, gracias a ti, no tengo que preocuparme.
Ojalá pudiera creer que habría aguantado su tortura hasta el final, pero no estoy tan seguro.
Por los dioses, he perdido la cuenta. Me da la impresión de que ha pasado una eternidad.
Ooh... la fiebre... me quema el cuerpo...
Tan enferma... que casi no lo soporto...
No lo soporto... haz que pare...
Uuuf... aaay...
El dolor es insoportable...
Intenta relajarte. Pronto te encontrarás bien.
De acuerdo, de acuerdo. Supongo que ya he sacado suficiente dinero con su envío. No hace falta perder más tiempo amenazando a un pobre diablo.
Descansa un poco más; te hará bien.
Pantea, deberías ir a cuidar de tus alumnos, y dejar esto de la política en mis manos.
¿Te encuentras mejor?
¿Qué quieres decir? Ese vino sabe mejor que cualquiera que jamás hayan hecho los hermanos Surilie.
Ugh. El vino de Skyrim sabe a orina comparado con el excelente vino añejo de Bosque Valen.
Vale, vale. Toma.
Se llama Olda. Si la conoces, probablemente ya sabes de qué te hablo.
¿Te ha bajado ya la fiebre?
¡Pagarás por tu blasfemia!
No, supongo que no. Bueno, fuera de mi vista antes de que cambie de opinión.
Shhh.
Si ve la destilería en este estado, estoy arruinado.
Parece que la Marca Oriental está muy ocupada con su guerra para mantener a sus propios prisioneros a raya.
Si yo soy un traidor, ¡tú más! ¿No has oído la voz de la dama? ¿Es que no eres su Oyente?
El camino hasta Paarthurnax pasa por esta puerta. Te mostraré cómo abrirla.
Kynareth te ha bendecido con una compasión tremenda, Silana. Encontrarás una manera, estoy segura.
Sí. He hecho que Falk te volviese a llamar porque tú viste la invocación y ahora tienes una conexión con Potema. Debes enfrentarte a ella.
Creo que no.
Sería buena idea ponerse algo de ropa. Si no, alguien se va a ofender...
Qué alivio. Sigamos... El pergamino debe de estar en la siguiente habitación.
No creo que te acepten. Pero cosas más extrañas se han visto.
Si es otra chuchería de los enanos, ya te he dicho que no estoy familiarizada con ellas.
No, sin Ranmir no nos quedemos sin existencias con tanta frecuencia.
Confío en que mantendrás la boca cerrada sobre esto.
Que los Divinos te salven, como en su día me salvaron a mí.
¡Genial! Yo abriré la puerta y te esperaré dentro, y luego tú irás delante.
Mi hijo ha muerto. Las cosas no serán lo mismo sin él.
Ya bastante tengo con saber quién controla el fuerte. Viene un bando, y el otro sale corriendo... Yo les digo "¡No me voy a ninguna parte! ¡Voy incluida en este sitio!". ¡Je, je!
¿Después de esto? Probablemente, quedarme por aquí. Al venir hacia aquí he visto buena caza, y me gustaría quedarme un tiempo.
¡Ah! Vaya, por Kyne, me has asustado. Hay un nigromante merodeando por aquí, así que ten cuidado.
Ya no se puede razonar con esta gente.
Más mala sangre entre las casas. Fralia está convencida de que, de algún modo, la culpa de la muerte de su hijo es de nuestra familia.
Precisamente estaba a punto de entrar. Estaría bien que alguien me cubriera la espalda.
Qué interesante. ¿Y a mí qué me importa? ¿Te apetece un trago o solo que te rompan unos cuantos huesos?
Lo de siempre, los Melena Gris culpando a los demás de las cosas.
Probablemente no sea buena idea ir sin ropa por ahí.
Por eso yo evito relacionarme.
Para mí es suficiente saber que están por ahí fuera, y otra vez juntos.
Es un gran festival que celebran los bardos todos los años. Queman una efigie del viejo rey Olaf. Es muy divertido.
Espero que Ulfric entre en razón, pero temo que ya esté fuera de control.
¿Vengarme? No. Busco su sumisión. Quiero que el sacerdote que hizo esto se postre ante mí y me dé su alma.
Cometió el error de apoyar a los Capas de la Tormenta, y eso le costó caro. Amargas noticias para su familia, pero es un destino que deberían de haber esperado.
¿No lo has oído aún?
Bueno, sé lo que piensas. ¿Puedo confiar aún en mis espadas y hechizos, en mi discreción y todas esas tonterías? Claro, claro. O... podrías usar...
Encontraré a esa elfa. Como hago siempre.
Tal y como dices, ocurrirá.
Así es como piensan los necios. Y yo nunca he tenido mucha paciencia para los necios.
Aquí está la carta. Ahora no me metas en esto.
Entonces esperaré.
¿Has visto esa capilla de Azura? Dicen que los elfos oscuros la construyeron después de huir de Morrowind. No te la puedes perder.
Ya lo creo.
Escaldo el Anciano. Se ha encargado de Lucero del Alba desde que era un chaval, y nunca ha perdido esa actitud de mocoso.
¡Silencio, idiota! Tendría que haberlo supuesto... Cómo confiar en este sitio después de que ha sido cubierto de porquería.
La helada de la mañana se llevó a mi marido hace unos años. Era un buen hombre.
Procura que Viola no te encuentre en su casa.
Últimamente me siento más enfermera que sacerdotisa, atendiendo a los que han sufrido, tanto física como mentalmente, por culpa de esta terrible guerra.
De hecho, Vex apenas consiguió escapar con vida de allí. Deberías ir a hablar con ella del asunto antes de partir.
¿Y qué se supone que demuestra eso? ¡Sigue patrullando!
¡General Tulio, aquí!
Digamos que Deeja y yo somos como sus representantes aquí, en Soledad. Ninguno de los Sangre Negra puede mostrarse sin que lo arresten.
Acuérdate de Ropajes Radiantes cuando necesites un cambio de vestimenta.
Marchando, señora. El mejor brandy coloviano.
Gr... gracias, mi jarl. Gracias.
Siempre hay buenas razones para luchar. Desearía que esta guerra las tuviera.
Ah. Sí, claro, tienes razón. Falk, dile al capitán Aldis que he ordenado asignar más soldados a Puente del Dragón.
Sí, lo sé. El general tenía mi consentimiento.
Haré que alguien se encargue también de la cueva, Varnio, puedes estar tranquilo. Estás despedido.
Espléndido. Llámame si me necesitas.
Entonces tengo una tarea importante para ti.
Tienes razón...
Tengo una serie de pulseras de un estilo muy popular entre la nobleza de Centinela.
Ten cuidado, chica. Ese es el último sitio de toda Skyrim al que quisiera enviarte.
Teníamos la misma discusión cada semana, incluso cuando eras jarl.
Vaya, pero parece que te falta dinero. Lo siento.
Por favor, no dejes que se quede así. Es vergonzoso.
¡Que se pudra esa basura!
Creo que esperaba más.
¡Toda la carne está limpia y sin rastro de anquilosamiento!
Y tiene razón.
¡Nos has traicionado!
¿Dónde te escondes?
Atácanos con el poder de tu Voz.
Amante de los Capas de la Tormenta.
Recuerda que el saber bárdico no consiste solo en la música.
Adelante.
Bien, Illdi. Empápate de sabiduría. Jorn, ¿qué pasó durante el Año Rojo?
Los cofres de oro no vinieron mal.
A finales del 171.
La cosa no es tan mala como parece. ¡Iba a contárselo todo a Mercer, en serio! Por favor... ¡hará que me maten!
¿Para qué habrías de entrometerte aquí si no es para tinvaak?
Ni siquiera yo puedo ver más allá del fin de los tiempos ni lo que vendrá después. Niid koraav zeim dinoksetiid. Debemos hacerlo lo mejor posible en este mundo.
Atento a la posición de los dedos. Sobre todo durante las transiciones.
¡Malacath ha oído mis plegarias! ¡Nos habla!
Bien, ahora vamos a probar algo un poco más... divertido.
Ya me parecía a mí.
¿De qué agujero has salido?
Recuerda que debes transmitir algo con estas canciones. Debes enardecer al público. Cautívalo y te apreciará.
La Compañía del Imperio Oriental tiene retenido uno de mis envíos de especias. Necesito que alguien los convenza de que lo liberen.
¿Tu jefa, la cazadora de Talos?
Lo que suele pagar el gremio. Echemos un vistazo.
¿Qué? Reúnete con el resto de los hombres en Korvanjund.
Ah, sí. Si paga el arancel de dos mil monedas de oro, todo estará en orden.
Quiero decir... claro, lo pagas tú. Ya puedes decirle a Evette San que su cargamento llegará pronto a Soledad.
¿Lo pagas tú?
Ten paciencia, tía. Te prometo que nos pagará.
Sé de mineros que a veces mueren por los gases venenosos acumulados bajo tierra.
Creo... creo que el mensaje era para ti. No estoy segura de por qué, pero hablaba del asunto como algo muy personal.
No hay nada como una buena verdura.
Cualquier idiota puede hacer ademanes y blandir su arma con rapidez. Cualquier idiota puede morir. Mantén la guardia alta y espera el momento oportuno.
No. Yo solo había salido a tomar un poco el aire. Había abusado un poco del aguamiel en la posada de Sangre Argéntea.
Los Renegados han tomado la mina de Kolskeggr. Somos los únicos que quedamos.
Supongo que podría hacer una excepción. Me encanta su vino especiado.
Sigue caminando.
Muchas gracias. Siempre la misma historia con cada envío. Toma, por las molestias.
Como en cualquier otro sitio, lo importante es a quién conozcas. Por suerte para ti, me conoces a mí.
La naturaleza de estos favores depende de cada deidad. Por favor, no dejes de rendir culto en todas las capillas que quieras.
¿Mmm? Ah, sí. Ahí solía estar la capilla a Talos. Pero el culto a Talos fue proscrito por el Concordato Blanco y Dorado hace algún tiempo.
Y no importa lo mucho que los Capas de la Tormenta deseen que fuera así.
Entonces yo no tengo tiempo para ti.
La mayoría de la gente se reúne en El skeever travieso.
¿Los Thalmor? ¿Tienes idea de lo que estás pidiendo?
No me importa lo que hayamos perdido; solo me alegro de que la guerra haya terminado.
¿Yo? Me llamo Maul y vigilo las calles para ellos. Si necesitas conocer los trapos sucios, yo te los contaré... pero a un precio.
¡Alduin, thuri!
Una vez capitaneé un barco llamado el Raptor Argento. Chocó con un iceberg y se hundió, justo al norte de Ventalia.
Adelante, Ataf.
Últimamente el garito de la esquina se llena por las noches. Apuesto a que Elda, la de El calor de la vela, se muere de celos.
Sí. Mi hermano mayor. Era un poco petimetre, la verdad.
Trabajar duro por el futuro y dejar atrás el pasado. Ese es mi lema.
Bueno, pues tenías razón. Estos "santos de los pobres" viven en las alcantarillas de la ciudad.
Date prisa, adalid. Hay otros que pugnan por mi favor. Tendrás competencia. No dejes que el rastro de tu presa se enfríe.
Aquí tienes la recompensa que te prometí. Y ahora, si me perdonas, he de volver al trabajo.
¡Pero aún no has salido de esta! ¿Lo pillas? ¿No has salido?
Sí, por supuesto. El archimago cuenta con mi gratitud.
Muy bien, entonces hemos terminado.
Tu superior y yo simplemente estábamos... debatiendo acerca de mi nivel de acceso al Colegio.
¡Aiiiieee!
Las lamentaciones no ayudan a nadie.
Por eso tenía que reabrirse el Pozo de Ébano. Sin él, no hay manera de que Nocturnal pueda hacerlos llegar aquí.
Eso crees, ¿eh? Quizás te gustaría respaldar esa fanfarronada con unos cuantos septim.
Aerin, te debo la vida. Toda Skyrim tendría que estar en peligro para que me fuese.
¿Te apetece probar el horker? ¿O quizá algo de ternera?
El archimago considera que es importante. Debe de ser poderoso.
Eso no lo sabemos. Ni siquiera sabes qué es. ¿Dónde está Aren?
Oh, jo, jo... Esa sí es la Hermandad Oscura a la que estoy acostumbrado. ¿Es por negocios o por placer? Ah, qué más dará, ¿no? Me encargaré de ello.
No te metas en líos, imperial.
Yo heredé la tienda de mi marido. Su padre era Arnleif.
¿Sientes entusiasmo? Ah, deberías sentirlo. ¡Las cosas ya empiezan a ir mejor!
Tuve tal... honor. Como Guardián.
Impuestos. Adoro los impuestos.
Pobre, debe tener mucha hambre para rebuscar en la basura de esa forma. Espero que encuentre algo comestible.
La cripta de la Madre Noche en Bravil fue... profanada. La Provincia Imperial está asolada por luchas. En este momento nadie está a salvo allí.
Mientras estaba en Paraje de Ivar, oí que algo terrible había ocurrido en Helgen.
Mira, te pagaré por atacar a uno de mis enemigos...
¿Lo hiciste? ¿En serio?
Allí hay ciudades tan antiguas que las arenas las han sepultado totalmente. Pero prefiero no contarte más, pues siento una gran añoranza por mi hogar.
Animal sin honor. Has atacado a uno de los míos, así que ahora te vas a disculpar... o te cortaré la cabeza.
¿Qué? ¿Que quién es la Madre Noche?
¿Por qué sigues aquí?
Lo he visto escabullirse al comercio de Cauce Boscoso para hablar con ella cuando yo no estoy. Está perdiendo el tiempo.
Se trata de Nilsine Escudo Quebrado, de Ventalia. Si Nilsine muere también... te recompensaré con creces.
Demasiado fácil.
¡Lucharé contra ti hasta el final!
¡Basta! No me gusta la magia.
Oooh... Cicerón ha oído hablar del carnicero. Interesante uso del cuchillo. Simplemente... ¡Zas, zas, zas, zas, zas! Y después... ¡Zas, zas, zas, zas, zas!
Me da que alguien está colado por Illdi.
Él es... el Vacío.
Ten cuidado cuando busques esos dientes... Esos malditos canallas son peligrosos.
Las hijas de estas tierras son tan fuertes y leales como los hombres.
Venderé lo que sea si es digno de mi tiempo. Recuérdalo, ¿vale?
¿Has perdido totalmente el juicio?
Todo el mundo me mangonea. ¡Pues se acabó!
¡Oh, sí! Las profecías detallan con claridad las señales que precederán al fin de los días. Y, una a una, he visto cómo se iban cumpliendo.
Tu objetivo es el fuerte Muro Verde.
No. Solo estaba comprando joyas para mi hermana, que vive en Cyrodiil. Nunca había visto antes a ese hombre.
¿Seguridad? ¿Acaso no soy yo el responsable de la seguridad de la plaza? ¿A qué viene esto, Jod?
Es una pregunta lógica. Ninguno de nosotros ha visto nunca a un dragón ni esperaba enfrentarse a uno en combate.
En el Imperio nunca creyeron que podríamos tomar la Cuenca, pero aquí estamos.
No gran cosa. Estaba comprando un collar y de repente... el resto es un recuerdo borroso.
Y si se me permite decirlo... Ha sido un honor tener la oportunidad de preparar una comida con, bueno... el mejor cocinero de todo el Imperio.
No, no es cierto.
Si acabase de alguna forma en mis manos, yo no protestaría.
¿Tan obvio resulta? Maldita sea. Debo estar perdiendo facultades.
Eres como una cotorra, ¿eh?
Por muy buena que sea un arma, depende de quien la empuñe, señor. Pero el ejército imperial pagará muy bien por ellas.
Cualquier día de estos van a salir más draugr de esa cripta.
Mira, fue solo una noche, ¿vale? Creo que me echó algo en la bebida. Ni siquiera he vuelto al albergue desde entonces.
¿Sabes qué? Me gusta este lugar. Deberíamos haber venido a Lucero del Alba hace mucho.
¿Para qué necesitan que haga esto? Nosotros usamos la magia, no armas.
Morthal es un lugar peligroso, y mi trabajo es mantener la paz.
Recuerda bien lo que te digo, Thonar Sangre Argéntea es el responsable del ataque del mercado. Lo es, de alguna forma.
Los demás, conmigo.
Son los dueños de la mina de Cidhna, una de las cárceles más despiadadas de Skyrim. Esperaba poder comprar o robar las escrituras, pero creo que aquí la cosa no funciona así.
Lástima.
¿Te puedes creer que ese mercachifle triplicó la guardia? Debe de haber ocho ahí dentro.
Primero prohibieron el culto a Talos, y ahora los Thalmor organizan cazas de brujas mientras el Imperio observa impasible.
Lo hecho, hecho está. No tenemos por qué hablar más del asunto.
Prefiero no hablar ahora, debo regresar pronto a Cyrodiil.
Aquí tienes el oro que te prometí. No dejes de seguir la pista y tendré más que ofrecerte.
Ya te lo hemos advertido.
No me trago eso que dicen de que los capitanes de barco tienen que ser severos y estrictos. Quiero que la tripulación disfrute con su trabajo.
Déjalo si no quieres saber qué les pasa aquí a los alborotadores.
Discúlpame. Supongo que no te has deshecho de esa armadura por accidente, pero quiero estar segura de que puedo quedármela.
Pero lo que pide es imposible, sencillamente imposible. Aunque funcionara, las preguntas y acusaciones que generaría...
Me nombraron thane y pusieron a mi sobrino Siddgeir en mi lugar. Sin duda, ha sido un auténtico amigo para Cyrodiil.
¡Corre!
Veo que Eirid ha estado jugando otra vez a "la caza del elfo".
¿Habías comprado aquí? ¿Sabías que heredé la tienda de mi difunto esposo? Es terrible lo que le pasó. Tenía tan buen gusto.
Señor, la Legión Imperial ha vuelto a pedir ayuda. ¿Qué debo decirles?
Una deuda es una deuda.
Por tu aspecto, diría que lo que de verdad intentas es causar más problemas a los Horkers.
Oh, no lo apruebo en absoluto.
Muy bien, continúa. Mira todo lo que quieras. Y cuando hayas acabado, puede que podamos trabajar un poco.
Los elfos oscuros viven en un suburbio destartalado al que llaman "el barrio Gris". Ulfric se contenta con que las cosas sigan como están.
¡Sangre de Dragón!
No. No sé nada.
Si viajas hacia el norte, ni te acerques a la Cueva Pierna Rota. Esas malditas brujas cuervo han infestado el lugar.
Weylin tenía un cupón de más. Se lo llevó directamente a su habitación tras recibirlo.
Por esa cantidad, sí. Bien. Noté algo extraño la última vez que repartimos la paga.
No lo había hecho hasta ahora.
Me estoy cansando de tus excusas. Cuando me pediste el dinero, dijiste que me lo devolverías a tiempo y con el doble de los intereses habituales.
Así pues, ¿vienes a ver a la arpía con el dinero por delante? Muy bien. Acepto tu inversión.
He estado esperando a alguien más apto para hacer que mi voluntad se cumpla.
Las mujeres sabias como yo son madres de jefes. Guiamos a la tribu y aconsejamos a los nuestros sobre lo que mejor complace a Malacath.
Los verdaderos hijos e hijas de Skyrim reinan en todas las ciudades; hemos asestado un duro golpe a la Legión Imperial, y matando al general Tulio la hemos descabezado.
Me alegro mucho de que hayas vuelto de la tumba de Olaf de una pieza. La tarea que te encomendaron era más dura que la mía.
Bueno, tiene su lado bueno y su lado malo.
Venga, vamos. Cuanto antes compres, antes podré emborracharme.
Parece que va a ser otro día frío.
¡Una vez más, y el Devorador de Mundos se las verá con nosotros!
Hemos perdido mucha gente buena en esa maldita cruzada. Echaremos a los nórdicos, decían. Pues no veo que se hayan ido.
No me meto en esas tonterías. Solo me interesa trabajar.
El calor de la batalla es la llama que forja las hojas más sólidas. Es un antiguo proverbio nórdico.
¿No te gustan los nórdicos? Bien. Pero, ¿dedicar toda tu vida a matarlos? Eso es absurdo.
Mulush. Un orco grandote. Es inconfundible.
Hathrasil y yo, sobre todo. Mulush nos ladra órdenes todo el día, pero yo no lo llamaría "trabajar".
La Vigilia te estará observando.
¿Qué? No. Es Thonar Sangre Argéntea. Es el dueño de todo en Markarth.
¿Ella ha hablado contigo? ¡Más traición! ¡Más artimañas y embustes! ¡Mientes! ¡La Madre Noche solo habla con el Oyente!
Hazlo. A ver qué dice. Has conseguido que me vuelva a hacer ilusiones.
Los buenos leñadores son callados, trabajadores y honrados.
¡Aguamiel gratis!
Déjame echar un vistazo a lo que has encontrado.
Ulfric, no esperarás en serio que Markarth entre en las negociaciones.
Alguien de Carrera Blanca ha solicitado nuestra ayuda.
Explícame de nuevo porqué perdemos el tiempo y nuestros escasos recursos persiguiendo una quimera. ¡Ni siquiera sabemos si existe!
¿Así es como correspondes a la confianza que hemos depositado en ti? ¿A la confianza de Paarthurnax?
¡Por la barba de Shor! ¿Anda tras los Ojos del falmer? Ese era el proyecto favorito de Galo.
Solo si no sabes usarlo. Todos los grandes héroes han aprendido a hacer uso de su poder.
Vamos. No quiero atacarte hasta que tu custodia esté preparada.
Trabajadores. Enfermos. Lisiados. Estamos todos aquí.
Es donde va uno cuando no puede permitirse una habitación en ningún otro sitio. Cuando abrieron las minas, a alguien se le ocurrió meter aquí unas camas.
Con el tiempo acabó trayéndome aquí. Ante la caja.
Claro que sí. Conozco a todos los que duermen en las madrigueras. Por aquí soy una especie de repartidor de llaves.
Lo siento, pero este tampoco es exactamente tu sitio.
Je, je, je, je, je, je, je. La pregunta aquí es, "¿pagaría alguien por matarte... otra vez?"
Ven... ¡Abraza tu muerte!
Es duro confiar en alguien por aquí, pero de acuerdo.
No. No creo.
Te doy la bienvenida a las madrigueras.
Ni tampoco me estás entendiendo. Olvídate de la llave.
Bien.
Espero que te mantengas al margen de los asuntos de Estado. En otras palabras, no metas las narices en mis asuntos y nos llevaremos bien.
Aquí tienes. Todos los detalles.
Fralia Melena Gris está convencida de que los Batallador han secuestrado a uno de sus hijos.
Has estado indagando donde no te llamaban.
No, no siempre es tan sencillo, pero la Corona dentada sería un poderoso símbolo para atraer miembros a su causa.
Me da igual si te llevas muy bien con el maestre del gremio. Aun así, si intentas algo, te aplastaré el cráneo.
Irónicamente, si hoy siguiera viva, sería el único miembro con vida del linaje de los Septim. Sería emperatriz de pleno derecho.
Hola de nuevo. Nunca olvidaré lo que hiciste por mí.
Discúlpame. ¿Qué has venido a hacer aquí?
Recuerda, no salgas de los límites y usa únicamente flechas de prácticas. Si no tienes ninguna, yo puedo darte unas cuantas.
Si insistes en preguntar, soy la criada. Y el señor de la casa es anciano y necesita descansar.
Raerek, ¿qué tal está resistiendo la Cuenca la amenaza de los Renegados?
Padre, ¿podrías limpiar la casa un poco mientras estoy fuera?
Es un honor, guarda del anillo.
¿Renuncias al débil y patético Boethiah?
Espera. Está bien, cielo. Hazla pasar.
Mmm. Sí, Nepote.
Has armado un lío tremendo y Maven está furiosa. ¡Te dije que solo quemaras tres de las colmenas!
Exacto. No es tuyo. Estás bajo arresto, Brand-Shei.
Has faltado al respeto a la Hermandad, y te costará caro. Si quieres volver a la familia, pagarás el precio. 500 de oro y todo queda olvidado.
¿Es así como te emocionas? ¿Manoseando a un anciano?
No hay día que no me arrepienta de haber dejado a Sabjorn llegar tan lejos.
Es una bonita boda. Y pensar que es nuestra.
Porque mi rey Madanach me lo ordenó. Cuando el alzamiento sucumbió a manos de los nórdicos, lo arrojaron a las minas.
Bien. Espera hasta que comience con la distracción y entonces demuéstrame lo que vales.
No sé ni cómo, pero aún vive. Sigo recibiendo sus mensajes y transmito sus órdenes sin cuestionármelo.
Mi rey. Madanach. Cuando el alzamiento sucumbió a manos de los nórdicos, lo arrojaron a las minas.
Hemos venido a buscar a Mercer Frey.
¡Ven aquí y lucha, cobarde!
Los Barbas Grises...
Sigo recibiendo sus mensajes y transmito sus órdenes sin cuestionármelo.
Mira, hay que resolver este problema. Y vas a tener que encargarte tú de solucionarlo.
Cuando el alzamiento sucumbió a manos de los nórdicos, lo arrojaron a las minas. No sé ni cómo, pero aún vive.
¿Para qué engañarnos? Sé que tú nunca me dejarías ir, hermano. Tú crees de corazón en Orchendor y en sus promesas.
Me... ¡me da igual! ¡No pienso pagar!
No es problema. Puedo enseñarte una custodia muy básica, que te bastará para esta lección.
Eso parece peligroso...
Si necesitas suministros de alquimia, haré todo lo posible para proporcionártelos. Asumiendo que no los haya gastado todos antes.
Querida muchacha, ¿qué te hace pensar que saldrás de aquí con vida?
Esto es un orfanato, no una posada. Largo de aquí.
Un momento.
Esto se está volviendo peligroso. No dejes que nadie se te adelante.
Fue idea mía sustituir uno de los elementos principales por el cristal de concentración. Invertimos meses de encantamientos.
He estado guardándote esto. ¡Toma! Espero que te guste.
Y todo desde la mina de Cidhna. Una cárcel nórdica. La ironía es evidente.
Deberías hablar con Mirabelle Ervine ahora mismo. Y te doy la bienvenida al Colegio de Hibernalia.
Señor de las estaciones, te ruego que cuides a los muertos con compasión y amabilidad.
Mi hermano Jon tiene razón... Únete al Colegio de Bardos y evita esta guerra absurda.
¿Seguimos adelante?
No empuñes esa cosa aquí. El que rompe paga.
Entonces, un día, estaba más borracho que nunca y me monté en un pobre potro. Le partí el lomo en dos. No he vuelto a cabalgar desde entonces.
Ya es bastante malo que mi hermano me insista para que elija. No empieces tú también.
Él es el rey harapiento. Un hombre que, en otro tiempo, controlaba toda la Cuenca.
Entonces llegaron Ulfric y sus hombres. Aquellos de nosotros que no huyeron, fueron ejecutados, salvo unos pocos, mi rey y yo.
Pero durante la guerra de los nórdicos contra los elfos, tuvimos nuestro momento. Les expulsamos de la Cuenca tras un gran alzamiento.
El honor no es nada para ti, pero para mí significa mucho. O te disculpas, o perderás la vida.
Markarth y la Cuenca son nuestras tierras. Por eso somos los Renegados, porque no podemos reclamar el hogar que legítimamente nos pertenece.
Pareces preocupado, Gorm.
Buen trabajo. Aquí está tu oro. Pero tengo la sensación de que Nepote Gran Nariz también recibe sus propias órdenes de alguien. Si lo averiguas, tendré más para ti.
No, supongo que no. Bueno, ese principio se aplica aquí. Es una poción hecha con esas partes de dragón. Pruébala.
Y todo está hecho de piedra, incluso las camas. Aquí no tendremos problemas con el fuego del dragón.
Y desde luego, también son propietarios de la mina de Cidhna, la mejor prisión y proveedora de plata de Skyrim.
¿La casa de Hroggar? Se quemó hace poco.
Me alegro de que Ralof esté ayudando a echarlos de aquí. Si yo fuera un poco más joven, tal vez me hubiera unido a la lucha.
Sugiero que nos encontremos allí en unas horas y veamos qué nos depara. Esto es todo por ahora, muchas gracias.
Aquí tienes. Y recuerda: la gente de Skyrim responde a los actos. Encontrarás más gente interesada en tu amor si la ayudas.
Pero si vienes para hablar de política, busca a su hermano Thongvor. Pasa la mayor parte del tiempo en la fortaleza de Piedra Baja.
Soy una mujer de gustos refinados pero sencillos.
¿El templo, Betrid? ¿Eras una de las fieles de Dibella?
Terratenientes de la Cuenca, para empezar. Huelga decir que dependen en gran medida de nuestra plata y nuestro apoyo.
Para mí, significa no tener que responder a preguntas estúpidas una segunda vez.
La memoria de los Thalmor es larga.
No te hagas muchas ilusiones. La mayoría son mentiras mezcladas con rumores y conjeturas.
Era un día frío. El final de la helada es casi invierno en las montañas Jerall.
Me refiero a negocios privados. Nada de visitas.
El dinero abre cualquier puerta por estos lares. Adelante, pasa.
No soy más que un soldado. ¡Matar es mi trabajo! Seguro que no puedes culpar a un hombre por hacer su trabajo.
Vaya, vaya. El llorón nórdico, ¿eh? Sí, sí, entiendo cómo has llegado a esa conclusión. Una elección interesante.
Ah, eres tú. Ya me preguntaba por qué olía algo desagradable.
¡Esa debe de ser la Voz!
¡Cuidado!
Tienes razón, no es asunto tuyo. ¿Qué tal si te mantienes al margen?
Debo de haber entendido mal. ¿Decías que te ibas?
Escucha, si crees que puedes hacerlo mejor que la legión de guardias, adelante.
... mmm, hechiceros... eso sí es poder... Apuesto a que esa magia secreta... puede convertir la madera en oro... sí... Ojalá yo pudiera convertir la madera en oro...
Dudo que esté más desocupado, pero como quieras.
Avísame cuando sepas más de los piratas.
Tengo venenos para tus armas, y curas para tus males.
Entonces es cierto. De momento, me basta con saber que está vivo. Eso me tranquilizará.
¿Qué estás haciendo aquí? Les dije que no quería recibir visitas.
Y ahora, vete.
¡Qué despliegue de color!
"¡Por el clan Batallador!", gritan en los salones del aguamiel. "¡Los primeros en la lucha están, si hay cerveza, los últimos en dejarla serán!"
Por fin ha decidido devolvérsela a su padre. Bendita sea.
Están locos. Creen que gobiernan la Cuenca.
Buf. Dime algo que yo no sepa. El muy loco ya me lo ha pedido cinco veces. Se ve que mi respuesta no le satisface.
Markarth es mi ciudad. No tienes derecho a entrometerte en mis asuntos. Ahora vete.
Los Compañeros originales. Los mejores guerreros descansan con Ysgramor. Tendrás que demostrarles lo que vales.
No eres rival para mí, Dovahkiin.
Confío que en que no hayas encontrado del todo desagradable tu viaje hasta Hibernalia.
Maldito Madanach. Maldito sea su pellejo de Renegado.
Mi esposa. Ellos la mataron.
Por eso que no descansaré hasta que el último de los soldados imperiales haya sufrido su mismo destino y Ulfric se siente en el trono de Skyrim.
Tómatelo con calma y cuidado, y creo que podremos pasar sin que se dé cuenta.
Déjame en paz. ¿No ves que estoy alterada?
¿Ves? Esa es la actitud de alguien que quiere enriquecerse y mantenerse con vida lo suficiente como para disfrutarlo. Nos vamos a llevar muy bien.
Se oirá la voz de la familia Sangre Argéntea.
¿Quién necesita clientes y su vieja quincalla?
Cállate. Solo los dioses pueden juzgarme. ¿Quieres saber qué son en realidad los Renegados?
La prima del emperador, asesinada. Aquí mismo, en Soledad. Menuda vergüenza...
No te detengas.
¿Qué ha sucedido? Él no...
Se suponía que él los mantendría bajo control.
Han colocado barricadas para impedirnos el paso, pero las derribaremos y con ellas a los rebeldes que hay detrás.
Me ofrecí a anular su ejecución si empleaba su influencia para eliminar las molestias que pudieran surgir. Competidores, agentes, necios.
Vaya, lo siento. ¿Va todo bien?
Ya tenemos gente que se ocupa de eso, y cobran bastante por hacerlo.
Y... he oído lo de Nilsine. Has cumplido con creces tu parte del trato. Por favor, acepta esto como pago y muestra de mi aprecio.
¡Has sobrevivido! Entonces, ¿lo tienes?
Cuando su revuelta fue sofocada, hice que trajeran a Madanach ante mí. Era un animal salvaje, pero no por ello menos útil.
Pero no me ha costado demasiado entender que serías mucho más interesante como portador de mi "no tan sagrado" bastón, que ese montón de carne.
Tengo que acordarme... primero la custodia y luego la invocación.
Por ahora es mejor que evitemos esa "Ratonera".
Bueno, es que está muy ocupado. Quizás hoy tenga algo de tiempo libre.
Entonces ya sabes lo que se siente cuando te juzgan. El desprecio de la gente que nunca ha tenido que enfrentarse a una sentencia.
Sin embargo, ahora vemos que el orden natural se volverá a restablecer, de una forma u otra.
Madesi, ¿por qué no pides una cama aquí? No hace falta que duermas en la calle de los Mendigos.
Sal de mi casa. Ya.
Teeba-Ei la cría nunca se imaginó que trabajaría en una mina en este gélido lugar. Soñaba con cosas más grandes.
Fui una hechicera de considerable habilidad antes de convertirme a la fe de Azura. A partir de ahí, su magia creció en mí.
Mi prisión. El origen de la mitad de la plata de Skyrim. La mazmorra más segura de Tamriel.
Esto no tenía que pasar. Creía que querían mi ayuda, ¡no usarme como sujeto de prueba!
Ten la decencia de dejarme con mis penas.
Me consideran un héroe de guerra. No soy un héroe. No soy más que un soldado que no quería morir.
Según la leyenda, la corona está hecha de huesos y dientes de dragones antiguos, y se cree que intensifica el poder de su portador.
Yo me encargo de Cura de la Arpía desde que Bothela se fue.
Conozco a Galmar. Hemos combatido hombro con hombro en varias guerras. No se deja llevar por las emociones ni habla por hablar. Si él cree que la corona está allí... es probable que la encuentre.
Es una cuestión religiosa. Los Thalmor no reconocen a Talos como dios. Fue solo un hombre, y no merece un lugar en nuestro panteón.
Si puedes traerme estos materiales, el Vial podrá recomponerse.
Bueno, no lo sabemos, la verdad. Se le perdió la pista en los tiempos del rey Borgas, cuando murió en la Gran Caza durante las campañas alessias.
Soy el herrero, a tu servicio.
¡No esperaba verte aquí! Supongo que tendrás tus motivos. Todo el mundo los tiene.
Apoyaremos a Elisif. Cuando la asamblea se reúna, hará lo apropiado.
Sabemos de buena tinta que Ulfric ha reunido hombres suficientes para atacar la ciudad de Carrera Blanca. El jarl, no obstante, rechaza la ayuda de la Legión.
¡Ugh! ¡Solo un idiota trata de matar a los muertos!
El muy loco me ha pedido cinco veces que le arregle la rueda del carromato. No acepta un "no" como respuesta. ¿Es que no nos puede dejar en paz?
¡Por Ysmir! Es impresionante.
¡Ungrien! ¡Acabo de encontrar otro barril echado a perder! ¿Qué pasa contigo?
Supongo que... protegeré el fuerte yo solo. Vuelve corriendo al campamento y diles que envíen una guarnición. ¡Rápido!
Eminencia, mis predicciones no sugieren nada en la zona. Puente del Dragón está bajo control imperial. Probablemente sean patrañas supersticiosas.
Gracias, soldado. Echemos un vistazo a los informes...
No puedo creer que solo hayamos sobrevivido nosotros.
¿A qué vienen esas prisas?
Bueno, vale. No cuentes tus secretitos. Ya veo de qué vas.
Supongo que Tulio quiere comprobar que todo está bien atado antes de lanzar una campaña en serio contra la Marca Oriental.
Te doy la bienvenida. ¿Cómo puedo ayudarte en este estupendo día?
¡Significa que tengo un negocio que mantener, que necesito las cuentas al día y que casi nunca estás aquí!
Por favor, ¡no me puedes dejar aquí! Si me dejas salir puedo mostrarte dónde esconden su mejor tesoro.
Ya era hora de que Brynjolf me enviara a alguien con olfato para los negocios. Estaba empezando a pensar que dirigía una especie de gremio de mendigos.
Se dice que los Sangre de Dragón tienen un talento especial para la Voz; la habilidad de concentrar la esencia vital en un Thu'um o grito.
Bueno, sí. Pero no se limita a las barreras físicas.
Ha llegado el momento de enviar un claro mensaje a Ulfric Capa de la Tormenta y a los jarl rebeldes que lo apoyan.
Para que te acepte como uno de los suyos hace falta llegar a un acuerdo con ella.
Indirectamente. El triunvirato se suele elegir entre los miembros del gremio, aunque su existencia es un secreto que se guarda celosamente.
Me vale. Te voy a confiscar todo lo que hayas robado y luego podrás marcharte libremente.
¡Oh, no! ¿Me han encontrado? ¡Necesito tu ayuda!
Eso sería fantástico.
¡Lucha! ¡Lucha!
Solo quería que las cosas... volviesen a ser como antes. Antes de Cicerón, antes de la Madre Noche. Antes... de ti. Creí que podría salvarnos. Me equivocaba.
Me temo que yo no he visto nada...
Hola, cielo. No he estado bebiendo de más, si eso es lo que crees.
¿Ah, sí? Escucha, hermano... Astrid es mi señora, y yo idolatro el suelo que pisa. Pero este asunto de Cicerón la ha vuelto un poco... paranoica.
Otro cadáver para la pila.
Explícame de nuevo por qué desperdicio hombres persiguiendo cuentos de hadas.
Mereces el esfuerzo adicional, chucho.
No te preocupes, nunca me ha detenido un poco de nieve.
Bien... has demostrado tener una iniciativa encomiable. Y no tenías que haberme traído la corona...
Ahora ve al Castillo Severo de Soledad. Muestra el salvoconducto del Gastrónomo al oficial al mando, el comandante Maro. Seguro que te acuerdas de él.
¡No! ¡Espera! ¡No somos rebeldes!
¿Qué pasaría si los Renegados vinieran aquí? No estamos a salvo.
Alguien a quien no le gusta que hagas preguntas.
Cuando visitaba a una de sus amistades en el Palacio Azul, aunque nadie tan mundano como el jarl. No, no... ese tipo de gente no está a su altura.
Deprisa, ¿o prefieres que deje que Carrera Blanca caiga en manos de los Capas de la Tormenta?
Si los trabajadores tenían una disputa, les dábamos una paliza. Si la competencia intentaba comprar miel a Aringoth, robábamos los envíos.
A un buen perro de guerra hay que amaestrarlo desde que es un cachorro. De lo contrario te arrancará el brazo de un mordisco.
¡Los mejores precios y la mejor calidad de Skyrim!
No tengo nada que decirte.
Me alegro de volver a verte.
Todo el mundo tiene sus debilidades, y esta es la mía.
¡Está podrida porque la madera es mala y está empapada de cerveza! Ahora tendremos que cambiar todos los muebles antes de que aniden los bichos.
Va a ser mejor que guardes esa arma.
Exigimos una compensación por la masacre del Peñón de Shor.
Habla con el general Tulio. Él impartirá el juramento.
Vamos, no habrá más paradas, debemos descubrir cómo llegar a Soledad.
Te doy la bienvenida, soldado. Me alegro de que hayas resultado indemne. Enviaré más hombres como guarnición al fuerte enseguida. Lo has hecho muy bien. Me has impresionado.
Te lo he dicho antes y te lo diré otra vez. Déjame en paz.
Se llama espada corta, gandul. Es más ágil y más afilada, como un pez navaja contra una ballena.
Por la barba de Ysmir, menuda insolencia la de esos cerdos imperiales, ¿eh?
¿Podemos hablar, señora?
¡El aserradero!
Cierto, pero si aras el terreno con sales de fuego...
Desearía que esto fuera otra visión, que no fuera real. Pero lo es, ¿verdad? Hemos perdido nuestro hogar.
Ahora que la peste imperial ha envenenado Riften, el culto a Talos está estrictamente prohibido de acuerdo con los términos del Concordato Blanco y Dorado.
¡Te comportas como si estuvieras de juerga en una casa de mala reputación, no en la residencia de la embajadora de Thalmor!
Y tú. ¿Un Capa de la Tormenta? Tenía mejor impresión de vosotros. Viviréis para lamentar este día.
No volveremos a hablar de ello, ¿entiendes?
¿Ahora qué pasa? ¡Tenemos que asistir a una degustación!
¡No quiero oír ni una palabra más sobre lo que te dice ese elfo! ¡Ya va siendo hora de que te comportes como una nórdica!
¡Recuperad extremidades amputadas!
Es decir, alguien que no sea yo, claro.
Yo lo haré.
Vamos a hacer que la paguen.
No, la verdad.
Parece que los han hecho con... Bueno, los antiguos nórdicos usaban ese tipo de hojas curvas cuando embalsamaban a sus muertos.
Lo único raro es la forma de los cortes.
Y no te habría dicho nada de los cortes si los hubiera hecho yo, ¿verdad?
Ahora tengo que volver al cadáver. Debo prepararla para la tumba, y es bastante trabajo.
Esto es lo que tengo.
Veré qué se puede hacer. Gracias por informar.
Ja, ja... aprovecho el poco movimiento que hay. Doy gracias cuando alguien quiere gastarse su dinero aquí.
Repetí el Sacramento Negro una y otra vez. Con el cuerpo y... y esas cosas. ¡Entonces apareciste! ¡Uno de los asesinos de la Hermandad Oscura!
Oh, cielos, sí, adoro las bodas. Aún no he dado con mi media naranja, pero no pierdo la esperanza. Vittoria está, bueno, acumulando años...
Aquí está tu parte. Bien hecho.
Pero nunca supe si el fin de la noche iba a traer la victoria, ya que una flecha de rápido vuelo me llevó a Sovngarde.
Espero que puedas hacer que mi padre cambie de opinión. Puede resultar un tanto testarudo.
No dudes en sentarte y descansar la cabeza en la mesa todo el tiempo que quieras. No te molestaré.
Actúa con naturalidad. Elimina a tus presas como lo estimes oportuno. En silencio, brutalmente, rápido o lento; como mejor te parezca.
Iré contigo para presentarte a Farengar. Puede ser un poco... difícil. Magos, ya sabes.
¡Alto ahí!
Trae de vuelta esa tablilla que quiere Farengar y estaré en deuda contigo.
Ve e incinera a algunos canallas por mí.
Toma, una pequeña muestra de aprecio.
Acabo de entregarte el cuerno de Jurgen Llamador del Viento. ¿Eso me convierte en Sangre de Dragón?
Estoy seguro de que no habrá problemas en Cauce Boscoso. Con toda seguridad, cuando el jarl descubra lo que ha sucedido, enviará soldados.
Veo que aún puedes estar por aquí a tus anchas, traidor.
No temas. Creo que destacar en tus estudios es algo innato en ti. ¡Pero tienes que aprender a concentrarte!
No puedo enviar a nadie más. Y no sabemos dónde está el dragón.
Sí, edecán. Partiremos de inmediato.
Vuestro principal cometido será vigilar y poner a la gente a salvo si atacan el pueblo.
¿Nosotros solos contra un dragón? ¿Así, sin más?
Así que no te preocupes por ello. Markarth es seguro. Tienes mi palabra.
No espero que vosotros tres os enfrentéis al dragón en solitario. Lo que espero es que cumpláis vuestro deber.
Por supuesto. Mantendremos a Cauce Boscoso a salvo. Puedes contar con ello.
En marcha, no hay tiempo que perder.
El maestro Elgrim dice que tengo un talento único para la alquimia. Pero temo que su aprobación oculte su nula tolerancia a mis errores.
No sabía que bebieras, Ataf.
¡Por favor, señor, déjame en paz!
He comido más en las últimas dos horas que en las últimas dos semanas.
Eso podría funcionar, pero no las tienes.
Comprendo. Te comportas como un paranoico. Voy a inspeccionar la seguridad, no estoy marchando a la batalla. No hay muchas cosas que puedan ir mal.
Todo orco aprende el duro trabajo de la minería. Todos se pasan años en las cuevas.
Llámalo como quieras, general, pero seguro que intenta tomar Carrera Blanca.
El jarl Balgruuf...
No a este paso. Volveré a aporrear horkers y a asustar a los que deben dinero.
Por otra parte, también se niega a reconocer las reivindicaciones de Ulfric.
¿Qué está pasando?
Bueno, si llega, quiero comprar.
Tu gente y tus condenados jarl.
No se puede obligar a un nórdico a aceptar ayuda que no ha solicitado.
No puedo perder toda mi investigación. Tiene que haber una forma de salvar el Colegio.
Si aprendes a mantener la compostura y a confiar en que todos tus disparos serán certeros, no te costará acabar con varios objetivos.
Creía que íbamos a llevar a Ulfric de vuelta a Cyrodiil, pero supongo que el general cambió de opinión. Ya sabes el resto.
¿Vas a volver a hacerme daño?
Dile a Shadr que no me debe nada.
Si Vokun es tan poderoso como creo, puede que necesite algo de ayuda para... esto... para ocuparme de él.
Esta provincia empieza a estar fuera de control. Los bandidos se vuelven más descarados cada día que pasa.
No entiendo lo que ve mi hija en ese... bárbaro. No me lo puedo ni imaginar
Tengo dinero y tengo mercancía. Veamos qué podemos hacer.
Dicen que Ulfric Capa de la Tormenta escapó de los imperiales. Ahora la guerra se pondrá peor.
Uno de los prisioneros, si recuerdo bien.
Si hay que darle las gracias a alguien, tendría que ser a ti.
De repente me siento mucho mejor.
Eso... se lo regalé el día de nuestra boda. Divinos, ayudadme... Entonces es cierto, ¿no?
Ojalá pudiera ayudarte, pero llevo preso en esta misma cámara el último cuarto de siglo.
Mientras tanto, ¿por qué no vas a charlar con la legada Rikke?
Pero aún no ha venido a informar, así que no podemos confirmar tu historia.
Soy una artesana. Pinto trazos de sangre roja en el lienzo de la vida. Pero sí, aceptaré dinero por combatir a tu lado.
¿Hadvar está vivo? Espero que así sea. Es uno de los mejores.
Mi misión personal es asegurarme de que el Colegio de Bardos preserva las grandes gestas del pasado, tanto en poemas como en canciones.
No tienes nada que decir. Está bien, pero te vigilo.
Ooh. Eso tiene que doler.
Si tienes más curiosidad, estoy seguro de que podrás encontrar muchos libros al respecto.
Allí encontraremos el Muro de Alduin.
Hoy no. He vendido el último, y estoy bastante seguro de habértelo vendido a ti.
Para proteger mi investigación, por ejemplo. Hay más de un erudito sin escrúpulos que me robaría mis estudios si tuviera la oportunidad.
Madesi, amigo mío. ¿Cómo te han ido las cosas desde el incidente de la semana pasada?
Contigo no seguiremos el proceso normal. He preparado una pequeña prueba. Si la superas, hablaremos de tu ingreso en la Legión.
Pero Nocturnal influye en nuestra suerte, una ayuda casi imperceptible que recibimos cuando hacemos lo que sabemos.
¿Has sobrevivido a Helgen? El general Tulio me contó lo que ocurrió. Pocos salieron de allí con vida...
En su lecho de muerte, mi maestro me pidió que me encargase de su negocio, pero decidí no hacerlo. En su lugar preferí vagar por Tamriel.
¿Te has perdido?
Hemos llegado a un acuerdo de lo más rentable en esta ciudad, y no pensamos dejar que te entrometas.
Usa el grito de Fuerza implacable para atacar a los objetivos cuando aparezcan.
No hay nada como pescar en el lago Honrich. Deberías probarlo alguna vez.
Claro que puede. No me he equivocado en 50 años, y no me voy a equivocar mañana.
Por desgracia, muchas se han deteriorado gravemente, y la mayoría han sido ocupadas por bandidos y vagabundos.
Algunos de los miembros del gremio llevan años intentando localizarlas, pero no han tenido éxito... Bueno, hasta ahora.
¿Y está lleno de vampiros?
Thorald... ¿Thorald Melena Gris? Luchaba para los Capas de la Tormenta; desapareció y fue dado por muerto.
Sí, es una prueba. No te veo en la milicia normal. Quiero ver de lo que eres capaz.
Oh, no creo que yo pueda sentar la cabeza como tú, amigo mío.
¡El jarl de Falkreath lo tomará como una provocación! Asumirá que nos preparamos para unirnos al bando de Ulfric y atacarle.
Creo que casi lo tengo.
Pues de hecho, sí. Tres, para ser exactos.
Caramba, cada viajero que aparece en Carrera Blanca parece más débil que el anterior.
Gracias. No sé lo que está pasando, pero creo que te debo la vida.
¡Venga ya, Bolli! Casi nunca mueves un dedo cuando estás aquí, salvo para señalar a tus empleados lo que tienen que hacer.
Mi señor, deberíamos enviar tropas a Cauce Boscoso en el acto.
¿Deseas entrar ya en la Estrella y expulsar el alma de Malyn Varen?
Que me cuelguen si permito que esta escoria tome mi ciudad sin empuñar mi propia espada.
Madama Endarie ha insistido. Lo ha hecho gratis, en agradecimiento por tu comprensión con las discrepancias sobre el alquiler de los últimos meses.
¿Mmm? ¿Qué? ¿Qué proyecto? ¿Tú crees que puedes ayudarme? A mí no me lo parece.
No dejo de ver cosas moviéndose entre las sombras...
Ah, ¿eso ha dicho? El jarl... ah, claro, debe de referirse a mi investigación de los dragones.
Excelente. No puedo esperar más.
¡Los tenemos acorralados! Es cuestión de tiempo. ¡Seguid luchando!
¡Oh, muchas gracias! Es maravilloso tener cerca a alguien que te comprenda.
No tengo claro qué puede pasar aquí. Mantente en guardia.
Qué nervios.
No bastará con ocultarte en las sombras; te verían enseguida. No, necesitas un escondite. Algún lugar en el que no se les ocurra mirar.
Este lugar tiene gran belleza.
Mmm... Bueno, sin duda eso entorpecerá la bien engrasada maquinaria política de Falkreath.
¿Entonces rindes pleitesía a los Thalmor?
Puedes encontrar al jarl en el gran salón, sentado en su trono de jarl. No lo verás aquí, en el laboratorio de un hechicero.
Todo esto ha sido previsto, y debemos jugar nuestro papel.
Voy a serte franco. No suelo pensarme demasiado las cosas al tomar decisiones. Pero tú... llegarás lejos.
¿Y por qué lo hice? ¿Por dinero? ¿Porque hice un juramento? No, fue porque era un buen hombre y un amigo de verdad.
¡Wabbajack! Wabbajack, Wabbajack, Wabbajack, Wabbajack.
Por supuesto, señor. Son armas de los daedra para sus ejércitos, señor. Material daédrico, pero de mala manufactura, como casi todo lo que nos envían.
Pero yo empecé a buscar información sobre los dragones. ¿Dónde habían estado todos estos años? ¿Y de dónde venían?
Tachar de imposible lo que no tiene cabida dentro de la propia experiencia es una señal inequívoca de estupidez.
Verás, cuando empezaron a circular esas historias sobre dragones, muchos las consideraron simples fantasías o rumores. Cosas imposibles.
¡Esquiva esto!
¡Frutas y verduras de todas clases! ¡Todas deliciosas y baratitas!
¿Te rindes?
Ah, no ha sido nada. Es una chiquilla muy espabilada. Charla por los codos, pero es un primor.
Estás deseando emprender tu aventura. Excelente. Cuanto antes se empieza, antes se acaba, ¿verdad?
Reúnete conmigo si tienes estómago para el trabajo.
Vete. Vete. ¡Vete!
Ah. Tal vez lo que quieres saber es cómo llegar allí. Está cerca de Cauce Boscoso, un villorrio de poca monta situado a unas pocas millas al sur de aquí.
Es una tumba antigua construida por nórdicos, quizá en tiempos de la guerra de los dragones.
Tocas muy bien.
Orgnar, voy a viajar. Encárgate de la posada hasta que vuelva.
La honorabilidad te convierte en un buen hombre, pero no significa que tengas razón. El mundo sería mejor si así fuera.
Ven a verme mañana al mercado. No encontrarás mejores precios en toda la Marca Oriental.
Estas pobres almas... sufriendo una servidumbre eterna.
Bien. Espero que haya aprendido la lección.
¡Vamos! ¡Te desafío!
Gracias por ayudar antes a mi tía. Nos vemos.
¡Has regresado con los guanteletes! Entra. Habla con nuestro jefe ahora mismo.
Estos días no tengo tiempo para otra cosa.
Hace mucho tiempo, durante la era mítica, los dragones eran venerados como dioses en Skyrim.
Pero ya no. La guerra de los dragones ocurrió de verdad, aunque tan solo conocemos detalles superficiales de lo que aconteció.
Este mismo palacio fue construido por uno de los antepasados de Balgruuf para contener a un dragón cautivo. De ahí su nombre, Cuenca del Dragón.
¡Voy a matarte!
Anda con cuidado.
Oh, no. Muchos fueron masacrados, desde luego, pero otros sobrevivieron para pasar a la historia.
Que le preocupa que lo echen de Carrera Blanca.
Farengar, veo que ya conoces a mi nueva amistad.
Si se la queda, esperaré pacientemente. Pero si te la devuelve, significará la guerra.
Sí, mi señora. Le transmitiré las buenas noticias.
¡Balgruuf!
No hay por qué preocuparse. Ya hemos pasado por situaciones más difíciles que esta.
No me gusta el rumbo que lleva esto.
Hemos sentido el susurro de una palabra. Dame tu mapa y te mostraré dónde puedes encontrar su eco.
Ni se te ocurra. Es peligroso, a Falk ni siquiera le caigo bien y Erdi va cada año a limpiar las arañas.
Es nuestra prioridad actual, antes de que sea demasiado tarde. Necesitamos cualquier cosa que podamos usar contra ese dragón... o dragones.
Mi madre no vivió el tiempo suficiente para verme unirme, pero yo lucho para honrarla, a ella y a todas las hermanas de escudo, a través de los tiempos.
¿"Puede estar" en peligro? Echa un vistazo. No creo que haya ninguna duda.
Mmm... Sí, el silencio te queda bien. Te confiere un aire de misterio.
No dejes que mi tío se líe con sus teorías. Te pasarías aquí toda la noche.
Si tienes éxito, te recompensaré. Carrera Blanca estará en deuda contigo.
Y puede que algún día tú te unas a nosotros en esa batalla. Pero por ahora, regresa a Jorrvaskr. Deléitate en tu victoria.
¡No me cruzaré de brazos mientras un dragón quema mi fortaleza y masacra a mi pueblo!
Gracias. Que Mara te bendiga a ti también.
Aún no, aún no. Cuando lleguemos a Cauce Boscoso... con Delphine... entonces os lo contaré, cuando haya puesto en orden mis pensamientos.
Pero parece que no tienes ninguna intención de ser razonable conmigo.
Ya ha sucedido. Alduin dilon. El primogénito ya no existe, aquel que nació antes que todos los demás y que siempre ha existido.
Bien, entonces es que comprendes que se trata de algo más que de la sed de poder de Mercer.
¡Detente! ¡Esto es un duelo singular!
Para ya.
¿Y no tienes ninguna duda de que Helgen fue destruido por un dragón? ¿No sería algún ataque de los Capas de la Tormenta que salió mal?
Ah, hola. Toma asiento, por favor.
¿Una monedita o dos para un veterano? No es tanto pedir...
En cuanto llegue a casa le diré que se ponga a ello. Puedes pasarte a recogerlo en unos... ¿tres días?
También tiene vínculos con la Hermandad Oscura y el gremio de ladrones, así que, básicamente, es intocable.
Yo que tú no estaría tan seguro de eso. Ten cuidado, los Cuchillas dicen servir a los Sangre de Dragón, pero no es cierto. Nunca ha sido así.
Es un vampiro que lleva años infiltrado entre los humanos. Nunca se aleja de su compañera femenina, Hert. También vampira.
Solía darles escaramuzas a los guardias, ahora ellos me las dan a mí.
¿Eso es una amenaza? Retrocede, o por los Ocho que te separo esa arrogante cabeza tuya de los hombros.
No es un secreto que, con el paso de los años, nos han culpado injustamente de muchas cosas.
¿Ah, sí? Ya hablaremos de eso cuando haya terminado de lidiar con este asunto de los dragones.
Más vale entonces que hables con el jarl.
Bueno, yo aún no he tenido suficiente.
¡Por Ysmir, Irileth tenía razón!
Una vez me dijiste que no creías en el destino.
Riften está fuera de la negociación. Al Imperio apenas le queda una posición de ventaja en Skyrim. No tenemos que pagar un precio tan alto por esta tregua.
Saludos, Sangre de Dragón. Ese honor también es mío... ¡Traerás nueva gloria a nuestro derecho compartido de nacimiento!
Bueno, me sorprendes. Esperaba que te pusieras de parte de Ulfric. Puede que salga algo productivo de este consejo, al fin y al cabo.
Creo que no eres de aquí.
Mira, esto es de lo más sencillo. Le presté algo de oro, me prometió que me lo devolvería y ahora dice que está sin blanca. Fin de la historia.
¿Cómo están los ánimos entre los elfos oscuros?
Sabía que ese estúpido chico intentaría encontrar una forma de escaquearse de su deuda.
Este lugar no está en su mejor momento, pero no es culpa mía.
Unmid y Anuriel no deberían culparse por la caída de Riften. Sobre mí recae la máxima responsabilidad.
Has derrotado un gran mal que amenazaba a Skyrim. Has salvado estas tierras... y nuestras almas.
No me importa, un trato es un trato.
Paciencia. El cuerpo necesita tiempo para reponerse.
Sí. La tiré al lago, como me dijiste.
No tienes suficiente oro para saldarla, y no voy a hacer ningún trato.
Puedes decirle a Shadr que se ha saldado su deuda.
Tengo que poner fin a su terrible influencia sobre esta gente antes de que el daño sea permanente.
¿Qué tal tus padres, Grelka? Supongo que les irá mejor que a nosotros.
¡Oyente!
¡Ja, ja! ¿Me tomas el pelo? Tengo todo el gremio de ladrones respaldándome. ¿Qué tienes tú?
Tráeme cualquier cosa que robes directamente a mí.
¡De acuerdo, de acuerdo! Tómatelo con calma. No sé por qué te preocupas tanto por un extraño, pero no merece la pena pelearse.
Llevo en Arnleif e Hijos toda la vida. Es una buena tienda.
Bueno, me había olvidado de que teníamos los caballos atados justo a las afueras de Ventalia... Vex había vuelto cabalgando en el suyo y había llegado horas antes que yo.
Puedes ir y venir todo lo que quieras, pero él tiene que pagar.
Yo prefiero trabajar con frío que con calor. Aunque no estaría mal un poco de sol.
No te metas; este asunto es solo mío. No hay espacio para nadie más del gremio en esto.
Normal que tengan esa plaga alrededor. Miseria repugnante.
Si hubiéramos sabido que los nórdicos iban a ser tan poco hospitalarios, hubiéramos pasado de largo.
Hert sigue lanzándome esas miradas... No sé si es que me desea o es que me quiere comer.
Te diré lo que haremos. Te daré una parte ahora mismo si te olvidas de todo el asunto.
Bashnag me ha echado una maldición y no puedo lanzar hechizos, así que tendré que esperar hasta que el camino de salida esté despejado.
Me pregunto qué grandes batallas se habrán librado aquí...
El jarl se... cansa. Tenlo en cuenta.
¡Skyrim no volverá a postrarse ante tu falso Imperio!
Consideras que la de la restauración es una escuela de magia válida y digna de estudio, ¿verdad? ¿¡Verdad!?
Aunque puede que el humilde hechicero de nuestro jarl también esté dispuesto a ayudarte.
Se cree que es un bardo. Como paga, le dejo quedarse.
Mi padre es la única familia que he tenido. Me sentí muy perdida cuando murió. Pero ahora mi familia es la tripulación del Ola Roja.
Sí, pensé que así irían las cosas. Aquí tienes.
Te garantizo que no notarás nada de nada. Casi ninguna de estas pruebas causará dolor a un dragón tan grande como tú.
No se ven a muchos viajeros por estos caminos.
Una primavera asaltamos una caravana... Eran unos cuantos carromatos con unos granjeros que se trasladaban a otro pueblo.
O puedes esperar aquí. Volverá pronto.
No he visto a Savos desde la explosión. Creo que ha salido volando por los aires, y puede que esté herido.
Intenta no tener favoritos, lady Ateia. No hace ningún bien al conjunto de la clase.
Solo quiero irme a casa y leer.
¿Hum? ¿Qué quieres?
No, aún no. Después de todo, un dragón... es una criatura propia de viejos cuentos y leyendas... Nadie podría haberlo esperado.
Mira, ya he dicho que Shadr no me debe nada, así que déjame en paz.
Todo eso ocurrió en la Primera Era, por lo que el pozo ya no debe de tener veneno. Dice que la llave del pozo es posible que esté en algún lugar de la cripta.
¡Noooo!
Por desgracia, ya no estaba. La mandaron a otro orfanato, la adoptaron o quizá... Aah... No sabía qué más hacer, así que regresé esperando que nadie hubiera notado mi marcha.
Entonces los Renegados volverán a donde pertenecen. A las minas, a proporcionarnos riqueza.
Vamos a ver si esto funciona...
Sí, sí. Mi bastón, quédatelo. Mátate algo bonito con él.
¿Has dicho "elfo" y "estrellas"? Espero que no sepas lo que estás preguntando.
¡Tu sangre tiene un bonito tono rojo!
Ahora prueba tú, Aia.
Pero ya no hago esas cosas. Mi padre siempre me pilla y entonces me meto en líos.
Pero al mismo tiempo, no me atrevo a rechazar una invitación de Elenwen.
Procura no tener ideas brillantes ahora mismo.
La gente se olvida casi siempre de que estoy aquí. Por eso oigo tantos rumores jugosos.
¿Quieres irte? Vale. Pero no habrá justicia para esa pobre mujer, ni nadie a quien le importe lo que le ha pasado.
A mi madre siempre le encantó el mar. Cuando yo era pequeña, visitábamos Soledad y veíamos los barcos desde el risco. Ah... Eran tiempos mejores.
Los visitantes que llegan a la ciudad suelen quedarse en la posada de Sangre Argéntea.
Nunca he entendido la costumbre local de dejar la basura tirada donde a uno le conviene...
Era uno de los que trabajaba en el horno de fundición. Yo solía trabajar allí también, haciendo lingotes de plata.
Si te entregan algo en bandeja de plata, es que algo no va bien... Mejor roba la bandeja. ¿Entendido?
Pero de alguna forma siguen aquí, y están matando gente.
¿De qué me sirve una maga de la corte si se niega a luchar? ¿Dónde está tu sentido del deber?
Tengo que darle aceite a mi madre pronto... Llegar a todos los recovecos...
Son lo que queda de los viejos dirigentes de Markarth. Nativos de la Cuenca y seguidores de las viejas costumbres.
Las últimas páginas parecen describir "el fracaso de los Ruiseñores", aunque no entra en demasiados detalles.
Juré que iba a dejarlo, por el bien de mi hijo, pero es como si el fantasma de mi padre se me apareciera y me preguntase "¿Por qué?".
Si habéis terminado de reñir como mujerzuelas, aún queda mucho por hacer.
Tengo buena vista.
Lo asesinaron. Los guardias dijeron que había sido un loco, pero todos sabían que el asesino era un miembro de los Renegados.
Bueno, incluso aunque estés intentando arruinar mi trabajo, aquí sigue habiendo una lección que aprender.
Oh, Klimmek...
Bueno, entonces puede irse a casa a comer y beber, ¿no?
Bien, nos aseguraremos de que esté descargado por la mañana. Puedes confiar en nosotros.
Por favor, no quiero hablar del tema. Toda esa sangre...
Trabajas duro, Daighre. Me alegro de que te hayas quedado con nosotros.
Seguro que cualquier cosa que necesite me será revelada, a su debido tiempo.
Creo que necesito entrenar algo más.
¡Maestro! ¡Me has vuelto a acoger! ¿Significa esto que nos vamos a casa? ¡Oh, qué maravilla! No puedo esperar a...
¿Quién? ¿Te refieres a la mujer que fue atacada en el mercado?
Tenía una habitación aquí. Podrías hablar con el posadero sobre eso.
Mira, yo en tu lugar iría con mucho cuidado. Buscarte problemas con Maven es una de las peores cosas que puedes hacer por aquí abajo.
No busco hacer amigos.
Dime qué te aflige, Bryling. Aquí estás entre amigos.
Lucano encontró la garra cerca de un año después de abrir la tienda. Nunca ha contado de dónde la sacó. Es muy taimado.
Ah, sí. Alquiló un mes entero nuestra mejor habitación.
Antes de que los hombres habitaran la tierra, se los llamaba los elfos de las nieves. Vivían bajo la luz del día y tenían una sociedad muy próspera.
Lok...
Tengo que hacer algunos preparativos. Me reuniré contigo en la piedra.
Bien. No me falles.
Supongo que no tiene sentido guardar el secreto si voy a morir aquí dentro de todas formas.
Mmm. No creo que tengas suficiente como para cubrir mis gastos con los Sangre Argéntea, mucho menos para convencerme de que te regale mis palabras.
Por otra parte, quiero tomar ese fuerte. Disponer de una posición fortificada nos facilitará la acumulación de hombres para lanzar un ataque final sobre la capital.
Tienes razón. Fíjate, hablo dando rodeos como una pobre anciana. Muy bien. Mi hacha estará a tu servicio cuando la necesites.
Bueno, pareces una persona sincera. Aquí tienes.
Intentaré aferrarme a tus esperanzadoras intenciones. Rápido, antes de que esta niebla que nos rodea me atrape una vez más en la red del Devorador de Mundos.
¿Así que esas tenemos? Te voy a enseñar cómo trata la Legión a la escoria rebelde como tú.
Lo siento. Puede que Margret haya muerto, pero esa habitación ya está alquilada.
¡Eso es que no conocías a Roggvir, y no tienes ni idea de lo que significa ser un nórdico de Skyrim!
¿Lo dices en serio? Yo sé amenazar mejor a mi marido.
¿Por qué no coges tu dinero y te vas por ahí?
Hum. Sí. Sí, claro que puedo. No es algo que haga a la ligera, ¿eh? Y no es tan detallado como te gustaría, pero sí, puedo hacerlo.
De acuerdo. No quiero problemas. Tómala.
¿Necesitabas algo más?
Mi deber es mantener a salvo al jarl por más riesgos que corra.
Ah, estupendo. Estoy seguro de que te escuchará.
Sí. ¿Y qué?
Sigo buscando a alguien que entregue mi mensaje a Sibbi Espino Negro...
Gracias por preguntar.
Es aquí, lo sé. Al otro lado de esa puerta. ¿Lo notas?
Así sea. Seguro que Arkay encontrará la clemencia necesaria en su corazón para perdonarte... con el tiempo.
Lo he preguntado porque esperaba que me ayudaras a recuperar algo que he perdido.
Fueron los Renegados de la torre destruida. Nunca antes habían dado problemas. ¿Y a ti por qué te importa?
¿Ha... ha dicho eso? ¿Te ha dicho esas palabras... a ti? ¿"La oscuridad se alza cuando muere el silencio"?
Recuerda, esto no es territorio de los Capas de la Tormenta. Si nos anticipamos a las noticias de Helgen estaremos bien, siempre y cuando no cometamos ninguna estupidez.
También mantenemos una vigilancia constante contra aquellos que practican las viles artes de la nicromancia.
Los sacerdotes de Arkay, como yo mismo, realizamos ritos para los muertos, y a veces para consolar a los afligidos.
Bueno, como he dicho, Arkay es el dios de la vida y la muerte. Encontrarás templos y Salones de los Muertos en su honor por todo Tamriel.
Lleva el martillo del gigante a Atub y cuéntale lo que ha ocurrido aquí.
Mis viejos huesos ya no me duelen tanto.
Ulfric no está al cargo de una agrupación social, aquí nadie se une a nada. O eres una auténtica hija de Skyrim, o no lo eres.
Habla. Te escucharé.
Ulfric no está al cargo de una agrupación social, aquí nadie se une a nada. O eres un auténtico hijo de Skyrim, o no lo eres.
¿Crees que tienes el temple necesario?
Y atravesaremos la Legión para llegar a ellos.
Espero que uno suba aquí corriendo para poder apuñalarle en toda la cara.
Mira a ver si puedes abrir esa puerta.
Los padres nunca deberían sobrevivir a sus hijos. Tener aquí al espíritu de mi hija... es como si no hubiese muerto.
Me quitas un peso de encima. Aquí tienes tu paga.
Skyrim es la cuna de la humanidad. La cuna del honor. Y esos espaldas nevadas imperiales renunciaron a ambas cosas cuando se postraron ante los Thalmor.
Quiero pagarte, pero tuve que encubrir el asesinato. No esperaba que hicieras una matanza.
Por desgracia, el Imperio se ha quedado corto de recursos últimamente, y hemos recibido pocos refuerzos. Por eso hemos tenido que reclutar a nivel local.
¿Te refieres a eso que llaman la "rebelión de los Capas de la Tormenta" de Ulfric?
Mañana temprano estaré en el mercado. Y será mejor que tú también lo estés.
Bien. Al ver la invocación, se ha creado una conexión que te une a Potema, así que tú eres la persona indicada.
Somos los auténticos hijos e hijas de Skyrim, y Ulfric... el más auténtico de todos.
Por supuesto, jarl Balgruuf. Me has encontrado a alguien prometedor.
Ahh... ¿Te rodea el enigma y el misterio, eh?
Pero tienes razón. La victoria está a nuestro alcance. Podemos permitirnos dar al Imperio una última oportunidad para rendirse.
Pero mírate. Cuánta pasión en el estudio de la restauración.
Si lo eres, ponte en marcha hacia Ventalia y ve a hablar con él. Si no lo eres, en fin, camarada, mejor que te largues de aquí antes de que la cosa se ponga fea.
¿Qué? ¿Lo has dejado ir solo? ¿Con los Thalmor tras él? ¡Ve a asegurarte de que está bien y tráelo aquí!
Bueno, y ahora, supongo que sabes lo de...
Déjanos dormir a tu lado, dulce Arkay. Que ningún daño caiga sobre nosotros.
¿Estuviste en Helgen? ¿Viste al dragón con tus propios ojos?
Lo siento, no tengo tiempo para hablar. He de seguir tocando.
La Legión siempre busca reclutar a guerreros fuertes y capaces. Si crees que estás a la altura, nuestro cuartel general está en Soledad.
Hace mucho tiempo, en la época del rey Harald o incluso antes, el rey supremo portaba siempre la Corona dentada. Era el símbolo de su poder y su supremacía.
Algo tiene que cambiar pronto o acabaré cerrando este sitio y dejándoselo a los skeevers.
Cuidado, no te caigas al salir.
Mi familia estaba convencida de que venir aquí era una sentencia de muerte o algo aún peor. Tuve que insistir durante muchos años para que vieran que esta era mi vocación.
Me da igual qué estés haciendo. Después de lo que ha pasado, tienes suerte de que no dejemos que te pudras en el calabozo. Piérdete.
El Palacio de los reyes en el que te encuentras es uno de los últimos edificios que aún se conservan de aquella época.
Ahora no, Braith.
Ventalia es una de las ciudades humanas más antiguas de todo Tamriel. De hecho, fue la capital del primer Imperio, fundado por Ysgramor.
¡Pero les he oído decir a los Pie Nevado que planean quemar hasta los cimientos!
Bueno, se me ocurren varios motivos.
No sé ni cómo agradecerte todo lo que me has ayudado.
Esperemos que eso no suceda.
Se supone que te puedo cambiar una de las partes de tu armadura del gremio, así que, ¿cuál quieres?
Rogado y yo llevamos casados más de cincuenta años. Siempre ha sido un poco gruñón.
Que Talos te guíe, muchacho.
¿Eh? ¿Has dicho algo?
Espera. General, ¿no pretenderás entregar sin más Markarth a ese... traidor?
Te ha tocado un viajecito a la mina de Cidhna.
El jarl de Carrera Blanca se ha puesto en contacto con nosotros.
Mírame cuando te hablo, ¿vale?
Tu paga, camarada. Así se hace.
¡Eh, carcelero! Lo que no entiendo es por qué te pones del lado de los imperiales.
Excelente. Gracias, me aseguraré de que se le dé un buen uso.
Nuestra lucha es la lucha del pueblo.
Pues mala suerte para ti. Vuelve cuando recuperes al menos una de las partes.
Se huele sangre en el viento. Nos espera una buena caza.
Tenía fe en que te ofrecerías. No creía que alguien como yo pudiese pedirte semejante favor. Gracias.
¡De prisa! ¡Háblale al salón de Shor de nuestro duro destino antes de que Alduin devore tu vida!
Llévate esto. No sé con certeza si te ayudará dentro del sepulcro, pero seguro que lo vas a lo necesitar mucho más que yo.
¡Ya verás! ¡Era un dragón! ¡Nos matará y entonces me creerás!
Y ahora que hemos terminado nuestra transacción, me voy.
No. Creo que serás más útil libre, vagando por el mundo, donde te lleve tu voluntad. Eres una auténtica hija de Skyrim. Ya sabes lo que hay que hacer.
Tiene resultados muy curiosos. Algunas víctimas huyen, otras se encogen de miedo.
El jarro fue una vez una ciudad bajo otra ciudad. Teníamos nuestro propio herrero, nuestro propio alquimista... De todo.
En esta época, la guerra aleja a casi todo el mundo de aquí.
No tengo ni idea de qué ha ocurrido. Creo que ha sido Ancano.
Eso no quiere decir que apoye todo lo que ha hecho últimamente, pero los nórdicos nunca han sido amigos en la prosperidad.
Charlaremos tras la ceremonia.
Riften, ¿eh? Seguro que en la Ratonera. Es adonde yo iría.
Soy la dueña del aserradero y pago un salario justo. Ve a ver a mi marido Hod si buscas trabajo.
Ulfric asesinó a Torryg. Entró en su palacio de Soledad y lo mató. Si uno se cree las historias, acabó con él a gritos.
Ah, he olvidado que has llegado hace poco a Skyrim. Debería decir la jarl Elisif, aunque solo porque estaba casada con el jarl Toryg cuando a este lo asesinaron.
Bueno, supongo que hay que volver a las Islas Temblorosas. Los líos en los que se puede meter Haskill mientras no estoy allí le dejan a uno sencillamente pasmado...
Debes de haberte perdido. La taberna está camino abajo.
Era tan grande como una montaña, y negro como la noche. Se fue volando por el túmulo.
Malditos hechiceros y su maldita magia...
Solo aconsejo cautela. No podemos cometer ninguna imprudencia en un momento como este.
¿Qué significa esta interrupción? El jarl Balgruuf no recibe visitas.
Como edecán, mi trabajo es ocuparme de los peligros que amenazan al jarl o a su pueblo. Así que tienes mi atención. Explícate.
Hay oportunidades por todas partes. ¿Por qué no vas a encontrarlas?
Supongo que tendremos dos bocas más que alimentar durante un tiempo.
En momentos así, es cuando realmente agradezco el placer de un cálido fuego y un buen licor.
Lo que tengas que decirle al jarl, me lo puedes decir a mí.
Solo queda devolver la Llave maestra y ponerla a buen recaudo.
Bien, el lugar está infestado de bandidos. Hace unas horas hemos perdido a buenos hombres intentando tomar el lugar.
Acuérdate de mí si le echas el guante a algo más.
Quizá. O quizá no.
Con esa actitud nunca estarás al mando de esta familia, amado esposo.
Entonces llevas el norte en el corazón, al igual que Roggvir. A muchos les cuesta entenderlo.
Es igual, Irileth. Quiero oír lo que tiene que decir.
¿La Voz? ¿Aquí?
Debemos comunicárselo a los demás.
Tener una esposa orca sería interesante, sí. Son fuertes y corpulentas. Qué pena que no dejen pasar a la gente más allá de las murallas.
Parece que Dorthe es una cabeza más alta cada año que pasa.
Ya he tenido bastantes problemas últimamente. ¿Qué es lo que pretendes?
¡Muere, maldito!
Estupendo, de vuelta a la lucha.
Trabajo el acero, para armas sobre todo.
No tengo tiempo para hablar, no lo tengo. Hay que atender a nuestra señora. Guardarla.
Si contar una historia para librarte de un problema no es suficiente, también puedes pedir a Delvin, Vex o Vipir que te entrenen.
El archimago Aren me asegura que su gente no tuvo nada que ver con aquello, y yo le creo. Pero Hibernalia nunca se recuperó.
Sigue tu camino.
Y aparte de servidora, Delvin, Niruin y Vipir pueden ayudarte con cualquier tipo de formación que necesites para perfeccionar tus habilidades.
Si alguna vez necesitas dinero rápido a cambio de objetos que encuentres mientras trabajas, ve a ver a Tonilia.
También te sugiero que pases un tiempo en la sala de instrucción. Habla con Vipir. Él te lo enseñará todo.
¿Qué nos ha pasado? Antes éramos inseparables... siempre luchábamos codo con codo y nada se interponía en nuestro camino.
Hoy día seguimos nuestras propias leyes. Somos el último santuario de todo Tamriel, y si hemos sobrevivido todo este tiempo ha sido renunciando a los métodos antiguos.
Si quieres conseguir un dinero por el fruto de tu trabajo, deberías hablar con Tonilia. Parece dura, pero te ofrecerá un trato justo.
Escaldo, si no te importa, señor, tengo que pedirte algo.
¿Dónde más iba a querer estar? Aprendo de ellos y combato a su lado.
¡Me has traicionado, has asesinado a mi hermana y masacrado a mis hombres!
No hemos tomado partido porque no es nuestra lucha.
Bueno, entonces me limitaré a ir un poco por detrás de ti, y seguirte sin armar ruido.
Ten siempre tu escudo a punto.
Lo siento no basta, Orto. Hay mucho oro en juego, y lloriquear no va a hacer que lo recuperemos.
Los Renegados han causado problemas a la Cuenca demasiado tiempo. Mi intención es poner fin a eso.
¡Ah! ¿Quién ha hecho esto?
También tengo unas cuantas cosas útiles para nuestro oficio, por una pequeña suma.
Yo soy la perista aquí abajo. Por cualquier cosa que consigas que no sea exactamente tuya, te pagaré. Menos una pequeña tajada para el gremio, claro.
Claro, ¿qué tal si le digo a Canto Fúnebre que te deje inconsciente y te tire a la cisterna?
Tengo mucho que hacer, como siempre.
Aquí tienes tu armadura, asegúrate de darle un buen uso.
¿Estás mal de la cabeza? ¿En qué pensabas? ¡No puedes ir por ahí haciendo las cosas como te da la gana!
¡Esa cosa es malvada, Lynly! ¡Te dije que te alejaras de allí!
Fue en un trabajo, hace unos años... se suponía que iba a ser un simple robo en una casa en Ventalia.
¿Lo has perdido? Bueno, al menos has demostrado iniciativa al decírmelo.
Dicen que Adonato Leotelli está por Ventalia. He leído algunas de sus obras. Me encantaría conocerlo algún día.
Mirad aquí. En el tercer panel.
La flechería me conviene. Es difícil y a veces tediosa, pero una flecha bien hecha ataca como la furia de un dios.
¿Estás ciego, chico? Me dedico a la herrería. Hasta un imbécil puede verlo.
¡Bien! Tengo algunas cuentas pendientes.
Puedes decirle a Cicerón que ahora mismo voy. Solo necesito hacer un par de cosas antes, y recoger mis aperos.
O a lo mejor tú deberías volver reptando al pantano del que provengas, lagarto.
¿Eh?
Desea hablarte ella misma. Por favor, coloca las manos en el altar, y oirás su voz.
Si te fijas: Paar-thur-nax; un Thu'um, un grito. ¿Sí?
Ah, se me olvida lo poco que sabes acerca de los dov. Nuestros nombres siempre se componen de tres rotmulaag: las palabras de poder.
Déjame en paz, Braith...
Anoche vi a Lod el herrero escribiendo una carta. Seguramente estuviese informando a Soledad y al general Tulio.
Laila, Riften es mi hogar, pero si mi fábrica de aguamiel no está a salvo aquí, la trasladaré a otra parte.
Pero Odahviing, es... ¿testarudo? Boziik. Imprudente. Incluso entre los propios dov era conocido por serlo.
El trabajo en la granja es muy duro. Me gusta relajarme cuando puedo, pero todavía tengo que escuchar a mis hermanos quejarse de las "injusticias".
No está obligado a venir, pero los dov son orgullosos por naturaleza. Pocos podrían resistirse a semejante desafío. Especialmente viniendo de ti, Dovahkiin.
Los Compañeros son el ejército de guerreros más antiguo y honorable de Skyrim. Carrera Blanca se construyó en torno a su salón, Jorrvaskr.
¡Cerveza argoniana! ¡Casi puedo saborearla!
Este es el día más largo que puedo recordar.
Déjame.
¡Casi lo tenemos!
Si podemos descubrir qué es ese grito de Desgarro de dragones, tendrás una oportunidad.
¡Eso es!
Tienes permiso para curiosear por el despacho de Sabjorn. Guarda casi todos sus documentos en su escritorio.
También podrías coger unos dulces. Al fin y al cabo, los hice para el festival.
¡Permaneced firmes!
¿Qué es lo que quieres, lagarto?
Yo triunfaré donde Alduin fracasó.
Kynareth nos da una lección de humildad con su belleza.
¡Es el antiguo poder! ¡La Voz del Sangre de Dragón!
¿Qué quieres saber de mí?
Yo he cumplido con mi parte. Puente del Dragón contará con más guardias. Falk Barba de Fuego encontrará alguna forma de ocuparse de la cueva.
¿Qué es lo que has dicho, mi viperina esposa?
¡Faaz! ¡Nah!
¡Dovahkiin! ¡Aquí estoy!
¡Maldito dragón!
Recuerda, no te fíes de los del Imperio. Da igual cuántas mentiras melosas te cuenten.
Nuestra antigua deuda por el indulto de Alduin ha quedado saldada. ¡La larga noche ha finalizado!
Llevaré algunos de estos artefactos dwemer al Colegio Arcano de Cyrodiil para estudiarlos.
Buenos días.
Creo que esperaré a que sirvan vino especiado en el Festival de la Quema del Rey Olaf.
¡Han abatido al jarl!
¡Edecán! ¡No!
Pensábamos que sería tan sencillo...
Atmah lloraba en silencio. Hafnar no podía ni mirarnos a ninguno. Y yo no dejaba de decirles que todo iba a ir bien.
¿Qué significa eso?
Hemos visto a través de tus maquinaciones, cobarde.
¿Qué quieres que haga, mujer? ¿Enfrentarme al gremio? ¿Liquidarlos uno a uno?
Tenemos a un advenedizo que cree que puede trabajar por su cuenta en nuestro territorio. ¿Qué tal si le enseñas modales?
Quedas arrestado por el asesinato de Susanna, del salón El calor de la vela. Y de Friga Escudo Quebrado. Y del resto.
Vale. Hasta la próxima vez.
¿Es que la ciudad entera se ha vuelto loca?
Drem Yol Lok. Saludos, wunduniik. Soy Paarthurnax.
Fuera de mi vista.
Puedo sentir tus risas a mis espaldas.
Los viajeros solitarios pueden encontrar estos bosques un poco traicioneros.
Estoy orgulloso de mi granja. Cuesta mucho cultivar la tierra en esta parte de Skyrim.
¡Sí, señor!
Lo siento, pero tendrás que venirte conmigo.
Este es el Colegio de Hibernalia, un refugio para los magos de Skyrim. Un lugar de sabiduría y de conocimiento arcano.
Saludos, caminante.
Administrador, ¿cuándo tengo la reunión con el general Tulio? Debemos hablar de varios asuntos.
¡Esto no quedará así, Jorleif!
Venga, adentro.
Dorthe no se comerá eso. ¿Es que quieres matar de hambre a la chiquilla?
Has traído la deshonra sobre nuestra causa y sobre ti misma. Ya no eres digna de llamarte hija de Skyrim.
El pueblo de Morthal prefiere urdir horribles historias sobre mí y mi forma de vivir que sencillamente preguntarme la verdad.
Sí que lo es. Bueno, tampoco le hará daño comerlo de vez en cuando.
No me lo tengas en cuenta.
¿Podrá el aserradero con esos troncos? Son muy grandes.
Sí que podrá. Aunque tampoco los querría más grandes.
¿Y la sierra?
Se está mellando. Pronto tendremos que cambiarla.
¡Son los rebeldes! ¡Defended la entrada!
¿Te apetece tomar algo, Hod?
¿Me va a tocar pagarlo a mí?
Es lo justo: tú eres el empresario maderero.
Diablos, chico, sé lo que me hago. Me ayudará a determinar la estación en que lo enterraron, y eso lo puedo contrastar.
Pues sí, y si te interesa te lo regalaré. Si el libro te gusta, puedes volver luego y tendré otras cosas.
J'zargo puede aprender magia de estos hombres y elfos, pero ellos no pueden aprender a ser tan apuestos como él. J'zargo es superior.
Libérame...
Hsss...
Igual que las demás. Parece que fue apuñalada y después descuartizada.
No deshonres ni causes daño alguno a Elisif. Acata esa norma y no tendrás problemas.
Ahhh.
Me aseguraré de que tengo todo preparado. Qué emocionante, ¿no crees?
Avísame si cambias de parecer.
Entonces eres idiota, y morirás por ello.
Pero tú, tú puedes llamarme Ann Marie.
Adelante. Haz lo que debes.
He intentado hacer desaparecer a ese entrometido varias veces, pero está compinchado con la guardia de la ciudad. Cada vez que asaltamos el almacén, se nos escapa.
No creyeron que el cambio fuera permanente. Las brujas ofrecieron un pago, como todos los demás.
Tal vez no sea el capítulo más glorioso de la historia de Skyrim, ¿eh?
Así siempre estaba preparada para la siguiente víctima, lo que era inevitable.
Necesito que todo vaya bien. Es mi primer servicio como oficial desde que me ascendieron tras lo de Carrera Blanca.
Poco más, me temo. La llamaban Colmillo de Kahvozein, en honor al dragón al que rendía culto esta secta en particular.
¡Apártate de mí!
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